Disclaimer: Los personajes de The Flash y Arrow no me pertenecen, ellos son de la Warner.
N/A: Fem!Barry.
Capítulo Único: De sostenes y concentración.
Ambos están listos, alejados de la ciudad lo suficiente como para evitar que su alboroto fuese lo menos notado por cualquier civil curioso como para adentrarse en una fábrica abandonada.
Si por Oliver fuese, simplemente se contenta con entrenar en la Arrow Cave -aún no se acostumbra a su nombre- por horas, es a lo que está acostumbrado. Pero su compañera sólo le apetece un poco de aire fresco otoñal y un necesario cambio de escenario.
¿Cómo puede Oliver negarse a eso?
- Oh, uh ... No, digamos que llevas sujetador, por favor -le dice Oliver a una distraída Barry, pellizcándose la nariz. No puede pasar por ésto otra vez.
- ¿Qué? No necesito un sostén... -dice Barbara Allen, cruzándose de brazos y frunciendo el ceño- Las mujeres no necesitan sostenes. Eso es solo una restricción sexista en nuestros cuerpos, Ollie -agrega mientras rueda los ojos como si la situación le fuera absurda.
Oliver se muerde el labio para evitar decir algo estúpido, incómodamente se acaricia el cuello mientras desvía la mirada.
- Pero puedo ver tu, tu... um...
Barry sonríe ligeramente.
- Para alguien que ha salido con muchas mujeres, eres realmente tímido, Ollie -dice ella mientras ajusta su largo cabello castaño a una coleta- Eso es lindo.
Oliver ignora eso último, se quita su chaqueta de cuero y rueda los hombros para quitarse cierta tensión del cuerpo.
- Estamos aquí para entrenar, no para hablar.
- Pero has sido...
- ¡Barry! -regaña Oliver.
La velocista rueda los ojos y alza las manos en son de paz, alejándose unos pasos mientras se coloca en pose de lucha, con sus piernas separadas, el cuerpo ligeramente inclinado y los puños por delante de su rostro.
Oliver intenta ignorar la belleza que se refleja frente a él, intenta no pensar que Barry se ve bonita con su cola de caballo y los ojos verdes en su dirección.
Oliver realmente trata de concentrarse en lo que hace y no en la muchachita que no lleva sostén bajo su playera roja, en sus zapatos deportivos gastados y su sonrisa.
Oliver debe concentrarse. Realmente debe.
Lastima que no logra hacerlo a tiempo para evitar que Barry le regale un puñetazo en la quijada.