Primeramente, hace poco vi los 24 primeros capitulos de Kyou Kara Maoh. Debo decir que la serie es muy romántica, por esta hermosa pareja de Yuuri y Wolfram
Esta historia es un universo alterno. Y esto porque: Yo al igual que muchos de ustedes solo han visto los 24 primeros caps. Sabemos que son 72, pero eso es lo que tenemos. Así que he creado esta historia de algo que aun no conosco completamente. Es lo que yo creo que seguro pasaría sí Yuuri volviera a su mundo humano y no regresará hasta después de tres años...
Este primer capitulo verán a Yuuri con 18 años, y viviendo en su mundo humano. A partir de aquí se desarrollará la historia. Yuuri de 18 años vuelve a Shin Makoku..
Hay un personaje creado por mí (creo que se le dice OC..) en fin, es parte importante del fic
Bien estos personajes no son míos, sino de sus respectivos autores..
Y habrá lemon un poco más adelante..Sin más espero que lo disfruten
Tres años después….
Capitulo 1: El retorno
Habían pasado tres años desde su retorno del Shin Makoku, el lugar del que era el Rey Maoh. Yuuri Shibuya contaba con 18 años, era un joven extrovertido y simpático, dedicado casi íntegramente al béisbol., deporte que le fascinaba. Vivía aún con sus padre, y frecuentaba a su buen amigo Ken Murata con quien tenía una férrea amistad.
Lejos había quedado el Yuuri de postura de niño y mirada adolescente. Hoy por hoy a sus 18 años, Yuuri era un joven alto, de complexión delgada pero firme, cabellos aún cortos y negros, rostro más maduro, su voz había cambiado haciéndose más gruesa y grave. Por sus características, Yuuri siempre llamaba la atención a muchas chicas que de tanto en tanto lo asediaban buscándolo incluso con desesperación. En resumen: Yuuri se había convertido en un maduro y atractivo joven.
Cualquiera diría que Yuuri se encontraba en su mejor momento y lo estaba, sin embargo él no lo sentía así. Había algo que le faltaba…
Durante mucho tiempo, cuando todavía estaba en Shin Makoku su vida estuvo llena de aventuras, obligaciones, experiencias fantasticas, acontecimientos excepcionales Y amigos entrañables: el noble pero obsesivo Gunter von Christ, tan pegado al protocolo; el serio y enigmático Gwendal von Walde, aparentando frialdad cuando en realidad sentía una gran preocupación por todos; el fiel y buen amigo Conrad Weller, compañero inseparable y..Wolfram…Wolfram, a decir verdad, al que más recordaba era al hermoso rubio celoso, quien no lo dejaba ni al sol ni a la sombra, ni siquiera en su propio lecho, que compartieron por mucho tiempo de la forma más casta posible.
Tres años atrás, Yuuri todavía creía que su retorno a su mundo ya era imposible, resignándose a vivir en el mundo de los Mazoku para siempre. Sin embargo, durante un momento inesperado, y sin que él mismo lo deseará puesto que estaba hablando con Wolfram de algo muy íntimo y personal, fue extraído por un torbellino ocasionado en su tina que lo arrastró hacia la tierra en un punto de no retorno.
De tanto en tanto soñaba con el momento preciso en que fue absorbido por el remolino que lo regresó a su vida. En su baño personal él y Wolfram se encontraban desnudos frente a frente. Mirándose como nunca lo habían hecho, unas palabras sueltas en el aire que Yuuri no lograba entender en su sueño. Inmediatamente el acercamiento de sus rostros que claramente denotaban la llegada de un beso: sus labios tan cerca, rozándose, a punto de….Y luego una oscuridad, junto con el despertar exaltado de Yuuri cada vez que soñaba con ese instante, antes de volver al lado de su amada familia.
Durante estos tres años, el antiguo rey Maoh, no dejaba de pensar en lo que hubiese pasado entre él y su prometido. Lo más probable era que ellos dos hubiesen terminados casados, formando una familia junto con la pequeña Greta.
Sí definitivamente, Yuuri se había enamorado de su prometido Mazoku, el llameante Wolfram Von Bielefield. Siempre supo que sería así, lo más triste de todo es que ese amor que sintiera a sus 15 años adolescentes, persistía y con mayor intensidad ya que se estaba convirtiendo en un amor de hombre con todos los deseos que con eso conlleva.
No pasaba días en el que Yuuri, se abstraía del mundo e imaginaba cómo estaría Wolfram, cómo sería en ese momento. En ocasiones lo visionaba como un joven bello, con una magistral presencia, siendo esas ocasiones los momentos en los que su cuerpo respondía teniendo erecciones que sólo se calmaban con la autocomplacencia en el baño de su casa.
Su añoranza por el reencuentro y su deseo carnal era tal que en varias ocasiones, se lanzaba a piscinas, se dejaba caer en fuentes, se metía a arroyos e incluso se bañaba por largo tiempo con tal de que ese remolino aparezca y lo conduzca hacia Shin Makoku…hacia Wolfram…Pero ningún camino resultaba, él no regresaba a su reino
Era temprano en la mañana y Yuuri, como capitán del equipo de béisbol de la ciudad llegaba hacia las canchas. Había vuelto a tener ese sueño, pero esta vez pudo descifrar lo que se dijeron por última vez
-"Ahora lo sé…yo…te amo…Wolfram…me casaré contigo…pronto.."
-"..Yuuri…mi querido Yuuri"
No pudo conciliar el sueño, esas palabras retumbaban una y otra vez en su cerebro. Era mejor levantarse y prepararse para el entrenamiento, a ver si con eso podía despejar un poco la mente.
-…finalmente ya estoy despierto- dijo- tal vez eso me ayude a relajarme…
Comenzó a hacer lanzamientos, para ejercitar su brazo, siendo uno de ellos tan fuerte que cayo lejos del diamante, sobre un charco. Yuuri suspiró y caminó hacia donde se encontraba la bola. Se agachó para recogerla, logrando ver su reflejo en el pequeño charco. Esto le llamó la atención, normalmente los charcos son opacos por la suciedad pero este no lo era.
-..qué extraño…puedo ver mi imagen..
Tan sólo pasaron unos segundos cuando el reflejo de su imagen desapareció, dando paso a un rostro de cabellos de oro y ojos esmeraldas. Yuuri se quedó de una pieza al reconocer quien era esa persona…
-¡Wolfram!- Yuuri abrió más sus ojos y pudo ver que de los ojos Wolfram salían lagrimas.
- ¡Wolfram…Wolfram!- Yuuri de la desesperación buscó tocar el rostro metiendo su mano al charco. Y como si todos sus deseos se hubiesen echo realidad, el viaje tan anhelado desde hace tres años, se produjo. Un violento remolino se creó en ese charco y con el, un gran vórtice que arrastró a Yuuri hacia su interior…
- ¡¡¡MAJESTAD!!! ¡¡MAJESTAD!!- la voz inconfundible de Günter que se oía a lo lejos. Yuuri abrió lentamente sus ojos y vio el cielo celeste y las nubes de algodón tan característico del verano. ..
- ..el sol…- se tapo los ojos con una de sus manos abiertas ya que los rayos caían sobre él con intensidad..- ..acaso estoy…
- ¡¡Majestad!! ¡¡Majestad!! ¡¡OH, por el gran Shinou, Majestad!…¡mis plegarias fueron escuchadas!- las lágrimas de un siempre exagerado Günter, no se hicieron esperar quien arrodillado al borde de la fuente central del Palacio Pacto de Sangre, no cesaba sus alabanzas hacia el Shinou, por haber traido a Yuuri de nuevo a Shin Makoku
Yuuri, se levantó la mitad de su cuerpo, reconociendo las instalaciones que hasta hace tres años, era la mansión real, en donde vivía.
-..he vuelto…- dijo Yuuri, provocando que Günter levantará su rostro lloroso y sin preámbulos corriera hacia el joven para estrecharlo en un asfixiante abrazo
- ..¡volvió a nuestro lado majestad!- las palabras del pelilila se entrecortaban por el gimoteo constante. Yuuri estaba poniéndose muy incomodo por la falta de aire…
- ..Gunter…a mi también me alegra volver a verte- dijo con dificultad.- ..pero..no puedo respirar
- ¡OH majestad!... ¡déjeme verlo!- Günter lo soltó para ser una rápida inspección de Yuuri- ¡por el gran Shinou, SE HA CONVERTIDO EN UN JOVEN HERMOSO!..¡Qué prestancia! ¡Qué gallardo! ¡Cuanta belleza!
- ya ya Günter…no es para tanto..
- ..es que no puedo evitarlo, estoy tan emocionado- y otra vez se tapó el rostro para continuar con su llanto
-..tu también te ves bien…estas…igual- dijo Yuuri con una de sus grandes sonrisas.
- ..Ya Günter, deja a su Majestad recuperarse del viaje…- se escuchó una voz cerca de la fuente
- ¡¡Conrad!!!- Su alegría no tuvo medida en cuanto vio a su más entrañable colaborador y querido amigo Conrad Weller, así que sin más se acercó rápidamente para darle un fraternal abrazo.
- ..tanto tiempo Yuuri- le dijo el moreno, quien daba la impresión de estar igual que el último día que lo vio hace tres años.
Yuuri estaba al borde de las lagrimas, realmente había vuelto a su reino, volvía a ser el rey Maoh, volvía a Wolfram
- Veo que haz cambiado demasiado – dijo Conrad, al terminar el abrazo y ver a Yuuri- .con razón Günter no te deja en paz- terminó bromeando sobre lo acontecido hace unos instantes
- Ustedes tampoco han cambiado nada en estos tres años…nada…- hubo un silencio en el que Yuuri parecía meditar sobre su retorno-….pensé que no regresaría más Conrad…pero..felizmente me equivoqué…
- ¡¡TENEMOS QUE HACER UNA GRAN CENA DE CELEBRACIÓN POR EL RETORNO DE SU MAJESTAD EL REY MAOH YUURI!!! – gritó vibrante Günter
- Así es..- completó Conrad indicándole a Yuuri que debía salir de la fuente. Günter también salió y comenzaron a caminar rumbo al palacio
En ese instante Yuuri recordó lo que lo trajo de vuelta: el rostro de Wolfram en el agua, el rostro triste de su prometido, y sin más preguntó
-.. Conrad ¿cómo esta Wolfram?
El coronel Weller trató de que no se notará la incomodidad sentida por la pregunta, el nerviosismo solamente se notaba en sus ojos. Claro que Yuuri no lo notó. Günter también se puso nervioso, pero también supo disimularlo...
-… fui traído hasta aquí por un charco en el que vi la cara de Wolfram.. ..y…estaba llorando… ¿le ocurre algo a él?
Conrad guardó silenció y tuvo un leve estremecimiento que no fue notado por Yuuri, luego del cual respondió pausadamente..
- …Wolfram…pronto lo verás Yuuri…Así como tu, él ha cambiado notablemente...
-… no has respondido a mi pregunta…
-.. si lo he hecho…, pero si quieres más ..él…él esta bien…
-.. tengo muchos deseos de verlo nuevamente…- suspiro Yuuri con una sonrisa en sus labios
-.. ¡¡¡Su majestad!!– interrumpió Gunter- no debemos demorarnos, debe cambiarse inmediatamente…- completó jalando a Yuuri y arrastrándolo hacia el interior del palacio
- espera, espera…Gúnter…- Yuuri fue arrastrado por el platinado hacia el castillo pacto de Sangre. Conrad los vio alejarse, estaba muy feliz por el regreso de Yuuri a Shin Makoku, pero al mismo tiempo en su rostro se dejo ver un dejo de melancolía. Lo que le esperaba al rey Maoh no era algo que lo llenaría de regocijo, sino que le ocasionaría un enorme malestar.
- No sé que irá a pasar...- se dijo así mismo y continuo su camino hacia el castillo
Yuuri intentaba por todos los medios detener el acelerado ritmo de Gunter. Su consejero no lo dejó ni un momento solo, le obligó, claro con educación, a desvestirse y darse un baño en la enorme tina real. Luego del cual lo condujo hacia su habitación para que se colocara su atuendo clásico negro, el cual curiosamente le quedaba a la medida..
- ¡SOBERBIO!!!- expresó con estrellas en los ojos Gunter al ver a su amado rey, frente al espejo luciendo su traje negro.
- Parece que me queda perfecto...a pesar de que he aumentado de tamaño
- ¡ah! Majestad, eso es porque yo no he dudado en siempre confeccionar un traje cada año aumentando siempre la medida... Para eso le pedí varias veces a Wolfram que se lo probase.
- ¡¡Wolfram!!!
El escuchar el nombre de su adorado rubio, lo hizo sobresaltar. Pensar que él se había probado su ropa y que había servido de modelo para la confección de su traje, indicaba que había crecido tanto como él en estos tres años. Acercó uno se sus brazos y aspiró el aroma imaginando que todavía podía conservar la hermosa esencia de pequeño Mazoku
Al oír la expresión de Yuuri, Gunter se calló en el acto, pasó saliva con dificultad. Sabía de sobra que no debía tocar mucho el tema de Wolfram, porque daría pie a que Yuuri preguntará por él, pero estaba muy emocionado por la llegada de Yuuri, que no se pudo contener
- Gunter..., hasta ahora no he visto a Wolfram...¡quiero verlo...! ¿dónde está? ¡llévame con él!
Todo este tiempo Gunter estuvo dándole la espalda a Yuuri, rogando que no preguntará por Wolfram. Ruegos que no fueron escuchados, porque el ojinegro no sólo preguntó por él sino que pedía, no, ordenaba que lo llevará con el soldado rubio.
Gúnter se volteó, dio un suspiró que a Yuuri le pareció raro, porque era melancólico y comenzó a hablar.
- Su majestad...hay algo que debo decirle...
Yuuri lo quedó viendo con ansiedad, la voz de Gunter se oía muy alarmante..
- Vera el joven Wolfram...
- MI HERMANO ESTÁ EN EL SALÓN PRINCIPAL- la voz poderosa de un caballero de mirada seria y cabello negro se hizo presente. Gwendal entró por la puerta de servicio a la habitación real e interrumpió a Gúnter en su declaración
- ¡Gwendal!- dijo con una sonrisa Yuuri al ver al frío pero preocupado hijo Mayor de la anterior Maoh.
- Su majestad- saludó el hombre con una inclinación hacia Yuuri.- es una alegría volverlo a tener en esta tierra- completó sin manifestar ninguna emoción
- Gwendal, tu no has cambiado...creo que los años no pasan en Shin Makoku
- En cambio su majestad muestra un notable cambio..., espero que también el cambió no haya sido sólo físico, sino también mental..Después de todos estos años, comprenderá que hay muchas obligaciones que debe cumplir y que se atrasaron debido a su ausencia- terminó como en un regaño el hombre, dando a notar una mirada como de reproche.
- Je ¡No hay duda Gwendal! Tu actitud no ha cambiado...Y sí, el cambio no sólo ha sido fisico... también ha sido emocional...- Lo miró con decisión Yuuri..
- Me alegra...
- Y volviendo al momento en que interrumpiste, dijiste que Wolfram está en el salón principal..- dijo con ilusión escondida Yuuri.
- Sí... ya está enterado de que su majestad ha vuelto..
- ¿cómo??? Ya lo sabe ¿y por qué no ha venido a recibirme?- preguntó sorprendido Yuuri.
- Prefiere verlo en el salón principal...
- ¡Perfecto!...Voy hacia allá..- Sin decir más Yuuri salió deprisa, en busca del que ahora estaba seguro era la persona que ocupaba la mitad de su cuerpo...
- ¡Su majestad Espere!!!- intentó detenerlo Gunter, pero fue prohibido por Gwendal quien le cerró el paso- ¡pero...Gwendal...Yuuri debe saber!
- No...esa es misión de Wolfram...no es nuestra...Sí así fuera Conrad ya se lo hubiese dicho...-Gwendal bajó la mirada- Esa es la decisión de mi hermano menor...Ahora veremos si Yuuri permanece en el reino Mazoku
Gunter no tuvo más remedio que aceptar lo que decía Gwendal, era cierto era la decisión de Wolfram...y de Yuuri.
Yuuri apuró el paso, ya no era el niño enclenque y estúpido que decía Wolfram. El ya era un hombre, por lo menos se sentía así, que ha definido sus sentimientos y orientado su vida. Y esa vida tenía como faro guía a Wolfram...eso era todo.
Llegó al salón principal tan iluminado como siempre. Ingresó por la puerta y en el fondo sentado en un sillón de espaldas a la entrada, se asomaba una cabeza rubia brillante de cuello largo y fino. Yuuri no dudó que el que estaba sentado era Wolfram, así que sin más lo llamó...
- ¡WOLFRAM!
La cabeza se movió y luego de eso Yuuri tuvo que contenerse de no caer desmayado por la belleza que se elevó ante sus ojos. Un alto Wolfram, un poco menos que Yuuri, se mostraba frente a él. Su belleza etérea, de ojos verde profundo y piel nívea había aumentado de forma soberbia. Wolfram ya no era un niño bello, Wolfram era un joven hermoso y sensual. Lo más atrayente era que su cabello rubio había crecido tanto que le llegaba debajo de los hombros, magnifico. Yuuri sonreía y se deleitaba con esa imagen perfecta de la larga y estilizada figura de Wolfram: piernas firmes, brazos delgados y contextura delicada.. El pelinegro pensó que estaba en el paraíso y su cuerpo comenzó a sentir otras sensaciones ya adultas.
Los ojos de Wolfram temblaban de la impresión, él tampoco se imaginó que volvería a ver al que hace tres años era el objeto de sus afectos y atenciones. Estaba más gallardo que en ese entonces, varonil, fuerte, poderoso, en extremo sexy. Su respiración se agitó y sin querer el objeto que estaba tocando, que era una especie de llavero, se resbaló de sus manos...en ese momento habló
- Yuuri...
- Wolfram...- Estaban estáticos, cuando de pronto Yuuri decidió dar el primer paso, estaba seguro que no sólo lo estrecharía entre sus brazos, sino que le diría que lo había extrañado y que lo amaba sin medida.. Yuuri a punto de correr, pero Wolfram no se movía. Cuando Yuuri se acercó más, un ruido lo detuvo. Una de las puertas se abrió y al tiempo se escuchaba que alguien llamaba al rubio
- Wolfram ¿dónde estabas?- esa voz no la conocía Yuuri, y la cara mucho menos. Un joven de edad cercana a la de ellos, tal vez un poco mayor, se acercaba hacia el rubio. Era un joven atractivo de melena azul, piel morena y ojos azules. Su mirada era como un trueno. Esto hizo que Yuuri se detuviera.
- ¡Ah su majestad!...disculpe no lo vi...Me notificaron de su llegada hacia el Shin Makoku... Estamos felices de verlo nuevamente- dijo el chico mirando a Yuuri, y colocándose al costado de Wolfram- Wolfram, no me dijiste que venías a recibir a su majestad- Terminó rodeando con su brazo la cintura del rubio. Wolfram no contestó simplemente negó con la cabeza. Yuuri sintió que le hervía la sangre y sin más preguntó directamente...
- ¿Quién eres tú?
- ¿Cómo Wolfram, no le has dicho nada a su majestad?- dijo mirando inquisidoramente al rubio quien bajo la cabeza, en vergüenza..
- Bien parece que no, entonces permítame presentarme: Soy Andrea von Greek, prometido de Wolfram von Bielefield con el que pronto contraeré nupcias...
CONTINUARA...
Espero que les haya gustado...Recibirá con mucho gusto sus rewiews...Gracias