Flecha blanca. 1: El barco.
Una familia compuesta por trece personas pasa sus vacaciones con alegría en un crucero que la una de las menores logró ganar en base a un concurso de ciencia. El rostro de los organizadores al darse cuenta de los gastos que tendrían que pagar por tan gran familia.
En esa familia hay once mujeres y dos hombres, de los cuales uno es un niño de cabello blanco que ocupa el puesto de hijo del medio en su familia. Con cinco hermanas mayores y cinco menores.
Cargando a su hermanita más joven el niño de cabello blanco juega en la piscina infantil algo envidioso de que no es su turno en el tobogán con sus hermanas mayores.
-Descuida Lincoln, una vez que termine tu turno de cuidar a Lily podrás ir al tobogán un rato. –Su madre le trae un helado para hacerlo sentir mejor de tener que cuidar a su hermanita mientras las mayores están divirtiéndose en la piscina.
-De acuerdo mamá, de todos modos me encanta estar con Lily. Es una niña tan linda y bien portada ¿No es así Lily? –Pregunta el joven de pelo blanco a la pequeña bebita rubia y solo recibe unas risitas en respuesta.
A su madre le da ternura y orgullo el cómo su hijo se toma con madurez la responsabilidad de cuidar a sus hermanitas, siempre lo ha hecho con gusto y según sus hermanas menores es el mejor niñero de todos. No puede esperar a que sea mayor de edad. Desde siempre ha pensado que Lincoln debería quedarse con la custodia de Lily en caso de que algo les pasara a ellos.
Su hija Lori será la mayor y más responsable pero algo en Lincoln le dice que haría un mejor trabajo que ella.
-Gracias por el helado mamá. –Su hijo le da un abrazo a su madre antes de retirarse a dar un paseo con su hermana en su carriola.
-Cuídense muchachos. –Dice Rita con alegría mientras los ve alejarse. Mientras escucha dos gritos de niñas en el otro lado de la piscina infantil. Deben ser sus gemelas peleando por alguna tontería de nuevo. Eso de ser madre nunca acaba.
En la cubierta Lincoln mira con su hermanita el océano, las olas golpeando el barco, gaviotas volando en alta mar y un brillante sol iluminando el día de las costas de Asia. Sin duda una grandes vacaciones que le debe agradecer a su hermanita Lisa por ganárselas.
-Lincoln, literalmente me tenías muriendo del susto. Mamá te habrá dejado irte solo pero sabes que si caminaras por aquí con Lily al menos deberías estar acompañado por mi o Luna, esto no es Royal Woods para que puedas estar solo. –Su hermana mayor lo regaña pero en su voz se escucha que esta legítimamente preocupada.
-Lo siento Lori, Lily quería dar un paseo. ¿Quién soy yo para decirle que no? –Lincoln se excusa algo temeroso mientras le pone a Lily en su cara y ella hace una expresión de tristeza adorable.
-Tienes suerte de que sea la cosita más adorable del mundo, sino estarías en problemas. –Dice Lori con seriedad pero de inmediato ambos empiezan a reírse.
Los dos voltean al mar mientras ven una gaviota volando por el área de manera solitaria.
-Espera ¿Qué no las gaviotas solo salen a alta mar para morir? –Pregunta Lori confundida.
En ese segundo la gaviota se deja caer pero el lugar del océano termina estampándose en la cubierta del barco.
-Bueno eso fue algo. –Dice Lincoln ligeramente impresionado.
A Lily le da gracia eso y desea jugar con el cadáver del ave por lo que intenta alcanzarlo.
-Mira eso, Lily posiblemente necesitara tratamiento psicológico para no jugar con cadáveres ¿No es así Lily? –El peli blanco vuelve a hablarle en tono adorable para que su hermanita se ría.
A Lori se le hace adorable esa escena, no puede evitar tomarse una foto con ambos para subirla a sus redes sociales. Pocas veces Lincoln esta de humor para hacer lo que sea con ella. Quizá debería dejar de apartarlo por su edad, no sabe cuantos momentos de inocencia le puedan quedar a su hermanito y pero si esta consiente que llegara el día en el que él sea un adolescente gruñón que no querrá hacer nada con él.
-Lincoln… Habrá una noche de laser tag en el área de juegos del crucero. Pensé que sería divertido que pasemos un poco de tiempo de calidad en algo que tú quieras. –Insinúa Lori con calma.
-¿Bromeas? Sería genial jugar al laser tag contigo… Pero. –Pone una mueca triste.
-¿Pero? –Lori se preocupa al escuchar eso, de seguro dice que quiere hacer algo más maduro.
-Pero… Nos inscribí al torneo de mini golf del barco de padres e hijos. –Le muestra un poster del torneo.
Lori lo toma y se emociona al verlo, siempre ha querido saber cómo sería derrotar a extranjeros en el mini golf.
-Sé que no eres mi madre pero dijeron que podrían hacer una excepción. ¿Qué dices? –Pregunta Lincoln emocionado.
A su hermana mayor le conmueve mucho que su hermano quiera hacer algo que a ella le gusta para poder pasar el tiempo juntos. Le hace feliz saber que su hermano es un chico amable que hace lo que sea para que ellas puedan ser felices a su lado.
-Hecho. Literalmente vamos a destruir a la competencia tú y yo. –Responde Lori entusiasmada por poder pasar el tiempo con Lincoln.
…
Ya en la noche Lincoln todavía cargando a Lily camina por la cubierta con un traje de golfista profesional y un palo de titanio para el torneo de mini golf, quiere verse bien para cuando él y Lori destrocen a la competencia.
-Lily será fabuloso. Solo Lori, tú y yo en un torneo donde ganaremos un lindo trofeo que finalmente ira a mi vitrina. A menos que Lori lo quiera, en ese caso puede tenerlo. –Lincoln se encoje de hombros por la indiferencia y por el frío del fuerte viento que se está desatando. Qué bueno que le trajo ese suéter a Lily para que no se tenga que resfriar.
Sin siquiera verlo venir un enorme empujón arrastra a ambos por los suelos. El golpe fue tan potente que agito el barco desde babor a estribor.
Lincoln asustado y aún tirado ve la carriola de Lily moverse hacia la orilla. Con la mente en blanco y adrenalina corriendo por su cuerpo corre directo a la carriola y se aferra a ella.
Lily se encuentra llorando. La pequeña esta aterrada y todo lo que ve son movimientos bruscos y un cielo oscuro. No puede parar de gritar mientras todo se mueve a su alrededor. Pero en su desesperación ve una cabeza blanca, dientes de conejo y pecas en un rostro amigable.
-Tranquila Lily, tu hermano mayor te cuida. Aquí estoy. –Lincoln le habla con dulzura mientras la quita de la carriola y empieza a cargar para moverse a toda prisa.
La bebé sin entender lo que pasa se siente segura, se siente segura en los cálidos brazos de su hermano. Lo suficiente para aferrarse a él.
Lincoln tiene miedo, empieza a llorar de la desesperación mientras intenta abrir cualquier puerta del barco sin ningún éxito. Todas están cerradas o trabadas y el viento empieza a volverse lo suficientemente fuerte para empezar a arrastrarlo. No quiere que nada malo le pase a Lily, ella es su responsabilidad. Él quiso darle un paseo nocturno antes del torneo. Tremendo estúpido que fue.
Con la mente nublada intenta recordar las palabras de advertencia que su hermanita Lisa, su madre e incluso hermana mayor le dieron a él y su familia antes de subir al crucero. Lo que se debe hacer en caso de emergencia.
"En caso de que el barco empiece a hundirse los lugares más seguros en definitivo son los botes de emergencia."
No recuerda quien lo dijo pero en definitiva es un consejo útil en estos momentos. Para su fortuna cada orilla del barco tiene ocho de esos.
Todvaía sintiendo la adrenalina en su cuerpo Lincoln corre con su hermanita en brazos hacia uno de los botes y con algunas dificultades logra acceder a uno de ellos. Dentro temblando bastante se aferra a su hermanita mientras se pone a llorar.
No le gusta que la gente lo vea triste, nunca le ha gustado que se molesten en el por algo tonto y es mejor no preocuparlos. Por eso cuando quiere un momento de debilidad simplemente se encierra en su cuarto y llora con todas sus fuerzas, para así no reprimirse y no tener nada de qué preocuparse luego pero ahora agradece que solo Lily lo vea así. Es una bebé que posiblemente no tendrá memorias de todo esto.
-Todo estará bien Lily, tu hermano está aquí. Nos tenemos el uno al otro. –Dice más para él mismo que para Lily mientras siente los constantes golpes del mar moviendo el barco.
Su hermanita siendo lo que es; Una niña inocente que lo ama se aferra a él en un abrazo para que pueda calmarse. A veces a Lincoln le sorprende lo lista que es su hermanita. Quizá no como Lisa pero sin duda es muy inteligente al poder reaccionar de manera tan consiente a su alrededor.
Con un poco más de calma le da un beso en su frente y se recuesta para estar más tranquilo y cómodo. Todo el cansancio emocional lo hace querer dormirse no sin antes aferrarse aún más a su hermanita.
Mientras despierta lo primero que siente es la baba de Lily en su pecho. Le da gusto sentirla, que bueno. Debió ser una pesadilla pero desde cuando su cuarto estuvo tan iluminado o ha tenido el olor a sal marina….
Con mucho miedo Lincoln se levanta y ve que su barco junto otro vacío están encallados en la orilla de alguna isla desierta. Puede escuchar a las gaviotas volar por los aires y sentir la brisa golpeando su cuerpo. Empieza a ventilarse mientras ve a su alrededor aquella isla llena de vegetación y piedras.
-Oh no. –Susurra Lincoln destrozado mientras carga a Lily y la abraza con fuerza.
…
Un hombre, reconocido psicólogo por sus prácticas poco ortodoxas, su brutalidad total y uno que otro escándalo en el periódico con su nombre involucrado corre lo más que puede. Desde un accidente ha tenido una cojera permanente y la situación en la que se encuentra no es favorable.
Una flecha le atraviesa la pierna en donde se original el dolor y gritando con mucho miedo cae al suelo mientras intenta para el sangrado.
Del callejón en el que se encontraba sale una figura aterradora. Es alto, no inhumanamente alto pero si pareciese que la genética lo benefició en ese aspecto.
Usa una capucha blanca que le cubre todo el cuerpo y de su gorro se puede apreciar algo de cabello pero por la iluminación no se distingue el color. Usa un cubre boca igual de blanco que el resto de su vestimenta. Parece un ninja pero este tiene la peculiaridad de cargar con arco y flecha.
-Doctor Paul. Hace unos años se empezó a involucrar con una jovencita menor de edad que se enamoró de usted. De alguna manera le logró ganar al sistema legal y salir libre de esos cargos de pedofilia que bien merecidos los tenía y ahora aquí está frente a mí. –De su carcaj saca una flecha para cargarla y apuntarla directo al hombre.
-Por favor, yo no hice nada malo. Eh intentando evadir esa parte de mi vida, te lo suplico déjame ir y nunca me veras de nuevo. –Pide ese hombre asustado por lo que esta viendo.
-No. Conozco a esa jovencita, es terca y haría lo que fuera para tenerlo y lo peor… Usted sabe bien que la aceptaría de nuevo. Le ha fallado a esta ciudad. –En un tono frío y sin piedad alguna suelta la cuerda y la flecha a una velocidad imperceptible se entierra en el ojo derecho del hombre matándolo al instante.
Esa persona misteriosa toma una foto y después dispara una flecha con un cable puesto para así poder subir a una azotea y desaparecer en la noche.