Hola, aquí Zeon con el capítulo 5.
La verdad, no me esperaba esto. 35 favoritos, 45 seguidores y no sé cuantas visitas con tan solo 4 capítulos, no sé si es mucho o poco, pero para mi es algo increíble. No pensé que esta historia le fuera a gustar o interesar a tantas personas. Solo puedo dar las gracias.
Esto definitivamente motiva a seguir, así que… Gracias de verdad.
Contestando review.
Akutzu Pentaghast: Harem, Ophis ya está confirmada, Xenovia es 50/50 y el resto, ya se verá.
Y ahora a lo que venimos.
Capitulo 5: El día de visitas.
Es el día de la visita.
Dicen que es una visita al aula, pero en realidad es más bien una exhibición de puertas abiertas. Es natural que esté bien que los padres vengan, pero también está bien que los estudiantes de la escuela media visiten y vean cómo son las clases. Es posible que los tutores de esos estudiantes de secundaria también vengan a visitarnos; es un evento bastante abierto.
No sólo los padres, sino también porque kouhais de la división de escuelas primarias de la academia Kuoh vendrán a visitarnos, nosotros de la división de la escuela secundaria estamos excesivamente nerviosos, ya que no queremos responder erróneamente frente a los kouhais.
Por supuesto, el consejo estudiantil tenía más responsabilidad sobre sus hombros. Ya que teníamos que hacer que todo saliese bien, algo que en esta escuela era algo difícil. Añádele que dos de los cuatro reyes demonio iban a venir… Nada podía salir mal, corrección, nada DEBÍA salir mal. Aunque teniendo en cuenta que uno de esos reyes demonios venia de sorpresa, sin aviso y llamando mucho la atención, bueno… Mi día no iba a ser fácil.
—Gen-nii, no te olvides el bento.—
Mi hermana, Kaho, me trajo la comida en una caja. Después de calzarme, agarré el almuerzo y le acaricie la cabeza.
—¿Estas segura de que no quieres que os lleve?—
—Gen-nii tiene un día duro por delante y Vali-san nos va a llevar, no hay problema.—
Asentí y me despedí. Saliendo de casa me encontré con Vali, venía a recoger a mis hermanos y llevarlos al acuario. Ya que yo iba a estar todo el día ocupado y Ophis se había ido a hacer Maou sabe qué, se quedarían solos, era algo que no me gustaba. Por eso le pedí a Vali que los cuidara, tampoco es como si tuviera algo mejor que hacer.
Detrás de Vali, estaba la brujita de su equipo, Le Fay Pendragon. La menor de los hermanos Pendragon se había vuelto una visita habitual a esta casa, al parecer se llevaba muy bien con Kaho, tal vez por su cercana edad o su gusto similar por la cocina.
—Buenos días Genshirou-sama… Ouch—
Sus manos fueron a su frente, frotando el lugar que yo había golpeado con mi dedo.
—Nada de –sama, -san o Genshirou es suficiente. Ya te lo dije.—
Ella asintió aun con sus manos en la frente, Vali rio ante esto y me saludó con un movimiento de mano.
—Así que vas a hacer, ¿que exactamente?—
—Preparar todo para cuando lleguen las visitas, atender a las primeras clases, asegurarme de que los hormonados de los alumnos no hagan de las suyas, en especial cierto trio en el que se encuentra tu rival, guiar a los maou, hacer mi trabajo de secretario, hacer trabajo de nobleza y volver a casa.— miré a Le Fay. —Lo que me recuerda que, si quieres quedarte a dormir, he preparado un futon en la habitación de Kaho.—
La brujita asintió y Vali habló.
—Te espera un día duro Genshirou.—
—No tienes ni idea…—
—He lidiado con Azazel durante mucho tiempo.—
—Voy a lidiar con dos reyes demonio.—
—Azazel es un pervertido/científico loco con obsesión por las [Sacred Gears].—
—Ambos maous son siscones de nivel supremo, uno de ellos se viste como una chica mágica de anime que actúa de una forma infantil y le encanta llamar la atención. Además de querer hacer escenas lésbicas con su hermana sea en público o privado.—
—…—
—…—
—Ok, tú ganas.—
—Gracias.—
Dejándoles entrar me dispuse a volver a caminar, pero mi querido amigo aun tenía que decir algo.
—Por cierto, lo siento.—
—¿Uh?—
Mirándole con duda, él solo se rascó la nuca con una expresión complicada en su rostro y cerró la puerta. Encogiéndome de hombros sin saber a que se refería, seguí mi camino.
Como era temprano casi no había gente por la calle, el sol brillaba en el cielo despejado. Los pájaros cantaban, los gatos tomaban el sol, las pocas personas caminaban o hacían deporte.
En conjunto era una mañana muy tranquila y disfrutable.
…
Algo va a ir mal, lo presiento. Algo me dice que todo se va a ir al infierno en cualquier momento.
Y no me equivocaba.
Tan pronto llegué a la entrada de la academia, me paré en seco y resistí la necesidad de golpearme la cara con la palma de la mano.
Ahí, parado en la entrada, vestido con un traje elegante. El líder de los ángeles caídos, el gobernador Azazel me miraba con una sonrisa divertida.
—¿Que coño haces aquí?—
—Lenguaje.—
—… ¿Qué eres? ¿mi madre?—
—Por hoy… algo así.— su sonrisa, si podía, se hizo más grande. —Vali me dijo que tus padres murieron y me sentí mal que el bueno de demonio-kun que tanto me visita no tuviera a nadie que le apoyase en el día de hoy.—
Ah, por eso Vali se disculpó… Mi venganza será terrible.
—Visito a Vali, no a ti.—
—Pequeños detalles sin importancia, además Sirzechs y Serafall van a estar presentes hoy, hace mucho que no los veo.—
—Podrías esperar a la reunión…—
¿Por qué los problemas no paran de buscarme? Mi día ya iba a ser suficientemente complicado.
—Nah, bueno voy a esperar a los demás padres. Nos vemos luego, Genshirou-kun.—
Actuando como si nada, se alejó un poco a esperar a los demás adultos. No puedo creer a este tipo, hace lo que le da la gana incluso en territorio hostil. Es increíble, no hay otra forma de definirlo.
Bueno, al menos esto no puede ir a peor.
.
.
.
Me equivocaba, claramente.
Poco antes de que las clases empezaran, Xenovia me interceptó en el pasillo. A juzgar por las miradas de los alumnos Xenovia es popular entre los chicos. Ya que ella es una chica atractiva, no era algo extraño. Tal vez porque sus habilidades físicas también eran buenas, ella también es popular entre las chicas.
—¿Qué pasa Xenovia?—
Xenovia baja la cabeza ante mi pregunta.
—Lo siento por decir ese tipo de cosas de repente el otro día.—
Ese tipo de cosas, Ah, se trata de eso. Sobre hacer niños. Así que vino a disculparse por eso.
—Seguí hablando sin pensar en ti.—
Sí, de hecho tenía miedo. De repente hablando de hacer niños. No, en realidad me asustó más la presencia de Ophis.
—De repente hacer ese tipo de cosas es difícil después de todo, creo.—
Sí, sí. Así, así de simple. Por el momento, debemos mejorar nuestras relaciones hasta el punto de que podemos hacer cosas como esa. Bueno, conmigo no. Las consecuencias para ambos serian de un nivel apocalíptico.
—Por eso…—
Xenovia saca algo de su bolsillo… Espera ¡¿eso es?!
—Primero debemos practicar el uso de esto.—
Xenovia abre una cosa empacada en una pequeña bolsa delante de mis ojos, era un condón.
¡Un! ¡Maldito! ¡Condón!
¡En medio del puñetero pasillo!
Todos los ojos del pasillo estaban reunidos en la cosa que Xenovia sostenía.
—¡Idiota! ¡¿Qué estás sacando en público?!—
¡Es un artículo extremadamente intenso para mostrar a los estudiantes de secundaria que están en un momento delicado! Más bien, ¡es totalmente malo sacarlo en la escuela!
Inmediatamente el pasillo se volvió ruidoso. Obviamente, en una academia llena de adolescentes con las hormonas a fuego vivo, que una chica saque un condón crearía escándalo.
—En el mundo en el que estaba, hubo disputa en el uso de esto, pero ponerlo en Japón sería más conveniente siguiendo el patrón del país después de todo.—
¡Eso no importa! ¡Haz algo con esta atmósfera! Todos en el pasillo nos miran a ti y a mí con miradas extrañas, ¿sabes?
—Xenovia, piensa antes de actuar ¿quieres?—
A mi respuesta, Xenovia inclina la cabeza, parece que no lo entiende muy bien.
Me había quedado claro, esta chica carecía de sentido común.
—Vete a clase anda… ¡Y guarda eso!—
.
.
.
De alguna manera comienza la clase, y desde la puerta abierta en la parte de atrás, los padres de mis compañeros de clase siguen entrando.
Como no, Azazel entra… con las manos en las caderas de dos mujeres, que eran madres solteras o eso quiero creer.
La clase era de matemáticas, algo bueno para mí ya que yo soy de ciencias. Al menos, no me avergonzaría frente a los padres de mis compañeros.
—Genshirou Saji, ven a resolver las ecuaciones de la página 125.—
Asintiendo, me levanté con el libro en una mano y caminé a la pizarra. Comenzando a resolver con facilidad los problemas.
—Ese es mi chico, un pequeño genio.—
Al final del aula, Azazel fardó con los demás adultos. Mirando atrás, vi que me estaba grabando con una cámara. Vaya, sí que se estaba metiendo en el papel ¿y de donde sacó la cámara?
—Impresionante ¿verdad? Es listo y tiene buena musculatura, aunque no es tan atractivo como su padre. Jajaja.—
Las madres rieron.
—Por cierto, ¿que hacéis esta noche? Podría invitaros a casa y mientras los niños juegan, nosotros nos dedicamos a nuestras… cosas.—
Esto les sacó un leve sonrojo, mientras reían en voz baja.
Oh… Oh, ahora lo entiendo, me estaba usando para ligar. Era la típica estrategia que usaba el niñero para ligar con las madres solteras. Lo que me faltaba, que se acostase con las madres de mis compañeros.
Esto no puede estar pasando, es demasiado vergonzoso.
Agarrando la tiza con fuerza, la lancé como un proyectil hacia él. Debido a que se estaba riendo no lo vio venir y fue golpeado de lleno en el centro de su frente. El impacto fue lo suficiente fuerte como para hacer que su cabeza se echara para atrás.
—¡No me uses para tus tácticas de ligue! ¡Viejo verde!—
—¡Saji! A tu asiento—
—¡Perdón sensei!—
Encima tengo que disculparme.
Volví a mi asiento con un suspiro, mis compañeras de nobleza que eran de mi misma clase; Momo-san, Reya-san, Tomoe-san y Tsubasa-san, me miraban extrañadas por mi actitud. Si ellas supieran quien es ese tipo, aquí ardía Troya.
—Gen-chan, ¿estas bien?—
—Pues…—
Cuando iba a contestarle a Momo-san, volví a escuchar las risitas y por el rabillo del ojo pude ver como Azazel seguía coqueteando.
—No… No estoy bien.—
La clase continúo normalmente, a excepción de los comentarios vergonzosos de Azazel. Pronto todo el mundo pensaría que mi "padre" es un mujeriego y que va ligándose a las madres de los compañeros de su hijo. Mis compañeros de clase miraban a la parte trasera del aula ignorando al profesor, los padres hacían lo mismo, todos viendo a Azazel cortejar a las madres que tenía cerca.
Hay que admitirlo, su título de ángel caído era bien merecido. El cabrón sabe cómo seducir a una mujer… o varias a la vez.
¡¿Pero tenía que hacerlo mientras se pasaba por mi padre?!
—¡Suficiente!—
Ya no aguantaba más.
Con un grito de guerra, me subí a la mesa y la usé como trampolín para abalanzarme sobre Azazel como un puma hambriento.
Era el descanso para la comida, Azazel y yo caminábamos por el patio.
—No me puedo creer que me enviasen a ver al director por tu culpa.—
—Lo que yo no me creo es que me atacaras delante de todo el mundo, parecías un león. ¡Hasta me has mordido! ¡Y mira como me has dejado el traje!—
—¡Tú te lo buscaste!—
Como si aguantar a Azazel no fuera suficiente, Sona me va a echar la bronca por el espectáculo que montamos. Lo que me recuerda que ahora mismo está escoltando a Lucifer-sama y el padre de Gremory-senpai.
Lo que dejaba a…
—¡Escuché que una bruja estaba haciendo un evento de fotografía!—
—¡¿En serio?! ¡Vamos a ver!—
Oh no…
—¿Oh? ¿Quién podrá ser?—
Tu sonrisa te delata Azazel, ¡sabes perfectamente quien es!
—Esto huele a escándalo, ¿no tienes que hacer algo al respeto? Eres miembro del Consejo Estudiantil.—
—… Sí.— suspirando le señalé con el dedo. —No te muevas de aquí.—
Lo último que necesito es que se presente ante los reyes demonio en medio de un evento como este.
Siguiendo a los alumnos con cámaras llegué a un pasillo. Podía escuchar el sonido distintivo de cámaras sacando fotos a medida que me acercaba.
Los destellos seguían sonando, los estudiantes que sostenían cámaras estaban fotografiando algo en una esquina del pasillo.
Desde mi posición podía ver que se trataba de una mujer de baja estatura, vestida de una chica mágica. El traje era casi en su totalidad rosa, llamaba mucho la atención.
Al llegar al lugar me abrí paso entre la multitud de chicos fotografiando a la mahou-shoujo cosplayer. Llevaba un traje de un personaje de anime. Si recuerdo correctamente fue "Magical Girl, Mil kiss Viral 7 alternative". Era un anime que a Kaho le gustaba mucho.
Ahora de cerca podía apreciar mejor a la mujer. Es una hermosa chica que se ve como en su adolescencia con el pelo negro, atado a colas gemelas y ojos azules. También tiene un cuerpo similar al de una loli, aunque con pechos grandes.
Sin duda alguna esta persona era Serafall Leviathan.
Ella estaba girando su báculo en círculos. Los estudiantes de las cámaras estaban tomando fotografías emocionados. Su falda era corta, así que sus bragas estaban expuestas de forma intermitente...
—Vale, vale. Se acabó el espectáculo, largo.—
El grupo se empezó a dispersar, quejándose de no poder seguir con la sesión fotográfica. Ya solo quedábamos la brujita y yo. Al girarme para verla de frente, hice una pequeña reverencia.
—Le doy la bienvenida, Leviathan-sama. Me llamo Genshirou Saji, peón de Sona Sitri-sama.—
—Ah, ¿eres de la nobleza de mi So-tan? Encantada de conocerte Gen-chan, soy la maou Serafall Leviathan.—
Girando sobre si misma hizo una pose mientras brillaba y una estrella salía de su guiño.
—Llamame Levia-Tan.—
… Eso ha sido súper-adorable y a la vez sexy, sus enormes pechos habían rebotado mientras hacia la pose, dado que yo aun no me había puesto recto eso pasó justo enfrente de mi cara. Serafall la loli de grandes pechos...
—No creo que pueda… Dejando eso de lado, incluso si es una maou, este centro tiene un código de vestimenta. Leviathan-sama no puede ir vestida así en recinto escolar.—
—¿Eh? Pero este es mi uniforme.—
Haciendo un puchero, sus enormes ojos azules me miraban como un corderito. ¡No! ¡No debo sucumbir ante los encantos de esta súcubo!
Resistirse era extremadamente difícil, esta era la mujer más hermosa del infierno, sumado a su adorable actitud. Necesito una salvación, un milagro.
—¿Qué es esto? Saji, siempre te digo que arregles las cosas de forma concisa…—
Y ahí está, mi salvavidas. Justo cuando iba a sucumbir ante Serafall, Sona aparece junto al resto del Consejo, Lucifer-sama, el padre de Gremory-senpai y la mitad del CIO.
Obviamente, al ver con quien estaba, Sona se congeló. En cuanto a Serafall…
—¡Sona-chan! Te encontré.—
Después de encontrar a kaichou, Leviathan-sama se aferró felizmente a su hermanita.
Mientras la onee-sama asfixiaba a su imouto, Sirzechs-sama llamó a la maou.
—Ah, eres tú, Serafall. Así que tú también viniste aquí.—
—Es Leviathan-sama.—
Ante la cara de duda de Hyoudou, Gremory-senpai dijo eso. Aun así, parecía que no lo entendía.
—Esa persona es uno de los cuatro Dai-Maous actuales, Serafall Leviathan-sama. Y también, la hermana mayor de kaichou.—
Contesté yo.
—¡¿EH?!—
Su grito resonó por el pasillo, entiendo que sea difícil de creer, pero tampoco tienes la necesidad de gritar tan fuerte.
Así es como era, esa súper-belleza era una de los cuatro reyes demonio. A pesar de que era la onee-sama de kaichou, su belleza era algo que no perderá ante nadie. Aunque, si me pongo en los zapatos de Hyodou seguro se imaginaba a una mujer algo más madura, vestida de forma provocativa y que hablase de una forma sensual… Siendo sincero, antes de saber sobre Serafall, yo también me esperaba algo así. Sin embargo, prefiero a esta Serafall antes que a la de mi imaginación.
—Serafall-sama, ha pasado mucho tiempo.—
—Ara, Rias-chan. ¿Has estado bien?—
¡Qué tono tan lindo!
—Sí. Gracias. ¿Viniste hoy a la visita de clase de Sona?—
"Sí, Sona-chan es muy mala. ¡No me habló de hoy! ¡Cielos! Debido a la conmoción, Onee-chan iba a atacar el Cielo"
¿Sólo a causa de eso atacarías el Cielo? ¡No sé si estaba bromeando o hablando en serio! No, probablemente bromea… probablemente.
—Ise, salúdala.—
—Encantado de conocerte, soy Hyoudou Issei. ¡Soy el sirviente de Rias Gremory-sama, peón! ¡Estaré bajo tu cuidado!—
—Encantado de conocerte. Soy la Maou Serafall Leviatán . Llámame Levi-tan.—
Se presentó repitiendo la pose de antes.
—Oye, Sirzechs-chan. ¿Este chico es el rumoreado Dragon-kun?—
—Sí, él es la persona en la que reside el Dragón galés, Hyoudou Issei-kun.—
Sirzechs-sama tampoco dice nada sobre la adición de -chan. ¿Así que siempre debe llamarlo así? Nah, Serafall seguramente llama a todo el mundo con –chan.
—Ara ara, tío Gremory.—
—Sí, Serafall-dono. Este es otro uniforme novedoso.—
—Ara, tío, ¿no lo sabes? Esta es la moda en este país, ¿sabes?—
—Je, es así. Disculpa mi ignorancia.—
—Jajaja, Tou-ue, no la creas.—
Y como si nada, empezaron una conversación casual. Quizá ahora era mi oportunidad para escabullirme y volver con Azazel antes de que haga algo, pero…
Mirando la cara de kaichou, estaba completamente roja. Al mirar a su hermana mayor, ella se sentía completamente avergonzada. Al darse cuenta de eso, Leviathan-sama miró a la cara de Kaichou con preocupación.
—Sona-chan, ¿qué pasa? Tu cara está completamente roja, ¿sabes? Ya que es el tan esperado reencuentro con tu onee-sama, yo, creo que sería mejor si fueras un poco más feliz "Onee-sama!" '¡So-tan!', llamando así y abrazándonos de una manera yuri, ese tipo de desarrollo está bien para mí también, ¡Onee-chan!—
… Necesito un pañuelo, no pude evitar imaginar esa escena. Ahora sangre salía de mi nariz.
Kaichou dijo con una expresión insatisfecha. Mientras sus ojos temblaban.
—... O-Onee-sama. Esta es mi escuela y se me confía el trabajo del presidente del consejo estudiantil aquí... No importa que seamos hermanas, el comportamiento de Onee-sama es demasiado… No puedo aprobar ese tipo de atuendo.—
—¡De ninguna manera, Sona-chan! ¡Si Sona-chan me dice que eso, tu Onee-chan estará triste! ¡Sona-chan no sabe que su onee-chan es admirada como la chica mágica! Ya que con el palo brillante, borro ángeles y ángeles caídos.—
—Onee-sama, por favor sea prudente. Si mi onee-sama, el Maou brilla, entonces este pequeño país sería destruido muchas veces.—
… Ya, dudo que eso pase. No creo que sea taaaan imprudente.
—Oye, Saji. Cuando uno de los líderes de los ángeles caídos invadió, Kaichou no llamó a su Onee-san... Mirando esto, ¿no están en buenos términos?—
—Es todo lo contrario. Dado que Serafall Leviathan-sama aprecia tanto a su hermanita, si hubiera sido llamada, se habría convertido en algo terrible. Parece que si se enterara de que su hermanita fue herida por el ángel caído, no sabíamos cómo habría reaccionado. Probablemente habría sido una guerra instantánea. Fue la decisión correcta de no llamar a Serafall-sama, y más bien llamar a Lucifer-sama.—
Aunque al final no fue necesario preocupare por eso.
—¡Oh, no puedo soportarlo!—
La usualmente tranquila y compuesta kaichou tenía los ojos mojados, y huyó del lugar.
—¡Espera! ¡Sona-chan! ¡Adónde vas dejando atrás a tu Onee-chan!—
Serafall-sama corrió detrás de ella.
—Por favor, ¡no me sigas!—
—¡No! ¡No abandones a tu Onee-chaaaaaaan! ¡So-taaaaaaan!—
—¡Te he pedido tantas veces que no añadas 'tan'!—
Y ahí se van, el resto del consejo las siguió. Supongo que debería hacer lo mismo, no, tengo que volver con Azazel. A saber que estará haciendo… Espera, en esa dirección en la que se acaban de ir, oh ¿por qué?
Salí corriendo tras ellas, en esa dirección estaba Azazel. Aunque seguramente me ignoró y se fue, tenía que asegurarme.
—¡Saji! ¡Tu padre se ha ido con mi madre!—
Hijo de…
—¡¿Y a mí que me cuentas?! ¡Quéjate a tu madre!—
Sabía que esto iba pasar, no debí dejarlo solo. Al menos ya se había ido, ahora ya podía relajarme.
—¡Sooooo-taaaaaan!—
…
Miré al cielo con una cara de póker.
—¿En serio?—
—¡Sooooo-taaaaaan!—
Siguiendo el grito de Serafall, la encontré en la pista de atletismo. Caminaba mirando a ambos lados mientras llamaba a Sona, así que fue capaz de perderla de vista. Teniendo en cuenta que es una siscona y una maou eso era un logro increíble, quien iba a pensar que Sona era tan hábil.
—Leviathan-sama—
Acercandome la llame, ella se giró al escuchar mi voz.
—Ah, Gen-chan. ¿Has visto a So-tan? Se ha escapado de mi… Tampoco me dijo sobre el día de hoy, ¡So-tan es muy mala! ¡Onee-chan se pone muy triste por tu culpa So-tan!—
Imitando la rabieta de un niño, agitó los brazos con los ojos húmedos y gritando.
—¡Ah, mou! ¡atacare al cielo, lo hare si no apareces So-tan!—
Vale, ya nos estamos pasando. Tengo que hacer algo, ¿pero que?
…
¡Lo tengo!
—Leviathan-sama, ¿me permite decirle algo?—
Ella me miró con ojos grandes y húmedos. Lo tomare como un sí.
—Vera, yo también tengo hermanos pequeños. Así que puedo entender cómo se siente. Es normal que con su cargo de rey demonio no pueda ver a su hermana tanto como quiere y aproveche las pocas ocasiones que tiene. Yo haría lo mismo.—
—¿Verdad? ¿verdad? Solo quiero pasar tiempo con So-tan y darle todo mi amor.—
—Sí… pero tiene que elegir mejor el escenario, aquí Kaichou es una figura importante con una imagen que mantener y cuando usted se lanza a… crear caos, pues eso daña esa reputación. No quiere decir que no la quiera, pero ella no es del tipo de personas a la que le gustan ese tipo de acciones tan excéntricas en publico. ¿Lo entiende?—
Ella asintió ferozmente.
—Solo tengo que llevarla a un lugar privado y así aceptará mi amor.—
… Eso ha sonado como si la fuera a secuestrar.
—No, lo que tiene que hacer es bajar un poco el ritmo. Como cuando das de comer a un ciervo, te acercas lentamente y poco a poco te acercas más para que se vaya acostumbrando a tu presencia.—
—Oh, ya veo. ¿Entonces nada de yuri-yuri?—
—Nada de yuri-yuri.—
—¿Y dueto de chica mágica?—
—Nada de dueto.—
—¿Y video sexy?—
—… No. Besos en la mejilla, frente y abrazos. Nada de videos, frotaciones, tocamientos ni nada de eso. Algo normal.—
—Hrm…—
—Y nada de hacer cosplay en la escuela.—
—¡¿Qué?! Pero…—
—No… Será duro, pero al final tendrás tu… yuri-yuri.—
Podía ver el conflicto en sus ojos, esto iba a ser difícil para ella. Tras unos segundos su mirada conflictiva cambió a una con gran determinación.
—¡Está bien! ¡por So-tan lo haré! ¡Gracias Gen-chan! ¡Con tu ayuda conquistaré el corazón de la mejor hermana del mundo!—
Eso es, ese es el espíritu. Serafall, con fuego en los ojos declaró eso y yo asentí a cada palabra, bien, algo había logrado.
… Espera, ¿que dijo al final?
—Leviathan-sama, creo que escuche mal. ¿Dijo la mejor hermana del mundo?—
—Eso dije.—
—Ya veo, parece que tenemos un problema.—
Ante su mirada confusa, saqué, mi teléfono móvil y le mostré una foto de Kaho.
—¡Ella es la mejor hermana del mundo! No solo es adorable, también es cariñosa, muy responsable y madura para su edad. Además sabe cocinar y cuidar de los demás. ¡Es la hermana perfecta!—
—¡¿Ah?! ¡Mi So-tan es más adorable y más responsable! ¡Además de ser muy lista! ¡So-tan es la mejor hermana!—
—¡De ninguna manera! ¡Kaho es mucho más adorable, es la mejor hermana!—
—¡No! ¡So-tan lo es!—
—¡No! ¡Kaho!—
—¡So-tan!—
—¡Kaho!—
—¡So-tan!—
—¡Kaho!—
—¡So-tan!—
—¡Kaho!—
Y así comenzó lo que más tarde se llamaría…
La Guerra de los Siscones: Episodio I La Amenaza de la Onee-sama.