Más vale prevenir

Disclaimer: todo pertenece a J. K. rowling.

Esta historia participa en el minireto de abril de La copa de la casa del foro La noble y ancestral casa de los Black.

()()()()()()()()()

Bellatrix despierta bañada en sudor y con un grito a punto de escapar de su garganta. A su lado Rodolphus se remueve en la cama y la mira con preocupación.

–¿Qué te pasa? –pregunta medio dormido.

–He tenido un sueño. El Señor tenebroso iba a matar a un bebé. Le lanzaba un Avada Kedavra pero el rayo rebotaba y nuestro señor caía. Parecía. . . parecía tan real.

Rodolphus la abraza atrayéndola hacia su pecho.

–Solo fue una pesadilla, Bella. Es imposible que eso ocurra –susurra en su oído mientras le acaricia el cabello.

Ella asiente y pronto vuelve a quedarse dormida. Sin embargo, a la mañana siguiente el sueño sigue muy presente en su memoria. A Bellatrix nunca se le dio bien la adivinación cuando estudiaba en Hogwarts pero no puede quitarse de encima la sensación de que es un sueño premonitorio.

Vuelve a comentar el tema con Rodolphus. Él intenta restarle importancia pero ella no termina de convencerse. Finalmente es Rabastan quien aporta la solución.

–Más vale prevenir que curar, como dicen los viejos. Mata al dichoso crío y quédate tranquila.

Rodolphus se muestra de acuerdo. Ya conoce lo suficiente a su esposa como para saber que de otro modo no conseguirá sacarse ese sueño de la cabeza. Bellatrix no lo duda más. Se esfuerza en recordar la cara del mocoso y en seguida cae en la cuenta de quién se trata. El pelo negro revuelto del mejor amigo de su primo y los ojos verdes de esa sangre sucia con la que está a punto de casarse. Ese niño aún no ha nacido y gracias a Bellatrix Lestrange nunca nacerá.