"Como hacer cosas con el tiempo"
Para Marinette, el tiempo era algo muy valioso. Algo que en muchas ocasiones no se podía dar el lujo de perder debido a todas las obligaciones que llevaba encima.
Si bien, su agenda no estaba atiborrada de actividades, llevar una vida secreta con un alter ego era completamente agotador.
Y quizás por ello era que últimamente se sentía más alerta que nunca al reloj en su muñeca, pues intentaba no fallar en sus materias o tareas de estas para no tener problemas con sus padres nuevamente, después de todo, no deseaba decepcionarlos como Marinette.
Razón por la cual se habia atrevido a renunciar al amor que le profesaba a su ahora amigo, pues debía mantenerse con la cabeza fría si quería llevar su vida debido a su nuevo itinerario auto impuesto.
Por eso ahora se encontraba sola sobre el piso del camarote de Juleka, intentando pegar con cuidado una de las piezas de la maqueta que hasta hace unos momentos se encontraba armando con la dueña de la habitación y con Rose, quienes en ese momento habían salido debido a que a final de cuentas les faltaba algo de material para poder acabar su proyecto.
Cuando una pieza no quiso encajar correctamente, resopló frustrada, tirando de un movimiento lo que tenía en sus manos.
— ¿Todo bien, Ma-ma-marinette? — Reconoció la voz de Luka a la entrada del camarote, y por inercia dio un pequeño brinquito, asustada.
— ¿Eh? ¡Sí! Claro, solo algo estresada por estar en contra tiempo — Soltó levemente frustrada, señalando el pedazo de cartón que debía formar una especie de cono ahora completamente deformado en el suelo.
Él adolescente arqueo una ceja, inquieto ante el comentario de ella.
Más que nada, confundido.
Si bien no conocía a la perfección a Marinette, sabía bien que el tiempo no era su fuerte, pues solía llegar algo tarde a las reuniones que tenia con su hermana.
Y no es como si estuviese al pendiente de ello, simplemente era algo que escuchaba de Juleka, cuando él le preguntaba por Marinette.
Se acercó a hasta donde estaba ella, sentándose en el suelo frente a lo que adivinaba era el proyecto del que tanto Juleka hablaba durante los días pasados.
— ¿Contra tiempo? — Inquirió, acomodando su guitarra acústica sobre sus piernas mientras intentaba afinarla, cosa que no podía lograr adecuadamente al estar más al pendiente de ella que de la misma guitarra — ¿Tienes una cita? — Con aquella pregunta sintió su garganta repentinamente seca.
Y es que, debía admitirlo. Sentía algo que no podía explicar con palabras con ella, y solo la música podía ser su método de apoyo para reflejar aquel sentimiento, aun así, él mismo aun no comprendía por completo el significado de aquellas notas que eran dirigidas a ella.
Aunque su hermana insistía que ella sí que lo sabía.
La observó parpadear un par de veces, y en cuanto ella negó con su cabeza se sintió aliviado y pronto se dio el permiso de respirar con normalidad.
— ¿Tienes trabajo? — Cuestionó nuevamente, acercándose a ella con pequeños movimientos de sus piernas, de poco a poco.
— La verdad no — ¿Se podía considerar eso una mentira? Después de todo, ser súper heroína de París no era un trabajo en todo el sentido de la palabra.
El mayor no pudo evitar reír ante la respuesta de ella, pues no sonaba muy convencida. Marinette, en definitiva, era una caja de sorpresas.
— Entonces ¿Por qué últimamente te detiene el tiempo? —.
Marinette no supo como contestarle aquello. No podía decirle su secreto, así como tampoco al cien por ciento sus verdaderas razones.
Ella misma se comenzaba a sentir frustrada ante el agobiante trabajo de complacer a las personas de su alrededor y mantener las expectativas de sus seres queridos, aunque estas fuesen para bien.
Se mordió el labio, intentando buscar alguna respuesta que satisficiera la curiosidad de Luka.
Pero nada llego a su mente.
— El tiempo no debe ser tu enemigo, debes aprender a hacer las cosas aun sobre el, o mejor aún, como hacer las cosas con el tiempo — Aquello para ella sonó como algo que seguramente saldría de una canción, y no pudo evitar sonreir en cuanto Luka tocó una nota en la guitarra.
Él se sintió complacido ante esto, entonces pudo escuchar a lo lejos las pisadas de su hermana y de quien seguramente se trataba de Rose.
Sin pensarlo mucho se levantó de un movimiento, haciendo respingar a Marinette.
— Te ayudaré con ello, si no le dices a Juleka que estuve aquí. No le gusta que entre a su habitación sin permiso — Confesó, apenado. Aunque de cierto modo ocultaba un poco la verdad.
Juleka imaginaria que él se había escabullido hasta donde Marinette se encontraba mientras ellas habían salido, y seguramente no dejaría el tema por un buen rato.
— Acepto, porque realmente me siento intrigada. Aunque Luka, creo que manejo bien mi tiempo — Acotó, defendiendo sus ideales.
El se limitó a reír, después de todo, ella no parecía saber en qué gastar aquello. Aunque, tampoco es como si supiese toda la verdad.
— Verás que te equivocas — Y sin decir nada más, cruzo el umbral de la puerta, desapareciendo varios minutos antes de que Juleka y Rose volvieran al camarote.
Marinette pensó en las palabras de él, para después negar con su cabeza y volverse a concentrar en su trabajo.
Sin saber que, Luka decía la verdad. Y él se encargaría de enseñarle como hacer las cosas parte del tiempo, y no del tiempo parte de las cosas.
Le enseñaría como escapar, como viajar, como sentir, como liberar y como detener al dichoso tiempo que aparentemente ahora la consumía.
[...]
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¡Bienvenidos sean todos a esta pequeña historia Lukanette que ha venido a mi!
Es una historia corta, inspirada en una bella frase que me encontre navegando por internet y con la cual no me pude detener. Los capitulos seran cortos, pero espero que llenen su amor por esta bonita ship. No serán más de 5 capitulos despues de esta pequeña introduccion.
Es la primera vez que escribo algo enteramente de esta ship ¡Así que deseenme suerte!
Espero le puedan dar la oportunidad a este bonito fluff.
¡Un beso!