Continuamos con este fic que yo espero que con el tiempo empiece a ganar más lectores, y aunque no sea así, y solo tenga a uno o incluso a nadie, yo lo seguiré actualizando porque es la única forma de sacármelo de la cabeza, o de lo contrario seguirá dándome vueltas y vueltas en la cabeza, además que hay muy pocos fics de esta pareja, y a raíz de eso, pues es mi deber contribuir a ese lado del fandom.

Dicho eso, aquí tienen el segundo capítulo.

Más que un vínculo II

Nuevos super villanos han estado causando problemas tanto en Jump City como en Cuidad Acero, quien sabe porque esas dos ciudades eran la cede para asaltarlas o tratar de conquistarlas por algún motivo egoísta y psicópata, sin embargo, los jóvenes titanes estaban ahí para detenerlos, especialmente al contar que podían recurrir a la ayuda de sus compañeros del este o del oeste según sea el caso. Ambos equipos se complementaban a la perfección tanto en las batallas como en los festejos con pizza que tenían tras una exitosa misión. Esta vez, ambos equipos estaban en la torre T del este.

-gracias por ayudarnos amigos – habla Abeja a los titanes del oeste

-no fue nada Abejita – responde Cyborg con una enorme sonrisa

-ustedes también nos han ayudado cuando lo necesitamos – dice Robin con orgullo sentado a lado de una alegre Starfire

-juntos hacemos un maravilloso equipo – canturrea risueña la dulce Tamaraniana – estamos en una pulcra armonía al momento de vencer a los villanos, especialmente cuando nos reunimos a celebrar nuestra victoria – se envuelve en su burbuja rosa con los ojos brillando de su excesiva felicidad

-si claro…. – Chico bestia agita su mano en señal indiferente a lo dicho por su alegre amiga – en fin, es hora de los videojuegos – alza dos controles al aire – traigo la última versión de mega monos 5, con gráficos casi reales y más niveles…. Y ahora si es una copia totalmente original

-Genial…. Yo primero – Cyborg le arrebata uno de los controles para irse a sentar emocionado al sofá

-yo también quiero jugar – Veloz le arrebata el otro control, dejando al titan verde con la boca abierta

-oigan el juego es mío – reclama Chico bestia apuntándose a sí mismo – así que yo debo jugar primero – trata de arrebatarle el control al arquero

-están en nuestra torre – debaten los gemelos – nosotros jugaremos primero – se abalanzan contra Cyborg

-nosotros venimos hasta aquí a ayudarlos – sorprendentemente, alega Robin – tenemos derecho a jugar primero

Y empieza una pelea en la sala por los controles del videojuego, solo se veían manos y pies envueltos en una nube de humo acompañados de una serie de reclamos indescifrables. Starfire da un largo paso hacia atrás para alejarse de aquel alboroto junto a Abeja, quien solo emite un largo suspiro resignado, quizá al momento del luchar todos se ponían de acuerdo de inmediato, pero era un asunto muy diferente cuando se trataba de los juegos de video.

-Por cierto…. ¿Dónde se habrá metido ese solitario del océano? – pregunta Abeja con reclamo, era típico de Aqualad apartarse del grupo

-no lo sé…. Tampoco he visto a mi amiga Raven –

En eso, oyen unas muy tenues risas al fondo de la habitación que siguieron lentamente. Se asomaron por atrás de la pared que ocultaba un pequeño cubículo que Aqualad construyo para leer o simplemente relajarse, ya que ahí tenían una hermosa vista del atardecer en su amado océano, encontrando a dicho Atlante riendo divertido a la par de Raven, eso si que era bastante inusual, Raven muy rara vez reía con tal soltura, pero ahí estaban los dos titanes más introvertidos del grupo, llevándose de maravilla. Las dos espías se miraron con complicidad, no era la primera vez que encontraban a esos dos platicando tan amenamente cada vez que se reunían, se podría decir que ya era su costumbre, así que, antes de que las descubrieran, se retiraron sigilosamente.

-Entonces prácticamente en lo que Starfire y Robin peleaban contra un extraterrestre casi invencible y Cyborg le daba instrucciones a Chico bestia para ensamblarlo a él y a la nave, tú estabas con unos marcianos diminutos que te daban el trato de una emperatriz de Egipto – reafirma divertido ante la historia que le conto Raven – me hubiera gustado ver la cara de los chicos cuando te encontraron

-pensaron que estaba en problemas – sonríe divertida al recordar las caras perplejas de sus amigos al verla recibiendo tal trato de aquellos seres – Chico bestia estuvo reclamando todo el camino de regreso a la tierra

-jajajaja compadezco un poco a Cyborg…. Tener que depender de la inutilidad de Chico bestia en la tecnología para ensamblarlo…. De lo único que sabe ese sujeto es de videojuegos y televisión

-aunque te sea difícil de creerlo, gracias a eso pudimos vencer a un villano – el Atlante la mira escéptico alzando una ceja – lo sé, yo aun no termino de asimilarlo

-supongo que no hay conocimiento que este de más – se alza de hombros – oh, y hablando de conocimientos…. Creo que tengo un libro que puede interesarte – toma un libro que estaba a su lado, entregándoselo gentilmente a Raven

-antiguos dioses del mundo – lee el titulo con notable interés

-viene la historia de varios dioses de diferentes culturas, es un poco grueso, pero es muy interesante –

-¿tú ya lo leíste todo? –

-si…. A veces me aisló un poco para leer – se rasca la nuca – me es relajante, aunque mis amigos me tachen de raro

De eso si que sabía Raven, tan solo porque gustaba de estar sola para leer por un buen rato, solo por que prefería los libros antes que la televisión o los videojuegos, no imagino que Aqualad fuese igual en ese aspecto. Le era muy sencillo y reconfortante hablar con el joven Atlante, por ello, comenzaba a agradarle mucho que ocasionalmente ambos equipos tuviesen que reunirse para enfrentar juntos a los criminales en turno, ya que, tras completar la misión, se sentaban a hablar por un buen y agradable rato de temas muy variados pero interesantes, habían descubierto que gustaban de las leyendas de terror, de hecho, Aqualad se sabía muchos historias marítimas y Raven le contaba historias de rituales. No fue del todo sorprendente que el color favorito de ambos fuese el azul y que disfrutaran de las tardes de poesía en el café subterráneo de la cuidad, quedaron de echo de ir a tomar un té helado un día a ese lugar.

La alarma de la torre comenzó a sonar alertando a los titanes que inmediatamente se reunieron frente a la pantalla gigante, que les mostro la terrible escena del hermano sangre del otro lado de la orilla mostrando su clásica sonrisa sádica, la que se veía mucho más amenazante al estar convertido en mitad robot. Sin embargo, eso no fue lo más alarmante. Aquel siniestro director no venia solo, tras de él, le seguían un enorme ejercito de robots que eran copias de cada titan del este y del oeste.

-¿otra vez ese sujeto? – exclama Cyborg molesto

-¿no se supone que estaba en la cárcel? – le pregunta Robin a Abeja

-si, y se supone que era una de alta seguridad…. No tengo idea desde cuando escapo –

-pues considerando que le dio el tiempo suficiente para hacer una mala copia robótica de todos nosotros yo diría QUE FUE HACE MUCHO TIEMPO – dramatiza histérico Chico bestia - ¿Qué es lo que sucede con la seguridad de las prisiones en esta ciudad?

-no es momento de ponernos a pensar en eso – dice Robin con firmeza – tenemos que detenerlos antes que invadan la torre

-¡vamos titanes! – exclama Abeja

Al ver a ambos bandos saliendo de la torre T, el hermano sangre sonríe maliciosamente mostrando una confianza que rayaba en la soberbia, solamente los separaba la poca cantidad de mar que había entre la torre y la ciudad. Los clones robots de Cyborg derribaron un alto edificio para formar un puente entre la cuidad y la torre, por donde el ejercito de aquel director maniático comenzó a desplazarse. Los titanes inmediatamente se pusieron en guardia para comenzar la batalla, pero el hermano sangre alzó un brazo en señal de que su ejército se detuviera a pocos metros de los titanes.

-contemplen mis alumnos - extiende sus brazos a los lados – su nueva escuela

-estas loco si crees que te dejaremos tomar nuestra torre para tu inútil escuela – Abeja toma sus armas preparándose para atacar

-¿y de que te serviría tener un montón de robots descerebrados por alumnos? – hace la imitación de un zombie

-ellos son los alumnos perfectos – alardea el director – obedecen sin cuestionar mis ordenes, y puedo programarlos a mi antojo…. Aunque gran parte de lo que saben es gracias a ustedes

-¿de que estas hablando? – exige saber Robin

-el día que entré a las mentes de los titanes del este, hice que colocaran miles de nano cámaras en cada rincón de su hogar – tal revelación deja sorprendidos a los titanes – todo lo veo aquí – señala su cabeza – incluso cuando no están en la torre, veo lo que hacen, mis cámaras también están incrustadas en ustedes titanes, imperceptibles a simple vista…. Mis alumnos están programados con lo que he gravado de ustedes, cada movimiento, cada poder, ellos también lo tienen –

-eso no puede ser posible – debate Aqualad – algunos tenemos poderes que es imposible que tus robots puedan imitar

-¿Por qué no lo comprueban ustedes mismos? – y con un chasquido de dedos, los robots comienzan el ataque

Y tal como fue la amenaza del director, sus robots imitaban casi a la perfección los movimientos de los verdaderos titanes. Las versiones de Robin y Veloz poseían las mismas habilidades para las artes marciales y sus mismas armas, ambos estaban batallando demasiado para vencerlos. Cyborg tenía más problemas al enfrentarse con sus contrapartes, ya que estos poseían su misma fuerza y armas. Los robots de Starfite y Abeja incluso también contaban con la habilidad de volar y lanzar rayos muy similares a los de ellas. Los robots de los gemelos quizá no eran tan veloces como ellos, pero igual corrían bastante rápido. Pudieron detener a la mayoría, pero algunos de esos robots ya habían logrado entrar a la torre del este.

-más y menos, ustedes vayan a la torre del oeste e impidan que también la tomen – ellos obedecen a su líder Abeja y salen a toda velocidad

-ja, dudo que mis imitaciones baratas puedan transformarse en animales – alardea Chico bestia convirtiéndose en un enorme tiranosaurio rex que gruñía ferozmente. Sin embargo, los robots de dicho titan se transforman cada uno en dinosaurio, mamut, oso, y demás enormes animales robóticos que rodearon rápidamente al original.

Por parte de los robots de Raven, estos podían igualmente levitar y lanzar energía negra de choques paralizadores, pero ella era perfectamente capaz de crear un escudo protector para desviar los ataques, pero eran tantos ataques consecutivos que Raven solo podía limitarse a defenderse y a resistir lo mejor que podía. Las imitaciones de Aqualad solo se podían limitar a arrojar chorros de agua con la potencia de una manguera de bombero, pero claro, él podía fácilmente controlar tal elemento y regresarles el ataque duplicado a los robots, mandando a la mayoría al mar.

-olvidaste enseñarles a tus alumnos a nadar – se burla el Atlante, ganándose una furiosa mirada del hermano sangre

-estudiantes – dice el siniestro director – hora de ingresar a su nueva escuela

Tan solo se requirió que el director pulsara un botón de su brazo para darles a cada uno de los robots un incremento de energía, que les permitió derribar a los titanes e irse a reclamar la torre. Starfire recibió varios rayos de sus imitaciones robóticas, dejándola fuera de combate e inevitablemente haciéndola caer de varios metros de altura.

-¡Starfire! – grita aterrado Robin, lanzándole varios de sus boomerangs explosivos a los robots que le impedían el paso.

Starfire caía rápidamente, pero Robin da un fuerte salto logrando atraparla en sus brazos. La chica no se veía nada bien, recibió varios ataques de esos robots.

Abeja apenas pudo escapar de los ataques consecutivos de sus clones para ir en ayuda de Veloz y sacarlo de los robots que ya lo tenían acorralado dándole una serie de golpes que por poco y lo dejaban fuera de combate.

Chico bestia pudo vencer a varios de ellos, pero, aun así, unos cuantos se le escaparon y entraron a la torre.

El escudo de Raven ya no resistió más los ataques cuya potencia había incrementado considerablemente, por lo que termino colapsando y mandándola por los aires directo a una pared contra la que se estrello violentamente.

-¡Raven! – grita Aqualad con la intención de ir en su ayuda, pero repentinamente, ya tenía al director tomándolo por el cuello y alzándolo

-tuviste razón exalumno – dice con odio y sorna – no pude transmitirles todas sus habilidades a mis nuevos estudiantes…. Como tú fantástica habilidad de controlar las aguas y a toda clase de seres acuáticos – Aqualad luchaba por liberarse, pero la fuerza mecánica de ese maniático era abrumadora – pero creo que eso tiene solución – pone una mano en la frente del Atlante enviándole una descarga que lo hace retorcerse de dolor. En eso, Raven se incorpora, viendo primeramente a la tortura a la que estaban sometiendo a su amigo

-no lo lastimes – amenaza con sus ojos oscurecidos al tiempo que levita varios objetos para mandarlos directo al hermano sangre, pero estando a centímetros de golpearlo, dichos objetos vuelan en pedazos por las certeras flechas de las imitaciones de Veloz

-tengo ojos en todas partes – alardea – se cada uno de sus movimientos, y también mis alumnos – continúa lastimando a Aqualad

-apuesto que no venias venir esto – recita su mantra para abrir un portal justo debajo del director, que cayó inevitablemente en el. Aqualad cae de rodillas semi inconsciente y Raven va con él - ¿estas bien? – le ayuda a ponerse de pie

-si…. – dice en un difícil susurro – gracias, Raven – sus oscuros ojos reflejaban gratitud y posiblemente algo más, que avergonzó momentáneamente a la titan - ¿A dónde enviaste a ese director?

-solo a la planta baja…. No tuve tiempo de crear un portal más lejano –

- varios titanes están heridos – informa Robin por los comunicadores – tenemos que retirarnos

Y sintiéndose sumamente imponentes al no poder seguir combatiendo, los titanes se retiraron a lo alto de un rascacielos donde observaban como la torre del este era totalmente custodiada por cientos de robots y al hermano sangre sobre la terraza, luciendo su sádica sonrisa como todo un despiadado dictador.

-no podremos volver – dice con pesar la líder del este

-aun derrotando a todos los robots, ese director conoce todos nuestros secretos…. Y nos costara encontrar todas las nano cámaras que instalo, pueden ser miles – habla Aqualad

-¿Qué haremos ahora? – pregunta Veloz

-la única solución es derrumbar la torre junto con todos los robots dentro – incluso el mismo Robin, quien tenia a una inconsciente Starfire entre sus brazos, odiaba sus propias palabras

-¿y como haremos eso? – a Chico bestia tampoco le agradaba esa idea, pero no quedaba de otra

-le pediré ayuda a un amigo – dice Aqualad – él fácilmente podrá hundir la torre hasta el fondo del mar – no estaba nada contento con hacer eso, pero si quería acabar aquel abominable ejército, tenían que sacrificar su hogar, así que, dirigió su vista al profundo océano con la intención de usar sus poderes telepáticos, pero un fuerte dolor en su cabeza lo hizo arrodillarse

-¿Qué sucede? – pregunta Raven inclinándose a lado del Atlante

-no puedo…. – susurra alarmado – no puedo usar mis poderes telepáticos, algo me hizo ese director

-tranquilízate…. Se necesita de hechicería muy avanzada para despojar a alguien de sus poderes, seguramente solo los bloqueo, pero yo probablemente pueda ayudarte – Aqualad de inmediato creyó en ella, así que dejo de lado todo temor de verse privado de sus poderes para siempre y miro a Raven con gratitud, gesto al que respondió Raven con una sutil sonrisa

-Robin…. – oyen el debilitado susurro de Starfire que apenas y podía tener los ojos entreabiertos

-calma Starfire, todo estará bien – le susurra Robin con una forzada sonrisa para tratar de calmarla – descansa – observa como su más querida amiga vuelve a quedar inconsciente entre sus brazos – tenemos que atenderla rápido, recibió muchos ataques directos

-todos tenemos que atendernos – dice Abeja, ella tenia un brazo lesionado, Veloz tenia varios golpes en todo el cuerpo, al igual que chico bestia y Robin, aunque nadie en estado tan crítico como Starfire – pero no podemos dejar a ese loco suelto, quien sabe que puede hacerle a la cuidad y si hace más robots nunca los podremos detener

-yo me encargare – anuncia Raven poniéndose de pie de frente a la torre en actitud misteriosa

La oscura titan empezó a levitar mientras era rodeada por una profunda aura negra, extendió sus brazos a los lados y sus ojos se oscurecieron por completo, recita un par de veces un mantra diferente al usual al tiempo que un estremecimiento comienza a sonar a lo lejos, más específicamente en la isla donde estaba edificada la torre T del este, sitio que, para asombro de los titanes, comienza a hundirse al ser succionada por un enorme hoyo negro debajo de esta. El director ve con horror como era absorbido poco a poco junto con el edificio que tomo por la fuerza, intenta escapar al ordenarle a sus alumnos robóticos que lo sacasen de ahí, pero pese a que intentaron sacarlo volando, el hoyo los estaba absorbiendo con la fuerza de un agujero negro. A los pocos minutos, ya no quedaba rastro alguno de los robots, del hermano sangre o de la torre.

El aura oscura que rodeaba a Raven desaparece, así como sus energías que ya no le alcanzaban para continuar consiente, por lo que empieza a caer. Aqualad se apresura a tomarla de la mano, evitando que continuará cayendo a 200 metros de altura. La atrajo a él acunándola en sus brazos mientras la miraba preocupado y le quitaba sutilmente un mechón de su frente.

Llevaron a Raven a su habitación en cuanto llegaron a la torre del oeste, mientras que a Starfire la ingresaron en el cuarto médico, ya que ella requería más atenciones por los ataques que recibió. Aqualad quiso quedarse junto a Raven hasta que despertara, pero Cyborg le tranquilizo diciéndole que ella solo requería entrar en una especie de trance para recuperarse por completo, por ahora, lo más importante era ayudar a los demás titanes heridos e inspeccionarlos a todos con su super escáner para extraerles las nano cámaras que el director instalo en ellos, no podían arriesgarse a que otro villano accedieran a ellas y vieran cada uno de sus movimientos, aquello fue una tarea algo complicada y larga, pero logro encontrar todas las minúsculas cámaras que estaban incrustados dentro de sus parpados.

Ya siendo atendidos de sus heridas y sin nano cámaras en ellos, los titanes fueron a la sala común a reposar en el largo sofá, sin embargo, el ambiente en el grupo era muy pesado y decaído, si, lograron deshacerse de ese director maniático, pero a un alto costo, la torre T del este ya no estaba y les llevaría demasiado tiempo volver a construirla. Robin por supuesto que les ofreció quedarse todo el tiempo que quisieran, que se sintieran como en casa, ellos aceptaron su generosa oferta, pero aun así se sentían terribles por no haber podido defender su hogar. Como líder, sabía que tenía que hacer algo para animarlos, pero él estaba demasiado inquiero por su amiga originaria de Tamaran, así que fue con ella, deseaba mantenerse positivo y confiar en la resistencia de Starfire, pero su mente no podía dejar de pensar que si algo malo le pasaba jamás podría perdonárselo, especialmente por haberse tardado tanto en confesarle sus verdaderos sentimientos.

Raven emitió un leve quejido al momento de abrir sus ojos y sentarse en su cama mientras miraba a su alrededor, ubicándose que estaba en su habitación. A su mente vienen los recuerdos respecto al ataque de la torre del este, y de lo que tuvo que hacer para deshacerse del hermano sangre y su ejercito de robots. Ignoraba cuantas horas estuvo en trance, pero supuso que tuvo que ser bastante tiempo considerando las energías que tuvo que usar para crear el enorme portal, pero, ya se encontraba totalmente recuperada, así que ahora debía ir a ver si todos sus amigos se encontraban bien, especialmente por su amiga Tamaraniana que fue quien recibió graves ataques que la dejaron inconsciente.

En cuanto abrió la puerta, justo enfrente de ella recargado en la pared de enfrente se encontró al titan originario de la Atlántida, que alzo la vista en cuanto reparo en su presencia.

-Raven – se pone frente a ella - ¿te encuentras bien? ¿no estas lastimada? – su sincera preocupación la sorprende tanto, que no es capaz de responder a ninguna de las preguntas - ¿Raven?

-estoy bien – responde al fin – solo gaste mucha energía, pero ya me he recuperado – Aqualad suelta un largo suspiro, era como si hubiese estado reteniendo el aire hasta ese momento en que le confirmo que se encontraba fuera de peligro - ¿tu como estas? – se sonrojo levemente al caer en cuenta que eso sonó algo íntimo, especialmente ante la sonrisa que el Atlante puso en su rostro

-estoy bien, solo…. Me siento algo raro al no tener mis poderes – se le ve cabizbajo

-no te preocupes, estoy segura de que algo puedo hacer para ayudarte –

-lo sé…. No pongo en duda tus increíbles poderes – de nuevo esa gallarda sonrisa, Raven ladea la cabeza temiendo que si seguía viéndolo sus emociones se saldrían de control

-¿y como están los demás? – pregunta al tiempo que comienza a caminar rumbo a la sala común

-mientras dormías, Cyborg logro extraer las nano cámaras que el hermano sangre puso en nosotros – le dice mientras la seguía – atendimos las heridas de todos, pero…. – Raven se detiene ante el tono inquieto con que dijo lo último – Starfire sigue inconsciente, recibió fuertes ataques de esos robots – normalmente Starfire era más resistente a cualquier ataque de los villanos, quien sabe de que estaban hechos esos rayos de sus clones robóticos que la dejaron fuera de combate – esta en el cuarto medico…. Robin no se ha separado de ella

-iré a verla, luego te revisare a ti –

-no te preocupes por mi ahora – pone su mano en el hombro de Raven -ve a ver a Starfire

Efectivamente, al entrar al cuarto médico, se encontró a Robin sentado a lado de una inconsciente Starfire conectada al aparato que media su pulso cardiaco, aparato que el chico maravilla observaba como si temiese que, si le quitaba la vista por un segundo, comenzaría a indicar, mediante un pitido constante y una línea recta, que su amiga se había ido.

-¿ha tenido algún cambio? – ante su pregunta, ve a Robin sobresaltarse un poco

-Raven, que bueno que ya despertaste – se pone de pie frente a ella - ¿Cómo te sientes? – típico de Robin, pese a tener la angustia de la recuperación de Starfire, aun estaba al pendiente de su bien estar

-mejor…. Solo necesitaba descansar – dice caminando junto a la Tamaraniana - ¿Cómo sigue Starfire?

-Esta estable…. Pero me preocupa que aún no despierte – aun tras la máscara, era clara la angustia en su rostro – Starfire normalmente resiste mucho más, quien sabe de que estaba hechos esos malditos rayos de sus copias robóticas – escupe con odio, pero ella, al tener el vinculo con el chico, pudo percibir que era más el odio consigo mismo al no protegerla en la batalla

-Robin, no por ser nuestro líder es tu obligación protegernos…. Todos estamos consientes de los riesgos que conlleva ser héroes

-lo sé…. – dice en un culposo suspiro

Raven puso sus manos a los lados de Starfire, recita unas cuentas palabras cerrando sus ojos y comienza a emanar una especie de luz azul oscuro. Las heridas de la chica de Tamaran comienzan a sanar rápidamente, incluso en su rostro comienza a verse una mejora.

-se pondrá mejor, solo dale más tiempo para descansar – dice terminando su curación

-muchas gracias, Raven – la vista de Robin va directo a Starfire, ya notándosele mucho más tranquilo

-Tú también deberías descansar un poco – le aconseja – además, los titanes del este necesitan tu apoyo, ellos acaban de perder su hogar

-sí, tienes razón –

Le da un ultimo vistazo a su preciada amiga antes de seguir a Raven a la salida, confiaba en que pronto despertaría y escucharía su alegre voz muy pronto. Al llegar a la sala común, se encontró con un ambiente pesado y melancólico, especialmente por parte de los titanes del este, era normal que se sintiesen impotentes al no haber podido defender su torre que con tanto esfuerzo construyeron.

-Robin – le habla Cyborg al verlo - ¿Cómo sigue Star?

-pronto despertara, Raven acaba de curarla con sus poderes – todos los titanes reflejan un gran alivio, al parecer, estaban más preocupados por su amiga alienígena que por la perdida de la torre del este – y hablando de eso…. Quizá deberías revisar que sucede con los poderes de Aqualad – le pide a Raven

-no hay prisa con eso chicos – detiene gentilmente el Atlante – Raven acaba de despertar y curar a Starfire…. No seria justo exigirle que use más sus poderes, después de todo, gracias a ella nos libramos del hermano sangre – la mira con orgullo

-cierto, lo que hiciste fue asombroso – alaga emocionado Veloz - ¿A dónde enviaste a ese maniático? – Por respuesta, Raven sonríe con cierta divertida malicia.

La razón por la que Raven gasto tanta energía al grado que cayo desmayada al hacer aquel portal, fue porque había enviado al hermano sangre y a su sequito de robots, a un planeta a varios años luz de la tierra, donde no había más que un eterno y crudo invierno, por lo que, estará eternamente en aquella torre que tomo por la fuerza a menos que quiera congelarse en cuestión de segundos.

El crear un portal de tal magnitud a distancias tan lejanas, conllevaba usar una enorme cantidad de energía y suma concentración, un minúsculo descuido podría provocar que el portal se convirtiese en una super nova incontrolable que absorbería la mitad del planeta, o en el menor de los casos para la humanidad, ella podría convertirse en polvo al no poder controlar tal cantidad de poder. Robin por supuesto, al oír tal cosa, le prohibió volver hacer tal cosa para librarse de un enemigo, no importando que tan peligroso fuese, ellos como equipo que eran lograrían vencer cualquier cosa. Incluso Aqualad secundo con firmeza la prohibición de Robin, prometiéndole que él haría lo que fuese para ayudarla y que no tuviese que recurrir a tal medida tan peligrosa. Ella se sonrojo tenuemente ante la apasionada promesa del Atlante.

Aqualad finalmente fue a recostarse a una camilla a mitad de la sala cuando Raven pudo convencerlo de encontrarse perfectamente para checar sus poderes bloqueados. Todos los titanes se encontraban cerca esperando atentos y curiosos para ver en primera fila los poderes curativos de la titan, cosa que no agrado mucho a Raven, pero no le quedaba de otra ya que el cuarto medico estaba ocupado y por nada del mundo llevaría al Atlante a su habitación.

Hizo a entrar a Aqualad en una especie de trance mientras ella flotaba en posición de loto frente a él. Lo que a continuación haría pasaría imperceptible ante los ojos de los demás, ya que mediante un viaje astral se adentro a la mente de Aqualad para buscar dentro de su mente lo que mantenía sus poderes bloqueados. No le fue difícil encontrar la causa, la mente de Aqualad solamente se había protegido del ataque eléctrico que el director uso en contra de él, así que recito unas cuantas palabras que liberarían la mente del titan, pero, justo antes de volver a su cuerpo físico, los profundos ojos negros del Atlante aparecieron frente a ella, mirándola fijamente, casi penetrando su alma de una extraña y fascinante forma, fue tal el impulso que sintió que mando el cuerpo intangible de Raven a su cuerpo físico de modo tan repentino que la hizo caer de espaldas.

-Raven – Robin fue hacia su amiga, quien se veía desconcertada mientras llevaba una mano a la altura de su corazón - ¿Qué sucedió?

-nada…. – se pone rápidamente de pie, sentía su corazón latir exageradamente rápido

-¿estas segura? –

-estoy segura, no hay nada de qué preocuparse – Robin cree en la expresión tranquila de Raven, sabía que algo le ocurrió, pero no parecía ser nada grave

-¡RAVEN! – grita Aqualad despertándose de golpe. Respiraba agitadamente y, al igual que Raven, llevándose una mano a su corazón

-hey, tranquilízate viejo – dice extrañado Chico bestia al verlo despertar de esa forma – te dará un infarto

-¿Qué paso? – se cuestiona Aqualad ante aquella emoción repentina que estaba sintiendo

-solo estas un poco confundido – voltea a donde estaba Raven, pero ella, por alguna razón, no lo miraba directamente – es normal – se extraña de su repentino comportamiento tan distante con él

-y bueno ¿funciono? – pregunta curioso Veloz - ¿ya tienes de vuelta tus poderes para hablar con los peces? – intenta sonar burlesco, pero Aqualad lo ignora poniéndose de pie para caminar al ventanal que daba al mar, en el que, a los pocos segundos, aparecieron varios delfines saltando juguetonamente – eso es un rotundo si…. Asombroso Raven, contigo no importa lo que los villanos lleguen a hacernos, nos curaremos en cuestión de segundos – pero ella simplemente se coloca su capucha ignorando el comentario del arquero

-debo descansar un poco más, estaré en mi habitación – sin dar más explicaciones, se retira. Ese comportamiento recluido era normal en ella, pero, aun así, dejo un tanto extrañados a los titanes en la sala

Por parte del titan del mar, este siguió de pie mirando al océano, o al menos daba la impresión de eso porque su mente se encontraba en otra parte, más específicamente en un par de grandes ojos de un violeta intenso que repentinamente estaban acelerando demasiado a su corazón.

-¿te sientes bien Aqualad? – le pregunta Abeja parada detrás suyo

-si…. Es un poco raro que entren a tu mente, es todo – no le cree del todo, la situación se puso un poco extraña tanto con él como con Raven, pero ya no pudo cuestionarlo debido a que Robin le pidió que hablaran un momento, así que se fue con él

Los ojos negros de Aqualad continuaron fijos en el océano, pese a su expresión seria y confundida, no mentía al afirmar que estaba bien, de hecho, se encontraba maravillosamente bien, sentía una extrema dicha en su interior, tan grande, tan repentina, que, pese a estar tan ridículamente feliz no lo podía expresar facialmente, ya que, del mismo modo, eso lo estaba confundiendo de sobre manera. Y lo mismo era para la chica titan de la capa azul que también miraba el océano desde su habitación al tiempo que se volvía a llevar una mano a su corazón, que continuaba latiendo frenéticamente.

Y ya comienza lo interesante….

La verdad que estoy disfrutando mucho el escribir este fanfic, y no importa que por ahora tenga a dos lectores, a quienes agradezco que estén leyendo de este peculiar ship.

Veremos en el próximo capitulo que pasara con los titanes del este ahora que no tienen hogar, y sobre todo, que sucederá con Raven y Aqualad a partir de ahora.

¡Hasta el próximo capitulo!