En el piso superior de la casa Jane estaba tumbada en su cama, pensando, pobre Freddy, no era tan fuerte transformado en una simple adolescente, bueno, el también había cambiado su físico, pero aún conservaba mucha fuerza, el calor de la habitación era insoportable y se encontraba en ropa interior, otra de las ventajas de estar muerto, nunca antes como asesino, había vuelto a sentir frío o calor, solo humedad con el agua, o como mucho el fuego, pero nada de eso lo detenía antes, pero ahora eso era distinto, la verdad no echaba mucho de menos su cuerpo zombi, ser una chica lo hacía feliz, por primera vez en mucho tiempo sin su madre, pudo salir a la calle sin que nadie se atemorizada de su aspecto, incluso había oído a un grupo de chicas preguntarse si él era una alumna de intercambio y que era muy adorable y mona, si no fuera tan tímido y pudiese hablar con esa voz de chica a las demás, hubiese deseado tener una conversación con ellas, parecían bastante formales, al contrario que el perfil de sus habituales víctimas. Pensó en que eso no podía ser posible, no aquí. Alguien llamó a su puerta y abrió, Jane se irguió de un salto en el suelo para defenderse y vio que era Pinhead, inmediatamente recordó que estaba en ropa interior y su cara se puso rosa, dio un pequeño gemido y un leve grito.- ¡KYA!- Tranquilízate Jason, soy yo Pinhead, no voy a hacerte nada, venía a decirte que el hechizo ya está preparado, Freddy te está esperando abajo.- Jane alzó la cabeza y le pidió un momento para vestirse, al salir, Pinhead la vio vestida con sus ropajes masculinos habituales, que ahora colgaban de su cuerpo un poco más que cuando era un chico, debido principalmente a su masa corporal.- Pinhead bajó las escaleras con Jane.- Por favor acabemos con esto ya.- Pidió Frida con un dolor insoportable y levantándose pesadamente hasta llegar al lado de su compañero.- Vale, poneos uno al lado del otro, pero con unos diez centímetros de separación, o acabaréis fusionados en el mismo cuerpo.- Ambas asintieron y tras colocarse debidamente Pinhead empezó a susurrar un hechizo sobre la tapa de la caja, la cual se abrió y de ella empezó a brotar un humo negro que rápidamente envolvió a las dos mujeres, el humo se volvía cada vez más denso hasta formar una esfera sólida, unos segundos después, rayos de luz blanca empezaron a brotar de unas grietas en la esfera, rompiéndola en pedazos, Freddy y Jason habían vuelto a sus cuerpos originales.- Bueno espero que halláis aprendido una lección de todo esto.- Ambos asintieron.- Sí que ser chica no es tan bueno como parece.- Dijo Freddy. Jason cogió un papel y boli y escribió.- "Y que no nos llevamos tan mal al fin de al cabo"- NO.- corrigió el cenobita.- La lección es: No jueguen con mis cosas.- Pinhead se llevó la caja y se marchó del salón mientras escuchaba las leves risas de sus compañeros.