Como era habitual para él, las celebraciones se habían vuelto demasiado tediosas en muy poco tiempo, pero por más que trató de disfrutarlas, o de fingir que lo hacía, simplemente no pudo soportarlo un segundo más, por lo que se había retirado a sus habitaciones temprano.

Demasiado ruido y conversaciones sin importancia que ya sabía que dejarían aturdidos todos sus sentidos durante días. El más sensible de todos siempre había sido el que le indicaba cuando alguien mentía, por lo que sería el que más sufriría, por obvias razones.

Y también la culpa no lo dejaría en paz, por más que se hubiera tratado de convencer de que era el único curso de acción. No había otra manera. Su padre no lo escucharía y nadie más parecía darse cuenta de que su hermano no estaba listo para volverse Rey. Tendría que arreglarlo él mismo, igual que siempre.

Pero quería estar bien seguro, por lo que se preparó para lanzar un hechizo que le mostraría su futuro a diez años. Si se veía realmente prometedor, entonces no lo haría. De lo contrario los dejaría entrar.

-Cuando yo lo hice no pasó absolutamente nada. Creí que no había servido-, si él mismo no supiera que no había consumido nada de alcohol esa noche, pensaría que estaba delirando. ¡Esa era su voz!

-¡¿Cómo te atreves a hacerte pasar por un hijo de Odín?! ¡Impostor!-, probablemente debería haber alertado a los guardias, porque había levantado todos los escudos que impedirían que nadie excepto él mismo pudiera ingresar a sus aposentos. Simplemente no había manera de que estuviera ahí, y más aún que no lo hubiera notado. Pero se avergonzó de su arrebato; así sería como habría reaccionado su hermano. Su reacción había sido totalmente impropia.

-Sabes tan bien como yo que es imposible replicar la firma mágica de nadie-, la respuesta lo descolocó totalmente... no. No podía ser.-Demasiado inteligentes para nuestro propio bien, ¿no es lo que todos dicen?-, pero todo en él indicaba que así era.

-¿Cómo...-no fue capaz de terminar la pregunta que el otro seguramente ya sabía que haría, si es que realmente fueran la misma persona.

-Sé que ya sabes cómo, sólo que no creíste que fuera posible-, y de hecho así era. -Lo importante aquí es por qué y no me queda mucho más tiempo.

-Tu ramificación desaparecerá-, no pudo evitar preocuparse. Es decir ¡son una misma persona! ¿Cómo no iba a hacerlo?

-Señalas lo obvio- casi parecía resignado. Como si se hubiera dado por vencido. ¿Pero de qué? ¿Qué había sido tan terrible para sacarle toda la lucha al Dios del Caos? ¡Caos! ¡Una fuerza de entropía imparable!- Tu mente está plagada de ideas, una cosa te lleva a otra...-, elogió emocionado, y de repente se detuvo, -no tienes idea de cuánto extraño eso.

-¿Cuánto tiempo hacia el futuro a partir de ahora?-, Dioses, ahora que lo pensaba, no se veía mucho mayor, pero parecía que había bajado al Helheim y de vuelta al menos tres veces.

-Antes de que responda a cualquiera de tus preguntas, tienes que prometerme algo-, sonaba tan agotado, jamás había imaginado que así podía llegar a terminar. Y le dolía tanto.

-¡Lo que sea!-, ni siquiera hizo falta que lo pensara. Él estaba ahí y quién sabía por qué infiernos había tenido que atravesar para verse obligado a recurrir a la última alternativa. Arriesgarse a intentar algo que ni siquiera era seguro que funcionara, pero que al final sí funcionó.

-Prométeme que pase lo que pase, no perderás tu inocencia-, en algún momento las lágrimas se habían acumulado en las esquinas de los ojos del otro, y por primera vez notó que aunque eran del mismo tono esmeralda de siempre, ya no poseían la misma vivacidad e impetuosidad que siempre percibía en sí mismo cada vez que se miraba al espejo. Comprendió entonces el por qué de esta promesa.

-¡Lo juro!-, y atrapó en un fuerte abrazo a su yo futuro.


Rayos! Quería, de verdad quería hacer una historia de 4 000 palabras, pero en serio que no he tenido nada de tiempo, apenas logré terminar (según yo) algo medio decente.

2350 palabras exactamente! Creo que me gustó más la primera parte. En serio que quería hacer mucho más emocionante el encuentro entre los dos Lokis, pero me faltó tiempo.

Algún día publicaré una versión extendida de este fic, estilo DC (ok, no), igual que las de Anochece y el fic AU moderno de Hela que ya había prometido, lo juro!

No sé por qué, pero siento que quedó un poco OoC, qué opinan ustedes?

Ya saben, cualquier comentario es siempre bienvenido! Esto es todo por ahora! Hasta luego!