Ladybug miraba a su compañero pensativa mientras éste estaba de rodillas extendiendole una rosa.
-Yo...
El chico esperaba la respuesta en silencio ya que se acababa de confesar.
-No se que decir Cat.
El rubio se puso de pie y suspiro decidido.
-Sólo dame una oportunidad my Lady, es cierto que no se quien esta tras ése antifaz pero juró amarte.
Ladybug se sonrojo un poco y le dio la espalda.
-Hace tiempo que me gusta alguien pero hace unos días que tú también me gustas, no se que hacer.
El felino se acercó más a ella y la abrazo mientras estaba de espalda.
El corazón de la chica pálpito como nunca antes y sus piernas se sintieron débiles.
-Te aseguro que te amaré hoy más que ayer, mañana más que hoy y el resto de nuestras vida más que Romeo y Julieta.
-Motas fueras.
La transformación de la chica desapareció y Cat noir se alejó un poco sorprendido mientras ella volteaba para verlo.
-¿Amaraa incluso a la tonta y torpe Marinette?
El chico sonrió.
-Sólo si tú también amas a Adrien. Garras fuera.
La luz verde se hizo presente y la chica quedó sorprendida.
Ambos se miraron por un rato, se acercaron lentamente hasta quedar a unos centímetros y...
-¡Quiero camembert!
Plagg se metió en el camino, recibió los besos que se iban a dar y lo miraron con enojó.
-Grrr, éso me gusta más que el queso, dame otro.
El kwami se acercó a Marinette y Adrien lo agarró con la mano.
-Despidete del queso por un mes por que comerás gusanos, hijo de la reverenda remolacha.
Plagg tragó con miedo al ver a su portador tan molesto.
-¡Ya vasta!
Marinette le sacó al pequeño kwami y lo abrazó.
-No te enojes con Plagg el es inocente.
Adrien miró al kwami que olía a SU chica.
-¡Él es todo menos inocente!
-Concuerdo con él Marinette.
El chico se asustó un poco al ver a una kwami roja con una mirada espeluznante cerca de él.
-T-T-Tikk-i.
Plagg pasó a un color totalmente blanco al ver a su compañera enojada.
-Ven conmigo Plagg, tenemos que hablar.
Y fue todo lo que se supo de Plagg por ésa noche.
Adrien miró a Marinette algo enojado.
-Más te vale no confiar en él, si le das la mano te quitará la pierna.
La chica asintió algo apenada.
-Entonces... ¿quieres ser mi novia?
Marinette se sonrojo y asintió.
El chico sonrió y se acercó a ella peligrosamente.
-Lo siento princesa, no entiendo las señales.
La chica bajó su mirada y pronunció despacio.
-S-si quiero.
La sonrisa del rubio creció más.
-Lo siento, no te oigo.
Marinette lo miró y habló normal.
-Si quiero.
Adrien la miró confundido.
-Creo que aún no te escuchó.
La chica lo agarró del cuello de su camisa, lo atrajo hacía ella y lo besó.
Adrien tenía sus ojos bien abiertos mientras sentía como ella lo besaba con desesperación, mordia sus labios e introducía su lengua a la boca del asustado chico.
La falta de aire se hizo presente y ella lo soltó tan brusco como lo agarró.
-Dije... que si quiero ¿me oiste?
Adrien retrocedió sonrojado mientras tocaba sus labios.
-Pregunté ¿si me oiste?
La chica se acercó y él retrocedió asustado.
-S...¡SI! entendí.
Y así su noviazgo empezó de una manera inesperada.
.
.
Una semana después.
Gabriel Agreste miraba al hombre que estaba sentando en la silla frente a él con seriedad.
-Dígame que necesita señor Dupaing Cheng.
Tom también lo miró con seriedad.
-¿Usted ya sabé que nuestros hijos son novios?
El hombre asintió mientras pensaba en quitarle el aumento de sueldo que le dio a Nathalie por dejar pasar a ése hombre.
-¿No creé qué es hora del que tengamos "la charla" con ellos?
Gabriel se sorprendió un poco por la pregunta.
-Yo me encargaré de decirle a Marinette por que mi esposa la va a traumar si se lo explica ella así que usted dígaselo a Adrien.
-¡Señor Dupaing, nuestros hijos ya deben saber del tema!
Tom sonrió.
-Si lo saben ¿por qué cuando le di a su hijo un condón creyó que era un globito, lo inflo y se lo regaló a mi hija?
Gabriel casi se cae de la silla al oír eso.
Su hijo no era tan idiota ¿verdad?
Suspiro y miró al hombre que sonreía comprensible.
-Usted gana, tendré la charla con Adrien.
.
.
Ya de noche.
Adrien pasó a la oficina de su padre algo confundido.
-¿Qué necesita padre?
El hombre lo miró con un pequeño rubor, ni el creía que iba a hacer éso.
-Lee estó.
Le dio un papel y el chico lo leyó.
-¿Sabes que es verdad?
Adrien lo miró con una sonrisa.
-No tengo ni idea que significa esto.
Gabriel golpeó su rostro con la palma de su mano.
-¿Me vas a decir que no sabes que son los óvulos?
El chico pensó un rato y luego habló.
-Nunca lo probé ¿en qué restaurante se come éso?
El hombre contó hasta diez y se contuvo las ganas de golpear al chico.
-Siéntate, esto sera largó.
.
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Con Marinette.
La chica leía el libro que le dio su padre sonrojada.
-¿Ésas cosas son los... es el aparato reproductor masculino?
Tom asintió.
-Si y seguro Adrien la tiene más grande.
La chica se sonrojo mientras cambiaba de página.
-¡¿QUÉ?! ¿Su... cosa va dentro de mi... cosa?
El hombre asintió.
-Esa es la reproducción human...
Un golpe por parte de su mujer en la cabeza lo hizo callar, la señora le quitó el libro a su hija y miró al hombre con enojó.
-¡¿Por qué rayos le estás mostrando una revista pornográfica a nuestra hija?!
El hombre lo miró despreocupado.
-No te preocupes, luego lo verá en alta definición y podrá hasta tocar...
La mujer le agarró de la oreja y lo llevo a su habitación mientras que Marinette seguía con su rostro rojo.
.
.
Al otro día.
Marinette y Adrien hacían todo lo posible para no mirarse.
-¿Qué pasa con ustedes? ¿Se pelearon?
Alya los miró confundida pero ellos negaron.
-Es solo que nuestros padres nos enseñaron ciertas cosas.
La morena los miró aún más confundida y Nino se acercó con una sonrisa.
-16 años y no toleran la charla, que inocentes que son.
Ahora todo tuvo sentido para Alya.
Y así Adrien y Marinette estuvieron algo distantes por dos meses.
Los padres son los mejores.
Fín...
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Hola!
Traume un poco a Adrien y Marinette, lo siento.
Gracias por su tiempo.
Volveré...