En primer lugar, muchas gracias a todas las personas hermosas que estuvieron mandándome mucha buena vibra estos días, afortunadamente después de días terribles me siento mejor y he recuperado mis capacidades mentales por completo, así que ¡muchas gracias!

En segundo, perdón por tardar tanto en actualizar, ya saben, primero me enganché escribiendo Kingdoms y después Sueños de Lobo (Pueden hallarlos si entran a mi perfil), después de mi mala racha de salud me organizaré mejor para poder traer capítulos tan pronto como pueda.

Tercero, pero no menos importante, no saben lo horrible que me resultó escribir este capitulo, y no porque no quisiera hacerlo, este capítulo es la otra cara del capítulo cuatro de Mr. Seduction, solo que desde los sucesos de Tony y Steve, me confundí mucho y tuve que volver a leer ese capítulo para entender el orden de sucesos, me gustaría decir que será la última vez que me pasa, pero hay más capítulos así, es el reto de hacer una historia paralela a otra... en fin, gracias por leer, comentar, nos vemos en el siguiente capítulo ¡Besos!


Cinco: Malentendidos

Pepper sufría con Tony como jefe, se supone que los Omegas son lindos, amigables, buenos en tantos aspectos... pero Tony era todo lo contrario, Anthony Stark era el reverso a todo lo que se dice que es un Omega, y la mayoría del tiempo está bien que sea así, sin embargo, cuando están por tener una junta con los accionistas y sigue sin aparecer, allí es donde Pepper quiere sacarle los ojos de una maldita vez.

-Tranquila Pepp, estoy listo para domar a las fieras- dijo apareciendo con un par de lentes de sol y un café en la mano.

-Te dije que no bebieras, mira como vienes- regañó Pepper abriendo a propósito todas las cortinas de la oficina.

-Menos charla papá, no bebí nada- dijo bajito -estaba en el médico.

-¿Te sientes mal Tony?

-Algo así, revisión mensual Pepp, ya sabes, tantos supresores puede ser malos.- suspiró -pero hablemos de cosas más bonitas como... tu y happy ¿cómo va eso?

-Parece que se enteró que usé a Sif de almohada y ahora no me habla... los betas son un dolor de cabeza...

-¿Estás segura que quieres estar con un beta?

-Claro que sí, es difícil, pero lo quiero y él me quiere ¿qué más puedo pedir?... y eso me lleva al asunto ¿ya decidiste?

-No lo sé Pepp, es decir, parece que Steve quiere estar conmigo, pero también es muy tímido y Bucky está allí, directo en lo que quiere, pero no lo sé, ambos me gustan, me da miedo equivocarme...

-Te propongo algo, James vendrá inevitablemente a la despedida de Fandral, tomen unos tragos y de paso pones a prueba a Steve.

-Eso es un poco cruel.

-Pero así sales de la duda, Steve es como un cachorro enorme, necesita un poco de mano dura.

-Pepper, eres malvada.

-Solo digo Tony, necesitas salir de dudas... y aunque tuviste esa cena y cita con Rogers y te llevó a casa cuando casi morimos de cansancio y se quedó contigo, él no ataca de frente.

-Exageras Pepper, Steve no es como los demás, es un tipo suave, discreto, no conozco mucho de su pasado, pero quizás tiene una buena razón para ser así. Además está su restaurante, él se hace cargo de todo solo, no tiene tiempo para tontear, y honestamente sabes como soy, puedo ser un maldito dolor en el trasero.

-¿Que si lo sé? ¡Claro que lo sé! ahora mismo eres uno en el mío, lo que me recuerda, tenemos junta con los accionistas.

Y con esa frase el tema quedó para otra ocasión, Tony sabía que no se acabó del todo, sin embargo, habían cosas más importantes que su vida amorosa, lo que no sabía era que Bucky tenía preparado el contraataque, y su primer movimiento fue el enorme arreglo de rosas rojas que envió a Tony, cuando la junta acabó, el Omega se encontró con su oficina perfumada de rosas y una tarjeta que decía 'Haces mi mundo mejor' la letra de Bucky era inconfundible, así que tomó el teléfono y llamó al hombre para agradecer el detalle.

Esa noche todo el grupo se unió para despedir a Fandral, la mayoría se conocía desde niños, Stephen y Tony fueron al mismo internado y al igual que Loki, sus padres coincidían mucho, así que inevitablemente se hicieron amigos, sobre Pepper el asunto era que, ella era como la hermana mayor de Tony, su familia trabajó con los Stark desde que ella era una bebé y cuando nació Tony se convirtió en su guardián, Bruce llegó a ellos en la universidad al igual que Sif y Natasha, Fandral estuvo allí siempre, como el guardián de Loki, después llegaron los demás, como Happy y Ross, que se integraron por relación y Bucky, aunque no era del grupo, fue invitado por Fandral, en los últimos tiempos hicieron buenas migas y en cierta ocasión ayudó al rubio con un negocio.

La idea de que el sitio de reunión fuese el restaurante de Steve fue idea de la retorcida mente de Natasha y Pepper que constantemente conspiraban con la vida amorosa de sus amigos, esas Alphas eran una pesadilla con piernas. Al llegar al lugar se dirigió directamente a aquellos que ya los esperaban tomando nota de quien llegaría de último para molestarlo el resto de la noche. Loki le dio una mirada curiosa, sabía que no podría ocultar a él su nerviosismo, tener a Bucky y a Steve en el mismo lugar ponía su corazón en peligro de un paro cardíaco, así que para aligerar el ambiente decidió saludar a su empresario favorito, que casualmente estaba conversando con el troglodita que Loki tenía por jefe. Tony se puso de pie y apartándose del grupo se dirigió a donde los dos rubios los observaban. -Hey Dorito, ¿es que no nos vas a atender?- comentó ignorando a Thor completamente.

-Tony, no me dijiste que venías- saludó Steve intentando no parecer un cachorro torpe.

-Fue algo de último minuto, estamos celebrando- sonrió orgulloso.

-¿Qué celebran?- se animó a decir Thor.

-Odinson ¿No?- Tony sonrió como si lo conociera.

-Thor Odinson, a tus servicios- y no pudo evitar coquetear logrando que Steve suelte un gruñido furioso a su amigo.

-Tranquilo Steve, este solo le ve el culo a Loki- Tony rió descarado ante la expresión de sorpresa del Alpha. -En fin, ya nos veremos- Tony se despidió dejando un beso en la mejilla de Steve volviendo a su mesa. Cada paso que daba de vuelta hacía que pensara en lo torpe, torpe, torpe que fue al revelarse así a Steve, porque claro, besar a Steve era tan normal... ¿por qué hizo eso? ¡estúpido, estúpido! Volvió al grupo intentando parecer normal, aunque claro, Natasha y Pepper no dejarían pasar eso y Loki, bueno él estaba distraído comiéndole la boca a Fandral.

Cuando todos estuvieron reunidos y la conversación fluyó, los meseros comenzaron a llegar con bebidas y comida, algunos reconocían al Tony y lo saludaban, incluso mandaban saludos a su mamá, Stephen observó curioso aquello pero no dijo nada, tenía que arreglar cierto asunto con Ross y ese pretendiente, Rey de saber donde y especialista en desear lo que no es suyo.

-¿Te gustaron las flores?- preguntó Bucky pasando su brazo alrededor de los hombros de Tony.

-Muy hermosas, perfuman mi oficina- sonrió dando un sorbo a su bebida sintiendo un cosquilleo cuando la cercanía del Alpha lo sorprendió. Bucky se acercó a Tony con la clara intención de robarle un beso, una corriente eléctrica acompañó la acción del Alpha, pero esa corriente no se sintió tan bien, Tony detuvo sus intenciones cuando estuvo muy cerca de sus labios.

-Lo siento- dijo Bucky avergonzado y Tony sonrió para restar importancia al asunto, aunque no podía dejar pasar que la mirada de Steve se clavó en él, sentía sus ojos taladrar su cabeza, siempre están diciendo que las miradas matan, pues la de Steve posiblemente si lo hiciera.

-Así que... ¿Barnes, no?- Natasha apartó a Tony del lado de Barnes y el moreno agradeció infinitamente que ella se metiera entre ellos, ese simple gesto hizo que la mirada de Steve dejara de atravesarlo y por fin pudo conversar con Bruce.

Minutos, bebidas, no sabía cuanto tiempo pasó desde que Loki se excusó para ir al baño hasta que volvió con el aroma de otro Alpha en todo el cuerpo, Tony pudo reconocerlo de inmediato, sabía que pertenecía a Thor, ese era otro predicamento que estaba pendiente, porque Tony no era estúpido, si Loki no lo deseara, él no hubiese puesto ni un dedo sobre su cabello. Justo cuando pensaba preguntar a su amigo, la voz chillona e irritante de una mujer hizo que todos hicieran silencio, la vieron entrar con sus aires de reina agitando sus cabellos y viendo con desprecio a todos allí, por suerte, ellos estaban en un sitio donde no pudo verlos.

-Debí imaginarlo- escuchó a Pepper gruñir -esa perra tenía que arruinar nuestra noche.

-Vino por el mastodonte- añadió Stephen -sin soltar a Ross que se escondía en su pecho.

-Quiero su cabeza- añadió Natasha dispuesta a cobrarse cada una de las que Jane Foster le hizo.

-Alto- Loki detuvo las intenciones de la Alpha -No dejemos que esto arruine la noche, estamos aquí por Fandral, no por esa loca.

-Estoy de acuerdo- añadió Tony -Ella no va a meterse con ninguno de nosotros, ¿entendido?- Y muy en contra de sus deseos, todos asintieron, nadie en su sano juicio desafiaría la orden de un Omega y jamás irían en contra de dos Omegas, menos cuando es de Loki y Tony de quien hablan, el día que Ross tenga la suficiente confianza para imponerse, ninguno de los Alphas de ese grupo podrán ser impulsivos.

-Quiero seguir viviendo, así que... mejor me siento- suspiró Natasha- Necesito un trago -un mesero se acercó en ese instante y una nueva ronda de bebidas llegó pronto a ellos, pronto recuperaron el buen humor. Hasta que Bucky logró acercarse nuevamente a Tony, aunque solo conversaban, la mirada de Steve volvió a clavarse en él, era como si una vela ardiendo se pegara a su espalda, había algo con esa mirada que lograba hacerlo temblar.

Una vez más, en otra muestra de que el magnífico Tony Stark es un estúpido, tomó una servilleta y con un bolígrafo que robó a Strange, escribió un mensaje.

Querido Dorito, en realidad estoy pasando una hermosa noche... sin embargo, cuando termine aquí ¿puedo tomar un último postre contigo?

-Tony

Tras escribir aquello coló la servilleta a Loki -¿Puedes dárselo a Steve?- pidió con una súplica en los ojos.

-La molestaré también- susurró Loki tomando la servilleta y aprovechando que Fandral y Pepper ponían al límite su capacidad para soportar el alcohol desapareció con el encargo de Tony. Su amigo volvió tras unos minutos riendo divertido y con rastros de Thor. -Está hecho amigo, lo que sea que enviaste, él estaba feliz... Tony, estás jugando con fuego y te vas a quemar si no apagas una de las llamas que te persigue.

-Lo sé, aunque tal vez, no soy el único jugando- sonrió dando un beso en la mejilla a su amigo -Gracias por hacerlo.

-Está celoso, ¿sabes? él podría matar por ti... debes decidir...

-Terminemos la noche ¿por favor?- pidió Tony y Loki asintió.

Era muy tarde cuando todos se marcharon, Pepper y Natasha tomaron un taxi dispuestas a seguir la fiesta en otro lugar, el lugar estaba por cerrar, y Steve comenzaba a despachar a los últimos comensales, fue cuando un par de chicas se acercaron a él coqueteando -Yo te conozco ¿no? eres el chico del calendario... ¿quieres divertirte un rato?- comentó una rubia mostrando el escote, Tony bebía un último trago cuando vio aquello, apretó los dientes y respiró profundamente, necesitaba calmarse, sin embargo, cuando la rubia se atrevió a tomar a Steve por la camisa jalarlo a ella para besarlo, fue todo lo que Tony pudo soportar. El vaso que sostenía comenzó a sufrir la presión de la furia del Omega, al final el cristal cedió haciéndose añicos en la mano de él -¡Mierda!- se quejó viendo la sangre gotear.

Steve empujó a la chica sin mucho cuidado y se acercó a Tony tan rápido como pudo -Tony, ¿qué pasó?, hay que llevarte al médico- dijo al llegar junto a él, veía la mano sangrar del moreno y sentía la imperiosa necesidad de calmar su sufrimiento, de alguna forma tenía que ayudarlo, protegerlo.

-Estoy bien- Tony apartó su mano de él con rudeza -Bucky sigue cerca, no te preocupes- estaba molesto con Steve, por ilusionarlo, por hacerle creer que en realidad estaba interesado, por hacerse pasar por un hombre decente y a la primera dejarse besar por la rubia de turno.

-Yo puedo llevarte- dijo celoso, furioso porque Tony quisiera llamar al 'otro' cuando él estaba allí, no lo entendía, Tony no necesitaba la ayuda de un cualquiera, está el allí para socorrerlo.

-Estoy bien Steve, es mejor que Buck me acompañe- buscó el contacto del Alpha para llamarle cuando el rubio prácticamente le arrebató el teléfono de la mano.

-Dije que lo haré yo- no iba a permitirlo, Steve Rogers el pacífico tenía un punto de quiebre y se llamaba Tony, así fue como descubrió que no importaba si le quitaban todo, estaría bien, pero jamás dejaría de pelear por Tony.

-No quiero que lo hagas Steve, no quiero que tu me lleves al hospital o a cualquier sitio, eres como todos- Tony escupió furioso sus palabras.

-No me importa lo que quieras Tony, seré yo quien te cuide- gruñó, de pronto la herida era algo secundario, era el Alpha y el Omega peleando, entrando en desacuerdo porque ambos están heridos.

-¿Por qué Rogers? Te espera una noche increíble con la rubia, no quiero ser una carga- respondió con un gruñido igual de molesto Tony.

-Escucha bien esto- Steve se acercó peligrosamente a sus labios -No me gustan rubias, los prefiero morenos, pequeños... te prefiero a ti- y sin más, Steve robó un beso lleno de deseo de los labios de Tony, que correspondió con el mismo deseo.

-Hospital- fue todo lo que dijo Tony cuando se separaron y sin más, Steve tomó a Tony en brazos hasta la camioneta de entregas y lo llevó al hospital, sintiendo aún el cosquilleo del beso compartido recorriendo todo su cuerpo, clavándose en su Alpha.