Julio: Encuentro con el Pasado (LYVIA — GRUVIA)

Era una noche especial, Lyon volvía a casa luego de estar varios meses alejado por una misión particularmente difícil. Juvia realmente extrañaba a su novio y ansiaba recibirlo con una cena muy especial que venía planeando desde hacía algunas semanas.

Volvía del mercado con las bolsas de papel en sus brazos, su mente dispersa sin atender demasiado el camino, pensando en la receta que debía preparar, la decoración que tenía planeada, las velas y pétalos de rosas que darían la atmósfera romántica que la pareja necesitaba luego de tanto tiempo separados.

"Juvia va a sorprender a Lyon-sama!" Pensó alegremente girando en una esquina a solo una cuadra de la casa que compartían "Estoy segura que le encantará lo que Juvia ha pensado para esta noche" Sus mejillas se enrojecieron y cerró los ojos un instante cuando su activa imaginación le regaló una imagen detallada de lo que esperaba esa noche.

Tan sumergida estaba en su ensoñación que no vio al chico que venía en sentido contrario, quien tampoco atendía su camino

"Ouch!" Exclamaron ambos cuando sus cuerpos chocaron. Las compras de Juvia cayeron al suelo, algunos productos rodaron por la calle mientras la chica se masajeaba la cabeza.

"Lo siento" Escuchó que decía el joven que la chocó. Abrió los ojos y comenzó a tomar los objetos que se habían escapado de las bolsas.

"No es problema" Respondió con una sonrisa amable "Juvia no estaba viendo por donde iba"

"¿Juvia?" Levantó la cabeza y sintió el aire atorarse en su pecho, frente a ella Gray Fullbuster sostenía una lata de tomates — que seguramente pertenecía a sus compras caídas— y la miraba con el rostro desencajado entre sorpresa y alguna otra emoción que ella no reconoció.

"Gray-sama…" Su cuerpo se tensionó y sus ojos se fijaron en el rostro masculino de quien fuera su primer gran amor. Movió la cabeza hacia ambos lados, tratando de despejar su mente y se levantó del suelo, evitando su mirada, fingiendo que buscaba los productos perdidos.

"Te ayudaré a recoger esto" Le dijo él. Notó que su voz sonaba tosca y nerviosa. El encuentro también le resultaba incómodo.

"No te preocupes, Gray-sama, Juvia se ocupará de levantar todo" Pero el joven siguió con la tarea hasta que ambos fueron por el ramo de rosas rojas que cayeron a un costado de la calle. Sus dedos se rozaron sobre los tallos verdes de las flores.

"Gracias" Le dijo tomando el ramo de sus manos y acomodó las compras como pudo en sus brazos. Sentía sus mejillas enrojecidas arder y dentro de su mente una voz chillona le exigía huír pronto de allí.

"No es nada…" Respondió el mago de hielo, su rostro también algo sonrojado. Juvia pensó que, tal vez, su vergüenza se debía a haber chocado con ella o quizás por provocar que sus compras se dispersaran.

"Bueno… Juvia tiene que irse…" Le dijo luego de una pausa incómoda "Adiós, Gray-sama" Él no respondió, por lo que ella decidió seguir su camino hacia su casa.

En el corto camino que transitó desde el choque hasta la entrada de su hogar, se tuvo que esforzar por no girar a mirarlo una vez más. Pensar en ello le producía angustia, por algún motivo sintió que estaba traicionando a Lyon.


746 días exactos pasaron desde que ella decidió cambiar de gremio y afiliarse a Lamia Scale para mudarse a Ciudad Margaret. No es que Gray haya contado los días como si fueran una condena…

Verla otra vez le trajo una oleada de emociones que hacía tiempo no sentía. Hubiera dado cualquier cosa por prolongar aunque fuera un instante el encuentro con ella. Quería preguntarle tantas cosas y confesarle tantas otras, pero seguía comportándose como un cobarde… seguía permitiendo que la distancia lo lastimara…

Llegó a la habitación de hotel que rentó por esa noche y se dejó caer en la cama dura e incómoda del cuarto. Se cubrió el rostro con el brazo, mientras su mente divagaba en la conversación que compartió con Lyon hace poco más de dos años, cuando su hermano adoptivo le pidió que hiciera caso de sus sentimientos…

No lo hizo. Sus miedos y dudas dejaron que siguiera lastimando a Juvia, hasta que finalmente ella se cansó…

En ese tiempo parecía imposible que ella se alejara de él. Estúpidamente pensó que estaría por siempre a su lado, esperando a que se decidiera a confesar sus sentimientos. Fue demasiado ingenuo creer que podía tener su amor eterno a cambio de nada.

Lyon le ofreció lo que él nunca pudo darle y Juvia estaba tan necesitada de sentirse amada que finalmente lo tomó.

No podía culparla, no podía enojarse con ella. Aunque su decisión dolía como una daga filosa que se clavaba en su pecho hundiéndose día a día cada vez más profundamente…

Era tarde para decirle que la amaba, sería egoísta de su parte ir hasta su puerta y decirle todo lo que ella quiso oír con anterioridad, pero que él no se animó a confesar.

Tuvo que obligarse a sí mismo a permanecer en esa habitación y no salir corriendo del hotel a hacer justamente eso.

"Ya es tarde" Se dijo con resignación "Ella ya no me ama" Miró al techo salpicado de rastros de humedad "Es feliz con él. Es feliz con Lyon y yo…"

Y él hacía más de dos años que no sonreía, no como antes.

"Juvia merece ser feliz… ¿Qué puedo ofrecerle yo?¿Cómo alguien tan roto, tan cobarde puede hacerla feliz? "


Lyon llegó a su casa corriendo, ansioso por volver a abrazar a su novia otra vez. Tenía tantas ganas de verla, de contarle las aventuras que vivió esos últimos meses y de escuchar todo lo que ella hizo en su ausencia.

El joven de cabellos blancos tenía los músculos cansados, su cuerpo exigía un largo descanso luego de un viaje largo, pero Lyon no podía permitirse el lujo de descansar, no después de haber extrañado a Juvia durante tanto tiempo. Estaba decidido a pasar toda la noche despierto, acurrucado a su lado, agradeciendo de tener la oportunidad de vivir con ella. Pero al abrir la puerta de su hogar, se sorprendió de ser recibido por una espesa penumbra…

"¿Juvia?" Preguntó, cerrando la puerta delicadamente al tiempo que dejaba su bolso de viaje a un lado. Escuchó un sollozo que provenía del dormitorio y se apresuró a llegar hasta allí.

Encontró a la Maga de Agua tendida sobre la cama, con el rostro hundido en la almohada, sollozando incontrolablemente. Se arrodilló a un lado del colchón y acarició su cabello suavemente para tratar de calmarla. Ella giró la cabeza y lo observó con los ojos enrojecidos….

"Lyon-sama... " Murmuró entre llantos y se arrojó hacia él con los brazos abiertos, rodeando su cuello. La repentina acción provocó que él perdiera el apoyo en sus rodillas y cayó hacia atrás con ella encima, aún sollozando.

"Juvia, ¿Qué sucede?"

"Juvia… Juvia lo siente mucho…"

"Dime que sucede, me estás preocupando…"

"Lyon-sama es tan bueno con Juvia… es el novio perfecto" Se sintió halagado por sus palabras, pero que las dijera llorando no parecía una buena señal "Pero Juvia…"

"Tú eres un ángel, Juvia…. Me haces tan feliz" Ella se abrazó con más fuerza y negó con la cabeza tercamente. Lyon acariciaba su cabello largo con una mano, mientras que con la otra la sostenía firmemente contra él.

"Juvia es… Juvia…"

"Shhh… tranquila… Trata de calmarte y luego me explicas que sucedió"

Ella levantó la cabeza y lo observó fijamente. La tenue luz que venía del exterior apenas iluminaba su rostro hinchado por el llanto. El chico limpió el camino de sus lágrimas con la palma de su mano y le sonrió amablemente para darle ánimos.

Juvia se separó, imponiendo una distancia entre ellos. Podía ver que estaba más calmada, pero la tensión en su cuerpo era obvia, tenía los hombros rígidos y sus manos temblaban mientras se aferraban a la tela de su vestido.

"Lyon-sama merece a alguien mejor que Juvia" Dijo finalmente con voz quebrada "Merece a alguien que lo ame" El aire de la habitación se volvió denso y Lyon sintió que lo había abofeteado con fuerza.

"Juvia…"

"Juvia no puede amar a Lyon. Quiere hacerlo, quiere amarlo, pero no puede…" El pánico lo invadió, ella volvía a derramar lágrimas y sus labios temblaban mientras dejaba salir las palabras "Juvia aún ama a Gray-sama"

FIN

AN:

Drama! Drama! Como me gusta el Dramaaaaa!

No pensaba hacer una continuación de los meses Abril y Mayo, pero no sabía que escribir para este tema y se me vino esta idea a la cabeza, así que… aquí estamos.

Quizás en algún momento le escriba un desenlace a todo esto, pero por ahora dejo finalizado en One-shot de Julio con final abierto :)