Las Crónicas de Sombra Parte 01: Inicios

En algún lugar de Equestria un atormentado poni baja unas escales que estaban hechas de algo similar a diamante iluminándose únicamente con la luz generada por su cuerno, al legar al fondo se encontró con una puerta cerrada con un mecanismo muy complejo de cuatro broches los cuales él abrió fácilmente con su magia debido a que la combinación ya la conocía a pesar de nunca haber visto tal puerta, el joven unicornio caminaba con la cabeza baja mientras su crin color negro grisáceo le cubría los ojos los cuales se dejaban entrever por sus cabellos, su miraba denotaba sorpresa y miedo por el lugar en el que se encontraba, tras la puerta se encontró con una habitación bien iluminada con paneles de vidrio los cuales tenían imágenes y diagramas de distintos tipos y al enfocar su mirada en una imagen de un corazón de vidrio las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos carmesí.


Déjenme contarles una historia, una historia sobre quien fui. Mi nombre es Sombra nací en el año 186 del nuevo régimen impuesto tras la paz entre las tres especies en una de las villas apartadas del norte y con gracia les digo que la villa era tan pequeña que solo vivíamos 70 ponis allí y no había ningún pegaso. Nací siendo un unicornio al igual que mi madre quien era artesana y lo que más le gustaba era hacer jarrones, se la pasaba el día entero haciendo jarrones ¿Para qué tantos jarrones? Nadie lo sabía, ella solo gustaba de hacerlos y me encantaba verla, poder ver la delicadeza con la que trataba al barro y como una bola de lodo se convertía en una pieza de arte y lo que más me gustaba era que mientras trabajaba cantaba una canción que decía así:

Este viento, ¿De dónde proviene?

¿Dónde su viaje comienza?

¿Viene de donde la vida nace?

¿O empieza donde todo termina?

Me conto que la canción se la cantaba mi abuela a ella y su abuela antes de ella, viene de que mi tátara abuela era de una tribu nómada que se movía en dirección contra el viento y luego se asentaron en esta zona y mientras viajaba cantaba esa canción, era interesante el tener algo que pasaba entre generaciones.

Mi madre me enseño lo básico de la magia cuando cumplí 6 años y a pesar de mis fracasos ella siempre me animaba, ponía mi cabeza en su pecho y mientras yo escuchaba su tranquilo corazón ella tarareaba la canción de su familia, eso siempre me recomponía y me animaba a tratar y al cumplir los 8 años mi control de la magia había crecido, ya era capaz de levantar dos veces mi peso con pura telequinesis y eso para alguien de mi edad era muy difícil y mi madre se esforzaba para inventar formas creativas de que yo aprendiera de forma simple pero práctica. Una vez me regalo unas figuritas de barro con formas de caballeros y dragones y cuando me las entrego me guiño el ojo y dijo "Procura no romperlas", cuando agarre una entre mis cascos esta se hizo pedazos, sobra decir que me quede con cara de "Pero que rayos" y cuando tome la segunda con magia está prácticamente estallo en pedacitos, la tercera solo la deje en el piso y le di un golpecito en la cabeza la cual se rompió dejando el resto del cuerpo intacto y pude observar que la figura estaba hueca y hecha de una delgadísima capa de arcilla. Mi madre siempre fue una yegua muy astuta (Si supieran las veces que me engaño diciendo que no había brócoli en mi sopa de brócoli… ¡Bueno yo tampoco era muy listo que digamos! Aparte, era mi madre si no podía confiar en ella entonces en quien) y recordé sus palabras "Procura no romperlas" (También era alguien que elegía muy cuidadosamente sus palabras) me había dado estas figuritas para practicar mi control y que fuera mucho más certero pero cuidadoso al usar magia, así que para poder jugar con las figuras tenía que generar un campo telequinético para levantarlas sin dañarlas pero tenía que ser lo suficientemente denso como para que las piezas al chocar entre ellas no se rompieran.

A mi padre no lo veía muy seguido debido a su trabajo como Guardia Real y no me refiero a que era un guardia del castillo, no, él era un guardia directo de "Los Pilares Del Mundo" también conocidos como El Alto Concejo de Alicornios y gracias a tan glorioso (Y bien remunerado) trabajo nunca nos faltó comida en la mesa (Ni sopa de brócoli, por los dioses como odiaba esa cosa).

Cuando comencé mis lecciones de magia con los unicornios más viejos de la villa estos me enseñaron mucho acerca del control y el poder de la magia en usos simples como el tratar de tener una piedra dando vueltas alrededor de mi cuerno en todo momento, decían que si me acostumbraba a hacer eso luego sumara otra y con solo estar teniendo piedras flotando alrededor de mí de forma instintiva ya sería mucho más hábil en la magia, ya que así controlaría magia instintivamente sin concentrarme y sin derrochar mucha energía, al mismo tiempo cuando mi padre tenía sus temporadas de descanso e iba a la villa solía llevarme libros de hechizos "avanzados" y digo avanzados entre comillas debido a que si bien no eran hechizos muy difíciles o de alto rango para alguien de mi edad sí que eran un enorme reto por fortuna disponía de mucho tiempo libre ya que no tenía amigos, no es que fuera antisocial o algo parecido sino que todos los jóvenes de la villa ya habían llegado a sus 20 años y nadie había tenido un hijo en años fuera de mí y aun cuando casi no veía a mi padre nunca me llegue a sentir solo en la villa, todos me conocían y yo los conocía a todos (Sin contar que yo era "el bebé de la aldea").

Mi Padre siempre que venía a casa se quedaba por varios meses y siempre trataba de pasar tanto tiempo como podía con mi madre y conmigo, más que nada con mi madre ya que parecía que trataba de compensar todo el tiempo lejos de ella, yo no tenía problema con sus "muestras de afecto" hasta una noche. Bien me habían dicho los chicos de la villa "Si en la noche escuchas ruidos o crujidos desde la habitación de tus padres ¡NO VALLAS!" ¿Y quieren saber que paso? Que fui, eso pasó, infancia arruinada porque me dio sed y no pude contener mi curiosidad.

Mi padre a pesar de ser solo un poni terrestre normal era muy hábil en el uso de su lanza, tan hábil era que podía derrotar sin problemas a unicornios e incluso pegasos y a pesar que teníamos un conflicto con los grifones en el oeste y la amenaza de invasión por parte de los dragones en el este el reino gozaba de paz pero aun con eso no significaba que mi padre podía dejar su puesto mucho tiempo así que tras unos tres meses de estar con nosotros se iría una vez más por otros meses pero mi madre nunca se sintió sola sin él ya que yo estaba con ella y que mi padre nos escribía cada semana y antes de que la idea surja ¡NO! Mi madre no le era infiel a mi padre, ella era muy tímida al hablar con otros aun cuando eran nuestros vecinos que había conocido toda la vida y siempre era yo el que tenía que ir a hacer las compras con el mercader, aparte de que al ser una villa pequeña todos conocían a todos y un chisme así tardaría en darle la vuelta al pueblo aproximadamente 16.08 segundos y no es broma, así de efectiva era la red de chismes y eso me hacía imposible el contarle a alguien mis secretos o pensamientos… excepto por una poni, su nombre era Windy Belle.

El motivo por el que podía hablar con ella es porque no era de la villa, ella era la cartera e iba dos veces a la semana, siempre tenía tiempo para hablar conmigo y al ser una pegaso ella me tomaba en sus brazos (O así era hasta que cumplí los 10 y ya no me podía cargar) y nos elevaba hasta una nube, una vez allí yo me sentaba en su regazo o ella se recostaba y yo me acostaba sobre ella con mi cabeza quedando en su pecho para no caerme de la nube, yo me la pasaba horas contándole lo que me pasaba en la aldea desde la última vez que nos vimos, mis opiniones, secretos y uno que otro chiste que se me ocurría, ella solo me escuchaba y me aconsejaba, bueno ella y Lulú, antes de que se pregunten Lulú era una palomita blanca como la nieve que se la pasaba durmiendo en la bolsa de cartera de Windy y me había contado que durante una ventisca esta estaba dormida en un árbol temblando y ella la metió en la bolsa y desde entonces se la pasa allí. Siempre la considere la potranca más hermosa que había visto en mi vida (Aparte de mi madre) a pesar de que era 6 años mayor que yo y antes de que pregunten la conocí desde que yo tenía 6 años cuando su padre quien era el anterior cartero de la villa la llevaba al pueblo y desde entonces había platicado con ella cada que iba.

Al cumplir los 11 años descubrí mi destino (O eso pensé) cuando la villa sufría el "ataque" de un grupo de hormigas dragón (No puedo llamarlo ataque ya que solo estaban migrando y sí, esta especie migraba entre dos valles cada 5 años con todo y su reina solo que esa vez se desviaron y terminaron pasando directamente por la villa) las cuales aparte de tener el tamaño de una rata grande también eran muy agresivas cuando te acercabas a su territorio y en esos momento la villa se volvió parte de su territorio ya que estaban de paso a "El Valle Del Miedo" (Lindo lugar por cierto) el cual estaba a unos kilómetros al este y mientras pasaban por la villa estaban causando destrozos, se metían a las casas llevándose toda la comida que podía y atacaban a la gente. Mi madre y yo estábamos tratando de crear una barrera lo suficientemente grande como para reunir a la aldea pero no éramos tan fuertes y en ese momento vi como una gran cantidad de hormigas entraron en la casa de los panaderos y estos trataban de salir por la ventana, podía escuchar a su bebe llorar presa del pánico de sus padres y al mismo tiempo el viejo Rune Faust estaba haciendo lo mismo que nosotros con los demás unicornios ancianos pero nuestras burbujas no servían ni para albergar a cinco ponis y fue en ese momento de desesperación que me plante en el medio de la villa y trate de invocar un escudo más grande… y falle, lo intente una segunda vez y volví a fallar, la tercera vez acumule más energía pero me concentre en como jugaba con mis figuritas de barro, usando el mismo principio pude distinguir a quien quería que la barrera protegiera y a quien iba a repeler, un pilar de luz color azul y blanco salió de mi cuerno y comenzó a expandirse hasta tomar la forma de una media esfera la cual poco a poco se fue expandiendo a toda la aldea, cuando pasaba por un lugar barría a las hormigas y no afectaba de ninguna forma a los ponis y conseguí expandirla de forma que cubrió toda la aldea, cuando esta se estabilizo se convirtió en una burbuja azul transparente y veíamos como las hormigas dragón solo rodeaban la barrera ya que al parecer no podían treparla. Así que allí estaba toda la aldea, viendo un desfile que nadie más había podido ver (Usualmente nadie se acercaba a las hormigas dragón por el miedo a perder una pata… y toda la cara) pero yo seguía sorprendido ya que mi escudo era algo que no se había visto antes y el viejo Rune Faust me dijo que cuando él fue guardia del castillo un hechizo como ese habría sido muy útil, entonces mi costado brillo (¡Tráguense eso chicos! Todos los de la aldea apostaron a que no conseguiría mi cutie mark antes de cumplir los 14) la imagen que se pintó en mi flanco era el de un escudo de gota de agua color blanco con cuatro alas azules a los lados y en el centro había una serie de runas que significaban protección. Mi madre estaba encantada pero la felicidad duro poco ya que se acercó La Reina (Esta es del tamaño de un alicornio más o menos) y con ella las Hormigas Dragón Soldado (Mas o menos de la mitad de un poni totalmente crecido) las cuales a fuerzas querían traspasar el escudo, a pesar de que eran condenadamente fuertes no podían penetrar la barrera o así fue hasta que abrieron sus mandíbulas y una flama color verde intenso altamente concentrada salió de estas (No las llaman hormigas dragón por nada y para que me entiendan la flama parecía la de un soplete) y con 20 haciendo lo mismo la berrera comenzó a quebrace. Usualmente las hormigas dragón no se meten en peleas durante su migración debido a que su reina está expuesta y al no tener el "saco" de crianza conectado no puede generar más crías… bueno, en realidad solo no se meten con criaturas difíciles de matar y que no los puedan repeler y para colmo los ponis estamos en esas dos categorías.

Las hormigas dragón eran de un color negro muy muy oscuro y su exoesqueleto a pesar de parecer solo una piedra rugosa era increíblemente resistente, tanto que ni una lanza arrojada en picada por un pegaso o un disparo mágico de potencia media de un unicornio los llegaba a herir, hasta los Alicornios tienen problemas con ellas debido a que no son fáciles de matar ya que si no les destruyes la cabeza siguen moviéndose ignorando cualquier otro daño o perdida de las extremidades, ahora imagínense la situación, estábamos rodeados, teníamos a solo ancianos como usuarios de magia y los demás no son guerreros, 20 hormigas enormes estaban escupiendo una llamarada incesante y aparte de eso teníamos a la reina la cual sin contar el hecho de que también escupe fuego también puede volar ¿Conclusión? Estábamos más que muertos… o lo hubieron estado de no ser por lo que me paso, sin saber qué diablos iba a hacer me plante enfrente de la parte fracturada de la barrera y empecé a canalizar mi magia. Al manifestarse en mi cuerno mis deseos de alejarlos estos estos causaron algo extraño, mi aura mágica color azul desapareció y fue remplazada por una clase de "burbujas" que alternaban entre los colores negro, rojo, verde y morado al mismo tiempo que mi cuerno era rodeado por pequeños rayos de color negro los cuales a cada segundo incrementaban su intensidad, mi crin comenzó a elevarse como si tuviera una corriente de aire ascendente pero mis mechones no se separaban lo que hacía parecer a mi crin una flama negra, mis ojos brillaron con un rojo más intenso del que ya tenían, mi cuerpo ardía y de mis ojos salía vapor y el último cambio fue que mi cutie mark se alteró, cambio su diseño ya que ahora en vez de alas de plumas color azul se convirtieron en alas de murciélago color violeta, el escudo se tornó de color negro y las runas de protección en este las cuales eran de color negro se tornaron color rojo sangre. Un disparo salió desde mi cuerno e impacto el suelo creando un charco de un material viscoso color negro, el charco se hizo cada vez más grande y comenzó a levantarse tomando una forma similar a un Lobo de Madera gigantesco solo que estaba enteramente hecho de ese material viscoso y no tenía ojos, el "lobo" me volteo a ver mientras yo seguía con esa rara apariencia y luego vio a las hormigas las cuales habían cesado su ataque al verlo, el enorme lobo alzo su cabeza y con un potente aullido hizo temblar la tierra y los arboles (el aullido fue tan fuerte que estaba seguro que se escuchó hasta por varios kilómetros), esto espanto a las hormigas y tanto las soldado como la reina empezaron a rodear la barrera con el lobo gruñéndoles desde dentro de esta y cuando todas se fueron tras unos instantes más el lobo se convirtió de nuevo en el charco el cual comenzó a disolverse y a ser absorbido por la tierra y la barrera finalmente cayo.

La gente me veía con miedo mientras mi cuerpo poco a poco volvía a la normalidad, mi madre corrió a abrazarme y cuando uno de los mayores de la villa dio un paso hacia mí, mi madre lo volteo a ver de forma agresiva y este retrocedió, ella sabía que me atacarían y yo sabía lo que había hecho, use magia oscura también conocida como la magia de "La Sangre Negra" pero no me atacaron, Rune Faust se me acerco sonriendo y con una voz fuerte y de mando (típica de su forma de hablar) les pregunto a todos que si no iban a agradecerme por salvar sus casas, a ellos y a la villa, tardaron unos minutos en procesarlo pero lo aceptaron y comenzaron a agradecerme.

Pasados unos días llego un grupo de soldados los cuales fueron enviados desde Canterlot a investigar el aterrador aullido (Sí, el aullido se escuchó hasta la capital que está a dos días de viaje por tierra) y con ellos venia mi padre. Mi madre le conto sobre lo ocurrido y tras un sobresalto y un desmayo finalmente mi padre tomo una decisión, me llevaría con él a Canterlot para presentarme ante los pilares de Equestria para ver si alguno me tomaba como aprendiz (Era algo normal, cuando nacía un poni que mostrara cualidades fuera de lo normal este tenía que ser llevado ante los pilares de Equestria y presentado a los pilares del mundo los cuales eran el alto consejo de Alicornios) sin contar el hecho de que "ocultar" a un prodigio era prácticamente un crimen y más aún si este era un unicornio ya que esta raza en particular tenía la posibilidad de ascender a Archimago y pasar a ser parte de los pilares de la tierra, mi padre me dio un mes para practicar un poco ya que ese tiempo sería suficiente para alistarme y le daría tiempo a él para arreglar la reunión, sobra decir que el mes entero estuve nervioso pero para mí buena suerte Windybelle siempre estuvo conmigo y juntos nos la pasábamos jugando con Lulú o más bien tratando de jugar con ella ya que esa condenada paloma se la pasaba dormida en la bolsa del correo y también me la pase practicando mi hechizo de barrera y siendo sincero, quería impresionarlos solo por mi hechizo de barrera si recurrir a la magia oscura ya que lo más probable es que me encerraran en un calabozo o me liquidarían (Puede que fuera joven pero no era estúpido), sabía lo que me podría pasar si me descuidaba y con el paso del tiempo (Solo fue una semana) conseguí crear esa barrera sin problemas y… bueno, si entrene mi magia oscura (¡Era curioso demonios!) y lo más raro era que subconscientemente ya conocía algunos hechizos, el primero era el de invocación que ya había usado y otro que le permitía a mi cuerpo meterse dentro de las sombras y transportarme entre ellas como si estas fueran túneles.

Cuando llego la carta de mi padre avisándome de la reunión a solo una horas también arribo un carruaje de pegasos que me llevaría y Windy me acompaño de regreso a la Canterlot (Sí, ella era de la capital), el viaje fue largo y muy pesado debido a que Windy no paraba de dormirse encima de mí y cuando llegamos al castillo mi crin estaba llena de baba (¡Qué asco!), mi reunión seria al día siguiente de mi llegada y me quede a dormir en los alojamientos de los guardias junto con mi padre y adivinen que paso a las cuatro de la mañana… una palabra "Trompeta", digamos que no fue la primera mañana que esperaba tener en Canterlot y todo fue a peor ya en mi presentación.

Ese día habían otros 46 aspirantes de los cuales 12 (contándome) eran unicornios y todos tenían como mínimo 2 años más que yo o simplemente eran más altos pero por fortuna teníamos prohibido hablar antes de la presentación por lo que no tuve que aguantar a ningún pedante engreído con aires de príncipe (El imbécil en cuestión estaba justo a mi lado e iba antes que yo). Las pruebas comenzaron, uno por uno entraban y uno a uno salían, algunos llorando, otros furiosos e incluso habían otros que eran tan descarados que lanzaban amenazas ¡A los Alicornios! no sé pero para mí eso es tener unos "Kinotos" del tamaño de una catedral, nada de cerebro pero si mucho valor (O simplemente eran estúpidos), por otra parte habían algunos que me daban esperanza, estos a pesar de ser rechazados salían con la frente en alto y con una mirada de decisión, luego entro el sujeto que estaba a un lado de mí y cuando salió… bueno me quede impactado, pensé que estaría haciendo un berrinche pero no fue así, salió y parecía enojado pero luego cerro los ojos y respiro profundo, al abrirlos se podía ver la decisión en todo su rostro y luego me toco entrar.

Lo primero que note era que la habitación parecía una arena de forma circular con un palco en lo alto donde se encontraban los pilares de Equestria y el concejo de Alicornios (solo estaban dos de los cuatro) y de los presentes dos de ellos tenían cara de pocos amigos y uno en particular tenía una mirada que me helo la sangre, era un alicornio de color café claro, su crin era blanca al igual que su varaba de chivo, tenía un par de cuernos (¿O era un casco? Nunca lo supe en realidad) los cuales parecían más de un ciervo y un cuero azul entre roscado como un resorte en el medio y sus ojos eran enteramente negros (No es broma, él no tenía pupilas, iris o algo similar, su globo ocular era enteramente negro) y el otro era un unicornio anciano de color gris con una frondosa barba blanca y un sombrero ridículo lleno de cascabeles y ambos me veían como si yo fuera algo que escupieron (Sí, con todo y expresión de asco) entonces el anciano me dijo que comenzara cuando quisiera y por la forma en que lo dijo supe que estaba molesto porque me quede para viéndolos por varios segundos.

En la presentación no me fue tan mal y en efecto, el hecho de haber creado un hechizo totalmente nuevo a mi edad era impresionante pero el alicornio color café no me quitaba la maldita vista de encima y el anciano no me dejaba de ver con desprecio y tras varios minutos de debatir entre ellos el alicornio de pelaje café pregunto acerca de ese "Lobo" que había invocado, yo ya sabía que me habían hecho venir solo por eso. Ellos ya sabían de mi magia oscura y no ganaba nada tratando de ocultarlo, tome mi posición y comencé a concentrarme, uno a uno los mismos síntomas que se manifestaron en mi cuando me enfrente a las hormigas dragón comenzaron a aparecer en mi cuerpo y ese fue el momento en el que las alarmas de mi cabeza se debieron activar ya que en el momento en el que manifesté la magia oscura en mi cuerno ese alicornio de mirada fría se inclinó para ver mejor (En ese momento debí darme cuenta que nada acabaría bien, pero eso sería adelantarme a los hechos) y una vez más genere aquel charco negro solo que ahora no salió un Timberwolf gigante sino que ahora era una hormiga dragón soldado del tamaño de un bisonte y esta estaba haciendo el típico sonido que hacían estas criaturas el cual sonaba como cuando un poni esta tronando la lengua pero al mismo tiempo suena como si intentara hablar en código morse. La "hormiga" observo toda la sala, primero me vio a mí y no me prestó atención pero al ver a los jueces esta abrió sus mandíbulas y al igual que una hormiga real escupió un torrente de fuego color verde brillante en su dirección el cual fue detenido por un pegaso de color amarillo el cual traía un escudo de bronce que utilizo para desviar la llamarada, la hormiga al ver eso empezó a concentrar la flama hasta que esta era más parecida a un haz de luz el cual paso a empujar el escudo pero el pegaso fue ayudado por un enorme corcel de color azul con una melena rubia y ante esto la hormiga incremento la flama, mis ojos brillaron con más intensidad y la flama verde paso a ser una flama negra con los contornos color rojo brillante y para enfrentarse a su nueva potencia ya fue necesaria una barrera creada por una alicornio de color blanco y crin roja la cual se veía sorprendida y luego asustada al ver como su barrera se empezaba a quebrar y cuando finalmente recupere mi compostura le grite "¡SUFICIENTE!" mi voz resonó por toda la habitación de una forma casi espectral y entonces la hormiga solo se desparramo en el suelo volviendo a ser un charco y al igual que con el lobo solo fue absorbido por el suelo hasta desaparecer.

Lo que prosiguió fue un intento de regaño por parte del anciano del sombrero ridículo, digo "intento" debido a que la alicornio blanca que creo la barrera lo regaño a él por el hecho de que fueron él y el alicornio café los que me orillaron a usar una magia que no quería usar (Sí, me negué al principio pero me dijeron que no me dejarían ir a no ser que les mostrara lo que figuraba en los reportes de los testigos), tras el regaño al anciano este se quedó callado y el alicornio café se fue sin siquiera decir algo (¡Gracias a los espíritus!) y gracias ese pequeño regaño escuche los nombres de ambos, el anciano se llamaba Star Swirl y el otro alicornio era Order, luego mi defensora bajo del palco y se presentó a sí misma como La Arquitecta (Era muy amable y también muy linda) y me dio la bienvenida a la academia, me dijo que saliera por la segunda puerta (Sip, había segunda puerta para los que eran aceptados) y fuera a decirle a mi padre las buenas noticias, no solo salí corriendo por eso sino que quería quitarme los ojos de Star Swirl de encima.

Así comenzó mi vida en la academia para prodigios (La academia en sí no tenía nombre pero se le solía llamar así) y tras unos meses mi madre se mudó a Canterlot alegando que ahora que sus dos sementales estaban en la capital ya no tenía motivos para quedarse en la villa, de esa forma ahora hablaba siempre que podía con Windybelle y jugábamos con Lulú mientras tenía tiempo libre, tenía a mis padres más cerca y tras pasar mi primer año (Esto pasaba con todos los alumnos) verificaron mis logros para confirmar si me merecía salir de los dormitorios comunes y pasar a los especiales (Diferencia, en los comunes compartes habitación con otros tres ponis mientras que en los especiales solo compartes con uno) cosa que hacían conmigo presente y tras mucha deliberación, conteo de veces que explote el laboratorio, levitaciones involuntarias y estallidos espontáneos de magia mientras dormía finalmente me dijeron que si podía ir a un dormitorio especial, mi celebración duro poco (Solo unos segundos) ya que Order dijo que no merecía ir a un dormitorio especial, alegó que yo podía elegir una habitación del palacio para usarlo como estudio personal, lo cual dejo a todos con la boca abierta. Se armó un revuelo por lo dicho, un revuelo que terminó cuando Order dijo "Yo soy el director de la academia, ya tome una decisión y nadie me la negará" y con eso la discusión acabó. Decidí tomar una de las torres de vigilancia como estudio y me dieron una que antes era usada por los pegasos como almacén y tras limpiarlo conseguí mi estudio privado y para conmemorarlo La Arquitecta me regalo un escritorio de madera de caoba tallado a casco (algo muy caro sobra decir) y mi madre me regalo una de sus posiciones más preciadas, era un pañuelo color blanco perla el cual relucía como una verdadera perla cuando la luz lo alcanzaba, me contó que ese pañuelo se lo había regalado mi abuela como un amuleto para la suerte.

Me encerré (No literalmente, pero casi) en mi estudio por tres años teniendo solo a Windy y a mis padres como contacto a parte de mis tutores (La Arquitecta y Order y por la gloria de los espíritus Star Swirl no fue mi profesor consejero), pero mi vida dio un enorme giro el cual comenzó con una llamada de Cosmos y Cronos los reyes de Equestria y miembros de Los Pilares de la Tierra. Tras muchos halagos y decirme mis virtudes (Cuando alguien en una posición tan alta como ellos te hace tantos cumplidos es porque te pedirán algo ridículos o muy peligroso y van haciendo camino con palabras bonitas) me dijeron que por mi impecable habilidad con la magia y grandes habilidades para comprender a otros alumnos a tal grado que pude ayudar a varios a acabar sus proyectos aun cuando no era mi rama y Bla Bla Bla, fueron como quince minutos de puro parloteo el cual termino con la siguiente frece:

-Por lo tanto señor Sombra, lo convertiremos en un maestro particular-

-Espere ¿Qué?-

-Sera un maestro ahora-

-Eso lo entendí ¿Pero porque yo?-

-Eso ya lo dijimos-

-Claro, al ser particular ¿Quiere decir que tendré estudiantes específicos?-

-Sí, sus primeros estudiantes ya fueron elegidos, cuide bien de ellas-

Mi charla con el rey concluyo cuando de detrás de los tronos salieron dos pequeñas potrancas las cuales corrieron frenéticamente hacia mí, una era de color blanco como la nieve y su crin era rosa pastel y parecía unos años mayor a la segunda la cual era de color azul oscuro y su crin era azul claro. Al llegar se formaron delante de mí, entonces el rey hablo.

-Estas son nuestras hijas Celestia y Luna Equestris, niñas este será su nuevo profesor-

¿Nuevo? ¿Qué le paso al viejo? Mis preguntas fueron interrumpidas cuando la menor (Luna) se me acercó y usando de la voz más tierna de la que una pequeña de nueve años es capaz de hacer uso pregunto:

-¿Tú serás nuestro hermano mayor?-

-Espera ¿Qué? ¡¿QUE?!-