Disclaimer: Absolutamente nada relacionado con Cyborg 009 me pertenece. Esto es un fanfic sin fines de lucro cuyo único propósito es hacer pasar un buen rato.
El Ángel
Tenía que volver a verla. No podía soportar un solo segundo más de la inacabable eternidad, verla llorando. Pero sabía que no debía ser visto por nadie.
Desplazándose sobre el tiempo y el espacio, arropado con delicados tejidos y envuelto por las plumas blancas de sus enormes alas, se adentro en la habitación de su inmortal amor.
Verla dormida, abrazando una almohada mojada que había humedecido con sus últimas lágrimas del día, hizo que sintiera un dolor tan intenso como si le incendiaran el corazón.
Cuantos deseos sintió de gritarle hasta el grado en que pudiera escucharlo, de que había vuelto; de confesarle que ni la muerte lo haría dejar de amarla. Tanto quería abalanzarse sobre ella y tomarla entre sus brazos, despertándola en un lento y prolongado beso, que sólo pudo continuar contemplándola.
Quería mirarla el mayor tiempo posible, así, sin las mejillas enrojecidas de tanto llorar, sin el desconsuelo reflejado en sus hermosos ojos. Tan tranquila e inocente, que pareciera una mentira su luto.
"Quiero decirte, que no tuve miedo al morir"
Después del murmullo, Francoise comenzó a revolverse en su cama y una lágrima broto en su rostro.
"Debías saberlo. No te angusties más por eso"
Una suave brisa agito las cortinas de la habitación, dejando que la luz de la luna se reflejara en la pálida piel de la chica. Enamorando más a ese ángel.
Arrodillándose junto a la cama para intentar besarla, tuvo que contenerse. Había muchas explicaciones que todavía no le había dicho.
"Sólo me dejaron venir dentro de tus sueños. Quería despedirme"
De inmediato, un sobresalto broto del pecho de Francoise.
"Esa noche, no te di ni un adiós"
Y los ojos de Francoise se cerraron con fuerza, doblando sus pestañas.
"Estoy aquí para estar otra vez contigo y besarte por primera vez"
Cómo si pudiera oírle, Francoise levanto su rostro para que pudieran depositar un beso en sus labios.
"Prométeme que serás feliz"
Murmuro el ángel conteniendo sus propias lágrimas, al separarse de ella.
Nuevamente Francoise comenzó a llorar dormida.
"Basta... Eres tan hermosa cuando estas sonriendo, que es como quiero recordarte"
Las lágrimas se detuvieron y una tímida sonrisa floreció desde la tristeza Francoise.
Las horas transcurrieron y el ángel satisfecho por su visita, admiraba sonriente los primeros rayos del sol filtrarse por la ventana, iluminando tenuemente la habitación.
"Hoy en la noche, pregunta al cielo si esto fue un sueño, que yo te responderé por última vez convirtiendomenuevamente en una estrella fugaz"
Mirándola con ternura, se puso de pie y comenzó a arroparla, convencido de que había conseguido curar el corazón de Francoise.
…Joe….
Suspiro Francoise sin poder abrir los ojos.
"Tengo que irme. Estas por despertar"
Cuando Francoise abrió los ojos, volteo inmediatamente hacia el sitio donde creyó haber visto un ángel. De pronto, tuvo la sensación de que sus labios latían.
Esa misma mañana, todos en la casa quedaron asombrados por la inesperada alegría de Francoise, que realmente bella, había reanudado sus quehaceres sin ofrecer la mirada llena de lágrimas, que estuvo luciendo durante los siete días posteriores a la muerte de Joe.
Estaba ansiosa por que llegara la noche.
Luego de la cena, Francoise salió a caminar a orilla de la playa y desde un peñasco muy alto, vio una estrella fugaz resplandeciente y extensa, cruzar a toda velocidad la oscuridad.
Acababa de preguntar al cielo por su sueño, confiando en que Joe tenía que haber sido quien curo su corazón, al besarla despidiéndosede ella.
Fin