La antena de señal

entre mi soledad miraba la televisión y también oía la radio de los maestros por donde aún se transmitía programación haciéndome pensar bastante sobre cómo era posible que en un mundo sin humanos existieran aun las comunicaciones, en mi mente imagine que había alguna cosa que ellos dejaron aunque era bastante imposible que eso fuera predicho. Desde el principio algunos de esos canales simplemente se apagaron y otros aun transmitían películas y viejos programas donde aún salían ellos bromeando o hablando sobre alguna cosa lo cual me ayudo mejor a comprender el lenguaje

Solo y en silencio me levante saliendo hacia la playa donde observe el mar soltando un enorme suspiro, sonreí un momento y volví dentro, sin demora arme una maleta para viajar y también algunos mapas de la región, antes de salir arregle la casa para que no hubiera problemas mientras estaba fuera

Emprendí mi viaje siguiendo la carretera hacia el desierto, ahí había una de esas estaciones o eso sabia porque en transmisiones la mencionaban, camine en silencio recordando cuando viajaba con el maestro encima de su camioneta, tranquilo observaba que las plantas y árboles crecían más en lugares donde no debían estar

Llegue a las afueras de la ciudad próxima, no había nada interesante ahí así que no perdí tiempo, el anochecer aún estaba a unas horas y avanzaría bastante con la luz que aún quedaba, hacia una tarde muy cálida y me sentía aun con muchas energías, aquel desierto quedaría a una semana pero tenía planeado ir por unas colinas próximas que no quedaban lejos de mi objetivo y me tomaría solo un día cruzarlas

Cuando tuve hambre me detuve en un claro y me senté a sacar mis alimentos de mi maleta, con modales fui mordiendo mis frutas mientras los acompañaba con esos panes que tauros había traído, no tenía mucha esperanza de que encontrara respuestas pero al menos podría saber algo más, aun me sentía con energía y confiaba que nada sucedería mientras me ausentaba de casa, unas semanas atrás había recibido las cartas de audino, ninetales, blastoise y greninja todos contándome sobre nuevos acontecimientos, cada uno tenía sus propias aventuras en aquellos pueblos, la guerra avanzaba por muchos lugares y agradecía que nada le pasara a ellos, descansado volví a andar ahora con más prisa de llegar al rio que se oía ir con bastante fuerza

Baje un largo sendero hasta la orilla del rio, me quite la maleta cerrándola por completo y fui sumergiéndome poco a poco en el agua dejándome llevar por la corriente, aquel rio había crecido bastante desde hacía unos años atrás por causa de las lluvias y era raro porque en ese tiempo era una cuarta parte, con facilidad pare por encima de las rocas del fondo concentrándome de no chocar

Nade por un día y medio, conocí a un par de magicarp que iban al mar para irse a un lugar más cálido cruzando el océano, era un buen plan por que el invierno se encontraba cerca de caer y nadie quería quedarse en el mismo lugar durante meses, yo solo me quedaba en casa y pocas veces iba al fondo del mar por algunas algas para comer durante las semanas

Llegue a mi parada y subí de nuevo a la superficie, descanse una hora relajándome, quedaba bastante camino donde el agua seria mínima pero me sentía con mucha más confianza por la gran fuerza que tenía y duraría caminando por aquel infértil lugar. Dormí una ligera siesta y en cuanto desperté retorne a mi viaje

Lo último que logre escuchar de la guerra era que bastantes islas más allá del norte habían desaparecido pero se decía que no hubo gran cantidad de muertos por lo que no fue una perdida muy grande en esas batallas, la ciudad próxima a casa también tuvo cambios en su población que en su mayoría eran soldados aunque la destrucción no eran demasiados, con el mapa en mano decidí tomar una autopista principal que me dejaba muy cerca y sin demasiado temor al nuevo mundo me adentre mucho mas

Las horas ahí eran totalmente silenciosas y al igual que mi hogar las plantas ya avanzaban por el asfalto, a la distancia habían casas completamente abandonadas en el olvido con muros rotos y ventanas ya destruidas, no podía imaginar que algún pokemon se haya quedado ahí a vivir y era comprensible, no les preste demasiada atención y me concentre en no encontrarme problemas. Sin embargo, entre el sonido de mis pasos escuche una voz bastante alegre en el aire por lo que me detuve un momento observando pero no parecía que hubiera algo ahí así que con poca preocupación proseguí al menos hasta que volví a oír aquella voz que tarareaba una canción, con intereses voltee a buscar hasta que halle el origen, en medio del paisaje había una gran roca, fui hacia ella rodeándola pero no encontré nada cosa que me saco más dudas, no obstante, canto de nuevo muy alegre, con la punta de mi garra toque la roca que enseguida se movió meciéndose, nunca había visto una que hiciera lo mismo por lo que con más fuerzas lo sujete y empuje. los primeros intentos fueron duros sin respuestas hasta que en un brote de furia arranque la roca de la tierra y la tire haciendo retumbar el suelo, observe el hueco sin encontrar nada más que tierra suelta, con más dudas me senté a cuestionarme si solo era causado por mi imaginación ante tal soledad

– oye! Que ha pasado? – bramo otra vez aquella voz, levante la mirada y un golem se tocaba la cabeza

– estaba tomando una siesta y ahora estoy aquí tirado – añadió, el tipo parecía la pokemon despreocupado que apenas prestaba atención

– y tú quién eres? – pregunte

– oh. Soy golem que viene del mar del norte – contesto con un tono bastante alegre

– ya veo, y a dónde vas? – pregunte

– A un lugar un poco más para mí, el mar es bueno pero demasiada agua – replico

– Entiendo, nos vemos – regrese al camino

Golem me había parecido inmaduro aunque era al primer pokemon que veía actuar así después de tanto tiempo, era muy relajante saber que aun podía existir la despreocupación con una época así, me acomode bastantes veces la maleta de mi caparazón por que no lograba estar lo suficiente cómodo, pero en medio de mi andar escuche su voz otra vez – oye espera! – exclamo con fuerza, di la vuelta e iba corriendo hacia mi

– a dónde vas?! – Pregunto, lo espere quieto hasta que estuvo cerca – al desierto – conteste

– genial, también voy en esa dirección – añadió

– Vi que también ibas por la autopista y pensé que tal vez tenías un asunto cerca – no llevaba nada cargando y sin prestarle demasiado tiempo camine

Fue a mi lado tarareando canciones

– y entonces que es lo que harás? Vas a vivir ahí? – pregunto

– Solo voy a buscar algo – respondí

– Yo iré a unas montañas cerca de ahí, me han dicho que el clima seco es muy bueno – dijo

– y que llevas ahí? – pregunto

– Mis cosas – replique

– oh, muchos de los pokemon que he conocido no llevan nada consigo – dijo

– si, tal vez porque ya están acostumbrados – comente

– vienes del norte no? Que hay por esos lugares? – pregunte con curiosidad

– la verdad los pokemon en algunos lugares son muy molestos, desde aquello solo pelean contra otros sin motivo y causan mucho dolor – dijo

– suena mal, y has sabido de algún ejercito? – pregunte

– No, nunca he oído de alguno – suspire

– que bien, y vivías en alguna ciudad o pueblo? – negó con la cabeza

– Cerca de donde vivía estaba una casa pero pocas veces me acerque – no sabía que decir ante la ignorancia de golem pero no podía juzgarlo

– llevas mucho viajando? – golem miraba hacia los arboles donde se podía ver gran cantidad de nidos

– unos meses y tú? – dijo

– Menos de una semana – me miro fijo

– Eres más pesado que yo y viajas rápido – comento

– y como es que lo haces? – dijo

– Tomo atajos – subió la mirada

– oh, suena demasiado complicado, yo solo camino en una dirección y me cuesta un poco más con los ríos – bramo con un tono de asombro

– Yo nado en ellos y viajo según la corriente – agregue

– Eso suena genial, me gustaría estar en el agua pero solo me debilito –

Con mi calma mire a la distancia donde se podía ver que aún quedaba mucho asfalto

– y alguna vez viste a las personas? – pregunte

– humanos? Creo que en la casa cerca de la playa vivía uno pero se veía muy antiguo – dijo

– y cómo era? – pregunte

– era viejo y solía sentarse por un largo tiempo mirando el mar, era lo único que hacia cuando me acercaba – contesto

– comprendo, y alguna vez llegaste a visitar pueblos? –

Medito por un momento

– Creo que una vez estuve cerca de una aldea, había mucho ruido así que baje a investigar por qué sonaba tanta música y no fui el único curioso – deduje que habría alguna fiesta pero de que sería era desconocido

– y tú? Los llegaste a conocer? – sonreí inconscientemente

– Sí, estuve con ellos años – golem quedo quieto antes de volver a mi costado

– enserio? Es cierto lo que cuenta algunos pokemon? – dijo

– que cuentan? – dije

– Bueno algunos me han dicho que eran muy violentos y otros que asesinaban a cualquiera fuera pokemon o humano – reí un momento

– No sé qué tipo de personas han visto pero con las que estuve era todo lo contrario – dije

– oh, cuéntame de ellos –

Golem se veía muy ansioso y no pude evitar emocionarme por hablar sobre ellos y así conté bastantes historias

Nos cayó la noche aun en la autopista y nos detuvimos a descansar, encendí una fogata para iluminar y saque un poco de mis raciones calentándolas, aquel lugar era frio y la luna apenas brillaba

– tienes algo más de comida? – dijo, lo mire un momento y empuje parte de mi ración

– Toma un poco – ceno y más tarde cayo del cansancio quedándome solo admirando el cielo estrellado

Por la mañana tome el desayuno y antes de que saliera el sol ya caminábamos, con una temperatura baja sentía el aire helado y aún quedaba bastante hasta la zona del desierto aunque se podía oler ligeramente sal en el aire casi como el mar

– entonces tus otros compañeros están lejos? Y no has ido a visitarlos? – pregunto

– Pocas veces he ido este año, están demasiado retirados – dije

– Bueno, es genial que tengas una familia yo siquiera sé dónde están mis padres – añadió

– Ya los encontraras – miro hacia los arboles

– sabes quisiera poder atravesar el mar e ir a otros lugares – se veía muy nostálgico

– una vez quise hacerlo pero la barca se fue hundiendo y volví pronto a la tierra antes de que cayera al fondo del mar –

Siendo alguien de tipo piedra caería muerto en el fondo

– y lo has intentado en botes grandes? – pregunte

– No, nunca llegue a encontrar uno así –

Avanzamos mucho y volvimos a descansar una hora, era muy callado

– y los otros pokemon con los que vivías, dónde están? – recostado en el pasto suspiro

– Unos se fueron y otros decidieron quedarse ahí – me sonó familiar

Pasando el medio día pause mi andar y mire el mapa, la desviación que llevaba al desierto ya estaba a medio kilómetro, enseguida pensé que podía caminar unas horas más y ya estaría ahí además el sol aun tardaría en ponerse

– y siempre llevas esos? – pregunto

– Solo cuando voy lejos – miro el mapa mientras lo doblaba para guardarlo

– se ve muy complejo, como es que lo entiendes? Sabes interpretar lo que está ahí? – asentí

– increíble, nunca había escuchado de un pokemon que pudiera hacerlo – dijo

– Sí, es algo sencillo realmente – agregue

– oh, tal vez un día también pueda hacerlo –

Incline la cabeza al verlo un poco imposible aunque no era malo tener sueños

– y que harás cuando termines tu búsqueda? – pregunto

– volver a casa y estaré ahí hasta que encuentro algo por hacer –

Pareció muy serio

– Suena muy aburrida tu vida cuando descansas – dijo

– Me gusta la tranquilidad – replique

– si pero es mejor salir –

No lo entendía del todo pero mire al frente

Unas horas después llegue a la desviación

– seguirás al desierto? – pregunte

– Sí, creo que de aquí puedo ver las montañas – contesto entre cerrando los ojos a la distancia

– Bueno, creo que estaremos un tiempo más juntos – dije

– Si – aun con luz anduvimos un tiempo más

La noche volvió a caer y el frio era más intenso, con los pocos leños que encontré logre encender una fogata que nos calentó en tanto comía de mis raciones

– oye y donde aprendiste a usar fuego? – dijo

Muchos recuerdos vinieron a mí

– De mi familia – conteste

– pero eres un tipo agua, como es posible? – dijo

– me enseñaron – añadí

– Bueno, suena aún muy imposible –

Sonreí reacomodándome la maleta

– y te espera alguien ahí? – pregunte

– Eh, no….estoy solo pero los amigos siempre llegan así que me queda animarme para crear nuevos –

Con esa nueva energía brillaron sus ojos. La noche volvió y nos detuvimos ya sintiendo el aire seco

golem platico algunas cosas que acontecieron hace años, sin embargo, al escucharlo me di cuenta que su ignorancia evito que se metiera en problemas con pokemon del ejército, ellos había llegado hasta su zona pidiendo comida en cantidad cosa que sus compañeros no negaron y juntaron bastante, aquellos soldados muy felices cargaron cajas de madera que golem llamaba cascaras gigantes y se fueron avisando que volverían, los amigos de golem no le tomaron mucha importancia continuando con sus relajantes vidas, en su normalidad paso el tiempo hasta que regresaron exigiendo más comida la cual juntaron solo que esa vez fueron groseros y agresivos por lo cual bastantes se molestaron y respondieron a su provocación, una pelea muy corta se generó de aquello aunque pronto se apaciguaron los ánimos, se retiraron solo con una advertencia en la que traerían con ellos a mas pokemon soldados para someterlos, no obstante, ellos ya no volvieron más y la paz regreso

Enseguida supuse que aquello había sucedido antes de que la ciudad fuera quemada o cuando la guerra comenzó oficialmente en todo el mundo, pero realmente no podía ubicar una fecha exacta.

La noche prosiguió con tranquilidad hasta la mañana, en el transcurso de mi guardia en la distancia visualice un pequeño punto rojo parpadear, no aseguraba nada pero sentía que podía ser la antena o algún pokemon en la distancia aun así significaba que ya no estaba lejos

Al día siguiente por la tarde llegamos a mi destino, la antena de la noche anterior estaba iluminando con su antena en tanto suspire alegre

– Aquí es mi lugar – dije

– Suerte con tu viaje – añadí saliendo del asfalto

– oye te puedo acompañar? Creo que esa cosa me da curiosidad –

– No sé si sea buena idea dejar que vengas, yo solo voy a revisar algo rápido –

Golem se acercó enérgico

– bueno entonces será rápido –

Llegamos al frente de aquel edificio gris, tenía la puerta cerrada y cierta aura de oscuridad envolviéndola y no se oía nada en el interior

– aquí es? – pregunto golem

– Si – sin tardar golpee la puerta llamando y a pesar de tres intentos nadie respondió

– No hay nadie – dijo golem, comencé a caminar

– a dónde vas? – voltee un segundo

– A buscar una entrada – dije

– te sigo – caminamos bastante hasta la parte trasera donde igual había una puerta, golpee igual un tiempo más hasta que simplemente me aburrí de esperar, quien estuviera dentro no estaba interesado en visitas, mire bien el edificio hasta que halle una entrada en una ventila al nivel del suelo que estaba oculta detrás de unas cajas de madera que moví con facilidad, era un gran hueco por el que entre sin problema seguido de golem, especule que era una entrada de correo cosa común en esas estaciones donde llegaban cartas de muchas personas

– y ahora a dónde? – pregunto

– Iremos arriba – dije, asintió

No había mucho ahí más que cajas y cosas electrónicas arrumbadas sumado penumbra, subimos las escaleras y llegamos a un pasillo oscuro

– tienes fuego? – pregunto

– no lo necesitamos, iremos rápido – dije, guiados por la poca luz que entraba por las ventanas subimos otros escalones, mire que habían oficinas cerradas pero nadie dentro, la mayoría de las computadoras estaban apagadas aunque las cortinas abiertas, en el último piso había un foco encendido y encima de la última puerta se leía "al aire" no me sentía del todo seguro que ahí hubiera un pokemon pero igual la respuesta estaría ahí

Pronto tocaba la perilla y con suavidad la gire empujando, el interior estaba oscuro solo con una pantalla encendida junto a una caja con focos de colores, me aproxime con lentitud notando que trasmitían una película, aquello estaba activo y no parecía que nadie intervenía

– qué es eso? – pregunto golem muy interesado

– una computadora o eso creo – conteste

– oh, y está viva? – pregunto

– No creo, solo las he visto pocas veces – dije

– oh, y que está haciendo? – pregunto

– Está trasmitiendo, manda señales – dije

– oh, no lo entiendo – bramo

– está bien, no es para tanto – camine por aquella sala y no había rastro de alguien vivo

Me senté un momento sobre el suelo pensando, aquello había estado prendido hacía tiempo aunque me preguntaba cómo era que tenía energía, muchas zonas ya estaban a oscuras por completo, y fue cuando me vino a la mente que tal vez tenían la misma máquina que usaba en casa, volví a ponerme de pie y fui a la puerta, ya sabía que sucedía y no había más por que quedarme

Después de que salió golem cerré la puerta y en el pasillo me encontré con un raichu que llevaba una charola con comida, los dos nos quedamos paralizados sin decir nada

– que…que haces aquí? – pregunto

– nada…..solo venía a ver quien vivía aquí – conteste

– no rompieron nada verdad? – sus mofletes chasqueaban

– no, solo quería ver quien estaba manteniendo activa la programación – conteste

– oh….disculpa si sueno amenazante, no he recibido a nadie en estos duros tiempos – dijo

– Yo me disculpo, no debí entrar sin permiso – dije

– está bien….quieres saber cómo es que sigue habiendo películas? – dijo, asentí, nos llevó de nuevo a la sala y dejando su charola en una de las mesas encendió las luces

– tu eres el que está manejando esto? – pregunte

– no, yo solo doy energía al edificio – contesto

– entonces como es que sigue activo el canal? – apunto a la computadora

– Ella es quien está encargada – dijo

– cómo? – pregunte, raichu se sentó a comer y nos contó su historia

Antes de que se fueran los humanos el acompañaba a uno del personal que se encargaba de la electricidad, era alguien bastante serio con su trabajo pero igual se daba su tiempo para oír música, raichu le ayudaba a recargar las células del generador y era sencillo, conoció a bastantes personas en la estación muchas de ellas amables y alegres, sin embargo, desaparecieron. Aquel lugar quedo en completo silencio, raichu al no saber qué hacer permaneció ahí unas semanas antes de pensar en irse

Tomo la mochila de su entrenador y algo de la comida solo que antes de llegar a la puerta hablaron por el altavoz

– Espera – dijo una voz humana, raichu reviso la sala de computadoras pero no había nadie más ahí

– Espera – volvió a decir, el levanto la voz

– quién eres? – pregunto

– Ven, necesito algo – raichu subió hasta la sala de control y entro pero no había nadie

– Acércate – con miedo avanzo un poco más

– quién eres? No reconozco tu voz – dijo

– Ven aquí, estoy cerca – dijo, raichu llego al monitor

– necesito que me ayudes – dijo el monitor

– en qué? – pregunto

– Que sigas dándome energía – replico

– Sé que necesitas alimento y te puedo ayudar a encontrarlo – añadió

– Necesito que sigas llenando las células del generador, y quiero que sigas mis instrucciones – dijo

Raichu tenía cierto temor pero creyó que aquello era una persona así que obedeció

Lo primero que ordeno el monitor fue apagar todas las computadoras y aparatos de los pisos inferiores ya que deseaba que el gasto fuera mínimo y no necesitaba desperdiciar, lo segundo fue activar los paneles solares y lo tercero fue ir llenando células una vez al día, todo eso fue agradecido. El monitor le dijo el lugar de la comida en el sótano donde tenían mucha aunque la mayoría era seca, el agua ahí llegaba por una llave así que no era muy necesario buscarla

Todo ese trabajo lo llevaba haciendo desde hacía mucho y en ocasiones se aburría preguntándose por que debería seguir ahí pero aquella voz era lo único humano aun con el

Él era algo parecido a mí pero sonaba demasiado solitario

– y que fin tenia salir a buscar esas cosas? – pregunte

– Déjame responder eso – dijo el monitor

– Aquello era para alimentar más mi programación, eso es lo único para lo que fui hecha – añadió

– Y al no haber humanos recurrí a raichu para hacerlo –

Se oía como una persona normal aunque era increíble que hablara

– entonces que pasara cuando no haya más energía? – pregunte

– Eventualmente me apagare, hasta ese momento seguiré transmitiendo –

Se oía muy sabia así que me aproxime

– sabes que paso con las personas? – aquel monitor se mantuvo en silencio

– eso va más allá de mi capacidad – dijo

– Bueno gracias –

Pregunte unas cosas más y al final sali con raichu hasta el pasillo

– te quedaras hasta que mueras? – pregunte

– No, ya encontrare a alguien que me supla – replico

– y tienes familia? – pregunte

– No, me iré en unos meses y tratare de tener una al menos antes de que me vuelva completamente viejo –

– entiendo, ten cuidado cuando salgas más allá de la autopista porque hay una guerra en progreso –

Asintió muy serio

– Además no es tan malo estar aquí, hay buen clima y comida suficiente para un tiempo más –

No terminaba de convencerme pero era su decisión

– Gracias por recibirnos, ahora nos iremos –

Abrió la puerta

– Con cuidado, espero que vayan bien y vuelvan cuando quieran – dijo

– Sí, ten cuidado y cuida de la estación –

Nos despedimos alejándonos de aquella antena de señal

Volvimos al asfalto en poco tiempo y me detuve

– Las montañas quedan más adelante, puedes verlas desde aquí – dije apuntando

– Sí, gracias por dejarme acompañarte –

– no hay problema, ten suerte en tu nuevo hogar –

Golem me miro y se veía muy nervioso

– vuelve sano a tu casa y salúdame a tus compañeros –

– sí, nos vemos –

Camine unos minutos antes de detenerme por escuchar pasos

– Ve a las montañas – dije

– solo quería preguntar si nos veremos de nuevo? Es que pensaba en lo que nos dijo raichu y realmente tengo miedo – dijo

Me rasque un momento la cabeza

– estarás bien, eres grande y bastante enérgico, no tardaras en encontrar a alguien –

– Además ya tomaste tu decisión y lo lograras –

Golem sonrió

– gracias, nos vemos amigo – asentí andando

El viaje era largo pero tenía bastante para pensar

aquel monitor me conto bastante, cuando los humanos se fueron se quedó encendida esperando alguna actualización pero no la hubo y no le quedo más que seguir adelante, ya que requería nuevos datos se integró a la red aun activa donde se alimentó durante semanas hasta que en el tiempo cada una de esas direcciones se apagaron por completo quedándose paralizada, ella estaba sola en sus asuntos hasta que se dio cuenta que aún quedaba un raichu viviendo ahí pero no le hablo por que no encontraba razón de tal acción

sin embargo, cuando él ya tenía planeado irse lo llamo para pedirle ayuda ya que la energía se iría escaseando poco a poco y necesitaba que alguien más la ayudara con eso, sabía que él se negaría por eso utilizo el alimento y el agua como pago, fue un buen trato por un poco de ayuda

en el tiempo libre el monitor investigo el paradero de los humanos encontrándose con muros, todos simplemente se fueron y como última acción mando señales para ver si alguien respondía y nunca fue recibida alguna en replica, más adelante cuando calculo que la comida iba a escasear mando a raichu a algunas casas próximas para buscar alimento y también programación que las personas solían guardar en chips, discos o aparatos, le dio imágenes de pista y también le enseño a leer mapas de los caminos cosa que le costó tiempo, aquellas pequeñas incursiones sucedieron durante años y aquel monitor sabía que en algún momento raichu se iría de alguna forma y aun desconocía si lograría estar activa para cuando volvieran las personas

no sabía decir si aquella maquina tenia corazón, sin embargo, sentí que los extrañaba tanto como yo a mi maestro, me propuse volver algún día para saber más sobre ella y como era que funcionaba

Estaba muy ansioso de saber que encontraría de regreso

Fin

Hola

Gracias por leer y espero que les haya gustado, pronto traeré más historias solo esperen y en ese tiempo porque no le dan una visita a mis otras historias que puede que te gusten