Nota Importante: Los personajes usados en esta historia no me pertenecen, son de sus respectivos creadores.

El misterioso teatro del Bosque.

Capítulo 1.

Los nuevos subordinados de la Dama del Cementerios.

Era noche tranquila, se podía escuchar las hojas mecerse por el viento, en un bosque algo lejano de la ciudad había un cementerio donde en estos momento una sombra femenina juntos a otras sombras más miraban los cuerpos sin vida que tres de ellos le llevaron, los ojos rojos de esa mujer brillaron junto a los de sus sirvientes, fue en ese momento cuando de entre su ropa saco una copa roja y empezó a verter su contenido en los cadáveres que poco a poco empezaron a reanimarse, sonrió satisfecha mirando al que fungía como su guardián.

-Hazte cargo de ellos Lich-Le ordeno al hombre que solo asintió con una sonrisa casi igual a la de ella.

Y junto a dos niños gemelos llevaron dentro a los nuevos subordinados de su señora. En ese momento mientras la mujer de rojo caminaba dentro del edificio donde habitaba con otras personas más, una sombra masculina la intercepto.

-A la muñeca no le va a gustar lo que acabas de hacer-Le dijo con tono tranquilo-Y menos a tu señora.

Esa misteriosa mujer solo soltó una risa leve y lo miro.

-Poco y nada me interesa lo que ellas piensen querido-Le dijo con cierta burla en su voz.

-Solo espero que los sepas aprovechar bien-Y dicho eso se retiró dejando a la mujer de rojo.

Esta solo se retiró a su lugar correspondiente para ella y sus aliados, donde su cocinero personal ya la esperaba con su comida, ella iba a aprovechar a sus nuevos subordinados para conseguir manjares fuera del teatro en el que ella y sus subordinados, junto a más gente Vivian, ya que se estaba aburriendo de que casi nadie fuera al bosque para descubrir su hogar y poder darse un gran manjar con los invasores.

Tiempo después.

En una mansión muy grande, en una de las habitaciones estaba descansando un niño tranquilamente, hasta que llegaron a perturbar su sueño y este era su mayordomo que le llevaba el desayuno, una vez que ya estuvo listo para bajar entro a su despacho ordenando no ser molestado mientras trabajaba.

Mientras que los sirvientes hacían o intentaban hacer bien su trabajo pero como siempre Sebastián el mayordomo hacia todo por ellos para que no explotaran la mansión, fue en ese momento que tocaron a su puerta y le entregaron una carta a Mey Rin, era de la reina.

La mucama solo atino a ir a tocar la puerta del despacho donde estaba su amo siendo ayudado por Sebastián en sus labores, cuando le dieron aprobación para entrar abrió tímidamente la puerta.

-Disculpe Joven amo, pero aquí tiene una carta para usted-Dijo educadamente la chica antes de retirarse haciendo una reverencia.

Al estar solos Ciel tomo la carta leyéndola.

-Al parecer gente desaparece en las noches sin explicación-Comento el mayordomo al terminar de leer el mismo la carta.

-Es extraño, acabamos con ese circo-Dijo en un susurro el joven, no quería que su nuevo empleado lo escuchara.

-Algo me dice que no tiene que ver con ellos-Dijo ahora Sebastián en tono serio.

Y es que algo no les gustaba de ese nuevo caso, sentían que no era nada que ya hubieran visto antes, Ciel miro a su fiel mayordomo que entendió la orden que le iba a dar, mas prefirió oírlo de sus labios.

-Hazte cargo de vigilar, es una orden-Le ordeno con seriedad.

-Yes, My Lord-Y con eso se retiró dejando solo al conde.

El joven miro lo por la ventana más allá de la ciudad donde se alzaba un bosque al que nadie se atrevía a entrar por diversas leyendas e historias que se contaban de este, solo suspiro creyendo que eran simples cuentos, lo que no sabía era que esos "cuentos" eran más que reales y lo comprobaría de una manera muy peculiar.

En el centro de la ciudad.

Una pareja de lo más peculiar estaba caminando por la calle, ella muy hermosa, cabello negro largo, con un kimono en azul, rojo y dorado, ojos negros con un monóculo en uno de ellos, el un hombre alto, cabello negro largo atado en una coleta alta con un lazo morado y ropa tipo japonés, su fleco le cubría el ojo izquierdo y tenía una expresión seria en su perfecto rostro.

-Ahora recuerda, somos una pareja de casados caminando por la calle tranquilamente-Dijo la mujer en un susurro a su compañero.

-Eso me quedo más que claro cuando salimos de la casa-Le devolvió serio el hombre.

-Solo actúa natural Gammon.

El llamado "Gammon" la miro alzando una ceja, solo suspiro y miro atrás donde estaba una chica con cabello verde, que los seguía de cerca esa era la hija de su compañera que en ese momento fungía como la de ambos para guardar apariencias de que eran una familia, pero lo que llamaba la atención de la gente era que ellos tenían el cabello negro y la chica lo tuviera verde, en ese momento todos los miraban como si fueran algún fenómeno que nunca hubieran visto antes.

-Al menos no vinieron Waiter y Banica-Susurro para sí mismo el joven dando un suspiro.

-Nemesis no te quedes atrás-Llamo la madre a su hija, que solo corrió para alcanzarlos.

-Si no caminaras como si te fueran a linchar, los alcanzaría y les pudiera seguir el paso-Se quejó la peli verde con cierto fastidio.

-Di que regrese por ti a esa cabaña-Le regaño MA cruzada de brazos.

La niña solo se cruzó de brazos haciendo un puchero mientras fruncía el ceño, solo se limitó a seguir a su madre y al compañero de ella que era más su "padre" de lo que había sido su verdadero padre, le tomo la mano a Gammon y a su madre, si tenían que fingir ser una familia, pues tenían que parecerlo.

-A todo esto-Le llamo la niña a su madre que la volteo a ver-¿Por qué bajar a la ciudad? Nunca lo hacemos.

-Para conseguir comida, varios no lo necesitaran pero si tú, yo, Gammon y Banica-Le recordó la mujer con total naturalidad.

-Ya que-Dijo la pequeña peli verde mirando a todos lados para distraerse.

Fue en ese momento que sus ojos verdes se toparon con un destello rojo en los techos de los edificios cercanos, fruncido el ceño ante esto, y ahora llamo a Gammon.

-Creo que la señora Banica nos está siguiendo-Dijo en voz alta para Gammon, pero MA la alcanzo a escuchar.

-No es Banica, ella no es de esconderse-Dijo tranquila la maga-No es su estilo.

La "familia" solo se limitó a ignorar o a tratar de ignorar lo que sea que los estuviera observando, MA solo esperaba que Banica no hubiera mandado a alguno de sus sirvientes para inspeccionar sus compras.

En un edificio cercano.

Cierto shinigami pelirrojo había notado al extraño trio y como muchos no creyó posible que esos tres fueran familia, por lo que se dedicó a seguirlos desde que los vio, de todas maneras tenia cosas más entretenidas que hacer que cumplir con sus obligaciones.

Pero no conto con que la mocosa que acompañaba a los dos adultos lo notara, cuando vio la expresión de esa niña fue como si viera a cierto enano gruñón, pero prefirió ignorarlo, Grell sentía que esos tipos no tenían nada de normal en ellos comenzando con el color de cabello de esa niña con gesto malhumorado que a la más mínima señal de molestia te mandaba una mirada que era capaz de dar miedo hasta al más duro de carácter.

-Pero que extraños son esos tipos-Se dijo a sin mismo el pelirrojo.

En ese momento, noto como la mujer y el hombre le decían a la niña que los esperara fuera de una tienda, entonces ellos entraron y vio camino libre para acercase a ver mejor a la niña. Una vez que estuvo cerca la pudo mirar con más detalle, cabello de un verde llamativo corto hasta los hombros, falda negra y una blusa algo holgada color gris, con contar sus botas negras, además de eso sus ojos eran grandes y de color verde profundo que reflejaban una serenidad increíble, y su piel pálida, tan pálida que la hacían lucir muerta en vida, era una niña muy linda sin duda.

-¿Te puedo ayudar en algo?-Oyó la voz un poco apagada de la chica que ahora clavaba sus ojos en él.

-¿Cómo supiste que te miraba?-Le pregunto mirándola con gesto pensativo y curioso.

-No eres para nada discreto-Su expresión no cambio, seguía igual de sereno.

-Eres extraña-Comento Grell mirándola más de cerca-Con ese cabello.

Nemesis no dijo nada solo suspiro con desgano y cruzo sus brazos.

-Tú igual eres extraño, con esa aura de misterio que despides no me sorprendería si mi madre te aleje de mí de una patada-Dijo como si nada-Pero a mí no me importa la verdad, convivo con gente rara todos los días.

Grell le miro curioso, nunca antes una niña humana le había hablado así aparte del conde enano claro, pero ese niño era un caso muy aparte, mas esa niña le causaba curiosidad, debido a que despedía una energía de ella, en ese momento salieron los adultos que la acompañaban y se acercaron a ellos.

-¿Qué pasa aquí?-Pregunto MA seria y cruzada de brazos.

Gammon solo alejo a Nemesis de ese tipo extraño cargándola en brazos, la niña sin cambiar la expresión de su cara abrazo el cuello de su "padre adoptivo" que miraba al pelirrojo con la misma expresión seria.

-Solo me acerque a hablar con la niña-Dijo tranquilo-Muy linda ¿Es su hija?

-Sí, es mi hija-Hablo ahora Gammon frunciendo el ceño-Y no quiero que algún loco se le acerque.

MA solo sonrió desde que conoció a Nemesis, Gammon se comportaba muy protector con ella, como si realmente Nemesis fuera suya.

-Gammon calma-Dijo ya más tranquila la mujer con una sonrisa tranquila-No es malo que Nemesis haga nuevos amigos.

El peli negro solo miro a la que fungía como su "esposa" y suspiro cerrando los ojos tratando de calmar su impulso de gritarle a todo el mundo, ya bastante tenía que aguantar a los mocosos de Banica como para que viniera un pelirrojo que tenía pinta de ser un imán de problemas a hacerse amigo de Nemesis.

-Bueno señor ahm ¿Nombre pro favor?-Pidió la mujer sin quitar su sonrisa.

-Mi nombre es Grell Sutcliff-Se presentó sonriendo a ambos adultos y guiñando el ojo a Gammon, tenía que admitir que ese hombre era muy apuesto.

-Bueno Señor Sutcliff, mi nombre es Kayo Sodou, y ellos son mi esposo Gammon y mi hija Nemesis-Los presento la mujer.

Grell se le quedo mirando un momento, era muy joven para ser madre de una niña de unos 10 años y que decir del esposo de ella, pero solo encogió los hombros no dándole mucha importancia.

-Bueno fue un placer creo, me tengo que ir o si no me ira feo-Y dio media vuelta empezando a caminar-Nos veremos en otra ocasión pequeña Nemesis.

Lo vieron irse y luego se miraron los unos a los otros.

-Qué tipo tan mas raro-Hablo Gammon.

-A mí me cayó bien-Ma sonrió al joven.

-Simplemente no te entiendo.

-No lo hagas, yo no espero entenderte algún día.

Y empezaron a caminar regresando al bosque, tomados de las manos mientras Gammon cargaba a Nemesis que no dejaba de mirar atrás, pensando en que las cosas iban a cambiar para ella y su, muy peculiar, "familia".

En la noche.

Un hombre corría intentando escapar de las sombras que lo perseguían, cuatro pequeñas y varias más grandes, fue en ese momento donde el pobre diablo llego a un callejón sin salida donde fue acorralado por las sombras, empezó a entrar en pánico.

-No deberías de correr-Le dijo una voz masculina adulta-Si nos permite señor, estamos muy cansados y quisiéramos terminar esto para poder llevarle de comer a nuestra señora.

-¿Ya podemos atraparlo?-Pidió una voz de niña.

En ese momento una sombra rojiza apareció detrás del pobre hombre que estaba aterrado, la sombra lo tomo de los hombros y dos destellos rojos lo miraban.

-Ya tengo hambre-Dijo la voz sombría de una mujer.

-Hónrala y respétala-Dijeron las voces de dos niños que estaban alegres-A nuestra gran ama Conchita.

Y sin más la dama del cementerio termino de materializarse con una sonrisa, el hombre se separó de ella aterrado, momento aprovechado por uno de los nuevos subordinados de esa mujer que le lanzo varios cuchillos al hombre que grito antes de caer muerto.

-Bien hecho Dangger-Dijo Lich sonriendo, mirando a todos-Jumbo ¿Podrías?

El nombrado solo asintió y cargo el cadáver del hombre, Banica solo sonrió a todos antes de envolverlos a todos en una niebla negra y desaparecer de ahí dejando solo como evidencia pétalos de rosa y un hedor fétido en el lugar.


Bueno antes que nada quiero decir que esto pasa después del arco del circo que gracias a un amigo me lo spoileo, amigo si llegas a ver esto espero que Bancica-sama te coma XD