* Ningún personaje me pertenece, son propiedad de Lucasfilm.

Epílogo

Apenas era consciente de lo mucho que disfrutaba los sonidos que genera la garganta de Ben al dormir. Algunas noches a causa del vínculo puedo ver dentro de sus sueños en los cuales me he visto morir de muchas formas distintas, muchas noches he sido testigo de cómo despierta gritando creyendo que he muerto. Cada una de esas noches lo he arrullado haciéndole ver que nunca nadie me hizo daño en realidad.

Han pasado ya diez años desde que escapamos de la resistencia, desde que liberó al mundo de la sombra de la Primera Orden. Han sido diez largos años de reconstrucción, donde se ha formado un nuevo senado, donde las leyes contra la corrupción son más severas, donde se acabó el privilegio para algunos. Debo decir que no me tomó por sorpresa el nombramiento de Leia, ahora dirige el senado y sabemos que lo hace con honorabilidad.

Jamás los volvimos a ver, ni a Finn ni a Poe, ni a mi maestro, desconozco cuáles serán sus destinos ahora, pero me enfoco en el mío, en los dulces y felices momento que vivo al lado de mi familia.

Dos años después de escapar nos golpeó el gusanito de la paternidad, fue difícil… pero logramos concebir a nuestro primer hijo a quien amorosamente nombramos Han, y no pasó mucho tiempo cuando llegaron los gemelos Anakin y Ben… y ahora estamos a la espera de la cuarta miembro de la familia Leia. Las nubes grises se fueron para siempre, ahora tengo lo que tanto soñé, ahora formaba parte de una familia, era real y era sólo mía.

—¡Rey!... —La voz sobresaltada de Ben me regresó a la realidad.

—Hey… tranquilo, aquí estoy… —Le sonreía mientras acariciaba con dulzura su cabello, él me observaba con esos ojos negros llenos de temor, de desconfianza, tal vez piensa que aún está soñando.

—Pensé qué…

—Fue sólo un sueño, se terminó.

Se abrazaba con fuerza de mi brazo y colocaba su mano sobre mi vientre, la pequeña Leia pudo sentirlo de inmediato, revoloteaba cada vez que su padre hacía eso.

—auch… —Me quejaba mientras trataba de acomodarme —Vuelve a dormir, Ben.

Sus ojos se engancharon a los míos. Colocó su frente en la mía y sentí su aliento cálido sobre mi rostro.

—Te amo, Rey…

—Te amo, Ben…

—Te amo mamá… te amo papá

—Han —Gritamos los dos al unísono, mientras veíamos la sombra del pequeño correr por el pasillo, seguido de las dos cabecitas de los gemelos. Los platos comenzaban a volar y los gritos se hacían presentes, iniciaba un nuevo día en la vida de la familia Solo.

N/A: Lo prometí y lo cumplí… y por poco, estamos a dos horas del estreno de la película y aquí está el capítulo final.

Muchas gracias a las personas que se tomaron la molestia de leer hasta el final, de seguir las aventuras de esta parejita que tanto amamos. Gracias por sus comentarios, por estar al pendiente de las actualizaciones. Esta fue mi primera experiencia cómo escritora y no fue fácil pero si muy satisfactorio. Espero poder entrar de nuevo a ustedes, si me lo permiten, con alguna nueva historia después de ver la película.

Esta historia es para ustedes, con amor. De nuevo no puedo decir más que gracias y nos leemos a la próxima.