La Luna Solitaria

Amistad. Angustia.

Resumen

Todas las sailors, exceptuando a Serena, han demostrado numerosos talentos a lo largo de sus vidas. Y cuando Serena demuestra tener habilidades poco comunes en una prueba inesperada, capta la atención de gente quiere cultivar sus habilidades. Finalmente llega el momento de brillar de Serena, aunque no lo hace como las demás. Hay beneficios en pensar de forma diferente.

Capítulo 1: La prueba perfecta

Han pasado aproximadamente un mes semanas desde la batalla contra Sailor Galaxia, dos semana desde que las sailors star light se fueron y 10 días desde que Darien volvió a irse a USA para continuar con sus estudios. Todo ha cambiado dramáticamente, las chicas están siendo demasiado posesivas conmigo por temor de que algo vuelva a suceder y aunque no lo diré frente a ellas, creo que están algo paranoicas.

Cada día Mina, Rei, Lita o Amy se quedan a dormir en mi casa, es algo extraño pero creo que me estoy acostumbrando. También veo a Haruka y las demás con más frecuencia, al parecer decidieron quedarse en Tokio para que Hotaru pudiera estudiar en una escuela como una niña normal. Aunque me parece algo sospechoso encontrarme a Haruka casi todos los días de camino a mi casa ofreciéndome un aventón para no tomar el bus.

A veces me molesta un poco, después de todo me tratan como a una niña indefensa que no puede hacer nada bien, aunque en parte es verdad, nunca he podido hacer nada bien sola y eso es doloroso. Siempre he ganado mis peleas no por mis habilidades de pelea, sino por suerte pura, tampoco es como si fuera la más inteligente, soy extremadamente torpe y no sobresalgo en nada. Honestamente ya les he dado muchos motivos para no creerme capaz de nada y asustarse por el hecho de que yo camine por la vida descuidadamente con el cristal de plata en mi poder, pero aún así esto me molesta ¿Por qué no soy capaz de hacer nada bien? ¿Por qué soy tan inútil? Desearía poder encontrar algo en lo que sea buena.

Desearía poder encontrar una cosa, una pequeña cosa en la que sea buena para poder demostrarles que no soy una completa inútil. Lamentablemente sé que si incluso encuentro algo así, de alguna manera me encargaré de arruinarlo todo.

-"Señorita Tsukino, deje de mirar al espacio y preste atención". Dijo mi profesor haciéndome sonrojar.

-"Si, profesor". Dije regresando a la realidad.

En estos momentos tenemos el infortunio de estar en el salón de clases escuchando una charla de algo. Por una vez lamento que no haya un youma de algún tipo para justificarnos saltarnos la clase y escapar de una charla aburrida. Juro que los profesores son peores que los monstruos.

-"Como les decía, hoy viene un grupo de representantes de un importante internado para dar una prueba seleccionar a posibles estudiantes tomar continuar sus estudios en su institución con una beca completa". Definitivamente Amy va a ganar la beca, yo no tengo ni la más remota posibilidad de pasar una prueba aun si mi vida dependiera de ello. "Les presento al señor Takahashi, director del programa". En ese momento entró al salón un hombre con traje, muy elegante, de cabello canoso y ojos verdes.

-"Buenos días, mi nombre es Tsunayoshi Takahashi. Soy el director del instituto de jóvenes talento, nuestro instituto busca jóvenes cuyos talentos no han sido explotados y formarlos para ser grandes activos de la sociedad con técnicas de aprendizaje únicas. Las pruebas que realizaremos serán las siguientes: Una prueba de conocimientos, prueba de actitud, prueba de personalidad, prueba física con especialistas y para aquellos que hayan despertado el interés de alguno de nuestros instructores, una entrevista. Para empezar llamaré a cada uno de ustedes para que reclamen sus primeras 3 pruebas, un asistente vendrá a cuidarlos." En ese momento empezó a llamar a todos por orden de lista, por lo que cuando llamó a la persona que siempre van antes que yo empecé a levantarme.

Al verme esperando mi llamado parada sonrió y evitó decir mi nombre, en su lugar dijo el de la persona que iba después de mí para luego decir mi nombre. Me acerqué a él y en lugar de darme mi sobre con la prueba con la mano izquierda me la dio con la mano derecha y me miró de forma extraña, me recordaba a la mirada que Amy le daba a sus problemas matemáticos avanzados.

Yo simplemente me dirigí hacia mi puesto con el sobre pesado en mi mano, y cuando terminó de entregar los sobres, se fue diciendo que no podíamos abrir el sobre antes de que llegara el instructor. Pasaron 5 minutos antes de que llegara el siguiente instructor, dos hombres de cabello castaño y de ojos verdes, la diferencia era que uno de ellos era ligeramente más alto que el otro.

-"Vamos a leer los nombre de quienes deben ir a otro salón y los que se quedan, el tamaño del salón no es el ideal por cuestiones de tamaño, ya que aquí es posible hacer trampa".

Sacó a la mitad del salón, esa mitad incluía a Amy y Mina, y tan pronto se fueron nos organizaron dejando grandes diferencias de distancia entre cada persona, obligaron a los que tenían reloj a quitárselo y dejarlo en el escritorio al igual que los celular y bolsos.

"Ahora les entregaremos pulseras". Dijo levantando una pulsera metalica para que pudiéramos verla. "Estas pulseras le indicarán a todos los instructores que ustedes están presentando la prueba de hoy. El examen que les vamos a entregar tiene un tiempo límite indicado por la pulsera y cada pulsera tendrá un tiempo límite diferente, esto para evaluar su capacidad para trabajar bajo estrés. Si suena la alarma de su pulsera, deberán entregar su prueba en silencio y retirarse".

En ese momento nos dio pulseras plateadas con una pequeña pantalla, con una pantalla y unos botones a su alrededor y lo que, parecía se parecía a un reloj le faltaba el palito con el que normalmente se cambia la hora en un reloj, en su lugar había un agujero en el costado. Tal vez el mío está dañado o algo, pero no dije nada, simplemente me coloqué el reloj en silencio.

Ya es lo suficientemente malo haber llegado tarde y que me hayan llamado la atención de nuevo, si digo algo y piensan que dañé el reloj sin duda alguna me castigarán.

"Todo lo que necesitan está en la carpeta, no nos pueden llamar para nada diferente a entregarnos su prueba, si hablan recogeremos su prueba. Se les recuerda que esta prueba no tendrá un resultado negativo en sus calificaciones, aunque en caso de hacer algo inapropiado, no duden que lo comentaremos con sus profesores. Ahora opriman el botón rojo y comiencen con su prueba". El profesor escribió las reglas en el tablero y al final escribió una serie de puntos y rayas.

Oprimí el botón rojo al igual que todos y vi mi reloj, tenía 30 minutos…

¡Qué horror!

Abrí el sobre con pánico para ver unas 50 hojas, en el sobre también había un lápiz, un borrador y un sacapuntas sin el filo para sacar punta, vaya suerte la mía, debo ser cuidadosa e intentar acertar a lo poco que alcance a hacer. Intenté contestar al azar para al menos contestar algunas preguntas de la sección de conocimientos, las preguntas eran horrendas, todas eran difíciles.

En algún momento la punta de mi lápiz se rompió y me quedan solo 10 minutos. Busqué en el sobre desesperadamente notando que había un sobre interno, lo abrí para ver dos hojas, el filo del sacapuntas y un palillo del mismo color del brazalete.

Lo primero que hice fue intentar meter el palillo en el brazalete disimuladamente, encajaba de forma perfecta, en ese momento una pregunta llegó a mi mente ¿Podré ganar más tiempo con esto? Quiero decir, normalmente se gira ese palillo para cambiar la hora, así que haciendo eso mismo podría ganar más tiempo.

Tic.

Tac.

0:05

Quedan 5 minutos. Será intentarlo, después de todo no hay nada que perder.

Moví lentamente el palillo en sentido anti horario y el tiempo disminuyó, así que lo moví en sentido contrario y el número de mi reloj aumentó. ¡3 horas! ¡Gané 3 horas más para hacer la prueba!

Estaba tan feliz que tuve que reprimir mi grito de felicidad, antes de recordar que aún debía solucionar las preguntas. Me recosté en mi silla con tranquilidad y respirar profundamente. Sentí que alguien me observaba y levanté la mirada para ver a mi instructor, a quien por un minuto creí haber visto sonriéndome. Debe ser mi imaginación.

Suspiré con alivio y vi las hojas adicionales.

Felicitaciones por encontrar esta hoja adiciona. Nuestra institución valora el ingenio y perspicacia sobre las pruebas de conocimiento estándar, así que te damos la posibilidad de omitir parte de tu prueba escrita como recompensa. Si puedes responder a la pregunta 55, cada respuesta sin marcar en la prueba de conocimiento será calificada como una respuesta correcta.

Guarda esto en secreto.

Al leer eso borré cada una de mas preguntas que había respondido de forma aleatoria y saqué punta a mi lápiz una vez acomodé el filo. Y empecé a colocar las respuestas que había en la hoja con una gran sonrisa. Una vez llegué a la pregunta 55 mi sonrisa desapareció.

55.

Solo decía 55, no tenía nada escrito después del numero. Miré con nerviosismo las hojas buscando una y otra vez la pregunta 55. En ese momento sonó una serie de pitidos. Los instructores se levantaron y recogieron las pruebas de 3 de mis compañeros de salón.

-"Fueron solamente 35 minutos, es injusto, no alcancé a hacer nada." Comentó un chico protestando.

-"La vida no tiene que ser justa, no es mi culpa que no hayas sido capaz de responder una prueba que yo podría hacer con los ojos cerrados." Dijo metiendo la prueba en el sobre al igual que el lápiz, el borrador y el sacapuntas.

Respiré hondo y decidí ver la nota, la cual tenía una serie de letras y puntos, examiné el sobre para encontrar algo escrito en su interior.

55. ¿Cuál es el nombre y edad del instructor de la prueba? Agregar información extra que pueda deducir del instructor.

¡La pregunta estaba en el sobre!

El instructor jamás dijo su nombre, solo entró y empezó a decir las reglas de la prueba. En ese momento me di cuenta de algo importante, el instructor colocó en el tablero una serie de puntos y líneas parecidos a los de la nota. Empecé a escribir en el espacio en blanco de la hoja, donde debería estar la pregunta y empecé a ver la hoja que venía en el sobre.

52 - – I H U Y

Eso era lo que decía, no significaba nada y mi instructor no parecía tener 52 años, si algo 30 pero 52 jamás. Me quedé mirando el papel por un rato y luego volví a mirar al instructor, parece tener 25, no 52, ese número sin duda alguna está invertido, tal vez si invierto todo pueda solucionarlo.

- - 25

Akane es nombre de mujer, pero el instructor parece nombre. Centré mi mirada en el instructor recordando a Haruka, Haruka es mujer pero le gusta vestirse de hombre para molestar a las chicas y poder competir según Michiru.

Mi instructor, Akane, tiene unos rasgos femeninos como los ojos grandes, más grandes que los de su hermano, podía ver algo de brillo de labios, no tenía barba ni bigote de ningún tipo, me centré en su entre pierna para confirmar y no había nada. Definitivamente mujer.

Akane Yuhi, mujer de 25 años.

Ella al fijarse en el hecho de que la estaba mirando sonrió de forma coqueta y guiño su ojo izquierdo para luego seguir escribiendo en una hoja con su mano izquierda, pero ella inicialmente había usado su mano derecha para escribir en el tablero. Significa que puede escribir con ambas manos. También pude ver un anillo de compromiso. Nuevamente sonaron las alarmas de los brazaletes de otras 3 personas, Lita estaba entre ellos. Akane se levantó para recoger su prueba.

-"Parece que tuve mala suerte". Se lamentó Lita.

-"No debes preocuparte bonita, aún quedan otras pruebas". Dijo con comprensión causando el sonrojo de Lita antes de irse.

55. Respuesta: Akane Yuhi, mujer de 25 años, ambidiestra, de actitud coqueta, arrogante, severa y comprensiva, muy seria cuando se lo propone. Parece tener pareja romántica debido al anillo en su dedo anular. Le gusta vestirse de hombre. Tiene un hermano gemelo que trabajó como instructor del otro grupo.

Tan pronto terminé esa parte de la prueba empecé a contestar las demás. Eran simplemente preguntas de cosas que haría en diferentes situaciones, la pregunta final era simplemente ver imágenes de mis compañeros de clase, colocar sus nombres y decir cosas de ellos.

Honestamente esta fue la parte más fácil de todo el examen, después de todo yo siempre he sido la clase de persona que intenta conocer a todos sus compañeros, yo hablo con ellos, miro como son y decido si seguir hablando con ellos o no. La parte final fue la más fácil, eran solo cosas sobre mí.

Cuando terminé me di cuenta de que era la última en el salón. Aun me quedaban 35 minutos de mi examen. Guardé todo en el sobre y rasgue las hojas pequeñas del sobre en muchos pedazos para meterlos en el sobre. Me levanté y caminé hacia Akane con el sobre en mi mano y una sonrisa victoriosa, esta es la primera prueba que he logrado terminar, ahora solo debo confirmar algo para saber si me fue bien o no.

-"Ya terminé mi prueba, señorita Yuhi". Dije con algo de cautela y la castaña se rio.

-"Bien hecho, Tsukino. Ahora debes salir, tus amigas te esperan. Te recomiendo que no digas nada, puede que les parezca injusto". Yo asentí y salí para encontrar a las chicas en el pasillo.

-"Parece que tuviste suerte". Dijo Mina.

-"Fuiste la última en salir".

-"Tuve mala suerte. Cuando estaba terminando la primera prueba me di cuenta de que no estaba la pregunta 55, intenté preguntar si se trataba de un error de impresión y el instructor tomó mi prueba y la anuló". Murmuró Amy con tristeza.

-"A mí solamente me dieron una hora". Dijo Lita

-"Yo tuve media hora". Dijo Mina.

-"Supongo que tuve suerte". Contesté con orgullo.

-"Cuando salimos se nos permitió llenar una prueba corta de personalidad porque no pudimos contestarla y fuimos a la prueba física."

-"Señorita Tsukino, es la única que falta por la prueba física". Dijo mi profesor guiándome hacia una carpa que se encontraba cerca del gimnasio.

Entré a ese lugar para ser recibida por un par de mujeres. La primera de ellas tenía el cabello negro corto y ojos color miel, la cual usaba un traje de médica, la otra mujer era una morena de cabello castaño claro y ojos negros, ella vestía un top negro y un pantalón negro.

-"Señorita Tsukino, la primera prueba de visión". Lo único que tuve que hacer fue ver un tablero con letras de diferentes tamaños y decir letra por letra las letras que podía leer. Con orgullo las leí todas siendo alagada por mi instructora por mi excelente visión. "Ahora debe quitarse la ropa y sentarse en la camilla". Yo asentí e hice lo que me pidió, la mujer con bata me colocó muchos cables en todas partes y me hizo hacer algunos movimientos antes de hacerme correr en una caminadora. "Que extraño, es como si no estuviera haciendo esfuerzo".

-"Yo acostumbro a correr mucho para no llegar tarde".

-"Una de tus compañeras contestó lo mismo". Dijo con una sonrisa. Debe estar hablando de Mina. "Aunque tu cuerpo está muy bien a pesar de no practicar ningún deporte o pertenecer a un club. Podrías ser una gran atleta".

-"Claro que no. Prefiero dormir y comer golosinas". Reí nerviosamente.

-"Estoy segura de que con esfuerzo serías la mejor". Dijo aumentando la velocidad e inclinando la caminadora, duré algunos minutos antes de cansarme, me bajé y empezó a tocar mis brazos y piernas haciéndome sentir nerviosa. "Muy bien, ahora tomaré una pequeña muestra de sangre". Comentó sacando una jeringa, con valor contuve el aliento esforzándome por no llorar y dejé que me clavara la aguja para extraer sangre. Una vez terminó desinfectó la herida y empezó a preguntarme cosas "¿Estás embarazada?" Negué con la cabeza. "¿Alguna alergia o enfermedad?" Negué de nuevo. "¿tiene algún dolor muscular?"

-"No tengo nada".

-"Perfecto, es tu turno, Hana". Se acercó la pelinegra.

-"Acércate, rubia". Pidió con seriedad y yo obedecí. "Empezaremos estirando". Hice los estiramientos que me ordenó con su ayuda. "Con algo de práctica podrías ser más flexible, se nota que no haces nada normalmente".

-"¿Por qué todos me dicen eso?" Me lamenté.

-"Tal vez porque es cierto". Dijo con sarcasmo. Después de eso me hizo colocar unos guantes de boxeo y golpear un saco de boxeo, lo cual terminó conmigo cayendo al piso mientras la instructora reía histéricamente. "Fue patético, un asco. Ni siquiera sabes golpear, todo es un desastre relacionado a tu postura, ni siquiera lo hiciste con ganas. Se nota que no haces nada con esfuerzo sin nadie que te obligue. Perezosa como ninguna otra, las chicas como tú son las que necesitan más ayuda de la normal para sobresalir. Levántate". Yo me levanté a regañadientes.

"Separa ligeramente las piernas, dobla las rodillas, coloca los brazos de esta posición". Acomodó mis brazos en una posición. "Ahora rota un poco tu cadera y envía el golpe al aire sin mucha fuerza". Hice lo que me pidió haciéndola sonreír. "Ahora haz lo mismo con el saco de boxeo con fuerza". Al repetir los pasos y golpear el saco de boxeo pasó algo que me enorgulleció, el saco se movió por mi golpe.

"Mucho mejor, aunque con práctica lo harás mejor. Muy flexible para no hacer nada, poca resistencia y fuerza." En ese momento la instructora dirigió su mirada hacia el brazo donde me habían dado la inyección. "Y con una capacidad de sanación única. Tomoyo mira, ya no tiene la herida de la aguja."

-"¿Qué tiene de extraño? ¿Acaso debe durar más de unos minutos?" Pregunté con confusión mientras me veían con asombro.

-"¿Cuánto te dura una herida más grande?"

-"Los raspones duran 1 hora, las cortadas 2 horas, las quemaduras dependen del tamaño, entr horas, los esguinces un día y las fracturas 3 días". Enumeré restándole importancia, me estremecí levemente al hablar de fracturas.

Algunas veces me sucedió durante batallas, en su mayoría fueron para mi fortuna fueron en fines de semana y vacaciones. Por lo general mis lesiones fueron en peleas que tuve antes de conocer a mis amigas o cuando ellas no podían asistir a las peleas. De cualquier manera, siempre tuve la oportunidad de recurrir a la ayuda y guía de Luna, para luego comprar su silencio con atún para evitar que comentara algo frente a las demás.

-"Creo que me asegurare de examinar bien la muestra de sangre." Murmuró escribiendo algo en un papel. "¿Enfermas seguido?"

-"Recuerdo pocas veces, solo recuerdo 3 veces en toda mi vida". Observando la incredulidad en sus miradas.

¿Dije algo extraño?

-"Respondiste a la pregunta 55, ¿Cierto? Imagino que es por es por eso que tardaste tanto".

-"Si." Contesté con orgullo. "La primera prueba que termino y la única en la que me va bien."

-"Vístete." Murmuró la médica mientras desconectaba cada cable de mi cuerpo. "Falta tu última prueba." Me coloqué mi ropa rápido y una vez estaba lista la médica tomó mi brazo y empezó a arrastrarme por la escuela hasta llegar a la oficina del director, en la cual no se encontraba el director, en su lugar se encontraba el viejo que representa la escuela de niños prodigio.

-"Bienvenida señorita Tsukino". Dijo con amabilidad el director del programa, parecía bastante feliz en comparación a como parecía cuando nos saludó a todos. "Siéntese por favor". Hice lo que me pidió. "Me han informado de su excepcional rendimiento en las pruebas escritas".

-"¿Enserio?" Pregunté con sorpresa. "Nunca me había ido bien en algo, mucho menos en una prueba". Murmuré para mí haciendo que el anciano riera.

-"No me sorprende. Hay muchas personas que simplemente no encajan en las cosas normales del mundo, gente como usted. Señorita Tsukino usted encarna lo que mi programa busca, la estudiante perfecta".

-"¿Que?" Pregunté aturdida. Le parezco perfecta.

Es la primera vez que escucho algo así… no, ahora que lo pienso creo que Diamante dijo algo similar en algún momento, aunque se trataba de un villano obsesionado conmigo. Voy a corregir, esta es la primera persona aparentemente cuerda en decir algo similar sobre mí.

-"¿Veredicto?" Preguntó a la instructora médica que me trajo hasta aquí.

-"Perfecta, definitivamente perfecta. Corre tan rápido que posiblemente pueda entrar a los olímpicos, tiene potencial para pelear, cuerpo perfecto y vista perfecta". Murmuró la médica. "Incluso tiene capacidades curativas únicas".

-"También sacó 100 en las demás pruebas. Señorita Tsukino, bienvenida al instituto de jóvenes talento, detendremos la búsqueda de más estudiantes para centrarnos en usted".

Debo estar soñando, esto no puede ser verdad.

Soy solo yo, Serena Tsukino. La chica tonta y llorona con terribles calificaciones que solo sabe comer, dormir y holgazanear. Quiero decir, sé que soy una sailor, pero ni siquiera soy buena peleando.

Intenté decir algo, pero no pude hablar y mis piernas temblaban como gelatina. El señor Takahashi continuó hablando pero no podía entender lo que decía antes de detenerse y mi visión se volvió nublosa y mis piernas no tardaron en fallar. En algún momento vi a todo a mi alrededor se volvió negro.