Chicle y algodón de azúcar.

Izuku nunca se había considerado popular en su preparatoria, a decir verdad… en todos sus dieciocho años de vida, el peliverde no recordaba haber sido parte del grupo renombrado y conocido en ninguna parte. Tal vez en su niñez? Ya que siempre estaba en el grupo de Kacchan quien era considerado un niño prodigio en toda su clase… el muchacho podía considerarse popular por eso?

Tal vez… quizás no…

El por qué el peliverde se puso a pensar esto en su tercer año de preparatoria era raro incluso para él, se supone que ahora más que nunca debería estar concentrándose en pulir sus habilidades junto a otros requisitos que ser un héroe requería...

…sin embargo…

El escuchar mencionar por parte de Mina y Toru que el junto a Todoroki y Bakugou aparecieron en el ranking de una famosa revista de héroes (el cual él seguía por cierto) en la sección editada por la conocida Mount Lady… le causo bastante curiosidad. Aunque había que considerar bastantes factores antes de verse sorprendido por algo como esto.

Toda su clase en general… era más afamado y reconocido que algunos pros amateurs actuales, ni siquiera siendo héroes oficiales, cierto número de sus compañeros ya tenían un club de fans formados, Todoroki era un ejemplo. Esos dos años de pura drama y acción contra la liga de los villanos les había hecho más famosos que el resto de los futuros héroes de su misma edad.

Para Izuku el ser reconocido por la gente por sus hazañas era algo que le reconfortaba, solo eso. Su deber como sucesor de All might era traer paz, la media y el espectáculo caía en segundo plano para él, por supuesto que la imagen era algo importante cuando uno era héroe, algo en lo que el peliverde flaqueaba notoriamente…

Luego tendría que solucionar ese problema.

Regresando al tema de la revista, esa mañana Mina se había decidido por comprar la famosa revista a coste de sacrificar su preciada dosis de cafeína por una sola razón... la foto de tres de sus compañeros estaba en la portada. Habían cuatro páginas completas de ellos en las que Mount Lady les hacia un análisis detallado y concreto con un simple fin…

Ver si eran potenciales… novios…

Ahí fue cuando el peliverde sintió que su mundo se venía abajo, quien en su sano juicio haría tan extenso y arduo trabajo solo para ese objetivo?! Lo que era peor para el muchacho… según la información que Hagakure estaba leyendo en su celular… la revista estaba vendiendo más de miles de copias…

Maldito sea Mount Lady y su extravagante idea…

En ese mismo momento en la oficina de Mount Lady

Un estornudo se le escapó a la rubia… la cual se encontraba contando un fajo de billetes apoyando sus piernas en su escritorio…

-"Esto de escribir sí que se me da bien~!"-dijo con una sonrisa angelical la mujer.

Regresando con Izuku

Mientras que su salón se volvía un circo por culpa de la pequeña revista, el peliverde leía apartado del resto el artículo en su celular, Hagakure tenía razón… en la misma página web de la revista se podía ver a los tres muchachos posando en la portada. Había que darle merito a Mount Lady, las fotos de los tres chicos eran bastante buenas, sus trajes de héroes los hacían ver bastante bien.

Eso era lo único bueno que el muchacho vio de todo el articulo…

Ahora el peliverde sabía que de ahora en adelante, tendría más cuidado con las personas que le pregunten acerca de sus gustos y sus ambiciones. Ya pensaba que era raro que un "fan" suyo se le apareciera de la nada y le entrevistara con la excusa de siempre… "no tendré otra oportunidad como esta".

En nombre de todo lo bueno de donde rayos obtuvo información tan personal Mount lady? Su comida favorita, sus pasatiempos, miedos, fortalezas, relaciones. El muchacho se puso rojo como un tomate cuando vio una foto de relajada Uraraka descansando placenteramente sobre su hombro, si bien recordaba… esa vez ambos habían tenido un largo día en la preparatoria y el cansancio les gano al momento de subir el tren de vuelta a casa.

La foto de su madre sonriendo explico el origen de toda la información…

Izuku quería que la tierra se abriera y se lo tragara… había tenido suerte al decidir venir más temprano que de costumbre esa mañana, no quería imaginarse lo problemático que hubiera sido el tener que lidiar con un montón de acosadores empedernidas. Su suerte no duro mucho lamentablemente…

El reciente escándalo que se había provocado por las noticias, reunió a la mayoría de sus compañeros alrededor de Hagakure, la cual se encontraba relatando como toda una profesional experimentada cada una de las descripciones de los tres muchachos. Bakugou temblaba con muchas venas resaltadas en su cabeza en su asiento, sus intentos por ignorar la narración de la chica invisible eran en vano… Sero y Kirishima se lo hacían más difícil con sus bromas.

Todoroki escuchaba con una sonrisa los defectos que la revista decía del rubio explosivo, el medio fuego y hielo parecía no estar afectado ni nervioso por lo escrito de el en el semanario. Izuku por otro lado… se había aislado completamente del resto de sus compañeros en su pupitre, los mensajes de Uraraka no paraban de llegar en su celular.

Por lo menos alguien si la estaba pasando bien en estos momentos…

Su amiga castaña estaba actualmente recién levantando, su familia había decidido tomarse unas merecidas vacaciones por el resiente suceso que Uraraka había logrado. Su amiga tenía asegurado un puesto en una de las compañías más respetadas de héroes! No era la mejor de todas… pero la paga era sin duda excepcional.

Los días del peliverde habían sido noches y noches de chat junto a la castaña, Hawái en verdad soñaba acogedor y refrescante, Izuku estaba feliz de que su mejor amiga por fin haya logrado su meta. El pensar en Uraraka le había hecho olvidar por un momento todo el desastre que se había formado en su aula, la paciencia de Bakugou ya había acabado…

Concentrándose nuevamente en su celular, el peliverde no noto como cierta pelirosa empezaba a acercarse a él atravesando la zona de guerra que se había creado. Una sonrisa divertida acompañada de pequeños saltitos era lo que caracterizaba a Ashido del resto, su buen humor y energía siempre la tenían en su mejor estado de ánimo… era exacto lo que necesitaba para lo que estaba a punto de hacer.

-"Entonces…"-apoyo una mano en el pupitre, causándole un respingo al peliverde-"…leí que te gusta el Katsudon hehehe"-le miro sonriente.

El celular del pobre se volvió de mantequilla por la repentina aparición de su compañera, antes de que el nervioso muchacho pueda formular palabra, Mina empeoro las cosas subiéndose a su escritorio con toda la confianza del mundo. Sus bien formadas piernas se cruzaron en frente de Izuku, los ojos del peliverde siguieron cada movimiento de la pelirosa… el muchacho trago saliva.

-"S-si! Es mi p-plato favorito!"-balbuceo tembloroso el peliverde.
-"El mío es natto y okra, raro verdad?"-rio divertida Ashido-"Mama es pésima para la cocina y de todos sus platillos ese es el único digerible"-explico.
-"Ya v-veo…"-evito contacto visual el muchacho-"N-no me parece r-raro del todo…"-comento sobándose su nuca nervioso.

Es posible verse tan adorable? Se preguntó la pelirosa, a pesar de que su compañero tenga un gran físico, su rostro y personalidad lo hacían ver como un pequeño cachorro asustado he abandonado… Mina quería tomar ese rostro y llenarlo de besos por toda una eternidad. Tenía que ser paciente… primero lo primero…

-"Dime Midoriya…"-empezó a jugar con su cabello-"Tienes planeado algo para esta tarde?"-sonrió coqueta.

Donde estaba Uraraka cuando se le necesitaba? Era su amiga castaña la que siempre lo ayudaba a salir de estas situaciones, desde que empezó el año… su compañera pelirosa había despertado un muy notorio interés en él. Siempre actuando más amigable cuando este se aparecía y lo que más le afectaba a Izuku… su forma de volverlo un caldero hirviendo con solo algunas bromas picaras.

Ashido era linda y divertida…

El peliverde tenía que ser honesto consigo mismo, su compañera le gustaba… de eso no había duda. Su personalidad encajaba perfectamente con su apariencia, esos pequeños cuernos amarillos se le veían adorables, sus iris amarillos y su esclerótica negros a veces te hipnotizaban y enamoraban si te quedabas viéndolos por mucho tiempo.

Por si fuera posible, el color rosa de su piel y cabello le hacía resaltar aún más de lo que ya era, el hablar de su figura era algo bastante vergonzoso para el peliverde por lo que Izuku la describiría como… bella. A pesar de todo lo dicho antes, seguro se estén preguntando entonces por qué rayos no sales con ella?

La respuesta era simple.

Izuku nunca dijo que la amara, gustar de la apariencia de alguien es algo común a su edad, las hormonas y todo eso… aun así, el peliverde no era uno de esos chicos que por que una chica le gustara este haría hasta lo imposible para meterse bajo su falda. Mineta ya tenía ese papel.

Si es que algún día el peliverde se decidiera por tener una relación, lo primero que este tomaría en cuenta seria la cantidad de años de amistad que uno tendría con cualquiera de sus conocidas. Obviamente no iba a enamorarse a primera vista con cualquier fulana de tal y empezar una relación de ensueño que terminaría en matrimonio y tres hermosos hijos…

La vida no era un drama romántico…

Por más que le atrajera Ashido, Izuku simplemente no la conocía lo suficiente como para aceptar una cita con esta… claro este último años ambos se habían vuelto algo más íntimos y cercanos. Aun así…

-"Intentando violar a Midoriya de nuevo Ashido? Haha"-bromeo Kaminari-"Es la tercera o cuarta vez? No lo recuerdo…"-conto con sus dedos.
-"Jirou tu novio está siendo una molestia"-dijo un poco molesta por el rubio.

Inmediatamente la pelivioleta que se sentaba a unos cuantos asientos más atrás le clavo sus amplificadores en los ojos a Kaminari. La broma del rubio le había afectado a Mina, Izuku podía notar el cambio de actitud en ella, lo que había dicho su compañero era cierto… esta no era la primera vez que la pelirosa intentaba salir con él.

-"Ashido yo…"-se preparó para rechazar su oferta el muchacho.
-"Espera!"-le detuvo antes de que dijera otra palabra-"Antes déjame decirte algo ok?"-sonrió cálida.
-"Uhm… b-bien…"-contesto nervioso el peliverde, gracias al cielo todos están concentrados en la revista…
-"No es una cita, ignora al idiota de Kaminari..."-le lanzo una mirada al rubio-"… solo vamos a pasar el rato! Para conocernos mejor"-sonrió.

Otra razón del por qué su compañera le parecía tan atractiva y bonita… esa sonrisa tan honesta y amigable, bastaba una de esas sonrisas para que tu día se ilumine. El muchacho perdió toda timidez al contemplar el rostro de la pelirosa, un leve color lila adornaba sus mejillas.

-"Ok… a que h-hora?"-acepto el peliverde.
-"Tres en la entrada de la preparatoria!"-se le ilumino el rostro a Mina-"No te arrepentirás!"-rio emocionada.

Aizawa entro al salón obligando a la pelirosa a bajarse del pupitre de su amigo, Izuku vio cómo su compañera le mando una última sonrisa antes de alejarse…

Esta tarde Mina dejaría de ser una amiga más para el muchacho.

Tiempo después

Luego de evadir a un escéptico Kacchan que no paraba de preguntar a donde iba, Izuku se encontró observando el atardecer en la espera de su pelirosa compañera. Es una hermosa tarde… sonrió el peliverde, los colores abundaban en el cielo, la escena estaría perfecta para una pareja de enamorados, el pensar de esa forma le provoco un sonrojo a Izuku.

Si es que esto no era una cita… entonces por qué el muchacho se había esmerado en vestirse bien? Una camisa verde a rayas y una polera blanca, combinando con un jean y sus clásicas botas rojas no eran exactamente ropas que Izuku usaría para una "salida amistosa" sin embargo, el ver lo entusiasmada que estaba su compañera durante todas las horas de clase lo había cautivado, casi en todas las clases los profesores de turno le llamaban la atención pidiéndole que se calme…

No quería defraudarla…

-"Midoriya!"-le llamo a lo lejos una pelirosa, su característica sonrisa en su rostro.

Izuku se contagió de la sonrisa de su amiga y poco a poco fue acercándose a saludar a la pelirosa, sin embargo, al igual que el muchacho… Mina también se había tomado su tiempo en vestirse. La boca del peliverde se abrió a más no poder ante su compañera, minishorts y una polera negra apretada era demasiado…

Las pulseras y el collar en forma de corazón resaltaban a un más la belleza de la jovencita, Izuku sabía que Mina era hermosa pero esto era demasiado…

-"Estas bien?"-pregunto genuinamente preocupada la pelirosa, su rostro se acercó peligrosamente al de su rojo compañero.
-"No e-es nada!"-se cubrió la cara con sus manos el peliverde, los nervios se apoderaron de el completamente.
-"Hehehe… eres adorable"-le provoco Mina, sus mejillas se empezaron a pintar de lila.

Pasado su momento de timidez, el muchacho logro controlar sus nervios lo suficiente para mantener conversación con la pelirosa, la cual por cierto… se estaba comportando inquietantemente normal. La personalidad hiperactiva de Mina se había esfumado por completo, una educada e incluso tímida muchacha era lo que ahora la reemplazaba.

Izuku podía sentir los nervios de su amiga…

Sus sospechas fueran confirmadas cuando Mina entrelazo su brazo con el suyo dudosa, ambos caminando y la siempre habladora y energética pelirosa estuvo casi todo el viaje en silencio, evitando la mirada del peliverde a toda costa. Era como si la personalidad de Izuku fuera una enfermedad contagiosa…

-"T-te sientes bien A-ashido?"-cuestiono volteando a mirar a la muchachaalado suyo, ambos sentados en los asientos del tren.
-"Si! E-estoy bien!"-le regalo una sonrisa Mina, Izuku pudo notar lo forzado de sus labios.
-"Esta mañana…"-decidió hablar de una vez el peliverde-"…dijiste que esto era para conocernos mejor no?"-le recordó.
-"*sigh* Lo siento! E-es solo que…"-exploto la pelirosa-"…en v-verdad no quiero a-arruinar esto!"-explico.
-"A q-que te refieres?"-pregunto algo confundido y sorprendido Izuku.
-"Quería comportarme a t-tu altura! Ya sabes… nada de t-tonterías y bromas molestas…"-dijo cabizbaja-"… quería que esto sea p-perfecto…"-entristeció.

En verdad se está esforzando tanto… pensó el muchacho, en verdad le importo tanto…? Izuku ahora estaba seguro… todo este tiempo Mina en verdad había buscado algo serio con él. El que alguien comprima su personalidad por el bien de otro… era una gran hazaña.

-"No me molesta…"-se dispuso a hablar el peliverde-"…que seas tú misma… m-me gusta tu forma de ser"-le dijo sincero y calmado.

Mina conocía lo suficiente a su amigo como para poder distinguir cuando este decía las cosas con seriedad, casi toda la clase podía notar el momento exacto en el que el peliverde cambiaba su personalidad, numerosas batallas y enfrentamientos fueron causa de eso. Significaba mucho que Izuku le haya dicho eso, viniendo de alguien tan increíble y bueno como el… le hacía sentir especial a la pelirosa.

Esa voluntad y determinación era simplemente única en el mundo entero, fue más por la personalidad y el interior del muchacho que Mina termino perdidamente enamorada… así es, perdidamente enamorada. Entendía a la perfección a Uraraka, ella también presencio ese lado tan único del peliverde y aunque no lo haya dicho, la pelirosa estaba completamente segura que la castaña estaba en las mismas que ella.

La clase entera respetaba y admiraba a Izuku…

-"Gracias… Izuku"-le guiño Mina-"Significa mucho viniendo de ti!"-su sonrisa volvió a su rostro.
-"N-no es nada!"-contesto nervioso por la mención de su primer nombre, ni siquiera sus amigos más cercanos se referían a el de esa manera.
-"Espero que no te moleste…"-descanso su cabeza en el hombro del muchacho, la contextura musculada termino sintiéndose más cómoda de lo esperado.

Luego de expulsar todo el vapor de los nervios que sentía Izuku, el peliverde término encontrando su situación bastante confortable, esto definitivamente es una cita… pensó decepcionado de sí mismo por pensar lo contrario antes. Siguiendo los consejos de Kaminari, el muchacho paso su brazo por detrás de su amiga… abrazándola del hombro y atrayéndola aún más.

Mina dejo salir una pequeña risilla ante la repentina acción del peliverde, siguiendo a su palpitante corazón, la pelirosa entrelazo su mano con la de su amigo… el cual no opuso resistencia alguna. Solo falta un beso… pensó obvia la muchacha, lista para lo que sea, Mina giro su rostro preparada para robarle un beso al peliverde.

Es esto amor?! Se preguntó espantado Izuku, su corazón estaba latiendo a mil por hora y lo que era aún más alarmante… podía sentir que su amiga pelirosa estaba igual que él. Nunca antes se había puesto de esta manera al estar con una chica, típicamente sentirse tímido y sonrojado al hablar con sus compañeras era algo normal, sin embargo… esto era algo completamente nuevo.

Para buena suerte del peliverde, el repentino freno brusco del tren los obligo a detener todo acto romántico, Mina suspiro molesta y Izuku agradeció a los cielos. Por lo menos subimos bastantes escalones pensó animada la pelirosa, ahora solo restaba un escalón mas y el pecoso peliverde alado suyo por fin podría ser suyo… por mas enfermo que suene.

Tiempo después

La cita había sido salido de maravilla, los dos jóvenes terminaron conociendo más del otro de lo que uno sería capaz, Izuku ahora conocía a toda su familia y Mina ahora sabia absolutamente todo acerca del peliverde, desde su fanatismo hacia los héroes y comics... hasta su deprimente niñez. Los lugares que visitaron fueron mayormente escogidos por la pelirosa, empezando por una cafetería a la que su amiga visitaba diariamente.

Mina era bastante querida a donde quiera que vaya…

De cafeterías pasaron a paseos por centros recreativos y luego terminaron en una feria bastante colorida en donde había juegos clásicos de su país, el tiempo se pasó volando para el par. Ya eran las once de la noche cuando ambos llegaron a los dormitorios de la preparatoria.

Como era de esperarse, las luces estaban apagadas y ningún sonido se escuchaba en el lugar, las luces de algunos de los cuartos de sus compañeros estaban encendidas… pero eso poco les importaba a los dos amigos. A petición de Mina, Izuku termino escoltando a la pelirosa hasta la puerta de su habitación, por alguna razón… el corazón del peliverde empezó a latir como nunca antes.

Tal vez era el fuerte agarre que Mina tenía en su mano… o la manera en la que esta volteaba a mirarle con timidez mientras lo guiaba en la oscuridad, quizá la emoción de estar escabullándose sin ser percibidos por el siempre estricto Iida? Izuku no lo sabía…

-"Entiendo si no sientes lo mismo…"-volteo a ver al muchacho una vez llegaron a su habitación-"… pero aun así…"-le tomo de ambas manos.

Los brillantes ojos amarillos de la pelirosa era lo único que Izuku podía ver en esos momentos, viendo como esos hermosos iris se acercaban poco a poco dejo embobado al muchacho. El brillo de sus ojos desapareció dejando en la completa oscuridad al par, el peliverde sintió la respiración de Mina en sus labios.

Y luego sucedió.

Suaves y delicados, los labios de Mina se unieron con los suyos, sabe a chicle… pensó el peliverde, el beso no duro ni un minuto, fue un simple rose… inocente e inexperto. Por lo poco que duro, Izuku no pudo reaccionar ante lo sucedido… se sintió bien… no era la primera vez que el muchacho había sido besado, pero era la primera vez que sentía tantas emociones en algo tan simple.

No sentía un amor tan profundo como el que ella sentía por el… pero si había un sentimiento casi tan parecido. En ese momento que Mina le robo un beso Izuku si llego a sentir algo…

Tenía que descubrir que era lo que en verdad sentía…

-"Gracias por lo de hoy… fue mágico"-le agradeció la pelirosa, poco a poco esta fue alejándose, una mano fue retirada… pero la segunda…
-"Ashido…"-apretó su agarre el muchacho-"Si siento algo…"-de un tirón la atrajo hacia él.

Esta vez sí que fue un beso! El escuchar esas palabras era lo único que Mina necesitaba, a pesar de ser una total inexperta en el tema, la pelirosa estaba poniendo todos sus sentimientos en cada beso que compartía con Izuku… el cual había dejado de ser el mismo.

Sabe demasiado bien… pensó sorprendido y extasiado el muchacho.

El sabor a goma de mascar era extremadamente adictivo, lo único en la mente del peliverde en estos momentos era el querer seguir sintiendo tan exquisito sabor. Liberando su mano entrelazada, Izuku empezó a recorrer el cuerpo de la pelirosa sin miedo alguno.

Siempre le habían dicho que cuando este luchaba este tenía la costumbre de salirse de control… lo mismo sucedía en este aspecto.

-"Ah… dios…"-dijo Mina, las fuertes manos del peliverde y los interminables besos eran demasiado…

Aprovechando ese momento de debilidad en el que la pelirosa dio un respingo, el peliverde llevo sus labios al desprotegido cuello de Mina, al igual que su boca… Izuku descubrió que probablemente toda la piel de la muchacha tenia sabor a chicle, eso solo aumento su libido aún más. Los jadeos de la pelirosa empezaron a sonar cada vez más eróticos y adorables para el muchacho.

-"Mina…"-le parecía tonto el no llamarle por su nombre en la situación en la que estaban.

La manera en que Izuku estaba succionando su piel le impedía pensar con claridad a la pelirosa, solo manos y boca bastaba para que la muchacha estuviera a punto de llegar al clímax… sus piernas empezaban a flaquear y su amarre en el cuello de su compañero aumento. No quería acabar así, Mina también quería hacer sentir bien al chico que tanto deseaba y ahora tenía, aguantaría e intentaría… por él.

Ojala hubiera practicado… pensó la muchacha en medio de todo el placer que estaba sintiendo.

-"Sabes delicioso"-comento sin miedo alguno Izuku, sus propios labios empezaban a coger el mismo sabor de la pelirosa.
-"D-deberíamos…"-quiso parar Mina, el mantenerse de pie e intentar articular palabra coherente le era muy complicado en estos momentos.

Habiendo tenido suficiente del cuello de la pelirosa, Izuku dirigio su atención de vuelta a los labios de Mina, recorriendo un camino de besos de su cuello a sus labios, la joven pareja inicio otro apasionado beso. Las manos del muchacho se entrelazaron con las de su pareja para luego llevarlas contra la puerta de la habitación de Mina.

Obteniendo la fuerza y concentración de milagro, Mina llevo lentamente la mano del peliverde a sus senos, al diablo con estar yendo deprisa pensó la pelirosa. Empezaron con simples caricias y movimientos circulares, sin embargo, ya con su lujuria al máximo, Izuku le dio una leve estrujada al bien desarrollado pecho de su acompañante.

Mina arqueo su espalda y soltó un gemido ahogado…

Las luces de la habitación de Hagakure se encendieron, la adrenalina y la desesperación empezaron a apoderarse del peliverde, hace solo algunos momentos este se encontraba en el paraíso de goma de mascar y ahora solo faltaban segundos antes de que su compañera invisible les descubra en esta terrible situación.

Actuando por instinto, Izuku abrió la puerta del cuarto de Mina y a penas abierta este levanto como saco de papas a la extasiada pelirosa… al mismo tiempo que se abrió la puerta del cuarto de Hagakure, la joven pareja ya se encontraba sanos y salvos en la rosada habitación de Mina. Casi!

-"*yawn* Necesito un poco de agua…"-dijo la adormilada muchacha con pijamas flotantes.

Dentro de la habitación

-"E-eso estuvo cerca…"-susurro el muchacho, gotas de sudor caían de su rostro-"Uhm… A-ashido?"-le llamo recuperando su timidez.
-"Dame u-unos minutos…"-pidió agitada Mina, su corazón pareciera que estuviera a punto de salirse.
-"Ok…"-se sentó en la esquina de la cama el peliverde, su rostro completamente rojo y su respiración algo decente. Su corazón por otro lado… estaba loco.

No cabía duda ahora, Izuku si sentía amor al estar con la pelirosa… la descarga que sintió al juntar sus labios con Mina lo comprobaba. El calor del momento le había hecho ir muy apresuradamente, tenía que disculparse con su amiga.

-"Ahm… A-ashido?"-volteo a verle-"L-lamento lo de antes… me deje llevar y…"-los nervios y ansiedad regresaron.
-"Llámame Mina y tranquilízate, supongo que notaste que no opuse resistencia o sí?…"-contesto con una sonrisa pícara -"No tienes por qué disculparte Izuku..."-se le acerco.

Estirando su mano hacia la del peliverde, Mina le sonrió de corazón al muchacho, la pena e inquietud empezó a desaparecer en Izuku, era increíble la seguridad y confianza que le podía dar el juntar manos con la pelirosa.

-"E-esto significa que…"-justo cuando su timidez empezaba a desvanecerse-"Uhm… tú y y-yo…"-se sobo la nuca avergonzado.
-"Sip!"-se apegó al peliverde-"Espero soportes las muestras de afecto en público hehe…"-rio divertida.
-"C-creo poder soportarlo…"-se contagió de la risa de su ahora novia-"Bueno… s-será mejor que vaya yendo…"-empezó a levantarse.
-"Tú no vas a ningún lado"-le dijo seria la pelirosa, sacando la fuerza de quien sabe dónde, Mina tumbo de un tirón al peliverde en su cama.
-"Uhm… M-mina?"-se preguntó algo intimidado y sorprendido por la inesperada brusquedad de su pareja.

La muchacha se sentó en el abdomen del peliverde evitando que este se moviera con libertad, estirándose un poco a la mesa de noche, Mina encendió su lámpara iluminando considerablemente su habitación.

-"Estuviste increíble allá afuera Izuku"-empezó a quitarse su polera la pelirosa-"Incluso me hiciste venirme…"-lanzo su prenda lejos.
-E-estas segura de q-querer hacer esto? Podríamos d-despertar a los demás…"-intento salir de la situación.
-"Déjalos escuchar…"-empezó a quitarse su brasier-"…nos ahorraríamos el trabajo de contarles acerca de nosotros"-le guiño coqueta.

Izuku trago saliva con fuerza, los pechos de Mina eran hermosos y bastante grandes, la sensación a chicle aún estaba en su boca… ya no había razón para seguir conteniéndose, si iban a hacerlo Izuku se aseguraría de darlo todo de si… Mina lo merecía.

-"De eso estaba hablando"-dijo emocionada la pelirosa, su pareja empezaba a captar el mensaje comenzando por desnudar su parte superior.

Ambos se quedaron contemplándose por unos segundos, sus corazones acelerados y su libido empezando a elevarse. Sus labios se juntaron una vez más, a diferencia de antes, Mina logro mantener su compostura ante el peliverde, el cual acariciaba con una mano la espalda de su amante y con la otra masajeaba los senos de esta.

La dominación de Izuku sobre la pelirosa fue inevitable, a penas el peliverde roso sus labios con los pechos de su amante, Mina perdió toda esperanza de querer llevar la iniciativa en el coito, su resistencia se vino para abajo y lo único que la muchacha pudo hacer fue acariciar el revoltoso cabello de su pareja. Las mordidas que Izuku le daba de vez en cuando le provocaban un respingo de dolor placentero a la pelirosa.

-"S-se siente bien…!"-dijo con sus otros entrecerrados la muchacha, no solo su cuello quedaría marcado para mañana.

Cuando fue que me recostó? Pensó sorprendida de encontrarse bajo la merced de su pareja, estaba contra la cama y el hombre, Mina podía sentir que las cosas estaban a punto de llevarse a un escalón más íntimo entre ambos.

-"Estoy lista…"-dijo firme y clara la pelirosa, su respiración entrecortada.

El peliverde volvió a tragar saliva de golpe ante lo delicada y dulce que se veía su pareja estando debajo de él, era raro ver a Mina nerviosa y tímida, sin embargo, cuando uno tenía la oportunidad de presenciarla en ese estado… uno quedaría embobado. Recorriendo un camino de besos desde su abdomen para abajo, Izuku empezó a quitarle las últimas dos prendas que le quedaban a la pelirosa.

Ambos dejaron salir un respiro ahogado, Mina por vergüenza y Izuku por sorpresa, el peliverde sintió que el bulto en sus pantalones empezaba dolerle por lo apretado que estaba, y pues era natural el sentirse excitado al ver el sexo de su pareja completamente mojado. Hipnotizado y completamente fuera de si, el peliverde acerco sus labios por puro deseo y curiosidad al empapado lugar.

-"Oh dios!"-grito Mina, sus labios inferiores estaban en el nirvana en estos momentos, el placer era abrumador e agotador.

Las manos de la pelirosa oprimieron con todas sus fuerzas sus sabanas en un intento de apaciguar la intensa sensación en su intimidad, sus labios también se cerraron con fuerza, si su amante seguía trabajando ahí abajo pronto Mina encontraría su segundo orgasmo de la noche. Tenía que decidir entre dejarse llevar o intentar hacer sentir bien al peliverde…

-"C-cógeme!"-logro gritar la pobre, sus ojos cerrados por la intensidad del momento-"Izuku solo h-hazlo!"-suplico.

Siguiendo las órdenes de su pareja, el muchacho hizo a un lado el centro de la pelirosa para concentrarse en quitarse lo último que le quedaba a el de ropa. La lujuria le hizo desnudarse en segundos, solo quedaba un ultimo problema antes de empezar…

-"Uhm… n-no tengo protección…"-dijo avergonzado y apenado Izuku, era el peor momento para recordar algo tan vital como la seguridad.
-"Es s-seguro…"-hablo despacio la muchacha, había estado cerca de terminar.
-"Ok..."-se posiciono cerca a su pareja-"Dime si te d-duele está bien?"-pregunto el peliverde.

Cubriéndose con su armada y abrazándola hasta la muerte, Mina sintió como poco a poco ambos se conectaban, para sorpresa y alivio de la pelirosa, ningún dolor se hizo presente una vez Izuku ya estaba completamente dentro… pero el regocijo que sintió al sentir la primera estocada fue letal.

-"Mina!"-gruño de placer el muchacho, el erótico cuerpo de su amante era demasiado para él.

Gemidos empezaron a resonar en la habitación, los amantes estaban en la cúspide de lo placentero, Mina no podía evitar de gritar por lo fervoroso del acto. Izuku estaba en las mismas que su pareja, tomando de los muslos a la pelirosa para empujar con más fuerza, el peliverde solo podía gruñir y aumentar la velocidad de sus caderas.

Olvidándose de si a su acompañante sentiría inconformidad o dolor, Izuku empujo las piernas de su amante lo más que pudo contra la cama, el muchacho empujo con todas sus fuerzas las ultimas estocadas antes de llegar al climax, su cuerpo estaba cubriendo por completo a la pelirosa. Izuku dejo salir un grito ahogado al terminar, Mina abrio los ojos de golpe y arqueo su espalda en consecuencia de su ya tercer orgasmo, sus dientes se apretaban lo mas que podían pero un sonido agudo de placer fue inevitable.

El peliverde dejo caer su peso sobre su novia, su cabeza cayo justo alado de la de la pelirosa evitando así chocar frentes, los minutos pasaron y solo el latido de sus corazones a mil por hora era lo que se escuchaba. Con un poco de esfuerzo, Izuku logro acostarse alado de Mina, la cual estaba observando sus manos con debilidad.

-"Desintegre mis sabanas…"-comento entre jadeos la muchacha-"…estoy exhausta…"-dio un último suspiro antes de respirar más normalmente.
-"Yo t-también…"-confeso el peliverde, la cantidad de fuerza que puso en el coito le seguía preocupando… le sorprendía que Mina no estuviese lastimada.

La joven pareja cerró sus ojos dispuestos a dormir y no despertar nunca más… sin embargo…

*crack* *crack*

La cama se vino para abajo haciendo rebotar a los amantes… aunque poco les importaba eso en estos momentos. Izuku uso sus últimas fuerzas para apagar la lámpara y cubrir con una colcha cerca sus desnudos cuerpos, volteando por última vez a su ya dormida pareja… el peliverde sonrió feliz.

Ahora tenía a alguien.

Epilogo.

Regresando de una semana de vacaciones, una sonriente y animada Uraraka se dirigía a los dormitorios de la preparatoria, en el camino la castaña le dio los buenos días a muchos profesores y compañeros de años inferiores. Ya enfrente de la instalación, la muchacha se adentró entre risillas al edificio… todo se veía igual a como lo dejo.

Saludando y abrazando a algunos de sus compañeros y compañeras que desayunaban en la sala, Uraraka se preguntó el porqué de la ausencia de cierto peliverde que casi siempre levantaba primero. Justo cuando iba a preguntar el paradero del muchacho, unos ruidos obscenos empezaron a escucharse desde el segundo piso.

-"*sigh* Hay van de nuevo…"-suspiro cansado Kaminari.
-"Midoriya es un egoísta! No pido mucho solo algunas fotos nada más!"-se quejó Mineta.
-"Por lo menos ahora sabemos por qué no bajaban a desayunar…"-comento Tsuyu.
-"No puedo creer que no se sientan avergonzados…"-dijo Momo, su rostro algo enrojecido.
-"Uhm… alguien me explica que está pasando?"-pregunto con una sonrisa nerviosa Uraraka.
-"Es Midoriya y Ashido"-los menciono Todoroki, sin siquiera voltear a verle.
-"Que hay con e-ellos?"-cuestiono asustada.
-"Se detuvieron!"-les interrumpió Toru, llamando la atención de todos.

Los pasos de alguien bajando las escalares se escucharon como eco en la sala, todos los presentes fijaron su vista en el corredor, al cabo de unos segundos apareció una de las culpables de tales sonidos. Mina con una sonrisa resplandeciente y una toga un poco desordenada se encaminado apresurada hacia la cocina.

-"Oh! Uraraka!"-se detuvo en seco la pelirosa-"Es bueno verte de nuevo! Llamare a Izuku para que baje a saludarte!"-le dijo en medio de un abrazo.
-"Por favor no pinky, no queremos que se pongan cariñosos como la anterior vez que estábamos viendo una película en la sala…"-le molesto Kaminari.
-"Por lo menos no terminamos cortando la luz por un simple beso ah? Kaminari?"-le miro desafiante.
-"Por qué tuviste que mencionarlo…"-se cubrió el rostro avergonzada Kyouka.

No fue la mejor de las bienvenidas el enterarse que su mejor amigo ahora tenía una relación abierta con otra de sus amigas… muy abierta a decir verdad.

Estoy enfermo lo se :´v

Usare este "boceto" para empezar a escribir las ideas pervertidas que se me ocurren con respecto a ciertas chicas de MHA, todas serán historias distintas a menos de que se me ocurra conectar una que otra. Al que me pidió una historia con Midnight… es tu dia de suerte! Es la primera vez que escribo un lemon asi que por favor no me maten

Nota: Esto sucede en el tercer año de los protagonistas.

Siguiente víctima: Ibara Shiozaki en "Feromonas"

Gracias por leer!

-evolvelove