El pecho de Len se contrajo fuertemente. ¡¿Cómo se atreve ella decirle eso a Arrow?! Cómo carajo—

— ¿Su qué? –La voz de Arrow—del maldito Oliver Queen—dejó caer la fingida pretensión, repentinamente suave y confusa, más tranquila. No dejó caer los brazos, pero Len vio que su mano sobre la flecha dentada se relajaba.

La voz de Caitlin era más suave, sus propias extremidades relajadas cuando repetía: —Él es el Alma Gemela de Barry. Por eso está aquí, y nadie –miró por encima del hombre a Len y luego de vuelta a Arrow —, está lastimando a nadie. ¿Entienden?

Se enderezó como su estuviera orgullosa de sí misma. Len tenía que permitírselo—la mujer tenía agallas. Sin embargo, él ya sabía eso, desde la primera vez que la conoció, ella le dijo que la matara en lugar de herir al Flash. Len nunca hubiera adivinado que un día ella lo estaría defendiendo con la misma fuerza.

Arrow lo miró por encima de su hombro, con la voz volviendo a esa escofina.

— ¿Es eso cierto?

Len inclinó la cabeza hacia un lado por una fracción, mirando al hombre con ganas de saber quién era él para Barry.

—Lo es –dijo al fin, arrastrando los ojos entre Arrow y los demás en la habitación.

— ¿Por qué no nos lo dijo? –Arrow le preguntó eso directamente a Caitlin. Interesante— ¿Barry solía compartir secretos personales con Queen? Él hombre parecía conocer a Barry y a sus amigos, ¿Era lo mismo a la inversa?

—A Barry se le permite tener sus secretos –respondió Caitlin, enojada, y giró la cabeza para mirar a la otra mujer en la habitación. Los ojos de Len se olieron hacia ella, la mujer que había seguido a Queen. Era rubia y vagamente familiar, y estaba bastante seguro de que habían dicho que se llamaba Felicity.

—Ya lo veremos –dijo Queen. Len se alegró de no haber bajado el arma fría todavía porque líneas como esa hacían que su dedo fuera hacia el gatillo. Arrow se dio cuenta y se tensó. Tampoco había bajado su arco todavía.

—Creo que lo que Caitlin y, uh, Leonard están tratando de decir… –la mujer rubia dio un paso adelante, con las manos levantadas y tranquilizadoras, y con el sonido de su voz, Len se dio cuenta de dónde la conocía. Ella estaba allí la noche en que él descarriló el tren —, es que las Almas Gemelas son algo personal y tal vez Barry no quería compartir esto todavía.

Ella le dirigió a Queen una mirada significativa mientras hablaba y él le envió una expresión compleja a cambio. ¿Era ella su Alma Gemela?

—Secretos como este ponen a las personas en peligro.

Len casi puso los ojos en blanco. Finalmente, frustrado y demasiado cansado para esa mierda, inclinó su arma hacia el techo, satisfecho de que no estaba a punto de recibir un disparo de flechas, y se dirigió al hombre: —Lo que pienses de mí, no me importa, Queen. Pero no asumas que tiene algún derecho sobre los secretos de Barry.

Arrow bajó su arco. Len podría ver a las dos mujeres en la pequeña habitación relajarse.

—Tú yo necesitamos dar un paseo, Snart.

Como si fuera a dejar a Barry.

—Voy a pasar.

—La única razón por la que no estás lleno de flechas en este momento es porque le haría daño a Barry, pero si crees que no te arrastrare fuera de esta habitación—

—Vete a la mierda, Queen, a menos que quieras una pelea. No me voy del lado de Barry.

Era como si nadie en la habitación se atreviera a respirar después de lo que Len dijo, especialmente porque Cisco estaba demasiado quieto. Los ojos se Queen se estrecharon.

—Todos los demás, vayan a dar un paseo.

Arrow debía tener su respeto, miedo, confianza o las tres. Len se puso rígido y vio que cd uno de los otros miembros de la habitación intercambiaban miradas antes de salir, Caitlin le lanzó una mirada de preocupación a Len antes de irse. Len no estaba impresionado. Todavía estaba tenso por lo que Barry estaba pasando, los efectos residuales de ese dolor como un fantasma en su cuerpo, agotado. No había acumulado demasiados favores con el equipo de Laboratorios STAR, así que supuso que esto era alguna penitencia. Queen estaba escuchando algo de la mujer rubia que se inclinó para susurrar en su oído antes de separarse. Ella le dio una última mirada preocupada a la inconsciente forma de Barry antes de deslizarse por la puerta.

Y así se fueron y Len se quedó solo con el hombre. Él hizo un gesto de inclinar su arco contra una bandeja de suministros médicos y bajó su carcaj. Estaba vestido con una chaqueta negra y no con su traje de Arrow—Green Arrow ahora—, pero se imponía físicamente sin él, una presencia que venía de la confianza y, probablemente, de haber crecido con tanto dinero. Tenían la misma altura y una estructura similar, peor Len podría aceptar que Queen tenía mucho más musculo compacto y también era casi una década más joven. Todo eso estaba bien para él—incluso agotado y con el dolo que sentía, había derribado a hombres más fuertes y más rápidos siendo más inteligente. No es que esperaba que llegaran a los golpes.

— ¿Vs a amenazarme con lanzarme una flecha si le pongo una mano encima? Si es así, puedes ahorrártelo. Nunca lastimaría a Barry.

El hombre sacudió su cabeza.

—No necesito hacerlo, Snart. A menos que estés loco, nunca lastimarías a tu Alma Gemela a propósito, e incluso si lo hicieras, Barry puede defenderse contra alguien como tú.

Len estaba sinceramente sorprendido, luego calculador.

—Algo me dice que no estoy librándome de ti solo así.

En lugar de discutir, Queen lo miró durante un largo minuto. Len se mantuvo neutral, frío, concentrado en el hombre que tenía delante.

—Tú y Barry, ¿Están juntos?

Len asintió bruscamente, y Queen no pareció sorprendido, solo entrecerró los ojos.

― ¿Y todavía estás peleando con él? ¿Cómo Capitán Cold? –parecía que como si decir el mote de Len le dejó un sabor amargo en la boca. Una vez más, Len asintió.

―Pensé lo mismo. Dime, Snart, ¿Alguna vez has considerado el daño que podría hacerle a Barry no lastimándolo, sino manteniéndolo a tu lado?

―No te sigo –dijo Len, acercándose a la cama y, por lo tanto, a Barry.

Queen asintió y miró la forma inconsciente de Barry entre ellos. Había algo más suave en su rostro entonces, y a Len no le gustaba nada.

―No me gustas, Snart, y no confiaría en ti no por un segundo. Pero Barry es mi amigo, y parece que te importa, así que te explicaré –Len casi le dijo que no se molestara pero Queen siguió hablando, como si estuviera contando una historia en su sala de estar y no como si Barry estuviera medio muerto en medio de ellos. ―Cuando conocía a Barry, todavía no tenía sus poderes. Era como un niño―tropezándose con sus propios pies, divagando, demasiado emocionado y nervioso. Tenía una energía que no podía ser contenida, incluso entonces. Estaba flaco―no solo delgado como ahora, sino casi frágil, el tipo de persona que podías derribar con un solo golpe. Un fuerte viento podría haberlo derribado. Era joven y se veía, demasiado ansioso por complacer, ansioso por concentrarse por más de un minuto a la vez. Lo conocí unos días antes de que el rayo lo pusiera en coma.

Queen dejó que eso se hundiera. Len trató de no mostrar su sorpresa. Quería imaginar cómo había sido Barry, antes de sus poderes, antes del Flash, pero era casi imposible. Esa era la única versión de Barry que había conocido, cualquier otra imagen estaría manchada por ese conocimiento. No tenía idea de a dónde iba Queen con esta historia.

―Durante el fin de semana que estuvo en Starling, Barry ayudóa resolver un caso importante, se superó y salvó mi vida.

Len parpadeó. No estaba seguro si su dolor de cabeza era suyo o le dolía en el sangrado en este punto.

―Y fue entonces cuando me di cuenta de quién es realmente Barry Allen. Porque después de que él salvo mi vida, cuando le grité a Felicity, quien lo trajo para salvarme, quien confió en él con mi identidad cuando importaba, Barry no dijo una palabra para defenderse –Queen se detuvo, y hubo un sonrisa en el recuerdo, apenas allí y entonces desapareció, sus ojos se centraron en Len y se unieron en una mirada curiosa. ―Ese es Barry. Durante toda su visita a Starling, no hizo nada egoísta. Incluso su razón para estar en la ciudad era solo él tratando de ayudar su padre. Creo que la mitad de las opciones en su vida han sido sobre ayudar a su padre. La otra mitad han sido sobre ayudar a los demás. Así que cuando le grité a Felicity sobre traer a Barry, aunque hubiera muerta si ella no lo hubiera hecho, lo descubrí. Porque Barry no se defendió, sino la defendió a ella.

El hombre se cercó más a la cama, y había algo cálido y triste y duro al mismo tiempo en su voz cuando siguió hablando. Hizo que los pelos de la nuca de Len se levantaran.

―Aquí estaba este niño escuálido que tenía que mostrar una identificación en un bar, enfrentándose a un asesino conocido, sabiendo exactamente de lo que yo era capaz y estaba enfadado y nervioso, y todo lo que él hizo fue reprenderme, sin pensar, sin parpadear. Y él tenía razón.

Len no necesitaba que Queen le dijera que Barry era un idiota valiente. Había aprendido todo esto la primera vez que se enfrentó al Flash.

―Tan cálido y confuso como esto me está haciendo, Queen, ¿Por qué no me dices el punto de tu pequeño soliloquio?

El hombre resopló, oscuramente divertido. Su humos no lo hizo menos intimidante, las líneas de su cuerpo todavía estaban listas para luchar en cualquier segundo.

―No lo entiendes en absoluto, ¿Verdad? Barry es resplandor. Él no aceptaría ni un gramo de crédito pro ayudarme esa primera vez, no le importó que lo tratara como una mierda al principio―incluso me dio un regalo –el rostro de Len se endureció al oír eso, pero Queen siguió hablando. ―Y lo hizo todo porque pensó que era lo correcto y porque le importaba lo suficiente. Barry se preocupa tanto por las personas que se pierde en su necesidad de ayudarlas. Eso es lo que era antes de que ese rayo lo golpeara y eso es lo que él es después del rayo―la persona que se preocupa lo suficiente como para intentarlo.

Hizo una pausa, su expresión cambió, perdiendo toda la calidez que tenía.

―Así que no sé quién eres todavía, Leonard Snart, pero sí sé que no eres la persona que hace eso. Y, quienquiera que seas, espero que lo entiendas así de mucho. Esto solo puede ir de dos maneras si mantienes a Barry a tu lado. O te cambiará, o tú lo cambiarás. Y si sabes algo sobre la luz y la bondad dentro de Barry, serás el que cambie. Porque si no lo haces, y si intentas apagar esa luz, o cambiar esa bondad para adaptarla a tus propias maneras, Barry sufrirá, y no tengo que decirte lo que haré contigo si lo haces sufrir de esa forma.

― ¿Me estás diciendo que me mantenga alejado de Barry por su propio bien, Queen? Porque no voy a hacer eso –no lo estaba. No podía. No importaba que él supiera que Queen hablaba por experiencia, que había matado más hombres que incluso Len. No importaba que sus palabras hicieran eco de los pensamientos que Len había tratado de encerrar en lugares lejanos de su mente, los remanentes de los temores que tenía desde el día en que fue Marcado.

Queen fijó su mirada.

―Si lo amas como deberías, no tendrías que hacerlo. No obstante, si eres egoísta y cruel con Barry, marca mis palabras, Snart, no tendrás la opción de hacerle daño. Me aseguraré de que no te atrevas a obtener una multa de estacionamiento, y mucho menos que tengas l oportunidad de haber algo que podría lastimar—

Len se erizó, a punto de quebrarse, pero entre ellos, Barry gimió. Arrow se cortó de inmediato y Len se movió al lado de Barry, sentado en el borde de la cama.

— ¿Barry?

—Mmm, edes tú— ¿Len? –luchaba por sentarse a pesar de que apenas podía mantener los ojos abiertos. Len dejó caer una mano sobre su hombro. El sangrado entre ellos estaba lleno de confusión y ruido blanco, prácticamente solo sensación física todavía cuando el cerebro de Barry volvió a conectarse y Len hizo todo lo posible por poner consuelo en lugar de preocupación, en lugar de las náuseas agudas que sentía en Barry.

—No trates de sentarte—te lastimaste, mucho.

Barry murmuró algunas silabas y luego parpadeó con los ojos muy abiertos ante el áspero resplandor de las luces fluorescentes, con una mano moviéndose para hacerle sombra a sus ojos, y habló: —Dónd— ¿'Stoy en Laboratorios STAR?

—Sí, tú—

—Yo—voy a—

Len fue—por primera vez, tal vez—más rápido. Se estiró sobre la cama sin pensarlo y sacó una bandeja de fluidos médicos del stand de Caitlin antes de que Barry pudiera vomitar sobre su propio regazo. Y lo hizo, repentinamente se incorporó y se acurrucó hacia delante, sangre y bilis saliendo de su estómago mientras Len frotaba la piel desnuda de su espalda, arrugando la nariz contra el olor. Así de cerca, así de mucho contacto, su propio estomago se apretaba de simpatía y tragaba la sensación. El cuerpo de Barry temblaba bajo sus dedos.

Caitlin regresó a la habitación casi de inmediato, lo suficientemente rápido como para que Len se preguntara si había estado viendo su conversación desde la habitación a través del espejo—si todos lo había hecho. Sin embargo, ahora no importaba porque se estaba moviendo hacia el otro lado de la cama y cambiaba la bandeja de líquidos por una limpia para dejarla en el regazo de Barry, con las manos ya enguantadas. Ella estaba revisando los signos vitales de Barry, y ya estaba hablando: —Tu sistema circulatorio sufrió graves daños, Barry—

—Eiling—

—Lo sabemos –dijo Len sombríamente. Barry parpadeó, todavía aturdido, y Len levantó su mano. —Se ha ido por ahora, Barry.

—Tú estás… –parpadeó, entonces preció sacudirse un poco de su desorientación, buscando en la cara de Len. — ¿Estás aquí?

Len se tragó los sentimientos que intentó reprimir. Lucharía contra cualquier persona en el mundo que le dijera que no podría estar al lado de Barry cuando estaba herido. Cualquier persona excepto Barry. Nadie sabía cuán duros eran en realidad, particularmente cuando se trataba de Barry, sus asuntos del Flash. Nadie más sabía que Barry podría en realidad no quererlo allí, entre su familia. Len no se arrepentía de haber venido, pero no pelearía si Barry intentaba echarlo.

—Por supuesto que estoy aquí –algo se tensión se filtró en su voz pero mantuvo su expresión neutra. Hasta que Barry lo echara, no iba a ninguna parte.

—Yo… –Barry lo miró fijamente, y Len n podía sentir demasiadas emociones más allá de una mezcla agitada en el sangrado, todavía opacas debido al agotamiento de Barry. —Necesito una ducha.

Len casi suspiró y sus hombros se relajaron por un momento. Barry no lo estaba echando todavía.

—Eso puede esperar –vino el gruñido de Oliver Queen desde el otro lado de la habitación y Len sintió que Barry se tensaba por completo, con los ojos yendo hacia él.

— ¡¿OLIVER?!

Len había estado de espaldas a la puerta, con el cuerpo mirando hacia Barry, pero ahora se dio la vuelta y se dio cuenta—tenían una audiencia. Ya no solo Arrow, sino Cisco y Felicity también, como cachorros ansiosos en la puerta, con los ojos ligeramente abiertos en ambas caras.

—Barry –contestó Queen.

Len sintió que Barry casi se estremecía. Estaba nervioso y con nauseas de nuevo. ¿Qué demonios significa ese imbécil para que Barry reaccionara así?

—Oliver, puedo expli—

—No ahora, Barry –su voz era más tranquila, apaciguada, acercándose a la cama. Len sintió que sus vellos se erizaban. —Tenemos peces más grandes de los que ocuparnos. Puedo hacer una llamada si me necesitas, pero necesito saber qué está pasando aquí.

Barry dejó escapar un largo suspiro, sacudió la cabeza y luego asintió, y antes de que Len pudiera preguntarse a quién demonios Queen podría llamar, Cisco habló.

—En realidad, todos necesitamos intercambiar información muy pronto, chicos.

—Cisco –Barry levantó la vista. —Felicity.

—Hola Barry –era en realidad lo saludó con un movimiento de mano.

Len apretó su mano sobre la de Barry. Las emociones, la náusea— ¿Ninguna de estas personas tenía idea de la tensión que Barry tenía? Al menos Caitlin estaba chasqueando la lengua.

—Todo esto debería esperar, todos—él acaba de despertarse, necesitan darle algo de espacio.

—No—no, estoy bien –por supuesto, Barry discutiría. —Quiero decir, me siento como si me hubiera golpeado un camión, pero—espera, ¿Me golpeó un camión? ¿Cómo siquiera llegué aquí? Oliver, tú—

Yo no.

—En realidad, Barry –intervino Caitlin. La mandíbula de Len se había tensado demasiado para que formara palabras. —Leonard te trajo aquí.

Barry no debería estar tan sorprendido y Len no debería estar tan molesto por esto. ¿Tan fácil era aceptar que Flecha lo salvaría, y no Capitán Cold?

—Len—

―Estaba en el vecindario –su voz era demasiado amarga, y sabía que Barry podía sentir algo que se desprendía de él. Tragó su amargura de vuelta. Todavía podía saborear la bilis de la garganta de Barry en el sangrado, distrayéndose porque generalmente no era lo suficientemente intenso como para transferir los gusto o con tantos detalles, pero se había enfocado nada más que en el dolor de Barry desde que había caído inconsciente, montando las olas del paro cardiaco y huesos de tejido, y ahora era más difícil de evitar.

―Una vez más, chicos―intercambio de información –Cisco intervino y Len se encontró agradecido por ello. ―Porque no sé tú, pero yo quiero saber qué pasa con la mujer magnética de cabello purpura en el traje blanco y rosa―La señorita Magenta. Oh, su nombre es tan Señorita Magenta―ese no es el punto, vaaaale. Pero entre ella y Eiling y Grodd―

―Eddie― –Barry jadeó sin aliento y Len sintió que su interior se apretaba. ―Él está con Eiling, está―

―Está a salvo, amigo. En el hospital. Joe llamó hace un rato para checar, preocupado por ti. Él está recibiendo los documentos de alta del hospital de Eddie y vendrán aquí tan pronto como puedan. Y yo, uh –los ojos de Cisco fueron hacia Len y de regreso. ―No les dije mucho, excepto que estaba fuera de combate pero en vías de recuperación.

Barry dejó escapar un suspiro, con el cuerpo cayendo hacia delante ligeramente. Fue un pequeño consuelo el hecho de que todavía no había soltado la mano de Len.

―Vale―vale, eso es bueno. Yo― –se pasó la mano libre por el pelo.

―Esa fue la buena noticia –hubo una tensa pausa colectiva en la sala. ―La mala noticia es… ¿Alguien ha visto a Iris?

Mierda. Len sintió que su propio pecho se contraía. Por supuesto que se estarían preguntando dónde está ella en el caos.

― ¿Iris? ¿Ella no está en casa? –el corazón de Barry se aceleró y se inclinó hacia cisco mientras que Len se tomaba el segundo para inspeccionar la habitación. Los ojos de Queen estaban en Cisco, pero su cuerpo estaba frente a Len y todavía parecía listo para una pelea. Estaba a la derecha de cisco, Felicity a la izquierda de Cisco, más cerca de Len. Caitlin estaba al otro lado de la cama de Len, cerca de Barry todavía.

―Ni idea, hombre. Joe dijo que no ha respondido ninguna llamada y parece que no puedo localizarla con el GPS de su teléfono. Jode dijo que antes de que Grodd apareciera en la comisaria, Eddie estaba tratando de comunicarse de ella porque estaba, uh… entrando en pánico –Cisco hizo una mueca cuando lo dijo y Len mantuvo su propia cara neutral. Era estúpido de su parte no considerar el sangrado de Iris con su alma gemela del DPCC, pero en su defensa, había tenido algunas otras cosas que pensar.

―Tengo que ir –Barry se movió para hacerlo y Len inmediatamente movió su mano de sostener a Barry para presionarla contra su hombro, evitando que intentara pararse.

―No estás en forma―

―No puedes detenerme―

―Leonard tiene razón, Barry –Caitlin se movió con el propósito de presionar una mano en el otro hombro de Barry ―, acabas de vomitar cerca de una taza de sangre, todavía no estás al 100% y―

Tengo que―qué si ella está en peligro―

―Enviaré a Ronnie y Martin, están en el córtex y podrán ver más desde el cielo de todos modos.

―Caitlin―es Iris.

Ella dejó de tratar de discutir y Len sintió que su estómago se retorcía. Iris West, la mejor amiga de Barry. Iris West, a quien Barry había amado durante años, el tiempo suficiente para que todos en su vida simplemente tomaran como hecho que él la buscaría si ella corría peligro. De repente, Len ya no quería estar aquí. En la última hora, ya estaba teniendo una de por qué Barry lo había mantenido lejos de su vida.

Barry se movió para quitarse la mano de Len y la apretó en su hombro.

―Len, voy―

―Ella está a salvo –Len esperó por la expresión confundida de Barry antes de retirar su mano, mirando hacia abajo por un segundo como su estuviera considerándolo. Realmente, él estaba esperando su momento. Por el rabillo del ojo, vio que los dedos de Queen se movían en dirección a su arco. ―Iris West está a salvo. Está con Lisa.

Sintió los ojos de todos en la habitación sobre él. Eso lo puso tenso. O tal vez solo era Barry, que lo miraba con una expresión que era más que traicionada, con un surco entre las cejas y casi sacudió la cabeza, la forma en que se echó hacia atrás lo suficiente como para notarlo, la caída del estómago y a la ansiedad en cierto modo que Len no podía perdérselo. Y Len no pudo evitar preguntarse si él de inmediato sacaría tantas conclusiones si era la hermana pequeña Oliver Queen con quien habría dejado a Iris.

Con una voz mucho más razonable de lo que Len había esperado, Barry lentamente, casi en voz baja, casi con frialdad preguntó: ― ¿Por qué demonios sabes dónde está Iris?

Se encontró con la mirada de Barry, encontró su ira, sus propias fosas nasales se ensancharon. Quería decirle a Barry que confiará en él y quería preguntarle a Barry si pensaba que Len era un idiota y quería decirle a todos los demás que los observaban que se fuerana al mierda. Sin embargo, no dijo ninguna de esas cosas.

―Ella no está herida –fue mucho más suave de lo que él pretendía. Intentó de nuevo, con más fuerza. ―No soy lo suficientemente estúpido como para lastimar a tu mejor amiga. Y no la secuestré. Ella siguió a algunos de mis Rogues y ellos la atraparon en el acto –dijo con un los labios un poco levantados, con un poco de orgullo. Y entonces, más serio, inclinándose hacia delante para que Barry lo entendiera. ―Hablé con Mardon de no hacer nada estúpido, Barry. Nadie le puso un dedo encima. Iris estaba sola conmigo―hablando―cuando algunos de esos tanques pasaron junto a nosotros, tus pequeños amigos del ejército. Resulta que Grodd entró en su cerebro, lo mismo que él me hizo cuando estaba jugando con él. ¿Supongo que Thawne recibió el mismo tratamiento de Grodd de lo que hiciste la otra noche?

Barry estaba respirando un poco demasiado rápido, empujando una oleada de náuseas y si Len fuera otra persona, se sentiría culpable. Sobre todo, se sentía vacío. El amor de Barry por Iris era demasiado fuerte para que él pudiera contemplarlo en este momento.

―Tú―No puedo lidiar con esto ahora, Len. Necesito saber que Iris está a salvo.

Len se puso de pie.

―Llamaré a Lisa y haré que traiga a Iris. Puedes ver por ti mismo que ella está bien –sacó su teléfono y pasó junto a cisco y salió por la puerta antes de que Barry pudiera responder. Necesitaba salir de esa habitación (pero no demasiado lejos, le dijo su cerebro, no demasiado lejos). Necesitaba proporcionar la única cosa que mitigaría la preocupación de Barry, sin importar cuán retorcida esa preocupación hiciera a Len. Se dijo que ella y Barry eran solo amigos. Iris esta Vinculada. Oliver Queen estaba Vinculado.

Eso no significaba que Barry no los amara, a pesar de todo. En diferentes formas (tal vez), pero lo hacía. Barry se preocupaba por ellos, se preocupaba por su opinión, les compraba regalos

Lisa respondió en el segundo timbre.

― ¡Lenny! ¡Ya era tiempo, maldición!

―Lisa―

― ¡Es la mitad de la maldita noche! ¿Me dirás que diablos está pasando y qué se supone que debo―?

―Déjalo enfriarse por un momento, hermanita. ¿La chica West sigue contigo?

―Por supuesto que lo está –Len casi podía escuchar la forma en que Lisa ponía los ojos en blanco.

―Uh huh, dejé a la anciana en un hospital también, todo bien y eso, ahora solo―

―Necesito que traiga a West en Laboratorios STAR –más tarde podría preocuparse por conseguir un nuevo almacén cuando Iris contara sus secretos. Por un momento, una parte de él odiaba lo mucho que estaba dispuesto a doblegarse por Barry.

Hubo un palpable silencio de parte de Lisa. Podía escuchar la voz de Iris West en el fondo preguntando qué había dicho.

― ¿Me escuchas―?

― ¿Estás en Laboratorios STAR? –Lisa finalmente preguntó, con voz demasiado complacida por algo. ―Estaremos allí.

―Solo al chica, Lise, no necesitas―

―Oh no, Lenny. He estado limpiando por ti. Voy a ir a saludar a Cisco si tienes una fiesta.

Resistió el impulso de pasar una mano por su cara. La afición de Lisa por Cisco no era un problema, excepto la parte en la que ya estaba con alguien más y era cruel molestar al niño de esa manera. ―Bien, lo que sea, solo trae a West en una pieza, ¿Vale?

―Mhmm.

Cuando Len dejó de hablar por teléfono, se tomó un minuto más para enviar mensajes de texto y dale instrucciones a sus Rogues mientras tenía un segundo de privacidad―parecía que Barry se había limpiado a sí mismo a máxima velocidad, con el cabello mojado, la sangre seca desaparecida, vestido en la ropa estándar de Laboratorios STAR y de pie, caminando de regreso a la sala medica desde una puerta lateral con Queen a su lado. Len trató de no dejar que su ira se abriera camino en su rostro, pero vio que los ojos de Barry se movían hacia él y luego se alejaban, sin importar. Todos llenaban la habitación, Flash y Arrow a la cabeza, Barry le lanzó a Len una mirada mientras pasaba junto a él.

― ¿Iris?

―En camino.

Barry asintió y caminó con Queen, y Len se movió para seguirlo hasta que Felicity entrelazó su brazo en el brazo de Len, deteniéndolo con una sonrisa fácil y una sorprendente fuerza para alguien tan pequeña. Queen ni siquiera los miró, aparentemente sin preocuparse de que su Alma Gemela(?)―¿Cómplice? ¿Amante? ¿Ayudante? ―estaba del brazo de Len.

― ¿Caminas conmigo hasta el córtex?

Él parpadeó.

―Claro.

―Entonces…

Len la miró.

― ¿Entonces?

―Soy Felicity –dejó ir su brazo y le extendió la mano.

―Leonard Snart.

―Lo sé –sonrió ella, estrechándole la mano con más entusiaasmo que la mayoría de la gente. Salieron de la habitación y entraron en la saala, el resto del grupo delante de ellos, fuera de laa vista alrededor de la curva del corredor curbo. ―Nos hemos conocido ntes. Ya saabes, ¿Esa vez que le disparaste aal tren y lo descarrilaste y Cisco fringió que una aspiradoraa era un prototipo dea arma fría?

―Él―qué―

― ¡Hey! –Cisco gritó desde el pasillo y Felicity hizo una mueca.

― ¡Lo siento, Cisco!

Len tendría que invitar a Cisco a jugar póquer alguna vez―aparentemente era mucho mejor en el farol de lo que Len le habría dado crédito. Casi se sintió orgulloso, pero se aseguró de sofocarlo con diversión.

―Esta debe ser la razón por la que Barry dijo que no tienes mucho filtro –ese pensamiento se le quedó y eso le recordaba por qué su nombre le parecía tan familiar, ahora que estaban hablando.

― ¿Él dijo eso? Probablemente porque no puedo entablar una conversación completa sin hacer un doble sentido―no que lo intente, simplemente sucede―soy increíble con mi boca de esa manera―no que sea increíble con mi boca―quiero decir no es que no sea sorprendente con mi―oh dios, está pasando ahora mismo, esta pasando literalmente ahora mismo―

Len luchó duro para no sonreír. Fallo. Ella parecía mortificada y definitivamente hubo una risa que vería del resto del grupo en el pasillo.

― ¿Te das cuenta que una persona que es 'feliz' es alguien que tiene una forma particularmente adecuada con las palabras, espero?

―Oh, no necesito ese tipo de ironía en mi vida, ¿Vale?

Ella bromeó con Len como si fueran viejos amigos y él estaba tratando de mantenerse al día. Aflojó algo de su tensión, que podría haber sido su objetivo, pero él sospechaba que era más que ella solo era inmune a la mayoría de las molestias en ese momento, si la compañía que mantenía incluía a Arrow, Flash, y él solo podía adivinar quién más.

Aúna sí, acomodándose en el córtex, todos los demás aparentemente tomaban un lugar familiar, Caitlin besando al hombre en llamas―Firestrom―en la mejilla, otro, un hombre mayor parado en una de las pizarras y asintiendo hacia Len de una manera que era más cortés de lo que habría esperado―Len sabía que estaba fuera de lugar aquí. Cuando Felicity cruzó el piso para pararse al lado de Queen, Barry, quien estaba tomando el punto focal de la habitación, Len se dio cuenta de que ya no tenía idea de qué demonios estaba haciendo allí. Barry estaba bien, o al menos fuera de peligro. Iris y Lisa estaban en camino y podría irse en cualquier momento si quisiera. Pero él no quería hacerlo.

Len no quería irse. Barry amaba a Iris West más de lo que nunca amaría a Len, y depositó su fe y confianza en Queen de una manera fácil que Len nunca ganaría. Pero aun así, no quería irse. Había sido una noche larga hasta ahora, y estaba lejos de terminar, pero podría ser lo suficiente por ahora que Barry estaba dejando que Len se quedara.