Hola a todos: pues bien este es el final. Quiero agradecer a Carito (mi editora), a mi gemela Soru y a Ming Gwok por leer, corregir y opinar sobre este fic.

También quiero agradecer a todos aquellos que se tomaron un tiempo para leerme, espero me dejen un último review, u.u , y gracias especialmente a Shadir que me dejó un review en cada capítulo, mil gracias por tomarte la molestia, a Garibola cuyas críticas me sirvieron mucho y a mi amiga Mary, mil gracias por tu apoyo.

Por cierto, tengo un nuevo fic en progreso, ojalá puedan checarlo. Mil gracias.

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CAPÍTULO 12: EL FIN DE LA FIESTA

Shun e Hyoga se perdieron entre las sabanas, habían adoptado la dulce rutina de dormir juntos cada vez que Ikki relajaba la vigilancia lo cual era bastante frecuente ahora que el Fénix se la pasaba comprando flores de loto, tratando de componer poemas, estudiando la vida de Buda y visitando a Shaka

–creo que debemos levantarnos– le dijo Shun al oído y se dispuso a salir de la cama pero el Cisne se lo impidió sujetándolo de la cintura, al parecer quería recuperar el tiempo que había perdido dándole vueltas a su corazón

–¿es necesario?– Andrómeda rió, disfrutaba tanto de su nueva relación que temía que todo fuera un sueño, tocaron a la puerta de su alcoba, era Shiryu

– ya vamos – le respondió Shun, tanto Seiya como Shiryu se habían portado muy amables con ellos, hacían la vista gorda cuando los encontraban en situaciones indecorosas, les cuidaban las espaldas cuando Ikki venía de vuelta porque aunque les había dado su consentimiento para ser novios no le agradaba toparse escenas acarameladas donde el protagonista era Shun; y se las arreglaban para dejarlos a solas con discreción, eran sin duda los mejores amigos que se podía pedir.

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Milo luchaba arduamente pero su enemigo era más poderoso de lo que él esperaba, evadió su ataque y se dispuso a contraatacarlo cuando la voz de Camus lo interrumpió

– ¿aún no terminas de doblar la tienda?– era un regañó típico del francés, hizo a un lado a Escorpio y en unos instantes su tienda de campaña quedó plegada; se habían tomado el día anterior para acampar en las montañas y relajarse a solas, sin embargo era hora de regresar –vamos o llegaremos tarde a la fiesta de Shion y Dokho– añadió pero Milo no se puso en movimiento, por el contrario se quedó petrificado en su sitio contemplando al maestro del hielo

– ¿qué pasa?– inquirió este, Milo sonrió e impulsivamente lo abrazó

– te amo– le dijo y lo besó, con la nieve como escenario, muyadecuado.

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Kanon terminó de acomodar sus últimas pertenencias traídas desde la tercera casa, la mudanza había sido bastante rápida pues Saga se ofreció a ayudar en cuanto supo que su hermano se mudaba y así el segundo Géminis quedó instalado en su nuevo hogar en cuestión de horas

– gracias por la ayuda– le dijo a su hermano

­– espero que te encuentres a gusto– dijo Saga de todo corazón, esperaba que su hermano no tuviera problemas en su nueva residencia... para que no volviera nunca al tercer templo; su gemelo se marchó dejándolo a solas con su "casero"

–bien– dijo este último algo nervioso – te hice lugar en el armario y en el refrigerador, puedes ocupar el gimnasio a la hora que tu quieras y despejé dos niveles del librero y– Aiolia de Leo se interrumpió por la sugestiva mirada que Kanon le lanzaba

–sólo tengo una pregunta

–si adelante

–¿dónde voy a dormir?– Leo fue quién sonrió libidinosamente está vez

–en mi cama por supuesto, ese es tu lugar oficial en este templo.

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Una hora antes de la fiesta Dokho pensaba en lo que estaba por hacer, sencillamente ya había tenido suficiente de la situación y no iba a seguir adelante con ella ni un instante más; lo más importante era hablar claro y por nada del mundo permitir que Shion huyera, así tuviera que amarrarlo de pies y manos, sonrió, amarrar a Shion sonaba muy sexy; se sonrojó al recordar el día siguiente a la fiesta de togas, cuando había entrado a los aposentos del Patriarca para despertar a su amigo y lo halló desnudo en su cama, no pudo sacarlo del mundo de los sueños, se quedó petrificado contemplando la perfección de su figura; desde entonces no había podido dejar de pensar en él pero se daba cuenta de que no se trataba simplemente de un deseo carnal, no quería tener a Shion una vez para aplacar su ansiedad, quería tenerlo siempre a su lado

– tenemos una promesa tu y yo querido Shion.

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Afrodita le daba los últimos toques a su cabello con la secadora causando la impaciencia de Deathmask

–¿aún te falta mucho?– le preguntó, Afrodita le respondió fulminándolo con la mirada, Cáncer se alejó, para ser esposo de ese santo se necesitaba una dotación permanente de paciencia y cálculo avanzado para planear horarios – Cáncerito pásame mi brazalete– oyó que lo llamaba, se encogió de hombros y tomó la joya de encima del enorme tocador, mataría sin pensarlo dos veces a cualquiera que lo llamara con aquel estúpido apodo pero tratándose de Afrodita –Cáncerito– sonaba inclusive adorable.

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Saga se dirigió rumbo a la cámara del patriarca andando lo más lento posible, no tenía ganas de llegar a la cima, a la fiesta, estaba consciente de sus últimos errores y de las palabras dichas por Mu una noche antes; lo peor de todo es que aún estaba pendiente la maldita disculpa, estaba seguro que Aldebaran y Milo seguro lo atosigarían de un lado a otro hasta que cumpliera su promesa; y él no tenía ganas de explicar el porqué de su negativa a cumplir su palabra. Suspiró apesadumbrado el gran portal que indicaba los aposentos de su líder supremo estaba frente a él, se decidió y abrió, no quería encontrarse a Mu, no podía predecir lo que pasaría entre ellos. Frente a Saga se abrió el gran salón llenó de adornos, con los pretorianos sirviendo de meseros moviéndose entre pequeñas mesas acomodadas en torno a un espacio abierto a modo de pista, una gran manta colgaba sobre el trono de Shion, rezaba "Fiesta Pre Vuelta al Celibato", vaya cosa, si Athena pudiera ver eso

– bienvenido Saga – le gritaron, volteó, vio entrar al gran Patriarca al recinto – sólo faltabas tú– el antiguo guardián de Aries llevaba su túnica blanca, ídem indispensable, pero había omitido los rosarios y collares, los guantes y otros artilugios, lucía sencillo, casi humano, se dirigió, bajo la mirada de todos sus santos presentes que aún no se acomodaban, rumbo a su trono, uno de los pretorianos llegó a él con una copa, mientras sus compañeros repartían vino entre todos – ¡a la salud de Athena!– exclamó en tono muy alto Shion

– ¡a la salud de Athena!– lo corearon, dicho eso, su última fiesta arrancó.

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Tomándose muy a pecho lo de la salud de Athena, los santos procedieron a emborracharse para que su querida diosa mantuviera su longevidad por siempre, a esas alturas del partido, casi todos andaban emparejados, y si no lo estaban buscaban estarlo lo más pronto posible, como en el caso de Ikki, por ello casi todo el mundo terminó acomodándose en pequeños grupos de una o dos parejas por mesa, viendo eso Saga se acercó a Aldebaran que era de uno de los pocos solteros del lugar. La cena les fue servida, era cordero, el Patriarca se había lucido, Aldebaran empezó una conversación acerca de un proyecto suyo para viajar a América y buscarse un discípulo, Saga lo escuchaba con atención, dándole su punto de vista entre bocado y bocado cuando de pronto se hizo un gran silencio en el lugar, hasta los pretorianos se quedaron congelados en su sitio; todos veían hacía la puerta así que Saga giró la cabeza en su lugar, no necesitaba del codazo que Aldebaran le dio ni de su exclamación para reconocer a la persona que acababa de llegar

– es Mu –.

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El caballero de la primera casa del zodiaco se sintió un poco incomodo ante tal recepción, claro que sólo unos pocos de sus compañeros lo habían visto tras su regreso de Jamil pero no era para tanto; no sabía que su situación con Saga se había convertido en una novela rosa que sus compañeros comentaban por todo el lugar y que seguían como fieles admiradores, buscó a su mejor amigo con la mirada, estaba con Ikki, su instinto le dijo que no era buena idea ir donde ellos, no quería hacer mal tercio con nadie, lo cual era difícil, en eso se dio cuenta que su maestro le indicaba con una mano un lugar junto a él en su mesa, así que se dirigió hacía él, saludó a los compañeros que se cruzaban en su camino, cada quien volvía a lo suyo

– me alegra tu regreso Mu – lo saludó Shion quien se hallaba con Dokho

– veo que ha organizado una cena romántica – le respondió Mu, provocando la risa del maestro de los cinco picos

– no es una cena romántica, aunque si quieres verlo así…– lo cortó el Patriarca señalando con la cabeza en dirección a Saga, quien rió ahora fue Mu, le sirvieron un plato de inmediato, Shion contempló a su alumno, como alguna vez había dicho, aunque en circunstancias bastante distintas, le tenía un cariño especial

– entre él y yo nunca habrá nada – dijo Mu para sorpresa de sus acompañantes; Dokho, al igual que el resto de la Sociedad Secreta de Pervertidos, AC, sentía cierto remordimiento

– Mu hay algo que Shion y yo debemos confesarte – empezó

– ya lo sé todo – lo atajó Aries que no tenía ganas de que le repitieran la historia que había oído de boca de Kanon

– ¿todo? – dijo Dokho – ¿cómo?

– no puedo revelar eso – respondió Mu

– lo sentimos – se disculpó Shion

– ya no importa, de cualquier modo, no es como si tuviera alguna oportunidad o algo así.

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La cena fue tranquila pero en cuanto terminaron, los peores temores de Saga fueron hechos realidad, se encontró cercado por Shura, Milo, su compañero de mesa Aldebarán, Camus, su propio hermano, Aiolia e inclusive Seiya, Shiryu y Shun, que tenían un aprecio especial hacía Mu

– no lo haré – se adelantó a decir y los dejó con un palmo de narices

– ¿y ahora que le pasa? – preguntó Kanon, pero nadie supo que responder.

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Los de bronce arrancaron a Ikki del lado de Shaka para su último brindis antes del regreso de Athena, se tomaban el retorno de la diosa como si fuera el fin del mundo, así que con gran solemnidad brindaron por ellos y su amistad

– ¿cómo vas con Shaka? – le preguntó Hyoga a Ikki, pues ahora que eran cuñados le había tomado mucha confianza

– no sé – sus compañeros pusieron ojos en blanco

– ¿qué quieres decir? – preguntó Seiya – si tú no sabes como va la cosa¿entonces quien sí?

– supongo que Shaka – les explicó sus dificultades "técnicas" para hacerse del corazón de Virgo, sencillamente no estaba seguro de por donde iba la cosa – al menos sé que le gusta mi compañía– concluyó

– por lo menos tu situación es más favorable que la de Mu – comentó Shiryu, sus compañeros se mostraron interesados en ese tema y algo renuente el Dragón les contó lo que había presenciado en la casa de Géminis la noche anterior –regresó bastante contrariado, tal vez Mu lo desdeñó antes de que pudiera disculparse

–¿por qué haría eso, Mu está enamorado de Saga desde hace tiempo, estoy seguro – dijo Seiya. Shun sintió como una revelación al oír eso, tal vez Mu se sentía inseguro por su condición de cortesana, él se había sentido igual respecto a Hyoga, pero el Tibetano no tenía nada que temer pues Saga le correspondía, aunque, Shun caviló, era muy probable que Mu no estuviera al tanto de los sentimientos de Saga; apretó la mano de Hyoga entre las suyas, había descubierto la felicidad al lado del Cisne, el santo de Aries no merecía menos, decidió hacer algo al respecto.

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Saga se apartó de sus compañeros tras la escena que había hecho, se quedó solo bebiendo vino, en eso las personas más inesperadas acudieron a él: Kanon, Camus y Afrodita

– ¿podemos sentarnos? – preguntó el francés

– si vienen a hablar de Mu, no – el trío sonrió, porque de hecho fueron tras Saga precisamente para hablar de Aries

– venimos a hablar de nosotros – dijo Kanon, y era verdad. Los tres se acomodaron en la mesa, los pretorianos se apresuraron a servirles vino y a rellenar la copa a medias de Saga; como si tal cosa Kanon inició una lista de las cualidades de Aiolia, algunas innecesarias, como el hecho de que fuera joven e insaciable. Afrodita soltó una risita y comentó lo bien que le iba en su vida de casado, en cuanto a Camus, pese a su carácter hermético también tenía buenas anécdotas que narrar; diez minutos después Saga se cuestionaba que se proponían esos tres con ir a contarle todas esas cosas, que francamente a él no le interesaban, aunque lo de Aiolia lo tomó por sorpresa

– ¿qué pretenden?– preguntó a quemarropa

– hermano¿crees que soy un patán infiel y manipulador?

– si– respondió Saga sin ambages

– no más, le he jurado fidelidad a Aiolia – en el rostro de Saga se leía escepticismo puro

– si tratas de convencerme de que puedes cambiar, pierdes tu tiempo, es a tu novio a quien debes ir a contarle esto – la cosa cobraba sentido para Saga, su intuición le decía que esa conversación iba a terminar en un "dale una oportunidad a Mu" y francamente no tenía ganas de eso; Afrodita iba a decir algo pero Saga no lo dejó –disculpen, se me antoja brindar con Shura.

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Capricornio se hallaba solo contemplando la pista de baile, donde Shaka, Ikki, Misty, Argol, Shiryu y Shun bailaban en parejas en ese momento, recibió con gusto a Saga y procedió a empinar copa tras copa con él

– siento algo de celos hacia ellos – comentó Shura de pronto señalando a Aiolia y Kanon que acababan de sumarse a la pista

– ¿celos? – inquirió Saga

– no te ofendas pero tu hermano era excepcional – Saga por poco le da con la botella de vino en la cabeza a Shura ante tan insulso comentario, el español debió notarlo porque se apresuró a añadir – me refiero a su persona, no a sus manías – Saga se calmó – quiero decir que Kanon es tan hermoso, tiene un aire inalcanzable e indómito; y ese cuerpo – Shura estuvo en peligro de recibir de nuevo un botellazo, se percató que lo que acababa de decir también aplicaba a su compañero, después de todo estaba hablando de gemelos – perdón, quise decir

– ya entendí Shura – lo atajo Saga, algo apenado

– Aiolia es afortunado – ¿afortunado, los pensamientos de Saga hicieron eco a esa última palabra, si él fuera Leo consideraría la compañía de Kanon como una maldición

– ¿quisieras estar en su lugar?– Shura se encogió de hombros

– quisiera tener alguien a quien amar – alzó la cuarta copa de la noche – salud.

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La fiesta seguía y seguía, los esposos fueron el centro de atención cuando algo entrados en copas bailaron un atrevido tango dedicado al gran Patriarca, más de uno se preguntó si el tiempo que pasaron en el otro mundo lo invirtieron en tomar clases de baile, el final de la canción fue con un beso y las obligadas rosas rojas de Piscis. Recibieron una ovación por su actuación

– me pregunto si Milo y Camus también montaran un numerito – comentó Dokho – deberían hacerlo, algo de patinaje sobre hielo o una cosa así – Shion rió, se imaginó por una milésima de segundo al más serio de los ochenta y ocho interpretando tal cosa

– ni siquiera por la vida de Athena – murmuró. La pista se quedó vacía unos instantes cuando de pronto Kanon la ocupó con su presencia, las miradas cayeron sobre Aiolia porque claramente su pareja iba a hacer un baile; Leo se sonrojó hasta las orejas y clavó la mirada en el ex Dragón del mar, quien ejecutó algo muy distinto a lo que había hecho durante la fiesta de togas, ni siquiera Saga conocía ese lado de su hermano. Tras la actuación de Kanon que ocasionó múltiples burlas para su pareja respecto a la flexibilidad de dicho santo, la pista volvió a quedarse vacía.

– Shaka e Ikki quizá se animen a hacer algo – Shion negó – o quizá Shun y Hyoga decidan plagiar el número de Camus y patinar – Shion negó de nuevo – en ese caso¿qué tal si vamos tú y yo?– Dokho sonrió de manera adorable y encantadora, según él, pero el Patriarca se negó

– no bailo – aclaró

– eso no importa – dijo Dokho y tomó la mano de su amigo, sin darle tiempo a resistirse lo arrastró al centro de la pista, todos los miraban. Los pretorianos tocaron algo lento y romántico, las escasas habilidades dansísticas de ambos quedaron de manifiesto pero nadie se rió, bastaba ver el brillo en los ojos de Dokho para comprender que ahí ocurría algo más profundo, Shion se dejó llevar sintiéndose como un perfecto tonto, afortunadamente para él, el suplicio duró poco pues en un impulso inesperado Camus jaló a Milo a la pista y pronto otras parejas se les habían unido.

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Mu se quedó sin compañía, contempló a su maestro tomado de la mano con Dokho, se veía verdaderamente feliz; Aries ya veía venir una declaración de amor entre esos dos

– Mu – lo llamaron, se trataba de Shun, su pareja no estaba a la vista – quisiera contarte algo – el Tibetano temió que se tratara de otro complot o algo peor pero Shun le sonreía tranquilizadoramente

– tú dirás

– se trata de Saga – Shun le relató el convenio entre la Asociación de Pervertidos Antivirgenes Anónimos, AC, y él – querían que yo acabara con su problema

– lo mismo querían de mí – comentó Mu, ambos se habían visto en la misma situación sólo que al joven Andrómeda no le dolía y a Aries, sí

– yo lo intenté Mu – Shun deseaba que el Tibetano tuviera bien presente que entre Santos de Athena no hay rivalidad de amores – fue antes de que descubriera los sentimientos de Hyoga

– ¿lo conseguiste? – no pudo evitar preguntar Mu

– no – Shun sabía que no era necesario ser muy gráfico – estábamos en ello, lo engatuse pero alguien nos interrumpió

­– ¿quién?

– tú – Aries se confundió

– yo no estaba ahí

– te equivocas, siempre estás en su mente, yo lo besaba y de pronto él te llamó a ti – Shun hizo una pausa para que Aries digiriera lo que le decía – Saga te ama, espera por ti aunque tal vez no se haya dado cuenta

– pero entonces¿por qué? – Mu calló, hubiera deseado poder separar a Camus y Milo para explicarle a Acuario lo que ocurría, si lo que Shun decía era verdad, lo cual no ponía en duda…; "Mu es un cualquiera y no puedo soportarlo" – está dolido – entendió al fin, Shun sonreía

– las oportunidades para ser feliz son tan numerosas como las estrellas en el cielo, pero para obtenerlas hay que tener el valor de ir tras ellas – dijo Shun antes de ponerse de pie y volver al lado de Hyoga.

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Eran las cuatro, nadie se había marchado, algunos como Milo tuvieron que recostarse unos momentos para que se les pasara el mareo, otros como Kanon y Aiolia se perdieron de vista un par de horas y regresaron despeinados y sonrientes; Shaka había pasado la última media hora bailando con su hermano astral, entre ellos había una armonía perfecta, si habían sido amantes hacía ya un tiempo; lo hicieron una sola vez, les bastó para sentirse más conectados que con cualquier otra persona en el mundo y para comprender lo que en realidad eran. Tras ello Shaka no volvió a insinuar que quisiera el cuerpo de Mu pues se había adueñado de algo más valioso para él, el karma de su compañero.

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Saga se sentía más bebido que durante la fiesta en la casa de Tauro, terminó su última copa y se puso de pie, con paso firme avanzó hacía Shaka y Mu, atrajo las miradas de todos sus compañeros los cuales sin darse cuenta se quedaron petrificados expectantes

– Mu – dijo al acercarse, tomó del brazo a Shaka y lo apartó sin ser brusco – quiero pedirte una disculpa – todos a su alrededor contuvieron el aliento

– no entiendo – dijo Aries, quien sentía que lo que estaba pasando no estaba del todo bien

– prometí que te ofrecería una disculpa cuando el último de las cortesanas se regenerara – aclaró señalando a Afrodita; el cual se cruzó de brazos indignado

­– no acepto tus disculpas, ni siquiera sabes porque me las ofreces y si las haces por compromiso a otros ya cumpliste – dijo Mu serenamente, se dispuso a alejarse pero Saga se lo impidió sujetándolo de una muñeca

– entonces permíteme disculparme por mí mismo y por lo que siento – Saga tomó aire, la cabeza iba a explotarle – perdóname por haber asesinado a tu maestro, por haberte convertido en un paria entre los santos durante trece años y por haberte forzado al exilio, perdóname por haber intentado asesinarte durante la última guerra sagrada, por traicionarte y por haber asesinado a tu hermano astral, perdóname por haber afirmado que eras un cualquiera, perdóname por rechazarte cuando intentaste aclarar las cosas conmigo y perdóname porque he sido un estúpido – Mu no supo que decir – por mi parte te perdono por haber jugado conmigo – y es que Saga era de esas personas que siempre tienen la última palabra; dicho todo eso soltó a Mu y salió del salón del Patriarca sin que nadie se atreviera a mirarlo siquiera.

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Shion fue el primero en reaccionar, ese descarriado santo ni siquiera le había pedido disculpas por su asesinato a él que era el agraviado, bajó de su trono hasta su alumno

– ¿qué esperas, ve tras él – le dijo en un murmullo; Mu obedeció en el acto, se giró pero en ese preciso instante Shaka lo abrazó por la espalda, causándole un ataque al Fénix

– todo saldrá bien – murmuró en el oído de Aries y lo soltó.

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Saga no había ido muy lejos en realidad, se había detenido afuera del recinto del Patriarca, contempló el santuario desde ahí, era una vista soberbia

– Mu te he extrañado – dijo para sí mismo, el efecto del alcohol lo tenía en un estado semi inconsciente – he estado celoso todo este tiempo por eso no me acercaba a ti pero creo que…– pensó en lo que sentía – creo que yo te amo – tras él unos silenciosos pasos se detuvieron pero él no lo notó – quisiera tomarte entre mis brazos y robar un beso tuyo

– ¿y por qué no lo haces? – dijo una voz a sus espaldas, Saga se giró, sus reflejos y percepciones se hallaban entorpecidas por la borrachera que había pescado, ante él vio la figura un poco borrosa de Mu

– lo que me faltaba – pensó Saga que no podía creer que tras el numerito montado hacía unos momentos Aries lo hubiera seguido, mucho menos sabiendo que el Tibetano no sentía nada por él – ahora estoy alucinando –. Mu miró a su amor expectante pero Géminis no hizo ningún movimiento de aceptación o acercamiento, la verdad era que a esas alturas Aries estaba un poco harto de tantos enredos y fue por ello que en vista de la falta de acción de su media naranja él hizo el primer movimiento; fue directo hacía Saga eliminando el espacio entre ellos y lo abrazó

– ¿por qué no haces lo que dijiste hace un momento? – inquirió. Géminis por su parte seguía embotado por tanto vino, el toque de Mu le causó escalofríos, aunque sólo se trataba de un simple abrazo, sin darse cuenta bien a bien de lo que hacía atrajo a la angelical aparición hacía sí para besarlo

– espera – se detuvo con sus labios rozando los del objeto de sus deseos – estoy soñando, debo estarlo, después de todo lo que ha ocurrido no puede ser que tú estés aquí para mí

– Saga yo he querido decirte esto durante todo este tiempo… – Mu se vio interrumpido por los labios de Saga sobre los suyos, al partir el beso Géminis se adelantó a confesar lo que sentía

– te quiero Mu, desde siempre y francamente ya no me importa nada de lo que hayas hecho o dejado de hacer en un pasado, porque de ahora en adelante quiero que seas para mí – Mu no pudo evitar ruborizarse ante una petición tan franca, sin embargo no por ello dejó de notar el estado algo inconveniente del hombre que en ese momento lo besaba por lo que se guardó su confesión de amor

– volvamos adentro – pidió

– en un momento más – dijo su amado y lo volvió a besar.

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Dokho estaba listo para su gran jugada, ya eran las seis de la mañana, nadie se había ido aún, no por nada era esa la última fiesta antes del regreso de Athena; empinó la copa número treinta y siete de esa noche, el vino seguía sin hacerle efecto debido a su resistencia adquirida con los años, tras eso se dirigió a Shion que se hallaba en plena conversación con Shaka e Ikki, este último prácticamente se había pegado al hindú como si fuera su sombra tras las disculpas de Saga. A Dokho no le importó que su mejor amigo estuviera cerca de la pista en un sitio donde todos podían verlo, fue directo hacía él

– Shion – lo llamó, el Patriarca volteó hacía el antiguo maestro y antes de que pudiera atinar a decir nada o a reaccionar siquiera se encontró unido por los labios a Dokho el cual no conforme con haberle robado ese beso prolongó la caricia más de lo necesario sujetando por la cintura a Shion para que no escapara, a su alrededor se desataron cuchicheos y finalmente un aplauso iniciado por quién sabe que insensato se dejó escuchar; cuando Shion se recuperó de la impresión tomó a Dokho de los hombros y lo separó de él

– ¿qué haces? – se quejó en un tono más alto del necesario, todos los santos se hicieron los que volvían a sus propios asuntos y por supuesto Virgo y el Fénix se borraron del mapa en el acto

– cumpliendo una promesa – Shion iba a protestar pero Dokho señalo hacía la puerta; Saga y Mu volvían al recinto en ese momento tomados de la mano para alegría de sus amigos – cuando la diversión se termine y las cortesanas se extingan tú y yo seremos pareja¿no fueron esas tus exactas palabras tras resucitar e instalarnos en el santuario?

– si, pero no tenías que cobrarte la promesa así – Dokho se encogió de hombros

– no pude esperar más para probarte – Shion enrojeció de golpe – pero si lo prefieres de otro modo – Dokho abrazó al Patriarca y le susurró al oído –amigo mío y compañero de batallas¿me honrarías al concederme ser mi pareja de ahora en adelante? – Shion rió derrotado.

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Ikki no se despegó de Shaka ni siquiera cuando este se acercó a Mu para felicitarlo por su reconciliación con Saga, tampoco se separó de él cuando Shaka se sumó a los demás santos dorados en un brindis entre compañeros, ni mucho menos cuando el hindú anunció que quería otro trago

– ¿quieres decirme algo¿no es verdad? – preguntó de pronto Shaka dándose cuenta de la extraña actitud del Fénix

– n… si – tartamudeó Ikki, sus compañeros de bronce se habían apostado a espaldas de Virgo y le hacían señas de ánimo atrás de éste

– díselo– leyó en los labios de su cuñado, pero que demonios, él era el Ave Fénix, el más aguerrido y salvaje de los santos de bronce (y probablemente no sólo de los de bronce sino de los ochenta y ocho), había recorrido los infiernos y luchado en el inframundo, había retado a la muerte más veces de lo que Athena podría imaginarse, el rubio no iba a intimidarlo

– Shaka – dijo sonando muy seguro – quiero que sepas que yo… – su autodeterminación se fue por el caño cuando Virgo lo miró a los ojos con aquella mirada que el mismo cielo envidiaba – yo…

– ¿sientes algo hacía mí? – inquirió el hindú, al Fénix por poco le da un ataque, se quedó congelado en su sitio, mudo, tras el santo de Virgo sus amigos y su hermano aún le daban ánimos, su última traza de valor pendía de un hilo, como no respondía el rubio caballero de la sexta casa se alejó

– si – dijo Ikki reaccionando en el último minuto y apresurándose a sujetarlo – si, yo tengo sentimientos hacía ti – Shaka sonrió

– me di cuenta cuando Mu volvió, tus emociones se manifestaron casi a gritos – Ikki se molestó un poco pero eso se disipó de inmediato, así era Shaka

– pero ¿entonces¿qué me respondes?

– no tengo una respuesta – el Fénix sintió que el suelo se abría y caía en un pozo sin fondo – no ahora al menos – eso le hizo volver del pozo sin fondo

– ¿necesitas tiempo? – preguntó esperanzado

– si

– entonces esperare – Ikki sólo deseó que Shaka no le hiciera aguardar hasta su próxima reencarnación

– gracias – dijo Shaka y sorpresivamente besó a Ikki brevemente, los santos de bronce hicieron tal barullo que el rubio se volvió hacía ellos, los cuatro se callaron de golpe y pretendieron no estar interesados en la escena que protagonizaba Ikki, Virgo sonrió y se alejó

– bien hecho hermano – le gritó Shun por encima de la música de fondo.

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Empezaba a amanecer, Shion decidió que ya era hora de dar por terminado el guateque, la cámara del Patriarca había quedado irreconocible e inclusive Dokho y él se sentían cansados a esas alturas del partido, a Saga se le había bajado la borrachera hacía una media hora, se había sorprendido de estar en un plan muy íntimo con Mu y cuando comprendió que todo ese tiempo no había estado alucinando por poco huye a otra dimensión, como fuera, Mu se mantuvo en sus cabales y explicó la situación a su atolondrado enamorado; el amor brotaba por todos lados, sus santos se alistaron para irse, las parejitas se acercaron unos a otros. Camus y Afrodita sostenían a sus respectivas parejas que habían perdido totalmente el equilibrio tras múltiples brindis. Shun y Hyoga se besaban descaradamente frente a sus compañeros de bronce, inclusive frente a Ikki el cual en esos momentos no le interesaba lo que su hermanito hiciera, seguía anonadado por el beso que Shaka le diera. Aiolia y Kanon eran otros acaramelados, los cuales dejaban ver bien claro que les urgía salir de ese lugar para continuar su fiestecita en privado. Misty y Argol se hallaban apoyados uno en el otro y se tambaleaban levemente. Mu y Saga estaban en pie tomados de la mano, sonrojados hasta las orejas y sin mirarse; la bola de solteros aún estaba alegre, Shaka se sumó a Shura y Aldebarán que aunque cansados se veían satisfechos con la celebración; y por último estaba Dokho que aguardaba junto a Shion con esa mirada que anunciaba que tenía ganas de hacer algo muy pero muy malo

– no olviden presentarse a saludar a nuestra diosa cuando mucho al mediodía, no salgan del santuario y procuren no aparecer por aquí con aspecto de crudos o ebrios o – Shion miró a Kanon y Aiolia – demasiado satisfechos – iba a despedirse finalmente cuando una voz atronadora sonó desde las puertas de la cámara

– ¿qué es lo que está pasando aquí? – todos a una giraron en dirección a la entrada¡era Athena, Seiya sonrió mientras él y los demás santos se compactaban contra las paredes tratando de lucir insignificantes y de no llamar la atención de una enfurecida diosa, se prepararon para el regaño que vendría; al menos él podía decir que le había sido fiel a Saori.

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Fin

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A TODOS MIS LECTORES UN AVISO MUY IMPORTANTE:

ESTE ES UNO DE MIS FICS MAS QUERIDOS Y POR ELLO MI GEMELA HIZO UN FANART DE "SAGA Y MU" QUE ENVÍE POR MAIL A TODOS LOS QUE DEJARON UN REVIEW FIRMADO O SU MAIL, SI A ALGUNO DE USTEDES NO LES LLEGÓ Y LES INTERESA POR FAVOR CONTÁCTENME.

LES LLEGARÁ A NOMBRE DE SORU CORONA, POR FAVOR NO LO BORREN.

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yui the vampire:Shiryu y Seiya no son pareja porque Pegaso está enamorado de Athena (que mal gusto en mi opinión), thanx por tu review y por chutarte todo mi fic de golpe; ojala me puedas dar tu opinión sobre el final.

shivatatenshi: espero que al final Mu hayay dejado de ser un bruto en tu opinión, y pues Shaka quedó en veremos con Ikki, y no, Saga no se vengó de la sociedad, en cuanto a Kanon temo que su hermano no le interesaba aunque hubiera sido interesante (y algo pervertido). Tu fic ya lo empece a leer, sorry por no dejar review, no me dio tiempo pero te prometo hacerlo.

Tsuki no Youkai:mil gracias por tu comentario (Sher Jo apabullada por las flores), si me sube la moral saber que etsoy en tu lista de favoritos, que bueno que te gustaron las parejas que se armaron, si te gusta el lemon pusé dos; de Saga pues me esforcé por no sacarlo mucho de personalidad, que te pareció el final, ojalá me puedas dejar un review y pór cierto subí el primer capi de un nuevo fic algo más serio, ojalá puedas checarlo.

Isane-Beta:ya ayude Mu y Saga, que te pareció su reconciliación, cuando terminé el fic me estaba dando diabetes de tanta azúcar, jajaja, espero te haya gustado.

Garibola: pues ya arreglé el asunto de Mu, hice que Saga se disculpara como debía por todo lo que le había hecho, ojala te haya gustado y porfa checa los lemon que puse a ver si te gustan. Y ya tengo un nuevo fic en progreso!.

V.Valentine: no hizo falta golpear a Saga para que admitiera lo que siente (sólo hubo que emborracharlo, jeje) pero ya era justo que sufriera un poquito para que le pagara todas las que hizo a Mu, no crees?. Y pues en el epilogo lo desvirginaron finalmente.

samsaravirgo:los malos entendidos al final se arreglaron, espero te haya gustado el final y los lemon.

Aquarius No Kari: thanx por todo el apoyo, ya empecé una historia más dramatica, porfa checala (Sher Jo hace ojitos de borreguito), ojala te haya gustado el final, estaré esperando por saber que te pareció. Y pues el par de atolondrador finalmente se arreglaron al igual que Dohko y Shion. Te mando saludos y un abrazote.

dameunbeso: que tal, espero que Saga haya dejado la categoría de imbécil y Mu al fin se puso las pilas. Ojala te parezca un buen final.

ayane:sorry por hacer lucir a Saga y Mu tan burris pero que se le hace, son unos ingenuotes, en fin, ya se arreglaron las cosas, sólo necesitaban ser claros (y que Saga estuviera ebrio).

Elena:no hubo necesidad de llegar a los golpes para que ese par se entendieran, que te pareció el final, de verdad, mil gracias por tu apoyo, sé que tal vez sea abusar pero ojalá puedas checar mi nuevo fic en progreso.