Los días habían pasado rápido, más rápido de que lo que cualquiera de ellos hubiera querido que lo hicieran. Resultaba demasiado sencillo habituarse a la compañía del otro en el simple día a día. Lo que antes había parecido algo que no iba a poder ser de ninguna de las maneras ahora era la cosa más obvia y común del mundo.

- ¿Cuándo vuelves al final? – preguntó Yamato mientras que caminaban de vuelta en el aeropuerto, finalmente.

- Creo que dentro de un par de semanas estarán todos los acuerdos cerrados y podré volver a casa – hacía el esfuerzo por aparentar normalidad, como si la idea de tener que dejarlo irse fuera algo que tuviera controlado a la perfección ya.

- Te avisaré en cuanto tenga unos días libres, ¿de acuerdo?

- Sí… me lo has dicho ya varias veces – sonrió a pesar de todo-. No te preocupes, estaré pendiente…

- Lo sé – apretó algo más la mano que llevaba cogida de ella.

- ¿Cómo os vais a organizar?

- ¿Para qué?

- Te has venido solo, digo yo que en algún momento tendrás que recoger a Gabumon, ¿no?

- Tengo un hermano con una profesión muy cómoda y sin nada mejor qué hacer en su vida que hacerme algún que otro favor… Se empeñó en acercarlo él y así poder ayudarme a instalarme.

Asintió. Sonaba como un buen plan. Además le gustaba la idea de que lo acompañara su hermano pequeño los primeros dias. Ella, a fin de cuentas, se iba a quedar en muy buena compañía. A la cual tendría que interrogar porque apenas había sabido de ella nada más que lo justo y necesario aquellos días y algo le decía que no era porque no la hubiera querido molestar.

Continuaron caminando en silencio hasta llegar por fin a la puerta de embarque. Habían ido con el tiempo justo, no queriendo pasar más tiempo de la cuenta en aquel lugar que tan malos recuerdos les traía a ambos.

Aquella vez las cosas eran diferentes, aquello no era nada más que un hasta pronto, pero no dejaba de doler. No dejaba de ser una idea no demasiado agradable el tener que pensar en que podrían pasar semanas hasta que pudieran volver a estar juntos. Ninguno decía nada sobre el tema, no queriendo empeorar la situación.

Se detuvieron, finalmente, a escasa distancia de dónde ella ya no podía pasar, clavando sus ojos canela en las barreras antes de volver a mirar hacia él.

- ¿Cuánto dura el vuelo? – dijo al final tras morderse el labio no siendo aquello lo que hubiera tenido en mente decir.

- Yo también te voy a echar de menos - le dijo, sabiendo perfectamente lo que pasaba por su cabeza-. Mucho – se inclinó ligeramente posado su frente sobre la suya.

- Ten cuidado, ¿de acuerdo? – levantó la vista, aprovechando para clavarla en la de él ahora que lo tenía cerca.

- Ya te he dicho que no tienes que preocuparte. Es un proyecto que está empezando, solo tendré aburridas reuniones, papeles y cosas nada interesantes… - era cierto, no lo decía para tranquilizarla.

- Me da igual, tú ten cuidado por si acaso… - nadie quería que volviera a llevarse un susto que pusiera todo patas arriba otra vez.

- Lo tendré – prometió antes de poder escuchar por megafonía la llamada a los pasajeros del vuelo.

- Tienes que irte… - le dijo ella tras un par de segundos poniendo una mueca.

Aquella vez, aunque una parte de su subconsciente estaba gritando que no quería que se fuera, que le dijera que se quedara, estaba más tranquila y sabía que realmente no era lo que quería hacer. Quería apoyarlo y estar a su lado fuera como fuera. De ser al revés, ella habría querido que fuera así y era la posición en la que se había mantenido firme durante todo aquel tiempo. Además, no era una chiquilla que no sabía cuando iba a volverlo a ver, ahora el contexto no podía ser más distinto. Sonrió.

Sonrió a pesar de todo.

- Ten buen viaje – le dijo.

- Lo tendré – respondió lanzando él también una mirada hacia la cola que ya había avanzado lo suficiente.

Volvió a mirarla. Nunca se hubiera imaginado que llegar a enfrentar a esa situación fuera tan complicado, pero estaba bien. Estarían bien y eso era lo que importaba. Soltó la maleta para posar su mano sobre la mejilla de ella en una ligera caricia.

- Te llamaré cuando esté instalado, ¿de acuerdo?

No le contestó nada más que con un asentimiento de cabeza, se le atragantaban las palabras. Llevó su mano sobre la que él había posado en su mejilla antes de ponerse de puntillas para llegar y poder darle un beso de despedida.

- Más te vale – le dijo cuando se separó de él, tomándose unos segundos antes de hablar de nuevo-. Te quiero…

Ahora fue él quien no respondió de palabra, únicamente sonriendo tristemente antes de besar su frente.

- Venga, vete. Vete o vas a acabar quedándote en tierra…

- No es tan mala idea… - sabía que tenía razón, así que haciendo acopio de fuerzas rompió el contacto con ella dando un paso hacia atrás, cogiendo de nuevo su maleta.

No se vio tampoco con capacidad de decirle nada más, no en aquel momento. Solo le lanzó una mirada antes de colocarse en la casi inexistente cola y entregarle el billete a la azafata cuando ésta se lo indició.

Lo siguió con la mirada hasta que la puerta de embarque se lo impidió. Fue solo entonces cuando se permitió agachar la cabeza dejando de aparentar que estaba perfectamente. Aquello era más duro de lo que se había imaginado… pero podría con ello. Iba a poder con ello porque quería que saliera bien.

Necesitaba que saliera bien.


Lo sé, lo sé, ha sido corto. Posiblemente uno de los capítulos más cortos que os he hecho hasta el momento, pero únicamente quería dejar reflejada la despedida de ambos. Así que hasta aquí hemos llegado en esa línea temporal, espero de verdad que os haya gustado a todos los que lo habéis seguido desde el principio hasta aquí. Muchas gracias por los favoritos, los follow, y obviamente por todos las review y los ánimos ❤❤❤

A: si nos ponemos técnicos, todo empezó volviéndose loca, pero loca, porque no era capaz de entender qué narices le pasaba de repente con uno de sus amigos de toda la vida. Así que sí que han avanzado mucho, mucho, mucho. No solo en esta parte de la historia, sino también desde el primer capítulo que publiqué sobre ellos dos hace ya unos meses por aquí. La idea es que los dos ff primero enlacen y que el que tengo en mente termine con la historia (o al menos por el momento).

De verdad que millones de gracias por todas tus review y todos tus tomatazos, purpurina y amenazas de diversos tipos cada vez que te dejo a medias con algo o hago algo para marear. Si al final es lo que acaba motivando a una para escribir, ver que hay alguien que te quiere tirar tomatazos por cómo has acabado un capítulo mientras que espera por el otro. Eso sin duda no ayuda a que el autocontrol vuelva de vacaciones xDDD

Prometo que intentaré no haceros esperar mucho para tener algo nuevo. La idea la tengo, la base también, ahora solo necesito tiempo para escribir y es lo que tengo en duda que vaya a tener al final de esta semana. Pero bueno, ya veremos. Poco a poco. De todas formas, espero que la espera no sea para largo tampoco aunque estuviera unos días off.

Espero que el epílogo sea también de tu agrado aunque sea un poquito triste en comparación con el anterior capítulo, pero es exactamente cómo tenía pensado que acabara todo esto en el momento en el que decidí dividir la historia en dos.

¡Un abrazote!

Nikanaka: Ya ¿eh? Eso también me lo pregunto yo, sobretodo por lo que se sabe de él proviniente de la versión oficial. Vamos a suponer que para que haya conseguido que la pelirroja no lo mande a paseo y tener su propia familia con dos nenes monísimos tiene que haberse ido convirtiendo poco a poco en una versión algo parecida a la mía porque sino seguro que se iba a tener que ir al espacio, pero de la patada en el culete que le hubiera acabado dando Sora.

Te digo lo mismo que a A, muchas gracias por los tomatazos, amenazas y todas las palomitas e_e Incluído todo lo que me reí yo sola cuando me pillaste de pleno con los fb a medio escribir justo haciendo tú referencia a ellos. Veremos a ver si al final te acabo dando el gusto o no y ya está todo leído sobre ellos... Al igual que otras cosas que van a tener que salir a la luz tarde o temprano.

Intentaré no dejaros mucho esperando, más o menos tengo en mi cabeza hasta dónde quiero llegar antes de publicaros el primero capítulo, así que venga, yo prometo intentarlo, porque si me quedo sin ordenador pero os puedo actualizar desde el móvil como hago muchas veces por tenerlo escrito ya, aunque sea una actu al día, os va a caer.

Espero que te guste también el epíligo... ¡Nos leemos! ❤❤❤