De nuevo, Marinette se miró en el espejo. Se giró un poco, mostrando un costado para luego ir por el otro. Sí, no era una mujer con caderas voluptuosas ni un cuerpo despampanante, pero...

Suspiró un poco decaída. Sin embargo, inmediatamente negó con la cabeza.

¡Hoy iré a la casa de mi novio Adrien! ¡Por invitación de él! ¡No hay nada para estar triste!

Se arregló y se fue. Donde, él, al recibirla la dirigió a su habitación, quienes ya sentados en la cama. Comenzaron a jugar videojuegos.

Luego de un rato de Marinette estar ganando, se distrajo mirandolo. No obstante aun con el mando en sus manos, seguía haciendo comandos y ganando sin siquiera mirar.

Adrien quien estaba refunfuñado por perder otra vez. Le sorprendió cuando Marinette realizo de repente esa pregunta: "¿Carezco de atractivo sexual?" Los ojos del aludido se agrandaron y dirigió su mirada a ella. Apartándolos de la pantalla.

— No me tocas... —Empezó ya sin poder mirarlo a los ojos, comenzando a sonrojarse— Desde que somos novios, solo nos hemos besado...

— ¿Estas frustrada sexualmente?

Marinette alzó la vista hacia su novio quien la miraba divertido como la sonrisa que esbozaba. Ella quemándose viva, giro su cuello avergonzada a más no poder...

— ¡No tenías por qué decirlo así! —Exclamó cruzada de brazos.

— No te enojes —Dijo suavemente— ¿Significa que ya no tengo más que contenerme?

— ¿T-te estabas conteniendo?

Adrien asintió. Mientras se acercaba más y más cerca de ella, tanto que Marinette se recostó en la cama y Adrien aprovecho para dejar besos cortos en su cuello.

— Todo el tiempo —Le susurró roncamente en su oreja antes de morder suavemente la misma. Y colocarse lo suficiente bien. Hasta quedar encima de ella.

Al estar en esa posición, Adrien se sacó la remera dejándolo en abdominales, un cuerpo tan deseable que Marinette estuvo a punto de caerle la baba cuando abrió la boca por la sorpresa.

— ¿Quieres que pare? —Preguntó de nuevo poniéndose tan cerca del oído de ella que su corazón latía desenfrenadamente y el calor y el aroma de Adrien comenzaba a sentirse en el ambiente— Es tu ultima oportunidad —Le dijo ahora a milímetros de sus labios. Rozándose cuando hablaba— No parare y luego, por favor, no me pidas que pare.

Marinette que su mente estaba ida. No sabía que esa pregunta: "¿Carezco de atractivo sexual?" Desato a la bestia y tampoco que lo que siguió después la libero. Al rato de sentirse observada por Adrien, miró esos ojos verdes que la volvían loca y artículo: "No"

Una respuesta que le hizo obtener un beso; De esa bestia que libero, aunque ella no haría nada para volverla a encerrar.

Por supuesto que no.