Ladies and Gentlemen!

¡Por eso me encanta el mes de Junio! Si aun no lo saben, el motivo por el cual, varios artistas suben más imágenes de sus personajes favoritos en escenarios de bodas, es porque estamos en el conocido "Novias de Junio" Un evento donde hay más bodas y es conocido prácticamente por todos. Incluso, es ese motivo por el cual me encanta demasiado porque puedo escribir sobre estas situaciones y son realmente bellos. ¡Junio es hermoso para un boda y para historias que van de la mano! Que maravillo mes.

It's time to read!

It's showtime!

Aclaración: Yu-Gi-Oh! VRAINS no me pertenece. Es propiedad de Kazuki Takahashi. Yo solamente pido prestado sus personajes para poder escribir mis historias.

Cuando Aoi escucho que Miyu quería salir a un día de chicas para salir a comprar algunas cosas y como se es costumbre cuando salen dos chicas, nunca se imagino que sería arrastrada a algo más. Ahora, no podía evitar sonrojarse un poco mientras miraba a la cámara frente a ella, podía ver como su amiga de la infancia se encontraba riéndose un poco de ella, lo peor de todo, es que era imposible enojarse cuando ambas estaban vistiendo hermosos vestidos de novia. ¿Cuál era la situación? Fácil, la mamá de Miyu necesitaba a dos modelos juveniles que vistieran aquellos vestidos de novia, por eso, decidió llamar a su hija de último momento para que le ayudara y aunque no quería que Aoi se acercara porque aún tenía algunos sentimientos encontrados con esa joven pero a petición de su hija decidió ignorarla, no tuvo de otra al momento de saber que al fotógrafo le gusto demasiado a la castaña que no dudo en tomarla del brazo y caminar feliz para que le ayudara con aquella sesión de fotos.

Ahora, ahora tenía que soportar que fuera fotografiada, aquella vergüenza que solo la atormentaba por estar vistiendo un vestido de bodas. ¿Acaso no había tenido suficiente al anteriormente vestir un vestido de novias pero en Vrains? Claro, todos los presentes, excepto Miyu, no podían saber que la chica era una gran duelista pero también, una chica influyente en la vida de algunos duelistas que les encanta su actuación frente a todas esas cámaras, decir que tenía un gran club de fans, era poco a lo que en realidad estaba detrás de ello. Lo peor, fueron las palabras que le dijo el fotógrafo al momento de verla tan nerviosa que era imposible seguir las ordenes de todos.

En ese momento, realmente hubiera deseado haber salido a una cita con él, aunque la tendrían después de que terminara su turno en el trabajo. No hubiera sonado nada mal con tal de no estar en ese lugar sin poder evitar la vergüenza recorrerle el cuerpo y mucho menos, sin sentir las ganas de huir de ese lugar para esconderse en algún lugar donde no vea aquellas fotos en la edición de esa semana.

-Tranquila, es tu primera vez ¿No es así? -Ella asintió. El fotógrafo le sonrió amigablemente que no dudo en darle un pequeño golpe amistoso en el hombro para animarla.- No es tan difícil como crees pero si puede causar un poco de miedo, ¿Sabes lo que le digo a todos mis modelos? -Ella negó.- Les digo que para evitar que se sientan tan nerviosos, solo piensen en la persona que más quieren, en la persona que aman, algún familiar importante o incluso su mascota -El fotógrafo soltó una pequeña risita.- Eres una muchacha joven y muy hermosa, estoy seguro que ahí afuera, debe existir un muchacho que amas profundamente, ¿No es así?

Ella se quedo pensando unos minutos. ¿Alguien a quien ama? Quería a su hermano Akira, era su única familia que le quedaba así que siempre procuraba demostrarle cuanto lo quería, quería a Miyu como su mejor amiga de la infancia y que por nada del mundo, dejaría ir pero si existiera una persona a quien ama. En ese momento, no pudo evitar sonrojarse un poco y sentirse aún más nerviosa de lo que se puede llegar a sentir. Pensar que sea Fujiki Yusaku la persona en quien fue una de las primeras personas que llegan a su mente mientras relaciona en ese momento la palabra amor, no pudo evitar tocar el pequeño anillo que descansaba en su dedo corazón, no pudo evitar esconderlo un poco con su mano aunque para todos, fue bastante obvio que ese anillo representaba algo más. Algo que iba más allá de su imaginación y que tal vez, era el causante de que la joven chica de cabello castaño, tuviera aquella mirada perdida. Que aquellos ojos castaños no pararan de brillar como la pequeña y tímida sonrisa que se asomara en su rostro. Aquella bonita imagen de una chica con un vestido de novia, realmente iba con ella.

Muy bien dice aquel dicho, una chica enamorada, hace que se vea más hermosa y todo a su alrededor, es capaz de brillar. En ese momento, en aquel cuarto para tomar fotografías, realmente creyeron a ese dicho, uno que era muy bello por cierto.

Aoi estaba tan concentrada que en ningún momento se dio cuenta que Miyu le había tomado una foto en secreto, estaba en un ángulo perfecto. No pudo evitar sonreír un poco ante aquella pequeña travesura que estaba a punto de crear. Soltó una pequeña risita para después, poder entrar a la aplicación de mensajería y poder enviar aquella foto a una persona en común. No sonrió con malicia, en realidad, sonreía con bastante alegría y jubilo de que alguien más no se perdiera aquel hermoso momento que solo ella es capaz de ver. Inmediatamente le adjunto la foto, sin ningún mensaje ni por nada del estilo.

Alzo la mirada al momento de que pedían a la siguiente modelo, a ella. Iba a contestar cuando escucho la notificación de su celular. No pudo evitar sonreír en ese momento.

-¡Ops! Parece que alguien ya vio la foto -Fue lo que susurro. Inmediatamente, su madre fue por ella.

-¡Miyu! Te han estado llamando desde algunos minutos ¡Deja ese celular y ve a modelar! -Fue lo que le ordeno su madre en el momento justo que le quito el celular y empujaba a su hija para que fuera a con ellos.

-Ya voy mamá, ya voy -La chica rodo los ojos al ver cómo le apresuraba a ir.- No me apresures o puedes arrugar el vestido -Fue hasta ese momento en el que su madre dejo de empujarle y empezó arreglar cualquier desperfecto.- Ya está bien mamá, ya está perfecto así como esta

Vaya que realmente no quería perder ante Aoi, si realmente hubiera escuchado a las personas detrás de las cámaras al decir que su amiga de la infancia seria la portada de la revista. Prefirió ya no decir nada y mejor apurarse con esas fotografías para evitar que su madre le mirara de mirara de mala manera.

.o.

Fujiki Yusaku se encontraba trabajando en SOL como cada fin de semana para poder cumplir con las horas que eran necesarias para cubrir su servicio en ese lugar. ¿De qué se encargaba él? Prácticamente de todo lo virtual, gracias a la pequeña ayuda de Ai a su lado, aunque no es como si le permitiera a su idiota Ignis alejarse de él por las probables tonterías que podría llegar a causar, era que podía crear todo tipo de programas. Podía aprender nuevos códigos e implementarlos en el momento, era muy bueno con la seguridad de la red, él junto con el trabajo en conjunto con Hanoi, prácticamente SOL era una organización más preparada de lo que fue hace algunos años. Y era más difícil de que todas aquellas personas que intentaban robar información de la misma o se encontraría con sus potentes barreras para evitar cualquier infiltrado.

Paseaba por SOL, enfocado en aquella tableta que tenía en sus manos al mismo momento que manipulaba cualquier información que pueda encontrar en ese momento. No pudo evitar soltar un pequeño bostezo y rascarse un tanto infantil sus ojos. Estaba un poco cansado de mirar todo el tiempo un monitor, incluso la noche anterior, tuvo que salir un poco tarde para arreglar unos problemas que sin querer, habían ocasionado los expertos que programaron aquella red. Aún no podía llegar a creer que personas así existían pero ¿Quién era él para mostrarles su error? Cada quien, aún seguía aprendiendo, justo como él.

No pudo evitar subir su mano a su oído y tocar el pequeño arete que descansaba ahí. ¿Cuándo fue que se hizo una perforación? Prácticamente se lo hizo antes de regresar a Den, simplemente le había llamado la atención, aunque no pudo evitar el dolor después de unos días pero al final, se acostumbro a él que ya no le daba ganas de quitárselo. Miro por aquellos ventanales de la empresa, muy pronto se iba a poner la tarde y al fin podría ser libre de SOL, quería ir a comer al pequeño local de Shoichi y después, solo dormir. Agradecía que el domingo fuera su día libre y estaba más que destinado para poder terminar todas sus tareas y flojear un poco. Iba a volver a bostezar hasta que sintió como el celular que guardaba en los bolsillos de sus pantalones, empezaba a vibrar. Siempre que entraba a SOL, se encargaba de mantener su celular en modo vibración, todos estaban acostumbrados a que les contestara después de su trabajo. Aunque ese día, no sabe el porqué decidió sacar su celular de sus bolsillos para darse cuenta que era de Miyu. Un tanto extrañado, abrió el mensaje. Se supone que Miyu estaba con Aoi, ¿Acaso les habrá pasado algo? Siendo sincero, sintió que no era eso, si no, Aoi le hubiera mandado un mensaje inmediatamente.

Aunque todas sus sospechas se fueron hacia alguna parte del universo al momento de ver aquella fotografía.

No pudo evitar el momento que paso con Blue Angel aunque nada se comparaba a lo que ahora estaba viendo que no pudo evitar sonrojarse y rectificar que efectivamente, su nariz no estaba sangrando, aunque si podía sentir las mejillas calientes, incluso las orejas. Aquel bonito sonrojo que acompañaba a la chica junto con el brillo castaño de sus ojos. Su cabello muy bien acomodado y un lindo velo que caía por sus hombros. La cantidad de flores que se podían apreciar en el vestido, como en los accesorios, incluso aquel bonito ramo de flores blancas que eran amarradas por un largo listón naranja. El vestido de Blue Angel no se comparaba con el que Aoi estaba vistiendo en ese momento. Aquel gran moño que estaba rodeando su pequeña cintura y lo corto que era aquel vestido que realmente, era demasiado hermoso.

-¿Te sientes bien, Fujiki-kun?

No pudo evitar ponerse un poco nervioso y casi tirar su celular para que este no viera la foto que Miyu le había enviado de su hermana menor, no quería saber de que era capaz de hacerle al verlo con una foto de su hermana. En el momento que Zaizen Akira lo encontró en aquel lugar, no pudo evitar mirar a su alrededor. ¿Cuánto tiempo habrá pasado para que ahora el cielo se encuentre un tanto anaranjado?

-Yo -Dudo un poco.- Creo que me siento bien

-Deberías salir temprano a descansar -Le aconsejo Akira mientras le daba algunas pequeñas palmadas en su espalda y le sonreía como un hermano mayor.- Has estado trabajando duro, a veces los grandes héroes deben descansar y tú aún siendo un estudiante y joven en crecimiento, deberías de hacerme caso

-Creo que eso hare -Suspiro un poco mientras se rascaba apenado su cabeza y hacia una pequeña reverencia.- Nos veremos hasta el lunes Zaizen

Se despidió y empezó a caminar un tanto apurado. Zaizen Akira no pudo evitar mirar un poco curioso al joven héroe. ¿Qué es lo que habrá pasado para que se encuentre un tanto apurado?

.o.

Después de largas horas, al fin pudieron salir de aquella sesión de fotografía. Aunque ya era un tanto tarde para ir a compras e incluso, querer comer algo, aunque al final, realmente valió la pena porque le pagaron y no se quejaba de ello pero estaba más que segura, que nunca más volvería hacer eso, no volvería a caer en las trampas de su mejor amiga. Se sentía bastante cansada, Miyu trataba de animarla mientras le pegaba animadamente la espalda de que no fue tan malo como creía desde un principio. Aunque al momento de salir por aquella puerta, no pensaron que en ese momento, se encontrarían con Fujiki Yusaku. ¿Cómo es que el chico había encontrado como llegar a ese lugar? Claro, después recordaron que era muy hábil para conseguir todo tipo de información y después se les olvido el querer hacer esa pregunta. Aunque la usuaria de Aqua temía que algo así iba a suceder desde el momento que decidió mandarle la fotografía, no esperaba que realmente fuera a ser tan rápido.

-Creo que a partir de ahora estarás en buenas manos -Miyu no pudo evitar soltar risitas aunque Aoi se quejara un poco y se sonrojara. Tomo a su mejor amiga de los hombros mientras guiñaba un ojo al usuario de Ai y la acercaba a él.- Te la encargo Fujiki-kun, llévala temprano a casa y no olvides comprar la siguiente revista, encontraras una gran sorpresa ahí

-¡Miyu! -Se quejaba Aoi.

-¡Perdón no te escucho, mamá me llama! -Y volvió a entrar al edificio mientras se despedía de ellos. Dejando a ambos en una situación tal vez un tanto incomoda.

Fue un pequeño carraspeo de Yusaku el que provoco que al fin se miraran y alzara su mano para que ella la pudiera tomar y así, empezar a caminar con las manos enlazadas mientras tal vez, buscaban una forma de romper aquel incomodo momento. No habían tenido un incomodo momento desde el momento que se conocieron, vaya que ahí si se podía romper algo con ese ambiente un tanto pesado.

-¿Has comido algo? Me iba a dirigir al local de Kusanagi-san cuando las vi de casualidad

-¿Fue casualidad o Miyu te envió un mensaje? -Pregunto Aoi con interés pero al ver las mejillas sonrojadas del chico frente a él, prefirió no presionarlo.- Supongo que aún tengo un poco de tiempo, tengo mucha hambre, estuve todo el tiempo ayudando a la madre de Miyu con una sesión de fotos

-¿Fotos? -Fue cuando Aoi reacciono de que tal vez, había hablado de más, aunque más que eso, Yusaku no quería sonar tan sospechoso de su visita y tal pareciera que lo estaba cumpliendo porque ella no se daba cuenta. ¿Cómo explicarle que su verdadero motivo había sido por la foto que Miyu le había enviado? Realmente iba a ser muy difícil de hablar.- Sugisaki-san no me dijo nada de unas fotos, aunque eso responde a la sugerencia que ella me hizo sobre comprar una revista ¿Porqué?

Si Yusaku fuera realmente inocente, realmente le estaba saliendo ese papel como si nada. Al final Aoi suspiro un tanto cansada mientras sus mejillas se volvían a pintar de rojo.

-Me tomaron unas fotos para una revista, la madre de Miyu trabaja para personas así y fue demasiado vergonzoso -Chillaba un tanto desesperada.- No tengo ganas de ver esas fotos, de seguro estoy demasiado horrible

-Yo puedo entrar en su sistema y borrar las fotos si tú quieres

Fue aquel comentario el que provoco que Aoi se detuviera y consigo, Yusaku. Le miro un tanto sorprendida e incluso, no pudo abrir sus ojos con bastante sorpresa. ¿En serio le estaba diciendo que podía hacer eso por ella? Yusaku no pudo evitar ladear un poco su cabeza. ¿Qué tanto estará pensando? Ese gesto se le hizo un tanto tierno que no pudo evitar sonreír.

-Muchas gracias Yusaku pero creo que no es necesario -Sonrió.- Al final, ellos me pagaron por posar en esas fotos, supongo que pueden hacerlo

-Puedo hacerlo si quieres no me molesta ocuparme de algo como eso, solo tienes que decirlo, no dudes en pedirme ayuda si de eso se trata -Alzo los hombros despreocupado, al final, volvió a sonreír.- Pero si esa es tu respuesta, entonces no puedo hacer nada que tu no creas conveniente

-¿En serio harías eso por mi?

Fue aquella pregunta la que provoco que Yusaku alzara su mentón y mirara el cielo. Eran momentos como esos donde Aoi podía apreciar con atención al chico a su lado. El usuario de Playmaker que muchas veces a peleado por ellos y que durante su viaje, fue que maduro sorprendentemente, tal vez se perdió esa transformación pero tener a ese chico a su lado, era algo bueno al final en cuenta. Pudo apreciar su perfil, aquel rostro maduro como sus ojos un poco más afilados sin perder el toque de amabilidad que se esconde en aquella sonrisa que solo algunas personas han sido capaces de ver. Había crecido un poco más, de por si era alto, ahora lo era un poco más que no pudo evitar pensar que utilizar algunos zapatos con tacón, podría llegar a ser una buena idea. Incluso, aprecio aquellas perforaciones que tenía en el lóbulo de sus oídos.

Pero al momento que volteo a verla con aquella sonrisa en su rostro, fue lo que causo que su corazón volviera a dar un golpe en su pecho. Ya tenía suficiente con aquellas fotos donde lo primero que pensó, fue en él. Solamente en él. No había nadie más en todos aquellos pensamientos más que en él, incluso, no pudo evitar caer de su burbuja en el momento que llamaron a Miyu para que fuera ella la siguiente modelo.

-No eres una simple persona Aoi -Fue lo que murmuro.- Eres mucho más que eso para mí y eso lo sabes muy bien, ocupas un lugar muy especial en mi corazón -Aoi no pudo evitar sonrojarse más al momento que vio como aquella sonrisa se hacía más grande.- Si hay algo que te molesta o que te avergüenza, yo puedo hacer algo por ti para que evites sentirte de esa manera

Tal vez fue el brillo que presencio en ese momento, tal vez sintió que realmente todo lo que estaba a su alrededor brillaba pero no pudo evitar contestar a esas palabras con un merecido beso en las mejillas.

-Muchas gracias Yusaku -Sonrió.- Pero está bien, me avergonzara pero supongo que de eso también se trata el crecer -Sus pies volvieron a moverse, a seguir avanzando.- Además, me gustaría que vieras las fotos y me des tu opinión al final ¿Qué opinas?

-Me parece bien -Sonrió aun más. Si alguien le dijera que el joven al lado suyo no sonríe, solo se soltaría a reír porque entonces, nunca lo han visto con atención, solo sintió como sus manos volvieron a enlazarse con fuerza. No querer nunca soltar esa mano contraria.- Ahora, podemos entrar a comer, realmente tengo mucha hambre

-Vamos, vamos -Le animaba Aoi.- Estoy segura que Shoichi-san estará feliz de prepararnos un perrito caliente con extra de todo ¿No te parece?

Ambos estuvieron de acuerdo al momento de pasar por aquella puerta y ser recibidos animadamente por Shoichi y todas las personas que se encontraban ahí. Yusaku no pudo evitar mirar de reojo a Aoi. Como Blue Angel o como Aoi Zaizen, era difícil el poder decidir cómo es que la chica se ve bien. Le había gustado la forma en la que ella siempre sonreía. Incluso, el ver como aquel velo blanco caía libremente por su cabeza hasta sus hombros. Al final, dejo que Aoi se adelantara para poder sacar su celular de su bolsillo, entrar a la aplicación de mensajería y llegar hasta el contacto de Miyu. No pudo evitar sonreír mientras sus dedos se movían con rapidez y al final, solo envió aquel mensaje al escuchar cómo era llamado por la castaña para que se sentara a su lado y le preguntaba, como es que había sido su día.

"Gracias, aprecio mucho la foto pero creo que esperare un poco más para apreciarla cuando ese día llegue, aunque conservare la fotografía y esperare con ansias aquella revista, le prometí que la compraría pero realmente lo agradezco"

Al momento que Miyu leyó ese mensaje, no pudo evitar soltar una risita. Se alegraba bastante por Aoi, al tener a su lado a una persona como Yusaku. Desvió su mirada en el momento que vio un ramo de flores blancas junto con unas manos que conocía a la perfección, no pudo evitar sonreír al momento de ver a Aso Ethan, alias Spectre mientras le dirigía una pequeña sonrisa. Tal vez, también era momento de avanzar al igual que ella.

Con gusto acepto aquellas flores mientras Spectre se sentaba a su lado y la escuchaba con atención.

Si, tal vez el día, no fue tan malo como se había esperado. Las buenas recompensas vienen después de un día de tanto trabajo, realmente desearía que sus días fueran así siempre.

¡Muchas gracias por leer!

Me han encantado las imágenes de vestido de novia, tanto de Blue Angel como de Aoi, son demasiado bellos. ¡Pueden irlas a buscar a twitter! Realmente no se van a decepcionar.

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Atte.: AnZuZu Dragneel

Fecha: Viernes 19 de Junio de 2020