Capítulo 29: "Epílogo"

3 años después: "España"

Un atractivo joven de cabello negro estaba sentado en uno de los asientos de un gigantesco auditorio junto a dos pequeños niños de aproximadamente 2 años y una mujer mayor de cabello castaño que miraba con orgullo hacia un escenario en donde estaba una hermosa castaña de abultado vientre recibiendo de las manos de un hombre de cabello cenizo y lentes una diploma.

Bravo, hija, decía con orgullo la señora Nakazawa mientras aplaudía al ver a su hija recibir su diploma que la reconocía como médico deportiva.

Mami, decía uno de los pequeño que estaban en medio de Tsubasa y su suegra.

Si hijo mami, acaba de cumplir uno más de sus sueños hoy, respondió Tsubasa con orgullo.

Es que mi hija siempre consigue lo que se propone porque es muy inteligente y perseverante, dijo la señora Nakazawa.

Si, lo sé, por eso estoy tan orgulloso de ella, adelanto cursos y obtuvo su título antes del tiempo estimado, ahora no solo será apoyo del doctor Akita en la selección, será un medico más de la selección, respondió Tsubasa con orgullo mientras veía a la castaña tomarse una foto sosteniendo su diploma.

¿Y hablando de selección?, que bueno que te hayan permitido salir de la concentración para estar aquí, me imagino que volverás en cuanto la ceremonia termine, decía la señora Nakazawa con calma.

Así es suegra, por suerte España es la cede del mundial este año, así mi Sanae no tuvo que viajar a ningún lugar en su estado. No sabe cómo le agradezco que haya venido a apoyarla ya que yo pues he tenido que hacer muchos viajes no solo por el equipo sino también por la selección y pues no quería que mi Sany se quede sola, ya ve que en su estado y con Hayate y Daibú tan pequeños además con lo de su tesis no podía viajar para acompañarme, decía Tsubasa.

Si lo se hijo, no hay nada que agradecer hijo, Sany es mi hija, Hayate y Daibú mis bellos nietos era mi deber estar aquí con ustedes apoyándolos, como sabes la heladería la deje en muy buenas manos además necesitaba darme un descanso también, disfrutar de mis nietos de mi hija, poder estar presente en el nacimiento de mi futuro nieto o nieta además podre presenciar la final del mundial de cerca, dijo la señora Nakazawa sonriendo.

Sí, eso es cierto suegra, Sany, mis hijos y usted ya tienen su palco apartado en el estadio, allí estarán también mis padres y hermano que llegaran justo para la final, decía emocionado Tsubasa.

Una nueva final, dijo la señora Nakazawa al tiempo que la castaña bajaba del escenario.

Si una nueva final, tan difícil como las demás aunque esta es mucho más emotiva me enfrento a un gran amigo y maestro "Rivau" y aún súper rival como "Santana", ellos son los pilares de su selección pero en si la selección completa de Brasil es una potencia del futbol. Es la final que siempre soñé, los chicos y yo nos hemos preparado mucho para ello, respondió Tsubasa cuando Hayate y Daibú dijeron: Mami, mami.

Mis amores, decía la castaña mientras sus pequeños hijo estiraban sus manitas.

Sanae hija, felicitaciones, dijo la señora Nakazawa abrazando a la pelinegra.

¡Gracias¡ respondió la castaña.

¡Felicidades amor¡ dijo Tsubasa.

¡Gracias¡ dijo la castaña sonriendo mientras le mostraba su diploma.

Cumpliste tu sueño, nuestro sueño, ya tengo a mi médico deportiva favorita en casa, respondió Tsubasa abrazando a la pelinegra al tiempo que en la barriguita de la castaña él bebe que llevaba en su vientre también sentía alegría y lo demostraba dando pataditas al mismo.

Pateo, dijo Sanae sonriendo.

¿Pateo?, respondió Tsubasa sonriendo.

Si, dijo la castaña tomando la mano de su esposo para colocarla en su vientre al tiempo que Hayate y Daibú también colocaban su manita.

Se mueve, dijeron los pequeñines.

Si se mueve, respondió Tsubasa sonriendo.

¡Gracias por estar aquí¡ me alegra que te hayan dado permiso, dijo Sanae.

Si no me lo hubieran dado me las hubiera ingeniado para venir, no podía dejar de estar junto a ti en este día, tu siempre has estado junto a mi apoyándome en cada uno de mis sueños, viéndolos cumplirse de apoco, ahora yo estoy aquí viéndote cumplir también uno de tus sueños, respondió Tsubasa.

¡Gracias mi amor¡ dijo la castaña.

Luego de pasar unos minutos más con su esposa, hijos y suegra Tsubasa volvió al lugar donde estaban concentrados sus demás compañeros.

Hotel:

Tsubasa llegaba a paso rápido al lugar donde su grupo de amigos estaban concentrados.

Ya estás aquí, dijo Taro sonriendo.

Si, respondió Tsubasa.

Ya recibió su diploma Sany, dijo Ryo.

Si, ya es una médico deportiva, dijo respondió con orgullo Tsubasa.

Pues felicidades amigo, ya tiene quien cure tus lesiones en casa, cuando vea a Sany la felicitare, respondió Genzo.

Si es cierto. ¿Y cómo va su embarazo?, ¿Cómo están Hayate y Daibú?, dijo Taro.

Ellos están felices con la idea de que pronto tendrá a un hermanito o hermanita con quien jugar y Sany muy contenta contando los días para el nacimiento de nuestro nuevo hijo o hija, ya saben que Sany no quiso hacerse ecografía como para los gemelos, ella quiere que ser sorpresa el sexo de nuestro nuevo bebe, por suerte mi suegra está aquí para apoyarnos como se los comente, mis padres y mi hermano llegaran el día de la final, respondió Tsubasa.

¿Te imaginas que tu nuevo hijo nazca el día de la final?, decía Ryo sonriendo.

Sería algo que siempre recordaría, respondió Tsubasa.

¿Y si son nuevamente dos?, dijo Ryo sonriendo.

¿Dos?, decía Tsubasa sonriendo.

Ryo, no lo pongas nervioso, tenemos que estar concentrados para la final, dijo Genzo riendo.

Si es cierto, dijo Ryo riendo.

Fin de semana:

Una hermosa castaña de abultado vientre ingresaba junto a sus pequeños hijos y su madre al desde el cual vería la final de la copa del mundo.

Sany, dijo un niño de cabello negro corriendo a abrazarla.

Daichi, dijo Sanae sonriendo correspondiendo el abrazo.

Mis nietos hermosos, decía Natsuko mientras ella y su esposo abrazaban a los primogénitos de su hijo mayor.

Minutos después:

¿Cómo te has sentido hija?, dijo Koudai.

Estoy tranquila, no tengo molestias aun, respondió la castaña.

Qué bueno, dijo el padre de Tsubasa mientras veía a su hijo menor jugar con sus nietos.

Ya va a comenzar, dijo la señora Nakazawa al ver a los equipos salir al campo haciendo que todos tomen sus ubicaciones.

Vamos mi amor, vamos por este tu mayor sueño, este es tu primer mundial ya no juvenil sino de un torneo de mayores, el más conocido a nivel mundial, pensaba la castaña mientras las notas del himno de su país empezaban a sonar.

Cancha de juego:

Tsubasa entonaba el himno de su país con tanta fuerza que su voz parecía escucharse en el estadio.

Luego de haberse entonado ambos himnos se dio el saludo respectivo de los equipos.

¡Suerte amigo¡ dijo Rivau al tomar la mano de Tsubasa.

¡Suerte también a ti¡ dijo Tsubasa con una cálida sonrisa.

Nuevamente nos vemos las caras pero esta vez el triunfo será de mi selección Rivau y yo lo conseguiremos, ahora ambos somos parte de un equipo así como lo son en Barcelona él y tú, dijo Santana al tomar la mano de Tsubasa.

Eso lo veremos Santana, yo no pienso permitir que le ganen a mi selección por esa gran admiración y gratitud que siento por Rivau, daré mi mayor esfuerzo al igual que todos mis compañeros para ganarles, respondió Tsubasa con firmeza

Luego de los respectivos saludos los jugadores tomaron sus ubicaciones.

Genzo se acomodaba sus guantes al tiempo que el árbitro dio el pitazo inicial y Brasil empezó a tocar el balón.

Desde un palco una ansiosa castaña veía al equipo Brasileño, comandado por un gran amigo de su esposo y de ella, dirigirse con el balón en los pies al arco.

Rivau es muy bueno, pero mi Tsubasa también, pensaba la castaña mientras observaba al talentoso jugador Brasileño disparar al arco con tanta potencia que obligo a Genzo a saltar lo más alto que pudo para desviar el balón y generar el primer tiro de esquina del partido.

Son muy buenos, dijo Koudai.

Si, respondió la castaña mientras colocaba sus manos sobre su vientre al tiempo que sus pequeños hijos se abrazaban a ella.

Vamos amor, defiende ese tiro, pensaba la castaña al ver ejecutarse el tiro de esquina.

Los primeros 45 minutos culminaron empatados, los jugadores fueron a los camerinos un tanto conformes con los resultados.

Camerinos:

La segunda mitad tenemos que salir con todo,…., decía el entrenador de Japón mientras sus pupilos escuchaban con atención sus indicaciones.

Tras los 15 minutos de descansos los jugadores volvieron al terreno de juego. El segundo tiempo fue mucho más cerrado que el primero, todos los balones parecían perderse en el medio campo y no se podía avanzar más, varios jugadores japoneses parecían lesionados e incluso agotados.

Una castaña miraba el partido con esperanza mientras sentía unos pequeños dolores en su vientre.

Tranquilo chiquito, estás tan emocionado como yo de ver a tu papito ganar, pensaba la castaña mientras acariciaba su vientre con una de sus manos y con la otra las cabecitas de sus gemelos.

Luego de algunos minutos tras un extraordinario pase de Hyuga Tsubasa y Taro impactaron el balón al mismo tiempo abriendo el marcador del partido.

Gollllllllllllll, gollllllllllll, gritaban en el estadio los Japoneses presentes.

No, no puede ser, esto, no puede estarnos pasando, pensaba Santana mientras miraba confundido la celebración de los japoneses.

El partido se reanudo y Santana herido en su orgullo trataba de tomar el balón.

Ten paciencia, dijo Rivau.

Solo faltan 3 minutos, respondió Santana arrojándose al piso para recuperar el balón que había perdido uno de sus compañeros y dirigirse hacia el arco.

Los aficionados Japoneses contaban los pocos minutos que quedaban para el final del encuentro cuando de repente de una violenta patada hacia el arco Santana silencio a todos los seguidores Japoneses presentes en el estadio al empatar el marcador.

Gol, gol, gol, Japón no podía ser mejor que nosotros, dijo Santana con orgullo mientras sus amigos lo felicitaban.

El partido culmino 1-1 viéndose obligado a jugar tiempos suplementarios.

No lo puedo creer, no pensé que Japón nos forzaría a llegar a los suplementarios y hasta por poco y nos ganan, decía un jugador Brasileño.

Si es cierto yo pensé que solo Ozora jugaba tan bien pero veo que me equivoque, dijo otro.

Japón tiene muy buenos jugadores no solo es Tsubasa, tienen un extraordinario portero titular y ni hablar del suplente también es muy bueno, lo pude ver en otros partidos, tambien tiene otros jugadores muy buenos como Hyuga, Misaki, Misugi, Matsuyama entre otros, decía Rivau.

Si es cierto por ello nos contó tanto abrir el marcador, pero en los suplementarios tenemos que seguir anotando, dijo Santana.

Así es tenemos que liquidar esto en los tiempos suplementarios, dijo Rivau.

Luego de algunos minutos se reanudo el tiempo suplementario, pelotas iban y venían de un lado a otro pero no podía incrementarse el marcador.

¡Tsubasa mi amor, lucha por tu sueño¡ pensaba la castaña mientras veía a su esposo disputar una pelota con Rivau.

Los minutos pasaban y pasaban, ya habían culminado los primeros 15 minutos del suplementario, Taro y Ryo habían tenido que abandonar el campo por lesiones entrando en su reemplazo otros de sus compañeros.

El partido se reanudo pero todo seguía igual parecía que ninguno de los dos equipos podían incrementar más el marcado.

El árbitro miraba su cronometro, mientras los jugadores trataban de tomar el balón y armar una buena jugada colectiva.

No, podemos perder, por todos los que han venido a apoyarnos, por mi esposa e hijo, tengo que ganar, pensaba Tsubasa mientras echaba a correr tras un balón.

El balón es mi amigo, el balón es mi amigo, pensaba Tsubasa al tiempo que tomo el balón con sus pies y emprendió su carrera hacia el arco rival.

Justo cuando el árbitro iba a sonar su silbato el balón que había sido disparado segundos previos por Tsubasa entro al arco.

Gol, dijo el árbitro dando por valido el gol de Tsubasa al tiempo que hacía sonar su silbato dando por terminado el encuentro.

Palco:

¡Ganamos¡ ¡ganamos¡ su papito anoto, decía una emocionada castaña al tiempo que parecía sentir las primeras contracciones que anunciaban el futuro nacimiento de su nuevo hijo.

¿Hija te sientes mal?, decían la señora Nakazawa y Natsuko al ver a la castaña muy pálida.

Me duele mucho, dijo como pudo la castaña.

Debió ser la emoción, se te adelantara el parto, dijo Koudai.

¿Usted cree?, respondió la castaña con voz adolorida.

Si hija, mi esposo tiene razón, dijo Natsuko.

Sera mejor llevarte al hospital, dijo la madre de la castaña.

No podre ver la premiación, ni bajar a felicitar a Tsubasa, dijo con nostalgia la castaña.

Ustedes siempre están juntos hija, porque los dos se llevan aquí, respondió la señora Nakazawa colocando una de sus manos en la altura del corazón de la castaña.

Si, tienes razón madre, siempre estamos juntos porque siempre estamos pensando en el otro estemos donde estemos, dijo la castaña.

Así es hija, vámonos al hospital mi nuevo nieto está por nacer, respondió emocionada la madre de la castaña mientras tomaba del brazo a su hija y con su otra mano disponible sujetaba a la manito de uno de sus nietos pues el otro se había tomado de la mano de su madre.

Los acompañamos, dijo Natsuko.

¡Gracias¡ pero sería mejor que se queden para que le digan a Tsubasa a donde fui, dijo Sanae con voz adolorida.

Está bien hija, dijo Koudai.

2 horas después:

Tras la premiación respectiva y la entrega de la copa Tsubasa buscaba con la mirada en el palco a su esposa y familiares pero solo logro ver a sus padres y a su pequeño hermano.

Sanae, ¿Dónde está Sanae?, se preguntaba Tsubasa mientras miraba al palco.

¿Te pasa algo?, dijo Taro que estaba junto a él.

Ya me tengo que retirar, sigan festejando chicos, respondió Tsubasa mientras echaba a correr hacia el palco.

Minutos después:

¿Está en el hospital?, decía Tsubasa alarmado.

Si hijo, pero tranquilízate, vámonos de una vez, tu niña acaba de nacer, dijo Koudai.

¿Qué?, dijo Tsubasa emocionado.

Si nos los acaba de decir la madre de Sany, fue una niña, dijo Natsuko.

Vamos entonces, dijo Tsubasa.

Tsubasa y sus padres partieron lo más rápido que pudieron en un auto. Luego de algunos minutos ya estando en el hospital Tsubasa entro al lugar donde su esposa estaba junto a su bebita y a sus hijos mayores.

¡Sany¡ dijo Tsubasa sonriendo.

¡Felicidades amor¡ eres un campeón, te presento a nuestra princesita, decía Sanae mirando con dulzura al bebe que sostenía en sus brazos.

Es muy pequeñita, decían Daibú y Hayate a la vez mientras la miraban.

Si es muy pequeñita por ello debemos cuidarla mucho, ahora tengo a mis cuatro grandes tesoros juntos, ustedes dos serán mis sucesores algún día y su hermanita nuestra princesita a quien la protegeremos siempre, espero que ustedes tres logren como su madre y yo cumplir todos sus sueños cuando sean grandes, claro nosotros siempre los apoyaremos, decía Tsubasa mirando a sus hijos por momentos al tiempo que miraba a su hija recién nacida.

Los lograran cumplir amor, con esfuerzo, sacrifico y mucha perseverancia se van construyendo los sueños, el secreto es nunca dejarlos por más obstáculos que se nos presentes siempre ser firmes en ellos, solo así se puede ser feliz, respondió Sanae.

Así es amor, dijo Tsubasa acariciando con una de sus manos el rostro de su amada.

Años después:

Un hombre de cabello negro se encontraba en un amplio jardín junto a un par de jovencitos también de cabello negro de aproximadamente 16 años, jugando con un balón mientras una niña de cabellos castaños de aproximadamente 13 años dibujaba en un lienzo al tiempo que una hermosa mujer de cabello castaño y mandil blanco entraba a su casa.

Mamá ya llego, dijo la menor de ellos al notar la presencia de su madre.

Si es cierto, dijo el hombre de cabello negro.

¿Cómo están mis amores?, dijo la castaña acercándose a saludar a sus hijos y esposo.

Bien, dijeron los tres jovencitos.

Ansiosos por verte, ¿Cómo te fue?, dijo Tsubasa feliz.

Bien amor por lo visto hoy saliste temprano, decía Sanae mientras le arreglaba el polo que llevaba puesto su esposo.

Si amor, hoy termine temprano la practica con los muchachos pues quería llegar antes que tú para prepararte algo con los chicos, dijo Tsubasa.

¿Qué?, respondió la castaña intrigada.

Ven acompaños, dijo Tsubasa tomando la mano de su esposa para llevarla hasta el comedor de su casa en donde había preparada una cena romántica para dos.

Bueno, nosotros nos vamos a nuestras habitaciones, ¿no Daibú y Jim?, dijo Hayate.

Si, si, disfruten su cena, dijo Daibú sonriendo mientras caminaba tras sus hermanos.

¿Ustedes cuatro hicieron todo esto?, dijo Sanae sorprendida mirando los platillos que habían en una mesa.

Si amor, los cuatro lo hicimos, tu siempre me has sorprendido con muchas cosas a mi antes de estar casados y muchas más cuando nos casamos, por ello quise prepararte algo especial hoy que cumplimos un año más de casados, respondió Tsubasa.

¡Gracias¡ siempre soñé con una cena romántica preparada por ti, dijo Sanae mientras unas lágrimas salían de sus ojos y humedecían sus mejillas.

No llores amor, no es motivo para llorar y me alegra haberte podido cumplir este sueño porque como alguna vez me lo dijiste, tus sueños siempre serán mis sueños y los míos los tuyos, dijo Tsubasa mientras limpiaba con sus manos las lágrimas que habían humedecido el rostro de la castaña.

Así es, respondió Sanae antes de sentir los labios de su esposo sobre los suyos besándola con el mismo amor de siempre.

FIN

Nota:

Los personajes no son míos le pertenecen al gran maestro Yoichi Takahashi, yo solo hago uso de ellos para mis historias tratando de mantener en lo posible las personalidades de los mismos.

Esta bella historia de amor como abran notado llego a su final. Al ser la primera historia alterna de "Captain Tsubasa" que escribo trate muy a mi manera de poder enlazar algunos de los eventos que pasaron en el anime y manga, agregándole a ello algunos personajes míos y variándole un poquito el trama y los tiempos en que pasaron este eventos.

Ahora sí: ¡Gracias a todas aquellas personas que me acompañaron con esta mi primera historia de "Captain Tsubasa" con la que doy inicio a una "Mini colección alterna" para este bello anime¡ ¡gracias de todo corazón a todas las personas que la leyeron¡ ¡gracias a las personas que se tomaron el tiempo de dejaro un comentario¡ eso es muy valioso para mí.

Espero el final y el epilogo haya sido de su agrado y mi historia haya llegado a cubrir sus expectativas. A su vez aprovecho también para pedirles disculpas por cualquier error ortográfico o de redacción que se me haya pasado en la misma, yo no soy una escritora profesional solo una aficionada de la escritura mi interés al escribir es transmitir un mensaje con mis historias por ello no me fijo mucho en la escritura a veces pues al escribir rápido en una computadora prestada no me alcanza el tiempo para las correcciones.

Así mismo les informo que el día lunes sino tengo inconvenientes estaré publicando una nueva historia de amor alterna de la pareja Tsubasa – Sanae para todos los amantes de "Captain Tsubasa" , esta nueva historia lleva por título "Tú Nombre", te invito a dejarte cautivar por ella.

Con mucho cariño.

PrincesaLirio.