Hola a todos y todas, es hora de acabar está historia al fin. No tenía plan de un long shot porque estoy a full de trabajo con otras historias pendientes en otro fandom pero quise dar una buen capítulo y final. Me siento halagada del buen recibimiento en CCS y de sacar una historia que no todo fue el drama clásico, poder mezclar un poco la magia de la saga.

Hoy voy a responder el último review:

ElizzeKomatsu: qué bueno que estamos en sintonía sobre el enredo del mago, creo que era importante para poder unir muchas circunstancias. Todo el mundo quiere un pack de Eriol, yo quisiera un Eriol así en este momento. Jajajaja yo no quisiera ser Shaoran en su fiesta de compromiso, qué día de locos. Aquí las lluvias están menos intensas, pero aún hay.
Gracias por tu apoyo.

Card Captor Sakura le pertenece a CLAMP, yo solo pongo la historia.

Es un pequeño regalo para Pily-chan.

Blue Sonata

Por GeishaPax

Epílogo: Winter II

No dejaba de observarse en el espejo del gran probador. Un grito de exclamación la hizo girar con nerviosismo, no dejaba de jugar con sus manos mientras sentía las miradas de las acompañantes sobre ella. Sonomi Daidouji caminó hasta ella y la observó de pies a cabeza. Una amplia sonrisa que mostró sus dientes blancos le hizo sentirse más nerviosa, nunca la había visto tan feliz. Su madre era por lo general más reservada, solamente hablar de Nadeshiko o Sakura la hacían emocionarse. Pero ahora, por primera vez sentía que su madre estaba realmente feliz y plena.

Realmente estaba nerviosa, las bodas japonesas son totalmente diferentes a las Europeas. El cambio de culturas era interesante, la boda shintoista y la anglicana, los preparativos; las diferencias entre como se realizaría cada una.

En Japón estaba todo listo para la recepción, el kimono tradicional que a pesar de lo caro que era, el bisabuelo y Sonomi lo habían costeado. Los cambios de vestido y ropa de los novios, el comprarlo juntos era algo que Tomoyo sentía como un lazo que los unía más.

Pero para la ceremonia inglesa, todo lo tenían que hacer por separado. El vestido no debía ser visto por el novio o se consideraba mala suerte. Solo usaría un vestido para toda la celebración.

De alguna forma de sentía más libre en la boda extranjera. La boda japonesa era controlada de pies a cabeza.

—Por eso te adora la madre de Eriol. — exclamó Nakuru desde el sillón. — Tienes un gusto exquisito.

—Toda una Daidouji. — respondió Sonomi mientras le acomodaba en la espalda parte del vestido.

—Gracias, madre.

—Tomoyo, por favor, quédate quieta, quiero verte. — exclamó Sakura poniéndose de pie y tomándola de las manos para tranquilizarla.

La azabache miraba a su prima intentando no moverse ansiosa.

—Es increíble que organizaras una boda para quinientas personas en Japón y China, pero no puedas con tu propia boda. — comentó la Card Captor mientras le sonreía divertida.

—La diferencia es que no era mi boda… y tú estabas más nerviosa que yo.

—Tomoyo, va a salir perfecto, tus vestidos son hermosos, el círculo de magos en Londres no pudo objetar nada, la comunidad te ha aceptado, estás adentro. — Sakura se lanzó en un abrazo a su prima. — Todo va a estar bien, porque confío en ti.

Tomoyo comprendió el mensaje y correspondió con cariño a la muestra de afecto de la recién casada Sakura Li. Habían pasado casi seis meses entre bodas, Sakura se había casado en verano y ella en invierno. Y sin autoengaños, la estaba superando en nervios y estrés. La primera boda sería la del mundo mágico en Londres.

—Tomoyo, quita esa cara. En unos días te vas a casar. — interrumpió Nakuru dándole nunca jalón de mejillas.

Pero no esperaban que Eriol tuviera que partir primero a Londres porque unos documentos no habían llegado a tiempo y eso complicaba la unión civil. Tomoyo tuvo un llamado de emergencia en una obra y tuvo que quedarse a cubrirla mientras todos empezaban a viajar para la ceremonia.

Una semana antes de la unión matrimonial, Tomoyo se encontraba cerrando sus maletas. Ya había revisado como cien veces que no se hubiera quedado nada para la boda europea, y que no se hubiesen llevado nada para la boda japonesa.

Tomó su bufanda, miró por última vez su departamento de soltera y salió con la maleta del lugar. Ya era un poco tarde, por lo que se abrigó bien.

Debió hacerle caso a Eriol y comprar el vuelo antes para no tener que viajar de noche.

Bajó por el elevador, caminó hasta su coche.

Pero una mano le cubrió la boca y la sostuvo por detrás. Sintió un pinchazo en el cuello y en segundos todo empezó a verse negro.

—¿No abordó? — la voz de Syaoran sonó débil mientras Sakura no dejaba de caminar nerviosa por el despacho de la madre de Eriol y el mago solamente se recargaba en el sillón mientras se frotaba la frente en círculos.

—Gracias… — Li colgó el teléfono y miró a su esposa negando con la cabeza.

—Esto es una locura, el portero dice que la vió salir con su maleta, pero los de seguridad dijeron que se ve a Tomoyo entrar al estacionamiento, pero nunca salir. — dijo la castaña cruzando los brazos y con las lágrimas a punto de salir.

—Ya intenté buscarla con un hechizo pero no siento su presencia. — soltó Eriol después de un suspiro amargo.

—Debemos ir, alguno de nosotros. — Yue habló con seguridad apoyado por los demás guardianes. — Es lo más rápido que se me ocurre, como Yukito puedo ir con la policía mientras Kerberos o Spinel la buscan a la par.

—O Nakuru o yo. — dijo Tōya.

—¿Sonomi cómo está? — preguntó Eriol.

—La dejamos dormida en la habitación de huéspedes, con un poco de tranquilizantes y magia estará bien. — respondió Ruby Moon.

—Tu madre la está cuidando y ha movilizado a varios hechiceros en la búsqueda de Tomoyo con el Consejo. — Fujitaka entró a la habitación. —El abuelo también duerme.

—Creo que debemos pensar más fríamente, prácticamente son una familia de magos unidos por la sangre. — comentó Kerberos.

Eriol se paró de golpe.

—Repite lo que acabas de decir… — pidió el padre de Sakura.

—Que debemos pensar fríamente. — empezó el guardián en su forma original.

—¿Hay algún hechizo que se pueda hacer por la unión sanguínea? — preguntó Sakura al entender a las dos mitades de Clow.

—La hay. — respondió su esposo. — pero puede ser tardado, la mezcla de sangre a lo largo de la historia puede generar que nos tardemos. Tendrían que participar Tōya y tú por tener sangre de la familia Amamiya.

—¿Entonces podemos encontrar a Tomoyo así? — preguntó Fujitaka, siendo neófito en esa situación.

—A todos los que posean sangre Amamiya… — respondió Eriol con media sonrisa.

— Empezaré a preparar el círculo. — exclamó Syaoran mientras corría a un lado de la gran biblioteca.

Despertó poco a poco, mareada, estaba en una habitación con apariencia antigua. Quiso levantarse pero unas esposas se lo impedían.

Aún mareada movió las muñecas, pero se dió cuenta de que estaba esposas a la cabecera de la cama.

Eso no estaba nada bien.

Empezaba a ser presa del pánico, si seguía en esa situación era porque no Eriol había sido capaz de encontrarla. Había pasado por situaciones peligrosas, pero esto no tenía comparación, estaba sola, no estaba Sakura o los guardianes; no estaba ni su familia.

La luz del día se alcanzaba a percibir por la cortina.

¿Cuánto tiempo había dormido?

Intentó reconocer algo, ver algo, pero el papel tapiz gris con negro en grecas no le ayudaba. Nunca había estado en una habitación con ese aspecto.

La puerta se abrió y apareció Raito con una bandeja de comida.

—Buenos días, querida.

—¿Qué hago aquí? — fue lo único que pudo preguntar.

Su cerebro estaba trabajando al mil por hora para lograr investigar algo de su paradero.

—Antes eras más educada, querida Tomoyo.

—Tampoco es muy cortés traerme sin invitación y sin mi consentimiento. — respondió.

—No me dejaste opción, te ibas a casar con otr…

—Me voy a casar con Eriol, así pase un año, no lo vas a poder evitar Watanabe. — interrumpió Tomoyo.

—No te va a encontrar Clow Reed…

Tomoyo no dijo nada, no esperaba escuchar en voz de Raito algo así.

—Aquí solo hay dos opciones, una,quien se haya llevado a Tomoyo debe ser un usuario de la magia. — comentó Yue después del quinto intento.

—¿Y la segunda? — preguntó Sakura en voz baja.

Nadie habló.

—Tenemos que encontrarla… — Fujitaka se levantó nuevamente de la silla, había conocido a Tomoyo cuando se volvió compañera de Sakura con un asombroso parecido a su querida Nadeshiko, después descubrió que su sobrina, la quería como otra hija. —Algo debimos hacer mal.

Sakura se levantó del círculo y fue por el libro nuevamente. Tōya se paró a su lado.

—Se invocó el círculo de Clow, los guardianes están de pie en los símbolos equivalentes a los puntos cardinales. — señaló Sakura. —Tōya y yo estábamos en el centro, ¿por qué no sucedió nada?

—¿Deberá ser en un momento específico del día? — preguntó Syaoran revisando otro libro pero de magia china. —Sr. Kinomoto, ¿la traducción es correcta?

El mencionado se acercó al jóven seguido por Eriol y el círculo brilló en azul, desapareciendo casi al instante.

—¿Qué fue eso? — preguntó Ruby Moon.

Los hombres no se habían percatado de que estaban en el centro del círculo.

—Fue por un momento breve, pero funcionó. — exclamó Kerberos.

—Tal vez el orden sea diferente. — Eriol salió del círculo y acomodó al mayor de los hermanos Kinomoto en otra posición.

Sakura se puso en el lugar que ocupaba su padre y Eriol fue al centro junto a Syaoran y su suegro.

El brillo volvió a aparecer y la habitación se volvió negra. De repente, imágenes de aspecto como humo aparecían en diferentes partes del lo que era la dirección de Japón.

—Esto es increíble. — señaló Sakura más asombrada incluso que su padre.

Aparecieron algunas siluetas en un tono lila.

—Supongo que ellos son los que llevan sangre Amamiya. — comentó Tōya mientras veía en dirección a Londres solo dos brillos morados. —Hay mucha gente… qué raro es conocer a la familia así.

—¡Ahí! — señaló Sakura a la imagen fantasmagórica de Tomoyo en una silla, negándose a comer o beber lo que le daba una mano con brillo azul.

—¡¿Qué demonios…?! — exclamó Syaoran.

—Es descendiente de la familia Clow… — susurró Fujitaka lo suficientemente fuerte para ser escuchado por todos.

Eriol no soportó más al ver como la tomaban del rostro para obligarla a girar y algo rojo se percibía recorrerle el cuerpo. Salió del círculo furioso.

—Por lo general apoyaría métodos más pacíficos pero esto me ha hecho perder la calma. — la voz de Fujitaka era demasiado fría, algo que jamás habían escuchado sus hijos.

—Me voy entonces. — dijo Eriol mientras se arremangaba la camisa y aparecía el báculo del mago Clow. —Ya saben lo que tienen que hacer.

—Mantener el círculo para que puedas ir por ella y que puedan volver. — repitió Sakura la instrucción.

—Tengan cuidado. — pidió Tōya antes de verlo desaparecer

Tomoyo sintió como una corriente helada le recorría el cuerpo, como si le dolieran los huesos, cada que Raito la tomaba del rostro y la quería obligar a comer.

—Ya te dije que no le he puesto nada a la comida.

—Yo no sé cómo sean los magos japoneses realmente pero te aseguro que conozco a uno que aún hace pociones. — dijo la chica con la voz entrecortada.

—Yo no soy un mago japonés, querida, en teoría soy de origen chino e inglés también.

Tomoyo no dijo nada, sintió como era liberada de su nada convencional intento de método de alimentación. Las palabras de Raito no le estaban gustando para nada.

—Mi nombre en otro tiempo fue Fe…

—Fei Wang Reed. — la voz de Eriol se escuchó en la habitación.

—Eriol…

La voz de Tomoyo lo hizo girar a mirarla. Se escuchaba temblorosa y cansada.

—¡Qué hermoso momento!

—No te esperaba en esta dimensión.

—Viajé por mucho tiempo solo para descubrir que lo habías conseguido, lograste traerla de vuelta y en dos almas nuevamente. — caminó hacia el respaldo de la silla de Tomoyo. —La chica sin magia y recuerdos, vacía, y la otra parte sigue por aquí rondando, ¿no? Cómo fantasma.

—Vivió y fue feliz hasta el fin de sus días. — respondió Eriol. — Ahora suelta a Tomoyo.

—¿Fue feliz? Nadeshiko no murió por ninguna enfermedad, murió porque la división de almas no funcionó. En vez de ser dos, dejaste el contenedor incompleto para resguardar el alma de Yūko.

Tomoyo no estaba entendiendo nada, su tía ahora estaba metida en esto…

—Yo no deseaba alterar todo, Nadeshiko Kinomoto fue feliz, tuvo a sus hijos, Yūko logró su deseo y las cosas están en orden.

—No, no lo están. — tomó de nuevo el rostro de Tomoyo y la corriente helada la volvió a lastimar. —Ella debería poder soportar esto, mi objetivo era que ella estuviera aquí, viva, ahora lo está, me pertenece.

—No te pertenece, ni a mi me pertenece. Te recuerdo que aunque tengo sus recuerdos y parte de su magia, no soy Clow Reed, los planes de Clow no salieron como se esperaba. Yo estaba destinado a otra persona.

—Kaho, era una buena mujer. Hasta el final defendió la identidad real de los Kinomoto…

—¿La… mataste? — preguntó horrorizada la amatista.

—No, solo absorbí sus poderes y su energía vital, ahora es parte de mi. — señaló a su pecho.

—Maldito… — Eriol no soportó más y estaba a punto de lanzarse en un ataque cuando vió a la reencarnación de Fei Wang Reed apuntar con una daga el cuello de Tomoyo.

—¿La reconoces? — dijo acercándose más a la piel de la mujer. —Era de Yūko, muy poderosa. La recuperé de su tienda, un paso más y la convertiré en un ser de la noche.

—Esa arma está maldita, si la sigues sosteniendo será tu fin. — respondió Eriol.

—No me asusta vivir eternamente, mi alma estaba condenada desde el inicio. Tal vez Tomoyo me quiera acompañar…

—No voy a perder mi alma por ti, Fei Wang.

—Retame. — dijo cortando con la daga el cuello de la chica.

Eriol intentó lanzarse contra el mago pero una luz amarilla llenó la habitación hasta volverse cegadora.

Tomoyo abrió los ojos. Estaba recibiendo Raito de nueva cuenta a Eriol, ¿qué acababa de pasar?

Eriol miraba confundido a su prometida aunque sintió alivio al verla intacta. Eso había sido un viaje en el espacio-tiempo, especialidad de Yūko. ¿Acaso Tomoyo…?

La chica observó al fantasma de Nadeshiko detrás de Eriol, generando más confusión y terror de lo normal.

—Puedes hacer una barrera, hazla ahora.

La azabache no entendía cómo podría hacer algo semejante. Eriol estaba cambiando un poco el diálogo con Raito para ganar un poco de tiempo, Tomoyo vió la mano de su ex prometido acercarse y el hecho de recordar ese dolor helado le hizo cerrar los ojos por inercia y un grito de parte del mago se escuchó.

Eriol no lo podía creer, Tomoyo tenía una barrera de protección ahora. Era como si su equivalente de la dimensión de Japón antiguo estuviese haciendo magia, tal vez siempre la tuvo y acababa de despertarla.

—Eriol, la daga. — señaló Tomoyo con la mirada al objetos maldito en el suelo.

—Tomoyo, si la tomo…

—El sello está roto, confía en nosotras y hazlo… — Tomoyo lo miraba seria, sintió una presencia detrás de él pero no había nadie, después tendrían momento para las explicaciones.

Tomó el objeto y lo lanzó con fuerza a Watanabe. Un grito y una luz roja lo hicieron desaparecer al instante.

Eriol se acercó veloz a su novia y deshizo con un hechizo rápido las esposas. Se quiso poner de pie pero la debilidad le hizo tambalearse y ser sostenida por el mago.

—Te ves pálida.

—Lo sé, casi me matan y voy a casarme con un tipo de cuidado. — respondió con esa acidez característica.

—Vámonos de aquí.

La azabache asintió. Miró hacía una pared y susurró:

—Gracias, Nadeshiko.

Eriol abrió los ojos como platos mientras aparecían en el despacho de Londres.

—¿Por qué demoraron tanto? — la voz de Glenn Hiragizawa los hizo girar a la aludida. La madre había detenido su proceso de crecimiento a la par que Eriol.

—Perdonen la demora, estaba a punto de salir al aeropuerto pero Fei Wang Reed pensó que era buena idea no venir. — respondió Tomoyo mientras recibía en brazos a Sakura.

—Nos preocupaste.

—Todo está bien, Sakura.

—¿Qué sucedió? — preguntó Tōya examinando a Tomoyo.

—Necesitamos reportar el asesinato de un miembro del clan Tsukimine… — dijo Eriol serio. —Los ancianos deben saber que murió protegiendo a la familia Kinomoto.

Todos lo miraron aterrado mientras Tomoyo solo agachaba la cabeza. No entendían nada.

—Nadeshiko nos ayudó. — dijo Tomoyo mientras Tōya le tomaba la presión. —buscaban el poder de la tía y… al no tenerla, querían que yo fuese el contenedor de los poderes de una bruja.

—¿La bruja de las dimensiones? — preguntó la madre de Eriol.

Eriol asintió.

—Supongo que es una responsabilidad que tenemos que enfrentar como familia. — respondió la mujer levantando los hombros en señal de resignación, una resignación por tener como hijo a una reencarnación del mago más poderoso.

—Debes de comer algo, estás un poco deshidratada. — dijo finalmente Tōya a la amatista.

—Prepararemos algo. — señaló Li la puerta mientras salía con su esposa.

Los guardianes volvieron a sus identidades falsas.

—Tomoyo… — la detuvo Yukito antes de ir con Eriol. —No pude decir nada porque estábamos buscándote, pero debes hacerte los estudios que te sugerí.

Tōya los miró y asintió con la cabeza.

—D-de acuerdo, lo haré mañana mismo.

—Deberían ver si Sonomi ha despertado, está muy preocupada. — sugirió Fujitaka mientras la recién reunida pareja le hacía caso y se marchaba a la habitación.

La ceremonia en Japón al fin había terminado. Eriol y Tomoyo descansaban en el automóvil que los llevaría al aeropuerto rumbo a Bali, en Indonesia.

—En definitiva, prefiero las bodas inglesas que las japonesas. — exclamó Tomoyo mientras perdía el glamour y se quitaba los tacones.

Eriol le pasó los flats color hueso que había dejado en el auto antes de partir.

—Igual yo, al menos te divertiste en la inglesa. — respondió Eriol mientras se aflojaba un poco la corbata.

—Tuvimos más libertad, y baile. — respondió Tomoyo mientras estiraba las piernas.

—Y alcohol, mucho alcohol, que despreciaste. ¿Acaso no ibas a romper la dieta ni en tu fiesta?

—No Eriol. — se acercó a él y le dió un beso. — No estuve en dieta para entrar en el vestido, solamente seguí la recomendación de mis médicos de cabecera después de pasar casi dos días mal alimentada.

—Prometo que vas a comer a las horas que deben ser desde hoy. — respondió risueño. — Te obligaré a desayunar antes de que vayas a las sesiones de Elle.

—Creo que no seré modelo por una buena temporada. — contestó con una sonrisa traviesa mientras colocaba una mano de Eriol sobre su vientre y entrelazaba sus dedos.

—Entonces te invitaré a comer cuando tengas función de cover en Wicked. — le dió un beso en la frente.

—Tampoco cubriré a nadie en teatro musical en un tiempo.

—Eso no me está gustando para nada.— dijo Eriol. —¿vas a dejar de trabajar en todo?

—También pensé en que dejemos el departamento y mudarnos a la casa en donde vivías como soltero. Es más grande.

—No sería normal que los esposos no vivan juntos. — dijo cerrando los ojos y acariciando el hombro de su esposa.

—Tal vez, pero sería difícil esconderlo de la gente, se darían cuenta y si un día empieza a hacer magia…

Eriol abrió los ojos de golpe.

—¿Estás diciendo lo que estoy entendiendo?

—Con lo lento que vienes hoy desde la ceremonia, no sé que estés pensando. — rió mientras aflojaba el agarre y dejaba la mano de su marido aún en su vientre.

—¿Desde cuándo?

—Yue tuvo la teoría de que realmente el círculo de localización se activó con tu nuevo descendiente. Ya como Yukito, apostó y ganó el jueves de la semana pasada, en el desayuno.

—¿Apostaron?

—Tōya, Yuki, Nakuru, Spinel, Kero y Syaoran. Mi primo dijo que no tendrían noticias de un nuevo miembro hasta volver de la luna de miel, Nakuru y Kero dijeron que en la noche de bodas en Inglaterra tendrías descendencia. Syaoran apostó que Sakura y el se adelantarían. Yukito fue el único que dijo que seguramente ya había descendiente.

—Serán cabrones. ¿Por qué no me habías dicho nada?

—Era solo una sospecha hasta el jueves pasado.

—Eres una mujer llena de sorpresas, primero descubres que ves seres que ya no son de este mundo, haces magia de la nada, tu tía aparece para protegerlos. — le presiona un poco más el abdomen. — y te callas el secreto.

—Tu seguro querías abrir champaña en el vuelo. Tenía que detenerte. — se defendió.

—Un hijo, no esperaba ese regalo. Soy el padre más viejo de alma de la historia.

—Tu me regalaste una casa de verano sin habernos casado… y elegiste a alguien mucho menor en años.

Eriol la tomó de la cintura y la acercó nuevamente contra él, para besarle. Duraron unos minutos así hasta que el aire empezó a faltar.

—¿Seré buen padre? — preguntó al separarse y acariciarle el rostro.

—Lo podremos averiguar en el camino, tampoco es que tenga el manual, apenas y voy a aprender a ser esposa.

—Creo que nos saltamos algunos pasos en eso, querida. — le volvió a tomar el rostro y empezó a llenarla de besos.

Le estaba agradecido, ese círculo azul que brilló en esa búsqueda, era una sonata azul que le estaba mostrando un futuro más alentador. La sonata de la vida que empezaba, la vida llena de amor.

También conocida como la isla de los dioses, Bali tiene todos los elementos para que disfrutaran de una luna de miel relajada en un entorno paradisiaco.

¿Qué mejor que pasar unos días de ensueño en una pequeña isla de Indonesia junto a la persona que amas? Además de ser conocida por sus hermosas playas de arena blanca, aguas cristalinas, paisajes únicos y tesoros naturales, cuenta con un sinfín de experiencias culturales, como: visitas a templos mágicos, espectáculos de danza, adentrarse en su inmensa selva y conocer los majestuosos arrozales.

Tomoyo miraba con asombro la vista desde la habitación. El sol se estaba poniendo y el horizonte en tonos naranjas y azules parecía sacado de una pintura.

Su esposo la rodeó por la cintura y le dio un beso en el cuello.

—¿Te sientes mejor?

—Menos cansada, sí. — respondió ella mientras se separaba un poco y caminaba hacia el armario.

—Tommy, no quiero salir hoy a cenar.

—Entonces, ¿qué quieres hacer? — preguntó mientras cerraba de nuevo la puerta y ponía las manos en la cintura.

—Quiero. — dió un paso al frente. — que se repita. — dió otro paso para alcanzarla. — lo de anoche.

Tomoyo no pudo responder nada porque antes de poder hablar. Eriol ya la tenía en sus brazos y la dejaba en la cama mientras empezaba a quitarle la bata, recorrerla con las manos y besarla con pasión.

FIN.