Nota: vamos con el día tres del FicToberEs. Esta vez con algo de Pyro cuando era un niño.

Día tres. Palabra: avenida.

Este reto también participa del reto "Lullaby" del foro Groovy Mutations.

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Caminar por una avenida en hora pico, en aquella gran ciudad, guardaba cierta belleza, ante sus ojos. Pues la gente correteaba enajenada, muy perdida en su propia mierda como para mirar a los lados. "El prójimo" era un concepto difícil de obtener un lugar en ese contexto.Era hermoso. Para sus ojos lo era. Nadie ahí tenía tiempo de juzgarlo o preguntarle por la tristeza en su mirada. Nadie ahí se detendría para señalar la magulladura en su rostro o el motivo de su camiseta sucia. Cuando caminaba por ahí, era invisible, pero no en un mal sentido; porque a nadie ahí le importaba, pero ellos no tenían por qué importarle. Ellos, tan importantes y grandes, no eran su mamá ni su padrastro. Ellos no tenían motivos para detenerse. Y a esa altura, asustado como estaba, él prefería ser invisible. Porque cuando los adultos lo notaban, preguntaban por su hogar, preguntaban por sus golpes y su padrastro se enfadaba con él, y su mamá nunca lo detenía y él volvería a llorar solito en un rincón, haciendose pequeño y ahogando el sonido entre sus manos, para que nadie lo notara.

Es que en una avenida, donde la gente con trajes y preocupaciones tan grandes como el dinero o una reunión, no podía voltear a mirarlo, él era invisible y el pequeño John estaba seguro, por un momento, al menos hasta llegar a casa y que alguien lo notara. Porque su padrastro se enfadaría y su mamá no lo detendría.

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Saludos. Be free, be happy.