CAPITULO 4

ABUELITA

Gokuh despertó en el auto cápsula estacionado al borde de la carretera. En el asiento del conductor, su tío Ron examinaba minuciosamente un mapa.

 - ¿Qué sucede? - le pregunto adormilado Gokuh.

 - ¿Eh? - le respondió distraídamente su tío -. Nada, nada. Vuélvete a dormir.

Vegeta también despertó en ese momento, tenia marcas en la cara de que se había dormido sobre su chamarra.

 Vegeta: (Bostezo) ¿Qué pasa? No me digas que nos perdimos.

 - No... no... - respondió Ron, frunciendo el ceño mientras trazaba líneas en el mapa con el dedo índice -. Se perfectamente bien donde estamos. El problema es que no tengo idea de cómo llegamos.

 - ¿Dónde es aquí? - pregunto el chico de cabello alborotado asomándose por la ventana. Segundos después, volvió a sentarse.

 - Tienes razón, tío Ron. Voy a volverme a dormir, y al despertar espero que estemos MUY lejos de aquí.

 Vegeta también se asomo por la ventana.

 - "Bienvenidos a la Capital del Sur" - leyó en un anuncio espectacular - ¿Acaso no es donde viven tu padre y tus abuelos?

 - Si - dijo Gokuh entre dientes -. Tío Scooby, vamonos ya por favor.

 - Quizá debí haber dado vuelta a la izquierda en Albuquerque - dijo sin ponerle atención.

 - Tío Ron...

 - Relájate sobrino. Echemos un vistazo. Es una ciudad grande, tus abuelos nunca sabrán que estuviste aquí. Además, ¿qué tal si encuentras a tu padre primero? ¿Eso no te gustaría? - le sonrió.

 - ¿No has visto "Home alone 2"? Esa también era una ciudad grande, y al niño lo encontraron primero los delincuentes que su mamá...

 Vegeta:...

- Si... también he visto "El día de la independencia" y no por eso tengo miedo de que los extraterrestres vengan a destruir ciudades enteras con un solo disparo de energía.

Mas tarde, cerca de un centro comercial.

 - ¡Sal de ahí de una vez!

 - No quiero, mejor vamonos.

 - Ocean, no seas ridículo. Ya bájate.

 - Pero...

 - ¡Sales ya mismo o te encapsulo con todo y carro!

Mucho mas tarde.

Golpes. Patadas. Una llave. Otro golpe. Bloqueo. Disparos de energía. Otra patada. Y para finalizar, un espectacular rayo de energía salido de las palmas de las manos acompañado de un ruido ensordecedor decidió el resultado del combate.

 - ¡SI! ¡LA VICTORIA ES MIA! - grito Vegeta.

 Gokuh miraba la pantalla sin poderlo creer.

 - ¿Seguro que es la primera vez que juegas? - le pregunto soltando la palanca y sacudiendo la mano. Nunca se había aferrado de ese modo a los mandos al enfrentarse con alguien en los videojuegos.

 Vegeta le dedico una GRAN sonrisa complacida.

 Gokuh: o_oU ¿Qué sucede?

 El otro chico se dio cuenta de lo que expresaba su cara.

 - (Ejem) No lo se -, la sonrisa se borro lentamente, pero conservo un brillo en los ojos -. De alguna manera, encuentro muy satisfactorio darte una paliza...

 - A un lado, sobrino - dijo Ron apartándolo de un empujón -. Te voy a enseñar como jugamos los expertos.

 El fornido tío de Gokuh lanzo una moneda en el aire, la atrapo con la mano y la hizo danzar entre sus nudillos antes de insertarla en la ranura correspondiente.

 Y comenzó un segundo combate, el cual casi le costo al dueño del local una maquina nueva, ya que los contendientes se aferraban a las palancas con todas sus fuerzas y apretaban los botones a una velocidad enloquecedora entre maldiciones y burlas. A este combate siguió otro. Y otro. Y otro mas. Entre pelea y pelea, Vegeta y Ron se miraban con furia, sacando  chispas donde sus ojos se encontraban.

 Gokuh: ^-^UUU Oigan ¿no les parece que se lo están tomando demasiado en serio?

 El espectáculo gratuito había atraído a varios curiosos, que poco a poco fueron empujando a Gokuh para poder ver mejor las peleas electrónicas. El chico de cabello alborotado quedo separado de su amigo y su tío por un gran grupo de mirones.

 - Permiso, permiso, déjenme pasar - murmuro inútilmente. Por los gritos y las maldiciones la pelea debía de estar poniéndose mas interesante.

 Al final se dio por vencido, y decidió dar una vuelta para curiosear por ahí, en lo que al par se les acababan las monedas o los corrían del lugar, lo que sucediera primero.

 Después de entrar y salir de una tienda de artículos para dibujo y pintura, regañándose a si mismo por dejarle su dinero a su tío, quien seguro ya lo habría convertido todo en monedas para seguir retando a Vegeta, entro al siguiente local.

 Decoración para el hogar.

 Jarrones, cuadros, manteles, cortinas, vajillas, etc. Gokuh echo un vistazo rápido a las vitrinas y los estantes, antes de buscar la salida. No había demasiadas cosas interesantes, quizá aun estuviera a tiempo de ir con su tío y pedirle...

 Al dar la vuelta choco con alguien que cargaba un jarrón. Se escucho el ruido que hace un carisimo objeto de porcelana al caer sobre una cabezota.

 Gokuh cayo al piso, viendo estrellas, y escucho una voz.

 - ¡Junior!

 - ¡Si señor! - respondió poniéndose de pie inmediatamente, parpadeando.

 Conforme las estrellas se extinguían, Gokuh pudo distinguir a ciertas figuras frente a el, un hombre mayor con barba, muy bien vestido, una señora de aspecto severo, y una joven, aparentemente la dependienta, quien tenia en su cara la expresión de horror propia de alguien que vio romperse algo que cuesta una barbaridad.

 - ¡Junior! - repitió la voz.

 - Por favor, ya le he dicho que no me diga Junior - respondió Gokuh, reconociendo la voz de su abuelo. Acto seguido, cuando su cerebro ¡Por fin! asimilo la información de su entorno, se dio cuenta de la situación en la que se encontraba.

 "Uy."

Al mismo tiempo que una pieza de porcelana hacia contacto con la cabeza de Gokuh, Vegeta separo los dedos de los botones y miro a su alrededor.

 ¿De donde había salido esta gente y que demonios estaban mirando?

 ¿Y el baka?

 - ¡SI!  - la voz de Ron interrumpió sus pensamientos - ¡YO GANE!

 El "adulto responsable y conductor designado" espero la replica enfurecida de su rival y un nuevo reto, pero nunca llegaron.

 - ¿Qué sucede?

Conociéndolo, la tienda de artículos de dibujo y pintura fue su primera opción para buscarlo, y se sorprendieron mucho de verlo por las vitrinas en el local de junto. Llegaron justo a tiempo para ver a Gokuh deshaciéndose en disculpas por el incidente del jarrón. Ron se dio cuenta de quienes lo acompañaban y retrocedió para ocultarse tras la esquina que tenia mas a la mano.

 - ¿Qué rayos...? - pregunto Vegeta cuando lo jalo del cuello para atraerlo al escondite.

 - ¡Son León y Agatha Ocean! ¡Los padres de James!

 Dentro de la tienda...

 - Por favor, muchacho - atajo Agatha Ocean el interminable torrente de tartamudeantes palabras -. Dame eso y déjame ver.

 Gokuh le extendió con una mano temblorosa la etiqueta del precio del despedazado articulo. La abuela lo tomo con la punta de los dedos con ademan despectivo y alzo una ceja.

- ¿Y por esta fruslería te comportas así? - de su bolso extrajo su chequera y una pluma fuente -. Señorita - se dirigió a la empleada, quien la miraba murmurando incrédula algo como ¿fruslería? -, tengo entendido que ese jarrón tenia una pareja ¿no es cierto? Empáquenlo, pago los dos.

 La dependienta inclino la cabeza y se apresuro a cumplir con la orden.

 - ¿Y bien? ¿no le das un abrazo a tu abuela? - le pregunto Agatha a Gokuh.

 - ¿Eh? - el muchacho seguía algo aturdido -. Oh, lo siento.

 Después de abrazar a ambos abuelos, comenzó el correspondiente interrogatorio.

Afuera de la tienda, resguardados en una esquina.

 - Hay que ir por el - dijo con decisión Vegeta, dando un paso hacia adelante.

 - Momento, momento - Ron lo volvió a jalar -. Eso no es precisamente recomendable.

 - ¿Por qué? - le gruñó.

 Ron se limito a señalar. Gokuh y sus abuelos salieron escoltados por un tipo con uniforme, que cargaba con un paquete, aparentemente un jarrón.

 - ¿Y? - Vegeta calculo que Ron y el chofer/guardaespaldas eran mas o menos de la misma talla, si no es que el tío de Gokuh era incluso mas fornido y pesado.

 - No es solo cuestión de iniciar una pelea. En realidad no quiero problemas con la familia Ocean. No soportan a mi hermana, y a mi menos. Hay que buscar otra opción.

 Gokuh miraba disimuladamente a su alrededor, mordiéndose la lengua. Lógicamente que invento al vuelo un argumento para no tener que decir "Me escape de un campamento con un amigo, y ahora estamos vagando con mi tío Ron ¿se acuerdan de el?"

 Ron y Vegeta los siguieron disimuladamente hasta el estacionamiento. Los vieron subir al auto y arrancar.

 - Ocean... - murmuro Vegeta.

Al oscurecer, afuera de la casa de la familia Ocean.

 - Que barda tan alta - comento Vegeta.

 - Si - confirmo Ron analizándola -. Parece que mejoraron la seguridad desde...

 El muchacho espero a que continuara.

 - ¿Desde...?

 - No importa - Ron retrocedió unos pasos, como tomando impulso. Volvió a retroceder. Calculo con la vista e hizo cuentas con los dedos. Avanzo un paso.

 - Vegeta, ven acá.

 El aludido se paro junto a el, y ambos miraron la barda con el ceño fruncido.

 - ¿Qué sucede?

 - ¿Cuánto pesas?

 - ¿Por queeeeeeeeeeeeeeeee? ¡Ey! ¿Qué estas haciendo? - exclamo cuando Ron lo jalo de la cintura y lo cargo en brazos. Después procedió a acomodarlo mejor sin hacer caso de las protestas del muchacho.

 - Muy bien, preparados - dijo alzando a Vegeta por encima de su cabeza con facilidad.

 - Oye... espérate...

 - ¿Listo?

 - ¡NO!

 - ¡Suerte! - fue lo ultimo que dijo antes de lanzarlo como jabalina.

 - ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!

Mientras tanto, en el interior de la casa.

La abuela decidía el lugar de su nueva adquisición, mientras el abuelo y Gokuh la miraban tomándose sus tazas de te. El muchacho hacia todo su esfuerzo por tragar lo que tenia en la taza, pero cada trago se le hacia mas difícil.

 Finalmente, Agatha pareció satisfecha con el lugar elegido para el famoso jarrón. Se sentó al lado de su nieto y procedió a intentar la misión imposible de acomodarle el cabello.

 - Entonces por fin decidiste venir a visitar a los abuelos ¿Verdad? - le decía mientras le pasaba los largos dedos entre sus mechones desordenados -. Supongo que esa muj... tu mamá no lo sabe y no te ha dado permiso.

 - Eee... bueno, no, mamá no lo sabe. Pero no creo que le moleste si se entera.

 La abuela alzo una ceja, expresando con los ojos "Si, claro".

 - Tu habitación esta tal y como la dejaste la ultima vez... - le dijo el abuelo. Gokuh estuvo tentado a preguntar ¿Con todo y el boquete de la pared? -. Quiero decir... Tus cosas siguen ahí y si te hace falta algo, no dudes en pedírnoslo. Queremos que te sientas cómodo el resto de las vacaciones.

 El cerebro de Gokuh encendió las señales de alerta. El resto de las vacaciones... y tenia la fuerte sospecha de que se podría convertir en "El resto del año"... y después en "Hasta que cumplas la mayoría de edad".

 - Por cierto, junior - la abuela recalco esta ultima palabra con toda la dulzura de su voz -. Me preguntaba si has seguido practicando por tu cuenta...

 Peligro, peligro, peligro.

 Gokuh trago el resto de su te, y recordó aquellos ya lejanos días. Cuando los abuelos se acababan de enterar que tenían un nieto, y después del susto inicial decidieron disfrutar de la novedad. En una ocasión le preguntaron al inquieto chiquillo que le gustaba y él inocentemente respondió: la música. Ese mismo día, le consiguieron un violín y un maestro. Y ya después de que su madre y el dejaron esa casa, y se hubo disipado la polvareda dejada atrás, a la puerta de su nuevo hogar toco el maestro de violín enviado por los abuelos.

 Gokuh y su noble y sacrificado educador (este ultimo claro, alentado por un generoso cheque todos los meses) siguieron con las lecciones unos cuantos años mas, hasta que el muchacho se las ingenio para dejarlo y el maestro no vio caso en prolongar el trato.

 - Pues... si... he practicado... un poquito - "La verdad metí el violín en el estuche y le amarre una enorme roca, pero mamá me atrapo antes de poder lanzarlo a un lago. Así que debe de estar en alguna parte de mi habitación, con todo y su roca, listo para hacer bucitos en cuanto lo encuentre y Luna se descuide. Hasta a mi me parece extraño que halla un instrumento que no me agrade. Debe de tratarse de uno de esos casos en los que alguien insiste en llevarle la contraria a los demás."

 La abuela hizo sonar la campanilla para llamar al servicio. Una doncella apareció casi inmediatamente.

Y en lo alto de la barda.

Vegeta se aferro con todas sus fuerzas para no caerse, agradecido de que entre las medidas de seguridad no se encontrara el alambre de púas. Como pudo se sentó a hojarcadas sobre la barda.

 - ¿Todo bien chico? - le pregunto Ron desde abajo.

 Por la mente de Vegeta cruzaron ciertas palabrotas.

 - Em... ¡Si! - "¿Qué clase de pregunta es esa?"

 - ¿Ves a alguien?

 - Aquí afuera no. Pero hay luz en una ventana.

 - Perfecto. Aquí voy.

 - ¡¿Qué?!

 Ron quizá se había estado preparando en algún momento de su vida para participar en los juegos olímpicos. De un salto limpio llego hasta lo alto de la barda. Pudo incluso haberla librado sin problemas. Desafortunadamente, no recordaba/no le importaba el hecho de que Vegeta se interpusiera en su camino.

Vegeta (Otra vez):  ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!

  Ambos aterrizaron sobre un rosal, hubo un ruido como ¡Crunch!, y después...

 Vegeta y Ron: ¡Au! ¡Au! ¡Ou!

 Salieron arrastrándose de entre las espinas. Vegeta puso atención a su alrededor, creyó escuchar un violín tocando y también varios pasos dados por ansiosas patas pertenecientes a cuadrúpedos ligeros y veloces.

Tras la ventana iluminada.

Después de perder todo el tiempo posible "afinando", Gokuh se decidió a tocar la primera tonada  que le paso por la cabeza.

 - ¡Espera a que te escuche tu padre! ¡Se va a sentir muy contento de lo bien que tocas su violín!

 "Oh, papá. Así que a ti también te atraparon," pensaba mientras tocaba el tema de la película "Cinema Paradiso".

- ¡Ron! ¡Ron! - lo sacudió histérico.

 - ¿Qué? - le pregunto quitándose las espinas enterradas.

 - ¿Los Ocean tenían perro la ultima vez que estuviste aquí?

 - No. A la señora no le gustan...

 Y los vieron. Parece que la aversión de Agatha no incluía a los dobermans.

 - ¡A MI TAMPOCO ME GUSTAN LOS PERROOOOOOOOOOOOOOSSSSS! - grito Vegeta, echándose a correr, seguido de Ron y cinco feroces animales.

 Después de dos vueltas al jardín finalmente lograron chocar contra los guardias. Mas bien, atropellaron a los guardias y salieron corriendo por la reja principal. Vegeta se adelanto gracias a la fuerza dada por el pánico y cruzo la calle tratando de llegar a la banqueta de enfrente. Los faros de un auto lo iluminaron, y el muchacho se asusto, tropezando. Ron, encarrerado, consiguió empujarlo y ambos libraron el vehículo. Escucharon un rechinido de frenos y varias voces. Alguien bajo del auto y se dirigió hacia los caídos. Ron se hizo un ovillo, cubriendo completamente al pequeño muchacho.

 - ¿Pero que diablos...? ¡Cuñado! ¿Qué manera es esa de cruzar las calles?

 Ron se tensó y se incorporo, dejando que Vegeta respirara.

 Vegeta: OO Que cerca sentí la muerte.

 - ¿James? - Ron se levanto sacudiéndose el polvo, y le dio la mano a Vegeta para ayudarlo.

 - ¿Están bien? - les pregunto con preocupación. Después miro tras ellos y a los lados.

 - Si estas buscando a Scrappy...

Dentro de la casa.

 A Agatha le gano la emoción de escuchar a su único nieto tocar el violín, después de tanto tiempo de no verlo.

 - Ya querida, ya. Esta bien - el abuelo le sostenía la mano, después se dirigió a Gokuh - ¿No puedes tocar algo mas animado? ¿Qué pieza es esa?

 - Errr... "Di porque"

 Abuelo León: O_O Creo que no la conozco ¿tiene letra?

 Gokuh (cantando acompañado del violín): Di porque

Dime abuelita

Di porque

Eres viejita

Di porque

Sobre las camas

Ya no te gusta brincar

Di porque

Usas los lentes

Di porque

No tienes dientes

Di porque

Son tus cabellos

Como la espuma del mar

Di porque

Frente al ropero

Donde hay tantos retratos

Di porque

Lloras a ratos

Dime abuelita porque

 Después de la explicación, James se echo a reír.

 - Así que intentaste repetir tu hazaña para sacar a tu querido sobrino de la casa - lo miro con cariño y algo de exasperación -. Pero en esta ocasión, hubiera sido mas fácil si me llamabas a la oficina ¿Acaso no recuerdas mi teléfono?

 Ron: OO Lo que pasa... es que... no se me ocurrió...

 Vegeta: ¬_¬ No, si ya se de donde heredo el Baka lo...

 Ron lo interrumpió.

 - ¿Y bien? ¿Cómo vas a sacarlo?

 - De una manera tan fácil que ni a ti se te hubiera ocurrido. Por la puerta.

James hizo una entrada triunfal en la sala, donde su pobre hijo tocaba el violín, y su padre consolaba a su madre, quien lloraba de emoción.

 - ¿De que me perdí?

Ron y Vegeta mataban el tiempo mientras esperaban a que los padres de James se fueran a dormir para poder sacar a Gokuh de la casa.  Ron llevaba unos dados para-casos-de-emergencia, y cuando el muchacho de cabello alborotado salió por la reja, ya les habían ganado a los guardias todo el dinero que llevaban.

 James se despidió de su hijo con un fuerte abrazo.

 - Lo que no me han dicho es ¿Cómo llegaron aquí?

 - Aunque no lo quiera admitir, mi tío se perdió.

 - ¬¬ Eso es evidente, no me imagino de que otro modo pudieron haber parado en esta ciudad. Me refiero al vehículo que los trajo.

 - ¡Ah! En el auto que me diste de regalo de Navidad ¿Recuerdas? Me diste un paquete de cápsulas...

 - ò_ó ¿Así que utilizas mi regalo de Navidad para irte de vago por ahí con este matalote y tu amigo?

 - ^-^U Si...

 - ¿Puedo ir con ustedes?

Hola, en esta ocasión respondo las reviews al final, yo solita. Vegeta o Gokuh lo haran mas adelante n_n.

Shadir: Lo bueno es que a Gokuh no hay necesidad de ponerle nada para que se derritan por el, en ese aspecto es muy facil. ¿Vegeta celoso? Noooooooooooo.

Kokoro Yana: O_O  ¿qué fue eso? ¿Melosplicas? Nada mas de saber que trabajas y estudias tanto, me siento como una floja T_T. Pero aquí estamos echandole ganas. A mi tambien me ven raro cuando escribo (ya sabes, una se rie sola, o se enoja sola, etc.)

Princess Mako: Gracias por la review ¡Que bien que te siga gustando! Y como te habrás dado cuenta, desafortunadamente la participación de Anglia no termina ahí, para desgracia del príncipe.

Bulmita: Gracias por el Review. ¿¡Como que se han olvidado de la serie?! OO ¿Claro que me encantaría hablar contigo! Pronto estaremos en contacto.

MUY IMPORTANTE. La canción que aparece en este capitulo se titula "Di por que", fue compuesta por Francisco Gabilondo Soler "Cri cri". Es usada sin fines de lucro ni nada que se le parezca. Me gusto para ponerla porque me parecio la mas indicada para conmover a alguien como la Abuela Agatha. Era esa o la de "El ropero" (Toma el llavero abuelita/ y enséñame tu ropero/ con cosas maravillosas y tan hermosas que guardas tu). Yo a Vegeta le dedicaría la de "Bombon I" (Era un rey de chocolate/ con nariz de cacahuate / que a pesar de ser tan dulce / tenia amargo el corazón). Y hay cierta relación (retorcida y lejana pero la hay) entre Gokuh y la película "Cinema Paradiso", por eso tambien la inclui n_n.