Buenas noches! Les podría decir que la historia va genial y que tengo todas las ideas del mundo y todo es perfecto, lleno de arcoíris y lindos unicornios… pero no! La verdad es que estoy teniendo problemas con esto. A demás que mi gordo fan interno está obsesionado con "Supercorp" (no sé si alguien lo siga, pero muchos fics de ella son realmente buenos) así que mis ideas estar dispersas. Pero no significa que lo volveré a dejar en el olvido. Solo que es posible que los capítulos sean cortos, me pondré a leer mi propia historia jajaja pero ver si así una idea llega de nuevo y todo vuelve a surgir. Por lo pronto solo me queda agradecer sus comentarios y que sigan conmigo en esto. Gracias a ustedes es que no he dejado en el abandono a Yuzu y a Mei. Quiero darles un final desde el fondo de mis ideas.

Recuerden que lo que pienses es tu opinión y se respeta. Hasta pronto.

La llamada finalizo y a unos minutos después llego un mensaje de Matsuri y sin esperar más se dirigió hacia allá.

Mientras tanto en la academia Aihara se encontraba Mei caminando por los pasillos para ir a su oficina. Cuando se topo con una vieja amiga.

-Buenos días Mei

-Buenos días Sahara, que sorpresa verte por aquí.

-Sorpresa? Esperabas que no viniera hablar contigo después del mensaje de esta mañana?

-No pensé que fuera necesario que vinieras.

-Mmmm crees que podamos hablar en tu oficina?

-Vamos.

Las dos mujeres caminaron directamente a la oficina de Mei.

-Señorita Aihara, necesitan algo?

Comentaba la secretaria de Mei.

-Sahara deseas algo?

-No gracias, así estoy bien.

-Por favor que nadie nos interrumpa.

La secretaria solo hizo un gesto con su cabeza en forma afirmativa y siguió con su trabajo.

-Muy bien, ahora estamos solas. Dime

-Vamos Mei, sabias que terminaríamos hablando

-No veo el motivo.

-Bueno me dijiste que dormiste con Yuzu… esa es una buena razón. Puedes contarme que es lo que paso? Porque yo me quede con el hecho de que tu y ella no tenían más que una relación cordial

-Yuzu me beso hace unos pocos días, hablamos anoche y dormimos juntas.

-Vaya que eso no me sorprende mucho, ustedes dos ammm bueno tu sabes.

-Si te refieres a que si tuvimos sexo? No Sahara no lo tuvimos… pero eso no significa que no quisiera hacerlo.

-Fuertes declaraciones.

-Es todo lo que vas a decir?

-Conmigo sabes que no tienes que fingir Mei.

-Estoy cansada Sahara, toda mi vida desde que tenía la edad de Yui solo me preocupe por lo que mi familia quería, lo que se esperaba de mí. Por eso termine con Yuzu, por eso me case y paso todo lo que paso… No me mal entiendas, si para tener a Yui tuviera que vivir todo de nuevo lo haría. La amo. Pero quiero ser feliz.

-Te mereces ser feliz Mei, todos lo merecen.

-Pero?

-tu dímelo

-Saori…

Las dos mujeres guardaron silencio, Sahara esperaba a que Mei siguiera hablando y Mei esperaba hilar sus palabras.

-No sé cómo hacer para no lastimarla. Y sé que haga lo que haga la voy a lastimar. También me duele sabes? Tenemos 6 años juntas y en verdad pensé que viviría el resto de mi vida a su lado. Que voy hacer Sahara?

-Hablar con ella…

-Como hablar de algo que le romperá el corazón y que romperá el corazón de mi hija

-Crees que así sea?

-Romperé el corazón de Saori y ella se alejara y Yui sufrirá por no verla nunca más. Sufrirá su primer abandono y será mi culpa.

-Puedes hablar con Saori para que siga viendo a Yui

-No puedo pedirle eso y ser tan egoísta.

-Entonces es un hecho que la vas a dejar?

-No puedo dejar ir a Yuzu de nuevo…

-Cuando se lo dirás?

-Después de la fiesta de mis padres.

-Desde que nos conocemos siempre quise verte feliz, algo en tu rostro y tu forma de ser me decían que eras muy especial y lo confirme con el paso del tiempo. Y espero que todo lo que hagas sea para que tú seas feliz.

-Es lo que quiero hacer. Quiero muchísimo a Saori pero ver de nuevo a Yuzu me confirmo que no es lo mismo querer y amar.

Sahara se puso de pie y camino hasta estar al lado de Mei tomando sus manos.

-Sabes que puedes contar conmigo.

-Gracias Sahara, en verdad no tengo como agradecerte todo.

-Para eso somos las amigas Mei.

Las dos amigas terminaron su conversación y Sahara se retiro para dejar a Mei continuar con su trabajo. Al medio día después de una reunión con el contratista y el arquitecto encargado de construir los dormitorios ella continua con su trabajo hasta que unas voces bastante alteradas la saco de su burbuja. Decidida a saber que era el escándalo fue hasta la puerta.

-Se puede saber que pasa aquí?

Mei elevo un poco su voz para que las dos mujeres dejaran su pequeña discusión.

-Lo siento mucho señorita Aihara, pero esta mujer llego algo alterada y buscándola, le informe que no puede pasar sin una cita. Se quería meter a la fuerza.

-Mei quiero hablar contigo!

-Puedo verlo, pero no es la forma de llegar a mi oficina.

-Podemos hablar entonces?

-Pasa

Mei le dedico una mirada a su secretaria en forma tranquila indicando que no había problema en la situación.

Cerrando la puerta se dio vuelta hacia la mujer que estaba parada a mitad de su oficina.

-Ahora dime, soy todo oídos. Que se te ofrece Kari…

La oficina de Mei estaba en total silencio y Karin solo miraba a través de la gran ventana que estaba atrás del escritorio de Mei.

-Y bien? Qué pasa?

-Yuzu me lo dijo todo…

Mei puso una cara de sorpresa total a las palabras de Karin, algo dentro de ella sabía que la visita no era social.

-Que fue lo que te dijo exactamente

-No dijo mucho, pero lo admitió todo Mei, ella no quiere regresar a Canadá conmigo a nuestra vida.

-Ya veo

-Eres una mujer de pocas palabras…

-Que quieres que diga exactamente?

-Que es mentira… que entre ustedes no hay nada y todo son ideas que ella se invento.

-No puedo hacer eso, porque lo que te dijo Yuzu es cierto.

Karin se quedo callada y sus lágrimas comenzaron a caer, su rostro mostraba total tristeza ante la realidad de esa situación.

-Tú no puedes hacerla feliz Mei, ella no será feliz a tu lado. Todo eso solo es un sueño estancado. Tú no puedes darle lo que yo sí. Tu tu tu no puedes! Tú tienes una familia, tú tienes a alguien! Dime ya hablaste con Saori de esto?

-No, aun no lo hago…

-A eso me refiero! Tu eres muy cobarde para enfrentar las cosas!

Mei cambio su posición ante Kari y se plato con esa seguridad que tanto la caracterizaba.

-No me conoces Kari, hace 11 años si fui cobarde por como hice las cosas. Pero ya no soy una niña, ya no tengo miedo de nada. Es verdad que no he hablado con Saori pero de eso me encargare. No puedo asegurar que voy hacer feliz a Yuzu, pero si lo intentare cada día, cada hora y cada segundo del resto de mi vida. Sé que la intención de Yuzu jamás fue lastimarte, pero así se fueron dando las cosas sin que ella y yo lo pudiéramos evitar… El amor es algo que no se puede evitar… y yo no puedo evitar amarla.

-Ya lo veremos…

Karin salió como entro de la oficina Mei, dejándola sola de nuevo. Tomo su teléfono y marco al número de Yuzu.

*Mei hola!*

-Kari acaba de salir de mi oficina, me puedes decir porque cambiaste los planes sin decirme nada?

*Lo lamento… es que no lo pude evitar*

-Eso solo adelanta todo… tendré que hablar con Saori antes de que tu novia lo haga

*Lo lamento Mei no quería que pasaran así las cosas*

-Nos vemos más tarde, tengo que seguir trabajando

*Si, está bien y Mei en verdad lo siento*

La llamada termino y un mensaje de Saori llego a su teléfono.

Saori: Hola cariño, estoy verdaderamente cansada y las extraño mucho, no sé cómo podre estar un día más aquí sin ustedes. Te llamo en la noche para también saludar a mi princesa. Las amo.

Mei termino de leer el mensaje y no pudo sentirse más miserable por lo que estaba por hacer…

-Vale la pena, vale la pena si puedo estar con Yuzu y Yui. Ser una familia algún día y por fin ser felices.

No se lo dijo a nadie, la soledad fue testigo de su declaración. Mei tomo su teléfono y busco las fotos que Yuzu le había mandado, una sonrisa se formo en sus labios y confirmo todo. Estar con ellas y ser felices valía totalmente la pena. Pasara lo que pasara.

*YUZU*

-Gracias por la charla Matsuri! En verdad que necesitaba platicarlo con alguien.

-Está bien Yuzu, pero creo que comenzare a cobrarte! La psicóloga es Sahara

Matsuri lo decía con una clara sonrisa de burla, haciendo reír a Yuzu.

-De acuerdo! Te pagare o le diré a Harumi que ella te pague por mí.

Una mirada picara se dirigió hacia Matsuri y ella no pudo evitar sonreír.

-Claro! Dile por favor que yo con todo gusto me hago cargo, después de todo lo hago casi todos los días…

-Wow! Que!? Estas jugando verdad, eso es imposible!

-Ja! Nunca Yuzu nunca jugaría con algo así hablar de Harumi y sexo es hablar de cosas serias. No es mi culpa que anoche te cortara el hilo.

-Oye! No me cortaron el hilo… Solo que Mei tenía razón y si ahora me siento mal no quisiera saber cómo me sentiría si habría hecho "ESO" con Mei.

-Mmmm tal vez te sentirías satisfecha!

-Podemos dejar de hablar de eso! Que justo ahora me siento muy muy muy avergonzada.

-Pero anoche te sentías muy muy muy caliente!

-Basta Matsuri!

Yuzu lo grito un poco y se gano algunas miradas de las personas a su alrededor. El momento fue interrumpido con el teléfono de Yuzu.

-Te salvo la campana, Mei me está llamando.

-Vamos, contesta que no le gusta esperar.

-Mei hola!

*Kari acaba de salir de mi oficina, me puedes decir porque cambiaste los planes sin decirme nada?*

-Lo lamento… es que no lo pude evitar

*Eso solo adelanta todo… tendré que hablar con Saori antes de que tu novia lo haga*

-Lo lamento Mei no quería que pasaran así las cosas

*Nos vemos más tarde, tengo que seguir trabajando*

-Si, está bien y Mei en verdad lo siento

La llamada había terminado y el humor de Yuzu volvió hacer un tanto gris.

-Ahora que paso?

-Kari fue a la oficina de Mei…

-Uh! No me digas que intento pelear por tu amor! Porque si es así apostaría todo mi dinero con Mei, ella pega muy duro.

-No, no creo que Kari fuera a verla para golpearla. Pero si fue para hacer que cambie de opinión supongo.

-Y lo hizo?

-Mei me dijo que tendría que hablar con Saori antes, así que no creo que los planes cambiaran. Pero se escuchaba molesta.

-Pues claro! Adelantaste todos sus planes y no le avisaste, te la pasaste platicando conmigo.

-No lo pensé! La verdad jamás me imagine que Kari fuera a buscar a Mei… y ahora qué hago?

-Buscara a Kari y habla con ella… o puedes huir del país! Lo que se te haga más fácil!

Matsuri lo decía con toda la burla hacia Yuzu que podía tener, básicamente haciendo el trabajo de toda hermana menor que respetara tal titulo y ese era burlarse de su hermana en momentos de desgracia controlada.

-Mmm suena bien! Cuál será el próximo vuelo lejos de aquí?

-Oh vamos no seas cobarde!

-Solo jugaba, jamás dejaría a Mei y Yui.

-Yuzu…

-Dime

-Graba en tu mente y tu corazón esas palabras por favor, no permitas que nada ni nadie las borre.

-A que viene ese comentario?

-Los humanos somos la especie más complicada y compleja que existe en el planeta. Somos los seres pensantes mas "avanzados" en nuestro mundo, pero aun así a veces nos dejamos llevar por nuestros instintos primitivos… nos dejamos guiar por emociones y no por la razón.

-No entiendo

-Lo que quiero decir Yuzu… es que si quieres a esas dos protégelas y lucha por ellas.

-Gracias Matsuri en verdad que gracias! Ahora ire a buscar a Kari. Necesito hablar con ella.

-Cuando quieras ya te dije. Nos vemos pronto? Quiero la actualización de todos los hechos.

-Eso suena a chisme!

-Un poco!

Yuzu se despidió de Matsuri para comenzar a buscar a Kari por la ciudad, si era cierto que eso era realmente initual porque había tantos lugares, tantas personas y Kari no contestaba su teléfono, repaso algunos de los lugares por los que fue con ella y en especial aquellos que mas habían sido del interés de Kari.

Tres horas más tarde, kilómetros de calles recorridas y ninguna señal de ella, el tono de llamada de su teléfono la saco del transe mental en el que se encontraba contesto sin fijarse quien la estaba llamando.

-Kari!

*No, Yuzu, soy Mei… ya viste la hora que es?*

-No, lo siento Mei he buscado a Kari, pero no la encuentro, sucede algo?

*Nada importante… Solo que olvidaste ir por Yui a la escuela, solo eso*

-Rayos! Lo olvide, en verdad lo siento ya voy por ella.

*No es necesario, ya Tori fue por ella, fue la última en ser recogida y esta triste, porque le dijiste que irías por ella*

-Lo lamento en verdad, lo olvide por completo. No volverá a pasar, lo prometo.

*No te preocupes, que de mi hija me encargo yo*

-Mei no lo digas así por favor, no fue mi intención

*Lo entiendo Yuzu, aprovecho la llamada para decirte que saldré de la ciudad. Debido a que decidiste ignorar el acuerdo que teníamos tengo que hablar con Saori antes de que se entere por alguien más y no tenga la oportunidad de explicarle. Ire a verla y obviamente me llevare a Yui conmigo*

-Espera, que!? No puedes hablar con serio, te irías a ver a Saori? Porque no esperar a que vuelva a la ciudad y hablan. Porque tienes que ir, tomaste la decisión antes de hablarlo conmigo.

*Yuzu, te recuerdo que iré con ella para terminar mi relación sentimental con ella, además si hablas de cambiar planes sin consultar, te recuerdo que todo esto es porque tu no pudiste seguir con nuestros planes*

-Ya te dije que lo siento!

*Puedes no levantar la voz? Te escucho perfectamente. Ire por mi hija en 15 minutos para irnos, nos vemos luego*

-Oye no espera! Como que luego, pasaras la noche alla?

*Yuzu no puedo dejar a Yui, ella no duerme si Saori o yo la lleva a la cama y no puedo ir y volver en unas horas así que nos quedaremos allá. Espero encuentres y puedas hablar con Kari y cualquier cosa manda un mensaje*

-No puedo llamarte?

*Creo que es más conveniente que mandes el mensaje*

-De acuerdo, en verdad lamento todo esto y espero regresen pronto. Te quiero Mei

*Y yo a ti Yuzu*

La llamada termino, un pequeño vacio creció en su pecho, todo se había salido de control, en un momento era tan feliz porque Mei también la quería pero en otro momento ella estaba totalmente triste. Ahora Kari estaba en algún lugar de Japón y Mei iría a ver a Saori y ella seguía parada a mitad de la banqueta. Esperando alguna señal divina de que todo podría mejorar. Señal que por lo menos durante los siguientes segundo no llego.

-Nada puede salir peor…