Todos los personajes son de la maravillosa JK Rowling.
Releyendo Misión de amor me dio un oso inmenso, lo empecé hace mil años y me gusta mucho la historia en general pero no tanto la redacción así que me di la oportunidad de reescribirlo, espero yo que quede mucho mejor esta vez y con esa renovación con todo gusto subiré el final.
Sin más, espero que disfruten como la primera vez.
Misión de amor
Prólogo
Que toda su familia fuera parte de la Orden del Fénix significaba solo una cosa para su verano: Aburrimiento total. Y en ese verano en especial estaba más sola de lo normal ya que Harry, Ron y Hermione con sus 17 años cumplidos ya podían ser parte de las reuniones en el comedor del número 12 de Grimmauld Place, ella era la única que no podía entrar.
Por lo general se entretenía en la biblioteca repleta de libros con magia oscura que ni siquiera se atrevía a imaginar y era el mejor lugar para evitar el mal humor de Kreacher y las rabietas de la Sra. Black, a Sirius también le gustaba refugiarse en la biblioteca y le contaba con demasiado entusiasmo sus aventuras adolescentes con los merodeadores, a Ginny le gustaba Sirius más que cualquier miembro de la orden.
-Gin, la cena está lista- como invocado por sus pensamientos Sirius aparece por la puerta con un rostro cansado, barba de días y el cabello sujeto en un chongo desprolijo.
-Ya no tengo apetito, gracias- trata de no sonar tan amargada y no descargar su molestia con Sirius, pero le es imposible-la hora de la cena era hace dos horas y media.
-Alguien está de pésimo humor- Ginny rueda los ojos y el merodeador se deja caer junto a ella en el sillón, Klio, el gato de la pelirroja le bufa con molestia por haber sido despertado antes de salir tintineando de la habitación-creo que no le gustó mucho mi olor a perro- logra sacar una sonrisa de la chica-Así está mejor…
-No Sirius, no está mejor, me siento fatal, como toda una inútil, soy la única que no hace nada aquí- Ginny se molesta de nuevo.
-Gin, eres muy…
-Joven aun- lo interrumpe con fastidio- ya estoy harta de su fracecita, sí soy más joven que mis hermanos, pero soy más valiente y mejor con los conjuros que ellos.
-No seas inmadura- le dice Sirius con total con seriedad y descoloca a la pelirroja, nunca le ha hablado así- no eres miembro de la orden y me da mucho gusto- Ginny lo mira dolida- y si hacemos bien nuestro trabajo nunca tendrás que serlo, porque todos allá abajo quieren evitar que la gente que aman viva una guerra, tus hermanos están poniendo su vida en riesgo para salvar la tuya… madura y aprende a valorar eso.
-La guerra no es opción, es un hecho- se levanta airada-está aquí, sobre nosotros y así como todos se preocupan por mí, yo me preocupo por todos- sale de la biblioteca directo a su cama y solo despierta cuando Hermione entra a la habitación a eso de las 2am.
Estando a dos semanas del inicio de curso los días pasan como una eterna tortura, ha recorrido cada habitación de Grimmauld Place, hurgado en cada cajón, y abierto cada puerta; sabe los horarios de todos los miembros de la orden para reportar avances e incluso sabe cada cuanto pasa Kreacher por el pasillo de la biblioteca murmurando insultos, de hecho, ha aprendido de él las peores blasfemias del mundo y usa cada una de ellas para describir la agonía de sus días hasta el 1 de septiembre.
-Cariño pon la mesa, tenemos que comer ya o se hará tarde para la reunión de la orden- Molly mueve la varita sobre las cazuelas con soltura y rapidez, Ginny en cambio con pesadez coloca los cubiertos en la mesa. Pronto todos están reunidos en la mesa, alargada con dos tablones improvisados para que quepan holgadamente.
-Gin, dame el pollo- Ron la codea apuntando a la bandeja.
-Hola- Sirius se sienta a su lado y la pelirroja lo mira con pena.
-Hola- le entrega la comida a Ron- ¿Fuiste a alguna misión? No te vi en varios días.
- Si, algo así- le nota en el cuello la marca enrojecida donde le golpeó un hechizo y tiene la mano derecha en un cabestrillo.
- ¿Estás bien? - tiene una auténtica preocupación.
-Si, algo así-repite con una media sonrisa y Ginny le corresponde. Para su total sorpresa, sacando de la rutina el día, Dumbledore aparece en la habitación y todos detienen lo que están haciendo.
-Buena tarde tengan todos- el profesor se ve sereno en general y habla con amabilidad, pero sus ojos tienen un toque de urgencia- Arthur, Sirius, no puede demorar más esto- Los aludidos se paran con rapidez y los tres suben a prisa la escalera para una reunión más privada.
- Eso sí que fue extraño- Ron habla con la comida aun en la boca, Ginny se gira asqueada hacia su madre.
- ¿Mamá todo está bien o que pasa?
-No lo sé cariño, vi lo mismo que tú- Ron se burla de ella revolviendo su cabello y todos siguen con su cena como si nada. Unos minutos más tarde Molly se une a la reunión escaleras arriba y no regresan en lo que resta de la cena.
-Es bien raro que él venga- murmura Hermione a Harry en lo que recogen la mesa.
-Hay algo que nos ocultan, nos sacaron temprano en la reunión anterior- le responde Harry y Ginny los mira con curiosidad.
-Si cuando vino Bill, no sabemos nada de su misión-Ron pasa con la varita todos los platos al fregadero.
-Tampoco es que sepamos la misión de todos, que las misiones sean personales es por seguridad- responde Hermione y al notar que la pelirroja los mira, cambia de tema- George dejó caramelos lengua larga en el dulcero de la sala y Shacklebolt comió dos, no se le quitó por horas- aunque la castaña les contó con angustia real sus amigos soltaron la carcajada y la pelirroja se contagió momentáneamente de esa risa.
-Ginny, cariño- Molly se asomó por la puerta, sus cachetes rechonchos estaban muy rojos- Ven ¡por favor!
La pelirroja deja la última silla en su lugar y con el mismo asombro en su rostro que en el del trio maravilla sigue a su mamá escaleras arriba. Entra en la habitación de pócimas donde está su padre y Sirius.
-Ok, esto esta raro- sus rostros están contraídos en un gesto de desagrado y preocupación- ¿Qué pasa? - teme por un momento que alguien esté muerto.
-Déjenme a mí- Sirius da un paso al frente- Hemos hablado muchas veces y has querido hacer algo más, ser una miembro activa de la orden- Ginny suelta el aire que venía conteniendo desde que entró y asiente con firmeza- Hay algo, una misión para la que creemos que puedes estar lista.
-No Sirius, no creemos, no pluralices, no todos- replica Molly con preocupación.
-Mamá, tranquila estaré bien.
-Ni siquiera sabes qué es, eres una niña, Arthur es una niña- Molly enrojece aún más.
-Querida, ya lo hablamos-susurra Arthur a su esposa para regresarla a la calma- Ginny, escucha todo antes de aceptar, tu puedes decir que no sin ningún problema.
- ¿Pues qué es? ¿Voy a atrapar yo sola al-que-no-debe-ser-nombrado?
-No juegues con eso Ginevra! – Molly casi grita y Sirius retoma el control de la situación.
-Gin, tendrías que ser una espía- el corazón de la pelirroja se acelera y sin que lo quiera una sonrisa se dibuja en su rostro-una infiltrada en Hogwarts.
- ¿Hogwarts? – solo podía ser infiltrada en un lugar de su escuela- ¿En Slytherin? ¿Espiando a quién? -teme la respuesta, pero si la sabe.
- Malfoy, Draco Malfoy- No, ese cretino, no. Se queda callada demasiado tiempo así que Sirius continúa- Él está con los mortífagos, queremos sus movimientos, queremos saber que tan embarrado está en todo esto. Lucius ya está bajo vigilancia, pero Draco no y es más complicado seguirle la pista en el castillo.
- ¿Cómo sería todo?
- Bill y Tonks ya están dentro, ellos tienen pociones que cambian su aspecto, llevan trabajando en esto ya varios meses y al parecer han ganado un poco de la confianza de Lucius- esta vez responde su papá- en esta historia ellos tienen una hija… ahí entrarías tu.
- Y supongo que todo está arreglado para que quede en Slytherin- los tres asintieron.
-Pero tienes tiempo para pensarlo, puedes decir que no Ginny- Molly en definitiva no está nada de acuerdo con la situación.
- ¿Y qué pasará con Ginny si yo soy otra persona? – ignora a su mamá sin ser grosera, simplemente tiene demasiadas cosas circulando en su cabeza.
-Diremos que se presentó un intercambio a una escuela americana y que por tu seguridad te enviamos- responde de nuevo Arthur, su hija no lo ve tan preocupado y agradece su confianza- tendrás el apoyo de toda la orden cuando lo necesites.
-Bien… yo si quiero hacerlo- decide sin más, era lo que había estado esperando.
-Piénsalo bien- esta vez es Sirius el preocupado- Albus fue el de la idea de que fueras tú la asignada a esta misión y creemos en él, pero es peligroso, si te descubren… es muy peligroso.
- Gracias a todos por su preocupación- lo dice con sinceridad- pero es lo que quiero hacer, sin duda, yo quiero hacer esta misión, Draco Malfoy, la acepto.
Intentaré ir subiendo el resto estas semanas. Gracias!