Analista de San Valentín

El día de San Valentín es la fecha en que muchas parejas procuran estar solas, en total tranquilidad, si bien todos desean disfrutar de la compañía de sus amigos la gran mayoría prioriza esos momentos especiales con sus seres queridos, aquellos que consideran su otra mitad.

Muchas personas disfrutan de tener a alguien a su lado, sin embargo otras más se encuentran solas, la pregunta milenaria es si es por gusto o por la adversidad que los acompañaba. Uno de esos individuos solitarios soy yo, un muchacho pelirrojo, quien por alguna extraña razón para muchos mantengo una sonrisa maliciosa en los labios, más una mirada llena de calma que apaciguaba mi rostro, el cual a simple vista parecía divertido con una travesura cual niño pequeño.

Mi nombre es Koushiro Izzumi, y el motivo de ello es porque finalmente noté todos los cambios drásticos que generó mi proyecto de comité, porque justo este ciclo escolar accedí a formar parte de éste, aportando como idea original la difusión de un programa de citas, donde aquellos que adoran el día de San Valentín sin duda aceptarían, y quienes eran tan penosos como para acercarse a algo lo verían como su primer gran paso a la aceptación. Para mi fortuna la idea fue bien recibida por el resto del comité estudiantil, y al ser un maestro en el área de la informática yo mismo me encargué de generar la base de datos con el nombre de cada estudiante en curso.

Sin embargo, hubo algo de malicia en mi plan, por alguna razón me tocó ser el confesionario de mis amigos, o simplemente por accidenté descubrí ciertas cosas que a ojos y oídos de los mismos remitentes ni siquiera debería tener conocimiento, y esos son los "gustar" de cada uno. Confusiones, conflictos, y por ello mismo decidí darles un apoyo, siempre soy yo quien recibe ayuda de ellos de un modo u otro, y finalmente encontré la forma perfectamente discreta como para retribuirles algo. Así que modificando un tanto los resultados al azar del programa y aparentando lo contrario, opté por permanecer anónimo para que nadie decidiese cambiar sus respectivas parejas y del mismo modo mis amigos no sospecharan mi ideología.

Y por lo que vislumbro hoy en día puedo saber con certeza que fue todo un éxito, los veo a cada uno con quienes imaginé que deseaban estar, puede que a regañadientes pero finalmente cedieron ante sus ideas.

Es una visión bastante simple si observo a mi alrededor las circunstancias, por un lado, noto a los menores del grupo, aquellos que siempre fueron predecibles por todos y que seguramente aún sin mi pequeño empujón hubiesen terminado por relacionarse del mismo modo, solo que de forma más lenta por la pena que los invade. Bien, ellos ahora mismo se encuentran sentados en el jardín del colegio: Hikari en la banca mientras Takeru en el césped con una libreta y una sonrisa boba por lo que imagino es ella para él; ahora que si me acerco lo suficiente puedo escuchar lo que se dicen mutuamente.

-¿Has terminado ya?-pegunta la castaña con una tierna sonrisa

-Eso creo, pero…la verdad no creo que te haga justicia-responde el rubio con una tímida sonrisa apegando contra su pecho un pequeño cuaderno café

-Vamos, dímelo, quiero oírlo-pronuncia ella extendiendo su brazo para que el muchacho tome asiento a su lado por lo que éste toma una gran bocanada de aire

-Está bien, dice así…-suspira para proseguir-Nunca he comprendido muchas cosas de mi vida, he pasado duros momentos, desde la separación de mi familia hasta la de mi yo interno, siempre que pierdo el camino encuentro que irradia una luz, aquella color chocolate que por extraño que suene me da plenitud, tus ojos color avellana, adornan tu rostro aperlado, y que acompasado con tu sonrisa de estrella, posees el mundo en tus manos. No entiendo cómo ni cuándo, tampoco me sé los porqués, lo único que tengo entendido, es que te quiero y por siempre lo haré. Existen muchas maneras de definir lo que siento por ti, pero mi favorita de todas ellas, es que te quiero junto a mí…-ante cada palabra el muchacho enrojecía al punto de parecer una cereza mientras en los ojos de ella se veía un brillo emocionado-…¿d-d-debo seguir?

-Por favor-responde ella entre suspiros mientras lo observa con una sonrisa en el rostro y el rubio evade su mirada como si lo quemara-suena hermoso-el muchacho muerde sus labios al oír eso

-Eres mi mejor amiga, eres mi compañera, eres…la dueña de mis ojos y también de mi consciencia-él voltea a verla de reojo-significas muchas cosas, imposibles de explicar, por eso te pido hermosa…que no me dejes jamás-culmina con el rubor al cien y una tímida sonrisa

Kari lo rodea del cuello en un abrazo que es inmediatamente correspondido, seguido de un corto beso y unas tímidas pero cómplices miradas, por lo que sin más para darles su espacio del mismo modo en que llegué me retiro.

Por el área norte observo una pequeña pareja besándose en las escaleras que se encuentran pegadas a la ventana, con una sonrisa identifico prontamente aquellas melenas rubia y naranja, siendo Matt y Sora quien al separarse se observan con una sonrisa a los ojos; recordándome así el gran dilema que se traían, puesto que de ellos jamás me cercioré quien quería a quien y desde qué momento. Más no hubo tiempo de pensar porque sorprendentemente la chica muerde sus labios y asiente frenéticamente por el acto que el rubio llevó a cabo.

Lentamente una pequeña caja es sacada del bolsillo de su pantalón y cubriéndole los ojos con una mano a la chica le coloca entre las suyas la cajita, mientras ella lo abre se distingue el brillo de un pequeño broche en forma de corazón y al levantar su cabeza una rosa adorna su presencia.

-Matt, no debiste…-pronuncia ella

-Sé que te dije que quería que tomáramos nuestro tiempo, pero…ayer crucé unas palabras con Taici y…-ante aquello Sora ensombrece su rostro-linda, yo no te recriminaré nada, no importa qué, pero de algo ayer me aseguré, al decir San Valentín y las citas, Sora…yo no quiero que salgas con alguien más, a lo mejor soy egoísta pero así como ahora solo tú estás en mí presente no quiero que veas los ojos de otra persona, porque me moriría de celos, y por mi comentario estarán mal infundados, pero cruzar con aquel torpe una leve conversación, me sirvió mucho, para facilitar y comprender mi error….yo te quiero, y te quiero conquistar sí, pero es algo de lo que quiero hacerme cargo con honores, con título, y si por lo mínimo sientes algún interés así en mí, entonces te lo pido porque quiero ser muy claro, no solo seas mi Valentín hoy-la mirada serena y dulce del muchacho con su tono serio daba un aura tranquila-

-Matt…¿acaso tú…quiere decir que…?-intenta formular sorprendida la chica recibiendo un asentimiento del rubio

-Sora…¿te gustaría ser mi novia?-pregunta ladeando la cabeza mientras ella muerde feliz sus labios apretando contra sí el regalo y abrazándolo por la cintura, mientras permanecen así unos segundos.

Con ello, siento mi señal de partida, alejándome de la escena como minutos atrás lo hice de la de los menores, emprendiendo mi marcha nuevamente.

Al llegar a la cafetería, descubro mi última obra maestra, ambos castaños, el chico presumiendo a todo el que se le atraviese a su actual chica mientras ella ríe y se ruboriza por la acción de su acompañan ante, seguido es jalada por el mismo chico de cabello alborotado mientras lo sigue a paso veloz quedando relativamente cerca de donde me encontraba.

-¿Ahora qué sucede?-pregunta Mimí entre risas

-Tenía ganas de un beso-responde con una sonrisa de medio lado Tai tomando su rostro y depositando un beso que enseguida se aseguró de profundizar-ahhh, como lo necesitaba

-Estamos en la escuela torpe-dice ella sonrojada mirando el suelo

-Y por eso mismo me estoy encargando que todos se enteren que ésta bella señorita es toda mía-dice mientras la toma de la cintura causando nuevamente su risa-pero necesito tenerte aún más cerca

-Quien diría que el gran Taichi sería ser un chico sumamente posesivo jijij-expresa con coquetería la castaña-no necesitas pedírmelo señorito, porque me encanta estar contigo-dice mientras acaricias suavemente su mejilla fundiéndose así en otro beso intenso.

Al separar sus rostros, juntan sus frentes nuevamente mirándose el uno al otro con una sonrisa radiante, juntando sus manos sin mediar palabra, algo raro entre ustedes que son los más habladores de todos, aunque quizás para ustedes, que son tan iguales y complementarios, no hace falta decir algo para comprenderse, porque eso demuestra la verdadera magia de la conexión tan mística que los envuelve y que siempre los ha caracterizado en sus personalidades.

Al irme de allí vuelvo a la sala de cómputo dispuesto a cerrar definitivamente el programa, al final el día de San Valentín ha sido hoy y no se utilizará de nuevo, más algo capta mi atención.

-Disculpe superior-llama una de las muchachas que desde el inicio fue mi cómplice en el proyecto

-¿Qué necesitas?-pregunto con amabilidad

-Hay algo que no me ha quedado claro estos días que he trabajado con usted-externa mientras toma asiento a mi lado-¿por qué si ha emparejado a prácticamente todos los estudiantes y sobre todo sus objetivos…usted decidió quedar solo?-con aquel cuestionamiento no pude evitar sonreír

-Es confuso y quizás torpe pero…quien me gusta es un amor imposible, puede que ni me corresponda-digo con una sonrisa recibiendo una mirada sorprendida de mi acompañante-poco o nada coincidimos, pero procuro estar a su lado, es extraño porque…muchas veces cuando sabes que serás rechazado te lo guardas para ti mismo tratando de olvidar aquel sentimiento, y aun así no se puede.

-¿Entonces no se confesó?-pregunta la muchacha interesada

-No, tan solo quiero estar con esa persona un poco más, quizás, aun de manera egoísta le diga lo que siento, pero por hoy y en general ahora, deseo pasar este San Valentín a su lado como su amigo-respondo con una sonrisa

-Comprendo…bueno, no creo que fuese algo egoísta, es decir, usted decidió conseguirle pareja a sus mejores amigas, y siendo una de ellas quien le gusta, no debió haber sido nada sencillo-dice de forma triste pero sonriente-creo que fue algo muy generoso superior Izzumy, y realmente espero que si bien como dice usted no es sea algo correspondido, por lo menos pueda expresarle a ella sus sentimientos y sentirse mejor con usted mismo.

-Gracias por tus deseos-respondo con una simple sonrisa mientras ella se levanta

-Bueno, iré con mis amigas, al final no fue el único solitario en San Valentín jijiji-responde riendo-nos vemos pronto superior, hasta luego-dice partiendo y desapareciendo de mi vista

-Hasta pronto…-respondo, sintiendo la vibración de mi teléfono y al notar el nombre y mensaje del remitente no puedo evitar sonreír maravillado

"Nos vemos saliendo de clases en el ciber-café Rostret"

Suspiré maravillado, me sentía de pronto contento con saber que estaríamos juntos un rato por lo menos, mirando a la puerta nuevamente y guardando el celular no pude evitar sonreír de lado.

-Jamás dije…que fuese una chica jejeje-y con esas palabras salgo del aula para dirigirme a mi siguiente clase ansiando que pronto fuera la hora de término del día, y pensando en cómo un simple nombre y unas cuantas palabras te pueden volver tan feliz.

"Te estaré esperando….Att. Joe Kido"


Saludos a todos y todas, si bien es algo bastante inusual y puede que resulte contradictorio para otros, me pareció un giro en la trama y un chistoso pero tierno final, con esto concluye la historia, espero a todo el mundo le haya gustado, y reitero con el dilema de las parejas, pronto daré otros fics para cada uno y espero los disfruten :3 Si alguien tiene alguna petición háganmelo saber para cumplirla n.n Saludos a todo el mundo, nos estaremos leyendo en los comentarios

***GixKey***