Capítulo 8
Estoy cayendo en el Lago, profundo y lento. La luz tenue de la superficie se aleja cada vez mas, puedo ver a mi alrededor como los setos empiezan a aparecer.
Toc, toc, toc.
Que es ese sonido? Es imposible escuchar algo tan claro debajo del agua.
Toc, toc, toc.
Esta vez mas fuerte y mas claro, mientras pienso sigo cayendo.
-No, basta, no quiero hundirme, no quiero caer.
Digo inútilmente.
-No quiero hundirme, no quiero caer- repito a la inmensa masa de agua a mi alrededor.
De repente alguien me sujeta por la espalda, como unos brazos invisibles y me llevan a la superficie, casi sin aire en mis pulmones.
-Rapido, no quiero mas, rápido.
Hermione, susurra una voz cercana.
Al llegar a la superficie respiro como si no lo hubiera hecho nunca, pero ya no es un sueño.
-Hermione, Hermione, estas bien, era solo una pesadilla
-Harry, Qué haces en mi sueño?- digo al notar que es el quien tiene una mano en mi espalda y otra en mi nuca, acercándome a él.
-No es un sueño tonta, jaja, estoy aquí de verdad, tócame si quieres, incluso puedo pellizcarte- Nuestras cabezas están demasiado cerquita.
-Esooo, no será necesario, te creo. Me sueltas?
-Si, claro Feliz Navidad!
-Por qué el entusiasmo?- digo riendo, nunca lo había visto entusiasmado.
-Pues regalos! y mucha comida hoy en la cena de navidad. Y afuera hay nieve- dice sonriendo como un niño.
-Espera, Cómo entraste en mi habitación? Las escaleras
-Las escaleras no sirven si tienes escoba. Toque la ventana pero no te despertabas. Abrí la ventana con magia y entre cuando vi que te revolvías en la cama.
-Ahhhh- me incorporo en la cama lo mas alejada posible de él- abrimos los regalos?
-Yo ya abrí los míos, gracias por el sweater, lo usaré hoy, me encanta ese azul.
-Me alegro-digo sonriendo mientras el se fija en la pila de regalos.
-Bueno. A ver, este es de Hagrid creo.
Desgarro el envoltorio y dentro hay una caja. La abro y encuentro un montón de sus caramelos caseros.
-Caramelos si, emmm luego.
-Jajaja, el siguiente es de Lavender y Parvati-me regalaron un conjunto de ropa interior, negro con detalles de encaje, muy sexy jaja, luego Ron me regaló una bufanda.
-Este es de, espera, Malfoy? No puede ser
-Disculpa?
-Toma- dijo casi tirando el regalo.
Abro la envoltura negra con letras plateadas, como si dentro contuviera una serpiente, pero me encuentro con otro paquete. Abro la cajita y mi expresión hizo que Harry se impacientara.
-Que es? Por que esa cara?
Sin decir una palabra le muestro el collar. Una cadena de plata con un dije de rombo de un zafiro rodeado por pequeñitos diamantes?
-JoDesde cuando ese te regala algo así?
-Desde nunca, se lo voy a devolver.
-Como digas Este es dee- luego de sacudir la cabeza en confusión, agarra otro paquete y busca la etiqueta- No, este no te lo daré.
-De quien es?
-De tu maldito ex.
-Dámelo.
-No.
-Harry.
-Tendrás que quitármelo por la fuerza.
-Sabes que no puedo luchar contigo, incluso si tuviera el doble de fuerza de la que tengo normalmente, no lograría mas que rasgar el envoltorio.
-Tu debilidad no me da pena en lo mas mínimo. Te lo doy a cambio de
-A cambio de nada, dámelo.
-A cambio de que te sientes a mi lado en la cena de Navidad. No quiero hablar con nadie mas, quiero hablar contigo de duendes si quieres, pero quiero que estés a mi lado.
-Ok- digo sin pensarlo y me alcanza el paquete. Es alargado y esta envuelto en un papel fino y blanco, le quito el papel y agarro la nota para leerla: Hermione, Feliz Navidad! Espero que estés bien, he sido un real idiota y estoy muy arrepentido. Espero que esto te alegre un poco y que esa alegría no se marchite, como no lo hace este regalo. Te quiero, Seamus.
-Una rosa?- pregunta Harry.
-Que no se marchita nunca- respondo sonriendo levemente, recordando que decía la carta. Una hermosa rosa de un rojo perfecto, la acerco a mi nariz e inhalo el aroma.
-Hermione no llores.
Me toco la mejilla y veo mis dedos húmedos.
-Vaya, ni cuenta me di.
Harry se acercó, se reclino en la cabecera de la cama y me abrazó contra su pecho.
-Lo mejor para el final, el mío- dice sonriendo con aires de superioridad.
-Creído- respondo agarrando el paquete que me alcanza.
Desgarro el papel y abro la cajita. Sostenida por unos relieves en la caja, había una pulsera fina, de plata, con pequeños dijes que colgaban, de zafiro y también de brillantes, alternados.
-Harry, esto es
-Te gusta?
-Hermoso. Es perfecto. Gracias- digo mirándolo a los ojos, lo cual es incómodo, ya que mirarlo a los ojos involucraba estar muy cerca de su rostro. Bajo la mirada de nuevo, hacia el brazalete, pero el me toma por mi barbilla y hace lo que lo mire.
-De nada Herm- dice sonriendo, pasando su mano de mi barbilla hacia mi mejilla y acariciándome.
-Te ayudo?- dice señalando su regalo.
-Claro.
Le doy el brazalete y extiendo mi mano. El rodea mi muñeca con el brazalete y lo cierra, toma mi mano y con la otra lo acomoda para que no se vea el cierre, pero una vez que lo hace no suelta mi mano.
-No es demasiado caro para un regalo de Navidad, Harry? Me da
-No, es lo que te mereces por ser tan buena amiga, además te queda hermoso. Te quiero Hermione, déjame hacerte un regalo, no voy a permitir un no por respuesta.- dice soltando mi mano.
-Bueno, gracias- digo sonrojándome.
-Me voy, alguien viene- dice susurrando, rompiendo el silencio. Asiento con la cabeza y a los pocos segundos que se fue, entró Vablatsky a la habitación, le sonrío a la vez que me levanto.
-Feliz Navidad!-le digo en mi camino al baño para peinarme.
-Feliz Navidad- dice por lo bajo.
Ni hoy puedes ponerme de mal humor Vablatsky!
Meto el regalo de Malfoy en el bolsillo de mi abrigo y salgo ya cambiada y peinada a desayunar.
El Gran Comedor estaba casi vacío, miro hacia la mesa de Slytherin, pero no esta la cabeza rubia que busco. Luego lo encontraré y hablaré con el. Me siento frente a Harry y le sonrío, el responde.
-Qué harán luego chicos?- digo a la vez que agarro una tostada.
-Quidditch, claro- dice Ron entusiasmado.
-Quieres ir a vernos?- pregunta Harry interesado.
-Mmm, no sé, quiero salir a caminar, quizás termine allí, quizás lea, no se.
Confundida no alcanza para describir como me siento. Por qué Seamus me engañaria a tan corto tiempo de estar juntos? Supongamos que yo no le alcanzaba, Por qué Seamus se acostaría con Ginny? Sabiendo que ella esta con Harry, bueno, estaba. Y sobre todo, Por qué Ginny accedería? Ella aaama a Harry con todo su pequeño e irritante corazón, Por qué diría que si? Seamus ciertamente no la obligó, ella lo estaba apurando cuando llegamos. Ella quería y lo deseaba. Entonces era puro engaño
Odio esto
-Pareces preocupada HermioneQué pasa?
Caminando, no me di cuenta quien estaba sentada en un árbol cerca de mí. De lo contrario hubiera esquivado el camino.
-Sinceramente no tengo ganas de hablarte Ginny, vete por favor.
-No, no quiero- dice sonriendo y mirándome divertida.
-Entonces hasta luego- me doy vuelta y comienzo a caminar hacia el castillo nuevamente pero me sigue y se pone a mi par.
-No, no te vayas, no voy a hablar mucho, lo prometo.
-Tienes la misma consideración por esa promesa como la que tuviste cuando dijiste que eras mi amiga?- digo mirando hacia el frente, aun caminando, tratando de llegar rápido al castillo.
-Claro que no. Esto va en serio.
-Vete a la-empecé, pero no me deja terminar y empieza a hablar. Paro de caminar y la miro, con la expresión de menor enojo posible, se que eso la enojará mas.
-Es increíble lo que la magia puede hacer no? Puede hacer que alguien que esta enamorado de otra persona, se interese en uno con una simple poción. Mezcle la poción de la pasión en el whisky de fuego que le di a Seamus.
-Por qué harías eso?- las palabras comienzan a arremolinarse en mi cabeza. Poción de la Pasión? Seamus hechizado
-Porque me cansé de ver como tooodos se interesan en alguien que ni vale la pena. En fin, como te decía, alegré un poco su trago, claro que lo que la poción mezclada con alcohol y su buen corazón, no tuvo el efecto que quise, asíque duró muy muy poco, aunque lo suficiente para que ustedes nos vieran, claro que no era el plan desde el principio, pero funcionó.
-Qué quieres Ginny? No lo entiendo, pensé que amabas a Harry.
-Y lo amo, esta es mi manera de alejarte de el.
-Quitándome a mi novio? No tiene sentido.
-Oh, si lo tiene Hermione. Te besaste con Harry y por eso mereces sufrir. Qué puedo decir? Me encanta verte infeliz.
-Tienes serios problemas Ginny.
-Ohh, si que los tiene. Ven conmigo Granger, aléjate de esta loca.
-Vete a la mierda Malfoy- dice la pelirroja, acercándose amenazadoramente.
-No empieces Weasley, sabes mas que bien que sales perdiendo- responde él sin interés alguno en un conflicto, por primera vez en su vida quizás. Me pone su mano en la espalda y me conduce hacia el castillo.
Caminamos y caminamos, subimos escaleras, puedo sentir la gente que nos mira, con curiosidad, o desagrado, muchas miradas preguntándose que hace Malfoy conduciéndome a mi Hermione Granger, a algun lado con mi cara. Jaaa, mi cara, debe ser terrible, esperemos que lo que siento no se refleje en mi rostro
-Aquí.
Parece que hubiera flotado todo el camino para aterrizar en
-Astronomía- susurro continuando mis pensamientos.
-Si- dice apoyándose en el alfeizar y mirándome- Estas bien?
-Esa, es una pregunta complicada.
-Lo sé. Cambiemos de tema, Te gustó mi regalo?
-Por qué lo mandaste?
-Por qué tienes que cuestionar todo? Vive un poco!
-Eso intento, pero si no cuestiono cosas y pongo a prueba a las personas luego te traicionan.
-Te lo mande y listo. Me pareció que iba a quedarte muy bien y que te haría sentir mejor Te gustó o no?
-Es muy lindo, y muchas gracias. Pero no creo que pueda aceptarlo Malfoy.
-Qué tiene de malo?
-Nada, es perfecto, pero no me siento bien aceptándolo- digo viendo el paisaje- Siento como si quisieras comprarme.
-No, esa no es la manera de ganarse a Hermione Granger. Quería ponerte de buen humor después de lo de tu noviecito. No tardará en recibir lo que se merece ese
-No! No quiero que hagas nada. El no tiene la culpa, Ginny lo hechizó. No tendría sentido que fuera de otra manera.
-Debo irme- saco la caja de mi bolsillo y se la alcanzo- Te lo agradezco.
-Granger, es un regalo. Acéptalo y lárgate.
-No me hables así.
-Eres imposible, no te hablaré así si prometes quedártelo y usarlo alguna vez.
-Bueno, gracias de nuevo, lo prometo.
-Feliz Navidad, Granger- escucho mientras me alejo y atravieso la puerta.
Miro el fuego de la chimenea, tratando de tranquilizarme, jugando con los dijes de mi brazalete. Mi mente sigue sin aceptar lo que dijo Ginny. Como es posible que una persona que uno piensa que conoce, de una vuelta tan brusca a ser una persona tan diferente?
-Estas bien? Vi que el hurón te llevaba con él, pero estaba hablando con Mcgonagall y no podía salirme, cuando te busqué, los perdí.
-Si, estoy bien- digo sonriendo y evitando soltarle que su hermana es una loca sicótica- solo necesito un baño caliente. Nos vemos luego si?
-Segura? Parecías muy preocupada recién.
-Que estoy bien! En serio, jaja. Nos vemooos.
Subo las escaleras lo más rápido que puedo y apenas entro al cuarto me lanzo hacia el baño y mientras se calienta el agua, agarro mi cabeza, tratando de calmar el remolino que son mis pensamientos.
Voy hacia la habitación, dejo mi ropa encima de mi cama y el brazalete de Harry en mi mesita de luz y corro hacia el baño.
El Gran Comedor esta perfecto y lo único que le falta es ella. Miro hacia la puerta que dejaba pasar a otra persona, retiro mis palabras, ya esta perfecto. Le hago señas a Hermione ya que prometió sentarse a mi lado, no sin antes admirarla. Tiene el pelo recogido en un rodete, con unos cuantos de sus rizos cayendo. El vestido negro le queda hermoso, acentuando su figura, y cuando se acomoda el pelo detrás de la oreja puedo ver que en su mano esta mi brazalete, y haciendo juego su cuello esta el collar que le regalo Malfoy quitando lo último está perfecta.
-Como lo prometí- dice sentándose a mi lado. Dios, que bien huele
-Estas muy hermosa.
-Gracias- dice al tiempo que aparece un tono rosado en sus mejillas.
-Harrry, puedo sentarr a tu lado?
-Emm, bueno-empecé a decir, pero supongo que ella lo tomó como un bueno, siéntate.
-Grracias, Harry, como has estado?
-Bien
Y así es como perdí a Harry Potter. Vablatsky se lo robó tooooooda la cena. El baile comenzó luego del brindis de Navidad. Eran bastantes los que se quedaban este año, así que la gente realmente bailaba y no lucía tan triste como otras veces.
-Me concede el honor Madame?
-Claro.
-Te plantaron?- pregunta llevándome al centro de la pista de baile que habían armado.
-Algo así.
-No tengo ganas de bailar.
-Y para que me lo pediste?
-Para sacarte de la mesa, claro- lo dice como si fuera lo mas obvio del mundo- Quieres ir a caminar?
-Da igual
-Vamos entonces.
Me lleva del brazo como en las películas, vamos caminando lento y de repente paramos en unos bancos, cerca de la puerta. Se coloca frente a mi, de espaldas al resto del lugar.
-Estas hermosa, Granger. No pensé que fueras a usar mi collar esta noche.
No digo nada, solo lo sigo mirando a sus espaldas mientras me sonrojo un poco.
-Como si eso sirviera de algo
-Hey! Te estoy diciendo algo agradable-dice mirando al techo como rogando a Dios. Aun no me acostumbro a Malfoy agradable, bueno, casi agradable. Lo escucho reírse.
-Que es tan gracioso?
-Mira hacia arriba. Muérdago.
Me quedo callada, recordando la tradición del beso debajo del muerdago y miro nuevamente al resto del lugar. Pero Malfoy me toma de la barbilla y se acerca hasta estar unos pocos centímetros de mis labios.
-Puedes rechazarme si quieres, no hay problema, entiendo si no
Sin saber porque me adelanto mas hasta tocar sus labios con los míos. Que me pasa? Estoy besando a Draco Malfoy, la persona mas detestable de Hogwarts. Pronto se acerca mas a mí y me atrae hacia él, acariciando mi espalda, que estaba semi descubierta por el vestido.
Miro al lado mío pero Hermione no está. Helena sigue hablando y no se da cuenta de que no la escucho. No se calla nunca. Solo me limito a asentir de vez en cuando.
-Hola Harry, me extrañaste?
-No tengo ganas de hablarte Ginny.
-Como quieras.
-Helena, has visto hacia dónde se fue Hermione?- Helena se quedó callada y miró a Ginny por un segundo, entonces la pelirroja habló.
-Se fue con Malfoy a hacer quien sabe qué, jaja.
-No digas tonterías, Hermione y Malfoy?
-No me creas si no quieres, pero es un rumor desde hace tiempo que duermen juntos. Por qué te mentiría?
-Porque eres tú.
-Harry, cierto es. Yo los vi juntos en un aula vacía- aporta Helena.
-No puede ser
-Si puede, hace bastante duermen juntos, claro que cuando Hermione se puso de novia con Seamus, no pasó nada-dice Ginny- Pero puedes preguntarle a cualquiera, hace tiempo que se los ve por el castillo. Incluso Ron los vio si no nos crees a ninguna de las dos.
Por eso el collar? No, no puede ser. No puede ser. Hermione me hubiera dicho.
-Permiso.
Me levanto y voy hacia afuera. Camino y camino. Por qué Hermione no me diría nada? Por qué Malfoy? La persona mas idiota de todo el mundo por debajo de mi primo. No es posible.
-No-susurro viendo la escena frente a mi. No se cuando fue que decidí mirar hacia delante, pero lo hice y lo que estoy viendo ahora confirma mis dudas.
Draco tenía sus manos en la espalda de Hermione, su espalda descubierta por el vestido mientras la besaba. Nadie que no la conociera íntimamente tocaría tanta piel sin pedir permiso, aunque sea su espalda. Sin aguantarlo mas me doy vuelta y me voy, directo a la sala común a darme una ducha y dormir, mañana será otro día.
-Perdona, no se porque hice eso, no debería haberlo hecho-digo separándome de él.
Es curioso, me siento mal por besar a Draco, pero fue un impulso, su perfume, el momento, la noche, la Navidad. En otras circunstancias me hubiera encantado, ahora no se siente bien. Le sonrío lo mejor que puedo, le deseo buenas noches y salgo de ahí lo mas rápido posible. Estúpida Hermione, Por qué?
-Dulces sueños, Granger.
Si, el minuto mas esperado en donde no recuerdo nada, quédate mas. Una imagen del muerdago y de Draco. No te vayas!. Mas imágenes del día anterior llegan a mi mente hasta que están todas presentes como un álbum completo. Maldita sea
Me incorporo en la cama, abro mis cortinas lentamente. No hay nadie en la habitación.
Voy hacia el baño, prendo el agua caliente de la ducha y sin esperar a que se caliente del todo me meto dentro.
Luego de secarme el pelo y peinarme un poco, me pongo unos jeans, unas zapatillas y un sweater y bajo las escaleras.
Harry esta sentado en el sillon, mirando las llamas. Voy hacia en sillón y me siento a su lado.
-Como la pasaste ayer en la noche?- pregunto mirando lo mismo que él.
Sin dejarme terminar la frase, sin siquiera mirarme, se levanta y camina rápido hacia el cuadro, dejándome hablando sola.
-Contraseña?
Escucho un susurro, como el cuadro se hace a un lado y como vuelve a donde estaba. Nada más.
Hola, primero que nada, gracias a todos los que dejaron sus reviews. Perdonen por la tardanza, como siempre. Espero que les haya gustado este capítulo, se que tiene muchas cosas extrañas, pero son parte de la historia. Felices Fiestas. Un abrazo a todos, nos vemos!