¿¡Como que es Viernes!?
By: HybridVirus

"Pensar"

–Hablar–

Disclaimer: Sonic es pertenencia de sus respectivos dueños, solamente soy dueña de esta trama y no hay ninguna ganancia con esto, solo soy una fan que escribe para fans.

Pd: Se aceptan donaciones en PP *La descalabran*

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Capitulo I: ¿Es Vieres?

Un suspiro escapo del pico del ave de caza, mientras recostaba su espalda contra la banca en el interior del centro comercial. Sus orbes azules se fijaron sobre la entrada, esperando ver al erizo de las púas azules entrar en cualquier momento con su misma excusa barata de siempre. 'Lo siento avecilla, llegue tarde', después sonreiría y le guiñaría un ojo, consiguiendo de ese modo que lo perdonara rápidamente.

Una agridulce sonrisa se acomodó sobre su pico, estaba intentando mantenerse optimista, aunque la experiencia de la última vez que lo habían dejado esperando resonaba en sus oídos. El joven movió la cabeza de modo negativo, para después deslizar su mano contra las largas plumas que formaban su cabellera.

El resplandor azul de la pantalla de su teléfono le dejaba ver que apenas eran 15 minutos de retraso en la hora acordada "Tranquilo, él va a venir" pensó para sí mismo mientras se hundía en sus pensamientos, intentando recordar la última vez en que habían salido sin que algún contratiempo los interrumpiera.

Estaba consciente del hecho de que su novio fuera el 'Heroe' predilecto del lugar afectaba su vida amorosa, Sonic tenía que proteger la ciudad y ver por el bienestar de todos, en especial porque el principal tarado que se empeñaba en joder su vida amorosa era Eggman.

Un gesto de molestia se apodero de sus irises azules, al mismo tiempo que miraba de nuevo hacia la puerta, de no ser porque Eggman era poco atractivo, se preocuparía de que todo fuera un plan elaborado con el que le estuviera robando al erizo azulado.

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–¡Whoo! – grito jovialmente el ojiverde mientras escuchaba las explosiones y los cortocircuitos de las maquinas alrededor –¡Que lastima Eggman, tal parece que tus maquinas siguen sin ser la gran cosa!– Comento divertido el erizo, mientras corría a toda velocidad para después rodar por la superficie y golpear a los nuevos robots que aparecían de la nada. –¡Que falta de respeto!– chillo la voz del humano para después presionar otro botón asegurándose de liberar aún más maquinas.

Un gesto de molestia se apodero de las facciones del hombre, al mismo tiempo que se apresuraba a introducir las coordenadas en el teclado de su vehículo "¡No se supone que este tonto estuviera aquí!" pensó para después proceder a presionar con más rapidez los botones.

–¡Deberías de meterte en tus propios asuntos, en vez de estar jugando al héroe!– menciono el hombre como si la perdida de una gran parte de su ejército de máquinas no fuera gran cosa. –¡Ahora despídete del mundo Sonic el Erizo!– chillo entre risas el científico al mismo tiempo que un enorme robot aparecía frente al mamífero azulado.

–Me encantaría quedarme a charlar, pero debo partir ta, ta~– añadió el regordete hombre para después huir como si el mismísimo demonio hubiera aparecido frente a él "Ese inepto, bueno al menos le he fastidiado el día" pensó el hombre divertido para alejarse recordando la enorme victoria que se llevaba como premio de consolación a pesar de la pérdida de sus preciadas maquinas.

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Los orbes del halcón se desviaron al ver la mirada coqueta que le dirigía la petirroja que se encontraba a una banca de distancia. "Maldición, azulito" gruño entre dientes a la par que tomaba el teléfono para finalmente llamarle al ojiverde; usualmente evadía el marcarle para que no se distrajera mientras se encontraba enfrentándose al Dr. Huevo. Que era como ambos se referían al hombre, pero esta vez lo haría sin pensar mucho.

"¿Dónde estás?" pensó el halcón para desbloquear el teléfono móvil, intentando ignorar el fondo de pantalla en el que aparecían ambos y la realidad de que el erizo azulado estaba atrasado con 55 minutos. Un nudo se apodero del estómago del ave pensando en que quizás esta vez algo malo habría pasado. La sola idea de que algo se hubiera salido de control y terminara con heridas para el erizo le helaba la sangre.

El repentino sonido de la notificación de 'Chirpy' le saco de sus ensoñaciones para rápidamente dar click y abrir la aplicación, sabiendo que eran probablemente las noticias sobre cómo se encontraba la situación en la ciudad. El título del encabezado le hizo relajarse de golpe al ver lo que esperaba 'Sonic lo logra de nuevo'.

"Bien hecho azulito" pensó el dueño de los orbes azules, para después ver las nuevas notificaciones de Chirpy que se veían parcialmente en su pantalla. Un gesto de curiosidad se apodero de sus facciones al ver la nueva notificación de EresDemasiadoLento y con toda la curiosidad del mundo abrió el nuevo post de su pareja, solo para entrecerrar sus orbes con una furia que no podría olvidar nunca.

La fotografía de toda la pandilla en un restaurante de comida rápida le golpeo de lleno el estómago, haciéndole hervir la sangre. Tenía ya una hora esperando a ese rastrero erizo, y el muy sinvergüenza estaba cenando con sus amigos y con esa arrastrada de Amy Rose; el pico del ave se apretó aún más al ver la forma en que la eriza rosada estaba sentada a un costado del dueño de los irises esmeralda, mirándolo como si no hubiera otra persona en el mundo.

Las manos del halcón apretaron con fuerza el teléfono para después introducirlo al bolsillo de su chaqueta, el gesto de molestia se había apoderado por completo de su persona. Rápidamente se acomodó la chaqueta y coloco sus googles sobre sus ojos para dirigirle una mirada molesta al poster de una de las películas en la cartelera del cine, 'Hasta que tus estupideces nos separen' no era la película que deberían de haber visto, pero sentía que el titulo se adaptaba muy bien a su situación.

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Un cansado suspiro escapo de su pico mientras continuaba caminando por las calles, las parejas alrededor le revolvían el estómago. ¿Por qué diablos todos tenían que andar en parejitas mientras él se quedaba como novia de pueblo? El gesto de fastidio aún no se retiraba de su rostro.

"Desgraciado Alfiletero" gruño para sujetar con más fuerza la bolsa que llevaba en la mano, asegurándose de adentrarse entre toda la gente que disfrutaba de los pequeños puestos de comida y artesanías del extenso mercado callejero. Sus irises se posaron sobre el puesto que era adornado con telas brillantes, consiguiendo ver los agradables reflejos de las pequeñas guías de luces cálidas que colgaban de los postes de su calle.

Normalmente disfrutaría del pequeño lugar frente a su edificio con el erizo, el algodón de azúcar y el helado eran de los mejores que había por los alrededores y la atmosfera agradable que se formaba gracias a las pequeñas luces era una de las razones por las que todos iban en pareja a tener una cita en el lugar.

La idea de mejorar su noche se vio opacada por las miradas curiosas del resto de los comensales cuando se acomodó en la línea, podía ver la curiosidad de un grupo de chicas sentadas en una de las pequeñas mesas circulares. Sabía que estaba arreglado, que se había asegurado de vestir correctamente, de usar colonia y cepillar sus plumas para que resplandecieran y se vieran suaves.

Porque se suponía que tendría una cita, el ojiazul respiro profundamente para calmarse, es cierto que estaba furioso con Sonic. Pero el resto del mundo no tenía por qué pagar por lo que ese tarado había hecho. –¡Jet!– Saludo la pequeña mink de tono plateado con una sonrisa, para después mirar alrededor –¿y Sonic?– pregunto mientras extendía una mano para tomar un par de copas, pero el repentino ceño fruncido del ave le hizo detenerse.

–¿Estás bien?– pregunto la chica a pesar de que sabía que esa era la cosa más absurda que hacer, podía ver la molestia escapando de cada pluma del ave. El joven se encogió de hombros restándole importancia a la pregunta –Quiero lo usual, para llevar por favor– la pequeña sonrisa en el rostro de la chica fue su única respuesta, para después concentrarse en la forma que el algodón de azúcar de colores era colocado dentro del bote de plástico y decorado con las chispas de colores. Una sonrisa maliciosa se dibujó sobre su pico al ver el helado de frambuesa ser colocado en el bote y no fue necesaria más que una simple pregunta para detener a la chica.

–¿Aun te queda un poco de cereza?– apenas bastaron unos segundos para que una risa sonora escapara de los labios de la mink. Al mismo tiempo que abría otra puerta de cristal para tomar todo lo que quedaba de la mezcla de cerezas y helado en el congelador –Ya no– sonrío para guiñarle el ojo al halcón y entregarle su cambio. –Gracias, si alguien pregunta…– añadió el ave mientras tomaba la bolsa reutilizable y sonreía al ver la sonrisa socarrona de la chica –No te eh visto en todo el día~–

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El sonoro eco de risas resonaba estruendosamente en el lugar, mientras el erizo disfrutaba de su tercer chilidog, intentando evitar reírse al mirar las excelentes imitaciones de los gritos de Eggman que realizaba Knuckles –¡B-basta ya!– añadió el pequeño zorro amarillo, intentando recuperar la respiración a la vez que miraba los googles que llevaba puestos el equidna –¡Silencio, no cuestiones la grandeza de mis planes!– el sonoro eco de las carcajadas continuo en la mesa.

–¡Ya basta Knuckles!– Añadió Amy entre risas, sujetándose el estómago para intentar disminuir la sensación que ya se había vuelto un tanto dolorosa para su cuerpo –Eres mejor Eggman que Eggman– añadió el ojiverde entre carcajadas al ver la forma en que el equidna caminaba de forma extraña, tambaleándose de un lado al otro con sus piernas más abiertas de lo normal.

–¡Oigan aún es temprano, sigamos celebrando la victoria!– añadió la eriza rosada, para sonreírle a todos los chicos en la mesa –Seria agradable…– murmuro el zorro mientras asentía insistentemente –¡Vayamos al cine! Añadió el equidna que aun llevaba los googles puestos –A qué hora es la película que veras con Jet– añadió el ojivioleta al mismo tiempo que movía las cejas de modo sugerente.

El erizo giro los ojos al ver el gesto de su amigo y negó con la cabeza –Nunca los llevaría a mi cita– añadió el ojiverde divertido –Solo dios sabe que actuarían de lo peor para avergonzarme– menciono mientras estiraba las piernas y cruzaba los brazos detrás de su cabeza –Además, mi cita es el viernes–

Un repentino silencio se apodero de la mesa, a la vez que los tres amigos se miraban los unos a los otros y todos tomaban sus celulares para asegurarse de que estaban en lo correcto. Los irises de todos los presentes en la mesa se posaron en el relajado erizo azulado para después volver a mirarse; lentamente los tres amigos se pusieron de pie y la batalla más feroz de piedra, papel y tijeras en la historia de su amistad empezó.

El erizo disfruto del apacible silencio que se encontraba revoloteando a su alrededor, quizás todos estaban más cansados de lo que esperaban, uno de sus orbes se abrió para mirar a los chicos y reír al ver la forma furiosa en la que Knuckles y Tails se encontraban jugando piedra, papel y tijeras. –¡Ja, nadie puede contra Eggman!– chillo el equidna quien se paraba detrás de Tails y le empujaba para que se acercara al erizo.

–Sonic…– murmuro el zorrito de las dos colas, consiguiendo que los irises esmeralda se colocaran sobre su figura –Hey ¿Qué sucede amigo?– pregunto el erizo en tono divertido, para sonreírle socarronamente –¿Quieres que te vengue?– pregunto mientras extendía la mano y procedía a hacer los movimientos más rápidos que el trío hubiera visto –Creo que es momento de que aprendan del maestro– agrego el erizo en un tono engreído.

–Hoy es viernes…– murmuro el zorrito, al mismo tiempo que miraba de reojo a los otros dos ocupantes de la mesa –Hoy es viernes– añadió de nuevo con una voz más segura en sí mismo y acerco su teléfono al chico de las púas azules para señalar la fecha en la pantalla bloqueada.

–Vaya quién lo diría, es viernes…– comento el de los irises verdes, solo para sentir como su estómago se movía como si hubiera saltado del Bungy –¡Es viernes!– chillo el erizo para ponerse de pie de golpe y correr a todo lo que le permitían sus pies –¡Maldición!– grito el joven de las púas azules mientras su característica estela azul era lo único que el trío podía ver alejarse.

–¡Sonic!– gritaron los tres acompañantes del erizo, al mismo tiempo que se ponían de pie y salían corriendo del lugar –¡Hey!– grito la voz del mesero, al mismo tiempo que tomaba a Knuckles del brazo –¡Adonde crees que vas Eggman, alguien tiene que pagar la cuenta!– rugió el tigre que sujetaba al equidna mostrándole la nota del pedido que aparecía a nombre de 'Eggman el Equidna'

–¡Maldición!– chillo el equidna mientras sacaba su billetera –Me las pagaran chicos…–

Continuara….

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Hybrid-Virus

Yo! Cuanto tiempo sin escribir de esta pareja, pero los quiero tanto que apenas volví, sabía que tenía que retomar mi amor por ellos. Creo que una de las peores sensaciones que alguien puede pasar es la de ser plantado, pero a mi parecer es una excelente forma de torturar a Sonic xD.

Espero que esto salga como una especie de comedia romántica aceptable, como algunos sabrán, no soy buena para escribir comedia. Por lo que espero que a la larga la historia sea de su agrado.

No creo que tenga muchos capítulos, pero ya veremos cómo evoluciona esto. Entre diversos detalles, si, esta es la segunda vez que Sonic planta a Jet y si, Eggman estaba consciente de que Sonic tenía que estar en una cita, por eso fue que salió a hacer de las suyas, llevándose la sorpresa de que al erizo se le había olvidado.

Creo que Knuckles es de lo más adorable que hay en la serie de Sonic Boom, así que toco hacerlo medio payaso aquí xD.

En fin, espero que el primer capítulo sea de su agrado y que nos veamos sin falta en el siguiente.

Hasta luego. :B

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