Inu: Nadie mas estaba en la habitación donde sucedió. La habitación donde sucedió. La habitación donde sucedió. (x2)

Neko: Nadie sabe realmente como se juega este juego. El arte de intercambio. Como se hace la salchicha. Solo asumimos que sucede.

Ambos: Pero nadie mas estaba en la habitación donde sucedió.

Inu: No soy un gran hombre de palabra, pero aqui esta el otro capitulo.

Neko: Tardaste mas de lo que debías.

Inu: ¿No escuchaste la cancion? Nadie mas estaba en la habitacion en donde sucedió.

Neko: Hamilton no tiene nada que ver con el capitulo.

Inu: Si quiero, puedo hacer que tenga que ver.

Neko: ¿Quieres que tenga algo en que ver?

Inu: ¡Sorprendeme!

Neko: ¡CLICK-BOOM!

(Mientras Inu se encuentra hospitalizado por una herida de bala en la pierna y Neko pide mil y un disculpas por disparar un rifle del año mil ochocientos, esperamos que disfruten mucho este capitulo que hicieron con hilarancia y consecuencias de ideas por una Coca-Cola y unos Tostachos que costaron los ahorros de Inu. Que aunque estaban caros, sabian a gloria. Y no. inu no conoce a ninguna gloria.)


Fueron a las carteleras y vieron las funciones. Tras debatir por una de acción elegido por ella y él por una de drama, al final decidieron probar por una de comedia romántica ya que por ambas partes, no decidían por cual ir tratando de complacer al otro; y a eso me refiero que él daba la elección e beneficio de la gata y la gata a elección de él cuando realmente ambos querían lo contrario. Si… muy indecisos.

El punto es que ya escogido la comedia romántica, empezaron a hacer fila en el lugar donde venden los paquetes para palomitas y toda la chuchería que se venden en esos lugares que, a opinión del erizo y apoyo de la gata, eran tan caras que si a uno lo agarran con la guardia baja y sin dinero, uno era capas de salir despavorido y no volver hasta ser millonario. Solo para no entrar en pánico por los precios.

-¿Veinte rings por una barra de chocolate? Ni que volara. Y eso que yo lo hago.

-El paquete pareja cuesta una barbaridad por muy variada que sea. – habló Blaze viendo el precio de la misma. – Ahora entiendo cómo es que tiene muchos lujos este establecimiento. Y porque la mayoría de nuestra edad se decide en trabajar aquí.

-Cierto. ¿Pero no te has dado cuenta que la mayoría que trabajan aquí son chicos un poco… irritantes? Como que la mayoría tienen una vida de presión y tensión.

-No me eh dado cuenta, si te soy sincera. La mayoría me atienden bien. Pero no e podido evitar mirar que a veces están de malas o simplemente los noto vacios. Con una mirada vacua.

-¿Cómo diciendo "desearía estar en otro cualquier lado menos aquí"?

-Exactamente.

-¿Van a encargar algo? – habló irritado el tipo del mostrador. No es que le molestase que hablen de ello. Pero que al menos tengan la decencia de tomar en cuenta su presencia. Joder, que solo era un esclavo del sistema capitalista.

No muy lejos de ahí, el dúo dinamita había ubicado la función que escogieron gracias a la habilidad visual de Shadow para no solo detectar cualquier cosas a una distancia considerable, si no ver una esmeralda a más de quinientos metros mientras en medio de esta había un campo de guerra con una neblina de humo tan densa como el silencio de una confesión no correspondida.

Ya ambos en la taquilla pidieron sus boletos. Sonic cuidando que no se le cayera el bigote y acomodando su sombrero mientras Shadow venía detrás de él solo viendo su celular con desinterés.

-Denos dos boletos para la película "Como si fuera la primera seducción.", por favor. – pidió el azul.

-Muy bien. – empezó a teclear el computador y después miro al dúo por unos segundos. Sonic se quedo quieto y extrañado por la repentina mirada del empleado. Y Shadow al detectar la mirada del mismo no hizo más que devolvérsela; extrañado. Después de un largo y silencioso intercambio de miradas (e incomodo para los erizos), el joven habló por fin. Con una pregunta que a Sonic lo pondría histérico y a Shadow con un levantamiento de cejas típico de él. - ¿Quisiera el paquete "pareja"?

-¿Qué? – exclamó Sonic. Incluso Shadow alzó mas las cejas sorprendido.

-Oh, disculpen. ¿No son pareja?

-¡¿Qué?! ¡No!

Mientras los dos erizos trataban de aclarar y negar su tema matrimonial, dos chicas se encontraban en el area de snacks. Ambas chicas tomaban café tranquilas observando a la gata y al erizo de manera lejana pero concisa.

-Veo que lo están tomando muy bien.

-Sí. Pensé que Blaze estaría más nerviosa. Pero la veo muy cómoda con Silver. – Amy nota como Blaze tiene una sonrisa radiante mientras ambos ríen por un comentario del erizo. Esa escena roba un suspiro de parte de la eriza.

-¿Ensoñación, Rose?

-Sí. – Amy recarga su codo en la mesa mientras su barbilla reposa en su mano. – Como desearía que Sonic se fijara en mi. Mas que una amiga.

-Supuse que ya tendrían algo ustedes dos.

-Eso pensaba yo también. Pero comprendo que a veces soy muy hostigadora con él cuando se trata del amor.

-Podrás ser mayor de edad, Rose, pero cuando se trata de romances, aun persiste esa niña gritona e histérica que hace a Sonic huir como niño de primaria a la semana de vacunación.

*PLAF* Amy no pudo más que azotar su cabeza en la mesa ante esa verdad.

Cada vez que se trataba de Sonic, algo dentro de ella explotaba y la hacía correr hacia él como una posesa. ¿Para qué? Lo único que se le viene a la mente en ese momento son abrazos, besos y palabras cariñosas hacia el erizo azul. Era como una reacción incontrolable. Podría estar hablando tranquila y maduramente con Rouge, filosofar de cosas y demás. Pero si apareciera Sonic en este mismo momento. En este lugar, correría hacia él y lo primero que haría el erizo seria huir rápidamente. ¿Y cómo no hacerlo cuando tienes una acosadora impulsiva? Necesitaba controlarse mejor.

-Mejoraré en ese aspecto. Te lo aseguro. – Levanto la vista hacia la chica murciélago. Y aunque su rostro denotaba turbación, su mirada era decidida.

-Eso veremos querida. Eso veremos.

Y es que no lo diría, pero ya distinguió a dos personajes peculiares que discutían fuertemente con el tipo que daba los boletos: el del bigote con sombrero texano saltaba histérico moviendo los brazos completamente indignado mientas el tipo de la gabardina solo mantenía sus brazos cruzados y un seño fruncido; el pobre empleado solo alzaba las manos disculpándose una y otra vez. Rouge solo sonrió con su taza cubriéndole los labios.

-"Ay, Shadow." – si lograba salir airoso de esa situación, le pondrá el apodo de "Village People" solo para molestarlo.

Volviendo con ellos…

-Bueno, entonces… ¿dos boletos individuales? – habló ya menos nervioso por su equivocación. Es que cuando los habia visto juntos, habia encontrado una química tan buena en ambos que pensó que podría ser pareja. Fue inevitable haber dicho eso en voz alta y con tanta ligereza. Procuraría cuidar su habla mas seguido.

-Sí. Nada de paquete parejas. No somos pareja. Somos Amigos. Camaradas. Compañeros. Solo eso. – reitero por enésima vez Sonic.

-Bien. ¿Numero de asiento?

-Los últimos de arriba. Necesitamos ver la función de manera panorámica para no perder detalle. – pidió Shadow.

-Muy bien, aquí tienen. Que tengan una agradable función.

-Como amigos. Gracias. – repitió Sonic. Shadow solo dio un suspiro frustrado.

Ya fuera del alcance del empleado…

¡CLANK!

Un coscorrón bien dado por parte de Shadow en la cabeza de Sonic fue lo suficiente como para el se tranquilizara y no estrangulara a su amigo.

-¡Me lleva la… Shadow!

-Por no saber cómo manejar las cosas. – lo aclaró simplemente y buscó con la mirada a la pareja; viendo que ya entraron al pasillo para entrar a las salas. – Vamos, rápido. Que ya entrarán.

-Espera.

-¿Ahora que?

-Es que… me dio hambre.

-No me jodas.

-Vamos, ya sabemos dónde estarán. Nos tocó en la única sala disponible para esa película. No lo perderemos de vista. Solo algo rápido… ¿si?

-Eres un… - suspiró frustrado. A veces Sonic lo sacaba de quicio. Pero no lo mataría. No aún. Ya sería el momento. - Bien. No tenemos nada que perder. – "Por ahora." Pensó después.

En ese mismo momento, Amy y Rouge vieron como la pareja "lavanda y plata" se dirigía al pasillo de las salas de función.

-Amy, se retiran hacia la sala. – se levantó Rouge.

-Vamos por los boletos. – se detuvo por un momento. – Y… ¿cómo sabremos qué película escogieron?

-"Como si fuera la primera seducción", sala siete; asiento veintisiete y veintiocho.

-Wow. – se sorprendió. - ¿Cómo lo supiste? – Rouge señalo sus orejas.

-Cuando me concentro, puedo detectar y/o escuchar conversaciones lejanas. Me sirve mucho para mis trabajos de espionaje.

-Vaya. ¡Genial, vamos!

Llegaron a la taquilla y los recibió el mismo tipo de la escena pasada.

-Muy buenas, chicas. ¿En qué les puedo ayudar?

-Denos dos boletos para "Como si fuera la primera Seducción", por favor.

-Muy bien. – Tecleó la computadora y después de unos segundos las miro a ambas. Se mordió el labio inferior y un tipo de sudor frio surcó su espina dorsal. "Por favor, fuera. Vete, impulso de idiotez". Las dos chicas lo miraban extrañado mientras el viraba la mirada en ambas. Una después de la otra.

-Disculpa, ¿estás bien? – se preocupo Amy.

Apretó ambos labios y un tipo de gemido ahogado surcó su garganta.- ¿Quisieran el paquete pareja? – soltó. Y estampando sus manos en la boca bloqueó cualquier otro monosílabo que tuviera en la mente. "Diablos, no otra vez." Se lamentó.

-¿Disculpe? – preguntó Amy sorprendida.

-¿No son pareja? – se lamento mientras por dentro su mente entraba en pánico. "Oh, no. No de nuevo". Cerró los ojos esperando lo peor. Al menos con que le den una bofetada y sin más reclamos le bastaba.

-¡Claro que…!

-¡Sí! – exclamó Rouge .La reacción de Amy era digna de un anime de comedia. – Es que venimos a nuestra primera cita y queríamos algo tranquilo y cómico que ver.

-¡Oh, claro!. – tecleó un poco mas y salieron los boletos. – Aquí tienen. Por Dios, ya me había asustado. Tuve un pequeño percance hace unos minutos con un par de chicos. Y se me hacían tan complementados que no pude evitar preguntar eso mismo que les dije a ustedes.

-¿En verdad? – le siguió el juego Rouge. Conteniendo las carcajadas de una manera magistral.

-Sí. Ya eso me ah llevado muchos problemas. A veces digo las cosas sin pensar. Pero gracias a Dios no me e metido en graves problemas. – le entregó los boletos a Rouge con una sonrisa aliviada. - ¡Que tengan una linda función! Y eh de decir que ambas hacen una bonita pareja

-Gracias. Eso lo sé, chico. – le guiñó un ojo en complicidad y se giro a Amy. - Vayámonos, cariño. – tomó su hombro y se retiraron.

En cuanto ambas se retiraron, una compañera del empleado salió de adentro y no pudo evitar reír suelta.

-¿Y a ti que tanta gracia te da?

-Cielos, Spunky. Si no fuera que eres demasiado simpático, ya te habrían partido la cara digna para un video snuff. – se tapo la frente con su mano y meneaba a cabeza en negación y resignación. – Un día te meterás en un lío de tres pares de narices y cojo…

-¡Abril! Estamos en horas laborales y en público. Guarda tus vulgaridades para otro momento.

-Si si. – volvió a dentro y añadió. – Pareces más vieja que yo.

El solo le sacó la lengua y atendió al siguiente cliente.

Amy tardó un poco en salir de su trance y agito su cabeza completamente indignada y volviendo en sí.

-¡Rouge, ¿Qué rayos haces?! – la chica agitaba a la tetona completamente fúrica.

-¡Para para, Amy, que mis lolas se desacomodaran del bra! – le dijo en un ataque de risa.

-¡Eso y más debería de pasarte, plástica atrevida! ¿Cómo se te ocurre?

-Se me ocurre un buen antojo de comida chatarra.

-No tenemos tanto dinero para eso. Y eso no me explica tu acción, Rouge.

-El paquete pareja cuesta un poco más que los dos boletos juntos. Pero a cambio vale para un paquete de palomitas y un refresco. – señalo los boletos especiales con un pequeño sello de corazón. – Y si vamos a espiar a nuestros tortolos, quiero hacerlo con comodidad. ¿A que soy lista?

-Yo diría atrevida. – hizo un puchero, pero no podía negar que le agradaba la idea de comer algo en el transcurso de la película. A parte es una película que no había visto. Aunque lo hubiera preferido verla al lado de Sonic no estaba mal la idea. – Pero sea como sea, fue algo listo. Lo admito.

-Te digo que tienes suerte de tenerme como aliada. Ahora vamos… cariño. – le guiñó un ojo tomando su brazo para aparentar. Y Amy no pudo más que seguir la corriente. Si debía de hacer algo, lo haría con comodidad.

La sala en si estaba decentemente lleno. Al ser la única sala donde pasarían esa película, y al no ser una película tan popular, no estaba mal en lo mas mínimo.

Silver y Blaze estaban en la parte central de la sala. Ambos comían las palomitas y miraban la película tranquilamente.

Detrás de ellos, un erizo con bigote mexicano y un erizo "Matrix" los observaban en silencio.

Y más atrás, dos chicas comían sus palomitas y observaban tanto a la pareja como a la película.

-¿Crees que vayan a hacer algo? – susurró Amy

-¿Cómo qué? – preguntó la murciélago dándole una probada a las palomitas sin despegar la mirada de la película.

-No sé. Se estén tomando de la mano o ella recargue su cabeza en el hombro de él… algo. – dijo Amy.

-Pues… mira.

Silver estiró sus brazos y al extenderlos por encima de él, recargo uno de ellos en la espalda de Blaze: abrazándola. Ella por su parte, dejo caer su cabeza en el hombro de él y siguieron viendo la película.

Ante eso, Amy se tapo la boca conteniendo un grito intenso, mientras por el lado de Rouge, no sabía si felicitarlo o reír ante ello.

-"¿En serio, Silver? Tan anticuado estás que no se te ocurrió otra cosa mas que el clásico movimiento cliché "estiro para disimular" en este momento? No puedo más que felicitarte que te haya funcionado sin que ella se incomodara."- pensó la murciélago.

Por otro lado, Amy tenía otros pensamientos…

-"¡Awwww, que tierno! El clásico estiro los brazos para poder abrazar a tu pareja. Silver no está tan mal encaminado. Y el hecho de que Blaze se sintiera más relajada con esa acción solo demuestra que si están muy bien juntos. ¡Ay, el amor! ¡Quiero gritar de la emoción!"

Por otro lado, los dos erizos no pudieron más que solo asentir de acuerdo con la acción.

-"Bueno, por el momento no lo a echado a perder. Eso es un buen indicio. Blaze parece cómoda y Silver se siente en su zona de confort. Parece que mis inseguridades fueron injustificadas. Creo que deberíamos dejarlos solos a fin de cuentas." – pensó Sonic.

Shadow en cambio…

-"Que película más aburrida…" – y siguió comiendo sus palomitas.

Silver se encontraba más rojo que un tomate en temporada de cosechas. Desde que se le ocurrió la idea de hacer el clásico "estira y extiende" temblaba por dentro a más no poder. No es que temiera que Blaze pudiera calcinarlo vivo (aunque pudiera) si no lo que menos quería era incomodar a su cita. Así que cuando por fin decidió, temblaba como chihuahueño con hipotermia. Pero estaba decidido. Tenía que hacerlo.

Estiró los brazos hacia el frente haciendo una exclamación de esfuerzo. Sus extremidades tronaron levemente ante su acción y poco a poco empezó a subirlos arriba de su cabeza. Ya estando ahí, seguía el siguiente paso. El paso final. Donde se decidiría si ella realmente le acomodaba su presencia y persona o todo terminaría en una llamarada infernal felina.

Su brazo izquierdo reposo en el asiento vacío y el derecho se posó justa a los hombros de la felina. Sintió como Blaze tensaba los brazos y los cabellos de ella se erizaban levemente.

-"Listo. Estoy muerto. Adiós mundo. Gracias por la oportunidad de estar al lado de quien adoro y me va a calcinar. Mi último deseo es que mis cenizas las envíen a un gran risco y el viento me lleve. Solo pido eso. Amén." – y cerró los ojos.

Mas… nada paso. Todo seguía en su sitio. No había sensación de calor y su cuerpo aun estaba sin magulladuras ni quemaduras.

De repente sintió algo en su hombro. La esencia de un perfume fuerte y embriagador inundo levemente sus fosas nasales y miro a su izquierda.

Blaze estaba roja. Muy roja. Pero mantenía una pequeña sonrisa sin despegar la vista de la gran pantalla. Silver no pudo más que estar llorando por dentro de la alegría por hacer este momento inolvidable para ambos.

-"No llores, Silver. No llores… no … ay" - bien, lloraría por dentro.

Blaze por otro lado era una situación similar. Le agradaba la película y no despegaba su vista de la pantalla. Pero veía a Silver muy inquieto. Parecía que sudaba frio y su mirada era un poema mal hecho de Coelho.

-"Me pregunto por qué esta tan nervioso…" – pensó la fémina.

Pero su respuesta llego más temprano que nunca. Vio por el rabillo del ojo como Silver estiraba sus brazos hacia el frente y los levantaba lentamente hasta dejarlos encima de su cabeza. Solo para que al momento dejara uno de ellos sobre su espalda: abrazándola en el acto.

Ella en ese instante sintió un escalofrío y se quedó tensa. No se esperaba ese movimiento de Silver. Y no es que le desagradase, pero la tomo por la guardia baja y, si es honesta consigo misma, no sabe cómo reaccionar ante este tipo de acciones.

¿Qué le dirían Amy o Rouge? "Solo déjate llevar" Escuchó a ambas en su cabeza.

Y si lo pensaba bien, era lo más lógico. Es decir: es una cita, ¿no? ¿Por qué debería estar nerviosa por el erizo que se acaba de declarar? Su mejor amigo. Su compañero de batallas. Su confidente y actual… actual… actual…

Sus mejillas se tornaron rojas de manera intensa y su corazón dio una aceleración muy a lo fórmula uno. Esa revelación no solo la volvió un manojo de emociones bípedas. Si no que también le dejo las cosas claras.

Era Silver. Ya no tenía que andar actuando como una niñata frente a él. Ambos ya se conocían y no debería de actuar como quinceañera. No había nada que ocular ni tenían nada que esconder. Ambos ya se tenían desde hace mucho. Lo más normal en este momento era… disfrutarlo.

Así que solo cerró los ojos levemente sin dejar de ver la pantalla y sonrió. Recargo su cabeza en el hombro de su erizo y decidió ya no dar más vueltas al asunto. De ahorita y en adelante aprovecharía cada momento con él. Sea hoy… sea después… sea cuando sea.

Y Silver…

-"¡Está ronroneando!" – gritó internamente emocionado.

-Bien. – susurro Sonic a Shadow levantándose de su asiento. – Creo que mejor será retirarnos.

-¿Al fin te diste cuenta? – sorbió un poco de su vaso con refresco.

-Bueno, es mi amigo. Solo lo cuido. – levantó los hombros con despreocupación. El erizo negro solo dejo todo a un lado.

-Entonces vámonos.

Ambos se levantaron y se disponían a salir.

Al mismo tiempo…

-Creo que por ahora están muy bien. – habló Rouge sobre Silver y Blaze.

-Tienes razón. Ambos se ven bien y a gusto. – corroboró Amy al ver a la pareja aun en la misma posición haciendo sonreír a Amy. – Si nos ven, puede que Blaze se enoje. Mejor será retirarnos.

-Conociendo a tu amiga, esto la pondría muy de malas.

-Ni te imaginas.

Al mismo tiempo que ellas se levantaban, dos sujetos a dos filas de ellas también lo hacían. Ambos tenían los ropajes raros, pero Amy es lo que menos le importaba. Y Rouge no es que no le importase, pero no les quitaba los ojos de encima a ambos.

El tipo de sombrero mexicano batallaba para caminar por su vestimenta, pero aun así no paraba de andar quejarse a la vez. En uno de sus ajetreos por salir de ahí, cayó de bruces al piso sacando su sombrero a volar y perdiéndose en la negrura de los asientos. El amigo que estaba atrás de él no hizo más que hacer un "Tsk" como queja.

Para ese entonces Amy ya estaba en la misma línea de asientos que los dos erizos. No les había prestado atención hasta que el sujeto se había caído mandando su sombrero a volar directo hacia ella cachándolo en el momento justo.

El sujeto se levanto de prisa y trato de hacer que nada había pasado. No sintió su sombrero y lo busco en todo el lugar hasta que lo vio en manos de…

-Oh, diablos… - susurro aterrado.

-Emmm… creo que esto es suyo, señor. – le entregó el sombrero solo para después verlo detenidamente. - … ¿lo he visto en algún lado?

-Emmmm… no señorita. No sé de qué me habla. – habló con un acento norteño. Shadow no pudo evitar darse un facepalm mental. – Solo soy un simple sujeto que vino a ver una película al cine. – y se le cayó el bigote.

Shadow tuvo que darse un facepalm real.

Esto se iba a poner feo.


Inu: Bueno, no estuvo tan grave esa herida. Fue rápido que me dieran de alta.

Neko: Perdón. No sabia que estaba cargada.

Inu: Si lo sabias.

Neko: No tienes pruebas.

Inu: Estaba cargada con Picafresas añejas. ¡Y un arma del año mil ochocientos no se carga con Picafresas añejas!

Neko: ¿Y si eran adictas a las Picafresas?

Inu: ¡Ni si quiera se habían inventado en aquella época!

Neko: Me ofende tu insistencia.

Inu: Y aún así, no se como conseguiste un arma de esa época.

Neko: ¡Duh!, lo saque de la pequeña caja misteriosa. - enseña la pequeña caja misteriosa.

Inu: ... Es una pequeña caja...

Neko: Y es misteriosa.

Inu: ... no la abras...

Neko: Si la abro...

Inu: Neko, en serio. no sabemos que saldrá de la pequeña caja misteriosa. Lo de hoy fue solo suerte. Quien sabe que cosas puedan sal...

Neko: ¡VENGAN A MI, DIOSES PRIMIGENIOS! ¡JAJAJAJAJJAJAJAJAJ!

Inu: ¡Neko, no!

(Mientras Inu trata de liberarse de unos tentaculos grandes y gigantes, sacadas del mismísimo y profundo abismo oscuro de la infinita orilla del universo, y Neko saluda amigablemente a Cthulhu, esperamos que se hayan divertido un rato con el capitulo de hoy. No sabemos cuando actualizaremos, ya que hay pendientes. Y en la vida, los pendientes te quitan tiempo y parte de tu entretenimiento. Pero son importantes para tener una vida digna y feliz. Les han hablado Inu y Neko, y les deseamos un buen dia. Una buena tarde. O en los mejores casos, unas muy buenas noches.)