Advertencia: Fic meramente SMUT, vease, fic sin nada más y nada menos que LEMON/PORNO/HENTAI, etc.

Este fic era perteneciente al usuario llamado GaRbs, pero yo le pedí el adoptar esta historia.

Otra cosa es que hare unos cuantos (muchos) cambios en la historia, y no hay limite alguno con las mujeres.

Obviamente, Saber estará, pero nos tardaremos un poco en llegar a eso.

Oh, y otra cosa es que en esta historia es muy probable (a quien engallo, es un hecho) que una de las mujeres del Oc auto inserción será Irisviel, digo, si yo fuera alguien con el poder de Gilgamesh pero mi racionalidad, me la follaria :T.

Y habrá muchas otras mujeres, diablos que hasta estoy considerando meter a Tiamat y Kiara Beast :V incluso estoy considerando un Fem Shirou 7-7 eso si, habrá Fem Iskander :T

Una cosa es que solo los primeros y algunos otros capítulos serán en primera persona, ya que no soy bueno escribiendo de ese modo.

Dejando eso de lado… ¡VAMOS AL LEMON:

Siento mi cuerpo entumecido, lentamente recupero mi consciencia y puedo discernir a mi alrededor.

Lo único que recuerdo es el irme a dormir… nada más.

No sé quién soy ni cuál es mi nombre, pero… información de repente llega a mi mente.

Estoy siendo invocado como un Servant en la Cuarta Guerra del Santo Grial.

Cosas como mi familia, mi nacimiento, mi edad, mi apariencia y mi vida misma no existen en mis memorias. Lo único que tengo es mi actual personalidad y la certeza de que antes de esto era un hombre.

El Santo Grial empieza a informarme de mi situación actual y de todo lo que debo saber para servir adecuadamente en esta era.

Año 1994.

Lugar, Ciudad de Fuyuki en Japón.

Puedo sentir como conocimientos y recuerdos que no son míos corren por mi mente, dándome todo lo que necesito para hacer realidad todo lo que alguna vez solo pude haber soñado.

Soy Gilgamesh, el Espíritu Heroico más poderoso de todos, el rey más antiguo de la humanidad, el Rey de Héroes que dio comienzo a todos los mitos de héroes posteriores y que posee los prototipos de todos los Noble Fantasmas.

O al menos esa es la persona cuyo cuerpo poseo ahora.

Con todo el poder que poseo ahora no hay nada que no pueda conseguir, y a pesar de las asombrosas capacidades que tiene este mundo, puedo recordar que los cuerpos de las chicas de TYPE-MOON siempre me parecieron de los mejores.

Mi invocación es completada y me encuentro enfrente de Tohsaka Tokiomi, el mago que me invocó, mi Master, Kotomine Kirei, aprendiz de magia de Tokiomi, un ejecutor de la Santa Iglesia y otro participante de esta Guerra, un Master y por último el supervisor de la Guerra enviado por la Santa Iglesia, Kotomine Rissei, padre de Kirei.

Una vez que comprendo la situación en la que estoy decido que debo de ser cuidadoso con todo lo que sé, no puedo salirme por completo de personaje o sino no podré predecir todo los eventos que están a punto de suceder.

Lo más problemático de todo es mi Master, los incontables tesoros de la Puerta de Babilonia serían inútiles si no puedo usarlos por culpa de los Sellos de Comando. Y aunque podría matar a Tokiomi por la espalda antes de que los use, tal acción me dejaría sin un Master para suministrarme energía mágica, y la verdad es que no me siento cómodo devorando almas inocentes solo para mantenerme con vida… pero considerando la Acción Independiente que tengo no se si sea necesario.

No, por ahora debe actuar como un Servant lo haría, aunque claro no sin unos que otros caprichos para mi beneficio.

Tokiomi parece complacido solo con verme, pues sonríe como si ya pudiese ver el Grial en sus manos.

—¿Eres tú el Rey de Héroes, Gilgamesh?— me pregunta mientras mantiene una postura firme pero respetuosa… ya entiendo porque el Gilgamesh "real" lo odiaba.

—Si no puedes reconocer mi grandeza solo con mirarme es que mi invocación fue resultado de mero azar— dije, tratando de jugar bien al papel de rey orgulloso y arrogante que es el verdadero Gilgamesh.

—Por favor perdone mi error. Oh gran Rey de Héroes, pero le aseguro que su invocación fue detalladamente planeada, pues el invocar a un héroe tan grande como usted no sería jamás mera coincidencia— dice mientras inclina la cabeza tratando de ganarse mi buena voluntad.

—Tu error solo será enmendado si provees el adecuado entretenimiento para un rey como yo— digo con toda la seriedad que puedo a la vez que dejo libre un poco de mi intención asesina para probar que mis palabras no han de ser contradichas, aunque internamente me encuentro divertido.

—Solo dígalo y trataré de hacer lo mejor que pueda para cumplirlo— dijo calmadamente el Tohsaka.

—Deseo satisfacer mis deseos carnales en la cama con una mujer, y será mejor que esta ofrenda sea digna de mí y no solo una prostituta barata o una sirvienta cualquiera, porque de lo contrario pagaras tu imprudencia con tu vida, o con un Sello de Comando, si es que tienes las agallas suficientes para ordenar a tu rey.

Tokiomi claramente muestra temor en su expresión, pero rápidamente sonríe tratando de calmarse y controlar la situación.

Debo cuidarme de no exagerar con este acto o de lo contrario podría forzar a Tokiomi a usar sus Sellos para realizar órdenes absolutas a contra de mi voluntad.

Lidiar con ellos tal vez no sería imposible pero sí que sería muy problemático, prefiero evitar eso.

Ahora solo espero que Tokiomi cumpla las expectativas de mi demanda. Y ahora que lo pienso, recuerdo que Kirei tenía a Assassin como Servant, el Servant cuyo puesto solo puede ser ocupado por Hassan-i-Sabbah, el "El Viejo de la Montaña", seudónimo que usaron los 19 líderes de una secta medieval islámica de asesinos.

Este Hassan en particular tiene como Noble Fantasma el poder dividir su alma en 80 diferentes cuerpos debido a su desorden de personalidad múltiple, capacidad que usó en vida para así poder adaptar sus habilidades para cada situación, lo que le hizo ganar el apodo de el Hassan de los 100 rostros.

Y entre las múltiples personalidades de este peculiar Assassin, había una que tenía el cuerpo de una mujer bastante atractiva.

Ni siquiera yo sé si Assassin es originalmente un hombre o una mujer, pero no importa, si esa personalidad tiene más que solo la apariencia de una mujer entonces podré disfrutar de su cuerpo.

—Por supuesto mi rey, tu pedido será cumplido de inmediato— Tokiomi se inclina respetuosamente y va a hablar con Rissei y Kirei.

—Kirei-kun debo pedirte que uses la personalidad femenina de tu Servant Assassin para atender el pedido de Gilgamesh— le pidió al sacerdote que asintió solemnemente .

—Entendido. Muéstrate, Assassin— al terminar su orden, la susodicha Servant se materializa de forma espiritual a su forma física.

La Servant en cuestión es la personalidad femenina de Assassin, una mujer alta completamente vestida de negro de muy ligera y atractiva vestimenta, cabello azul con tono morado y una máscara con forma de calavera que le cubre la cara casi hasta la barbilla.

—A la orden, Master— ella dice con una madura y erótica voz mientras inclina su cabeza obedientemente.

—Seguramente has oído toda la conversación, confió en que tienes las habilidades para lidiar con esta tarea— fue lo que dijo Kirei inexpresiva y desinteresadamente.

—Descuide Master, realizare esta tarea y cumpliré sus expectativas— responde Assassin sin ningún tipo de molestia en su voz.

Ella se acerca hacia mí y se arrodilla con la gracia de una mujer que sabe su lugar en frente de alguien que es superior a ella.

—Mi cuerpo está a su completa disposición— dice con una voz que irradia la sensualidad de una prostituta barata a la vez que la gracia de una geisha y la servidumbre de una esposa dedicada a su hombre.

Dejare que primero sea ella la que me proporcione mi propio placer. De seguro la personalidad femenina de Assassin ha de tener mucha experiencia en la cama fruto de sus muchos asesinatos.

Pero primero he deshacerme de la presencia de observadores innecesarios, no puedo concentrarme con tantas personas viendo.

—Ustedes dos, largo de aquí— declare tangente, con un tono serio que no permite ningún tipo de cuestionamiento.

—Como ordene mi rey, le dejaremos para que pueda estar a gusto— responde Tokiomi mientras continua con su acto de perro faldero.

Una vez que los espectadores no deseados han abandonado la habitación es que puedo ponerme en acción.

Materializo el Noble Fantasma de Gilgamesh, el cual puedo usar como si fuese el verdadero. Se trata de una extraña espada que resembla a una llave, la uso para abrir el portal a la dimensión que se encuentra la bóveda de Gilgamesh, la cual contiene sus incontables tesoros.

Bab-ilu, que traducido sería puerta de dios.

—Gate of Babylon." –Revelo su verdadero nombre como requisito de activar sus efectos.
Noto como Assassin se pone un poco tensa, aunque lo disimula muy bien. Parece ser que teme que la ataque al ver que he usado mi Noble Fantasma.

—No te preocupes, por el momento no tengo intención de eliminarte, a no ser que me dejes insatisfecho— digo con una sonrisa cruel, tratando de mantener mi fachada.

—Tengo confianza en mis habilidades y haré lo mejor de mí para complacerlo, solo espero que eso sea suficiente para usted— responde sin el más mínimo rastro de inseguridad.

De los innumerables tesoros de la bóveda ya sé cuál es el que quiero, una elegante cama matrimonial que incrementa la lujuria de aquellos que la usan, perfecta para esta ocasión.

Una vez que la cama está en su lugar desmaterializo toda mi armadura, revelando así el cuerpo desnudo del Rey de Héroes.

Los abdominales perfectamente marcados, bíceps, muslos y piernas torneados, cabello rubio como el oro, ojos rojos con la pupila rasgada, una cara hermosa sin rastros de grasa de bebe de algún tipo o alguna imperfección.

Un cuerpo hermoso, perfecto si he de admitir.

Assassin no se inmuta al verme desnudo, aunque aun así puedo sentir su admiración.

Parece ser que esta personalidad es femenina más que en solo la apariencia. Ya es hora de la diversión, pero para hacer esto más entretenido hare que sea despacio.

Agarrando su culo duro y redondo, la apegue a mi, sintiendo como ponía sus manos morenas en mi pecho.

Agarro una de sus tetas de tamaño mediano, una copa CC si tengo que adivinar.

—Tienes unas curiosas ropas Assassin— le dije apretando sus pezones por encima de la tela que los cubría, escuchando un gemido contenido de ella—. Pero hacen lucir a la puta en ti, ahora como buena puta, quítatelas y comienza.

Assassin deja ver la apariencia que su ropa esconde, una piel de tono oscuro distintiva de la región en la vivió, un cuerpo bastante atlético pero sin ser grotesco, unas piernas largas y delgadas, resaltando su trasero firme, unos brazos fuertes pero delgados, un abdomen tonificado pero que se ve suave al tacto que da paso a unos pechos de buen tamaño y por último se quita su máscara para dejar ver un rostro claramente femenino y con una expresión calmada.

Una vez que termina, estoy totalmente excitado, mi pene completamente erecto y palpitando alcanza un tamaño de 28 centímetros. Resisto las ganas de tocarlo y hago voz a mis deseos.

—Vamos, no te quedes ahí y complace a tu rey— le ordene, sentando en la cama, no sin antes darle una buena nalgada a su culo.

Assassin camina hacia mí con sensualidad y una vez en la cama se dirige hacia mi polla, la observa por un momento y después la toma entre sus experimentadas y suaves manos.

Empieza a acariciarla lentamente, como si estuviese tocando el objeto más importante del mundo y su vida despendiese de ello, lo cual es bastante cercano a la realidad.

Confirmando mi placer con una mirada hacia arriba, ella sonríe e incrementa un poco su velocidad.

—Ciertamente es digno para el Rey de Héroes el poseer un pene tan imponente como este… tan grande y tan hermoso, me dan ganas de comerlo— dice mientras da una pequeña lamida a la punta de mi miembro.

Una de las manos de Assassin sube y baja por todo el largo de mi pene, mientras que su otra mano acaricia suavemente mis testículos y su boca de besos y lamidas en la punta como si fuese un helado.

—Pues si te apetece tanto lo que está afuera solo espera a lo que está dentro.

—Ansío poder beber toda su caliente y espesa leche. Mi rey— dice mientras mueve su lengua en círculos sobre la punta de miembro y su mano en mis testículos masajea con más decisión

—Entonces tendrás que hacerlo mejor si es que quieres mi semilla en tu boca.

Decidida por mis palabras, Assassin mete la punta de mi pene en su boca y chupa mientras su lengua lame todo lo que puede. Assassin repite eso varias veces hasta que ha salivado lo suficiente y finalmente se mete mi colosal polla en su boca.

Tomándola de la cabeza, me aseguro de que comience a chupar y sorber debidamente, usando algo de fuerza para controlar cuando su cabeza bajaba y subía en mi polla.

—Chupa más rápido— le ordeno mientras ella pone sus tetas alrededor de mi pene, usándolas para masajear lo que no podía chupar.

Con un gruñido, agarro con las dos manos su cabeza, obligándola a meter todo mi pene dentro de ella hasta que llegase a su garganta.

—¿En verdad t gusta mi pene, ¿no? ¡Puta!— le grite extasiado de placer por el trato de Assassin.

—¡Si! ¡Es el pene más grande y delicioso que me he encontrado!— contesta Assassin a mi vulgar hablar.

Mi pene empieza a palpitar, como si rogándome que le deje estallar y regar toda la esperma que contiene en mis genitales.

—¡GRR, ME VENGO! ¡BEBELO TODO! ¡NO DERRAMES NI UNA GOTA!— Grito a la vez que agarro con fuerza la cabeza de Assassin y la fuerzo a no apartar su cabeza de pene para así eyacular todo mi semen en su garganta.

Chorro tras chorro deposito toda mi semilla en la boca de Assassin, quien hábilmente lo bebe todo sin derramar nada ni asfixiarse. Mi eyaculación continua por unos minutos hasta que ya no queda nada más.

—¡Mmm! Delicioso, jamás había probado algo tan delicioso como su esperma, mi rey— dice Assassin mientras se relame los labios y besa mi polla.

Basta de jugueteos, es momento de darle a esta hembra todo lo que tengo.

—Ponte en cuatro patas y con el culo en alto— le ordeno autoritariamente, Assassin obedece y se pone en posición.

Tengo ganas de ser un poco violento por lo que ignoro su ya humedecida vagina y dirijo mi pene hacia su culo y sin previo aviso empujo hasta el fondo.

Mi miembro se introduce violentamente dentro de su ano sin misericordia y es apretado en el estrecho culo de Assassin, produciéndome gran placer. A pesar de eso, puedo ver como una expresión de placer ocupa el rostro de Assassin, su mente claramente influenciada por los afrodisiacos y el placer que le doy.

—¡Ahhh, mi rey! ¡Su pene es tan grande! ¡Lo siento llenando por completo mi culo! ¡Siga así! ¡Deme más duro! ¡Destroce mi culo! — gime Assassin extasiada.

Continúo sacudiendo mis caderas a la vez que sincronizo mis movimientos con los de Assassin.

Esta danza de placer pronto empieza a ser abrumadora y mi clímax se acerca.

Cambio de posición para así poder contemplar toda la belleza de Assassin, estando yo sobre su abdomen.

Empiezo a incrementar la velocidad de mis penetraciones en lo que agarro violentamente los pechos de Assassin y muerdo sus pezones con fuerza concentrándome únicamente en el placer que sentía.

Assassin solo gime más fuerte mientras que sus brazos me abrazan contra ella y sus manos acarician salvajemente mi cabello color oro. Mi pene empieza a palpitar incontrolablemente, avisándome de mi inminente orgasmo.

—¡Estoy a punto, Assassin! ¿¡Donde lo quieres!?

—¡Yo también! ¡En mi culo, quiero tu semen en mi culo, dámelo todo!

En respuesta a eso solo puedo silenciar nuestros gemidos al sellar nuestros labios en un beso. Nuestras lenguas se acarician y enfrentan descontroladamente en nuestras bocas, callando así los gritos que habrían resultado de nuestro orgasmo.

Mi miembro eyacula fuertemente dentro su ano, vaciando toda la esperma que antes ocupaba mis testículos, no para de empujar mis caderas contra su culo hasta que la última gota de mi semen sale de mí.

Una vez que nuestros cuerpos dejan de convulsionar de placer nos recostamos en la cama, regocijándonos con los vestigios de placer de nuestro acto. Assassin se voltea hacia mi sonriente como si estuviese orgullosa de algo y me dice algo que me hace reír.

—Asumo que he sido capaz de satisfacerlo, ¿no es así, Su Majestad?— pregunta con un ligero tono de arrogancia.

—¿Satisfacerme dices? Pero querida, si esto no es más que solo el principio— dije mientras tomo su mano y la pongo encima de mi aun erecta hombría. Ante esto, Assassin solo puede sorprenderse al punto de quedar boquiabierta.—. No me tomes tan a la ligera, ¿cómo podría ser el Rey de Héroes si mi vigor sexual no estuviese también a la par de mi leyenda? Pagaras tu imprudencia con sangre, sudor y lágrimas… más sudor y lagrimas que nada.

YYY CORTE

No tengo nada que decir, solo preguntarles si notaron que uní el ca debido a que estaban ambos muy cortos :T

Se despide de ustedes….

OMEGA