"Hechizo Invisible"

- Epílogo -

'Noche de Luna Llena'

La noche era clara y callada.

Una pareja compuesta por un hombre alto de largos cabellos platinos era acompañado silenciosamente por una mujer cuyos cabellos oscuros resplandecían con la luz de la luna llena.

La caminata bajo el mantel oscuro de la noche ya era una costumbre, desde hace alrededor de tres meses, cuando la mujer del futuro exigió por parte de los sirvientes, una noche libre en el que pudieran descansar y visitar a seres queridos.

Aquella noche, la mujer de ojos azules sorprendió al señor de las tierras del Oeste con una sugerencia inédita: los sirvientes deberían tener un día libre para que pudieran relajarse y disfrutar de su vida, para que al día siguiente regresen al trabajo felices y motivados.

El Taiyoukai dueño de ojos dorados arqueó una elegante ceja ante la incrédula sugerencia. Kagome le mencionó las razones lógicas y comunes, que cualquier persona del futuro estaría de acuerdo, sin embargo, Sesshomaru se mostró extrañado ante la idea, como cualquier otro ser de la perteneciente época. Después de insistentes plegarias y objeciones por parte de ella, al cuarto día el Taiyoukai perdió la paciencia y accedió sólo a la liberación de una noche cada quince días.

La aceptación de aquella petición fue el origen y causa de que cada noche, cada quince días, la pareja del Oeste tuviera la necesidad de salir a cenar, ante la negativa de la oferta por parte de Sesshomaru en que Kagome se ofrecía a cocinar.

La pequeña Rin yacía dormida en la gran mansión, cuidada por Jaken, debido a que su cena era preparada antes de que los sirvientes se retiraran.

"Me pregunto si la pequeña Rin ya está dormida." La dulce voz de mujer se escuchó por la desolada calle.

"Debe estar, ya pasó su hora límite." La voz del Taiyoukai sonó con su usual tono tranquilo y frio.

La mujer sonrió y se acercó a él para tomarlo del brazo mientras caminaban; era una respuesta tan a lo Sesshomaru.

"¿Y que te pareció la cena?" preguntó ella curiosa.

"Aceptable."

Ante la respuesta, Kagome dejo salir pequeñas risitas ganándose una arqueada de las cejas del Taiyoukai. "No es nada," contestó ella leyendo sus pensamientos antes de volver al silencio de la noche.

Mientras caminaban tranquilamente, Kagome le dio un ligero apretón al brazo derecho de Sesshomaru en muestra de cariño; signo que no pasaba desapercibido aunque él ya estuviera acostumbrado a su presencia y compañía. En respuesta, el Taiyoukai dejó escapar una sonrisa cálida, uno de los privilegios destinados a ciertos individuos importantes para él. Individuos que deseaba proteger.

Ya habían pasado dos años desde que se mudó de los terrenos del Norte para vivir con el hermano mayor de su primer amor. Los días pasaron y aunque fuera un poco difícil de creer, el estar junto al dueño de ojos dorados era una bendición diaria para ella, la miko que vino del futuro para quedarse y disfrutar del pasado.

EL FIN


Aquí un pequeño epílogo de 500 palabras, en muestra de mi agradecimiento a la gente que ha leído mi primer fic de SesshomarxKagome desde el inicio al final.

Agradezco a todas las personas que siguen leyendo a pesar que esta historia culminó hace más de un año y medio (me entero por los stats de la historia xD ) y perdón si encuentran fallas y errores, por el momento mi beta reader esta ocupada y el epílogo salió de la nada después de un sueño.

Konallei // Eternally Asuka