HOLA A TODOS, EMPEZARÉ ESTE CAPÍTULO CON LAS SIGUIENTES FRASES:

#TODASLASVIDASCUENTAN

#JUSTICIAPARAGEORGE

#JUSTICIAPARAGIOVANNI

#JUSTICIAPARAOLIVER

Y PARA TODAS LAS VICTIMAS DEL ABUSO QUE LA POLICÍA COMETE CONTRA LOS CIUDADANOS EN MUCHAS PARTES DEL MUNDO. QUE DESCANSEN EN PAZ.

PERO PASANDO A TEMAS UN TANTO MENOS PEOR, DIGANME ¿CÓMO VA LA CUARENTENA? EN MI CIUDAD YA ABRIERON LA MAYORIA DE LOS NEGOCIOS, PERO CON ESTRICTAS MEDIDAS DE SEGURIDAD Y ES OBLIGATORIO USAR EL CUBRE BOCAS AL SALIR DE CASA.

ESTE CAPITULO ES EL MAS OSCURO DE TODA LA SAGA, CONTIENE ESCENAS VIOLENTAS Y LEMONS EXPLICITOS, DE HECHO, QUIZAS ESTE CAPITULO SEA RATED M.

EL CAPITULO TAMBIEN AVANZA Y RETROCEDE EN EL TIEMPO, ESPERO NO SE CONFUNDAN Y TAMBIEN ESPERO QUE A PESAR DE TODO LES GUSTE.

ELSA-ZOE15: GRACIAS POR TUS PALABRAS, ME DA MUCHO GUSTO QUE A GENTE LINDA COMO TÚ LE AGRADEN MIS HISTORIAS. OJALÁ QUE LA GENTE DE TU CIUDAD TOME CONSCIENCIA ANTES DE QUE SE PROPAGUEN MUCHOS CONTAGIOS.

WILDY STORYTELLER: QUE BUENO QUE TE GUSTARA EL CAPITULO ANTERIOR A PESAR DE LAS PARTES TRÁGICAS, AUNQUE ESTE TIENE MÁS MOMENTOS TRÁGICOS. CREO QUE TE SORPRENDERÁN LOS EVENTOS EN ESTE CAPITULO.

RAVENNA51: POR FIN PODREMOS SABER SI ELSA SE SALVARÁ O NO, CREO QUE LOS ACONTECIMIENTOS POSTERIORES AL MOMENTO EN QUE ESTABA A PUNTO DE SER SACRIFICADAS SERÁN UN GIRO INESPÉRADO.

TAMAR LA LOCA: QUE BUENO QUE ESTÁS SIGUIENDO LAS RECOMENDACIONES PARA EVITAR CONTAGIARTE Y DIOS QUIERA QUE EN TU CIUDAD SIGAN SIN CASOS COMO HASTA AHORA. BENDICIONES Y SALUDOS.

JMFCSEDDIE: PERDON POR LA DEMORA, PERO CREO QUE EL CAPITULO VALDRÁ LA PENA

SARADESTYLES: ESPERO QUE TE GUSTE EL CAPITULO DE HOY, DE HECHO TU COMENTARIO ME INSPIRÓ EN HACERLO MÁS COMPLEJO.

AVATAR25: GRACIAS POR TUS PALABRAS, QUE BUENO QUE TE ANIMASTE A COMENTAR, YO TAMBIÉN ME CONMOVÍ MIENTRAS ESCRIBÍA EL CAPÍTULO, SOBRE TODO CON LA ESCENA DE QUE ELSA VA A ARENDELLE A DEJAR TODO LISTO PARA SU FUNERAL. SOBRE TU PREGUNTA, PEDÍ INFORMES EN UNA ESCUELA DE ESCRITORES Y LA VERDAD SI ME GUSTARIA ESCRIBIR MÁS COSAS.

CARLIIZZ: SALUDOS, YA POR FIN PODRÁS SABER QUE SUCEDIÓ LUEGO DE TANTO SUSPENSO.

ESTEFANA 160: BIENVENIDA, QUE GUSTO TENERTE POR AQUI. QUE BUENO QUE TE GUSTEN MIS HISTORIAS, OJALÁ SIGAS COMENTANDO Y OJALÁ TE AGRADE EL FIC DEL PRINCIPE DEL HIELO, TIENE MUCHAS AVENTURAS. TE MANDO UN SALUDO DESDE MÉXICO.

AHORA VAYAMOS AL CAPITULO DE HOY:

Es de noche y dos hombres corren por el desierto, apenas iluminados por la luz de la luna.

"No estuvo nada mal la noche, conseguimos varias joyas"

"Y que diversión tuvimos con esas perras ricas, no cabe duda que esta noche es digna de celebrar"

Luego de asegurarse de que nadie los persigue, ambos se ocultan dentro de una cueva.

"Hora de contar el botín"

"Eso ya será mañana, ahora vamos a dormir"

"¿Cómo puedes pensar en dormir en un momento como este? ¿Qué no ves que estamos en la mejor noche de nuestras vidas?"

"Y está a punto de ponerse mejor" dice una tenebrosa voz oculta en la oscuridad.

"Mira amigo... no sé quién seas... pero no te conviene meterte con nosotros" dice uno de los tipos sacando su arma, pero sin saber a dónde apuntar.

"Ustedes sobrevivieron y tantos otros no fueron tan afortunados" dice el misterioso acechándolos como a unas presas "Encontraron la muerte tras una terrible agonía a causa de ese maldito virus"

"Eso no fue nuestra culpa" Dijo uno de los bandidos

"Así es... el Dr. Jess murió hace años" Agregó su compañero de fechorías

"Él tenía ambición igual que ustedes y su ambición lo llevó a cometer actos viles... igual que ustedes"

"¿Y qué vas a hacer al respecto? ¿Llevarnos a prisión?"

"Tengo un lugar mucho mejor a donde los enviaré a los dos… Al infierno"

Por fin el desconocido sale de la oscuridad, y se muestra a la luz, se trata de un hombre de pasados 20 años, el cual tiene su platinado cabello muy corto y usa un traje de combate color negro. Su rostro se ve endurecido y sombrío por haber sufrido mucho y tener muchos deseos de venganza.

"¡Es el demonio de hielo!" exclaman sus víctimas reconociéndolo de inmediato.

Ante esto, los cuatro rufianes disparan contra el joven, pero este detiene las balas con una barrera de hielo, para después deshacerla y convertirla en filosas cuchillas, las cuales les arroja a los criminales, causándoles heridas severas.

"Maldito... vienes a matarnos por nuestras fechorías... pero no ves que tú también eres un criminal... no muy diferente a nosotros"

"Es por eso que algún día también mereceré la muerte igual que ustedes, pero ese día solo llegará una vez que me haya librado de todas las escorias como ustedes"

Y diciendo esto, el antes elegido, apareció una espada de hielo y decapito a los rufianes.

Durante el enfrentamiento, al joven justiciero se le cayó algo, lo cual se apresuró en recuperar, se trataba de una especie de relicario que tenía el retrato de alguien. Lo sostuvo por unos instantes contemplando el daguerrotipo que tenía impreso el rostro de la Reina Elsa, antigua gobernante del casi extinto reino de Arendelle.

"Y pensar que nadie nunca se enteró del gran sacrificio que hiciste, mamá" Pensó el joven

Andy guardó entre sus ropas aquel relicario para después salir de la cueva como si fuera huyendo de sus propios pecados, comenzaba a amanecer y debía abandonar la escena del crimen antes de que los guardianes mágicos pudieran seguir sus huellas.

"Acabas con los criminales" escuchó una voz familiar a sus espaldas "Como si tus acciones le fueran a permitir a este lugar ser mejor algún día"

"Veo que otra vez me encontraste"

"¿Qué puedo decir? Soy la mejor siguiendo rastros" dijo la cazarrecompensas Ventress acercándose.

"No cabe duda que cambiar de bando es algo muy sencillo... yo que antes fui el elegido y dedicaba mi vida a salvar a todos aquellos que me necesitaran... soy ahora el criminal más buscado sobre la tierra"

"Y yo que solía ser una doble cara que se iba con el mejor postor sin molestarle lo que tuviera que hacer para conseguir mi pago... ahora soy quien viene a detenerte y llevarte de regreso a casa"

"Hablas como si lo tuvieras tan sencillo"

"Sé que no, pero hay cosas que no cambian, no importa en qué bando te encuentres y rendirme sin dar batalla no es una de mis cualidades"

"Eso es algo que tenemos en común"

Andy recubre su mano con hielo e intenta golpear a la cazarrecompensas, pero esta esquiva su ataque, para después dispararle rayos con sus ojos, los cuales, el joven esquiva rodando por el suelo.

Ambos se enfrascan en una feroz batalla, los dos son expertos en combate y la pelea está muy pareja.

El muchacho le dispara un rayo congelante, pero ella detiene el disparo con uno de sus rayos de calor, ambos rayos chocan. Los dos combatientes se esfuerzan por vencer el rayo del otro.

Al ser el calor y el hielo unos elementos opuestos, ambos rayos provocan una explosión que los hace salir volando algunos metros.

Cuando el vapor se disipa, Ventres descubre que Andy ha desaparecido sin dejar rastro.

Mientras tanto, lejos de ahí, en una habitación llena de recortes de periódicos, revistas, libros, pócimas, tubos de ensayo y calderos, una joven pelirroja de unos 20 de años de edad se hallaba estudiando unos libros bastante antiguos.

"Mi última investigación estuvo muy cerca" dice mientras revisa cuidadosamente unas anotaciones que hizo "Con el nuevo antídoto, mi último paciente no tuvo tanto dolor como el resto... aunque, no pude evitar su muerte... pero eso no significa que sea una derrota... más bien significa que estoy cerca de conseguirlo... solo espero que aun quede tiempo"

"¿Sigues hablando contigo misma?" le pregunta una mujer pelirroja y elegante con cabello recogido y una corona en la cabeza. "Últimamente lo haces bastante seguido, si no es que a diario"

La recién llegada tiene unos 44 años y su cabello muestra algunas canas, su expresión es triste y demacrada.

"Oh, hola tía Anna. No estaba hablando sola, estaba diciéndoselo a Pandita ¿viste que mi última formula por lo menos le alivió el dolor a Joan?"

"Sí y te felicito" le dice Anna "Tus esfuerzos valieron la pena, pero es solo que me preocupa verte encerrada todo el tiempo, obsesionada con solucionar algo que... por desgracia... parece no tener solución"

"Estoy muy cerca de lograrlo, ya verás, los 10 años que llevo investigando no van a ser en vano"

"Helena... Sabes bien que eres la princesa heredera al trono de Arendelle y tienes que prepararte para cuando llegue el momento de que yo ya no pueda regir el reino"

"¿Cuál reino? Arendelle está a punto de desparecer en el olvido"

"Helena... no seas tan cruel" dice Anna sin poder contener el llanto

"Lo siento" dice Helena abrazándola "No quise decir eso, estoy muy agradecida de que me hayas criado... luego de que perdieras a tus hijas y yo a mis padres... pero hay que ser realistas... cada día que pasa nuestro número de súbditos se reduce de manera alarmante y desgraciadamente... así es en el resto del mundo"

"Lo sé... pero no hay nada que podamos hacer para evitarlo"

"Puede que sí... tal vez si podríamos ser la diferencia entre la vida y la muerte... es por eso que no voy a rendirme hasta encontrar una verdadera cura"

"Eres admirable Helena... tus padres y tu madrina estarían muy orgullosos de ti"

"Gracias"

"Yo también quiero poner de mi parte ¿hay algo en lo que pueda ayudarte?"

"Veamos, acabo de reunir todos los ingredientes de la lista original y también los nuevos ingredientes que descubrí tienen un mayor efecto... mmm... podrías estar al pendiente de mi conjuro localizador"

"Pero no puedes reunir los cráneos y lo sabes... el cazador antes de morir por la peste se encargó de destruirlos todos"

"No es para localizar los cráneos... ya no... este es un conjuro mucho más poderoso, el cual no se detendrá hasta encontrar el ingrediente faltante"

"Suena como tú... ¿Qué ingrediente es ese?"

"Uno casi imposible de encontrar... Gliaak"

"Nunca escuché ese nombre... pero ¿no crees que hubiera estado mejor que utilizaras este conjuro para encontrar a tu hermano"

Ambas se entristecen de recordar a Andy, hacia casi 10 años que el muchacho había elegido esa vida, luego de perderlo todo, a su madre, cuyo corazón era el ingrediente principal para el antídoto y a su padre y novia, víctimas de la guerra.

"Ya tengo a alguien que se está encargando de buscarlo" dice la sabionda volviendo a sus libros "Estoy segura de que lo traerá de regreso... solo es cuestión de tiempo"

En eso, una esfera de cristal comenzó a brillar emitiendo un sonido, como si se tratara de un mensaje recibido por algún aparato móvil.

"¿Qué es eso?" pregunta Anna desconcertada

"Es hora de la junta" dice Helena activando aquel comunicador mágico

Y de inmediato a través de hologramas, aparece un grupo de personas frente a ella.

"Y abordamos el hidroplano que se veía sospechoso que detectaste, tal como nos dijiste" Dijo un holograma de Bobba Fett, el antiguo cazarrecompensas "Era sólo un transportador de basura muy apestosa, por cierto. Gracias por enviarnos ahí"

"Ustedes estaban cerca" Les dijo la joven pelirroja

"Sí, y ahora apestamos a verruga de troll siendo que nos hemos bañado cientos de veces"

"¿Qué hay de los temblores?" Preguntó Helena

"Fue una subducción menor bajo la placa africana" Le respondió el holograma de una mujer de cabello castaño, de unos 25 años que llevaba puesto un traje de combate.

"Hay que idear un plan de cómo vamos a arreglarla"

"No debemos intervenir, es un temblor bajo el océano. Se va a arreglar no arreglándolo" Le explicó la joven, que era Birgit.

"¿Tienen el conteo de los infectados de hoy?"

"Se han contabilizado 100 casos más el día de hoy en todo el planeta" Dijo un joven de 25 años y cabello negro, que llevaba unas gafas sobre su cabeza "La pandemia ya supera los tres millones contagios a nivel mundial"

"¿Siguen las medidas de seguridad?"

"Desde hace 10 años que la gente no conoce otra cosa" Dijo el joven, que era Varian el inventor "Usar cubre bocas al salir, lavarse las manos frecuentemente, no saludar de mano o beso... Todo eso lo saben de memoria... Los niños que nacieron después ya no saben lo que es ir a un parque de diversiones o una fiesta de cumpleaños, todos los eventos masivos están prohibidos"

"Lo sé, ese fue un día fatídico" Dijo la pelirroja suspirando con tristeza. "Todo era mucho mejor antes... ¿Qué hay de Ken? ¿Alguna mejora?"

"Ninguna" Le respondió el holograma de un joven de unos 25 años, rubio con barba y bigote corto "Ya entró en la fase terminal, es sólo cuestión de horas"

"Otro más de nuestros queridos amigos" Dijo Birgit

Esto provocó un incómodo silencio.

"Bien, este canal siempre está activo" Les dijo la sabionda "Entonces, si algo no sale bien o les dan problemas en algún lado. Avísenme"

"De acuerdo" dijo Varian

"Muy bien" Agregó Bobba

"Suerte" dijo Birgit cortando la comunicación

Todos colgaron menos el rubio, que era Ed.

"¿Dónde estás?" Le Preguntó Helena

"Texas" Respondió él "Ventress me llamó. Esta vez se trató de un par de bandoleros. Una verdadera carnicería. Ella estuvo a punto de vencerlo, pero escapó... ¿Hasta cuándo va a seguir matando gente?"

"Vamos Ed, no son ningunos inocentes, son la escoria de la sociedad. Sólo mata a aquellos que son un peligro para los demás, jamás lastima a los inocentes"

"Aun así, hasta el más malvado merece un juicio justo. No podemos hacer justicia por mano propia, matar está mal"

"No podemos juzgarlo Ed... Tú sabes perfectamente cómo estuvieron las cosas"

"No creo que eso sea siga siendo una justificación"

"¿No te parece suficiente motivo qué su madre fuera sacrificada de una forma espantosa y dolorosa para hacer un antídoto que no fue del todo efectivo?"

"El antídoto era bueno" Dijo Ed "Pero el virus ya se había esparcido desde que el Dr. Jess estaba haciendo sus experimentos"

"Todo nos tomó por sorpresa, nadie nunca nos advirtió. No había antecedentes ni parámetros. Hicimos lo mejor que pudimos dadas las circunstancias"

"Hubo muchas bajas... Todos perdimos a alguien ese día. Por eso es que él quedara huérfano no puede justificarlo por siempre de todo lo que ha hecho. Tú perdiste a tus padres, yo perdí a Angelita y a mi hermanito menor, Birgit perdió a su madre, la princesa Anna perdió a sus hijas…"

"Lo sé, Ed... No todos reaccionamos de la misma forma... En gran parte la reacción de mi hermano se debió a la impotencia de que no pudo proteger a sus seres queridos... siempre sintió la responsabilidad de proteger a su madre y al no poder hacerlo... además de pensar que le falló a todos y cada uno de los que creíamos en él... fue demasiado para soportarlo y desgraciadamente eligió un camino que no debió haber recorrido jamás"

"En cierta forma si nos falló, nos abandonó cuando más lo necesitábamos y cada nueva fechoría que comete nos falla cada vez más y no solo a nosotros, sino también al recuerdo de su madre"

"No es correcto lo que él hace, sé que debemos detenerlo, pero sinceramente hay una parte de mí que no quisiera encontrarlo"

"A mí me pasa igual. Cielos ¿Por qué no podemos derrotarlo cómo a cualquier criminal?"

"Porque él no es cualquier criminal. Es Andy, era de los nuestros, era nuestro amigo. Y aunque sea un asesino y parezca haber perdido la razón, Andy aún es mi hermano. Es el único miembro que me queda de mi familia"

"Te entiendo. Sé perfectamente por lo que estás pasando... Sé que es tu hermano, y durante muchos años fue como un hermano para mí. Pero lo que hizo aquí, lo que ha estado haciendo los últimos años. Helena, si hubieras visto como quedaron los cuerpos"

"Por eso tenemos que traerlo de vuelta ¿Qué otra cosa podemos hacer por él?"

"Supongo que comprenderlo"

"Así es... me alegra que nos entendamos por fin..." dice la sabionda suspirando "Esto ha sido tan complicado, todos tuvimos que madurar tan rápido... algunos antes de tiempo"

"Pero a pesar de todo, no importa cuánto nos esforcemos... es imposible dejar el pasado atrás"

"Es casi imposible... Desde ese día, mi vida ha girado en torno a hallar la cura, y hacer que todo vuelva a la normalidad"

"Si es que aún se puede hacer"

"Cualquier cosa es mejor que lo que tenemos ahora. Por eso, aunque no haya sido un éxito rotundo, el antídoto que hice la última vez fue mejor que cualquier otro que haya hecho antes"

"Sí, me sorprendió bastante"

"Por eso continúe la investigación de toda mi vida y creo que por fin lo tengo, una de las piezas claves para que este antídoto funcione bien es la roca de Gliaak"

"¿Gliaak? Eso no me suena a ningún elemento de la Tierra"

"Eso es porque no se encuentra en la Tierra"

"¿Qué?"

"Que para conseguirlo tenemos que aventurarnos a otro planeta"

"¿Y qué otro planeta sería ese?"

"No lo sé aun... pero tengo un conjuro que lo averiguara muy pronto"

Ensimismada en sus pensamientos, Anna apenas escuchaba la conversación de Helena y sus compañeros, mientras vigilaba el conjuro que la iluminada le había encargado, el cual cada 10 segundos emitía un singular pitido.

La reina de Arendelle se encontraba tan sumida en la nostalgia, recordando cuando tenía una familia feliz y lo que daría ahora por regresar a aquella época tan maravillosa. Que no se dio cuenta de que aquel peculiar sonido del conjuro se había detenido, hasta que este comenzó a brillar con intensidad.

Volviendo a la realidad, Anna se dio cuenta de lo que eso significaba, el conjuro había encontrado el ingrediente faltante.

"¡Helena!"

"Te dejo Ed" dice la sabionda cortando la comunicación "Tengo algo muy importante que atender"

"¿Ya lo encontró?" preguntó Anna

"Lo tenemos" dijo la sabionda usando su magia para convertir aquella energía en un plano que les indicaría el camino que debían de seguir "Estamos a punto de presenciar un milagro"

"Dime ¿Qué necesitas?"

"Necesito un equipo"

Lejos de ahí, en un lugar inhóspito y congelado, se alzaba una fortaleza de hielo, que era la nueva guarida de Andy, en lo más profundo de la Antártida, el lugar con las más bajas temperaturas del mundo. El intenso frío impedía que se pudiera formar cualquier forma de vida, no había personas, animales ni plantas, pero a él el frío no le afectaba en lo más mínimo.

El joven acababa de pescar una buena cantidad de peces y al entrar en su guarida, se dirigió a un muro de hielo, donde tenía cientos de marcas y agregó 4 marcas nuevas.

"Esta noche el aire estará menos viciado con 2 escorias menos"

"Soldado Anders, me alegra que haya podido regresar. Me tenía con pendiente" Dijo el soldado de nieva acercándose.

"No veo razón, Capitán. Esos rufianes no podrían hacerme daño por más que lo intenten"

"Pero ¿Hasta cuándo seguirá haciéndola de justiciero?"

"Hasta que el mundo sea un lugar seguro para la gente buena. Sin ladrones, violadores o asesinos"

"Quizás de eso podrían encargarse las leyes de cada país"

"No hay justicia en este mundo capitán, mandarlos a prisión a que vivan cómodamente mientras son mantenidos por gente de bien que paga impuestos no me parece un castigo suficiente"

"Pero ¿No extraña su hogar? tenía la esperanza de que pronto volviéramos"

"¿Volver a Arendelle? No creo que sea buena idea. Ya no encajaría allá"

"Pero a pesar de todo, usted es el rey"

"Capitán, no tendremos esta discusión de nuevo. No soy el rey. La reina es mi tía Anna"

"Pero sólo porque usted renunció a su derecho por nacimiento de ser el rey"

"Tal vez iba a ser el rey, pero eso fue hace mucho tiempo. Y las cosas cambiaron"

"Todos sus dones, toda su inteligencia y la desperdicia viviendo una vida de bandolero... Ay ¿Qué diría su madre?" Dijo el soldado de nieve exasperado

"No lo sé. Ella ya no está. Murió hace 10 años ¿Lo olvida?"

"Ojalá pudiera"

"Si mi madre viviera entendería que todo lo hago por la memoria de ella y todos los seres queridos que perdimos en esos días. Ella era una santa, y yo solo le di problemas"

"No diga eso, ella estaba muy orgullosa de usted. Sus travesuras eran cosas de muchachos, todos los chicos se meten en líos. Algo de rebeldía, algo de aventura, es necesario y sano también"

"Sólo espero que siga orgullosa de mí y comprenda que también hago esto por proteger lo que queda de mi familia. En los países que he limpiado, los niños ahora viven en un lugar más seguro, las mujeres pueden caminar más fácilmente sin temor en la noche"

"Pero ¿Qué hay de sus amigos?"

"¿Qué hay con ellos? Cumplirán con su deber como siempre han hecho, a pesar de las adversidades... de eso estoy muy orgulloso de ellos, y espero nunca tener que enfrentármeles, aunque han estado muy cerca de capturarme, son unos adversarios formidables y muy dignos de respeto"

Después, usando las habilidades como montañés que su tío le había enseñado cuando era niño, el joven se puso a cocinar. Mientras la comida estaba lista, se sumió en sus pensamientos y no tardó en recordar el peor día de su vida.

FLASHBACK

Él se hallaba aislado recuperándose del virus y fue a visitar a Rose a su habitación.

"¿Cómo sigues, Rose?" Le preguntó Andy a su novia

"Aún estoy muy débil ¿Y tú?"

"No he recuperado mis poderes del todo, pero pronto lo haré y volveré a patearle el trasero a los malos"

"Creí que íbamos a morir"

"También yo, vaya que la vimos cerca"

"Pero como te dije. A tu lado he tenido una vida más feliz de lo que jamás soñé"

"Y todos los años que nos quedan por delante. Ahora me voy para dejarte descansar"

El chico volvió a su habitación y se hallaba acostado en su cama leyendo una historieta. Cuando su lectura fue interrumpida por ruido de voces y discusión.

"No pueden entrar aquí, esto es un hospital" Dijo el médico

"¿Cree que no sabemos que aquí se ocultan enemigos nuestros?"

"Aquí solo hay gente enferma. Sólo escorias como ustedes se atreverían a atacar soldados indefensos y enfermos"

Dándole un fuerte golpe, uno de los soldados lo hizo rodar por el suelo.

Antes de que Andy en su débil estado pudiera reaccionar, vio como varios soldados separatistas irrumpían en aquel lugar y comenzaban a revisar puerta por puerta.

Aún con la pijama puesta, Andy salió de su cuarto y corrió hacia la habitación más cercana, que era la de su hermanita.

"Sabionda, despierta"

"Aum ¿Qué sucede Andy?"

"Tienes que salir de aquí"

"¿Ya me dieron de alta?"

"Shhhh...Nos están atacando" Dijo él haciendo que ambos se escondieran bajo la cama

"¿Quién?" Susurró ella

"Los separatistas"

"Hay que darles su merecido"

"Olvidas que nuestros poderes aún no funcionan, ellos tienen armas, nos matarían"

"¿Qué hacemos entonces?"

"Por lo pronto, voy a sacarte de aquí"

"¿Y qué hay de ti?"

"Yo voy a ir por Rose"

Los soldados pasaron sin reparar en la presencia de los chicos. Andy salió de su escondrijo y se aproximó a la ventana.

"Tendrás que saltar sabionda"

"¿Estás loco? Son 3 pisos, sin poderes me podría lastimar"

"Justo bajo tu ventana hay una carreta de paja, será como caer sobre una almohada. En cuanto caigas te vas corriendo a toda velocidad, y no importa lo que pase o escuches, no vuelvas por mí"

La sabionda se subió a la ventana y miró hacia abajo sintiéndose un tanto mareada por lo débil que estaba aún a causa de la enfermedad y la altura, pero antes de que pudiera reaccionar, su hermano la empujó.

"¡Ahhhh!" Gritó la sabionda cayendo sana y salva sobre la paja

Por su parte, Andy había empujado a su hermanita al ver que los atacantes venían y era cuestión de segundos que los descubrieran. Una vez que la sabionda estuvo a salvo cerró la ventana por la que había saltado.

"Hey, miren quien está aquí" Dijeron los soldados

"Si es ese engendro de hielo" Agregó otro

"Supimos que te quedaste sin poderes"

Y diciendo esto, los soldados le echaron mano, aunque Andy logró defenderse lo mejor que pudo.

"¿Eso es todo lo que tienes?" Le preguntó uno de los tipos

"No eres tan rudo sin tus poderes ¿O sí?"

"No los necesito para darles una paliza" Rezongó el chico

Pero esta vez, por más que fanfarroneara, estaba en desventaja, él era apenas un chico y se hallaba débil por su enfermedad y desarmado. Sus atacantes lo superaban en número y estatura, estaban en perfecto estado de salud y tenían armas. Así que le dieron una buena golpiza.

"¡Ahhh! ¡Auxilio! ¡Andy!" escuchó la aterrada voz de su novia

A pesar de sus lesiones, el chico logró zafarse de sus agresores.

"¡Rose... resiste!"

El chico con dificultad y con la visión un tanto nublada por la sangre que le escurría por el rostro logró correr por el pasillo hacia el cuarto de Rose.

Al entrar se horrorizó al ver que uno de aquellos soldados acosaban a su novia.

"Que guapa eres" Le dijo uno de los tipos acercándosele

"Así se hace" Le echó porras su compañero

"¡Suéltame!" Exclamó ella golpeando a aquel tipo

Pero éste le devolvió el golpe.

"¡Quita tus manos de encima de ella!" Gruñó el chico

Pero uno de los soldados le dio un fuerte golpe en el estómago haciéndolo caer de rodillas doblándose del dolor

"Miren cómo le gusta" Dijo uno de los soldados a sus compañeros mientras acariciaba con brusquedad a la chica

"Nos vamos a divertir mucho"

"Creo que lo quiere hacer también conmigo" Dijo otro de los tipos

Andy intentó ayudarla y atacó a sus oponentes, pro éstos lo sometieron mientras los demás malvados desnudaban a su novia sin que él pudiera evitarlo. La cazadora se hallaba aún muy enferma como para defenderse.

"¡Andy... ayúdame!"

"¡Rose...Nooo... suéltenme!"

El chico forcejeaba e intentaba librarse de sus captores sin éxito. Así que tuvo que cerrar los ojos para no ver como aquellos malvados violaban a su novia en grupo.

Uno de los tipos tomó con ambas manos los pechos de la chica y apretó ambos, se metió un pecho a la boca, los lamia fieramente, su compañero saboreó el otro pecho, un tercer tipo le bajó sus pantaletas y lamía su intimidad.

Su contacto la quemaba, eran bruscos y rudos con la pobre chica. Luego de tan salvajemente saborearla todos se bajaron los pantalones. Uno de los tipos la aventó al suelo, abrió sus piernas y la penetró de una fuerte estocada.

"¡Ahhhhhhhhhhh!" Gritó la chica

El miembro de este era mas grande que el de Andy, pues era un hombre adulto.

La embestía con tanta rapidez que ella gritaba, le dolía mucho, luchaba por quitárselo de encima pero él era mas fuerte, lloraba por ser profanada de esa manera. Este tipo terminó dentro de ella y de uno en uno se divirtieron violándola.

Vilmente la disfrutaban sin importarle el estado crítico que tenía, después cada uno intimó individualmente con ella y cuando oponía resistencia era maltratada. Luego volvieron a tomarla, pero ahora de a tres.

Ella no quería estar consciente pero aun lo estaba, se sentía inmunda al ser violada por esos hombres, los cuales cambiaron de posiciones unas cuantas veces. Succionaban sus pechos dejándolos con marcas dolorosas, eran salvajes y cuando se resistía de algo la golpeaban, apenas si la dejaban respirar

"Ya no, por favor" Suplicaba la cazadora bañada en llanto

"¡Ya basta! ¡Ya déjenla!" Gruñó Andy también bañado en llanto pero furioso

"Ahora nos las pagarás todas juntas, mocoso" Dijo uno de los soldados abofeteándolo

"Imaginen la jugosa recompensa que nos darán por eliminarlo" Agregó otro jugando con el filo de su espada "Veamos si le sale sangre azul"

Pero antes de que pudieran hacerle daño, una espada se interpuso y Andy vio que se trataba de su papá que llegaba en su auxilio.

Aunque el pelirrojo estaba también débil por la enfermedad, se enfrentaba a esos malvados lo mejor que podía.

Andy también luchó dándoles golpes y patadas, pero uno de los soldados golpeó al chico con el mango de su espada y todo se puso negro.

El elegido no supo cuánto tiempo estuvo inconsciente, pero despertó en su recámara en el Castillo de Arendelle, velando su sueño, estaba su tía Anna, la cual vestía un atuendo de luto y tenía los ojos rojos por el llanto.

"¡Rose... papá!" Exclamó Andy enderezándose angustiado

"Tranquilo Andy, ya estás a salvo"

"¿Qué sucedió?"

"Debes calmarte, aún estás débil"

"¿Dónde está Rose? ¿Dónde está mi papá? ¿Están bien?"

"Ahora necesitas descansar" Dijo ella intentando hacer que se volviera a acostar

"¿Qué pasó con ellos? Por favor... dime que están bien"

"No te alteres, te puede hacer daño"

"¿Cómo no voy a alterarme si no me dices qué está pasando? Quiero ver a Rose y a papá"

"Andy, debes ser muy fuerte"

"Dime que están bien, dilo" Sollozó el chico

"Ellos... No lo lograron"

"No... no... no... Eso no puede ser cierto"

"Lo siento mucho Andy, los soldados de Baybiron llegaron a auxiliarlos, pero las tropas separatistas eran demasiados"

"¡No es cierto! Debe ser un error"

"Ojalá lo fuera, Andy... pero desgraciadamente es la verdad"

"¡Nooo!" Gritó Andy retorciéndose "¿Y la sabionda? ¿Lo logró?"

"Ella está bien, logró escapar ilesa del ataque"

"¿Ya sabe lo de papá?"

"Ya... y también está muy triste y afectada... Andy... hay algo más que debes saber"

Angustiado y bañado en llanto el chico miró a su tía desconcertado.

"Tu madre..."

"¿Ella está bien?"

"Ella... ella murió..." Respondió su tía dando rienda suelta a su llanto

"No... eso no puede ser verdad"

"Desgraciadamente lo es, Andy... Lo lamento mucho"

"¡Noooo por favor no! No puede ser ¡No Dios mío! ¡Mamá, mamá!"

"Andy cálmate... todos estamos pasando por lo mismo"

Su tía lo abrazó y ambos lloraron por un largo rato.

"¡No mi mamá... tía Anna! ¿Por qué? ¿Por qué?"

"Son cosas que no podemos remediar Andy, cosas que desgraciadamente suceden... Yo tampoco podría creerlo, no quería creerlo... Ella era una gran persona, pero nos dejó... nos dejó muy pronto"

"No es justo... la gente buena no puede morirse"

"La muerte forma parte de la vida"

"Ojalá no lo fuera"

"Sé cómo te sientes Andy, yo también perdí a mi mamá cuando tenía tu edad"

"No la perdí... me la arrebataron" Dijo Andy sombríamente "¿Fueron los separatistas?"

"No... el antídoto que te ha salvado la vida, necesitaba como ingrediente principal... el corazón de un portador de hielo... el corazón de tu madre... Ella aceptó dar su vida para poder hacer el antídoto y salvarte, salvarlos a todos"

"¡Nooooo! Debió haber otra salida"

"No, Andy... No había otra forma... El tiempo se agotaba"

"Ni siquiera pude despedirme"

"Yo tampoco"

"No pude decirle una última vez cuanto la quería"

"Ella lo sabía Andy y te adoraba... por eso aceptó sacrificarse por ti"

"Tal vez si yo nunca hubiera nacido ella seguiría con vida"

"No digas eso Andy... recuerda que antes de que tú nacieras tu mamá había pasado casi toda su vida encerrada. Tú llegaste a iluminar su vida como un rayo de luz, le diste sentido a su vida cuando más la necesitaba"

Andy sollozó un largo rato consolado por su tía. Y más tarde, a través de un portal mágico, Anna acompañó a Andy al castillo de hielo, donde habían puesto los cuerpos de Elsa, Hans y Rose para conservarlos en espera de su funeral.

Andy se acercó y contempló los cuerpos de sus seres queridos. Su madre se hallaba elegantemente vestida y su semblante parecía tranquilo, su rostro se veía sumamente pálido, casi blanco. El maquillista había hecho un excelente trabajo arreglándola, parecía que más bien estaba profundamente dormida.

"No fui lo suficientemente fuerte para salvarte, mamá. No fui lo suficientemente fuerte. Pero te juro que no volveré a fallar"

Y abrazándose a su madre, Andy dio rienda suelta a su llanto.

"¡Mamá... mamá! ¡No puedes irte! ¡No puedes dejarme!"

Avanzó a la siguiente cama, sobre la que yacía Hans.

"Papá... no papá ¿Ahora qué hago sin ustedes? Sólo soy un chico... necesito de su guía, de sus consejos... me van a hacer mucha falta"

Por último, se dirigió a la cama sobre la que yacía Rose.

"Mi amor" Dijo Andy al ver el cuerpo de su novia "La muerte que ha robado el aliento de tu cuerpo, no ha tenido poder sobre tu belleza"

"Andy, también debes saber que perdimos a Olaf y Sussy, sin la magia de tu madre ellos no pudieron seguir existiendo"

"Ellos eran como unos hermanos para mí"

Abrazado al inerte cuerpo de la cazadora, de pronto tuvo un destello de odio encendiéndose dentro de él, como si en un segundo pasaradel llanto al odio y furioso, el chico exclamó.

"Todo esto es culpa del Dr. Jess... pero no te preocupes, tía... Lo haré pagar, a él y a todos los responsables... Juro que me la pagarán"

"Andy ¿A dónde vas? Recuerda que aún no estás bien del todo"

"Voy a matar a Jess"

"Andy no, no debes hacer justicia por tu propia mano... Tú no eres un asesino"

"¡Suéltame, tía Anna!" Gruñó Andy

Y la princesa notó que una capa de escarcha había cubierto sus manos que intentaban sujetarlo, al parecer su sobrino estaba tan enojado que de algún modo esos sentimientos eran el catalizador que necesitaba para recuperar sus poderes. Esto la hizo retroceder.

"Ha muerto mamá y es por causa de ese monstruo y yo debo vengarla"

"Yo sé lo que sientes, pero no sería correcto que lo mates"

"Esto es algo que debo hacer... Debo vengar a mis padres y novia, un hombre no se quedaría aquí sin hacer nada"

"Andy, te lo suplico. Debes pensar con claridad antes de hacer algo de lo que después te arrepientes. Recuerda que ahora tú eres el rey"

"¿Y si no quiero serlo?"

"Es para lo que te has preparado toda tu vida, siempre supiste que este momento llegaría"

"Yo jamás podría llenar el trono vacío que dejó mi madre"

"No digas eso, hasta que cumplas 21 yo estaré legalmente a cargo de Arendelle, pero tú ya eres el rey y te juro que haré mi mejor esfuerzo por guiarte. Yo tengo fe en ti... Elsa tenía fe en ti"

"Lo siento, tía Anna. Arendelle se merece sentado en ese trono a alguien que sepa lo que hace y ese alguien no soy yo... Eres tú... Por favor perdóname, pero aún no estoy listo para ser rey... No ahora... tal vez nunca... Adiós..."

Y diciendo esto, rápidamente el chico se apoderó de una mochila que contenía un libro de hechizos y algunas pócimas mágicas y cruzó el portal hacia Baybiron.

"¡Andy... no!" Exclamó Anna sin poder detenerlo

En cuestión de segundos, Andy llegó a Baybiron donde se encontró con un ambiente de luto.

"¿Qué ha pasado?" Le preguntó a un sirviente

"La princesa Liv acaba de fallecer a causa del virus"

"No..." Sollozó Andy "¿Liv también?"

Imaginar que su querida hermanita sufriría lo mismo que él cuando se enterara de que también era huérfana, lo hizo explotar de rabia y sin poderlo evitar ocasionó un invierno eterno en Baybiron. Cumpliendo sin querer la advertencia que años atrás le hiciera aquel misterioso monje a la reina Astrid.

Aquello era un caos, enfermos por todas partes, gente muriendo por el virus. Furioso, Andy se abrió paso hasta el calabozo, donde estaba aprisionado el Dr. Jess no le importaba contagiarse, solo le importaba lograr su venganza.

"¡Vas a pagar por lo que has hecho!" Le gritó Andy a Jess con los ojos rojos "¡Me quitaste a quienes más amaba!"

Y antes de que el villano pudiera decir algo, el chico lo atravesó con varias cuchillas de hielo, para luego hacer que las mismas lo despedazaran. Y después, furioso y cubierto de sangre, se reunió con los soldados de Baybiron.

"¿Dónde están los atacantes separatistas?"

Los hombres se sorprendieron al ver el estado en que se hallaba el chico lleno de sangre y con un aire maligno.

"Se fueron hacia el norte"

Con esta información el chico se alejó y deslizándose sobre el hielo se lanzó en persecución de los soldados separatistas que los habían atacado.

Avanzó hasta el anochecer siguiendo su rastro y los encontró en la orilla del río, habían acampado para pasar la noche ahí.

Se acercó sigilosamente a unos soldados que se hallaban alrededor de una fogata y los espió por unos momentos, reconociendo a dos de los tipos que habían abusado de su novia.

"Brrr, que frío se soltó de repente" Le dijo uno de ellos a su compañero

"Sí ¿Puedes creerlo? Una nevada en pleno mayo, no cabe duda que esos engendros de hielo son sumamente peligrosos"

De pronto, Andy saltó aterrizando tras ellos y sin que tuvieran tiempo de desenvainar su espada los decapitó con una cuchilla de hielo.

Al ver esto, se corrió la voz de alarma y los soldados intentaron defenderse, pero no fueron rivales para los poderes y furia del chico, el cual los mató a todos.

Algunos de sus atacantes, yacían ahora postrados en cama, debilitados por la enfermedad como para defenderse. Pero esto poco le importó, ellos no habían mostrado compasión cuando lo golpearon salvajemente y violaron a su novia. Así que él tampoco fue compasivo con ellos y sintió una gran satisfacción al dejar aquel campamento sin un solo sobreviviente, por fin había vengado a sus seres amados.

Pero ¿Cuántas personas no obtenían justicia en este mundo? ¿Cuántos veían a los asesinos de sus hijos o a los violadores de sus hijas quedar impunes? No. Él tenía que corregir eso, se dio cuenta de qué ese era su destino y desde entonces esa era su meta en la vida, acabar con los malvados del mundo.

FIN DEL FLASHBACK

Una vez que la comida estuvo lista, Andy se puso a cenar sin poder evitar sentirse nostálgico, de la vida que tenía, la familia que amaba, todo lo había perdido.

De regreso con Helena, la iluminada se había reunido con Ventress, la líder del grupo de cazarrecompensas.

"¿Entonces quieres ir a otro planeta, como si se tratara de ir a la vuelta de la esquina?"

"Sé que no será sencillo... de hecho podría ser hasta imposible, pero tenemos que hacerlo"

"¿Y quién te dice que vamos a apoyarte en esta locura?"

"El hecho de que ustedes me juraron su lealtad de por vida ¿o es que acaso ya lo olvidaste?"

"Trato de hacerlo"

FLASHBACK

Algunos años atrás, en los muelles de Londres, Ed y Ken avanzaban por el lugar, el cual se encontraba repleto de cajas que al día siguiente serían entregadas a sus destinos.

"¿Estás seguro de que este es el lugar?" le pregunta el heredero de Roku a su amigo.

"Sí, fue aquí donde Helena dijo que la encontráramos"

"¿Así que vino a convencer a un montón de cazarrecompensas sin escrúpulos a que se unan a nuestro equipo?"

"De ser así, podríamos ganar unos buenos aliados"

"Ya lo creo que sí, pero no estoy muy seguro de que estén dispuestos a escucharla"

"Hay que confiar en ella, siempre ha sido una muy buena negociadora, bastante profesional, dedicada y..."

Pero al entrar en aquel lugar, se sorprendieron de encontrar un escenario bastante amplio, completamente repleto de hombres que gritaban entusiasmados y en el centro sobre un ring, Helena y Ventress se preparaban para pelear.

"Creo que las negociaciones no salieron bien" dice Ed sorprendido

"¿De qué hablan? Estas son las negociaciones" les dice Bobba, quien se encuentra bastante tomado "Si su amiga vence a nuestra líder se ganan nuestra lealtad"

"Ambas tienen poderes mágicos" dice Ed "No sé por qué decidieron arreglar las cosas a golpes"

"Porque es más entretenido ver a dos mujeres peleando a golpes que con magia" les responde uno de los espectadores.

"Oye, ten mucho cuidado con lo que dices, estás hablando de una dama" le reclama Ed

En ese momento, la sabionda se prepara para el combate, por lo que se enjuaga la boca y luego escupe en un balde.

"Pues muéstrame a la dama... jo jo jo" le dice el tipo bastante entretenido

La pelea comienza, el primer golpe lo consigue Ventress, pero la iluminada responde con un buen revés.

"Buen brazo" dice la cazarrecompensas limpiándose la sangre de la boca "Yo pensaba que tú solo sabias golpear a tus oponentes con las cosas que levantabas con la mente"

"Gracias ¿quieres más de donde vino ese?"

"Quiero ver que lo intentes"

Las chicas continuaron peleando, golpes iban y venían y ambas eran muy buenas.

"Tienen razón" dice Ken tomando unas palomitas "Verlas pelando así es genial"

"¿Y qué pasa si su jefa gana?" le pregunta Ed a Bobba

"No gran cosa, el trato se anula, ustedes vuelven a lo suyo y nosotros a lo nuestro"

"¿Eso es todo?" pregunta Ed

"Sí ¿Por qué? ¿Pensaron que todos nuestros asuntos tienen que terminar siempre en la muerte de alguien?"

"Algo así" dice Ken extrañado

"¡Vamos, Ventress!" exclama uno de los espectadores "¡Demuéstrale a esa princesa caprichosa lo que es una verdadera guerrera!"

"¡Helena, sigue así, ya la tienes!" gritó Ed molesto por el comentario

"Hora de ponerle más sazón a este combate" dice Ventress mientras se coloca unas nudilleras con picos afilados.

"¿Qué pasa? ¿Tienes que recurrir a eso para ganar?" le pregunta la sabionda

"Nunca dije que los accesorios estuvieran prohibidos, esto es solo para emocionar más al público"

"Si tanto te encanta que te aclamen por golpear a alguien, deberías haberte dedicado al boxeo y no a ser cazarrecompensas"

"Veamos si sigues siendo tan buena para hablar cuando te deje sin dientes"

Ventress le tira un golpe y de inmediato la sabionda consigue bloquearlo, pero entonces, la cazarrecompensas la atrapa del cabello y la arrastra por el ring, hasta que la iluminada consigue liberarse y se levanta nuevamente, logrando derribar de una patada a su oponente.

De nuevo, Ventress ataca a su rival, pero Helena consigue esquivar los cortes del arma de la cazarrecompensas e incluso logra arrebatarle una de sus armas, pero aprovechando que aún tiene la otra, Ventress consigue hacerle un corte en el brazo a la sabionda.

Esto hace que la iluminada grite de dolor y aprovechando esto, la cazarrecompensas le da una patada en la cara y consigue derribarla nuevamente, para de nuevo atraparla por el cabello, exponiendo su cuello y acercándole peligrosamente sus cuchillas.

"Debiste pensarlo dos veces antes de aceptar pelear sin tus poderes" le dice la cazarrecompensas.

Pero Helena se libera y la muerde fuertemente de la mano con la cual le sujetaba el cabello, Ventress también grita de dolor y aprovechando el momento, la sabionda la patea en el estómago consiguiendo que se estrellé contra las cuerdas y una vez ahí, de una fuerte patada a la cara, hace que su contrincante caiga del ring.

"Creo que tú también debiste pensar mejor las cosas antes de desafiar a la iluminada en persona"

Entonces, todo el público aclama a la sabionda y esta no puede evitar vanagloriarse por su triunfo.

"¡Sí! Sabía que Helena lo lograría" dice Ed festejando con silbidos

"Estuvo increíble" añade Ken aplaudiendo fuertemente

Pero en eso, la iluminada descubre que Ventress se aleja, con las intenciones de no cerrar el trato con ella.

"¡Diste tu palabra!" le reclama Helena saltando del ring y cayendo a su paso en pose de pelea "¿Es que acaso quieres otra golpiza? ¿O vas a cumplir con lo acordado?"

"¡Otra, otra!" exclama el público

"Aunque me gustaría darles gusto a todos los presentes, creo que por hoy solamente voy a terminar con esto de la forma correcta" y estrechando la mano de la princesa añade "Tienes mi palabra. De ahora en adelante mis servicios y los de mi equipo están a tus órdenes"

"No cabe duda de que fuiste una rival muy digna y como tal, sabes aceptar la derrota"

TERMINA FLASHBACK

Luego de este vergonzoso recuerdo, Ventress reconoce que Helena tiene razón, ahora trabaja para ella y como hiciera tiempo atrás con el oscuro, debe obedecerla siempre, sin cuestionar.

"Aich, de acuerdo princesa ¿Qué es lo que tienes en mente?"

"Necesito conseguir unos ingredientes, pero estaré muy ocupada y no tengo tiempo para eso, por lo cual, tú y los demás se ocuparán de juntarlos"

"¿Y para qué necesitas esos ingredientes?"

"Son la clave para conseguir que un hidroplano pueda surcar el espacio, como si se tratara de una nave espacial"

"¿Habrá algo que no puedas hacer con tus hechizos?"

"Con la magia se puede hacer de todo, hasta desobedecer las leyes de la física y alterar la realidad"

"Bien, me aseguraré de reunir todo el material que necesites"

"Pero debo advertirte que algunos de los ingredientes se encuentran en el mundo mágico"

"Dirás en el imperio de Mordor"

"Otra cosa más en la que nos ha afectado este virus... debido a que el equipo Frozen tuvo pérdidas tan graves, no hubo nadie que pudiera detener al señor de Mordor y terminó apoderándose de todo el mundo mágico"

"Sí, definitivamente que todo está de cabeza últimamente"

"Es por eso que debemos acabar con esto de una vez por todas"

"Bien, si crees que tu plan mejorara todo, cuanta con mi apoyo"

"Te lo agradezco, yo mientras voy a poner al equipo al tanto"

"Como siempre, haciendo planes sin consultarlo primero"

"Es parte de la emoción... y hablando de eso... ¿hacia dónde se dirigía mi hermano cuando escapó?"

"Hacia el sur, siempre lo hace después de una masacre"

"¿Estás segura?"

"He rastreado sus movimientos por un largo tiempo, puedo garantizarte que siempre toma la misma dirección cuando decide esconderse" y diciendo esto, Ventress salió del lugar, dejando a la princesa sumida en sus pensamientos.

"Pero claro" piensa la sabionda contemplando un mapa que tiene colgado en la pared "Después de tantos años y nunca se nos ocurrió buscarlo en el único lugar del planeta que sería un paraíso para él"

Y entonces coloca una marca en la parte inferior, donde se encuentra la Antártida.

"¿Por fin lo encontraste?" pregunta Ed acercándose

"Casi puedo estar segura de que se encuentra ahí"

"El muy cobarde"

"Oye, mi hermano será muchas cosas... pero nunca ha sido un cobarde"

"Claro que lo es, ataca a quienes no se pueden defender de su magia"

"Porque ellos atacan a quienes no se pueden defender de sus armas"

Ante esta lógica, el heredero de Roku ya no hizo ningún comentario al respecto.

"¿Vas a ir por él?"

"No, sería una verdadera locura internarme en un lugar como ese"

"Sí queremos detenerlo es importante que vayamos a donde se encuentra, podríamos usar un conjuro para no ser afectados por el frío"

"En realidad estoy guardando todo el material del que dispongo para otra clase de conjuro"

"¿Qué tienes planeado Helena?"

"Me conoces bien, Ed... mejor que nadie diría yo" dice la chica besándolo "Y sabes que soy capaz hasta de lo imposible"

"Eso es lo que me encanta de ti" dice el rubio estrechándola en sus brazos mientras la coloca sobre una mesa, intensificando sus muestras de afecto "Te extrañé tanto"

"Y yo a ti... pero ahorita, desgraciadamente no tenemos tiempo para esto" dice la sabionda interrumpiendo el momento en lo más emocionante "Tengo un nuevo plan" agrega componiéndose la ropa "Bueno... casi, yo diría que una parte del plan"

"¿Una parte?" dice Ed resignándose a los caprichos de su novia "¿De cuánto del plan estamos hablando exactamente?"

"Tal vez... como un 12% del plan"

"¿Es en serio?"

"Oh vamos, no es tan malo"

Como opinando en el asunto, Pandita ladró acercándose y meneando la cola.

"Pandita tiene razón" dice Helena cargándola "12% es mejor que 11%"

"Por la emoción con la que me cuentas tus ideas, yo diría que ya por fin lograste resolver tus dos más grandes impedimentos para llevar a cabo el arriesgado plan por el que tanto has trabajado"

"Podría ser. Y de ser así, aumentará el porcentaje"

"Supongo que no nos quedará de otra, más que averiguarlo. Pero por lo menos ¿podrías decirme si este será un plan menos suicida que robarle sus pertenencias a la Esphinge?"

Ambos recordaron aquel momento tan peligroso, pero a la vez maravilloso, por el cual pasaron hacía algunos años atrás.

FLASHBACK

Tiempo después de haber conseguido el apoyo de los cazarrecompensas, Helena seguía con la manía de encontrar por fin la cura que le pusiera fin a esa pandemia.

Y no era de extrañar, cuando la sabionda se enteró de la muerte de su mejor amiga, Kristy y el amor de su infancia, Kurt, todos pensaron que enloquecería del mismo modo en que lo había hecho su hermano, pero por fortuna, su demencia no fue tan catastrófica y solamente se convirtió en la obsesión de conseguir el ingrediente correcto.

"Estoy segura de que en este lugar conseguiremos el ingrediente que necesitamos" decía la sabionda mientras ella y Ed avanzaban por una caverna.

"Pareces muy segura de tus palabras ¿Dónde estamos?"

"Este lugar es la guarida de la Esphinge, un ser mágico coleccionista de artefactos poderosos"

"Entonces recuérdame por qué es que venimos hasta acá"

"Porque entre sus cosas se encuentra lo que necesitamos" dice Helena revisando dentro de un cofre.

"Helena, luego de tantos fracasos, ya deberías haber aprendido que no lograremos vencer este mal... yo creo que es hora de que te des por vencida, antes de que les hagas compañía a todos los que se nos adelantaron"

"¿Olvidas que soy la iluminada? Rendirme no está ni en mis peores defectos"

Por fin la muchacha consigue encontrar lo que parece un simple collar.

"Si lo que querías era un bonito collar, deberías visitar una joyería como cualquier chica normal lo haría"

"¿No lo entiendes? Este es el ingrediente al que me refiero, con esto en nuestras manos, podremos salvar al mundo"

Pero antes de que pudieran celebrar, el collar comenzó a brillar.

"Oh cielos... me temó que ya sabe que lo robamos" se queja Helena "Ahora habrá que lidiar con él"

"Cuando no terminamos metidos en problemas por causa tuya" le reclama Ed preparándose para pelear.

Pero el ataque de la Esphinge no es como se lo imaginaban, pues en lugar de presentarse frente a ellos para un buen combate, una especie de barrera luminosa envuelve a la iluminada, causando que pierda el conocimiento.

"Devuelve lo que fue robado" dice un misterioso ser apareciendo, el cual se parece mucho a Anubis (el dios egipcio).

"¡Helena!" exclama el heredero de Roku intentando destruir la barrera que los separa, pero esta es demasiado resistente.

Al ver que su dueña corre peligro, Pandita comienza a ladrar desesperadamente, como si intentara ahuyentar a su atacante.

"Ella ahora existe en una condición de incertidumbre cuántica" le explica la Esphinge, mientras sostiene a la chica en sus brazos "En un estado entre la vida y la muerte, por haber profanado mi santuario"

"¡Déjala ir! Ella no tenía intenciones de robarte... es una buena persona, la mejor que he conocido"

"Si eso es verdad, solo se puede salvar si se responde la pregunta incontestable"

"¿Qué es eso?"

"La pregunta cuya respuesta nadie conoce"

"¿Y cómo se supone que mi amiga va a poder contestarla, si nadie ha podido?"

"Ella no, tú lo harás. Responderla correctamente se compensa con la vida, pero fallar en la respuesta se paga con la muerte"

"¿Qué clase de pregunta es esa?"

"¿Qué sucede cuando la fuerza irresistible se encuentra con el objeto inamovible?"

Ed se mortificó de escuchar las palabras de la Esphinge, pues no tenía la menor idea de qué responder, y eso significaría que Helena no sobreviviría a esta prueba imposible.

"Que terca y que tonta eres" piensa el muchacho mientras observa el rostro sereno de su amiga "Y todo porque no sabes rendirte, de haberme escuchado no estaríamos metidos en este gran embrollo... RENDIRSE... eso es"

Justo en ese momento, el tiempo se termina y la Esphinge lo cuestiona nuevamente.

"¿Tienes la respuesta?"

"Ambos se rinden"

"Tu respuesta es correcta"

El brillo alrededor de Helena desaparece, al igual que la Esphinge y el resto de los tesoros que se encontraban en el lugar, incluyendo el collar que la sabionda se disponía utilizar para la fórmula de la cura.

"Helena ¿estás bien?" le pregunta Ed cachándola antes de que caiga al suelo.

"¿Ed...?" exclama la sabionda abrazándolo.

"Descuida, ya te tengo"

Al mirar a su alrededor, se dieron cuenta de que ya no se encontraban en aquella tenebrosa caverna, sino en un hermoso valle rodeados de vegetación bastante alta y flores por todos lados, al lado de una cascada.

Pandita se pone muy feliz de ver que su ama está a salvo y alegremente se une al abrazo grupal y les da lamidas de alegría a sus amigos.

"Creo que estaba como muerta o algo así" dice Helena acariciando a su mascota "Porque no vas a creerme... pero vi a mis papás y a todos nuestros queridos amigos que ya no están con nosotros"

"Está bien... ya te tengo"

"¿Qué fue lo que sucedió?"

"Bueno, tuvimos que devolver el ingrediente y espero que eso te enseñara que robar está mal, no importa el motivo"

"Aich, siempre tan correcto, pero ¿Qué se supone que vamos a hacer ahora?"

"Rendirte no creo, eso es algo que jamás harás y que debo aceptar, me guste o no. Pero, por favor ya no vuelvas a ponerte en situaciones tan peligrosas como esta"

"No fue muy diferente a cuando encontré el conjuro que aumentaría mis poderes de hechicera"

"Ni me lo recuerdes... estuviste enterrada viva por 3 días"

"Y aparte tuve que tomarme una poción bastante asquerosa. No cabe duda que Kristy me seguía la corriente en todo, de otro modo no habría podido llegar al interior de una tumba... la extraño mucho"

"Lo sé... yo también extraño mucho a todos"

"No es justo, nuestras vidas debieron ser muy diferentes, al final no sirvió de nada que Andy y yo fuéramos el elegido y la iluminada"

"Hicieron lo que pudieron, lo cual hubiera sido mucho más fácil si yo hubiera tenido una mayor conexión con mi sortija... me hubiera enterado antes de los planes de Jess y lo hubiéramos detenido antes de que comenzará esta pesadilla"

"El hubiera no existe"

"Lo sé... de existir, yo ahora estaría felizmente casado con Angelita y tendríamos una hermosa familia"

"Hablando de ella, hubo un momento, cuando me encontraba como muerta, que ella se acercó a mí... y me dijo que tú me necesitabas... que ella se había dado cuenta de lo que sentías por mí"

"¿En serio? ¿Eso te dijo?"

"Responderé tu pregunta con otra ¿de verdad tienes esa clase de sentimientos por mí?"

Ed se extrañó de su pregunta, ciertamente había comenzado a ver a Helena más que como una amiga, la hermosa joven que lo observaba con curiosidad se había ganado su admiración por su valiente determinación, pero había algo más en todo eso, algo que lo hacía observarla con más interés que antes, que lo hacía notar sus bellas curvas y anhelar tomarla entre sus brazos y disfrutar de todos sus encantos.

"Helena..."

"¿Sí, Ed?"

"Hemos sido amigos por mucho tiempo y con todo esto nos hemos vuelto en verdad cercanos, he aprendido a entender tus locuras y te he admirado por lo valiente y lo fuerte que eres ante las adversidades"

"Gracias... yo también pienso que ere un gran amigo, el mejor que he tenido"

"Lo sé y no quisiera que nada arruinará eso"

"Nada podría arruinarlo... más bien, podríamos mejorarlo"

"Helena... yo"

Ya no hubo más palabras, solo las miradas enamoradas de ambos fueron suficiente para comenzar. Se besaron tímidamente, al principio, pues sin saberlo, era lo que más anhelaban.

Ambos comenzaron a recostarse sobre la hierba, la naturaleza a su alrededor, sumado a la precaria situación en la que se encontraban día con día, más los intensos momentos que acababan de vivir, todo era un llamado al amor, uno que no podían resistir.

Cuando Pandita se dio cuenta de lo que iba a suceder, se cubrió los ojos con su oreja y apenada se alejó de ahí para darles privacidad.

Todo era perfecto y no sabían por cuánto tiempo más podría durar así. Siempre estaban rodeados de peligro, sin tener la menor idea de si vivirían otro día para contarlo.

Por lo que, por primera vez en años, decidieron olvidar todos sus problemas, todos sus miedos y todas sus tristezas, para disfrutar el uno del otro.

Los besos que comenzaron siendo tímidos e inocentes, se fueron volviendo cada vez más intensos, realmente era el mejor momento de sus vidas.

Después, sintieron la terrible necesidad de sentir el cuerpo del otro, por lo que comenzaron a acariciarse poco a poco, hasta que sus caricias comenzaron a volverse más eróticas, conforme se acercaban a los lugares de placer del otro.

En este punto, ambos tuvieron un momento de duda, Ed debía acatarse a la voluntad de su sortija, lo que significaba que siempre debía hacer lo correcto. Mientras que Helena siempre había soñado con una boda, como las de los cuentos de hadas, que su madre le leía cada noche.

Pero ese pequeño lapso se apartó de sus ideas, pues ambos comprendieron que las cosas no eran como hubieran querido que fueran y que debían vivir el momento antes de que no tuvieran oportunidad de hacerlo.

Por lo que continuaron con sus intensas muestras de cariño, Ed acarició el cabello de Helena con ternura, sintiendo su suavidad y aspirando su dulce aroma. Realmente esta chica se había convertido en su adoración y tenerla así de íntimamente era como el mejor de sus sueños hecho realidad.

Esperando que la muchacha no fuera a pensar que iba demasiado rápido y terminara aquel hermoso momento de la peor manera posible, Él comenzó a abrirse paso entre las ropas de la bella pelirroja y pronto descubrió, que, si antes pensaba que era hermosa, conforme exponía su piel, se iba dando cuenta de que lucía mucho mejor sin todas esas prendas que ocultaban su verdadera belleza.

Ed levantó su rostro para mirarla a los ojos y lo que descubrió le sorprendió, donde esperaba hallar temor o nerviosismo, descubrió pasión y deleite. El intenso mirar de sus ojos, el sonido audible de su respiración y sus labios entreabiertos lo hicieron perder el control cuando por fin decidió rodear a la pelirroja con ambos brazos para levantarla del suelo. Ella por reflejo, llevó sus manos hasta el cuello de él.

Las caricias de su amado y la forma en la que lentamente le iba retirando la ropa no la dejaban pensar con claridad, se sentía en las nubes ¿Cuánto tiempo había anhelado porque este momento llegara? No lo supo hasta que por fin estuvieron así de cerca, así de enamorados, así de felices.

Ed empezó a acariciar a Helena por encima de la ropa. Sin prisas, sin empezar directamente por sus pechos. Le acarició el cuello y el vientre. Ella puso sus manos sobre las de él y le dirigió para ello. Ahora que ella sólo tenía su ropa interior puesta, Ed no pudo apartar la vista.

"Maravilloso… simplemente maravilloso" pensó el muchacho

Helena se sonrojó un poco.

"No es justo, Ed"

Él la miró sin entender.

"Yo también… quiero verte…"

Se sonrieron.

Ed se retiró la parte superior de su traje, permitiéndole a su hermosa chica que apreciara su cuerpo trabajado, tantos años de esfuerzo y dedicación nunca habían sido más recompensados que con aquella sonrisa de satisfacción y aquellas tiernas manos que recorrían cada musculo de su cuerpo.

Se gustaban mucho. Ed volvió a acariciarle como antes.

Pronto, ambos quedaron solamente en ropa interior, el momento estaba cada vez más cerca y ninguno podía estar más feliz por ello, aunque a la vez, bastante nerviosos, debido a que ninguno tenía experiencia en esta forma de amar y todo era nuevo para la feliz pareja.

Con cuidado, Ed le sacó los pechos del sostén. La chica tuvo que desviar la mirada un momento, a causa de la vergüenza.

"Eres tan hermosa"

"¿De veras lo crees?"

"Pero claro que sí. Recuerdo cuando recién nos conocimos, tú eras apenas una bebé, yo debí tener unos 6 años. Ken y yo fuimos a conocerte... Ha pasado tanto..."

Él deslizó sus manos hasta los pechos de la pelirroja. Los cubrió con sus manos, y empezó un leve masajeo. Ella cerró los ojos. Ed tocándola… se sentía muy bien.

"¿Estás bien?" le preguntó Ed

"Sí… sigue, y no te detengas… por favor"

Ed volvió a besarla antes de retroceder un poco. Posó sus manos en las piernas de la chica, y empezó a masajearlas.

Helena en pantaletas. Podría morir con aquella imagen en la retina y moriría feliz. Tiró con cuidado hacia abajo de la última prenda que llevaba puesta su novia. Ella tuvo que contenerse, instintivamente, había estado a punto de cubrirse. En lugar de ello, separó sus piernas. Ed bajó la cabeza, y contempló la intimidad de la chica. Aquel tono rosado… excitante. Simplemente excitante. Y bello.

Ahora debía despojarse él. La chica notó que él ya estaba animado. Había un buen bulto debajo de sus calzoncillos. Y quería contemplar directamente lo que tenía oculto.

Así que le pidió que se acercara y fue tirando hacia abajo la última pieza de ropa que le quedaba puesta a su novio, hasta quitárselo por completo, liberando la erección del rubio.

Sus ojos le recorrieron entonces desde los pies hasta llegar a la entrepierna.

"Vaya Ed, impresionante" Dijo ella pícaramente

El chico miró para otro lado, pero sonrió halagado. Se tumbó al lado de ella, y volvieron a besarse, mientras dejaban que sus manos recorrieran el cuerpo del otro. Qué bien se sentía eso.

Ella se sonrojó notablemente al saber que yacían los dos desnudos, pero Ed la besó tiernamente, desinhibiéndola de cualquier pudor. Sintió como los labios de él bajaban por segunda vez por su cuello; esta vez, tomaron otro rumbo, porque el ascenso continuó hasta llegar a sus pechos.

El agitado respirar de él la excitó en cuestión de segundos, lo que fue visible por la erección de sus pezones. No pasó mucho tiempo para que él envolviera sus senos con su boca, iniciando una serie de caricias diferentes sobre aquellos botones rosas.

Ella no pensaba ya; sólo se permitió disfrutar aquella deliciosa sensación que él le estaba provocando. Mantuvo sus manos sobre el cuello de él, invitándolo con suaves caricias a seguir.

Él rubio no tenía planes de dejar de besarla pronto, pero escuchar su nombre en los labios de ella, con un tono ansioso y vehemente lo hizo cambiar de parecer. Sabía que la estaba llevando a un terreno desconocido y que pronto los besos y las caricias les serían insuficientes.

Ed buscó sus labios una vez más y ella lo recibió gustosa. Él ahora podía palpar la excitación a la que él la había llevado; pero Helena también se percató de que aquello causaba satisfacción en él, y fue entonces que pudo sentir la masculinidad de él.

Él se incorporó y se situó frente a ella. La sabionda se pegó en el vientre un parcha anti conceptivo mágico, la situación no tan gravísima no estaba como para traer hijos al mundo. Con mucho cuidado el muchacho separó las piernas de la chica y se acomodó encima de ella. Estaba a punto de introducir su miembro en ella. Se miraron a los ojos,

"Ed… estoy muy nerviosa"

"Tranquila…no dolerá demasiado" Le aclaró él

Ella asintió mudamente aferrándose a su espalda, mientras que él retomaba el beso. Ed la besó. Mientras se besaban, él se deslizó lentamente dentro de ella, se cruzó con la barrera que ya había anticipado, pero no le tomó mucho tiempo romperla.

Ella sólo se aferró con más fuerza a su cuerpo, y fue cuando él pudo sentir como se tensaba. Se quedó inmóvil por unos segundos mientras besaba su mejilla para calmarla, hasta que sintió como ella se relajaba en sus brazos.

El cuerpo de ella se contrajo, y se abrazó a Ed. Cerró las piernas alrededor suyo.

"¡Helena! ¿Te duele?" Preguntó él, preocupado.

"T... tranquilo… sólo dame un momento…"

Él asintió, y se abrazó a ella. Cuando ella le indicó, empezó a entrar y salir de ella. El ritmo era muy lento, y se empezaron a acoplar al ritmo del otro. Ella se sentía muy bien. Ed se movía despacio pero firme. Se aferró un poco más a él.

El rubio se adentró un poco más en su novia. Sintió la presión que las paredes mojadas y palpitantes de la cavidad de ella ejercían sobre su miembro y se sintió enloquecer. Ed inclinó levemente su cabeza para poder verla a los ojos.

"Hola..." Dijo ella sintiéndose algo abochornada por mirarlo en ese momento.

"Hola..." Respondió él sonrojado

Él estaba en el cielo. No podía creer lo que estaba haciendo con Helena. Se sentía muy bien. Sentía cierta presión sobre su miembro, lo que aumentaba la excitación.

Con cada embestida, cada vez más fuertes y rápidas, una ola de placer los mecía a ambos. En pocos minutos, las caderas de Ed alcanzaron un ritmo frenético, y la voz de Helena se derretía como caramelo en el ambiente cargado de sudor y olor a sexo.

Con un gruñido de excitación, él la besó, dejando que los gemidos de la pelirroja se fundieran con su saliva. Cuando su lengua se hubo saciado, se incorporó, dejando los labios de la chica rojos y húmedos, y le levantó un poco las caderas, haciéndole alzar las piernas.

Continuó con las embestidas, esta vez más profundas y seguidas. El volumen de la voz de ella comenzó a subir, incontrolable, y cuando arqueó la espalda y echó la cabeza hacia atrás, ya estaba gritando. Las manos de Ed se aferraban a los muslos de la chica, y el bamboleo de sus pechos al ritmo de sus arremetidas lo hipnotizaba. Notaba su miembro ardiendo, inyectado en sangre, palpitante y aprisionado dentro de su novia.

Ella alzó una mano hacia su pecho, intentando aferrarse a él, pero un escalofrío se lo impidió. Hizo que todo su cuerpo se contrajera, y el muchacho supo que estaba llegando al clímax, lo que lo excitó e hizo que aumentara aún más, casi por encima de sus posibilidades, la velocidad de las acometidas.

El tono de la voz de la chica fue escalando, hasta que su cuerpo colapsó, su mente se rompió en miles de pedazos de cristal y todo su ser se concentró en el orgasmo que escapó de sus pulmones.

Ed la miró extasiado, tan desnuda, tan embriagada. Suya. Se sintió explotar y, con un gemido, se desplomó sobre ella mientras su semen se derramaba en su interior.

Sus respiraciones no tardaron en acompasarse. Ed se hizo a un lado, tumbándose boca arriba. Atrajo a la sabionda hacia él con un brazo. Quería seguir sintiendo su corazón latir bajo su piel. Durante unos minutos permanecieron abrazados sin decir nada, disfrutando del éxtasis.

Las manos de Ed se enredaron en el pelo de Helena, y fue capaz de aprenderse cada recoveco de su sonrisa. Se adormilaron, y poco a poco su piel de enfrió de nuevo. En ese momento, ella se incorporó, apoyándose en uno de sus codos, y lo miró. Para él fue como un bofetón ver su expresión teñida de temor y dudas.

"¿Qué pasa?" Preguntó él mortificado

Ella ladeó la cabeza y desvió la vista, distrayéndose contorneando los abdominales de Ed con un dedo.

"Mañana no quiero fingir que esto no ha ocurrido"

Él suspiró, y la besó suavemente.

"No tendrás que preocuparte de eso" Respondió él y posó su frente sobre la de la chica y sonrió de medio lado "Te prometo que me aseguraré de que todo el mundo sepa que me perteneces. Eres mía, y no hay razón para ocultarlo o fingir lo contrario. Ahora lo sé"

Se abrazaron. Quizá habían esperado mucho tiempo… pero la espera había valido la pena. Habían puesto fin a su virginidad con la persona que querían. Eso les bastaba.

FIN DEL FLASHBACK

Luego de distraerse momentáneamente con aquel bello recuerdo, ambos volvieron a la realidad, para seguir enfocados en el asunto que tanto les preocupaba desde hacía años.

"¿Y se puede saber cuándo estará listo al 100% tu plan?" le pregunta Ed

"Cuando lo discutamos entre todos... ya sabes, seis cabezas piensan mejor que una"

"¿Seis? No creo que contemos con Ken"

"Yo... no me refería a él"

"No... Helena"

"Sí, todo el equipo tiene que estar junto... y eso lo incluye a él también"

"¿Qué te hace pensar que va a cooperar como en los viejos tiempos? No es que sea el mismo de antes"

"Él está desesperado como todos nosotros... puede que incluso más aun, así que en cuanto sepa que existe la posibilidad de terminar con todo esto... estoy segura de que aceptará ayudarnos sin pensarlo"

"Creí que habías dicho que no irías a buscarlo"

"Y así es, no iré por él... dejaré que él salga de su guarida para poder interceptarlo"

"¿Vas a permitir que ataque de nuevo?"

"Será la única forma de poder seguirle el rastro"

"Pues yo no dejaré que lo haga... lo detendré como sea"

"¿Cómo vas a hacerlo si tú estarás muy ocupado convenciendo a Ostein?"

"Eso será aún más imposible"

"Por eso te lo estoy encargando a ti, porque sé de lo que eres capaz"

Ambos se besaron dulcemente y cada quién emprendió el camino a su destino.

Ed quedó de verse con Birgit, ambos se dirigirían a Nepal, el tranquilo Nepal, para encontrarse con Ostein, quien hacia años se había aislado de la sociedad. Mientras que Helena, acompañada de Pandita viajó al sur, para interceptar a su hermano apenas saliera de su guarida.

Luego de que Ed, le contara a Birgit que debían ir por Ostein, ella aceptó la misión de acompañarlo, aunque la idea de rencontrarse con Ostein no le agradaba del todo. Ella aún tenía resentimiento hacia su ex novio por haberla abandonado incluso después de que ella se había entregado a él cuando aún era demasiado joven. Y mientras se arreglaba para el viaje, recordó aquel momento en que siendo joven e ingenua había disfrutado con el vago.

FLASHBACK

Diez años atrás, Luego de que Ostein estuviera de vuelta en el Castillo de Arendelle, después de haber estado aislado algunos días. El muchacho ya no era el mismo, se encontraba traumatizado y torturado por horrendas pesadillas en las que revivía una y otra vez el sacrificio en que había muerto la reina Elsa.

Creyendo que el virus sería controlado y que todo estaría bajo control. El joven se hallaba en su recámara, sentado sobre su cama mirando la luna y las estrellas sumido en sus pensamientos, cuando oyó pasos a sus espaldas.

Al volverse vio que se trataba de Birgit, la chica llevaba puesto aquel camisón de tela delgada que normalmente lo volvía loco, pero ahora se hallaba demasiado deprimido como para fantasear con los bellos pechos de su novia.

"¿Cómo estás?" Preguntó ella sentándose a su lado

"No muy bien, aún no puedo creer que todo eso haya pasado"

"Ni yo tampoco, siempre pensé que pasarían varios años antes de que viéramos a Andy vuelto rey"

"Así debió haber sido"

"Pero a veces el destino tiene otros planes. Tú hiciste lo que pudiste, estoy muy orgullosa de ti"

"¿En serio?"

"Claro que sí. Salvaste a nuestros amigos"

"No a todos"

"Lo que pasó con la reina Elsa no fue tu culpa. No había otro modo. Su sacrificio salvó muchas vidas"

"Lo sé, pero si hubiéramos dispuesto de más tiempo, estoy seguro de que hubiéramos hallado otro antídoto"

"Eso hubiera requerido quizás demasiado tiempo. Años de estudios y experimentos"

Mientras ella hablaba, el vago no podía evitar ver como los pechos de su novia se apreciaban a través de la delgada tela de su camisón gracias a la luz de la lun. Los bellos atributos de la chica se balanceaban con su respiración.

Ella notaba que el vago no quitaba la vista de sus pechos y se sentía muy nerviosa, pero a la vez sentía su corazón arder ante la idea de ser amada y saber que su novio la deseaba tanto. Ojalá Andy la hubiera mirado de esa forma, pero ya no debía pensar en él, eso era cosa del pasado.

"Este tiempo que estuve en el mundo mágico te extrañé mucho" Dijo ella dándole un dulce y tierno beso en los labios.

"También te extrañé mucho, hermosa" Respondió él correspondiendo a sus besos

"Creí que te habías infectado del virus y que te perdería" Le dijo su novia sollozando

"Descuida, soy un hueso duro de roer y ya estoy bien... Sin ti los segundos transcurren como un anochecer repentino, sin ti mis sentimientos caen al vacío de la tristeza, sin ti mis lagrimas nacen solitarias y frágiles...sin ti"

Vaya que Ostein era todo un poeta conquistador, sus palabras hacían suspirar a la chica.

Ambos se fundieron en un apasionado beso, la respiración de los dos se hacía cada vez más agitada.

El vago no tardó en acariciar el cuerpo de su chica, prestando especial atención en sus pechos, los cuales se sentían muy bien a través de la delgada tela de su camisón, al estar ya en su ropa de dormir, la chica no llevaba puesto sostén, lo cual le encantaba a Ostein.

"Cielo y tierra se reúnen para contemplar tu belleza" Le dijo Ostein jadeante "El mar se abre para ser merecedor de tocar tu maravillosa piel, el sol huye al irradiar menos luz que tus ojos"

Ella se dejaba llevar por los encantos de su novio. El vago besaba sus labios con cierta brusquedad y descendió bajando por su cuello besándolo y haciéndole pequeñas succiones. Sin dejar de acariciar sus pechos por encima de su ropa.

"...Ostein..." Suspiró ella sonrojándose

El vago adoraba esa inocencia infantil que poseía, la chica era aún tan niña. Su aroma lo enloquecía, el nerviosismo en sus ojos, esa aurea de vulnerabilidad, la idea de poder estar con una chica tan joven e inexperta le encantaba.

"Me gusta cuando el cielo nos acaricia y tú me miras enamorada, me gusta cuando me acaricias y mi cielo eres tú"

La boca del vago siguió descendiendo besando sus pechos por encima de su camisón y comenzó a succionarlos por encima de la tela.

En un momento determinado, el vago intentó desnudarla, pero ella se resistió.

"No... no... no" dijo ella tímidamente

"Para que estés más cómoda"

"No Ostein... es muy pronto"

"Para hacer el amor nunca es demasiado pronto. Tú me amas y yo a ti"

"Sí, pero…"

"Porque si nos amamos debemos demostrárnoslo"

"Ya habrá tiempo para eso después"

"¿Estás segura? No tenemos la vida comprada. Tú viste lo que pasó con Elsa..."

"Lo sé, pero siento que no estoy lista"

"¿Y quién nos garantiza que ambos tendremos tiempo para estar totalmente listos? ¿Qué tal si nos sucede algo verdaderamente malo? ¿Qué tal si te pierdo...?" dijo Ostein sin poder evitar derramar algunas lágrimas, recordando de nuevo cómo le falló a su amigo y dejó que su madre fuera sacrificada.

Al ver esto, Birgit comprendió lo importante que era para su novio que estuvieran juntos de esa manera y que, en cierta forma, tenía razón, no estaban seguros de que iban a vivir por tanto tiempo como para llevar las cosas poco a poco. Pero estaba muy nerviosa de equivocarse, por lo que siguió negándose.

"…No estoy segura que sea buena idea...Yo… nunca he estado con nadie"

"Lo sé, y no te imaginas lo emocionado que estoy de que seré el primer hombre en tu vida"

"Ostein, no estoy segura... Mi mamá siempre me ha dicho que debo esperar a estar casada"

"Claro que nos casaremos. Pero eso será más adelante"

"Es que no sé, solo tengo catorce"

"No va a pasar nada, usaremos protección si es lo que te preocupa"

Y diciendo esto, el vago sacó de su cajón una especie de parche.

"Este es un parche anticonceptivo" Le explicó su novio "Lo conseguí en el mundo mágico, te lo pegas en el vientre y listo, no puedes quedar embarazada"

"¿Estás seguro de que esto realmente funciona?"

"Pero claro, eso nunca falla. Te aseguro que sé lo que hago"

"¿En serio sabes lo qué haces?"

Ante esto, el vago se sintió ofendido, debido a que parecía que su novia le reprochaba lo ocurrido con la reina de Arendelle.

"Es cierto... yo siempre hago todo mal... creo que te convendría regresar con Joan, después de todo él siempre era el número 1 en la clase"

"No digas eso, yo te quiero a ti. Y no es cierto eso de que todo lo haces mal, has tenido muchos éxitos, por algo eres uno de los miembros más valiosos del equipo Frozen, a pesar de no tener poderes"

"Sí, supongo que en ocasiones he hecho algunas cosas que sí han valido la pena"

"Y lo seguirás haciendo, porque recuerda que tenemos toda la vida por delante"

"¿Otra vez con eso? Ya te dije que no es tan simple"

"Tampoco es para que te pongas así de negativo"

"Perdón amor... es solo que pasé por momentos muy traumáticos y pensé que venías a reconfortarme ¿O a qué más viniste a mi recámara?"

"Solo venía a ver cómo estabas"

"Bien, pues ya lo averiguaste, supongo que ya puedes volver q tu recámara. No sea que te metas en líos con tu mamá"

"Ostein no te pongas así. Sabes que yo te amo"

"Y yo a ti y no quisiera perderte... en serio, eso es algo que no soportaría. Pero sería mucho más terrible si algo nos llegará a suceder, sin jamás habernos demostrado nuestro amor"

Aun indecisa, ella se puso a pensar y a dialogar consigo misma.

"Decide rápido" Se dijo a sí misma "Siempre estabas sufriendo porque Andy no te amaba, porque nunca pudiste disfrutar de sus muestras de afecto. Sufriste mucho por el rechazo de Andy ¿Ahora vas a rechazar a Ostein? Él en verdad te ama y tú lo amas a él... Sabes que también quieres hacerlo... si quiero, pero también me asusta... Sólo tengo catorce... Exacto, ya tienes catorce, casi quince, ya no eres una niña. Pero ¿Qué dirá mi mamá?… Ella no tiene por qué enterarse...lo que no sepa no le hará daño... Ya tienes edad suficiente para tomar tus propias decisiones... Es verdad y además no quiero que algo nos llegara a suceder a alguno de los dos sin demostrarnos nuestro amor"

Por fin, la chica habló.

"Está bien, Ostein... solo porque en verdad te quiero y deseo demostrártelo antes de que sea tarde"

"Oh, preciosa"

Él procedió a recortarla sobre la cama mientras la besaba con intensidad sin dejar de acariciarla. Ella correspondió a sus besos entrelazando sus brazos en el cuello de su amado.

Él llevó sus manos al frente de su camisón y comenzó a desabrocharlo, deslizándolo por sus hombros, hasta que quedaron expuestos sus pechos de buen tamaño, muy tersos y blancos, eran hermosos a la vista. A él le pareció que eran de tamaño grande para la edad de la chica y eso le encantaba.

"Por fin" Pensó el vago sumamente excitado

Ella soltó un gemido por el toque de Ostein, y éste tomó entre sus dedos uno de sus pezones y lo apretó, estaban bastante duros, eran pequeños y de color rosado como la boca de Birgit.

"Eres tan hermosa"

"Gracias..." Respondió ella sonrojada y con la mirada gacha

"Tus pechos son preciosos, perfectos para ser besados. Y creo que han crecido desde la primera vez que los vi. Y desde ese día, no dejo de pensar en ellos, en el día en que podría tenerlos en mis manos. Son tan suaves y cálidos"

El vago siguió jugueteando con los pechos de su novia. El muchacho empezó a sentir una presión en sus pantalones que se tornaba un tanto dolorosa. Ella también notó el duro bulto que empezaba a formarse dentro del pantalón de su novio.

Pronto el chico reemplazó sus dedos por sus labios succionando con ansiedad los pechos de su novia, su sabor lo volvía loco.

"Oh... Ostein" Gimió ella con los ojos cerrados

"Su sabor me encanta. Son deliciosos"

Aquello se sentía tan bien, el vago al parecer era todo un experto en las artes del amor. Ostein también se sentía en el paraíso al tener aquellos bellos pechos causa de su obsesión, a su disposición.

Y pronto comenzó a succionar con más fuerza los pechos de su novia, dejándole marcas rojizas. Aquello era algo doloroso, pero ella no protestó, quería que su novio disfrutara al estar con ella. Pasaron algunos minutos así, el vago succionaba y pellizcaba los pechos de su novia, sin percatares de que estaba siendo excesivamente brusco con ella. Dándole incluso leves mordiscos y estirándole sus rosados botones.

El joven, dejó por fin los pechos de la chica, ella suspiró aliviada a la vez que sentía un ardor en sus pezones.

Ostein terminó de quitarle el camisón a ella, besó sus labios con intensidad mientras acariciaba todo su cuerpo.

El joven por su parte se quitó la camisa y la arrojó lejos, después estrechó a su chica contra su pecho.

"Ostein" Susurró ella al sentir sus pieles tocarse de ese modo.

Ambos se besaban con verdadera ansiedad, el vago no dejaba de recorrer el cuerpo de su novia. El sudor empezaba a escurrir por la frente de ambos. Birgit no tenía mucha experiencia, tenía miedo de tocarlo, se dejaba hacer, limitándose a acariciarle el cabello, la cara y los brazos de vez en cuando

Ella se sobresaltó al sentir la mano de su novio acariciar su intimidad por encima de sus pantaletas.

El vago sonrió al notar que las pantaletas de su novia estaban bastante húmedas, escucharla gemir solo lograba levantar su ego.

"Pero mira cómo te he puesto" Dijo él haciéndola sonrojar mucho

Comenzó a descender para besar su cuello, lamerlo y morderle. Birgit sintió como Ostein succionaba su piel, dejaba hermosas marcas rojizas que ella sabía que luego se avergonzaría mucho si alguien las veía, especialmente su madre.

Pronto el muchacho metió su mano dentro de sus pantaletas acariciándola con ansiedad haciéndola gemir y aferrarse a las sábanas. Y aquellas sensaciones se incrementaron cuando el vago introdujo su dedo en su vagina. El vago se emocionaba cada vez más al notar lo estrecho de aquella cavidad. Las paredes de su vagina se adaptaban a su dedo y vibraban de placer. Entonces, el muchacho introdujo un segundo dedo.

"Ostein... me duele"

"Eso sólo será al principio, ya verás cómo después disfrutarás mucho" Respondió él mientras comenzaba a meter y sacar su dedo.

"O…O…Ostein" Gimió ella

"¿Verdad que se siente bien?"

"Sí...mucho" Suspiró ella

"Y ya verás como sentirás aún mejor"

Ella, con la mirada empañada, le miraba ahora directamente a la cara, aunque con la vista algo perdida en el infinito. Se sentía completamente a su merced, le estaba encantando la forma en la que el chico probaba con su cuerpo.

Ostein, al verla tan entregada se propuso provocarle un intenso orgasmo, estaba también muy excitado y no pensaba con fluidez, solo quería darle placer y obtener el suyo a cambio; y verla en ese estado era placer más que suficiente, para su vista al menos.

Para obtener su objetivo comenzó a meter y sacar su dedo medio de su intimidad mientras que con el dedo pulgar no paraba de frotarle el clítoris cada vez más rápidamente.

"¿Quieres que pare?" Preguntó el muchacho con picardía, conociendo de antemano la respuesta.

No pudo evitar sentirse poderoso por haberla llevado a ese estado.

"… N…Noo No te detengas..."

El muchacho fue besando su vientre descendiendo hacia el borde de sus pantaletas y las deslizó por sus piernas, desnudándola por completo. El vago permaneció por unos instantes contemplándola.

La chica era tan pequeña y parecía tan frágil, su cuerpo aún no era del todo el de una mujer. En su intimidad se apreciaba una pequeña y fina capa de vello púbico. La joven lucia sonrojada y nerviosa, nunca había estado desnuda frente a un hombre. Para él fue mágico y totalmente nuevo que ella temblara de pudor. El vago besó apasionadamente la boca de ella.

Ostein, continuó moviendo sus dedos de forma más enérgica, hasta que ella abrió los ojos sorprendida al sentir el aliento caliente del vago en su zona intimidad.

"Ostein.. ¿Qué estás...?"

"Shhhh... solo déjate llevar"

Y diciendo esto, el vago comenzó a lamer su zona íntima, dando leves lamidas, su sabor le parecía exquisito. El muchacho comenzó a mover su lengua con más intensidad, acariciando levemente el clítoris de la chica con la punta de su lengua. Su lengua estaba en todas partes, adentro, afuera, estirando, y hundiéndose dentro de ella. Su boca se aferró a su clítoris y succionó profundo y largo. Su lengua se precipitaba contra su clítoris una y otra vez y embestía con furia el centro de su intimidad con una clara posesividad.

En esos momentos ella ya no gemía, sino que lloriqueaba de placer, de su boca salían sonidos ininteligibles y gemidos guturales. Se estaba literalmente volviendo loca.

El vago notó como las paredes de su entrada se contraían y el cuerpo de su chica se ponía rígido y espasmódico.

"¡Ostein!" Gimió ella

Unos treinta segundos después ella volvió en sí misma y miró a Ostein que la observaba sonriente a su lado en la cama.

"¿Qué pasa?" Preguntó él con una sonrisa pícara

El vago se separó de ella y procedió a quitarse los pantalones, ella lo miraba desvestirse con la mirada fija, con el corazón en un hilo, el cual casi se detuvo cuando por fin se bajó los pantalones, quedando en calzoncillos, más notoria y pronunciada la erección.

Ostein se despojó de la última prenda que cubría su desnudez. Vaya que el vago ya tenía el cuerpo de un hombre y estaba muy bien dotado. Esto la mortificó profundamente, pues sentía que ella aún era joven y que su cuerpo era pequeño en comparación del de él.

Él se acercó para besarla. Y la estrechó contra su cuerpo. Fue maravilloso sentirla tan pegada a él, sus pechos desnudos pegados a su cuerpo, su miembro rozándola en el vientre, tan duro y suave a la vez.

Ambos permanecieron besándose y acariciándose, el contacto de sus pieles desnudas fue maravilloso. El joven, tomó el parche anticonceptivo mágico y se lo pegó en el vientre a su novia, después separó las piernas de ella colocándose en medio. Ella lo miraba sumamente nerviosa.

Ostein fue deslizando su miembro con dificultad en aquella pequeña cavidad, logrando sentir como los fluidos previos arrojados por su novia le facilitaban un poco la entrada. Birgit respiraba agotadamente mientras se aferraba con fuerza a su novio. El cuerpo de ella se tensionaba cada vez más.

Siempre le advirtieron que su primera vez sería dolorosa, pero aquello dolía más de lo que había imaginado. Las lágrimas pronto rodaron por sus mejillas

Él, por su parte, seguía entrando en ella, maravillado por la sensación de estar en aquella cavidad tan estrecha, húmeda y cálida, que bien valía la pena.

De pronto el vago logró sentir como llegaba hasta una parte ligeramente más angosta, dándose cuenta de que había llegado hasta el himen. El muchacho sonrió al toparse con la marca de virginidad de su amada. Así que sin decir nada, se recostó más sobre ella, permitiéndose penetrarla por completo arrebatándole la virginidad

"¡Ostein!" Gritó Birgit asustada por la fuerza que su novio le había puesto a aquella acción, sujetando las sábanas con ambas manos.

"No te preocupes, todo va a pasar pronto" le dijo el vago besándola dulcemente

El joven hundió su rostro en el cuello de ella respirando ruidosamente mientras ella permanecía con los ojos cerrados y gruesas lágrimas resbalaban por sus mejillas.

Aquello le dolía demasiado a Birgit, ella podía notar que estaba sangrando sin necesidad de revisarse, no entendía como el resto de los jóvenes encontraba tan placentero ese tipo de actividades.

El vago en cambio se sentía en las nubes cerró los ojos y no se percató de que estaba siendo poco cuidadoso con ella, nunca le había hecho el amor a una chica virgen y que además fuera tan joven. Por fin lo había logrado, la había hecho suya, había sido el primer hombre en su vida.

Entonces comenzó el movimiento de la cadera de Ostein. Birgit no estaba disfrutando del todo, esto era demasiado doloroso todavía, aunque empezaba a sentir la tensión que se formaba justo en su centro, y cada cierto periodo de esta se liberaban con fuerza, lanzando una gran ola de placer a todo su cuerpo, soltando un gemido de vez en cuando.

Ella podía sentir como cada parte de su interior comenzaba a calentarse conforme a la fricción entre ambas partes se alargaba, provocándole un cosquilleo en toda la zona de la cadera.

El miembro de Ostein abría con fuerza el interior de la vagina de ella, alcanzando una profundidad más que considerable, llegando ella a sentir el miembro presionándole por debajo del estomago

Los movimientos se volvían más fuertes que lograban hacer que la cama se moviera de su lugar de adelante hacia atrás, sin siquiera molestarles los fuertes rechinidos.

El fuerte sonido de las pieles chocando y de los fluidos revolviéndose, se volvía cada vez más notorio, alargando la excitación de ambos chicos. Mientras el vago seguía succionando uno de los pechos de ella.

Él decidió darle una pequeña ayuda al momento, sujetando las caderas de ella con ambas manos y comenzó a empujar con una fuerza más concentrada, logrando que su novia arqueara la espalda con aquello, mientras abría su boca todo lo que podía y gritaba con fuerza su nombre.

Pronto el chico comenzó a dirigir sus embestidas a la parte de arriba, teniendo que separar las piernas un poco para esto, y teniendo que apoyarse con las puntas de sus pies sobre la cama, dándose cuenta que su novia lo disfrutaba más, si lograba presionarle la parte delantera se su interior.

Mientras que ella se sujetaba para lograr empujar sus caderas más contra las de Ostein, solo para provocar más profundidad en cada penetración, cerrando un poco las piernas para intentar hacer más presión en el miembro de su novio.

"…Ostein" gimió ella

"Birgit" exclamó él

Ella se sujetó del cuello de su novio, levantándose un poco y comenzando a besarle de nuevo, esta vez pasando directamente al toque de las lenguas para después unir sus labios y sellar de manera correcta el beso.

El movimiento continuaba, los rechinidos en medio de la noche, el aroma a sexo que llenaba cada vez más toda la habitación, el sudor de Ostein que caía en el pecho de Birgit, mientras que esta se deleitaba con el dulce sabor de la lengua de este.

El vago incrementó la velocidad de sus movimientos tomándola por la cadera y embistiéndola con fuerza, ella enrolló sus piernas en la cintura de él y entrelazó los brazos alrededor de su cuello mientras él la levantó en vilo.

Cada penetración que ella sentía era un empujón más al cielo, cuando de pronto las contracciones de sus músculos internos le hicieron darse cuenta de que había alcanzado el tan preciado orgasmo, con una sensación creciendo tan fuerte que los dedos de sus pies se contrajeron hacia abajo, mientras ella sentía la más fuerte ola de placer invadiendo cada centímetro de su ser, provocando que su espalda se arqueara.

"O… Ostein" Susurró la chica antes de soltar un fuerte chillido similar a un gemido.

Aquel dulce sonido fue música para los oídos de su novio que solo se limitaba a respirar con fuerza y soltar gemidos ocasionalmente similares a gruñidos que salían con toda presión desde sus pulmones.

"Birgit… te amo" Alcanzó a decir Ostein antes de soltar un gemido final.

E introduciéndose por completo en ella derramó abundantemente su esencia llenándola, para después desplomarse de lleno sobre ella, con los ojos cerrados, aun estando entre sus piernas y respirando agitadamente en el cuello de ella.

Ella esperó a que su respiración se normalizara un poco antes de retomar el ritmo correcto y alcanzar para poder hablar.

"Yo también te amo" Le dijo ella mientras le acariciaba la espalda con toda la palma de su mano con la vista perdida en algún punto del blanco techo.

Finalmente habían hecho el amor con todo cuerpo y alma.

Ostein únicamente se apoyó con sus brazos y se levantó hasta alcanzar los labios de Birgit, dándole un beso que termino con las últimas fuerzas que aun conservaban.

Después de eso él, salió del interior de ella, dejando que sus espesos fluidos escurrieran por las sabanas.

Justo algo entre las piernas de ella, se alcanzaba a notar un rastro de sangre causado por ser la primera vez de ella. La chica aún sentía un punzante ardor entre sus piernas.

Ostein se dejó caer de lado, quedando bocarriba al lado de su Birgit. Sin apresurarse, ella dejó de tensar sus piernas, dejándolas caer por completo en las sabanas y con similar lentitud, ambos alcanzaron a tomarse de la mano entrelazando sus dedos

"No puedo creer que de verdad hayamos hecho el amor" Expresó ella aun sin poder respirar del todo bien "¿Qué tal lo hice?"

"Estuviste increíble" Respondió él comenzándose a girar un poco y colocando sus brazos alrededor del cuello de su novia "Te dije que no había nada que temer" Le dijo con cariño, mientras juntaba su mejilla junto a la de ella.

Después de eso, el chico levantó la sabana y la colocó a medias sobre ellos dos. Ambos se quedaron profundamente dormidos, abrazados tiernamente. Por suerte para Birgit, su madre no la descubrió.

Aquella fue solo una de las muchas veces en que el vago le hizo el amor. Ambos se habían demostrado su amor en distintos sitios del castillo.

"Ostein, alguien puede vernos" Suspiró Birgit con las manos apoyadas contra la pared mientras el vago le hacia el amor de pie escondidos detrás de una cortina en un salón del castillo.

"Eso mismo dijiste cuando lo hicimos sobre una mesa en la cocina y ya vez que nadie nos pescó" dijo el vago con los ojos cerrados apoyado contra la espalda de ella y sus manos sobre los desnudos pechos de ella jugueteando con ellos.

"Es que siempre me pongo muy nerviosa de que mi mamá nos descubra"

"Descuida, nadie suele entrar a esta habitación"

Justo en ese momento oyeron pisadas acercándose.

"O... Ostein... creo que alguien viene"

"Relájate, no creo que entre"

Pero para su mala suerte, alguien entró y para empeorar las cosas, se trataba de la madre de Birgit.

Ambos jóvenes contuvieron el aliento y permanecieron inmóviles. Los dos estaban muy nerviosos, pero el vago dentro de su nerviosismo adoraba la sensación de estar dentro de ella.

Por suerte, la madre de Birgit, sacó un mantel de un baúl y salió de la habitación sin notar la presencia de los chicos.

También hubo una ocasión en que ella y Ostein se hallaban cenando en el comedor del Castillo, acompañados de la princesa Anna, Kristoff, Elli y Kristy y algunas otras personas, cuando de pronto el vago comenzó a acariciarle una pierna a su novia por debajo del mantel.

Pronto la muchacha comenzó a ponerse nerviosa cuando sintió la mano de su novio colarse por debajo de su vestido y acariciar su intimidad por encima de sus pantaletas. Sin perder tiempo el vago introdujo la mano en la ropa interior de la chica.

Ella trataba de mantener la compostura sin dejar de cenar, pero aquello se sentía muy bien, las caricias expertas de su novio la hacían estremecerse contra su voluntad.

Después el vago introdujo uno de sus dedos y comenzó a moverlo lento, para después agregar un segundo dedo e ir aumentando la velocidad. Ella se aferraba al mantel y contenía la respiración mientras su novio la llevaba al límite delante de todos, por suerte nunca los descubrieron.

FIN DEL FLASHBACK

Suspirando al recordar aquellos románticos momentos que había vivido, antes de que Ostein la abandonara tras la muerte de sus tíos, la chica acompañó a Ed a Nepal.

Ambos llegaron fácilmente a su destino, desde hacía mucho tiempo que habían perdido contacto con Ostein, pero a pesar de todo, cada miembro del casi inexistente equipo Frozen, sabían dónde podían localizarlo.

Traumatizado luego de los eventos del inicio de la nueva peste negra, el vago se había recluido en el bosque, viviendo como una especie de ermitaño.

Acompañado de Birgit, Ed se abrió paso entre la vegetación y no tardó en toparse con el nuevo hogar de Ostein, el cual era una cueva.

Ambos llamaron a la puerta, y al no recibir respuesta decidieron entrar. El lugar era una agradable y amplia cueva con varias habitaciones, pero era un desorden y olía muy mal. Había ropa sucia tirada, empaques vacíos de comida, basura, botellas de vino y cerveza.

"¿Ostein?"

Un hombre joven, pero de aspecto muy descuidado, salió de una de las habitaciones, era barrigón y tenía el cabello largo, barba y bigote, su ropa estaba ropa sucia. Aturdido por la resaca de su borrachera de la noche anterior, por fin los reconoció.

"Amigos que solían ser mis amigos" Exclamó Ostein abrazándolos fuertemente "Bienvenidos, bienvenidos. Los extrañé ¿Cómo han estado?"

"Tan bien como se puede" Le dijo Ed con melancolía

"Perdonen el desorden, pero ya saben. Cuando uno es soltero tiende a ser descuidado" Dijo el vago recogiendo algunas cosas "¿Quieren beber algo? ¿Qué se les antoja? Tenemos ron y cerveza. Creo que sólo me queda un poco de pollo frío y embutidos, aquí encontré un poco de queso, tengo jalea de frambuesa, tengo pastel esponjoso, pastel de manzana, puedo preparar huevos si gustan, me desenvuelvo muy bien en la cocina" Agregó echando leña a una estufa metálica

"Gracias, ya comimos" Dijo Birgit

"¿De dónde sacas esta comida?" Le preguntó Ed

"El leal mayordomo de mis difuntos tíos administra mi herencia y me surte mi despensa una vez a la semana"

"¿Seguros que no quieren un trago? Tengo esta vieja botella de wisky, cosecha de 1796, muy buen año, cuando el mundo aún era perfecto ¿No creen?"

"Gracias, pero no bebo, nunca acostumbré hacerlo" Explicó Ed

"Por cierto ¿Ya conocen a mi amigo Wilson?" Preguntó Ostein mostrándoles un balón de cuero que tenía cabello de pasto y un rostro pintado.

Y ante esto, Birgit y Ed solo se voltearon a ver uno al otro al comprender que su antiguo amigo estaba peor de lo que habían imaginado.

"Ostein ¿Estás bien?" Quiso saber Birgit

"Estoy bien ¿Por qué? ¿Qué no se nota? ¿O qué?"

"Pues..." Tartamudearon ellos sin atreverse a responder

"Por cierto ¿Qué los trae por aquí?"

"Ostein, te necesitamos" Dijo Birgit

"Creemos que hay una manera de deshacer el daño que hizo Jess" agregó Ed

Ante esto Ostein con los ojos llorosos sujetó a Ed por la camisa.

"No pronuncies ese nombre en mi presencia"

"Ostein, por favor suelta a Ed" Le pidió Birgit temiendo que hubiera una pelea entre ambos

"Escucha, entiendo lo que sientes" dice Ed liberándose del agarre de su amigo "Sé perfectamente que el recuerdo aún te tiene traumatizado"

"¿Por qué me tendría traumatizado ese loco? Es decir, ya pasaron muchos años... Es sólo que les fallé a la reina Elsa, le fallé a Andy, a uno de mis mejores amigos, les fallé a todos, no supe utilizar el antídoto correctamente y el sacrificio de Elsa fue en vano"

"Eso no es cierto, jamás nadie te culpó" Le dijo su antigua novia

"Pero yo sí" Insistió Ostein

"Ya te explicamos un millón de veces que ya no era posible contener el virus" Agregó Ed

"¿Y qué hay de la carta? La perdí ¿Recuerdan?"

"Eso fue un accidente, la carta se extravió o destruyó durante la invasión separatista" Insistió Birgit.

"De haber leído la carta que le dejó su madre, quizás Andy hubiera podido superar su muerte, quizás no hubiera extraviado su camino. Elsa me encargó a Andy, yo debía ayudarlo a superar esta crisis y no fui capaza de hacerlo. Andy me encargó proteger a su madre y ella fue sacrificada frente a mis ojos, no pude hacer nada para evitarlo. Ustedes se horrorizaron al enterarse del trágico fin de la reina Elsa, pero ustedes no estuvieron ahí, el recuerdo me perseguirá por siempre"

FLASHBACK

Ostein se hallaba en el valle de las rocas y Elsa yacía con el torso desnudo, atada sobre el altar de piedra a punto de ser sacrificada. Mientras el vago sollozaba angustiado. La reina cerró los ojos y murmuró una oración final con lágrimas escurriendo por sus mejillas.

El filoso cuchillo de obsidiana bajó con fuerza encajándose por completo en su pecho desnudo, ella gritaba y se retorcía en agonía mientras el troll volvía a levantar el cuchillo para volver a encajarlo con fuerza nuevamente algunas veces más en su pecho quebrando su esternón y costillas para abrir su caja torácica mientras la sangre brotaba a borbotones.

Pronto el troll introdujo su mano por aquella herida escudriñando su interior mientras la reina se convulsionaba de dolor respirando con dificultad, escupiendo sangre y con los ojos desorbitados.

"Andy" Murmuró la reina con su último aliento al tiempo que Oppker extrajo su mano de su pecho sujetando su corazón y arrancándolo con fuerza.

En ese instante, el cuerpo de la reina quedó inerte y cesaron sus gritos. Ostein por su parte cayó desmayado por la impresión.

El corazón de la difunta reina aún seguía latiendo en la mano de Oppker escurriendo sangre, el troll lo dejó caer en el caldero y la pócima empezó a brillar al contacto con aquel palpitante corazón, el cual formó una leve capa de escarcha sobre la pócima.

Con lágrimas en los ojos, Pabbie se puso a batir aquella mezcla en la cual el corazón de la reina se disolvió lentamente.

Luego de volver de su desmayo con ayuda de los trolls, Ostein bañado en llanto se acercó al cadáver de Elsa. Era una escena horripilante y sangrienta, en el pecho desnudo de la reina había un gran agujero que chorreaba sangre donde se apreciaban gruesas venas rotas y costillas quebradas

Oppker, por su parte permanecía inmóvil después del terrible acto que había tenido que llevar a cabo, realmente se sentía muy mal: A pesar de tener una gran justificación, eso no cambiaba el hecho de que había asesinado a alguien inocente y se imaginaba que luego de aquello, Andy le guardaría rencor.

Los ojos de la soberana tenían las pupilas fijas hacia arriba y una expresión de sufrimiento y miedo. Sus mejillas estaban cubiertas de lágrimas. Ostein cerró los ojos de la reina y los trolls cubrieron el cuerpo con una manta blanca.

"Ya está" Dijo Luminara "De funcionar, una vez administrado el antídoto tardarán algunos días en recuperarse del todo"

"Debes ser valiente, muchacho, tus amigos te necesitan" Agregó Pabbie

Lloroso y con las piernas temblorosas, el vago tomó las botellas con el antídoto.

"Cuídalo mucho, recuerda el alto precio que se tuvo que pagar por él" Le dijo Luminara

"Esto es un dispositivo explosivo" Dijo Pabbie "Deberás usarlo para poder entrar al laboratorio"

Ostein tomó aquel artefacto y frente a él se abrió un portal que llevaba de vuelta al laboratorio del Dr. Jess, el cual cruzó rápidamente.

Y sin tiempo que perder, el vago activó el explosivo volando la puerta y entró all laboratorio sin importarle contagiarse.

Aquel lugar apestaba, primero encontró a algunos soldados tirados en el suelo y a Igor, el jorobado asistente del Dr. Jess. Al revisarlos vio que estaban muertos.

"¡Andy... enana... Rose... Hans! ¿Alguien me escucha?"

La angustia del muchacho fue inmensa al no tener respuesta. Pero no tardó en encontrar sobrevivientes, incluyendo a sus amigos y de inmediato les aplicó el antídoto, el cual comenzaba a agotarse, pero por fortuna, había alcanzado para todos los contagiados y pronto todos se encontraban fuera de peligro

Los enfermos fueron transportados en camillas a un monasterio que fue acondicionado para aislarlos un tiempo con la esperanza de contener el virus, además de rosear de la formula por todo el lugar para limpiar el agua y todo el territorio cercano al laboratorio.

Pero no fue suficiente.

"Ya es tarde" Le dijo un científico que vestía un traje especial a otro revisando unas notas

"¿Qué quieres decir?"

"No pudimos evitarlo, el virus fue liberado en el agua por el Dr. Jess desde mucho antes, fue así como se contagiaron las ovejas, las corrientes marinas deben haberlo esparcido ya en varios kilómetros a la redonda, cientos de barcos deben haberse contaminado ya y haber llevado el virus a otros reinos"

"¿Eso significa que...?"

"Sí... la peste negra ha regresado y más letal que la última vez"

Pronto, más gente cayó enferma, el virus se esparció por el mundo y para empeorar las cosas, el antídoto se había terminado.

Ahora Andy era el único portador de hielo en el mundo, pero era tal la cantidad de gente infectada, que sería un sacrificio inútil matarlo para hacer una nueva pócima. Para proteger al joven heredero, nadie más que sus más cercanos sabían cual había sido aquel ingrediente secreto, ya que de hacerse público gente desesperada por una cura habría podido intentar asesinar a Andy para obtener más pócima.

TERMINA FLASHBACK

"Tú hiciste todo cuanto pudiste ese día" Le aseguró Birgit "Arriesgaste tu vida durante la misión, fuiste un héroe"

"Personas muy buenas con un propósito, con una familia, no lo lograron. Mientras que un vago inútil como yo sobrevivió ¿Y para qué? ¿Para pasarme el día alcoholizado?"

"Te entiendo, estás algo deprimido. Yo también pasé por eso, fue algo por lo que todos pasamos. Esa sensación de pérdida te deja un vacío en el alma. Pero ¿Sabes quién me ayudó a sobreponerme?"

"No lo sé... ¿La enana?"

"Bueno... en parte" Respondió él sonrojado "Me refiero a que tú me inspiraste, siempre enfrentaste el peligro a pesar de no tener poderes y salvaste muchas vidas"

"¿En serio? ¿Por qué no le preguntas a la gente del planeta de qué les sirvió mi ayuda? O a los que quedan todavía"

"Quizás los podamos recuperar"

"Olvídenlo, ha pasado tanto. Ya es tarde" Dijo Ostein con tristeza "Ya basta ¿Ok? Sé que creen que me estoy ahogando en mi autocompasión esperando que me rescaten, me salven. Pero estoy bien ¿Ok? Wilson y yo estamos bien. Todo está súper, así que lo nos ofrezcan, no lo queremos. Da igual, no nos interesa. Chao, bye"

"Te necesitamos, amigo"

Mientras tanto, para Helena no fue tan sencillo localizar a su hermano, tuvo que estudiar los reportes de Ventress y con eso logró comprender el patrón de ataque de su hermano, por lo que lo esperó, en lo que ella suponía, sería el siguiente objetivo del antes elegido.

Algunas noches después, el demonio de hielo vigilaba los alrededores, igual que solía hacerlo siempre que salía, como él lo llamaba, de cacería.

El lugar que había elegido en esta ocasión era Japón, donde, desde hacía años, los miembros de la mafia japonesa, conocida como los Yakuza se encargaban decontrolar la ciudad, a través del miedo que sembraban en la población sobreviviente.

Justo en ese momento, los gritos de una mujer consiguieron llamar su atención, no entendía su idioma, pero su traductor mágico le permitió comprender lo que decían, ella y su atacante.

"Tuviste toda la semana para conseguir el dinero"

"Piedad... no hubo mucho movimiento... apenas si tuve uno que otro cliente"

"Ese no es mi problema. Por tu propio bien, te recomiendo que consigas el resto de lo acordado, o tendré que ponerle fin a tu patética existencia"

"Mi señor... yo... no he comido nada en días... no puedo seguir trabajando"

"¿Crees que eso me interesa? Lo único que quiero de ti es el dinero que consigues para mí, así que no pongas pretextos y ponte a abrir las piernas, que es lo único para lo que tienes gracia"

Furioso, el abusivo le dio una fuerte bofetada, que la hizo caer al suelo, con sangre escurriendo de su nariz y boca.

Cuando el hombre se disponía a retirarse, al darse la vuelta, descubrió a un misterioso hombre parado al final del camino.

"¿Qué quieres? ¡Metete en tus propios asuntos!"

"Precisamente esto son mis asuntos"

"Si no te largas cuanto antes, mis compañeros y yo te daremos la paliza de tu vida ¡Lárgate de una vez, forastero!" dice el yakuza armándose con una espada "Eso si te va bien, pero si nos encuentras de malas, puede que incluso te cueste la vida"

"¿Crees que puedes intimidarme como haces con una mujer indefensa y desvalida?"

"Lo que creo es que ya te permití vivir bastante"

Y con una agilidad impresionante, el criminal se lanzó contra su oponente, pero este se reforzó la mano con hielo y la espada de su atacante no le hizo ningún daño.

"El demonio de hielo" exclamó sorprendido "No te conviene meterte con los yakuza, si matas a uno de nosotros, cientos cobrarán cruel venganza por su muerte"

"Puedo contra cualquier basura que se levante contra mí, no importa cuántos sean"

Al ver que estaba perdido, el criminal intentó escapar, huyendo a toda velocidad.

El antes elegido, sintió la terrible necesidad de ayudar a la lastimada mujer que sollozaba en el suelo, pero su corazón noble había quedado atrás, mientras que sus deseos de sangre estaban más presentes que nunca, por lo que se lanzó tras el criminal, ignorando por completo las penas de sus semejantes.

Los yakuza tenían túneles secretos que conectaban una vivienda con otra, los cuales les permitían escapar de cualquiera que los persiguiera y llegar a salvo para reunirse con el resto de sus compañeros.

Pero lo que este miembro de la mafia japonesa no sabía era que ese precisamente el plan del demonio de hielo, que lo condujera directo a donde se ocultaba la organización criminal, para acabar con todos ellos de una vez por todas.

Pronto, varios Andys de hielo recorrieron aquellos túneles, llegando a un lugar y a otro, hasta que, por fin, condujeron a su creador hasta el lugar donde se ocultaba la mafia japonesa.

"¿El demonio de hielo iba tras de ti y decidiste regresar a nuestro escondite?" le reclama uno de los altos mandos al recién llegado "¡Hubieras dejado que te matará antes de comprometernos a todos!"

Y furioso, desenvainó su espada y acabó con la vida de su compañero.

"No cabe duda que mal paga el diablo, a quien tanto le sirve" dice Andy acercándose

"Demonio de hielo, no tenemos nada contra ti"

"Pero yo sí contra ustedes, bola de cobardes, que abusan de los débiles para ganar poder"

"Nosotros solo intentamos sobrevivir... igual que hacen tantos otros"

"Sobrevivir... ese es precisamente lo que no tolero... ustedes siguen con vida, para seguir arruinando las vidas de los demás y permitirse disfrutar de beneficios a expensas de otros"

"Nuestra familia no quiere problemas... te sugiero que te vayas ahora que puedes"

"Pues yo no les doy tal oportunidad... desde ahorita se los advierto ¡Todos van a morir, aquí y ahora!"

"¡Ataquen!" Ordenó el líder y sus secuaces trataron inútilmente de defenderse

"Típico de escorias como tú" Le dijo Andy acabando con aquellos hombres "Mandas a tus secuaces a la primera línea de combate mientras tú intentas huir"

El ex príncipe fue matando a todos los yakuza.

"Alto. Te daré lo que quieras, pero no me mates" Dijo el líder y último rufián que quedaba con vida.

"Lo que yo quiero, ustedes no pueden dármelo" Replicó el muchacho acabando con él

Durante el ataque, un trozo del techo colapsó y comenzaron a entrar las gotas de la lluvia, Andy permaneció unos instantes mojándose, hasta que se percató de que había alguien a sus espaldas.

"No deberías estar aquí" Le dijo el ex príncipe

"Tú tampoco" Le respondió su hermana

Andy se volvió y por primera vez en años ambos hermanos se vieron, sin poder evitar sentir la nostalgia de los viejos tiempos y los felices momentos que habían compartido juntos cuando sus vidas eran perfectas.

Ella ahora era toda una jovencita muy atractiva, con ayuda de sus poderes, desviaba la lluvia evitando mojarse. Él por su parte era ya todo un hombre, aunque con un aspecto sombrío. Ambos se mantuvieron a cierta distancia uno del otro.

"Tenía un trabajo que hacer" Explicó él

"¿Así le llamas a esto? Asesinar gente no va a devolverte a tus seres queridos"

Ante este reclamo, él no dijo nada y permaneció en silencio, pensativo y triste.

"Hay una posibilidad... podríamos... recuperarlos" dijo Helena intentando sonar muy convencida de sus palabras.

"No"

"¿No qué?"

"No me des esperanza" Le dijo él con lágrimas en los ojos

"Perdón por no dártela antes, hermano" Dijo ella también llorando y tomándolo de la mano.

¿QUÉ LES PARECIÓ ESTE OSCURO CAPITULO? ¿QUÉ TENDRÁ EN MENTE SNIPS PARA VOLVER LAS COSAS A LA NORMALIDAD? LOS ESPERO EN EL PRÓXIMO CAPÍTULO Y ESPEREMOS QUE TODO ESTO DE LA CONTINGENCIA PASE RAPIDO PARA NO ESTAR COMO ANDY, HELENA Y COMPAÑÍA.

PARA ALGUNAS ESCENAS LEMON O VIOLENTAS ME BASÉ EN LOS FANFICS DE LOS AUTORES: BKONENIU, WENDY GRANDCHESTER Y ASDEKUMOA, LLITIA, GAKAROSI, SMRU, AKANE KOU