QUE ENREDO Y TODO POR EL ALCOHOL

Por Mary Martín

CAPITULO 1

Y SE VA A PONER PEOR

¿Han notado como algunas veces nos va tan mal que llegamos a pensar que ya no nos puede ir peor ¿Y la forma en que las cosas se complican todavía más hasta llegar al punto de querer aventarse a las rieles del tren o imitar a Seiya y aventarse a un barranco? Pues Shun se sentía así a veces, sobretodo por cierto amigo que últimamente había dedicado todo su tiempo a hacerle la vida de cuadritos y también estaba su novia con la cual había discutido ayer… pero bien dicen por ahí que lo mejor de una pelea entre una pareja… es la reconciliación…

– Shun… Shun… – lo sacudió con más fuerza logrando que entreabriera los ojos – … despierta ya dormilón…

– June… buenos días…

Respondió ahogando un bostezo y virándose sobre su costado para poder mirarla mejor y aunque pasaron toda la noche abrazados él por su parte podría quedarse así con ella para siempre y… ¿Mmm? Se preguntan que hacen Shun y June despertando juntos en la misma habitación… pues ustedes que creen

– …y… ¿Qué hay para desayunar?

– No tengo ni la más mínima idea – respondió ella sonriendo

– Uhm, que mal… entonces tendré que salir a ver que encuentro… – hizo el intento de levantarse pero un repentino ardor en la barbilla le hizo llevarse la mano a ese lugar – ¡Auch!

– ¿Todavía te duele mucho?... te juro que cuando vea a Hyoga voy a romperle toda su mandarina en gajos y si vuelve a ponerte un solo dedo encima le voy con el chisme a Ikki para que lo incinere vivo…

– Que tierna eres por defenderme, pero no es necesario, estoy seguro de que el problema que tuvimos ya está solucionado pero lo que si lamento es que hayamos tenido que llegar hasta los golpes… pero ya olvidémonos de eso y mejor aprovechemos que mi nii-san no está para pasar un rato más juntos… y por cierto… ¿Ya te he dicho que te ves hermosa?

– Mmmm, como veinte mil veces… pero gracias de todos modos… tú también te ves muy atractivo con esos boxers de Bob Esponja

– Estoy hablando en serio – se quejó sonrojado

– Yo también – le da un beso. De pronto escucharon que alguien entraba al depa.

– ¡Shun! ¿Dónde te metiste? – gritó cierta persona desde el primer piso

– ¡Nii-san!

– Shun ¿No dijiste que volvería el viernes ¡Ay Dios! ¿Ahora que hacemos?

Shun sale de la cama de un salto, la única salida era la puerta principal y obviamente no podía salir por ahí sin que Ikki se percatara de su presencia pero por otro lado si los descubría juntos entonces ya podían ir escogiendo que flores querían para su funeral…

– ¡Viene para acá! – le dijo June – Escóndete debajo de la cama

– Pero esta es mi habitación y mi hermano se va a preguntar qué estás haciendo aquí... además él puede sentir mi cosmo… – Ikki seguía llamando a Shun y su voz cada vez se oía más y más cerca, a estas alturas debía estar subiendo las escaleras

– ¿Ahora que hago? No me puedo ir vestido así

– Desvestido dirás... pero ni modo no te queda de otra, salte por la ventana – bueno, esa era la única solución posible, el chico recoge su ropa y trata de borrar toda evidencia. De pronto la puerta se abre de golpe

– ¿Dónde estás?

– ¡Ah! - Shun estaba a punto de salir por la ventana, tenia los ojos cerrados esperando que June le diera un beso de despedida pero en lugar de eso ella le dio un empujón tirándolo pisos abajo justo a tiempo para que Ikki no se percatara de su presencia

– ¿Qué fue ese grito? – preguntó Ikki extrañado

– ¿Grito? ¿Cuál grito? – dijo June alegando demencia, en seguida podemos oír más gritos y un montón de ruidos y golpes allá afuera porque el chico azotaba contra todas y cada una de las ramas de un árbol

– ¿Y esos ruidos?... un momento… ¿QUÉ HACES TÚ EN EL CUARTO DE MI OTOOTO?

– Este... pues... es que estaba... limpiado su cuarto, sí, eso

– ¿Y Shun? – preguntó con desconfianza

– Debe andar por ahí, cuando lo vea le diré que lo estas buscando – después de lanzarle una mirada categórica a la chica, Ikki salió de la habitación sin haberle creído una sola palabra. Ella enseguida corre a la ventana y voltea hacia abajo para ver si su novio todavía estaba vivo - ¡Shun! ¿Estás bien?

– Claro, mejor... imposible – dice el pobre levantando el pulgar pero en realidad estaba muy magullado –...pero pudiste haberme avisado que me ibas a aventar desde el segundo piso ¿No?

– Bueno, tu hermano ya se fue, ven rápido

Luego de eso y después de recuperarse del golpe, Shun se quedó unos momentos más allá afuera dando tiempo suficiente a que Ikki se fuera hasta su casa que por cierto estaba a dos casas de la suya, todo con tal de tenerlo bien vigilado, después intentó entrar sin dejar huella... pero era demasiado tarde...

– Ajá, ahí estás – dijo Ikki que se había quedado rondando el lugar

– ¡Nii-san! Este... ho-hola ¿Cómo estás? – respondió nerviosamente

– Shun ¿Qué estabas haciendo? – preguntó viéndolo de manera sospechosa

– ¿Yo?… pues… pues… salí a correr como todas las mañanas…

– ¿En calzoncillos?

– Este... sí, es que hace mucho calor…

– Shun, estamos a 5 grados bajo cero

– ¿De veras? No me digas... no lo había notado y... ¿Qué se te ofrece?

– Vine a preguntarte si sabes que le pasa al pato loco

– ¿Por qué lo dices?

– Es que hace rato...

– Flash Back –

Ikki estaba entrenando en el patio de su casa y le daba con todo a un pobre árbol que ya estaba a punto de caer, entonces el pato...digo... Hyoga, lo vio y pensó que ya se había enterado de que el día anterior se había peleado con Shun porque lo había visto muy acaramelado (Según él ) con su novia Trem, y creyendo que ya lo sabía todo, pensó que Ikki estaba entrenando para matarlo por haber golpeado a su hermanito. Luego se le acercó...

– ¡NO! – dijo Hyoga suplicando de rodillas – Por favor, ten compasión de mí... – Ikki lo volteó a ver como si fuera un bicho raro

– Te juro que no lo vuelvo a hacer

– ¿Qué rayos te pasa?

– No era mi intención, todo fue un mal entendido... – continuó diciendo sin percatarse que Ikki lo miraba con cara de¿Ya se te fueron las cabras al monte?

– Pato ¿Ya te volviste loco o qué?

– Ten piedad de mi, por favor te lo suplico, yo... ¿Eh?... un momento ¿Todavía no lo sabes?

– ¿Qué cosa tengo que saber?

– Je, je, no... nada… bueno ya me voy... adiós – sale corriendo como alma que lleva el diablo e Ikki se queda con los ojos abiertos de par en par y sin haber entendido lo que sucedía

– Fin del Flash Back –

Ikki había terminado de narrar lo sucedido, Shun respiró aliviado ya que por lo menos su hermano no sabía nada de lo que estaba pasando y eso significaba que ellos podrían seguir vivos mínimo unas cuantas semanas más, pero también preocupado porque Hyoga estuvo a punto de echarlo todo a perder, uff lo bueno es que no pasó a mayores..

– … así que quiero saber si tú sabes que se trae

– ¿Yo? No... ¿Por qué habría de saberlo? Tal vez ya se le botó la canica por tanto golpe que le das

– Eso pensé... bueno, nos vemos al rato – Shun ya estaba más tranquilo y se disponía a entrar a su depa pues creyó ya haberse salvado pero de repente Ikki regresó – Oye otooto, por cierto……. ¿QUÉ RAYOS ESTABA HACIENDO ESA MUJER EN TU CUARTO?

– ¿Mujer? ¿Cuál mujer?

– ¿Cómo que cuál? Pues a la que tienes viviendo en tu casa ¿Acaso hay otra?

– Sí... digo... no, lo que quiero decir es que pues ella vive aquí y puede andar donde le plazca, no tiene nada de malo, además estaba... estaba...arreglando mi cuarto, sí eso…

– ¿Y tú cómo sabes? ¿No dijiste que estabas corriendo?

– Este... pues sí, pero ¿Qué otra cosa podría estar haciendo ahí?

– Mejor no te digo que cosa podría estar haciendo ahí... pero bueno voy a hacer como que te creo, pero más te vale que no me la encuentre cada vez que venga porque sino no respondo, esta bien que sean novios y todo lo que quieran pero ya te dije miles de veces que no es correcto que estén viviendo juntos y por eso mismo es que no voy a dejar de estar cuidándolos ¿Entendiste? Bueno, ya me voy y mucho cuidado con lo que hacen…

– Sí nii-san, que te vaya bien

Pues sí, a pesar de que a Ikki todavía no le terminaba de cuadrar la idea que su hermanito ya no era más un niño y que ahora estaba haciendo su vida solo, tenía que resignarse a que tarde o temprano tendría que darle su libertad… pero eso era tan difícil considerando que June no era del todo de su agrado… él pensaba que ella era una pervertidora de menores, asalta cunas y demás sinónimos, derivados y compuestos. Sin embargo Shun y June se las arreglaban siempre para estar juntos… pero… no todo en su relación era miel sobre hojuelas.

– Hola Shun ¿Por qué traes esa cara?... ¡Ay no! No me digas… June y tú se pelearon de nuevo ¿Cierto?

Preguntó Seiya que recién llegaba corriendo puesto que se le había hecho tarde para llegar a clase. Él y Shun estaban estudiando sus especialidades de medicina y las ramas que escogieron eran muy similares, mientras que Shun había escogido la carrera de pediatría, Seiya había optado por la obstetricia. Me pregunto a que loco se le habrá ocurrido aceptar a Seiya en la facultad de medicina, yo ni loca dejaría que me atendiera semejante doctor. La cuestión es que él bien sabía que los problemas entre Shun y June cada vez eran más y más frecuentes y sinceramente no entendía por qué además que todos los consideraban la pareja perfecta y sin embargo ya no era nada raro verlos pelear...

– Pues… me temo que sí… – contestó Shun tristemente – te juro que no la entiendo, yo nunca le doy motivos pero siempre se pone celosa por todo, no puedo mirar ni mucho menos hablar con una chica porque enseguida quiere venir a masacrarme… ya le dije un millón de veces que a la única que quiero es a ella pero al parecer no me quiere creer… – en eso pasa junto a ellos una linda muchacha de cabellos negros y ojos azules que era la actual novia de Hyoga y por la cual se habían peleado Shun y él el otro día, ella llegó como siempre a saludarlo…

– Hola Shuny ¿Cómo estás?... – lo abraza efusivamente y le da un beso en la mejilla

– Trem, ya te pedí de favor que no hagas eso y menos aquí en la escuela – Shun se apartó de ella en seguida y la miró como si fuera un verdugo a punto de ejecutarlo – a menos que quieras verme bien muerto lo mejor será que sólo me saludes de lejitos, de preferencia a 10 kilómetros de distancia o más si es posible…

– Ay Shun, no me digas que June sigue con sus tontos celos, ella ya debería saber que tú la amas y a pesar de que a veces es un tanto agresiva yo se que muy en el fondo ella es buena y tierna

– Pues a de ser muy en el fondo – comentó Seiya a lo que Shun respondió mandándole una mirada asesina para advertirle que mejor se comprara una alcancía y se ahorrara sus comentarios

– Ok, Shun ¿Me estás diciendo que no puedo llegar de improvisto y abrazarte así? – preguntó con toda la intención del mundo mientras se colgaba literalmente de su cuello – ¿Y que tan poco puedo saludarte con un beso tierno en la mejilla? Algo así como esto…

– ¡Trem! – ella lo estaba haciendo a propósito y en broma pues le encantaba hacer que Shun se pusiera colorado pero no contaba en que alguien se iba a aparecer de repente por ahí

– ¡SHUN! ¿PUEDES DECIRME QUE ESTÁS HACIENDO CON ESTA TIPA? – Shun se giró lentamente con Trem todavía aferrada a él y mirando a June con una sonrisita culpable

– Este… ho-hola amor… ¿Cómo estás? – la saludó con un movimiento de mano

– Bien cielito pero… ¡NO RESPONDISTE MI PREGUNTA!

– Creo que mejor nos vamos y los dejamos solos ¿Verdad Trem? – dijo Seiya en un intento desesperado de evitar una catástrofe y tratando de despegar a Trem de Shun pues se le había pegado peor que una sanguijuela

– No, yo no me voy de aquí sin antes de haber hablado con esta señorita, y quiero que me digas de una bendita vez por qué no puedes entender que el que seas la novia de Shun no te da derecho a prohibirle tener amigas, eso no tiene nada de malo – dijo haciéndole frente a June que a estas alturas ya tenía una venita saltada en la frente y apretaba sus dientes con tanta fuerza que casi se le rompen mientras pensaba la forma más dolorosa y lenta de acribillar a esa niñita fresa que siempre andaba pegada a su novio

– ¡Óyeme! Tú no eres nadie para decirme como debo ser con mi Shun… no me molesta que tenga amigas pero lo que si me enferma es que tenga que lidiar con tipas resbalosas y ofrecidas como comprenderás…

– Bueno, eso dices tú… pero Shun es el que decide con quién quiere estar y con quien no… talvez lo que ha él le hace falta sea una chica cariñosa que le de la libertad que se merece, deposite toda su confianza en él y que no le haga la vida imposible con escenitas de celos cada 5 minutos… – ¡Uy! Eso si había sido una indirecta muy directa para June. Shun empezó a temer por la vida de todos los presentes pues Trem tenía la gran habilidad de hacer enfadar a June con demasiada facilidad

– Este… chicas ¿Por qué mejor no nos calmamos? No es para tato, de hecho ya se nos hizo tarde… ven June… – dijo tratando de apartarla del lugar pero ella oponía resistencia, no quería irse de ahí sin antes haberle tumbado mínimo 3 dientes a la tipa esta que ya se había ganado una buena paliza

– Sí June, ve con él y no te le despegues, no vaya a ser que te lo roben en el camino – siguió diciendo Trem sin importarle que June empezó a elevar su cosmo hasta quien sabe cual sentido y un aura maligna la rodeaba. Para desgracia de todos pero sobre todo para Shun, en ese instante llegó Hyoga como siempre a complicar más las cosas…

– ¡SHUN! ¿NO TE HE DICHO QUE NO QUIERO VERTE CERCA DE MI NOVIA?

– Oye Hyoga – intervino Seiya – ya ni la amuelas, solo faltabas tú para terminar de arruinarle la mañana al pobre de Shun ¿No te parece que ya tiene suficientes problemas con que June quiera asesinarlo porque lo acaba de encontrar abrazado con Trem?

– ¿ESTABAS ABRAZANDO A MI NOVIA?

– Seiya… de pura casualidad ¿No has oído esa frase que dice "Calladito te ves más bonito"?

– Trem ¿Qué tienes que decir a todo esto?

Le reclamó Hyoga mucho más que enfadado. Bueno, eso era todos los días y Shun ya se estaba cansando de los tontos celos de su amigo y de que June no confiara en él pues tenía la tonta idea de que le era infiel con Trem, que sinceramente a él le agradaba mucho y se la pasaban muy bien juntos pero a ella últimamente le había dado por tratarlo muy cariñosamente… demasiado a decir verdad y eso le estaba empezando a preocupar pues lo que pensó era una locura de June al creer que Trem quería todo con él y que se lo quería quitar… ahora le parecía que en eso había algo de verdad…

– Oye Hyoga, quizá deberías enseñarle a tu noviecita a no andar de ofrecida con mi Shuny…

– ¡QUÉ! Más bien tú eres la que debería amarrarle las manos a tu novio para que no se quiera pasar de listo con Trem – genial, ese era el segundo raund donde June y Hyoga trataban de asesinarse mutuamente… pero debido a que Shun ya tenía mucha experiencia en este tipo de situaciones, sabía perfectamente como evitar una catástrofe mundial…

– June… – dijo colocándose entre ella y Hyoga que ya empezaba a echar rayitos por los ojos – … oye amor ¿Vas a quedarte aquí toda la mañana discutiendo con él… o prefieres venir conmigo aprovechando que tenemos el resto de la hora libre? Es que ¿Sabes? Se me ocurre un par de cosas que podríamos hacer tú y yo esta tarde… – le susurró suavecito y muy cerquita para después darle un beso en los labios, June se quedó sin defensa ante esa proposición…

– Bueno… ya que lo pones así… vámonos… – se lo lleva casi a rastras del lugar. Bien, un día menos de discusiones y celos sin sentido pero Shun sabía perfectamente que al día siguiente sería peor.

Era tan mala la situación que Shun estaba considerando seriamente comparase otro departamento para tener a donde ir en esos días en que a June se le metía en la cabeza un montón de ideas locas y que terminaba siempre echándolo de su propia casa, a veces se iba a dormir con Seiya pero su casa era un caos total además que este roncaba como si fuera un tractor descompuesto. Uno de esos días, June se fue de shoping con sus amigas y Shun se había quedado solo en su depa, era sábado y como niño bueno que era ya tenía la tarea lista por lo que no teniendo nada que hacer se sintió terriblemente aburrido… más su aburrimiento pronto se convertiría en otra cosa ya que oyó que tocaron el timbre y levantándose rápidamente bajó a ver quién era… pero lo que vio lo dejó de a seis pues habría esperado encontrarse cualquier cosa menos eso que estaba ahí…

– ¿Kanon? ¿Qué estás haciendo aquí?

– Hola Shun, puedo entrar ¿Sí verdad? – sin esperar a que le respondiera lo hizo a un lado y pasó hasta la cocina con unas maletas en la mano – oye, que lindo está tu depa se ve muy cómodo… bueno voy a ir al grano… tengo que pedirte un favor…

– ¿Por qué presiento que esto no me va a gustar nada? – bueno para algo le servía a Shun el sexto sentido y no estaba nada equivocado pues lo que le fue a pedir Kanon era como para pegarse un tiro en la cabeza – A ver… déjame ver si te entendí… ¿Estás diciendo que te quieres quedar a vivir aquí en mi depa unos dias?...

– Así es…

– ¿Me pides además que no se lo diga a nadie y que se di casualidad me preguntan si te he visto yo alegue demencia y diga que no?

– En efecto…

– ¿Y que por si fuera poco si algún día tienes visitas a media noche yo tengo que desaparecerme y salir de mi propia casa a dormir bajo un puente o algo así hasta que a ti se te pegue la gana y me permitas regresar a mi depa?

– Exacto…

– Sólo una preguntita más Kanon….. ¿ACASO ESTÁS DEMENTE? Sí mi nii-san se llega a enterar me va a dejar como chancla revolcada, capaz que me cocine vivo…

– Vamos Shun, no es para tanto… Ikki no es problema porque convenientemente se fue de viaje esta mañana, por cierto te dejó una nota que yo amablemente leí por ti… y ya sin ese obstáculo no tendrás problemas en recibirme en tu casa… yo se que eres un chico muy bueno y bondadoso y te apiadarás de esta pobre alma desamparada… ya ves que me corrieron de mi casa porque el sacrosanto de mi hermano se molestó conmigo y todo por un pleito que hubo en una de mis acostumbradas pachangas… pero no te preocupes que sólo serán dos días mientras termino de firmar los papeles del depa que me acabo de comprar que esta convenientemente cerca de aquí

– ¿Y si me niego qué?

– Pues yo… ¿Cómo decirlo?... no sé… tal vez te golpearía violenta y sanguinariamente hasta que mis puños se hincharan, tal vez te colgaría boca abajo de un árbol y te usaría como piñata, o simplemente cuando menos te lo esperes podrías tener un accidente muy aparatoso que te mandaría una buena temporada al hospital de tu preferencia o ya de plano a la morgue… sí, tal vez eso pasaría…

– ¡Glup! Este… por eso digo que… ¿Prefieres la habitación de arriba o la de abajo?

– Bien, ya nos estamos entendiendo

Tremendo problemón, como si no tuviera suficiente con lo de Trem que siempre andaba acosándolo, Hyoga que como resultado de eso quería matarlo y June que… un momento… ¿Qué iba a pasar con June?

– Espera, es que hay algo que no te he dicho… este es mi depa pero no vivo sólo aquí sino con…

– Hola Shun ¿Me extrañaste mucho? – dijo June que recién entraba por la puerta principal. Kanon la volteó a ver y se quedó con la boca abierta, una sonrisa pícara apareció en su rostro al entender porque había una chica en el depa de Shun

– ¡Wow! Que guardadito te lo tenías y con esa carita de niño bueno, santo y puro que tienes nunca me lo hubiera imaginado…

– Shun ¿Y este quién es? – preguntó ella confundida

– Bueno… pues…

– Shun ¿No me vas a presentar a la señorita? – preguntó Kanon llegando hasta donde estaba June y acercándose tanto que la acorraló contra la puerta y apoyando su mano contra la pared para que no se le vaya a escapar, June sólo lo miraba con cara de ¿Wath? – es muy bella… ¿Acaso es tu amiguita?

– No, es noviecita y ni se te ocurra acercártele – dijo seriamente poniéndose entre los dos y empujando ligeramente a Kanon

– Ah, mira nada más… – dijo retrocediendo un poco pero sin dejar de mirarla de pies a cabeza – felicidades Shun, tienes muy buen gusto… tú novia esta hecha todo un bomboncito… creo que nos la vamos a pasar muy bien los tres juntos…

– ¿LOS TRES?

Ahora si que Shun estaba en shock total, de todos los caballeros dorados que había tenía que toparse precisamente con Kanon que no solo le había pedido amablemente asilo en su casa si no que además de todo estaba coqueteando descaradamente con su novia… no sabía porque pero tenía el ligero presentimiento de que su vida se iba a convertir en un caos total…

Continuará...