Celos

"Estoy muy feliz de que Link haya regresado a salvo.

Bueno todos estábamos felices y agradecidos con él. Especialmente los niños y yo.

Fue por él por el que recuperé mi memoria y el porqué de que aún esté viva.

Aunque el primer día no quiso hablar mucho del tema, dijo que estaba cansado y que otro día nos terminaba de contar lo que había sucedido.

Durante algún tiempo estuvo distraído. Le preguntaba acerca de aquella aventura, me contaba las historias y no me cansaba de oírlas. Decía que había conocido a gente muy interesante. Sin embargo dijo que a una de ellas ya no la volvería a ver y que otra, sería muy difícil. Pues era alguien muy importante.

Noté que se ponía triste al recordar ese detalle. Pero nunca me dijo quienes eran esas personas o que había pasado con ellas.

Con el tiempo todo siguió normal, aunque a veces Link quería estar solo, otras veces pasábamos tiempo juntos, como siempre había sido. Todo parecía estar regresando a como era antes. Aunque Link parecía algo más distante y callado de lo normal.

Un día, cuando fui a buscarlo no lo encontré y tampoco a Epona. Había dejado una nota en la que decía que necesitaba ir a Hyrule, al pueblo del castillo, no decía porqué.

Pasó un día, dos, hasta que se convirtió en dos semanas completas. Mi padre y los demás decían que no me preocupara que de seguro era algo importante.

Quien sabe, quizá la misma princesa de Hyrule lo había llamado. Lo raro era que jamás había llegado algún mensajero proveniente del castillo; sólo espero que se encuentre bien.

Un día, sin embargo, Link regresó tan de repente como se había ido. Se le veía mejor semblante, más tranquilo y relajado.

Tal vez solo era mi imaginación. Si tenía que ser eso, lo que importa es que él está bien.

De vez en cuando voy a verlo al rancho, cuando no está demasiado ocupado. Me gusta observarlo mientras trabajaba.

Siento como mis mejillas se sonrojan cada vez que voltea a verme o me sonríe agradecido por haberlo acompañado a uno de sus deberes. Enserio me gusta y mucho debo de confesar.

Aún no sé como decírselo.


Desde la primera vez que Link se fue de Ordon sin decirle a nadie, a empezado a salir más seguido cuando puede.

No le dice a nadie a donde va o porque; simplemente se va. Supongo que es algo pasajero y pronto dejará de hacerlo, eso espero. Me preocupa que algo pueda pasarle y también que un día no regrese.

Ya lleva casi seis meses así. Hasta hace poco dijo que casi siempre iba al pueblo del castillo. No sé cuál sean sus razones.

Eso me molesta, porque ya no me cuenta todo como antes. Se ha vuelto muy reservado para conmigo.

Por ejemplo ayer, alguna de las personas de Ordon necesitaban provisiones que se compraban solo en el pueblo del castillo. Rusl sería el encargado de ir por ellas y Link iría con el.

Cuando todos estaban revisando que es lo que hacía falta, dije que también quería ir y visitar a Telma a quien no había visto desde que regresé a mi hogar. No me gusta salir mucho de la villa pero quería hacerlo, no sé bien porque.

Nadie se opuso, pero papá y los demás dijeron que era un viaje cansado y largo. Dije que no importaba que de todos modos deseaba ir con ellos.

Link solo me dirigió una sonrisa y dijo que si así lo quería que estaba bien.

Dejaron todo preparado para el día siguiente revisando que nada faltara.Y fue como ellos lo dijeron; largo y cansado. Habíamos salido al amanecer.

– Mejor duerme hasta que lleguemos, así no será tan tedioso –me dijo Link.

Mientras el seguía hablando con Rusl no sé de que. Cuando desperté ya habíamos llegado el pueblo.

Los acompañé a buscar todo lo que necesitaban. Terminamos en poco tiempo de reunir las provisiones. Estábamos listos para irnos pero entonces Link me recordó el porqué había venido.

–¿No venías a ver a Telma? Yo también quiero verla además ahí también deben estar Shad , Ashei y Auru.

– Si claro.

Se me había olvidado, que había venido a ver a Telma. Conocía a Shad, pero a los otros dos no los recordaba bien.

Cuando llegamos, Telma nos recibió con un gran abrazo y comenzó a hacernos preguntas de cómo habíamos estado y que habíamos estado haciendo desde entonces.

- ¿Telma y los otros?

Escuchamos una risa y volteamos a ver.

– Pensé que ya te habías olvidado de nosotros.

Dijo un hombre que era más grande que Rusl. Venía seguido de Shad y quien debo suponer era Ashei. Una muchacha alta con cabello obscuro.

Los tres saludaron muy contentos a Link, se estrechaban de las manos para después darse un abrazo.

Fue cuando pensé en cual podría ser la causa de las constantes salidas de Link, era para ver a alguien especial y talvez era Ashei.

– Tiene mucho tiempo que no te veíamos Link.

Un momento, ¿no era para lo que él siempre venía?

– Pensé que por eso salías tan seguido, para ver a tus "amigos"

La chica de cabello negro exclamó extrañada.

– ¿Seguido?, apenas si te has mostrado por estos lados.

Voltee a ver a Link, que se notaba inquieto.

–La última vez que te vi pasar por el mercado ibas hacia el castillo.

¿Era por eso que salía tan seguido, para ir hacía el castillo? Por el momento Link solo suspiró y volteó a vernos.

– Bueno si es porque he estado atiendo algunos asuntos en el castillo y lo estaba tratando de hacer lo más secreto posible.

– Pero nunca vi que llegara algún mensajero ni nada por el estilo

– Era por lo mismo Ilia, porque tenía que ser lo más discreto posible.

Estaba molesta por que lo ocultara tanto tiempo, al parecer creo que él no estaba contento tampoco. Él se lo había buscado por esconder secretos.

– Bueno debe ser algo muy importante. Mejor vamos a beber algo la casa invita… –dijo Telma, tratando de evitar que empezaramos a discutir.

Telma puso una sonrisa y empezó a sacar vasos. Nos sirvió a todos y todos estuvimos hablando un gran rato, ellos nos contaron que habían vuelto a viajar a Snow Peak, que habían conocido a Yeto y Yeta. Dos, vaya, yetis de las montañas.

Link se veía animado, hasta que dijo que iría a ver si Rusl ya había terminado. Auru le dijo que cuando quería verlo y mando un mensaje con Link de que mas le valía venir a saludarlo al bar.

–Voy contigo.

– Ilia te puedes quedar, solo voy a ver Rusl y regreso con él pronto.

– También quiero ver si ya terminó.

- Está bien, vamos.

Quería ver a donde iba a ir realmente. Tenía la impresión de que estaba saliendo para irse a quién sabe donde. Pero...

–¡Ah! Muchachos ya iba a verlos..

– Pensé que aún no terminabas y por cierto Auru dice que no seas presumido y vayas a verlo.

– Ja, ese viejo necio. Anda vamos.

– Yo los alcanzo en un rato.

Rusl y yo ya íbamos caminando ya adelante. Me extrañé, el hombre de barba a mi lado solo asintió y le dijo que se verían dentro de unas horas para regresar.

Cuando íbamos llegando al bar, el padre de Collin entró y le dije que iba a dar una vuelta.

Me preguntó si estaba segura de ir sola, le dije que no, que había aprendido el camino de regreso. Sólo quería saber a donde se había ido Link tan presuroso.

Regresé por donde habíamos venido y traté de seguir el camino por donde se había ido. No tardé mucho en encontrarlo; estuve a punto de hablarle pero pronto otra figura se acercó a él.

Me quedé en un lugar donde no me viera.

Observé como se acercó a ella con paso seguro, como si fuera a abrazarla. Pero en el último momento se arrepintió.

Vi que quien fuera que estaba frente a Link lo tomó de las manos y lo abrazó. Lo único que alcanzaba a ver era que traía guantes de cuero y él estaba sorprendido por la acción ella tomó.

Esa persona estaba cubierta. Casi no podía ver su rostro. Sólo alcancé a identificar que era una mujer.

Después de eso se retiraron e iban hablando animadamente. No podía oír de que pues estaba lejos de ellos.

Decidí regresar no tenía caso quedarme ahí. Además no sabía con quien estaba, ¿Quién era aquella mujer?

¿Era ella la razón por las constantes salidas de Link?

Después que llegué al bar, Link no tardó en llegar, aún así no mencionó nada de su encuentro con aquella persona.

Después de un rato nos fuimos y me di cuenta que cuando íbamos de salida, la persona que vi antes iba en dirección contraria a nosotros.

No se si lo imaginé pero ambos se despidieron un gesto de las manos muy discretamente.

Link no pareció alterarse. Solo volteó a verme y sonrió.


Los meses siguieron pasando, las cosas no parecieron cambiar mucho. Él seguía saliendo aunque ya no era tan seguido como antes.

Un día lo vi con una carta, estaba sellada con el escudo de la familia real.

No quise acercarme, pues se veía muy concentrado en ella. De pronto vi que comenzaba a mostrar una sonrisa, me preguntaba ¿Qué era tan gracioso?

Volteó a verme y me saludó con una mano. Me levanté de donde me encontraba sentada y me dirigí hacia donde estaba.

– Del castillo – Me dijo sin que le preguntara.

– Lo sé, vi el sello cuando la estabas leyendo ¿Qué es tan gracioso?

– Eh, bueno no fue nada en particular.

–Entiendo ¿Es importante?

–Si, así es. La princesa quiere que vaya a la villa Kakariko pide mi ayuda para revisar como va la reparación de la villa.

Entonces comentó:

–Collin y los demás niños vendrán conmigo ¿Porqué no vienes tu también?

–¿De verdad?, ¡claro!

Se me hizo un poco extraño que Link me pidiera ir acompañarlo. Pero me hubiera gustado ir a solas con él. No importa aún así esta bien.

Partimos al siguiente día.

Al llegar a Kakariko, el primero en vernos fue Renado y su hija. Ambos nos contaron que mucha gente que se había ido comenzó a regresar. El pueblo parecía más vivo.

Y nos dijo que la princesa estaba en esos momentos revisando como iban las reparaciones. Fue entonces que llegamos a donde se encontraba, ella estaba hablando con un Goron.

– Se ve muy fría y distante.

–Pero no lo es.

Contestó Link de repente.

Renaldo estuvo de acuerdo. A él también le había parecido reservada pero era una persona cortés y amable.

Link se disculpó y se dirigió hacia donde se encontraba la princesa y el Goron. Saludó a ésta haciendo una reverencia y tomando su mano. Ella le sonrió y contestó su saludo, después se dirigió al Goron quien se alegró de verlo y lo abrazó, después lo soltó mientras él ponía una cara de dolor y la princesa se reía.

Nunca pensé que la vería reír.

El goron se despidió y creí que Link regresaría a donde estábamos nosotros con Renado, pero en vez de eso tomó otra dirección junto con ella.

Quisiera saber de que hablaron toda la tarde pues no fue hasta el anochecer que ambos reaparecieron. Supongo que era de asuntos realmente importantes.

Se celebró una cena por su llegada, todos estaban muy contentos, pero yo... No se porqué estoy tan enojada.

Nos quedamos esa noche en la villa Kakariko, pues se había hecho tarde. Al otro día nos despedimos de Renado y de todas las personas que habíamos conocido en villa Kakariko. Su alteza también salió a despedirnos a todos.

Link fue el último en decirle adiós.

Las cartas provenientes del castillo, venían seguido pero las salidas de Link no. Ya no iba tanto al pueblo. Pero ahora visitaba otros lugares y como siempre a veces se iba por semanas o días. Aveces se iba casi todo el mes.

De vez en cuando me decía que fuera con él y otras veces no. Una de esas veces quise decirle lo que sentía por él, pero siempre me asustaba y desistía.

Ayer decidí ir a ver a Link al rancho a esta hora ya debía de estar ahí. Cuando llegué comencé a buscarlo pero no lo encontré así y le pregunté a Fado donde estaba.

Me contestó que en la mañana había ido a buscarlo para que fueran al racho y que cuando abrió Link le dijo que no se sentía bien.

–Creo que está resfriado.

Decidí ir a buscarlo. Al llegar frente a su casa me di cuenta que Epona no estaba ¿Había vuelto a salir?

Entonces me dirigía a la vertiente esperando que estuviera ahí. Esperaba que no se hubiera ido de nuevo sin avisar.

Me sorprendí cuando no sólo encontré a Epona. Junto a ella había otro potro tordado.

Tal vez era alguno que acaban de adquirir en el rancho ¿Pero que hacía en todo caso ahí?

Regresé de nuevo a su casa. Debía de estar descansando así que decidí entrar sin hacer ruido.

Subí las escaleras y… Me quedé sin palabras, estaba dormido si, pero no estaba solo.

La abrazaba por la espalda con una mano, mientras ella plácidamente dormía encima de él, apoyada en su pecho. No alcancé a ver bien su rostro, solo sabía que tenía el cabello rubio.

Salí rápido de ahí, cuando vi que Link se movía.

Mi pecho parecía comprimirse, como si no pudiera gritar. No podía asimilar lo que acababa de ver.


NOTAS:

Tsssss... esto fue muy rush. Nunca pensé que haría algo así. OMg.