Disclaimer: ¿Para que escribir quien es la poseedora de todo esto? Si todo el mundo lo sabe ya...


Échale la culpa a la primavera

Era culpa de la primavera, Harry Potter lo tenía muy claro.

Los árboles florecían, Los pájaros piaban alegres canciones, el resto de los animales hacía la corte a sus parejas en los extensos jardines de Hogwarts y Hermione le miraba con sus enormes ojos marrones mientras mordisqueaba distraídamente una manzana sentada bajo un árbol.

Harry negó con la cabeza ¿Qué le estaba pasando?

Vio con estupor que Hermione movía los labios, esos precisos y jugosos labios, se movían rápidamente; intentó prestar atención.

"¿Y tu que opinas Harry?"

Que podía decir al respecto. "¿Qué has dicho Hermione?; no te estaba escuchando porque no podía dejar de mirarte" Bien esa era una opción; era fiel a la verdad pero no podría soportar que Hermione le echara una mirada horrorizada. "Opino que eres hermosa"; Sí esa respuesta también era fiel a la verdad pero ¿Podría soportar su joven corazón ver a Hermione sonrojada?; "Opino que debería besarte"; no, esa era demasiado directa así que dijo lo único que podía decir:

"Uh, no sé Hermione"

"Pues me gustaría saber que opinas, bueno da igual; respóndeme esta noche; así empezamos cuanto antes con el trabajo de pociones"

"Claro"; al menos ahora sabía de qué estaban hablando.

"Que tarde es" Anunció Hermione estresada mientras intentaba levantarse y sin soltar ni sus sus libros y la manzana.

Harry se levantó prontamente para ayudarla. La tomó de la muñeca de la mano que sostenía la manzana. Rozar la cálida piel de Hermione le produjo un suave hormigueo en la espina dorsal.

"Debe ser el viento" pensó Harry "un viento inexistente sin embargo" respondió la voz de su conciencia; esa voz que adoptaba el tono y el timbre de la de Hermione.

"Gracias" oyó que decía alguien justo enfrente de él. Sus ojos descendieron hasta posarse en la mirada expectante y el sonriente rostro de Hermione. La tenía tan cerca. Debía soltarla se dijo. ¿Por qué tendría que soltarla si tenerla junto a él era lo que quería? - se preguntó.

Hermione había dejado de sonreír y había pasado a respirar agitadamente¿era posible que su cercanía también le causara dulces escalofríos? Solo había una manera de saberlo.

Método de ensayo y error.

La mano de Harry soltó la muñeca y se dirigió sin prisa hasta la nuca de Hermione la cual acarició con pequeños círculos. Sus dedos se enredaron en su largo y sedoso cabello; acercó lentamente sus labios a los de ella. Dándole tiempo a reaccionar pero sin saber hasta que punto podría soportar que algo interrumpiera ese momento.

Con una intensa inspiración de aire alcanzó su objetivo. Los labios de Hermione semiabiertos por la sorpresa acogieron los hambrientos labios de Harry sobre los de ella.

Hermione soltó sus libros y la manzana bajó rodando la pendiente mientras ella se abrazaba al hombre que la estaba besando con absoluta pasión y ardiente ternura.

Quizá no había sido cosa de la primavera. Quizá los ojos de Hermione tenían en el efecto de un millón de mariposas revoloteando nerviosas en su estómago.