Disclaimer:Los personajes de Spies in Disguise no me pertenecen, ellos son de Blue Sky Studios.

Capítulo Único: Marca de Lujuria.

A veces, Lance arrastra los labios por la dulce y baja curva de la espalda de Walter, deslizándose sobre su columna vertebral, suavemente y sin prisas. Solo disfrutando ese momento que es solo suyo, de nadie más. Se levanta con un gusto lento, merodeando por cada cicatriz acribillada tras su misión exitosa de vencer a Killian hace seis meses, besando la sal de cada mancha bañada por el sol o pequeños moretones de sus experimentos fallidos.

Cuando encuentra la nuca de Walter en la oscuridad, esos mismos puños cerrados que alguna vez lo sostuvieron cuando fue pequeño como una paloma, ahora se ven mucho más suaves, entrelazados en las suaves sábanas como una oración. El aliento del niño se vuelve silencioso y violento, pesando mucho con el clic de su mandíbula al apretar con fuerza la boca. Walter poco a poco pierde la cabeza bajo su cuerpo.

Los labios de Lance se hinchan contra la piel ajena y la cabeza de Walter se hunde contra la cama. Los dientes del espía se apoderan de Walter y él tiembla con un gemido ahogado. Lance pasa la lengua entre las vértebras, observando cómo los pelos relucientes se alzan en el camino de la columna vertebral de su joven amante.

Se imagina mordiendo con fuerza en la unión de su hombro y cuello, saboreando la piel cediendo entre sus dientes, un poco de sangre pero no demasiado, solo lo suficiente como para mantener la lujuria alborotada cuando se confunde con el dulce dolor.

Para marcarlo como suyo.

Walter suspira de placer, y la sonrisa de Lance es brutal y sacarina.

Su pequeño pichón se ha quedado sin energías para volar, y ahora es todo suyo.