INTRODUCCIÓN

Sakura corrió tan rápido como sus heridas la dejaban, sabía que su oponente la tenía en sus manos y la única opción que le restaba era escapar. Su pie se dobló y cayó de rodillas sobre la tierra húmeda y las hojas color otoño.

Cuando salió de Konoha las hojas eran de un color verde intenso. En su búsqueda por encontrar a Sasuke, en su desesperación por reunirse con él, había olvidado que hasta el tiempo avanzaba y ella seguía estancada en la misma idea, en los mismos recuerdos.

El bosque parecía gritar entre la brisa y las ramas. Casi como ella lo intentó cuando aquel ninja la tomó del cuello para asfixiarla. La obligó a mirarlo a los ojos, a pesar de la gran capa que le cubría pudo distinguir el brillo de unos anteojos.

Cerró los ojos con fuerza. No podía estar pasando esto, no cuando ella estaba tan cerca de encontrarlo. Acababa de sentir su chakra otra vez, el inconfundible chakra Uchiha estaba a escasos kilómetros y justamente este ninja aparecía de la nada.

―Técnica oculta, jutsu memoria perdida.

―Sabes, Naruto, lo peor que le ha pasado a Sasuke, y lo peor que le ha pasado a Sakura, e incluso lo peor que te ha pasado a ti, ha sido la pérdida de algo valioso. De alguien valioso.

―¿A qué viene esto, Kakashi-Sensei?

―A que, al parecer, en este mundo, en el de los ninja, aún no nos acostumbramos a que el nuestro, es un mundo de guerra, de muerte.

El Hokage cerró los ojos. Suspiró y con cara de circunstancias le dijo a Naruto lo sucedido.

―El rastro de Sakura fue encontrado, nuevamente. Apareció cerca de la tierra del cielo, entre la aldea de la nube y la aldea de la lluvia. Sin embargo, mis perros lo perdieron a unos pocos metros, en cambio, encontraron un cuerpo calcinado, y a su lado la bandana de Sakura, con el símbolo de la hoja.

Naruto se estremeció. ¿Y eso qué quería decir? ¿Qué demonios era eso? ¿Que hacía con eso?

―Basura, mierda. Esto es una porquería. ¿Me estás diciendo que Sakura está muerta? ¿Y que mierdas se supone que haga? No lo acepto. Me niego a creerlo.

Naruto salió por la ventana antes de que Kakashi pudiera asignarle una misión formal de búsqueda para Sakura.

El Hokage se despeinó el cabello blanco, sobre el escritorio yacían libros y pergaminos por doquier.

―Sasuke…

Estaba inconsciente, pero con su Sharingan pudo ver que no tenía ninguna herida de gravedad, ni interna ni externa. La miró con gesto paciente. Una gota cayó del cielo sobre la frente de la muchacha de 19 años.

Recordó aquella vez en la que la dejó inconsciente para poder irse con Orochimaru. Ella nunca sabría lo que había sucedido antes de que él se marchara.

Un leve quejido salió de su garganta. El talón de Sasuke tembló, igual que la última vez que la escuchó confesarle su amor. El bosque era espeso y la lluvia levantaba el olor a tierra húmeda y hierba buena por todas partes.

La línea de su labio inferior se tensó.

Verdes y claros se abrieron aquellos ojos frente a él.

―Sakura…

Pero la respuesta no fue el típico Sasuke-kun de todos sus encuentros.

―¿Quién es Sakura?

Sasuke la miró con más intensidad, como para atravesar sus ojos y descubrir si estaba bromeando. La lluvia había mojado su cabello y gotas de agua caían desde las puntas de su cabellera oscura.

Ella tragó saliva, humedeció sus labios y dijo angustiada: ―Sakura… ¿es mi nombre?

Sasuke frunció el ceño. Se irguió por completo y la miró desde su altura.

―No recuerdo mi nombre, no recuerdo qué estoy haciendo aquí. ―una lágrima rodó por su mejilla, confundiéndose con la lluvia.

Su respiración se aceleró. Un nuevo gemido de dolor surgió de su garganta.

―¿Quién eres tú?

―Jutsu de amnesia ―pronunció el moreno, y sin moverse de su lugar envió un chidori que surgió de su espada, en forma de rayo atravesó las ramas hasta derrumbar una. Miró la figura que antes había estado de pie observándolos desaparecer rápidamente, y luego miró a Sakura con las manos sobre la cabeza, completamente aturdida.

Por más que quisiera ir tras ese sujeto, no podía dejar a Sakura allí en la condición en la que se encontraba. No se movió.


Hola, muchachos. Espero que les haya gustado. Les cuento que ya tengo el primer capítulo adelantado, así que pretendo publicar cada fin de semana, ¿de acuerdo?

Saludos