High School DxD no me pertenece, pertenece a su respectivo autor. Yo hago esto sin ánimo de lucro, solo para pasar el rato.

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-[Ddraig, Albion, Regulus, etc]

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Prólogo:

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Demonios. ¿Qué son los demonios? Todo depende de la religión o mitología en la cual te bases, pero todas tienen parte de verdad. ¿Qué es realmente un demonio? Los demonios son unas criaturas, una especie, así como la raza humana. Su origen era angelical. Si, habéis leído bien, angelical. Y no uno cualquiera. No. Eran ángeles del Dios Bíblico, pero que se convirtieron en justo lo contrario cuando, comandados por Lucifer, si, ese Lucifer, comenzaron la primera guerra contra Dios.

Por ese motivo fueron al Infierno o Inframundo, aunque es algo diferente a como lo cuenta la Biblia. En fin, la guerra comenzó y se detuvo, hasta que llegaron los ángeles caídos. Entonces, con su llegada, comenzó la mayor guerra sobrenatural que haya ocurrido. Una guerra que involucró a casi todas las Facciones del mundo.

La guerra se extendió por milenios y los números de las Facciones involucradas decrecieron enormemente. Los demonios se quedaron muy cerca de la extinción. Pero entonces llegó un descubrimiento que les salvó… a costa de otros. Dicho descubrimiento fueron las Evil Pieces. Son un conjunto de 15 piezas de ajedrez entregadas a los demonios de primera clase para aumentar sus filas mediante la reencarnación de otros seres en demonios.

Las piezas malignas fueron creadas por Ajuka Beelzebub usando los cristales disponibles en la Isla Agreas para ayudar a reponer el número de demonios después de la Gran Guerra que causó la muerte de innumerables demonios. Mientras que muchos demonios fueron capaces de adaptarse a las Evil Pieces, la Facción del Viejo Satán rechazó el uso de las Evil Pieces, creyendo que era una desgracia para los demonios reencarnar a los humanos y otras razas a los demonios.

Las Evil Pieces comúnmente se les dan a los demonios de pura sangre de Clase Alta, para que puedan reunir sus propios sirvientes. Los demonios reencarnados también tienen la oportunidad de recibir Evil Pieces si suben de rango y se convierten en un demonio de Clase Alta o Suprema.

Cuando un demonio recibe el derecho de obtener las Evil Pieces, se requiere que vayan al territorio de Satanás y toquen un monumento que funciona como una Pieza de Rey sustituta para registrarse como Rey.

Si un Rey desea intercambiar una Evil Piece con otro Rey, se debe realizar un ritual. Se debe dibujar un círculo mágico de propósito comercial. Los Reyes se paran al costado del círculo mágico mientras sus piezas están en el centro de él. Los Reyes aumentan sus auras mientras que ponen sus manos hacia adelante y activan los símbolos del Diablo para circular. Las auras de todos alrededor comienzan a brillar y sincronizarse, sin pasar por el círculo mágico. Con eso, el ritual terminará y el intercambio se habrá completado de una manera simple.

Suena muy bien, ¿verdad? Pero claro, solo suena bien o cuando tienes mucho talento o cuando eres uno de esos hijos de sangre pura. Pero las Evil Pieces no dejan de ser objetos que personifican una sola cosa… esclavitud.

Issei Hyodo una vez fue un humano puro, único y amado hijo del matrimonio Hyodo. Cuando Issei contaba con poco más de ocho años, un demonio lo secuestró porque detectó una Sacred Gear en él. Pero ni siquiera borró la memoria de sus padres, sino que lo secuestró delante de sus ojos, hiriéndolos fatalmente, aunque dejándolos vivos para que sufrieran.

Cuando llegó al territorio de ese demonio de sangre pura, este se lo dio a su hijo menor para que lo reencarnara como Peón, ocupando una simple pieza. Desde aquel día, la vida del pequeño Issei cambió como jamás hubiera deseado. Fue el comienzo de su nueva vida, llena de palizas, humillaciones, racismo, y todo aquello que conllevaba ser un esclavo, algo parecido a lo que sufrieron las gentes de África durante la época colonial.

Pero no todo fue malo para el pequeño. Cuando este logró despertar su Sacred Gear, después de una de las tantas palizas que su Rey le daba tanto para entrenarle para los Rating Game, como por propio gusto, así como para despertar de una vez su "valioso "don, descubrió que no poseía una simple Sacred Gear, como pensaban todos. El no poseía un Twice Critical, sino que portaba al poderoso Dragón Gales Ddraig.

Issei deseaba acabar de una vez con su situación, pero Ddraig le aconsejó que no era el momento, pues con su poder actual no podría hacer nada. Issei se tragó todo aquello y siguió el plan de Ddraig. ¿Y en qué consistía? En ir volviéndose más y más poderosos hasta alcanzar el nivel Clase Suprema y, una vez lo obtuviera, podría acabar con todo aquello y volver a su verdadero hogar.

Pero había un pequeño gran problema. ¿Cuál era? Que aquello significaba pasar más y más años sufriendo lo que la gran mayoría de reencarnados sufrían. Pero todo cambió, por lo menos en parte, cuando, poco después de cumplir los quince años, fue nuevamente secuestrado.

Le pusieron un trapo en la cabeza y se lo quitaron luego de ser tele transportado. Podía sentir que aún estaba en el Inframundo, en territorio del padre de su Rey, pero estaba lejos de la residencia principal. Lo primero que vio fue a un hombre, o un joven de aproximadamente más de veinte años. Junto a él habían otros dos, uno con gafas y otro alto y musculoso.

-Issei Hyodo. ¿Ese es tu nombre? – preguntó el de en medio.

-Si. ¿Quién eres tú?

-Me temo que las presentaciones vendrán después. Verás Issei Hyodo, tengo una propuesta para ti. – Issei frunció el ceño ante las palabras de aquel joven – Sé que eres el Sekiryuutei, y que eres más poderoso que un Clase Media. – un leve temblor en el labio delató al Hyodo, pero el otro solo sonrió de forma tranquilizadora – Tranquilo, no voy a hacerte nada. Como puedes comprobar, todos somos humanos. – a pesar de ello, la mirada de Issei se dirigió a cierto objeto que estaba al lado de con quien estaba hablando – Tranquilo. Esto no tengo pensado usarlo, a menos que me obligues.

-¿Y qué es lo que quieres de mí?

-Verás, mi grupo está bastante harto de la política demoniaca. Tenemos pensado hacer una revolución, que todos aquellos reencarnados, en contra de su voluntad, que quieren liberarse de sus cadenas puedan hacerlo. Pero, desgraciadamente, no estamos preparados para ello. Además, dudo que nos vieran con buenos ojos. Pero tú eres como ellos, y eres poderoso, pero puedes serlo aún más.

-No entiendo.

La sonrisa del hombre se volvió ladina y astuta.

-Queremos que te vuelvas mucho más poderoso, que colabores con nosotros y, llegado el momento, comiences la revolución de los reencarnados. Aclaro que nosotros lucharemos codo con codo con vosotros. Después de todo, para nosotros seguís siendo humanos, humanos obligados a convertirse en demonios.

-¿Y cómo piensas que haré eso? Me es imposible.

-¿Lo dices por la voluntad de las Evil Pieces? Tranquilo. Ya estamos trabajando en un modo de anular el poder de un Rey sobre sus Piezas así como en su extracción sin riesgo para el cuerpo o el alma.

Ante aquella revelación, los ojos de Issei se iluminaron con algo que hacía años que no se mostraba… esperanza.

-Si sois capaces de ello… estoy dispuesto a colaborar con vosotros.

Los tres hombres sonaron ante sus palabras.

-En ese caso, bienvenido a nuestro grupo, Sekiryuutei Issei Hyodo. – sonrió el líder extendiendo su mano al castaño, que la estrechó con una sonrisa esperanzada.

Sin duda alguna, las cosas ciertamente comenzaban a mejorar. No sabía cuándo iba a suceder aquello, pero tenía claro que la época donde los reencarnados se liberarían del jugo de los demonios estaba cada vez más cerca. Solo debía prepararse para ello, y con presteza.

La verdad es que esta idea se me ha ocurrido gracias a un review de Crow Artyom S en mi fic "El Último Súper Humano", aunque en mi caso tiene ciertas variantes. Tengo pensado que sea un fic bastante corto, quizás ni llegue a siete capítulos. Pero bueno, veamos como tira esto.