Shingeki no Kyojin no me pertenece.

Pareja: Levi/Eren

Rating: T, T y medio, casi pasado a M.

Advertencias: situaciones cómicas y calientes.

Notas de autora:

Este fic no fue escrito de una forma convencional para mí porque se basa un 60% de diálogos y un 40% de narración objetiva. Quise hacer un fic comedioso-romanticoso muy ligero de leer. La lectura es muy fluida y la historia no es para nada profunda, de hecho, admito que es bastante cliché, pero me gustó el resultado. Disfruten.

KIWISHOP

Capítulo 1/12

Milkshake de Fresa

—Tengo algo que decirte —adelantó Annie sin apuros, bebiendo su milkshake de fresa—. Espero que no cambie nuestra relación

—Oh no, reconozco esa mirada —reaccionó Eren, bebiendo su surtido—. Tengo un mal presentimiento.

—Soy lesbiana.

Ambos estaban en KiwiShop, la heladería y juguería que solían visitar juntos. Cómo de costumbre, Eren había ordenado un surtido, y Annie un milkshake de fresa tibio.

Eren, intentando no ahogarse con el maldito surtido (que sabía horrible), analizó con rapidez lo dicho por Annie. Acabó todo el jugo sin pausa. Lo absorbió todo a través del sorbete y, con el cerebro acalambrado y la garganta húmeda, se limitó a realizar una simple pregunta:

—¿Estás segura?

—Sí. —respondió al instante—. Soy lesbiana.

—¿Sabes que esto cambiará nuestra relación para siempre?

—Lo sé.

Eren aspiró el jugo por el sorbete, pero la copa ya estaba vacía.

—¿Cómo sabes que eres lesbiana?

—Nunca te quise como un novio —Esa no era la respuesta oportuna para la pregunta, y de ningún modo explicaba el asunto de la repentina salida de closet, pero Eren optó por no objetar al respecto y aceptarla—. Más bien siempre te consideré como un mejor amigo. Además, ya he estado con una mujer y me ha gustado.

—Esto no se puede poner peor. —Se dijo Eren en voz alta, colocando su sorbete en el milkshake de Annie y absorbiendo el jugo. Se arrepintió. Estaba caliente—. Ugh, esto no se puede poner peor.

—Sí, es peor —agregó Annie tranquilamente—. La mujer con la que he estado, es tu hermana.

—Dios, eso sí es terrible. ¡Mesero! —Eren optó por ordenar una merengada de fresa y arándanos fría junto con una ensalada de frutas para ambos—. Para aclarar, ¿con "has estado" te refieres a haber tenido sexo con Mikasa?

—Exactamente. —asintió Annie, tomándose el milkshake con calma.

—¿Desde cuándo sucede?

—No importa.

—Tengo derecho a saberlo. Eres mi novia, y con quien me engañas es mi hermana.

—El punto es que debemos terminar nuestra relación —Annie concluyó justo cuando el mesero colocaba la ensalada y la merengada de fresa en la mesa—. Lo nuestro no tiene ni pies ni cabeza. Yo soy lesbiana y tú eres gay. No hay motivo para seguir esta farsa.

—¿Yo soy gay? —inquirió, más sorprendido que ofendido, llevándose un pedazo de kiwi a la boca—. Dame un respiro cariño, ¿de cuantas cosas más me enteraré hoy?

—Eren, tú eres gay. Le miras el trasero a Reiner.

—No —refutó, sorbiendo su merengada, que al menos sí estaba deliciosa—. No, estás equivocada. Yo no soy gay.

Annie giró sus ojos y suspiró.

—Bien, pero eso no cambia el hecho de que yo sí soy lesbiana y que me cogí a tu hermana —admitió con tranquilidad como si estuviese hablando de cualquier cosa—. Y todo esto conlleva a que debemos terminar.

Eren asintió, terminando la merengada de fresa en un santiamén.

—Bien. Pero dime algo, ¿al menos fui buen novio?

—Eren, en el año que estuvimos juntos, sólo me besaste 2 veces. La vez que te propuse tener sexo, pusiste la cara como si hubieses chupado un limón. ¿Tú qué crees?

—Annie, me pediste que te hiciera sexo oral, por amor a Cristo.

—Te pedí que nos hiciéramos sexo oral mutuamente —corrigió Annie, y Eren hizo una inconsciente mueca de asco—. Ahí lo tienes. Como si hubieses chupado un limón. En definitiva, no te gustan las vaginas.

Ambos comieron el trozo de melón al mismo tiempo. Se miraron y sonrieron.

—Traducción: fui el mejor novio del mundo. —concluyó Eren, provocándole una risa sarcástica a la rubia, quien terminó de comer el ultimo trozo de fruta en la ensalada.

—Fuiste un novio patético, pero fuiste y seguirás siendo mi mejor amigo, y el mejor amigo de todos. —aseguró, levantándose de la mesa—. Te escribo luego.