Out of the Dark: Honestly

Muy bien. Aquí esta el nuevo capitulo de "Out of the dark"

Como he dicho en varias ocasiones, la intensión de Love in the dark era un one shot, se convirtió en mini fic y luego la secuela, pueden tomar cualquier final. Ya sea el ultimo capitulo de Love in the dark, o los siguientes capítulos, quiero que con esta historia puedan quedarse con el final que les haga feliz y habrá un ultimo capitulo titulado "Back to you"

Gracias por su paciencia infinita y su cariño, dejen sus reviews.


Todo daba vueltas, no podía controlar su respiración, había esperado a que la dejaran sola para poder derrumbarse, Harry y Ron estaban al tanto de lo ocurrido con Malfoy, solo ellos sabían a detalle lo mucho que le afectaba. Si bien había otras personas a quienes les habian confiado su secreto, solo sus amigos conocían la profundidad y la intensidad de su sentir.

Miró sus manos, sintió nausea nuevamente, se quitó el anillo que adornaba su dedo anular izquierdo, con delicadeza lo limpió y lo guardó en el bolsillo de sus jeans, abrió el grifo de agua y comenzó a lavarse las manos, tallándolas hasta dejarlas rojas, lo siguió haciendo aun cuando ya estaban limpias, soltó un sollozo. ¿Cuántas veces más? Ya era la tercera vez que la sangre de Draco Malfoy la dejaba marcada, tal vez él había tenido razón, quizá esa relación había estado siempre condenada.

Se secó las manos, para después mirar su ropa, perdió el equilibrio, por más que había limpiado sus manos, el líquido carmesí seguía atormentándola, no tenía su varita consigo para cambiarse de ropa, Ron se la había quitado al llegar al hospital, temiendo lo que pudiera hacer. Cubrió su boca como si así pudiera detener el desayuno de esa mañana, Corrió al escusado, vaciando todo rastro de alimento.

Se sentó un momento, ahí sobre el suelo cerrando los ojos solo podía ver la imagen de Draco convulsionando en sus brazos al perder la consciencia, podía sentir la frialdad de su piel, el medimago casi se rehúsa a atenderlo, cuando vio que venía acompañado por ella y al ver que la enfermera en turno lo reconoció, tomó control de la situación de inmediato, aparentemente Malfoy era muy amigable con todo el staff del hospital cada vez que visitaba el área con el nombre de su familia.

Lo vio ponerse en acción, colocándolo en una camilla caminando a toda velocidad por los pasillos haciendo hechizos sin parar, el hombre que lo había atacado venia detrás de ella.

Lo estamos perdiendo ¿Qué clase de veneno es? – casi gritó

No lo sé, lo compré en el callejón Knockturn, solo pedí el más potente que tenían

¡Mierda! Alguien llame a los aurores, no dejen ir a este muchacho

Ya lo he hecho – comentó Ron a sus espaldas

Necesito que esperen aquí y alguien saldrá a comunicarlos su estado en cuanto podamos estabilizarlo

¿podrá hacerlo? – habló por primera vez

Haré lo que pueda, pero no puedo prometer nada, es un milagro que no esté muerto a estas alturas

Detuvo su andar para girarse al muchacho, le apuntó con su varita sin saber que hacer, no entendía cómo podía haber pasado todo eso, un momento se encontraba en una joyería con Ron y de pronto vio a un hombre gritando por ayuda, se miraba muy desesperado, algo en ella la guio a ayudar, corrieron detrás de él, pero nada la había preparado para la escena que encontró. Draco estaba tirado en el suelo, hasta su cabello rubio tenía gotas de sangre, se había dejado caer a su lado, tomando su cabeza en sus piernas como lo había hecho aquella noche en la torre de astronomía, solo que esta vez sus heridas eran profundas y no había mucho que ella pudiera hacer, el chico había intentado ayudar sin éxito, con el transcurso de la guerra se había vuelto aún más hábil con sus hechizos para sanar, dijo todos en los que pudo pensar, logró detener el sangrado el suficiente tiempo para que Ron los pudiera aparecer en san mungo. Con su varita ejerciendo fuerza en el cuello del castaño, lo miró con una frialdad que no creía poseer, quería gritarle, golpearlo, cualquier cosa, pero nada podía salir de sus labios; unos minutos después apareció Harry y con sumo cuidado se acercó a ella, señalando a su amigo para que la desarmara.

Dejo que Harry se ocupara de cuestionar al chico, se fue corriendo al baño, así fue como termino en el suelo de aquel lugar, aun decidía si podía perdonar a Malfoy por lo que había hecho , si bien sus intenciones fueron buenas, le robó su decisión y más de un año de su vida, si bien duro un año sin recordarlo, los siguiente meses que siguieron tras recuperar su memoria, fueron difíciles, porque creyó odiarlo, creyó que eventualmente dejaría de sentir por él todo aquello que alguna vez la habia hecho caminar por las nubes. Al verlo como lo había hecho, había alejado todos sus pensamientos y en ese momento solo pudo sentir, solo quiso aferrarse a él y suplicarle que no la dejara nuevamente.

Sabía que ahora está mostrando al mundo la parte de él que solo guardaba para ella, estaba siendo quien realmente era por primera vez, ella no se había acercado pues su corazón estaba roto y quería poder estar cerca de él cuando se sintiera capaz de no reclamarle todo lo que había hecho, como había sido preso de sus miedos, a decir verdad, también quería saber si algún día él se animaría a dar el primer paso, quería saber qué es lo que haría a tenerla cerca, si sería capaz de mentirle o si actuaria con indiferencia ¿la seguiría queriendo? ¿pensaría en ella tanto como ella pensaba en él?

Alguien tocó la puerta, llamaron su nombre y de pronto una rubia se sentó frente a ella, tendiéndole un cambio de ropa limpia y par de zapatos más cómodos de los que traía junto con una botella con agua. La contempló por unos segundos, Luna se había convertido en una de sus amigas más cercanas, fue a ella a quien le confió lo ocurrido con Draco después de decirle todo a Harry, pues ambas se acompañaban mientras se recuperaban después de lo que vivieron en la mansión Malfoy, si bien la rubia le confesó que nunca recibió malos tratos de parte del rubio, que al contrario, le llevaba golosinas cada tercer día, que se aseguraba de que no pasara frio y evitaba que fuera torturada, también le dijo que ella siempre supo que estaba destinada a estar con él.

Luna fue de las primeras en hacerse amiga de Theo cuando se unió a la orden, procuraba hacerle compañía cada vez que iba a darles información, le daba paz y un hombro

en cual llorar cuando no podía soportar el estrés de vivir como doble agente o cuando lo que le habian ordenado a hacer era lo suficiente tormentoso que se cuestionaba si podía lograrlo. También la visitaba cada vez que podía cuando fue atrapada por los mortifagos, se sentía responsable por no haber podido evitarlo o informarle a la orden a tiempo, pero en esos tiempos ya todo estaba tan complicado que no era tan fácil justificar su ausencia, cuando estuvo a salvo, la visitó un par de veces y no fue sorpresa para nadie cuando comenzaron a salir casi de inmediato, una vez que la guerra había llegado a su fin y el papel que jugó Theo en ella fue revelada, cosa que ayudo que todo mundo aceptara su relación con toda normalidad, fue ahí cuando comprendió que por mas personas que habian perdido, el mundo mágico no perdonaría errores fácilmente, lo comprobó cuando retuvieron a Malfoy más de lo debido, aun cuando se entregó voluntariamente comprobando su rol, siendo él que también daba información necesaria y ella se repetía continuamente que el corazón de Draco estaba del lado correcto, que había manejado la situación en una manera dolorosa para su relación, pero para en su mente por el bien mayor.

Ella nunca había confrontado a Theo sobre lo ocurrido en la torre, pues una vez que su memoria regresó pudo reconocerlo a pesar de la obscuridad y de su estado, pocos sabían sobre eso, el no era uno que estaba incluido en ese secreto y aunque le daba pena con Luna que le estuviera ocultando algo a su novio, ella lo entendía, no quería darle nada a Draco para que sospechara de su fallido plan, pues una parte de ella estaba siendo guiada por la curiosidad, necesitaba saber a este que punto él estaba dispuesto a llevar todo; claro que no contó con un intento de asesinato.

-Creí que solo limpiar tu ropa no seria suficiente, necesitamos deshacernos de lo que traes puesto y una vez que te sientas mas cómoda podemos pensar en que sigue ¿de acuerdo? – dijo con gentileza, ella solo asintió y una vez que la mujer la dejo sola nuevamente, sacó el anillo del bolsillo, se cambió rápidamente tirando la ropa sucia en un bote de basura prendiéndole fuego, lo apagó cuando estuvo satisfecha con el resultado.

-¿Vino Theo contigo?

-Esta con Harry, esta declarando sobre lo ocurrido – suspiró- Reconoció al chico cuando lo vio, perdió todo color al verlo

-Debo hablar con él

-Herms, aún no sabe que lo recuerdas todo, no creo que quieras levantar sospechas

-Me mostraré indiferente, necesito saber que hizo Malfoy

-Necesitas saber si aun puedes perdonarle, aunque creo que los has hecho ya pero tu orgullo no te ha dejado acercarte

-¿me culpas?

-En absoluto, solo tu puedes decidir que hacer con tu vida, como amiga te digo que bastante ha sucedido como para dejar escapar a alguien que te brindo tanta felicidad, que sacrificó tanto

-Yo también sacrifiqué muchas cosas

-La diferencia es que tu no lo recordabas, Malfoy tuvo que vivir sabiendo que te había perdido, aun así, al final luchó por nuestro lado, tal como lo prometió solo no con los métodos que hubieras querido, créeme que podía ver su tristeza en sus ojos, no te estoy diciendo que perdones y sigas adelante, sino que no te cierres

-Desde que fui a Australia no he dejado de pensar en todo lo sucedido

-De eso estoy segura, pero esta vez creo que estas sobre analizando todo de más – tomó su mano entre las de ella para calmar el ligero temblor de las de la castaña, viendo el anillo por primera vez - ¿algo que deba saber?

-No es lo que crees – sacudió la cabeza apartándose – estoy lista para salir

Con un movimiento de su varita, desinflamó los ojos de la castaña y eliminó todo rastro de su llanto, dejándola fresca para aparentar que todo estaba bien, su novio era un hombre astuto, esperaba que no la descubriera tan rápido, pues si ella también era muy lista, la Hermione actual se solía dejar llevar mucho por sus emociones cuando se trataba de Draco Malfoy, aunque ella no lo admitiera o no sabía si era consciente de ello.

Les habian asignado una pequeña sala de espera en el segundo piso, pues querían contener a los medios, miradas curiosas y mantener la investigación en secreto hasta que se supiera el estado de la víctima, Luna la guio hasta ahí y tan pronto cruzó la puerta, Harry corrió a envolverla en sus brazos, asegurándose de que estuviera bien, temiendo que hubiera tenido un ataque de pánico, ella se apartó, comenzó a juguetear con el anillo, estaba a punto de quitárselo para entregárselo, temía perderlo, pero un auror lo llamó, salió tras él.

Olvidándose de la joya, se acercó a Theo quien también la abrazó cariñosamente, habian creado una fuerte conexión después de que fuera el quien la encontró inconsciente, ahora sabía que él había sido cómplice de su ex novio, a diferencia que el se quedó, que aunque fuera sutil, ella sabia que procuraba asegurarse de que estuviera segura, se preguntaba si Malfoy tenía algo que ver con ello, en los últimos meses de su relación los vio convertirse en amigos cercanos, era con el único compañero de casa con quien hablaba, y si lo ayudó a quitarle sus memorias, suponía que estaban en mejores términos de los que ella creía.

-Me ha comentado Luna que has reconocido al hombre que hiso esto- sonrió- debe haber tenido algo en contra de Malfoy para atacarlo de esa manera, gracias a Merlín, Ron y yo estábamos cerca para ayudar.

-Ha sido un error, un malentendido

-La profundidad de su daga dice otra historia

Seguro Harry te pondrá al tanto de igual manera – resopló- tuvimos una misión, mataron a los padres del chico después de torturarlos, me habian ordenado matar a su hermana, tenia nuestra edad, Draco reaccionó primero, les dijo que…

-¿Qué?

-Era una guerra, era lo que ellos hacían, pero ni él ni yo fuimos participe de algo tan atroz – se dejó caer en una de las sillas, la miró directamente a los ojos- los convenció que quería intimar con ella, contra su voluntad y eso lo celebraron, en realidad planearon su escape, pero todo salió mal, al final la asesinaron porque ella no quiso dejar a Draco después de que lo atacó como habian acordado y su hermano vivió todo este tiempo pensando que ella había sido abusada, perdió a toda su familia en un par de horas, ha confesado que cuando se enteró que lo habian liberado pensó que todos se darían cuenta que no pertenecía en nuestra sociedad, pero al ver como todos lo estaban aceptando, se lleno de ira y decidió tomar justicia por sus propias manos.

Ella retrocedió un par de pasos, la presión en su pecho disminuyó, había pensado en lo peor, si bien conocía al hombre a la perfección, una guerra te puede llevar a hacer cosas que uno se cree capaz de hacer, por un instante sintió orgullo, de saber que el hombre que tanto amó no mancho su alma ni oscureció su corazón como su padre quería.

Theo la miró detenidamente por un par de segundos, dejando escapar una carcajada que estaba muy fuera de lugar en la situación en la que estaban envueltos, poniéndose de pie, la atrajo otra vez hacia él, abrazándola fuertemente

-¿desde cuándo? – susurró en su oído

-No se dé que hablas – contestó alejándose

-Espero que entiendas sus razones y mi participación en ello – se llevó un dedo a los labios en señal que mantendría su secreto para después reírse – hazle ver el infierno

-No voy a negar ni admitir nada

¿Cómo estás? Realmente – la vio acomodarse el cabello en una coleta, notando el anillo, se llenó de ira– lo sabes y aun así no le vas a permitir justificarse, no le vas a dar una oportunidad, esperaba mas de ti

Lo miró extrañada antes su cambio de actitud, pero no le tomó importancia, habian mayores cosas de las cuales preocuparse cuando vio a Harry ingresar del brazo de Narcisa Malfoy, asintió en manera de saludo, alejándose de la sala esperando poder estar sola, pero la mujer fue tras ella.

-Me han dicho que fuiste tu quien ayudo a mi hijo, te lo agradezco – le sonrió

-No ha sido nada, he saldado mi deuda con Malfoy – comentó refiriéndose a la noche en la mansión en la que accidentalmente recupero la memoria

-¿solo lo has hecho por eso?

-Con todo respeto, señora Malfoy, no le debo explicaciones

-Tienes razón, sin embargo, creo que eres la única persona en esa sala que puede estar sufriendo tanto como yo

-Puede creer lo que guste, no significa que sea verdad

-He visto los recuerdos que le has mostrado al wizengamot

Eso la congeló en su lugar por un par de segundos, se suponía que nadie mas que el ministro y un grupo de selecto de personas, verían los recuerdos que había recuperado en modo de evidencia y de un testimonio para ayudar en el caso de Draco, pues creían que tenían la suficiente información para condenarlo, ya que no querían considerar el testimonio de Theo argumentando que existía una relación previa, el hombre les pidió que les diera verasiterum, se negaron diciendo que no sabían que clase de entrenamiento podía tener que podría llegar a contra arrestar los efectos de la poción; Fue hasta que Harry ofreció sus recuerdos de la noche de la muerte de Dumbledore y de vistazos que tuvo durante la guerra, fue ahí cuando comenzaron a quedarse sin excusas, sin embargo, decían que eran muy pocas pruebas.

Cuando Harry le comentó lo que estaba pasando detrás de la condena, ella ya estaba estudiando leyes mágicas, sabia del mundo de corrupción del cual era parte el ministerio, sería difícil persuadirlos, pero con Kingsley al mando como nuevo ministro tenia mas probabilidades de hacer la diferencia aun siendo una estudiante, así que se dedicó a encontrar una manera de persuadirlos, de usar todos sus conocimientos para demostrar su inocencia, cuando se dio cuenta que era algo más personal y temor a no poder reformar el gobierno cumpliendo con promesas que habian hecho para tranquilizar a la comunidad, se sintió acorralada, decidió entregarles todos sus recuerdos, excepto los más íntimos y especiales para ella, asegurándose de darles un vistazo a los momentos en que habian discutido sobre la guerra, sus momentos de desesperación, de temor, su pánico al hacer algo que no quería.

Fue así como finalmente, no tuvieron otra opción mas que procesar su liberación, de lo cual se encargó personalmente, que aun sintiera enojo, no la hacia perder su sentido de justicia, se había atrevido a verlo en su celda, solo quería ver por sus propios ojos que estuviera bien, comprobar si el Draco que ella amó fuera el mismo después de una guerra, después de cometer actos que no quería ni imaginar.

Tal como lo sospechó, él siguió con su plan de pretender que no eran nada más que excompañeros, había necesitado de toda su fuerza de voluntad para no reclamarle ahí mismo, de abrazarlo y hacerle saber que todo estaría bien. Después se convirtió en cuestión de saber si algún día se atrevería a verla a los ojos, si se animaría a hablarle, quería entenderlo y decidir si podía perdonarle, encontrar una manera de recuperar lo perdido o de dejar ir.

-Sabia que mi hijo era una persona diferente, se fue ese año a la escuela como un muchacho con el peso del mundo en sus hombros y regresó a casa como un hombre determinado, no precisamente por lo que se esperaba de él, nunca me quiso contar nada, las paredes tenían ojos y oídos – la miró fijamente- no me tomó ni dos segundos saber que era usted la razón cuando la vio esa terrible noche en mi casa

-Eso no justifica que haya tenido acceso a evidencia confidencial

-Cierto, pero veras, yo he visto todo esto hace apenas unos minutos, lo cual ya no interfiere con ningún caso

-Harry – gruñó

-Es bueno contar con amigos tan leales, amigos que realmente quieren lo mejor para uno, la intención de Harry fue mostrarme que si mi hijo no sobrevive a esto, por lo menos conoció la felicidad – apretó los labios como si pudiera contener sus emociones – el mayor temor de una madre es no ser capaz de brindarle a sus hijos un mundo en el que puedan ser ellos, en el que puedan disfrutar lo que la vida tiene que ofrecer, le fallé mucho a Draco y me alegra saber, que entre tanta obscuridad te tuvo a ti y no te preocupes, no diré nada de lo que sé

La mujer no la dejo ni responder cuando ya se había dado la vuelta, dejándola al fin sola con sus pensamientos, todos esperaban que corriera a sus brazos nuevamente, sabía que era un hombre bueno, pero una parte de ella no podía dejar de sentirse traicionada. Miró al doctor encaminarse hacia la sala, con paso lento se fue detrás de él.

-Hemos logrado estabilizarlo, pero para ello hemos tenido que inducirlo en un coma, estamos trabajando en que su cuerpo regenere toda la sangre que ha perdido, debido a la naturaleza del veneno, las heridas tardaran en cerrarse por lo que no puede hacer movimientos bruscos y suponemos que el dolor es insoportable, así que es mejor que mientras se recupera lo suficiente deberá permanecer dormido para agilizar el proceso. Lo primordial es lograr cerrar por completo las heridas, eso tomara tiempo

-¿Cuáles son sus probabilidades? – preguntó su madre con un ligero temblor en su voz

-Las primeras 24 horas son de vital importancia para saber como va a reaccionar al tratamiento

-¿De qué porcentaje estamos hablando? – se atrevió a preguntar Hermione.

-Según nuestro pronóstico, tiene el 50% a su favor, lo demás dependerá de él

No pudo escuchar más pues su cerebro comenzó a bloquear el resto de la información, en ese momento se dio cuenta que el mundo sin Draco Malfoy, no era correcto, un mundo sin el muchacho engreído, petulante, astuto, bondadoso, increíble que se convirtió en su primer amor, parecía una locura.

Vio como el doctor guio a Narcisa a la habitación del joven, se quedó sentada por horas no se molestó en contestar a las preguntas de sus amigos, vio a Ron marcharse, Harry entraba y salía, Luna le había llevado el té que ahora reposaba intacto y frio a su lado, Theo le dedicaba una que otra mirada, todos dejaron de preguntarle cosas cuando aceptaron que no quería hablar con nadie. El atardecer había dado paso a la noche, estaba a punto de irse a casa a darse una ducha para volver al hospital, después de que Harry le insistió que se fuera a descansar, estuvo a punto de lograrlo, pero el gritó de la señora Malfoy pidiendo ayuda había destruido cualquier avance de su amigo, por primera vez en horas, se levantó de su lugar, corriendo hacia donde podía escuchar a la mujer.

Dejó escapar una lagrima al verlo en cuanto entró a la habitación, la opresión en su pecho volvió y todo lo que creyó ya no sentir por él, la golpeo como una quaffle, era difícil conciliar al muchacho que le dedicaba miradas picaras en los pasillos, sonrisas discretas en el comedor, con el hombre que yacía en una camilla, con el torso vendado, marcado por cicatrices que no solían estar ahí y ahora con cuatro cortadas que seguían sangrando a través del vendaje, pues se estaba convulsionando provocando que el poco avance fuera destruido.

No se dio cuenta que ahora eran sus gritos los que llenaban el lugar, el doctor lo estaba revisando y Ron la había tomado en sus brazos sacándola de ahí, pues necesitaban saber que estaba pasando. Se preguntó si Draco se sintió así al saber que ella estaba en peligro por mas de un año, si sintió que su corazón quería salir de su pecho al verla en el suelo de su casa, si bien ella había vivido atormentada por las imágenes que no la dejaban dormir, él se había enfrentado a la realidad sobreviviendo el día a día y sabiendo que ella estaba en algún lugar sin saber en qué condiciones estaría, sintió el impacto de su sacrificio a pesar de que por mucho tiempo lo considero egoísta.

Aun en los brazos de Ron, el tiempo parecía no moverse, él movía una mano de arriba hacia abajo por su espalda, cosa que usualmente la calmaba. El equipo médico abandonó la habitación, tras ellos salió la madre del joven, mirándola fijamente se acercó a ella, provocando que su amigo la liberara de su agarre, la mujer la tomó de la mano guiándola al interior de la habitación cuando se les permitió ingresar nuevamente, una vez que se sentó a su lado tomó su mano derecha entre la suyas, todos regresaron a esperar y le dieron su espacio.

Pasó su mano por el pómulo de su rostro, después acarició su cabello, delineo sus labios con su pulgar, a pesar del tiempo y de su condición, el tenerlo cerca era capaz de agitarla, tal vez era que en su mente lo asociaba con algo secreto y prohibido, algo que no podía tener, pero que desafió todo por tener y era su acto de rebeldía mas grande, el mas satisfactorio.

-Siempre tienes que ser tan dramático ¿no? – rio tomando una de sus manos entre las suyas – no te ha quedado claro que no hace falta hacer alto tan grande para llamar mi atención, esa te la robaste hace mucho tiempo y no necesariamente deseo una devolución, sin embargo, hay cosas que no son fáciles de dejar ir ¿sabes?

Con su mano libre limpió sus lágrimas sin quitarle la vista de encima, se permitió un sollozó cuando comenzó a poner atención a las marcas sobre su piel, cuando estuvieron juntos habian sido un par de adolescentes con el mundo sobre sus hombros pero con la fantasía de que podían vivir el momento, que podían conquistarlo todo con solo el deseo de querer hacerlo, ella con la esperanza de salir vivos de la guerra, con su amor intacto, había sido bastante ingenua, ahora lo sabía, las marcas en ambos era las evidencias visibles de lo vivido, pues la cicatrices emocionales eran más difíciles de dejar ver, pues a pesar de que todos habian pasado por algo traumático, era más fácil esconder el dolor y aferrarse a una esperanza de que todo iría mejorando con el tiempo, el ataque de Draco solo había demostrado que para todos se recuperaran pasaría mucho tiempo.

-Tienes prohibido dejarme ¿queda claro? Hay mucho que debo gritarte, mucho que debo reclamar, perdonar y, sobre todo, te debo muchos te quiero, muchas risas, me debes muchos debates – besó su frente- si vuelves a mí, volveré a ti

Miró a todos lados asegurándose que nadie estuviera cerca, si bien sus amigos se habian asegurado de cuidar de su varita, habian olvidado con quien estaban tratando, tal vez creyeron que con su estado emocional sería difícil hacer magia no verbal, la habian subestimado.

Durante su tiempo libre en la guerra, se dedicaba a buscar hechizos que pudieran ayudarlos a sobrevivir, en ocasiones se permitía modificarlos, después de Draco la salvó en la mansión compartiendo su dolor, se había obsesionado con encontrarlo, de saber como funcionaba y se permitió modificarlo, haciéndolo más efectivo, él había compartido el dolor, su alteración le permitía compartir hasta la herida, lo que aceleraba el proceso de curación, nunca lo había intentado, era uno de eso hechizos que siempre reservaba para cuando no tuviera otra opción, para cuando estuviera todo tan jodido que no tenia otra salida, realizó un hechizo de diagnóstico al hombre, esta era la ocasión que había estado esperando, si bien el medimago les dio esperanzas, podía notar que no le quedaba mucho tiempo.

Sacudió su cabeza, suspiro profundo enfocando toda su atención e intención hacia el encantamiento, en lo que deseaba lograr, sintió su magia fluir siguiendo sus instrucciones, no perdió de vista su objetivo aun cuando sintió como su piel se abría bajo su playera, no serian tan grandes ni tan graves como la de él, solo lo suficiente para darle una oportunidad de luchar, comenzó a marearse al sentir el veneno en su sistema, no era suficiente para matarla, no pasaría de nauseas, su mismo cuerpo lo eliminaría, y en Draco junto con los pociones terminaría con abandonarlo.

Se dejo caer en la silla en la que cual había permanecido hace unos momentos, sentía el sudor correr por su frente, ahora entendía la necesidad del coma, el dolor era insoportable inclusive para ella a pesar de compartirlo.

-Ahora lucha para volver a mi

Necesitaba salir de ahí antes de que se dieran cuenta de lo que acaba de hacer, al llegar a casa podría tomar algo de su botiquín, o si era necesario se iría a un hospital muggle, ella estaría bien. Salió de la habitación corriendo, las personas la miraban extrañados, pero nadie la detuvo, sus brazos cubrían sus heridas lo suficiente para lograr su escape, en cuanto se pudo desaparecer lo hiso, dejándose caer sobre el suelo de su casa.

Diciéndose que si ella no vivía seria en vano haberlo salvado, entró a la habitación que había convertido en su oficina, se fue directo a su estante de pociones, bebió una para recuperar la sangre perdida, lo cual ayudo a que todo dejara de dar vuelta, le siguió una para el dolor y después una para contrarrestar el veneno, dejo caer esencia de díctamo en sus recién adquiridas cortadas, las de ella no eran tan profundas por lo que la esencia le ayudaría a cerrarlas, aunque sabia que su piel dolería por un par de semanas. Se duchó, se deshizo de la ropa que traía puesta, eliminando toda evidencia de lo que había hecho, pues sabia que sus amigos la reprenderían por algo tan impulsivo, se recostó sobre su cama preguntándose si podría dormir un par de horas antes de que alguien fuera a buscarla, recordando el anillo, se dijo que se lo quitaría, pero aunque en su mente sabia que lo tenia que hacer, su cuerpo no le respondía, se quedó dormida casi sin darse cuenta.

Theo estaba agitado, como era posible que Granger estuviera comprometida y aun así tuviera el descaro de quedarse a lado de Draco, algo no estaba cuadrando, miró a Potter y Ron, si algo estuviera pasando entre alguno de ellos con Hermione, Luna se lo hubiera dicho, sabia que Harry no había vuelto con Ginny, se estaban dando tiempo de sanar sus heridas o al menos eso habian dicho, entre Ron y la castaña simplemente no había química, algo estaba extraño y no sabia como iba a reaccionar Draco cuando se enterara, porque tenia la esperanza de que iba a estar bien, no habian sobrevivido a tanto para que ese fuera su fin.

Dejó la sala de espera para ir a la habitación de su amigo, quería asegurarse de Hermione estuviera bien, aunque estuviera enojado con ella no significaba que no le importara, además sabía que estaba sufriendo y no podía exigirle explicaciones, era su vida y el podía estar indignado por su amigo, pero también entendía que ella tenia sus razones para no haber dicho nada antes, se preguntaba desde cuando recuperó sus recuerdos, tocó la puerta un par de veces, nadie respondió, pensando que quizá se quedo dormida, entró y para su sorpresa solo encontró al rubio, extrañado se dirigió al baño pero no la encontró, se acercó a Draco antes de salir de ahí, palmeó su hombro con delicadeza.

Camina hacia la puerta cuando se quedo petrificado en su lugar, sacudió la cabeza, tal vez había enloquecido, el medimago claramente dijo que lo habian inducido en un coma, tal vez su mente lo estaba traicionando y sus odios escuchaban lo que deseaban oír.

-Her ..m

Se giró cuando lo volvió a escuchar, se acercó a él nuevamente, pero esta vez lo vio directo a los ojos, como demonios había logrado salir por si mismo de un coma no lo entendía, pero le sonrió abiertamente para salir corriendo a llamar a los médicos, corrió hacia la sala de espera para informarles a los demás.

- ¿Dónde está Hermione? – preguntó Harry con una extraña sensación en su estómago

- No lo sé, iba a buscarla cuando lo escuché

No había mucho que podía ser por Malfoy, ahora su prioridad era Hermione, se apareció en su casa, gracias a merlín sus defensas lo reconocieron, corrió a su oficina, al no encontrarla, se dirigió a su habitación, la vio dormida y se le escapó un suspiro, permitiéndose respirar con tranquilidad, al notar a alguien con ella, se levantó de inmediato dispuesta a atacar, una de las secuelas de la guerra.

-¡Harry! pude haberte lastimado

-Lo siento, necesitaba saber si estabas bien

-Si lo estoy – mintiendo, pues parecía que todo su cuerpo estaba en llamas - ¿ha sucedido algo?

-Draco ha reaccionado, lo primero que ha hecho es preguntar por ti

¡Merlin! había funcionado, estaba vivo, podía jurar que ese momento era un antes y un después en su vida, dejó escapar un sollozo provocando que la sensible piel de su abdomen le recordara la razón por la que él se había despertado. Miró a Harry sin saber que decir, ambos sonrieron.

Honestamente, era momento de enfrentar lo que fuera que pudiera pasar entre ellos dos, no podía permitir que perdieran más tiempo, porque la verdad era que lo seguía amando y no había manera que no regresara a él.

-No se la pondrás fácil ¿cierto? – rio

-Ni en sueños.