CAPÍTULO EXTRA

-Puedes quedarte aquí, si quieres- dijo Shura- nadie está...-

-Gracias, Shura, pero no lo tomes mal- dijo Cristaly- agradezco mucho lo que han hecho por nosotras...-

-¿Estás realmente segura?-

-Sí- dijo sonriendo- ya me he decidido...-

-Bueno, si tú lo dices- dijo Shura un poco decepcionado.

-Gracias por comprender...- dijo Cristaly- mañana le diré a Saori-

-Por lo pronto, vete a dormir-

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-Shaka, ¿dónde está Tai?- dijo Tamara.

-En el jardín, jugando con Kiki...-

-Ya veo- sonrió- me alegra que se estén divirtiendo...-

-Solo espero que Mu no tenga problemas con Kiki ahora que Cassandra está con él- pensó Shaka- o que Kiki no deje de entrenar por jugar con Tai...-

En el jardín de la casa de Virgo, Kiki y Tai se divertían. Kiki hacía volar las cosas con sus poderes mientras Tai reía.

-Debe ser genial tener todos esos poderes- dijo Tai.

-Ni creas. Mi maestro Mu me hace trabajar mucho para que aprenda a usarlos...- dijo Kiki un poco triste, pero luego sonrió- aunque es divertido, hacer travesuras a Tatsumi y a los caballeros de bronce...-

-Me imagino- dijo Tai- ¿y que vas a hacer ahora que Cassandra está con tu maestro?-

-Primero: espero que no le dé mi habitación...-dijo Kiki- y segundo: si ella lo distrae y así Mu no me pone tanto trabajó, la querré más que a nadie en el mundo...-

-¡Tai! ¡Kiki!- gritó Shaka desde adentro- ya es muy tarde...-

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-Puedes dormir aquí, Iridia- dijo Camus con seriedad.

-Gracias- dijo Iridia algo confundida, captando la frialdad de Camus.

-No hay de que agradecer- dijo Camus, al percatarse de que la chica se había asustado un poco con su tono- espero... que duermas bien-

-Gracias- respondió Iridia, aún más confundida- Camus, yo...- el chico volteó, y ella se sonrojó ligeramente- em...nada, gracias-

-De...nada- dijo Camus, cerrando la puerta.

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-Aquí tienes- dijo Milo, mostrándole la habitación a Arilla.

-Muchas gracias- dijo la chica, sonriente.

-No, gracias a ti y a tus amigas, que nos ayudaron a salvar a Cassandra y a los chicos- dijo Milo, devolviendo la sonrisa- ustedes tres son increíbles...-

-Tal vez lo somos- dijo Arilla- si un caballero dorado lo dice...-

Milo se sonrojó un poco y besó a la chica, quien se sonrojó visiblemente y cerró la puerta de su habitación, dejando a Milo sorprendido afuera.

-Que diablos...- murmuró Milo- tal vez mañana-

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A la mañana siguiente, cuando Cassandra abrió los ojos, los de Mu estaban justo frente a los suyos. Sonrió. Había sido una noche maravillosa.

-¿Dormiste bien?- preguntó Mu.

-Como un bebé- dijo ella, estirándose- lo mejor que he dormido en toda mi vida-

Mu sonrió. Cassandra apoyó su cabeza en el pecho de él, mientras Mu pasaba sus dedos por los cabellos negros de la chica.

-Yo...- murmuró Cassandra- fue una noche maravillosa-

-Entonces quédate- dijo Mu- quédate otra vez...-

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Cassandra se quedó con Mu esa noche y muchas otras. Cristaly estaba cansada de estar siempre encerrada, así que se despidió de Saori y de los caballeros y desapareció. A veces, las otras chicas tenían alguna noticia de ella. Tamara y su hijo Tai volvieron a su casa en Grecia, donde Shaka los iba a visitar a diario, ahora ya no en secreto. A Kiki le alegró mucho esto, pues se escapaba muy seguido de sus entrenamientos para ir a jugar con Tai. Milo se disculpó por lo sucedido la noche anterior, él y Arilla siguieron juntos. Camus se creía demasiado frío como para amar a una chica, pero Iridia fue derritiendo poco a poco su frialdad hasta que por fin el caballero dorado confesó su amor.

FIN

Chicos, espero que les guste este...em...¡demonios! ¿cómo se llamaba?... ah, que demonios... ni modo...lo que sea, espero que les haya gustado este minicapítulo extra, escrito a petición de una muy buena amiga XD cuídense mucho...

Abby L.