DIGIMON 2023
La tercera generación
Por: Ariadna
-…el destino del Digimundo y la Tierra está en sus manos… en las manos de los niños… los niños elegidos…
La segunda generación, los conocidos por nosotros como los niños elegidos, tenían una vida bastante normal luego de su última aventura en el Digimundo, hasta que en un día de reunión los Digivices volvieron a aparecer, en manos de sus hijos…
Cap 1: una MUY larga historia.
-necesito apoyarme en alguna parte… - murmuró Joe buscando asiento.
Sora hizo lo mismo, mientras Tai la miraba con algo de preocupación.
-¿de qué hablas, papá? – Sae miraba a Izzy con extrañeza luego de lo que él había dicho.
Los adultos cruzaron miradas preocupadas ante la curiosidad de los niños, hasta que la recién llegada, Jun Motomiya, volvió a hablar.
-¿¿y es que nadie sabe que está pasando aquí?? ¿Por qué son los niños los que tienen nuestros Digivices?
-no, Jun, ninguno de nosotros sabe que ocurre. – le respondió Matt, acercándosele. - será mejor que nos pongamos cómodos y ordenemos nuestras ideas. – propuso, y luego agregó. - esto me da mala espina.
-estamos igual… – murmuró la mujer.
Costó un poco, pero agregando más sillas en la sala todos lograron sentarse. Los niños aún estaban sorprendidos por lo que les había pasado y el comportamiento de sus padres, pero no dijeron nada y se instalaron en el suelo para escuchar lo que tenían que decirles.
Hubo un momento de silencio, hasta que Sora le pidió unas pastillas de su bolso a su marido y este encontró…
-¡otro Digivice! – exclamó Tai. - ¿por qué no me dijiste que tenías uno aquí, Sora?
-pero… ¡si yo no tenía ningún Digivice! Debe haber aparecido como los demás, de repente, ¿no? – la mujer miró de reojo hacía Izzy y Ken, buscando alguna afirmación.
-seguramente. – respondieron ambos al unísono.
-¿todo esto quiere decir que el Digimundo está en peligro de nuevo? – Yolei hizo la pregunta del millón.
-y al parecer no somos nosotros los llamados a salvarlo… - agregó Cody, mirando a los niños.
Tai se levanta algo furioso.
-¡pero no es justo! ¡Sellamos la entrada años atrás precisamente para que nuestros hijos no tuviesen que pasar por esto!
-tal vez el que estemos todos juntos ahora haya producido algún cortocircuito o algo… - supuso Mimi, y todos quedaron mirándola como si fuese un extraterrestre. - ¿qué? Podría ser eso, ¿no? – agregó, a la defensiva.
-Mimi tiene razón, - apoyó Joe. – los Digivices aparecieron al momento en que Jun entró a la casa, cuando estuvimos todos juntos.
-esa es una buena teoría, pero no es cierto que estamos todos. – contra puso Izzy, mirando a sus hijos, en especifico a Alex. – Wallace y Michael no están acá.
-además, - Kari habló. – tenemos doce Digivices y aquí somos trece adultos y once niños, o sobra o falta uno…
-los Digivices no los recibimos nosotros. – acotó TK. – por lo que quiere decir que sobra un Digivices para los once niños.
-bueno… - Sora miró algo ruborizada hacía Tai, y éste se ruborizó también. – creo que tal vez eso tenga respuesta, y es que… estoy embarazada.
-¡¿en serio?! – Mimi se puso de pie inmediatamente y abrazó a su amiga. - ¡felicidades!
Más abrazos y palmadas en la espalda para el nuevo padre vinieron también, pero la alegría paró recordando los hechos.
-doce Digivices para doce niños… - murmuraba Izzy, sacando cálculos. – Wallace no tiene hijos, por lo que eso debe ser. Toda la tercera generación se juntó por primera vez en un solo lugar, eso debe haber causado el desfase.
-¿lo que quiere decir que el Digimundo no está en peligro y sólo fue una coincidencia? – interrogó Davis.
-no lo sé. – el antiguo portador del Conocimiento se encogió de hombros.
-er… disculpen… - interrumpió Naota, lo más educadamente posible. - ¿nos podrían explicar un poco de qué están hablando?
-es una MUY larga historia… - suspiró Joe.
-¿les contamos todo desde el comienzo, o nos saltamos a lo importante? – cuestionó Matt.
-bueno, ellos ya saben lo básico…
Todas las miradas se clavaron el Takeru, preguntando a que se refería.
-TK tiene razón. – dijo Sora. - Desde hace 8 años que se enseña en la clase de Historia lo que pasó en Odaiba en 1999 y para el 2002. – esto sorprendió más a los presentes. – no es que se diga mucho, pero al menos se mencionan a los Digimons, aunque no digan nada de nosotros o el Digimundo…
TK aprovechó y se giró hacía los niños.
-¿a ustedes ya les hablaron de los extraños monstruos de Odaiba a finales del siglo pasado? – preguntó suavemente.
-si, de hecho, nos pasaron esa materia esta semana, - explicó Kotomi. - ¿y eso que tiene que ver, tío Takeru?
TK tomó un largo respiro y comenzó a explicar todo, absolutamente TODO sobre su historia, desde el primer portal que formó Gennai 40 años antes de su primera aventura hasta la lucha por la que tuvieron que pasar sus abuelos, la primera generación, y luego ellos, para tres ocasiones distintas, hasta cerrar definitivamente la entrada al otro mundo, o al menos eso creyeron hasta ahora…
Mientras, los demás adultos escuchaban con paciencia, e incluso, algo de nostalgia… hasta que Tai recordó algo:
-Izzy, aún tienes tu vieja computadora, ¿verdad?
-no.
-¿¿cómo qué no??
-no, se la regalé a Wallace cuando volví a Japón.
-¡¿qué?! ¿Estás loco acaso? Wallace, ¡él solo podría haber causado que se abriera de nuevo la puerta al Digimundo!
-no exageres Tai, es cierto que Wallace causó problemas con sus intentos con las computadoras y los Digimons pero aprendió la lección tiempo atrás.
-de todas maneras, - interrumpió Matt. – necesitamos esa computadora Izz, esa cosa contiene toda la información del Digimundo.
-lo sé… Joe, ¿me prestas el teléfono? Será una llamada de larga distancia…
-no hay problema con eso, aunque creo que está averiado…
-¡entonces déjaselo a la experta! – exclamó Yolei poniéndose de pie y dirigiéndose hacía la maquina telefónica, y segundos después… - todo listo, solo tenía cruzados ciertos cables…
-¿teléfono con pantalla? – comentó Izzy, mirando la tecnología tan avanzada.
-funciona para fonos normales también si te molesta…
-no, así está bien. – comenzó a marcar.
-¿tienen computador acá? – interrogó Ken mientras.
-los niños tienen uno en su pieza. – dijo Mimi. – pero creo que tengo mi portátil acá… ¡si, acá está! – sacó una especia de maletín de un cajón grande y lo abrió, revelando una maquina casi completamente rosada.
TK iba en la mitad de su explicación cuando se escuchó respuesta desde la otra línea del teléfono, y la imagen de un guapo (^_^) adulto de poco más de 30 años, rubio y de ojos claros, se vio.
what it is now?! Eleen, if it is you again… huh?
-there are fine, I think… Wallace, can we speak in Japanese for Tai and the oders so they can undearstend us?
Tai and the oders?
Sus amigos no lo saludaron tan entusiastas como esperaba, porque Izzy interrumpió.
-Wallace, ¿no sentiste nada extraño en la última hora por allá?
¿Extraño?… Pues si, tu vieja computadora comenzó ha hacer ruidos como loca y a brillar, estaba tratando de descifrar que le pasaba cuando llamaste, ¿cómo supiste de eso?
-los digivices volvieron a aparecer.
¡¿What?!
Joshua, que no estaba prestando del todo atención a lo que TK decía, logró escuchar el grito proveniente del teléfono y vio a Wallace.
-¡tío Wallace! – exclamó, llamando la atención también de sus tres hermanos, y los cuatro fueron directo a hablar con su tío.
-¡tío Wallace, que gusto verte!
-¡hace mucho que no recibíamos una llamado o un E-mail tuyo!
-¿qué cuentas? ¿Cómo sigue New York?
-¿cómo está la abuela Lori?
-¿y mi abuelo? – agregó Alex, con ciertas ansias.
hey, hey. Una pregunta a la vez. Primero que nada, para mí es un gusto verlos también, luego de su última visita me he sentido muy sólo… ¡aunque ahora tengo novia!
-si hay algo por lo que precuparse, Wal. – logró decir Izzy al fin luego de ser interrumpido por sus hijos. – los digivices aparecieron, ¡es sus manos! – dijo indicando a los niños.
ouh… eso si que es problema… ¿qué piensan hacer?
-no tenemos idea, pero necesito mi computadora, ¿es posible que me envíes algo de información por la red ahora?
si, pero no sé si será de mucha ayuda… no va a caber todo, hay demasiados megas y novas.
-por eso mismo necesitaré que el resto lo traigas tú. cómprate un pasaje a Japón lo más luego posible, yo lo pagaré.
ok… tendré que cancelar mi cita, pero ya los estaba echando de menos…
-¿crees que esto sea tan grave, Izzy? – cuestionó Joe a sus espaldas.
-no hay que correr riesgos.
Joshua, Alex y Sae, al ver como no iban a poder conversar con el viejo amigo de su padre, volvieron con el resto del grupo de niños, pero Conny se quedó atrás, mirando directamente hacia Ken, mirada que comenzó a molestar al hombre de cabello azul.
-¿pasa algo?
La niña sonrió cálidamente.
-es curioso como no me fijé en usted antes… - murmuró.
La niña sonrió más y se giró hacia su padre, quien ya se había instalado en el computador de Mimi.
-¡papá, es él!
-Conny, ahora no tengo tiem…
-¡es el señor de los ojos profundos!
Izzy olvidó lo que estaba haciendo y miró a su hija, y luego a Ken.
-¿¿tú??
-¿yo qué? ¿De que habla ella? – Ken se sentía extraño de la calidez que le mostraba Conima, le recordaba algo… - Yolei…
-dime.
-¿recuerdas ese viaje a Kyoto que hicimos hace tiempo?
-si, pero fue hace como seis años… antes de casarnos…
-¿recuerdas lo que pasó… la última noche…?
-¿cómo olvidar eso? ese tipo que intentó robar un banco salió corriendo como loco y mató a cuanta persona se le puso en el camino…
-¡yo estaba ahí también! – exclamó Conny. - ¡y el señor de los ojos profundos me salvó!
Yolei parpadeó.
-¿ojos profundos? ¿Te refieres a Ken?
Izzy salió de la computadora por completo y fue con Ken, Yolei y Conny para hablar en privado.
-eso fue extraño… - comentó Cody.
-ya nos contarán después. – supuso Kari, quien miraba como su marido terminaba de hablar con los niños.
-pues es difícil de creer… - logró decir Nanami, su hermano la respaldó mientras se limpiaba los lentes, incrédulo.
-si no fuera porque eres tú el que nos lo dice, tío… - comenta Kotomi.
-¿entonces de verdad existen otras dimensiones?
-¿monstruos digitales?
-¡genial!
-¿por qué nunca nos hablaron de esto antes?
-buena pregunta…
-pues… - TK buscó respaldo en sus amigos.
-es algo de los que no nos gusta hablar mucho porque nos trae recuerdos de seres queridos que jamás volvimos a ver. – explicó Hikari, con un dejo de melancolía.
"Como cuando yo no quiero hablar de mis padres"
pensó Alex, cerrando los ojos un momento.-además de que sin pruebas concretas de lo ocurrido, no queríamos contarles algo que pareciera una mentira. – agregó Joe.
-y si llegaban a contarlo en la escuela nadie les creería y podrían molestarlos… - finalizó Mimi.
-supongo que entiendo más ahora la razón de volver a Odaiba de papá. - murmuró Sae a sus hermanos. - extrañaba esos recuerdos y a las personas que los poseían junto a él…
En eso, Izzy, Conny, Ken y Yolei salieron del cuarto donde se habían metido a conversar.
Koushirou soltó un gran suspiro de alivio y le sonrió a su pequeña hija.
-bien, creo que es hora de ponerse a trabajar.
Continuará…
Notas:
¡Hola de nuevo! ¿Me extrañaron? Supongo que si ^^
pues Digimon 2023 está de vuelta y con más ánimos (aunque menos tiempo por mis clases, sorry)
Sé que debo explicaciones varias… para empezar, muchos de ustedes ya deben de saber del final de Digimon 02, no es así? Pues yo le hice un final alternativo, en donde el Digimundo y la Tierra no quedan conectados como en 02, sino que la aventura terminó igual que la primera vez: vencido una vez el digimon malo los chicos tuvieron que despedirse de sus Digimon y cerrar la puerta del Digimundo.
Luego de eso creé otra historia, que sería una especie de "digimon 03", ocurrida en el año 2004, donde ocurrirá la última aventura de los elegidos que nosotros conocemos bien. Una vez que haga ese fanfic, explicaré el resto de los detalles, ok?
Por ahora solo viene la aventura, la nueva batalla de los hijos de los elegidos…
Muchas gracias a todos ellos que dejaron su review para la primera parte de Digimon 2023 (OR, Lara, Beba, Ale, Cris, Ryuuchan) y también a toda la gente que me escribió por este fic desde la primera vez que lo publiqué…
Comentarios, onegai?