Disclaimer: Los personajes de Harry Potter no me pertenecen, yo simplemente los utilizo con fines de entretenimiento.


ASTORIA

Astoria dejó su comida de lado al recordar lo poco que había visto a Draco Malfoy en los últimos días. Incluso podía decirse que él la estaba ignorando deliberadamente. Ella se cuestiono si había hecho o dicho algo que lo hiciera molestar.

Al principio, cuando comenzó a incorporarse nuevamente a sus clases y a sus estudios para los TIMES, él solía esperarla cada mañana en la sala común, saltarían el desayuno y él la acompañaría hasta el salón en donde fuera su clase, causando a su vez que él llegara tarde a sus propias, ya que sus horarios coincidían en ciertas horas. Él se ofrecería a llevar su mochila y libros sueltos. Ella siempre le mencionaba que no era necesario, ya que no quería sentirse inútil, pues no se sentía para nada débil. Él simplemente le regalaría una sonrisa y caminarían juntos. En sus horas de comida y cena era acompañada por su hermana Daphne, quien le mencionaba que era para que Harry Potter no se acercara a ella.

Siendo honesta, Astoria no había visto a Harry desde tres días antes, ni en el comedor ni de por casualidad por los pasillos. Desaparecía igual que Draco, ¿a que jugaban esos dos? Ya que claramente había observado a los amigos de Potter, quienes si se presentaban en las comidas y cenas. En más de una ocasión se sintió tentada de acercarse y preguntarle a Hermione Granger sobre él, ya que la veía frecuentemente en la biblioteca. ¿En donde estaban ambos?

Pansy también comenzaba a quejarse de las ausencias de Draco, ya que ambos continuaban siendo prefectos de la casa y él no estaba asistiendo a sus rondas nocturnas ni apoyando a Pansy con respecto a la formación de los primeros grados, ella había explicado que no podía seguir cubriéndolo durante más tiempo y que la vez que se acercó al profesor Snape, él simplemente la ignoró. Astoria incluso se quedaba un poco tarde en la sala, esperando a que Draco volviera y pudieran hablar, pero nunca tenía éxito. ¿Qué ocultaba? ¿Por qué se escondía? ¿Qué hacía? ¿Ella podía ayudarlo?

—Draco ha terminado, definitivamente, con Pansy —Astoria abrió los ojos con sorpresa ante las palabras de su hermana. Daphne había susurrado, a pesar de que estaban solas. Amaba el silencio que las rodeaba, la mayoría de sus compañeros de casa se habían ido retirando poco a poco—. Pansy esta furiosa, ya que se supone que el inicio de su relación este año es para asentar el contrato mágico de matrimonio que tienen ambas familias.

—Espera… el día en que recibí la maldición de Harry, salí de la sala después de escuchar a Pansy que le gritaba a Crabbe y Goyle de que Draco la estaba tratando mal.

—Es normal que las parejas peleen, Tori. No es muy sano, pero muchas de esas relaciones son de terminar, volver, terminar, volver y es toda una rueda sin terminar —dijo Daphne dulcemente. Asrtoria sintió una puñalada en su propio corazón.

Ella había estado coqueteando con Draco, y él había correspondido a todos sus coqueteos y respondiendo con palabras lindas que la hacían sonrojas. Él cargaba con su mochila y cuando se la entregaba, él tenía el atrevimiento de pasarle el cabello suelto por detrás de su ojera. En una ocasión, Astoria estuvo segura de que recibiría su primer beso por parte de él, y cuando sus labios estuvieron a punto de tocarse, él simplemente se retiro sin explicación. ¡Era tan tonta y estúpida! Draco en todo momento siguió manteniendo su relación con Pansy.

Fue ella quien lo olvidó por completo.

¿Es posible que él terminara a Pansy por ella? No, lo dudaba. Seguramente todas las atenciones que Draco tuvo con ella se debían por lo ocurrido en el baño hace semanas. Quiso llorar, comenzaba a sentir que los ojos le picaban, pero se contuvo. Ahora que veía con claridad días atrás, Pansy no la había molestado en aquellas ocasiones que Draco se sentó con ella en la hora de la cena, nunca dijo ninguna palabra mordaz, pero tampoco le dirigió la palabra. Seguramente él habló con ella desde antes y le explico de esa gratitud que sentía sobre Astoria Greengrass.

Un sinfín de ideas pasaron por su cabeza.

—No sabía que Pansy tenía un contrato de matrimonio con Draco.

—Desde que tienen cinco años, Tori.

—Ella nunca lo ha presumido —Daphne forzó una sonrisa y asintió—. Ahora que lo pienso, ¿el señor Parkinson no lo rompió cuando metieron al señor Malfoy en Azkaban? Él sigue ahí hasta el día de hoy.

—Según a lo que Pansy nos ha contado, su madre visita mucho a la señora Malfoy y… —Astorio vio a su hermana que se mordía el labio y pensaba en sus palabras antes de continuar. Volteo durante varios segundos a todos lados hasta estar segura de que nadie la escucharía—. Pansy dice que quien-tu-sabes- se apodero de la mansión Malfoy.

Astoria intento controlar el quejido que amenazaba con salir de su boca, aunque no fue muy rápida y soltó su pluma, que cayó al suelo.

—¡Tienes que estar bromeando!

—No. Pansy me contó que quien-tu-sabes ha seguido reclutando a sus mortífagos e intentó reclutar a nuestro padre, Tori —Dijo Daphne escandalizada.

Astoria pensó en sus padres. Ella los amaba a profundidad y los respetaba, su madre suele ser muy superficial a los ojos de todos, ya que es el comportamiento esperado dentro de la sociedad mágica, en casa no es muy amorosa, pero tienen la confianza suficiente para acercarse a ella y contarle de sus cosas personales. Incluso les daba pequeñas golosinas cada que tenía que viajar. Su padre se encargo gran parte de su educación mágica y siempre les enseño a respetar a los sangre pura, los mestizos y a los hijos de muggles. Ellos no mantenían prejuicios sobre nadie, a pesar de que algunos las consideraban como oscuras para todas las demás casas y cobardes ante sus compañeros.

Desde la primera guerra mágica, su padre se negó a forzar parte del séquito de Voldermort. Él no respetaba sus ideales, por lo que pago una gran fortuna para hacer trato con los duendes y barrer la mansión Greengrass de salas anti-aparición. Se mantuvieron bien ocultos y no fueron molestados. Su padre también les contó la historia de como Albus Dumbledore intentó reclutarlo a una orden secreta, a su padre le pareció innecesario, prefería considerarse un cobarde a poner en peligro a su madre y Daphne.

El año pasado, su padre le creyó a Harry cuando él contó que Voldemort asesinó a Cedric Diggory y se sintió indignado de todas las blasfemias realizadas contra él.

El sudor comenzó a correr por su frente. ¿Su padre se había reunido con Voldemort? ¿Cuándo ocurrió eso? ¿O tal vez algún amigo, que en realidad era partidario de Voldemort, se acercó lo suficiente para hacérselo saber? ¿Estaban siendo amenazados? ¿Draco estaba bajo la influencia de Voldemort? ¿Por qué nadie revelaba esta información al Ministerio? Seguramente podrían luchar contra él y vencerlo…

—Papá no nos contó nada cuando fuimos a casa —murmuró—. ¿Crees que lo haga pronto?

—No lo sé. Las cosas están cambiando, Tori —susurró—. Tengo mucho miedo de lo que vaya a pasar.

—Nadie nos hará daño aquí, Daphne. ¿Crees que Draco…?

—Tal vez Draco ha intentado estar más cerca de nosotros porque él se lo pidió… nunca lo pensé. Simplemente estuve agradecida por toda la ayuda que me dio con respecto a ti, soy tan estúpida.

—¡No! —respondió rápidamente—. No pienses eso, no creo que haya fingido…

—No te ciegues, hermanita, sé que te gusta.

—Eso no importa ahora, Daphne.

—Tori —Daphne tomó su mano y la apretó, Astoria devolvió el apretón—, nuestra familia es primero. Somos leales a nuestra familia. Si papá dice que nos vamos a ocultar, lo haremos.

—¿Y si queremos pelear?

—Te apoyaría, pero preferiría que no —Astoria vio a su hermana estar al borde de las lágrimas—. Desde que Pansy me dijo que él intentó reclutar a papá… mamá suele viajar mucho y ella…

—Mamá esta bien protegida, recuérdalo —Astoria se levantó de su asiento y abrazó a su hermana.

Ambas hermanas sollozaron. En Hogwarts estaban a salvo, era el lugar más seguro, después de todo. Luego de estar abrazadas por varios minutos, acordaron de enviar varias cartas a su padre y madre.

Ninguna de las dos notó que Malfoy volvió.


—Hermione no ha podido superar que eres mejor que ella en pociones —Ron sonrió mientras llenaba su plato de comida por segunda vez.

Hermione puso los ojos en blanco y abrió El Profeta. Harry simplemente negó con la cabeza, necesitaba recuperar el libro del príncipe mestizo, pero no había podido entrar a la Sala de Menesteres. Alguien la ocupaba y solamente una persona faltaba en su mapa del merodeador. Pensaba y pensaba sobre lo que ocupaba, pero la puerta nunca aparecía.

—¡Oh! ¡Harry, no puede ser! —Harry frunció el ceño, pero no entendió a su amiga—. ¿Reconoces el nombre de Hestia Greengrass?

—¿Es familiar de Astoria?

—¿Astoria? —Ron arqueo la ceja y Harry se gritó mentalmente.

—¡Fue asesinada! —susurró.

Harry miró rápidamente hacia la mesa de Slytherin. Reconoció el cabello rubio de Daphne y el cabello oscuro de Astoria. Ella tenía una copia del profeta. Oh no… Harry se quedó paralizado, necesitaba levantarse e ir con ella y preguntar si requería de su ayuda, peor no pudo moverse. Vio a Dumbledore y Snape acercarse a ellas. No dudaba en que ambas hermanas ahora lloraban, pero no gritaban ni peleaban al enterarse de la noticia. Snape las ayudó a levantarse y salieron del comedor.


Astoria y Daphne abrazaron con fuerza a su padre.

Gareth Greengrass había llegado al colegio a través de la chimenea del director Dumbledore. Se derrumbó cuando vio que sus hijas estaban a salvo, les dieron la suficiente privacidad para llorar la perdida de su esposa. Incluso cedió en si quería llevar a sus hijas a casa durante los siguientes días para poder despedirse correctamente de su ser amado.

—El Profeta dice que la mataron los mortífagos —Astoria fue la primera en hablar.

—¿Quiénes…? —Daphne no terminó la pregunta.

—Su madre fue al Callejón Diagón —Habló Gareth limpiando las lágrimas de las mejillas de sus hijas—. Iba específicamente a Gringotts…

—¿Fueron los mortífagos? ¿Verdad?

—¿Fue porque no te quisiste unir a Voldemort? —preguntó Astoria y las lágrimas volvieron a sus ojos.

Él asintió y volvió abrazarlas.

—¿Quién fue?