RESPUESTAS A REVIEWS

[N64RX] Supongo que mientras no te haya traumado, todo bien xD. Muy buen argumento para dar tu opinión sobre cual consideras el peor villano de todo MLP. Es lo mejor que se podría decir para reforzar la opinión de uno. Esas preguntas tendrán el único propósito de conocer la opinión de otros usuarios, nada más. Una de las razones por las que me pongo a jugar videojuegos es para descansar, ya que escribir una buena historia no es nada sencillo y lleva su tiempo. En especial cuando quieres que tanto la ortografía, el desarrollo y dirección salgan bien. Hay que ser paciente, ya que me toma entr meses sacar un nuevo capítulo. SALUDOS igualmente para ti, amigo. Parece que encontré otro seguidor destacado :).

[angelmolina056] ¿De qué estas hablando, amigo?. No tengo ninguna lista de ningún tipo. Spike usa una espada la cual es la misma que la Dragon Sword de World of Warcraft. Búscala en Google Imágenes y verás su increíble diseño. Y en cuanto a lo de poderes... tienes que seguir leyendo y ser pasciente. Solo puedo decirte eso.


CAPITULO 10

Un dragón guerrero. Tres Guardianas de la Armonía. La raza Wolf al acecho. Un único propósito: proteger Equestria. Con el entrenamiento que él mismo recibió durante su servicio militar de 4 años en Dovahkiin, Spike convertiría a Twilight, Applejack y Rainbow en las ponys combatientes más fuertes de toda Equestria. Desde el punto de vista de Spike, las tres Guardianas poseían un gran potencial en su interior, en espera de ponerse a prueba. Y con los malditos Wolves posicionándose en el mapa, sería la oportunidad perfecta para que las Guardianas de la Magia, Honestidad y Lealtad lo dieran todo por su tierra. Solo era cuestión de pulir al máximo ese potencial.

Después de un disfrutable desayuno que los cargó de energía, acordaron ir a una zona abierta y alejada del Imperio de Cristal. Pero antes, descansaron durante una hora entera, más que nada para reposar. Una vez pasada la hora, Spike, Peewee, Twilight, Applejack y Rainbow salieron del castillo.

-¿Ahora hacia donde, amigos?- preguntó la vaquera, apenas se encontraron a las afueras del castillo.

-Cualquier zona lo más abierta posible. Una zona cerrada como esta limitaría demasiado el entrenamiento. Y eso es algo que no queremos. Ustedes solo síganme, compañeras- dijo Spike mientras extendía sus alas.

-Te seguimos, Spike- dijo Twilight.

-¡Ya se ha dicho!- agregó Rainbow.

Peewee carraspeó en forma de respuesta a su amigo dragón del alma.

Sin nada más que agregar, todos se pusieron en marcha. Debido a que Applejack era la única que no podía volar, Spike se ofreció a llevarla sobre su espalda. Una vez más, mostrando la enorme voluntad que caracterizaba al dragón. Y siendo una de las virtudes que a Twilight más le encantaban de su amado dragón guerrero.

Una vez que Spike vió que se encontraban lo suficientemente alejados del Imperio de Cristal, y con un espacio más que extenso, decidió que era el lugar perfecto para entrenar sin la preocupación de molestar o herir accidentalmente a algún habitante del Imperio.

-Esta distancia es más que suficiente. Aquí podremos entrenar sin ningún inconveniente- dijo Spike, para después descender junto al resto.

-Pues déjame decirte que la vista era magnífica desde allá arriba, colega, hehe- inquirió Applejack.

-Suerte la nuestra al tener toda esta zona para nosotros. No quiero que nadie salga herido por algún error mío- dijo Spike mirando todo el extenso terreno.

-¿Por qué lo dices, colega?. Sé que serías incapaz de lastimar a alguien- le habló la vaquera.

-Spike me contó que cuando entrena suele destruir varias cosas a su alrededor. Por eso tomó las precausiones necesarias y nos trajo hasta aquí- explicó Twilight.

-Gracias por adelantarte, Twilight. Entiendes casi de forma instantánea lo que suelo hablar- dijo Spike.

-De nada, Spike, hehe- dijo ella sonriendo.

-Pues creo que no habrá motivos para preocuparse. Estamos solo nosotros cinco aquí y no hay absolutamente nada que destruir- dijo Rainbow.

El fénix le carraspeó a la pegaso.

-¿Eh?. ¿Me dijiste algo, Peewee?- preguntó ella.

-Te dijo que gracias por incluirlo a él también cuando nos nombraste a los cinco- dijo Spike.

-Jeje. De nada, supongo- dijo ella.

-Pues vale. Antes de nada, hay algo que debemos tener en mente en TODO momento si queremos ser los vencedores en las peleas que nos aguardan- dijo el dragón.

-¿Y qué sería, Spike?- le preguntó Twilight.

-Las habilidades de nuestros enemigos- respondió el guerrero.

-Muy buen punto- dijo la pegaso celeste.

-Twilight, ¿recuerdas que durante nuestro viaje en tren me preguntaste si tuve dificultades para luchar contra los Wolves?- le preguntó Spike a la alicornio.

-Si, lo recuerdo- respondió ella.

-Vale. Las pondré al corriente en ese caso. Cuando me infiltré en esas montañas, me ví obligado a luchar contra los Wolves si quería tener alguna oportunidad de salir de ahí. Desde ya les voy a decir que los Wolves... saben dar duras peleas a sus enemigos. Son fuertes, pero no son nada del otro mundo, así que relájense. Se destacan por ser muy veloces y hacer ataques casi inaludibles e impredecibles. Lo que más usan para el combate cuerpo a cuerpo son sus garras. Son casi o igual de filosas que las de un dragón, y pueden provocar cortes bastante graves y dolorosos. Lo digo por experiencia propia. Tengan esto en mente a toda hora, chicas. Lograron herirme bastante, aún cuando la piel de los dragones es acorazada y bastante dura de atravesar-

Al escuchar esas últimas palabras, Twilight recordó como estaba Spike cuando lo encontró inconsciente afuera del castillo en Ponyville. Le dolía muy fuerte el solo recordar aquella dolorosa imagen de él tirado en el suelo con cortes llenos de sangre en sus brazos y abdomen.

-Te creemos, colega. Estabas muy mal cuando te encontramos inconsciente en Ponyville. Y con heridas y todo, lograste regresar de esa misión suicida. Realmente estaba sorprendida, Spike- habló Applejack.

Spike recordó como logró regresar a Ponyville, a pesar del cansancio, el dolor y los múltiples cortes llenos de sangre.

Flashback: Spike regresando a Ponyville de su misión

Luego de una agonizante hora de vuelo, Spike logró divisar el pueblo de Ponyville a la distancia. Ignorando totalmente el dolor, el cansancio y sus heridas cubiertas de sangre, el dragón hizo uso de sus últimas fuerzas para seguir y finalmente aterrizar frente al castillo de Twilight.

-De algún modo lo logré. Pero... ya no puedo... continuar...- tambaleándose y con sus fuerzas al cero, el dragón cayó de rodillas sobre la tierra, y finalmente, se desplomó sobre ésta.

Fin del Flashback

-Tenía que regresar. Era de vital importancia todo lo que pudiera saber sobre los Wolves. Además, no iba a romper esa promesa que le hice a Twilight- dijo él mirando sus brazos y abdomen, donde aún tenía las marcas ligeramente visibles de los cortes.

-Lamento de verdad que hayas tenido que pasar por todo eso, Spike. Arriesgaste tu vida con tal de ayudarnos a proteger nuestro hogar- dijo Twilight con mucha preocupación por la vida de su dragón.

-Tú lo dijiste, Twilight. Nuestro hogar. Porque Equestria también es mi hogar. La tierra donde nací. ¡Y juntos lo vamos a proteger!- le dijo Spike con su puño derecho en alto.

-¡Esa es la actitud, Spike! ¡La actitud que todos debemos tener en este momento! ¡Determinación! ¡Los Wolves no podrán lidiar con la pegaso más veloz de toda Equestria! ¡Oh sí!- decía Rainbow con una motivación un poco exagerada.

-Haz a un lado el orgullo, Rainbow. No te confíes. Todos estamos de acuerdo en que eres la pegaso más veloz que hemos conocido, pero el exceso de confianza solo te llevará a la derrota y créeme... los Wolves no se apiadarán de NADIE- le dijo Spike.

-Spike tiene razón, Rainbow. ¿No recuerdas toda esa masacre que vimos en Griffonstone cuando buscábamos griffos supervivientes?. Quiero sacarme esas sangrientas imágenes de la cabeza. Jamás había visto algo así- le dijo Applejack a Rainbow mientras se abanicaba con su sombrero.

-No me lo recuerdes. Qué horror, en serio- Twilight estaba de acuerdo con su amiga vaquera.

Rainbow recordó la cruel masacre de Griffonstone. Casas destruidas e incendiadas, cadáveres llenos de sangre y hasta algunos habían sido... desmembrados. Patas, cabezas, etc. Todo lo anterior lo pudo ver cuando intentó buscar supervivientes junto a Twilight y Applejack. Un búsqueda lamentablemente fallida. Aquellas cruentas imágenes la hacían ver que se trataba de una despiadada demostración de las sanguinarias tácticas de los Wolves.

-Ahora que lo dices... tienes razón, Spike. Hay que ser bien sensato para enfrentar una situación como ésta. Si de verdad nosotras tres somos las que se toman esta amenaza en serio, a diferencia de Rarity, Pinkie y Fluttershy, entonces hay que actuar como tales. Y eso es lo que quiero hacer. Se los prometo, amigos. Voy a actuar con la seriedad necesaria cuando se requiera. No por nada somos "Las Tres Grandes", chicas- respondió ella.

-Ahora caes en la situación, Rainbow. De verdad que eres genial- le dijo Applejack a la pegaso.

-Eres vital para nuestro equipo, Rainbow. Jamás pienses lo contrario- agregó Twilight.

-Así se hace, Rainbow. Eso es ser prudente, compañera- dijo el dragón.

-Guau, hehe. Gracias de verdad, amigos. Son los mejores- respondió ella, bastante conmovida por sus palabras.

Peewee le carraspeó a Spike.

-Tienes razón, compañero. Mejor empezamos de una vez. Primero que nada, nuestro equipo tiene una muy buena variedad de habilidades. Fuerza, velocidad y poder. Y ustedes tres juntas compaginan de manera espectacular, chicas. Applejack posee una fuerza sorprendente, Rainbow destaca por su asombrosa velocidad y Twilight sabe sacarle provecho a su magia- dijo Spike.

-Años de recolectar manzanas dan sus frutos, colega. Y créeme cuando te digo que estos cascos son de hierro puro- dijo la vaquera.

-Estas amigas mías siempre están listas para la acción. Y me ayudarán a dejar en segundo lugar a los Wolves- dijo la pegaso mostrando sus alas.

-Tienes razón, Spike. Mi propia magia me llega a sorprender. Me imagino que otras cosas podría llegar a hacer- dijo la alicornio.

-Siempre tengan fé en ustedes mismas, chicas. Deben tener siempre la seguridad de que pueden hacerlo si se lo proponen. Las tres albergan un enorme potencial en su interior. Yo lo sé. Me lo demostraron cuando pelearon a mi lado en Griffonstone. Lo único que hace falta es pulir al máximo ese potencial. Y es por eso por lo que estamos aquí. Para demostrar que ustedes son las tres grandes que yo sé que son- dijo el dragón a las tres ponys.

-¿Y qué es lo que haremos primero, Spike?- le preguntó Rainbow al dragón.

-Me centraré en sus habilidades más destacadas, chicas. Les mostraré factores que por más simples que parezcan, pueden influir de gran manera si los combinan con sus habilidades en una pelea mano a mano. Los mismos que me enseñaron en el servicio militar, ahora yo se los enseñaré a ustedes. ¡Applejack!-

-¿Si?- dijo la vaquera.

-Dime una cosa: cuando recolectas manzanas, ¿sientes algo de dolor en tus cascos cuando golpeas los árboles?- preguntó el guerrero.

La vaquera se sorprendió por la pregunta. Spike parecía haber intuido precisamente bien.

-Pues... la verdad sí. No te voy a mentir- respondió ella.

-¿Y alguna vez te has preguntado el por qué?- dijo Spike.

-Algunas veces. Y aún no conozco el motivo- dijo ella.

-Pues te voy a decir a que se debe. Se debe a que la fuerza con la que golpeas los árboles, la aplicas al golpe... pero no a tus cascos. Eso es lo que te provoca el dolor al momento en que golpeas los árboles- dijo él.

-¿Que no aplico fuerza... a mis cascos?. ¿Que quieres decir, colega?- preguntó ella.

-Te enseñaré. Acércate- le indicó el dragón.

Applejack se acercó a Spike y se puso frente a él. Entonces, el dragón puso su antebrazo ante ella.

-Pon tu casco sobre mi antebrazo- indicó él.

-¿Para qué?- preguntó ella confusa.

-Tú solo hazlo-

Aún estando confusa, la vaquera simplemente se limitó a hacer lo que el guerrero le indicó.

-¿Y ahora qué?- preguntó ella teniendo su casco posado sobre el antebrazo del dragón.

-¿Ves que mi brazo se encuentra en estado normal?. Lo sientes- le dijo él.

-Si, supongo...- dijo Applejack, aún estando algo confusa.

-Ahora fíjate bien-

El dragón aplicó fuerza a su antebrazo, y al momento de hacerlo, varias venas se le habían marcado y quedaron a la vista. Pero eso no era lo importante. A diferencia de hace un momento, Applejack pudo sentir que el brazo de Spike se había endurecido bastante.

-¿Te das cuenta de que ahora mi brazo está mas fuerte?-

-Si, y bastante la verdad- la pony estaba asombrada con la musculatura que había adquirido el brazo del dragón.

-Pues se debe a que apliqué fuerza sobre él. El factor de la fuerza aplicada sobre tu cuerpo es muy útil. Cuando aplicas fuerza a alguna parte de tu cuerpo, aumentarás tu resistencia y te dará mejor capacidad ya sea para golpear, ya que esto aumentará la potencia de ese golpe, reducir el dolor que te pueda provocar ese golpe que efectuaste o amortiguar el impacto de uno incluso. Si intentas atacar a tu enemigo sin aplicar fuerza a tus cascos, los golpes terminarán haciéndote más daño a tí que a tu enemigo. Y al poseer una gran fuerza física, tú eres a la que más puede beneficiar este factor- explicó Spike a la pony vaquera.

-Pues nunca lo había pensado, Spike. Tienes razón. Estoy segura de que este nuevo factor me puede ayudar tanto en batalla como en mi vida diaria. Podré poner a prueba estos cascos de hierro tanto con los Wolves como las manzanas, jeje- dijo ella.

-Si es así, pues creo que le dolerá mas a los Wolves que a las manzanas. Es lo que yo pienso- habló Rainbow.

-Hehe, no eres la única, Rainbow. Concuerdo contigo- agregó Twilight.

-Pues no se diga más. Inténtalo, compañera. Aplica fuerza a tus cascos y notarás la diferencia- le dijo Spike.

Applejack hizo lo que dijo el dragón. Al momento de aplicar fuerza a sus cascos, pudo sentirlos de una manera distinta. Se sentían más resistentes. Era una sensación algo rara, pero a pesar de todo, estaba segura de que valdría la pena. Todo lo que el dragón le explicó sobre la aplicación de fuerza a su cuerpo valdría la pena.

-¿Lo notas ahora, Applejack?- le preguntó Spike.

-Claro que sí. Mis cascos se sienten mas fuertes de lo normal. Es una sensación algo rara la verdad, pero si lo que me dices es cierto y esto me proporcionará grandes ventajas, entonces valdrá la pena. Me aseguraré de tener este factor en mente- respondió ella.

-En ese caso, tendrás que comprobarlo ahora mismo, compañera- dijo Spike mientras se desabrochaba la bandolera que mantenía su espada en su espalda.

Spike se desabrochó su bandolera y la dejó caer al suelo, dejando más a la vista sus pectorales. Algo que para la alicornio que estaba enamorada de él no pasó desapercibido. Twilight se sonrojó ligeramente al ver los marcados músculos del dragón. Para su suerte, todos estaban concentrados en el entrenamiento y nadie notó su sonrojo.

Que fuerte estás, Spike. Entrenar te ha hecho muy bien. Hace 13 años eras un pequeño y panzón bebé dragón, hehe. Y ahora eres un dragón fuerte y muy guapo. Pensó Twilight mientras su corazón latía rebosante de puro amor.

-¿Y cómo quieres que lo compruebe, Spike?- preguntó Applejack.

-Muy fácil. Golpéame- dijo él.

-¡¿Qué?!- dijo ella sorprendida.

-Que me golpees, Applejack. Es mas que obvio que así se deben de hacer las cosas. Quiero que primero lo hagas sin aplicar fuerza a tus cascos y luego con la fuerza para que veas que lo que te conté es verdad. Tienes que notar la diferencia entre los golpes y la ventaja que te proporcionará la aplicación de fuerza a estos, para que de esa forma puedas hacer el mejor uso de este factor- dijo el dragón.

La vaquera estaba algo insegura de hacerlo. No quería lastimar a uno de sus amigos, por mucho que le haya pedido personalmente que lo golpee.

-Pero, Spike... yo...-

-Applejack, no estés nerviosa. Es parte del entrenamiento. Si te estoy pidiendo que me golpees es porque sé lo que estoy haciendo. Es necesario de todos modos. Sé que ninguna de ustedes me trataría de lastimar. Esto forma parte del camino que deben recorrer para alcanzar su máximo potencial-

-Tiene razón, Applejack. No es como si tuvieras que golpear a Fluttershy o a Rarity. Aunque la primera saldría corriendo apenas ver tu sombra, hahahaha- Rainbow habló.

Uno de aquellos nombres. Ese segundo nombre. Aquel nombre que formaba parte del tormento con el que había tenido que lidiar por 13 años. 13 años que habían hecho del ochenta por ciento de su vida... un infierno casi equivalente al mismo Helhaim.

Nuevamente, el recuerdo maldito... atacó.

¡Spike... por favor escúchame!

¡Aléjate! ¡No quiero saber NADA de ti!

El dragón desvió su mirada hacia otro lado, mientras cerraba fuertemente los ojos y se llevaba una mano a su cabeza. Esto preocupó mucho a Twilight. Pudo entender de manera casi inmediata el por qué de la repentina alteración de Spike.

¡Ay, no! ¡Otra vez no! Spike, ya no sufras, por favor. Decía Twilight en su mente, mientras veía con mucha preocupación lo alterado que se encontraba su amado dragón.

¡Maldición! ¡NO pienses en eso! ¡Tienes que ser fuerte! Se decía Spike a si mismo.

-¡Como sea! ¡Deja de lado a esas dos ponys que apenas poseen un cinco por ciento de seriedad! ¡Sobretodo a la segunda!- le dijo Spike a Rainbow con algo de intensidad en su voz.

La pegaso celeste se quedó en total silencio. Realmente este nuevo Spike se hacía temer.

-Ok. Lo lamento- Rainbow se disculpó.

Nota Personal: no mencionar a Rarity delante de Spike. Pensó ella.

El dragón se puso en frente de Applejack.

-Adelante, compañera. ¡Con confianza!- dijo él muy serio.

A pesar de estar algo insegura todavía, la vaquera logró reunir todo el valor y confianza para hacer lo que el guerrero le indicó que hiciera. Tanto ella como sus otras dos amigas confiaban en la palabra de aquel dragón guerrero de 21 años. Applejack se volteó y preparó sus cascos traseros. Acto seguido, lanzó el primer golpe sin fuerza, tal como le había indicado Spike. Sus cascos impactaron contra el abdomen del dragón, quien apenas se movió al momento de recibir el golpe. A diferencia de cuando cosechaba manzanas, Applejack solo sintió una leve molestia en sus cascos, ya que los árboles eran mucho más duros que el abdomen de Spike.

-¿Ves que no era difícil?. Ahora dime, ¿qué sentiste cuando me golpeaste?- le dijo el dragón.

-Sentí... una simple molestia en mis cascos. Dolor no, porque golpear un árbol de manzanas duele más- respondió ella.

-Bien notado, Applejack. Ahora, vuelve a golpearme, pero esta vez aplicando esa fuerza que te dije a tus cascos. Verás como se produce el efecto contrario-

La pony vaquera se volteó una vez más e hizo lo indicado. Aplicó esa fuerza a sus cascos y lanzó el golpe. Ésta vez el resultado fue distinto al del primer golpe. Applejack no sintió ni la más mínima molestia en sus cascos e incluso se dio cuenta de que hizo a Spike retroceder un poco al momento en que recibió el golpe. Su amigo dragón no mintió. La aplicación de fuerza redujo al mínimo el posible dolor que pudo haber sentido. Y su fuerza física se incrementó brevemente cuando aplicó el factor.

-Nada mal, compañera. Tu fuerza logró moverme del sitio. ¿Ahora notas la diferencia?-

-Claro que si, colega. No sentí nada raro en mis cascos. Ni la más mínima molestia siquiera. Y mi fuerza física se incrementó de manera breve al momento de aplicar fuerza en mis cascos-

Peewee le lanzó un simpático carraspéo a la pony vaquera.

-Mi amigo fénix te dice que buen trabajo, compañera- dijo Spike por parte del ave de fuego.

-Gracias, Peewee. Esto progresa muy rápido- dijo ella.

-Lograste aplicar el factor de la fuerza de manera excelente, Applejack. Pero esto es solo el comienzo. La cosa se pone seria ahora. Quiero que me demuestres tu verdadera fuerza, compañera- dijo él.

-¿Cómo dices, colega?- preguntó la vaquera algo sorprendida por lo que el dragón estaba insinuando.

-Tal como lo acabas de escuchar. Quiero que me ataques. ¡Como si estuvieras en una pelea mano a mano contra uno de los malditos Wolves! Recuerda: ¡con confianza!- dijo Spike poniéndose en posición defensiva.

Applejack estaba en lo cierto. Spike quería que tuvieran una mini pelea para poner a prueba la fuerza física de la primera.

-Solo piensa que quien está en frente tuyo no soy yo, sino uno de esos Wolves. ¡Aquellos bastardos que no tuvieron ni la más mínima piedad al momento de... destruir Griffonstone!- dijo Spike, para después sacar sus filosas garras, aparentando ser un Wolf.

Al momento de ver aquellas filosas garras y esa posición defensiva, la vaquera fue bombardeada con recuerdos de aquella masacre. Provocada por unos miserables asesinos frios y sádicos.

¿¡En serio crees que tú y tus malditas ponys nos detendrán?!

¡Morirán de una maldita vez!

Es imposible creer que la miserable raza pony nos haya podido hacer frente.

Esas últimas palabras del Wolf de nombre Xed desataron una enorme frustración en la pony vaquera. Unas ansias enormes de hacerlos pagar por sus imperdonables actos. Y demostrar que a quienes se enfrentaban no eran simples ponys, sino las mismas... Guardianas de la Armonía.

-¡Ahora verás, pobre diablo!- exclamó Applejack, para después atacar al dragón con toda su rabia... como si peleara con un Wolf.

La vaquera atacaba al dragón tanto con sus cascos traseros como delanteros, sin dejar de lado el factor de aplicación de fuerza, que le proporcionaba más resistencia y mayor fuerza de ataque.

Por otra parte, el dragón utilizaba sus brazos para protegerse de los golpes de Applejack. Spike estaba sorprendido por la increíble fuerza de aquella pony de cabello rubio. Era algo que nunca había visto antes por parte de la vaquera. No tenía ni la más mínima duda de que había hecho una apuesta ganadora para su equipo.

-¡Que se sienta tu fuerza, Applejack! ¡Demuestra que los Wolves no pisarán suelo equestrense mientras tú vivas!- decía Spike a modo de aliento, mientras seguía defendiéndose de los ataques de la pony.

-¡Cascos de hierro, Applejack!- dijo Rainbow de igual forma.

Applejack sacaba toda su frustración con cada golpe que le lanzaba a Spike. Aunque no fuera un Wolf, el simple hecho de recordar la masacre de Griffonstone era más que suficiente para hacerla luchar por lo correcto: proteger su hogar.

-¡Si uno de esos bastardos se atreve a amenazar Equestria... se arrepentirá!- dijo la vaquera, mientras incrementaba la fuerza de sus cascos.

-¡Fuerza, compañera! ¡Fuerza!- le decía Spike.

El dragón y la yegua ofrecían una coreografía de pelea espectacular. Los brazos de Spike se empezaban a tornar de un color rojo al recibir golpes cada vez mas fuertes.

-¡FUERZA, Applejack!- exclamó el guerrero dragón.

Para acabar con esto, el dragón lanzó un puñetazo con una medida fuerza, equilibrada para estar a la par con la fuerza de la pony. Applejack, sabiendo lo que se venía, respondió de la misma forma con su casco delantero. Tanto el puño del dragón como el casco de la pony impactaron de frente. El impacto fue amortiguado por Applejack gracias a haber aplicado fuerza a su casco, logrando igualar la fuerza del dragón. Apenas sintió nada al momento de impactar su casco contra el puño de Spike. El factor de fuerza le resultó ser más que útil. Había progresado increíblemente bien, aun siendo el primer día de entrenamiento. La vaquera seguiría adelante sin pensarlo dos veces.

Spike miraba detenidamente su puño y pudo notar que sus nudillos estaban ligeramente rojos. Una clara evidencia de que Applejack había hecho buen uso del factor de la aplicación de fuerza.

-Impresionante- habló el dragón.

-¿Que tal estuve, chicas?- preguntó Applejack a sus amigas Twilight y Rainbow, mientras respiraba cansada.

-Sorprendente, Applejack. Eres muy fuerte- dijo Twilight.

-No me quedan palabras. ¡Nuestro equipo es el mejor!- dijo Rainbow.

El dragón se acercó a la vaquera.

-Ten siempre en mente todo lo que aprendiste hoy, compañera. La fuerza nos proporcionará un mejor ataque, mayor nivel de resistencia y hasta incrementará nuestra fuerza física. Sin importar nada, recuerda: siempre fuerte, compañera- le dijo él.

-Siempre fuerte, colega- respondió ella.

La Guardiana de la Honestidad había progresado muy bien. Pero no sería la única en hacerlo.

-¡Rainbow!- Spike llamó la atención de la pegaso celeste.

-¿Ahora voy yo?- preguntó ella emocionada.

El dragón simplemente se cruzó de brazos.

-¡Creo que eso es un sí!- dijo Rainbow Dash.

Applejack se hizo a un lado para dar paso a la Guardiana de la Lealtad.

-Vale, Rainbow. Me estaré centrando en tu habilidad más destacada: la velocidad. Y tengo un factor que será escencial en tu lucha cuerpo a cuerpo. Aunque aplicará un poco mejor a tu defensa- decía Spike.

-¿Y de qué factor hablas, Spike?- preguntó la pegaso.

-Tu campo de visión- dijo él.

-¿Campo de visión?- preguntó ella.

-Si. Ahora me explico. El campo de visión es el área espacial que el ojo percibe mirando hacia delante sin necesidad de efectuar movimiento alguno. Los ojos sanos tienen la máxima resolución y nitidez en el área central de la imagen hacia donde miramos- explicaba Spike a Rainbow.

-Vaya, Spike. Eso sonó muy científico. ¿Twilight no te habrá pegado lo cerebrito? ¡Hahaha!- se rió la pegaso, pero a Twilight no le hizo tanta gracia.

-¡Hey! ¡Yo no soy ninguna cerebrito!. Solo soy mas inteligente. Y me gusta estudiar- habló la princesa violeta.

-¡Claro, hehehe! Lo que tú digas, Twilight- Rainbow aún se reía un poco.

Para desgracia de la pegaso, el dragón no lo pudo soportar ni un poco.

-¡YA BASTA! ¡A mi nadie me pegó nada! ¡Concéntrate, MALDITA SEA!- el dragón exclamó más furioso que antes.

Ante esto, hubo un silencio que pareció eterno. Y a medida que pasaban los segundos, se hacía más incómodo. La pegaso ya no se reía ni un poco. El corazón se le aceleró incluso. Temía que si abría la boca para decir solo una palabra, el dragón se enfurecería aún mas. Pero una valiente Applejack decidió romper el silencio e intentar relajar el entorno.

-Relájate, colega. Estás muy alterado. Intenta calmarte. Guarda esa intensidad para los Wolves. Y tú Rainbow Dash, creo que no conoces el significado de seriedad. Te estás comportando como Pinkie Pie. Si todo esto no te interesa, entonces tranquilamente puedes volver a Ponyville y no ayudarnos. Así de simple. Es tu elección- dijo la vaquera, más seria que nunca.

Rainbow se encontraba recapacitando. De verdad quería ayudar a sus amigos. No quería que la creyeran una inútil. Alguien que no se tomaba en serio a los Wolves.

-Amigos... no era mi intención molestar a nadie. En serio. En verdad quiero ayudar. Solo quería que... hubiera algo de... positividad en estos tiempos tan sombríos por los que estamos pasando. Por favor, perdónenme... sobretodo tú, Spike- la pegaso celeste se disculpó muy apenada.

El dragón se llevó una mano a la frente, mientras exhalaba de manera profunda. Hacía su máximo intento por calmar su ira.

-Esta bien. No pasa nada. Simplemente no me encuentro muy bien hoy- dijo él.

Pobre Spike. No te alteres más, por favor. Pensaba Twilight.

Entonces, Rainbow recordó algo.

Flashback: La noche anterior

-¿A qué se refirió con "tener la mente destrozada"?- preguntó Rainbow.

-No estoy segura. Pero si hay algo de lo que estoy segura, es que algo le pasa a Spike. Y no creo que sea algo bueno- dijo la vaquera.

-Es cierto, chicas. Spike está pasando por una situación muy delicada. Hace 13 años que es así- habló Twilight.

-¿Cómo lo sabes, Twilight?- le preguntó la pegaso.

-Porque Spike me lo contó. Y decir que su situación es delicada es quedarse corto- dijo ella.

Fin del Fashback

Debe tratarse de eso. Pensó Rainbow.

-Dejemos toda esta negatividad de lado, amigos. Les prometo que me concentraré en el entrenamiento. Lo super juro. En serio. Perdónenme por lo que mas quieran, por favor. Juro que renunciaré a los Wonderbolts si me vuelvo a comportar de esa manera- decía la pegaso muy arrepentida de su comportamiento anterior.

El dragón, la vaquera y la alicornio procesaron aquellas palabras de arrepentimiento de su amiga pegaso.

-Esta bien, Rainbow. Te perdonamos. Somos amigos después de todo. Pero déjame decirte que eso último... no te lo crees ni tú- le dijo Twilight.

-Gracias amigos, jeje. Vale, Spike. Estoy lista para lo que quieras enseñarme- dijo Rainbow dirigiendo su atención hacia el guerrero.

-Ok. Empecemos pues. Te decía que tu campo de visión será el factor que usarás. Al ser muy veloz, podrás evitar que los Wolves consigan atacarte. Combinándo tu velocidad con tu campo de visión, podrás saber de donde vienen los ataques y tu defensa será inquebrantable. Lo que digo es que no solo tienes que centrarte en tu zona de visión binocular, o sea, cuando miras al frente. También debes estar al pendiente de tu campo visual izquierdo y derecho. Los enemigos no siempre vendrán de frente hacia ti. Aprovecharán para atacar desde cualquier ángulo donde no puedas verles. Hacia la periferia del campo visual vemos, más bien, con poca nitidez, pero podemos PERCIBIR bien los movimientos y siluetas de nuestros enemigos- explicó Spike.

-Entonces, ¿dices que tengo la capacidad de ver a los enemigos, aunque vengan por cualquiera de mis lados izquierdo o derecho?- preguntó Rainbow.

-Exacto, Rainbow. A eso se le llama "visión periférica"- dijo él.

-Vale. Ahora todo está mas claro- dijo ella.

-Pues si es así, entonces veamos como usas el factor de tu campo de visión para esquivar los ataques del enemigo- dijo Spike serio.

-¿Y cómo?- preguntó la pegaso celeste.

-Quiero que hagas lo siguiente: quiero que mantegas fija tu vista hacia el frente y sin mirar a ningún otro lado-

-Esta bien-

Rainbow fijó su vista en el plano horizonte.

-¿Ahora qué, Spike?- preguntó ella.

-Fíjate bien- dijo él.

Eso es lo que estoy haciendo. Pensó Rainbow, claramente no entendiendo del todo lo que Spike quería hacer.

El dragón se paró justo a lado derecho de la pegaso, mientras esta última no despegaba su vista del horizonte.

-Rainbow Dash, ¿puedes verme?. Pero sin voltear a verme. Tal como te lo dije, usa tu campo de visión- dijo Spike, mientras se hacía para atrás de a poco, para que Rainbow pudiera hacer mejor uso de su visión periférica.

La pegaso, sin voltear a ver a Spike, notó como su campo visual derecho podía ver el característico color morado de las escamas de Spike, aunque no pudiera verlo de pies a cabeza.

-Si. Veo una figura de color morado, pero es fácil saber que eres tú- respondió ella.

-¿Ves?. Tu campo de visión ayudará al momento de estar a la defensiva. Pero yo te pregunto, Rainbow. En una situación en la cual te encuentres peleando con varios Wolves, ¿que harías si ocurre... ESTO?- Spike sacó sus garras de su mano derecha y arremetió contra Rainbow Dash.

Esto preocupó tanto a Twilight como a Applejack.

-¡Spike, espera!- dijo la alicornio.

-¡Colega!- dijo la vaquera.

La pegaso seguía sin moverse del lugar y sin siquiera voltear. Pero lo que pasó a continuación, dejó sin palabras tanto al guerrero, como a las otras dos Guardianas. Al momento de lanzar el zarpazo, la pegaso se agachó de forma instantánea, esquivando las filosas garras del fuerte dragón.

Por dios... Pensó Spike sorprendido.

-¿Es idea mia o Rainbow progresó en tiempo record?- habló Applejack aún estando sorprendida por los reflejos de la pegaso.

-Eso parece- dijo Twilight.

-Hehe. ¿Lo ven, chicas?. Dije que estaba lista para lo que fuera- dijo Rainbow.

-Y yo creía que el único con esos reflejos era Xed. Pero al parecer me equivoqué. El pobre bastardo tendrá que prepararse en cuanto se entere que tenemos de nuestro lado a la pegaso más veloz- dijo Spike.

-Hehehe, gracias por el alago, Spike- agradeció la pegaso.

-De nada, supongo. Ahora sabes las ventajas de tu campo de visión. Combina tu velocidad con este factor y los malditos Wolves no podrán ponerte ni una garra encima. Así que, en una pelea mano a mano, mantente alerta en TODO momento y ocúpate de esos asesinos- concluyó el guerrero.

-Alerta en todo momento. Así será- le dijo Rainbow.

El progreso de la Guardiana de la Lealtad había resultado muy rápido. Apenas era el primer día de entrenamiento, y Applejack y Rainbow Dash habían demostrado ser candidatas ganadoras en su equipo. Pero el dragón sabía que no eran las únicas. Por eso dirigió su atención hacia aquella pony color violeta que con el simple hecho de verla, sentía su corazón latir a mil por hora. Aquella pony amante de los libros. Aquella preciosa princesa alicornio de ojos morados. Twilight Sparkle. La verdadera pony de sus sueños.

-Twilight- Spike llamó la atención de la alicornio.

Twilight se sentía algo nerviosa. Era su primera vez en esta clase de entrenamiento. Pero se sentía contenta de que quien la iba a ayudar era el mismo dragón que conquistó su corazón. Esto le traía varios recuerdos de hace años. Todas aquellas veces cuando Spike la ayudó a dominar nuevos hechizos. Nada la podía poner más contenta. Con toda la motivación y determinación que poseía en su interior, pelearía codo a codo junto a Spike para proteger su hogar. El hogar de ambos.

-Como en los viejos tiempos, ¿no, Spike?. Hehe- le dijo al dragón.

-Como en los viejos tiempos, Twilight- respondió él.

2 horas después

El primer día había resultado ser un muy buen inicio. Las tres Guardianas de la Armonía lograron progresar considerablemente. Spike sabía que con un poco mas de entrenamiento, conseguiría pulir al máximo el potencial que poseían sus tres amigas ponys. No le cabía ni la menor duda. Los cuatro se encontraban bastante cansados. Debían descansar también. Mañana continuarían perfeccionando sus habilidades para las futuras batallas que sabían que vendrían. Con la amenaza que resultaban ser los Wolves, deberían estar preparados para proteger Equestria. Su tierra. Su hogar.

-Ya es suficiente por hoy, chicas. Hicieron un trabajo espectacular para ser el primer día. Mañana seguiremos progresando. Por ahora debemos descansar. Venga, volvamos al castillo- dijo Spike preparándose para volar.

-Vale. De verdad necesito descansar- dijo Twilight.

-Yo me muero de hambre- dijo Rainbow tocándose la panza con su casco.

-Creo que esta vez concuerdo con ustedes chicas. Un descanso y algo para llenar el estómago no estaría nada mal- agregó Applejack.

Todos regresaron al castillo.


Al momento de regresar al castillo, cada uno fue a asearse por su camino. Y luego de un delicioso almuerzo preparado por el mismo Spike, cada quien se fue a descansar por su lado, excepto Twilight, Applejack y Rainbow, ya que las tres se reunirían en la biblioteca. Twilight había prometido anoche que les contaría a sus amigas todo lo que estaba pasando con Spike y el por qué de sus repentinas reacciones de estrés y furia.

Una vez en la biblioteca, las tres Guardianas buscaron una mesa en la cual platicar.

-Anoche les prometí que les contaría todo esto de Spike, chicas. No iba a romper esa promesa. Lo que les estoy por contar es demasiado doloroso. Para Spike mas que nadie- dijo Twilight.

-Pues en ese caso, te escuchamos, Twilight- le dijo Applejack.

-Esto se oye muy grave. No me extraña el por qué Spike se enfureció por el simple hecho de mencionar a Rarity en su presencia. ¿Tan malo es lo que le ocurre?- dijo Rainbow.

-Es peor de lo que crees, Rainbow. Mucho peor- le dijo la alicornio.

Applejack y Rainbow Dash se dispusieron a escuchar atentamente.

-Primero que todo, ¿recuerdan el día de la... partida de Spike?- les preguntó ella con algo de dificultad.

-Cómo no recordarlo. Fue un día muy triste. No te voy a mentir, Twilight- dijo Applejack.

-Fue un golpe duro para todas. Para ti mas que nadie- dijo Rainbow.

Flashback: Un día después de la partida de Spike

Una Twilight muy triste, dolida y devastada se encontraba en la biblioteca junto a sus amigas Applejack, Rainbow Dash, Pinkie Pie y Fluttershy. A Rarity no quería ni verla. Seguía furiosa con ella. Después de lo que había provocado era mas que evidente. La unicornio desbordaba cascadas de lágrimas, y abrazaba con fuerza la foto de ella y Spike de pequeños, mientras Applejack y Fluttershy trataban de consolarla. Ambas también tenían un par de lágrimas en sus ojos.

-Ya... ya no llores... Tw-Twilight. A Spike no l-le gustaría verte e-en ese estado...- decía la vaquera sollozando un poco.

-Pobrecito Spike. Era s-solo un b-bebé dragón d-de 8 años. Ahora se e-encuentra va-vagando p-por el mundo... solo. Celestia qui-quiera que no l-le ocurra nada m-malo- Fluttershy lloraba.

-¡Sabía yo q-que nada bu-bueno podría salir d-de la boca de R-Rarity! ¡Esa pony nunca valoró a Spike! ¡Lo apartó d-de mi l-lado!- Twilight sentía un dolor punsante en su corazón.

-Jamás en mi vida creí que algo como esto llegaría a pasar...- habló Rainbow, aún asimilando que Spike se había ido.

-Que mal. Esto es muy frustrante. Ya no podré organizar ninguna fiesta de cumpleaños de Spike. Su cumpleaños ocho fue el único. Lo lamento tanto, Twilight... en... en serio- dijo Pinkie a modo de consuelo.

Twilight miró una vez mas la foto que sostenía entre sus cascos. Ese tierno bebé dragón de escamas moradas y espinas verdes... ya no estaría a su lado.

-¡S-SPIKE!- Twilight abrazó con increíble fuerza la foto. El dolor destrozaba su alma.

Fin del Flashback

-Como haya sido, chicas. Fue el día mas triste de mi vida y todo, pero estamos aquí para hablar sobre lo que está pasando con Spike. Se podría decir que es muy similar a los constantes sueños que tuve de él durante los 13 años que no estuvo aquí, pero... su situación es aún mas difícil de sobrellevar para él. Sigue sufriendo por eso a pesar de que regresó- dijo Twilight.

-Entonces, ¿qué es lo que le ocurre exactamente, Twilight?- preguntó Applejack con bastante intriga.

-Pues ocurre lo siguiente: todo esto va del día de ayer. Me encontraba tranquilamente en mi castillo. Pero esa tranquilidad se esfumó de manera inmediata cuando escuché lo que parecían ser... gritos. Decidí averiguar que eran esos gritos, de donde y de quién provenían. Todo provenía de la habitación de... Spike. Lo que se escuchaba era... muy fuerte para asimilarlo. Les puedo jurar que nunca había escuchado a Spike tan furioso en mi vida- contaba Twilight.

Flashback: Día de ayer, en el castillo de Twilight

La princesa se hallaba en su habitación, leyendo relajadamente un libro sobre su cómoda cama. Pensó que luego de la interrupción de Rarity nada la molestaría en su pasatiempo favorito. Pera la dura realidad... es que se equivocaba muy fuerte. A la distancia, probablemente en algún lugar de su castillo, logró escuchar lo que parecían ser... gritos. Gritos apenas entendibles. Lo último que alcanzó a escuchar fue suficiente para llamar su atención.

-¡Ahora soy un dragón de veintiún años que ODIA RECORDAR SU PASADO!-

Sin siquiera pensarlo, Twilight dejó de lado el libro y salió de su habitación. Fue en busca de la fuente de aquel grito. Su recorrido por los pasillos del castillo la terminaron llevando a una puerta en específico. Era la habitación de... Spike. Apenas acercarse, unos gritos más intensos se hicieron presentes desde el otro lado de la puerta. Unos gritos que desprendían una ira que helaba la sangre.

-¡CALLATE YA, MIERDAAA! ¡Quiero que lo siguiente que te voy a decir quede grabado en tu PUTO y minúsculo cerebro lleno de MIERDA para el resto de tu MISERABLE vida! ¡TÚ SOLO ERES UN ASQUEROSO PERRITO FALDERO CON APARIENCIA DE DRAGÓN! ¡YO NO SOY TÚ Y JAMÁS VOLVERÉ A AMAR A RARITY! ¡JAMÁAASS!-

Twilight se acercó a la puerta y con algo de nerviosismo, pero más que nada preocupación por Spike, la tocó.

-¿S-Spike...?-

El dragón tardó unos segundos en responder.

-¿T-Twilight...?. ¿Q-Qué ocurre...?-

-¿Puedo... pasar?-

Fin del Flashback

-¡¿En serio?!- preguntó la vaquera impactada.

-Tal como lo escuchaste, Applejack- dijo Twilight.

-¿En verdad fue así?- preguntó la pegaso.

-Les juro por Celestia que si, chicas-

-¿Y que fue lo que hiciste al respecto?- dijo Applejack.

-Sabía que algo malo le ocurría. Después de todo unos gritos de esa magnitud no podían significar NADA bueno. Entré a su habitación y le pregunté si se encontraba bien. Al principio trató de ocultarlo, pero al final creo que fue demasiada carga para él... y lo dejó salir todo- dijo ella.

Flashback

-Esta bien, Twilight. No te voy a mentir, me encuentro muy mal. Desde que llegué a Dovahkiin estuve así. Y a pesar de haber regresado a Equestria, sigo estando muy mal. Estoy así por... por el... el... incidente con Rarity... de hace 13 años. El día que quise huir de todo este dolor-

Twilight se sorprendió. Puede que fuera eso lo que Rarity quería hablar con Spike, y por eso tuvo esa reacción. Ahora todo tenía sentido.

-Aún piensas... en ese día?-

Fin del Flashback

-Me dijo que el recuerdo del día en que Rarity lo rechazó no paraba de atormentarlo en Dovahkiin. Y lo peor de todo es que sigue así- contaba Twilight.

Flashback

-No pienso en ese maldito día. No quiero hacerlo. En realidad es mi mente la que no me deja en paz. Ese maldito recuerdo del día en que Rarity me rechazó no quiere abandonarme. Lo ÚNICO que quise aquel día... fue olvidar a Rarity y su confesión que me destrozó en mil pedazos. No sé como pude pasar 13 años de mi vida con ese recuerdo en mi cabeza, que se niega a dejarme incluso aquí en Equestria. Mis límites están siendo rotos. Siento que voy a perder la cabeza- contó Spike.

Fin del Flashback

-¿Todo esto viene a raíz del día que Rarity lo rechazó?- Applejack preguntó.

-Desgraciadamente si- dijo Twilight.

-Entonces, ¿por eso se enfureció cuando mencioné a Rarity en el entrenamiento?- dijo Rainbow.

-Pues así parece, Rainbow. Hay otra cosa entre todo esto. ¿Recuerdas que hoy en la mañana dijiste que Rarity parecía querer tener nuevamente la atención de Spike?- le dijo Twilight.

-Si. ¿Por qué?-

-Porque al parecer es cierto. Ese mismo día Rarity fue a buscar a Spike al castillo. Le dije que se había ido a entrenar y ella me dijo que se lo encontró en el camino. Pero cuando quiso hablarle, Spike tuvo una reacción muy parecida a la que tuvo hoy- Twilight seguía contando.

Flashback

-Ay, Twilight, que bien que te encuentro-

-Hola Rarity. Estás muy agitada. ¿Qué sucede?- preguntó Twilight.

-Tiene que ver con... Spike-

-¿Qué pasa con Spike?- le preguntó confusa.

-¿De casualidad sabes a donde fue?-

-Si, fue a entrenar a la montaña donde solía estar ese dragón durmiente que Fluttershy convenció de irse. Quiere estar listo por si esos Wolves vuelven a atacar- respondió la alicornio.

-Oh, bueno... resulta que... me lo encontré volando en el camino. Pero... algo ocurrió cuando le hablé... Algo muy inesperado. Tuvo una extraña reacción. Parecía estar... asustado. Luego... salió volando a toda velocidad sin decirme nada más- explicó la unicornio blanca.

-¡¿Cómo?!-

-Tal como lo oíste. Vine a buscarlo, lo encontré de camino y... reaccionó... de esa forma-

-¿Y para qué querías verlo exactamente?- preguntó Twilight.

-P-Porque... pu-pues... quería... hablar con él- respondió Rarity algo nerviosa.

Fin del Flashback

-En conclusión, Spike se marchó por lo dolido que quedó con la confesión de Rarity, vivió 13 años en Dovahkiin con ese doloroso recuerdo atormentándolo, regresó a Equestria hace unos días, y el pobre sigue siendo perseguido por ese recuerdo- Twilight concluyó.

Ambas Guardianas estaban estupefactas. No tenían ni la más mínima idea de por lo que estaba pasando el dragón. 13 largos años siendo perseguido por el recuerdo de un fatídico día. Spike estaba sufriendo muy fuerte.

-Que mal por Spike. Mira que tener que pasar toda una vida así. Debe ser horrible- dijo Applejack, sintiéndose terrible por el dragón.

-Vivir poco más de una década así. Debe ser lo peor que le pudo pasar a alguien- comentó Rainbow.

-Es lo peor, es horrible, en verdad da igual como se defina, chicas. Lo que si importa es que Spike necesita todo nuestro apoyo para que pueda pasar página. Es un dragón muy fuerte. Yo creo en él- dijo la princesa violeta.

-Quizás esto no suene tan relevante, pero... ¿Alguna de ustedes ha visto a Spike... sonreír?- habló la vaquera.

-Yo creo que no...- dijo la pegaso.

-Ehh... no- dijo Twilight.

Twilight apenas lo notó hasta ahora. No había visto a Spike sonreír ni una sola vez desde que regresó. Su amado dragón parecía haber perdido la felicidad que tenía desde pequeño en el momento que fue rechazado por Rarity. La alicornio haría todo lo que fuera posible para regresarle esa felicidad al rudo, serio y orgulloso dragón. O incluso... compartir juntos esa felicidad.


El sol empezaba a ocultarse y el resto de aquel día fue normal para todos. Bueno... no para todos en realidad. Spike se encontraba algo decaído, con los ánimos por los suelos. Incluso Cadence llegó a notar esto y trató de averiguar que le pasaba, pero el dragón simplemente le decía que no se preocupara por él.

Spike decidió salir del castillo para poder tranquilizarse. Dejó su espada y bandolera en su habitación, y se dispuso a ir afuera. Lo que no pudo notar al momento de salir, fue que era observado por la misma Twilight, quien se encontraba escondida para no ser vista por él. En cuanto el dragón dejó el castillo, la alicornio escuchó una voz justo detrás de ella.

-Síguelo- dijo aquella voz.

Twilight se giró y se encontró con Cadence.

-¿Cómo dijiste?-

-Que lo sigas. El pobre Spike no se encuentra en su mejor estado de ánimo. Necesita de alguien que le levante esos ánimos. Alguien muy especial para él- dijo Cadence con una cálida sonrisa en su rostro.

Twilight lo pensó por un momento. Por un lado no quería molestar la privacidad de Spike, pero por el otro, donde sea que haya ido, seguramente se encontraría solo. O sea, que podría estar a solas con su amado dragón.

-Esta bien. Veré que puedo hacer. Supongo que no tendrá nada de malo que le haga compañía. Después de todo solo quiero que Spike sea feliz- dijo ella.

La alicornio fue tras el dragón, tratando de que éste no la descubriera.

Contigo a su lado, Spike siempre será feliz, Twilight. Pensó Cadence.

Al igual que el día anterior, Spike regresó a donde se encontraba ese árbol solitario. Aterrizó junto a él y se sentó de espaldas al tronco de éste, mientras soltaba un suspiro. La vista para el guerrero era de lo mejor que poseía ese lugar tan tranquilo. El horizonte se encontraba teñido de colores amarillo y naranja, producto del presente atardecer. El guerrero disfrutaba de los atardeceres, tanto en Equestria como en Dovahkiin, más aún cuando tenía su flauta ocarina con la cual solía tocar una bella melodía que representaba la lucha eterna en el reino de los dragones. En unos tiempos como estos, esa melodía encajaba a la perfección. Sabiendo que lo ayudaría a relajarse, cerró sus ojos y empezó a silvarla. La bella melodía compaginaba de manera perfecta con el ambiente. El brillante atardecer y la suave brisa que mecía ligeramente el pasto y las hojas del árbol. Pero el entorno no era el único testigo de esa melodía.

-Que lindo suena eso- dijo una voz cerca de él.

Al escuchar la voz, el dragón abrió los ojos, detuvo su melodía y volteó hacia su derecha. El guerrero se encontró con nadie mas que Twilight, observándolo tímidamente.

-¿Twilight...?-

-Hola Spike...-

-¿Qué haces aquí?-

-Sentí curiosidad por saber a donde ibas y acabé dando con este lugar. ¿Qué haces aquí... tan solo?-

Las razones de Spike para estar solo eran más que obvias.

-Vine aquí para poder despejarme. No me encuentro nada bien. Ni hace tiempo ni ahora. Entre los Wolves y... ese día, es difícil estarlo- dijo él con algo de dificultad.

Twilight se acercó al dragón.

-Sé como te sientes, Spike. Después de lo que te ocurrió durante el entrenamiento es más que evidente- dijo ella.

El dragón volteó su mirada hacia el horizonte.

-Sé que no es nada fácil afrontarlo, pero... debo ser fuerte. No puedo dejar que mi fatídico pasado acabe venciéndome. Odio mi pasado. Odio a mi espantoso yo de 8 años. Odio haberme enamorado de Rarity. A veces me pregunto... si habré cambiado para bien. Si muy en el fondo... sigo siendo ese enano de pensamientos infantiles y decisiones erróneas. ¿De verdad soy... alguien nuevo?- decía el dragón.

La alicornio se sentó junto a él.

-¿Te molesta si te hago compañía, Spike?- preguntó ella de forma algo tímida.

Spike volteó su mirada y se encontró con los bellos ojos morados de Twilight. Respondió lo que pensaba sin duda.

-Tu presencia jamás podría molestarme, mi princesa- dijo él.

Aquellas bonitas palabras la hicieron sonrojar levemente. Su corazón se aceleró un poco.

-No pienses que has cambiado para mal, Spike. Porque no es así. Aunque hayas cambiado, tanto física como psicológicamente, debes tener algo siempre presente, Spike. Eres un dragón ÚNICO en tu raza. Posees la voluntad más grande que existe. Es lo que te hace especial. Créeme cuando te digo que NO existe otro ser en nuestro mundo que se acerque siquiera a ser quien eres tú. Tú mismo lo dijiste; se quedaron contigo las mejores cualidades de tu yo pequeño. Y tu voluntad infinita es una de ellas. Aunque tengas una intimidante apariencia, y una personalidad mas seria, cualquiera que te conozca tan bien cómo yo sabrá que eres un dragón increíble. Lo sé, Spike. Estuvimos juntos prácticamente desde el día que naciste. 8 años en los que me fuí dando cuenta de que siempre estarías dispuesto a ayudar a quienes más te necesitan. Applejack, Rainbow, Pinkie, Fluttershy, Cadence, etc. Es imposible saber a cuantos has ayudado en total. Y lo sigues haciendo en estos momentos. Sin tu ayuda, probablemente no sabríamos muy bien el cómo enfrentar esta nueva amenaza. Debes saber que vivir 13 largos años sin tí fue un golpe muy duro para mi. No volví a ser la misma que era antes. Rara vez pude esbozar una sola sonrisa. La única vez que pude sonreír con más facilidad, fue cuando me convertí en alicornio. De ahí en adelante... no fue así. Pero todo se arregló en el momento que apareciste para salvarnos de los Wolves en el tren. Mi felicidad había rebasado todos los límites. Que estuvieras a mi lado nuevamente fue el mayor milagro que me pudo ocurrir, Spike. Que aparten de tu lado a quien más quieres en esta vida es una desgarradora tragedia por la cual no quiero volver a pasar. Durante estos duros tiempos por los que estamos pasando es cuando más te necesito, Spike- Twilight se recargó en el hombro de su amado dragón.

Una muy pequeña historia, pero más que conmovedora. Spike se sentía muy mal por el simple hecho de saber que la alicornio sufrió demasiado por su partida. Demasiados años en los que tuvo que pelear duro para no sucumbir a la tristeza, la depresión y el dolor. El guerrero lo meditó por unos minutos, minutos los cuales disfrutaba por el simple hecho de tener a su preciosa alicornio junto a él. Ella tenía razón. Jamás podría dudar de ella.

Spike rodeó a Twilight con su brazo. Lo único que quería era tenerla cerca.

-Yo pienso lo mismo, Twilight. El poder vivir a tu lado ha sido una bendición mejor que la de la diosa Idún. Si no fuera por tí, no sería quien soy. O peor, tal vez no me habría propuesto regresar. De igual forma quiero recuperar esos 13 años separados. Hay varias cosas que podríamos hacer durante ese período de tiempo. Si quieres podría llevarte a conocer Dovahkiin cuando toda esta situación con los Wolves se calme. Podemos ir a pasear juntos por la capital, Directus. Seguro que te encantará conocer la biblioteca de la ciudad. ¿Que te parece, mi princesa?- le dijo él mientras la abrazaba con su brazo derecho.

Ella lo miró a los ojos. Esos brillantes ojos verde esmeralda.

-Me encantaría, mi leal guerrero-

Ninguno apartaba la vista del otro. Ninguno de los dos quería hacerlo. Twilight podía ver a través del brillante verde esmeralda en los ojos del dragón, todo el valor, voluntad, determinación y confianza que albergaba en su interior. De manera similar, Spike podía ver a través del resplandeciente color morado en los ojos de la alicornio, un montón de sentimientos. Ambos compartían una sensación muy fuerte. Algo que hacía que sus corazones estuvieran a mil por hora. Algo que ambos querían con todas sus ansias.

Música:

Zero no Tsukaima Princess no Rondo OST 'Koitte Modakashii'

El guerrero y la princesa acercaron sus rostros. Al momento que sintieron la respiración del otro, cerraron sus ojos. La suerte parecía haberse puesto de su lado para aquel momento tan especial. El único testigo fue el atardecer. Testigo de como el dragón y la alicornio unían sus labios en un tierno y cálido beso. Su primer beso. Sentir los labios del dragón sobre los suyos era una sensación indescriptible para Twilight. Mientras seguía con el beso, la pony posó su casco derecho sobre el fuerte pecho del dragón. Podía sentir los latidos del corazón de su dragón. Realmente expresaban todo lo que sentía. Para Spike, los suaves labios de su princesa le transmitían una sensación abismalmente superior a la que sentía al comer gemas o tomar hidromiel. Eran indiscutiblemente mejores que cualquier otra cosa. Ese beso parecía haberles quitado la noción del tiempo, pero les daba igual. Lo único que querían era disfrutarlo. Luego de tres minutos, ambos tuvieron que separarse por la falta de aire. Los dos respiraban agitadamente.

Twilight decidió romper el silencio.

-¿No te molesta... que me quede?- le dijo ella.

Spike acarició su mejilla con su mano izquierda.

-Tenerte a mi lado nunca será una molestia- dijo él.

Twilight se posicionó sobre Spike, reposando su cabeza sobre el pecho de su dragón. Escuchar los latidos de su corazón era de lo más agradable. El dragón la rodeó con sus brazos en un cálido y protector abrazo. El pelaje de la alicornio era de lo más suave.

-Te amo, Twilight- dijo él, para después darle un beso sobre su cabello.

-Y yo a tí, Spike. Y no quisiera estar con nadie mas- respondió ella, frotando su rostro contra el pecho de su guerrero.

Al final del día, el guerrero y la princesa habían dado el paso definitivo en sus vidas.

Fin de la música

En Ponyville

Rarity veía una foto recostada sobre su cama. La foto la mostraba a ella, sus amigas y al pequeño Spike de 8 años el día del cumpleaños número ocho de éste último. La unicornio blanca volteó su mirada hacia su mesa de noche junto a su cama, y pudo visualizar sobre ésta el rubí de fuego que había recibido ese mismo día. Un día que le transmitía un montón de sentimientos.

-Lo siento deveras, Spikey Wikey. En unos días estaré en el Imperio de Cristal. Ojalá puedas perdonarme...-


Fiuuu. Finalmente, luego de casi 2 meses, aquí les traigo un nuevo capítulo de esta gran historia, lectores. Perdonen la tardanza en serio. Dos cosas me retrasaron: la universidad (que es HORRIBLE en online) y el Call of Duty: World at War xD. La universidad me bombardeó con trabajos y el Call of Duty me enganchó tanto con su modo zombis xD. Lo jugué tanto que la voz de mi personaje favorito de ese juego, el soldado Polonsky, me encantó y la usaré en un futuro para uno de mis OC. Ustedes estén tranquilos que yo no los dejaré sin esta historia inconclusa. Tendrán mucho de LoneWolf2000 para el futuro. Tengo grandes planes e ideas para todos ustedes los que estén dispuestos a seguirme en esta trayectoria.

Antes de irme, quería advertirles que tengan cuidado con los plagiadores. He oído que hay ladrones sueltos por ahí, robando grandes historias a otros autores. Y eso es lo peor. Pero no cuentan con que los lectores son muy listos y saben reconocer cuando algo está plagiado. Sé que ustedes forman parte de aquellos lectores listos. En fin, supongo que eso sería todo lo que tengo que decirles por ahora.

PREGUNTA:

¿Cual es el personaje de MLP que más odian y por qué?

Recomienden mi historia si les está gustando, síganme para estar atentos y eso es todo por mi parte.

Hasta otra, lectores