Notas del autor: Hola, otra historia, al final del capitulo la explicación. Monster Musume no me pertenece.

-Ubicación: Desierto de Sonora, México

-Nombre: Roberto García De la Madrid

-Rango: Subteniente del Ejército Mexicano

-Misión: Operativo a un conjunto de edificaciones clandestinas en el desierto de Sonora, posible ligamiento con redes de ´´coyotes´´, carteles de drogas, secuestradores

-Hora: 21:00 hrs pm

La noche cayó y nos movilizamos bajo las penumbras del frió desierto de Sonora.

La sección entera se movilizo en conjunto hacia esas edificaciones, están ubicadas a las faldas de las montañas, dos cabañas rusticas hechas de lámina y madera, al centro dos construcciones más grandes, casas de dos pisos hechas de concreto, cada edificación estaba cubierta de arena y tierra además de que les dieron cubiertas de pintura de ese color arenisca.

Por ahora dejare los detalles de lado, hace tiempo que habíamos tenido estas edificaciones en la mira, reportes de personas que cruzan el desierto y hace dos días un helicóptero cruzo por esta zona y saco fotos de los edificios donde claramente se veían hombres armados afuera mientras descargaban un camión, lo normal.

Gracias a los Humvee todo terreno llegamos a los alrededores y nos mantuvimos ocultos a la espera de la noche, para cuando la hora llego los Humvee utilizando posicionamiento satelital junto con las coordenadas del objetivo nos dejaron a 30 metros de la entrada, aprovechando la maleza y rocas nos movilizamos en filas de seis hombres con dos metros de separación en cada uno, mantengo mi dedo cerca del gatillo de y mi lámpara encendida manteniendo contacto de radio con mi comandante, este asigno a un hombre para que liderada cada fila, nuestro comandante va al frente, es nuestro guía en esta noche.

Me frene al ver como la luz de la linterna de mi comandante se detenía, escuche como mis hombres también frenaron, agachándonos levante mi carabina y apunte a los puntos ciegos alumbrándolos con la lámpara y descartando posible amenaza, aproveche estos segundos para contemplar el cielo… nunca me cansare de ver el cielo nocturno de este gran desierto, en ocasiones puede ser inmisericorde con los golpes de calor y misterioso con sus secretos, pero el cielo de la noche lleno de estrellas es inigualable:

-No hay blancos –escuche la voz del comandante por la radio- sigan avanzando, Roberto, atento a la derecha tienen encima el cerro, cuidado con un ataque desde arriba

-Si señor –conteste rápido sin levantar la voz- Muévanse –levante un poco más la voz y esta vez me dirigí a mis hombres detrás de mi

Avanzamos a orillas de la falda del cerro, esta esa inclinación algo inclinada, es difícil de escalar pero no imposible por lo mismo podrían atacarnos desde arriba, cada tres pasos le doy una revisión rápida. Al apuntar al frente la luz de mi lámpara alumbro la pared de la estructura de concreto, el pez gordo:

-Enciendan las lámparas

Mis hombres obedecieron y encendieron las lámparas de la confiable carabina FX-05 Xiuhcóatl, una joya de la ingeniera armamentista mexicana y que mejor nombre que el del arma más poderosa de los dioses Aztecas, la serpiente de fuego. La puerta ahí estaba, de madera vieja, son para engañarnos, una cubierta de madera delgada y podrida que esconde una puerta metálica en ocasiones de acero, cualquier novato la patearía sin algún esfuerzo para solo caer por patear un pedazo de metal con seguro puesto.

Nos colocamos en posición, tome el frente a la derecha, apunte mi carabina al frente junto con mi compañero, atentos mantuve la mira puesta en la puerta esperando por que alguien saliera de ella:

-Estamos en la entrada del noroeste –tome el pomo de la puerta, tiene seguro- tiene el seguro puesto

-Entendido Roberto, no entren, esperen a que los demás se posicionen

Con esto mantuve la mira en la puerta, dos de mis muchachos esperaban detrás, confió en ellos, de reojo puedo ver como se mantienen atentos apuntando a cada flanco y sobre nosotros, estamos vulnerables:

-De acuerdo, todos ya posicionados, recuerden revisar primero las esquinas y detrás de las puertas, confirmen objetivos, puede que haya inocentes ¡A chingarle! –típico del comandante

Con esta orden me despegue de la pared y le di una fuerte patada a la puerta, como dije antes estas puertas cubiertas de madera son para engañarnos, pero no están del todo firmes aun con seguro, esta construcción es rápida y llena de fallos, la puerta con mi fuerte patada se abrió, esto también se atribuye a mi apodo de ´´El ariete´´, solo porque mi estatura es de 1.93 y hago aún más ejercicio que mis compañeros.

Entrando primero revise la equina a mi derecha alumbrando la habitación, detrás de mí los demás entraban iluminando casi por completo la habitación:

-¡Despejado! –gritamos unos por uno confirmando que no hay amenazas en la habitación, esto parece ser el cuarto de los albañiles, está lleno de material y herramientas, todo desordenado tirado en el suelo o recargado en las paredes, no terminaron aun la ampliación

-Habitación despejada, seguiremos avanzando –reporte por la radio

Repitiendo la operación seguimos avanzando, la siguiente puerta no tenía seguro, empujándola entramos y como es debido revisamos las esquinas, descartando posibles amenazas. Esta habitación es diferente, hay un par de escritorios a un lado de una puerta de acero bien reforzada, un sillón en una pared y lo mejor de todo, una mesa de metal con armas, cargadores y balas encima, parece que aún hay alguien aquí:

-Revise la mesa cabo Jiménez –dije manteniendo la mira a la puerta de acero

-Si señor –el cabo camino hasta la mesa y con la lámpara de su carabina examino el armamento y aditamentos en la mesa- un cuerno de chivo, dos cartuchos, tres pistolas, tres granadas, una de humo, gas lacrimógeno, el cuerno de chivo está cargado y lleva una correa

-Alguien sigue aquí, debe de estar después de esa puerta, atentos y—

Un fuerte grito nos interrumpió, proveniente de esa puerta el grito de lo que parece una mujer llamó mi atención, mire a mis muchachos los cuales me miraron esperando órdenes:

-Comandante escuchamos una mujer en el edificio

-Entren y sáquenla de aquí, acabamos de pescar a dos por acá

-Si señor

Caminamos hasta la puerta sin dejar de apuntar en ella, para esto escuche pasos y la voz de dos hombres:

-Apaguen lámparas rápido

Con esto las penumbras volvieron a la habitación pobremente iluminada por la luz de la luna filtrándose por las aberturas de las paredes, apenas puedo ver lo que está frente a mi:

-Esas mujeres están muy buenas, es una lástima que tengamos que vender sus partes

-Pagan más por esas piezas que los cuerpos pendejo, el doble o casi el triple, además te tiraste a la rubia, ya deberías estar satisfecho

-Pero esa perra no dejaba de gritar y moverse, es más grande que yo

-Puto enano

Me enferman, lo que sea que hagan hecho a esas mujeres la pagaran con el susto de sus vidas, ya los teníamos a un lado, deje que abrieran la puerta y con rapidez les saltamos encima, sus gritos de sorpresa y terror hicieron que se me dibujara una sonrisa debajo de mi paliacate de calavera:

-¡Órale cabrones esa no se la esperaban! –grito uno de los muchachos, el agradable Pérez

-Tranquilo Pérez, amarren sus manos y manténgalos en el suelo ¿A dónde lleva la puerta?

-¡No tengo nada que decirte pinche cerdo!

-Siempre amables, dales con la culata

Con esto Pérez golpeo la nuca de cada uno de ellos con la culata de su carabina, sin la fuerza para fracturar el cráneo pero si para noquearlos.

Pérez junto con Gustavo se quedaron a cuidar de esos dos, mientras mis otros tres compañeros me siguieron, la puerta llevaba a un pasillo medianamente largo, al fondo puedo ver una cortina azul agujerada, puedo ver como la luz artificial se filtra entre los agujeros de la cortina, el suelo comienza a sentirse húmedo ¿Agua? Quiero pensar que es agua, es resbaloso pero nuestras botas militares nos evitan caer.

Con mi mano derecha empuje la cortina y lo que presencie es… una barbarie.

Una habitación grande de paredes grises y azules alumbradas con un par de focos, las paredes están cubiertas de manchas de sangre y marcas de arañazos ¿Qué chingados hizo esas marcas tan grandes? dos mesas metálicas pegadas a la pared izquierda sobre esta hay un hombre y una mujer… Creo que son eso, la mujer por algún motivo tiene alas de pájaro y el hombre escamas y cola… no las tienen, están separadas, se las cortaron, en el suelo pude ver cuchillos de carnicero y sierras además de demasiada sangre fresca y manchas secas… retrocedí un par de pasos ante el olor a podrido, llevan demasiado tiempo aquí… esa mujer con alas parece… parece una niña.

Mire a la derecha y ahí pude ver a otra mujer, su cabeza estaba agachada mirando al suelo, la cubría su pelo rubio maltratado, estaba en una posición penosa sus brazos pasaban por unos barrotes que la mantenían agachada y sus senos… dios, están conectados a un ¿Extractor? Ella esta desnuda:

-¡Dejen de mirarla y revisen la habitación! –ordene a mis hombres, sé que no la miran porque esta desnuda… es inevitable mirar esta escena tan horrida

Pero uno se acostumbra, los carteles son solo grupos de barbaros y desquiciados que no dudan en despedazar a una persona para enviar un mensaje.

Camine hacia esa mujer… pero, tiene cola y cuernos de vaca ¿Qué demonios son?, la escuche sollozar, agito ligeramente su cabeza en su suave llanto… pobre:

-Tranquila, ya estas a salvo –dije acercándome

Lentamente levanto su rostro, su cara varias marcas de maltrato, expresaba terror y desconfianza, trato de retroceder pero los barrotes se lo impedían y sus senos se mantenían pegados a esa maquina… bastardos sin corazón:

-¡Subteniente venga a ver esto! –escuche a Ramos gritar al otro lado de la habitación

-¡Voy! Libérenla, tengan cuidado con su brazos y senos –ordene a mis hombres que asintieron

Camine hacia dónde provino el grito de Ramos, pase por una pared de tabla roca que dividía la habitación… por los dioses.

Un hombre y una mujer estaban colgando del techo, sus brazos estaban sostenidos por cadenas, sus cuerpos, dios, los estaban despellejando, en el suelo pude ver pedazos de carne con escamas… son de esas dos personas, además pude ver… ¿Colas de reptil? ¿Qué carajos paso aquí?

Ramos retrocedió y regreso a la otra habitación mientras yo permanecía inmóvil… he visto de todo, mis hombres no, apenas son novatos exceptuando a Pérez.

Camine hacia esas dos personas colgando ¿Por qué les hicieron esto? Las despellejaron como si fuesen animales, mi radio comenzó a emitir el sonido de una comunicación entrante:

-Atentos, los vigías en las Humvees detectaron dos vehículos aproximándose, una camioneta y un camión, prepárense para un enfrentamiento

-Señor… encontramos una carnicería

Hubo silencio en la radio, el comandante sabe que significa cuando digo esto, le di un vistazo mas a esas dos pobres personas y regrese:

-¡Prepárense, se acercan dos vehículos sin identificar, Ramos, quédate con la mujer, cuídala! –le dije, la mujer rubia ya estaba liberada, estaba tratando de tapar su maltratado y desnutrido cuerpo con un par de toallas que mis hombres le dieron- ¡Los demás afuera, aprovecharemos nuestra cobertura, no los dejen entrar!

Con esto mis los demás me siguieron, el Cabo Pérez y Gorge ya habían tomado posición, sus carabinas apuntaban a través de agujeros de las mismas paredes, guie a mis hombres a fuera del edificio y tomamos cobertura con unos contenedores y varios Blocks de concreto apilados:

-Estamos afuera, esperen a confirmar blancos –ordeno el comandante por la radio

Las luces de los vehículos se hicieron presentes y el sonido de los motores cesó, dejaron las luces encendidas, grave error.

Pude escuchar las voces y sus pisadas, mantuvimos la posición, las luces de sus vehículos no alcanzaban a iluminarnos, tenemos el factor sorpresa:

-Ya llegamos con otro par de esas lagartijas, a este paso conseguiremos más dinero que con la droga

-Pero esto es más peligroso, mataron a Juan de un solo golpe en la cara

-Juan era un pendejo, le dije que disparara y luego preguntara, ahora déjate de mamadas y baja a nuestras bolsas de dinero

Está más que confirmado quienes son:

-Permiso para abrir fuego comandante

-Negativo, puede que el camión tenga gente secuestrada, esperen a distinguir

Pude escuchar como abrían el portón de la zona de carga del camión, y más pasos, los puedo ver, dos hombres tienen amarradas a otras dos personas, llevan bolsas en la cabeza y sus ropas están maltratadas, están forcejeando:

-¡Ya deja de moverte perra! ¡Si no te detienes te despellejare viva!

-Disparen

Con esto guie la mira al blanco más cercano y jale el gatillo, impacto directo al pecho, una ráfaga de tres balas le impacto en el pecho haciendo que cayese sin vida al suelo cubierto de arena, esas mujeres que llevaban en el camión se echaron al suelo gritando, ahora ellos devolvieron los disparos.

Tome cobertura en los blocks de concreto mientras ellos descargaban sus AK-47 o mejor conocido como cuerno de chivo.

Siempre disparan descontroladamente, me asome ligeramente y dispare contra la puerta de la camioneta y camion, debieron de cubrirse ahí.

Otra ronda de tiros por parte de ellos de nuevo, esta vez gritaron maldiciones y demás, los ignore, sus balas me ensordecen.

Desearía usar mi granada pero aun no sé si habrá algún otro inocente en ese camión:

-¡Fuego de contención! –grite a mis compañeros

Estos dispararon mas de una ráfaga, comenzando a vaciar los cargadores de su carabinas me dieron la cobertura para levantarme por completo y gracias a mi altura logre visualizar a otro objetivo tomando cobertura en la camioneta, con mi puntería y un tiro certero le di en la pierna, ahora esta en el suelo gritando y disparando al cielo.

-¡Recargando! –dijeron mis compañeros

Mientras me preparaba para otra salida escuche un grito del enemigo, no pude distinguir que fue… entonces ahí lo vi, una granada de fragmentación que cayo a unos centímetros frente a mi:

-¡Granada, a cubierto! –grite levantándome lo mas rápido que podía, mis hombres tuvieron el tiempo de entrar a la construcción, yo solo pude correr hacia la otra dirección por el terror

Entonces mis oídos se ensordecieron y la onda de choque me derribo… mi pierna, grite de dolor, mi pierna izquierda duele demasiado, mire a la izquierda y pude ver cómo me apuntaba uno de esos bastardos desde la camioneta, ahí solo pude ver el fogonazo del cañón de un cuerno de chivo disparando…

Aun puedo recordar cuando juagaba de pequeño a que era un policía a arrestaba a un famoso capo del cartel, buenos tiempos, cuando no sabía el verdadero infierno… me siento extraño, ligero y sobre algo suave, mis piernas duelen y mi pecho también, puedo escuchar voces pero no distingo que dicen, mis ojos pesan.

Logre después de mucho esfuerzo abrir mis ojos y verme casi cegado por la luz del techo, paredes blancas, techo color crema… estoy en el hospital militar, carajo.

Trate de levantarme pero un intenso dolor me detuvo, me hizo caer en la cama, ahí pude escuchar a una mujer gritar y caminar hacia mí:

-Tranquilo por favor, aún sigue grave

-¿Qué paso? –pregunte, recuerdo el operativo y la granada, pero es todo

-Usted estaba en una misión en el desierto de Sonora, una granada lo hirió y recibió dos disparos en el pecho, su chaleco lo salvo pero…

-¿Ya despertó el subteniente Roberto?

-Si doctor –dijo la enfermera alejándose, pude ver a ese doctor, un hombre ya mayor, lleva puesta su tradicional bata blanca y lleva con él una tabla con apuntes

-Buenos días Subteniente ¿Cómo se siente?

-Me duele el pecho y piernas

-Bien, tengo que darle una noticia Subteniente –dijo dejando la tabla en una mesa a mi lado izquierdo- la granada exploto a un par de metros de usted, lamentablemente la metralla lo alcanzo y ademas recibió otros tres tiros en su pierna derecha

-¿Qué quiere decir doctor?

-Señor, lamento decirle que usted perdió su pierna izquierda

Estas palabras helaron mi sangre… pero… pero aun la siento:

-¡Imposible! Aun siento mi pierna

-Levante su pierna izquierda –dijo el doctor levantando un poco mi cama permitiéndome ver mis piernas debajo de una sabana blanca

Levante mi pierna sin problemas, algunas punzadas y dolor pero no demasiado:

-Ahora su pierna derecha

Obedecí… no pude ver mi pierna levantarse junto a la sabana, solo una pequeña parte… imposible… no, no, no, algo me impulsaba a retroceder, levante la sabana y no pude ver mi pierna derecha, la cama que me sostenía comenzó a crujir y el doctor me sujeto de mi brazo izquierdo, lo mire directo a sus ojos mientras con respiración agitada:

-Subteniente entre en razón, hicimos todo lo que pudimos pero su pierna quedo destrozada, no podíamos repararla, el hueso y venas quedaron fracturados por completo… tiene suerte de seguir con vida, sus hombres los mantuvieron vivo

-¿Ellos lograron salir con vida?

-Sí, dos recibieron impactos de bala que fueron frenados por sus chalecos anti balas… usted rescato a tres mujeres, su comandante le explicara que sucedió, usted descanse

Con esto pude escuchar otros pasos y pude ver al comandante entrar en su uniforme, doctor y enfermera se retiraron dejándonos a solas:

-Subteniente Roberto, buenos días

-Comandante Gilberto –espero que no haya dicho eso de manera sínica

-Subteniente, entiendo por lo que esta pasando ahora mismo, se que su aspiración era algun dia ingresar a los GAFES

-Eso ya no importa comandante –corte su discurso- ahora no soy mas que un inútil sin una pierna, ¡¿Cómo chingados guiare a mis hombres ahora sin una pierna?! Esas piernas ortopédicas no sirven para los montes, lagos y selvas

-Aun puede cumplir otras funciones como instructor Subteniente, usted fue un hombre y soldado ejemplar… es triste que usted tan joven que demostraba tener todo para ser un GAFE ejemplar termino asi

-Gracias por las buenas palabras –dije recostándome y tapándome de nuevo con la saba

-Roberto… soy pésimo en esto y lo sabes… me es fácil dar ordenar y guiarlos a una muerte pero es imposible para mi enviar condolencias o alentar a hombres en tu situación… lo único que puedo decir es que la misión fue un éxito

Con esto lo mire:

-Ustedes encontraron con vida a una mujer que fue abusada, ahora ya introducida en un hospital, rescatamos a cinco niños de diferentes edades, y a otras dos mujeres que habían sido secuestradas recientemente, esas mujeres como se dio cuenta usted tienen atributos especiales, no me permiten revelar más información, solo que todas ellas están muy agradecidas con todos nosotros, con usted… todo por su sacrificio y labor, se le será recompensado subteniente, se le otorgaron vacaciones para que se recupere

-Bien, gracias

El comandante suspiro y se retiró, esas ´´vacaciones´´ solo significan que esperaran a que me recupere para enviarme a alguna escuela militar o el Heroico colegio Militar a entrenar a los novatos… no es que no desee hacerlo, quiero aun demostrar mi valor y que México sea seguro, que la gente ya no sufra por inseguridad, pero en esta condición no puedo hacer nada mas… me siento inútil, el coraje me hace apretar los dientes… yo pude ser un GAFE, pude haber participado en los operativos especiales, solo faltaban dos días más y me ascendían a sargento, me lleva la chingada… mejor duermo, quizás si despierto algún milagro ocurra…

POV Narrador

El tiempo paso y el milagro que Roberto esperaba nunca llego, se recuperó en poco tiempo, recobro fuerzas y logro ponerse de pie, usando muletas logro salir del hospital donde lo esperaban sus compañeros, la hermana de Roberto junto a uno de sus primos lo esperaban afuera del hospital, mientras, los compañeros de ese gran Subteniente lo saludaron en honor a su labor, una ligera sonrisa se dibujó en su rostro y camino cargando su mochila junto a algunas pertenencias que le devolvieron del cuartel donde pasaba las noches.

Camino hasta la camioneta de su hermana y tomo asiento en la parte de atrás, su hermana le ayudo sosteniendo la muleta y subiendo, mientras su primo encendía la camioneta, ya con todos dentro de la camioneta comenzaron con su paseo por la ciudad:

-¿Cómo te sientes hermano? ¿Te duele algo, necesitas comprar algún medicamento? Hay algunas farmacias del ahorro por aquí

-No me falta nada hermana, todo me lo entregaron en el hospital, no te preocupes

-Primo, es un gusto verte de nuevo… lamentablemente es en esta situación

-También es un gusto primo Chuy, ¿Cómo está tu familia?

-Están bien, la pequeña María ya dio sus primeros pasos, mi esposa aun no puede creer que nuestra pequeña ya camine

-Como siempre tan dramática, ¿Qué tal tu hermana? ¿Ya te dejaron libre de trabajo?

-Un poco, la obra sigue sin frenar, a este ritmo el edificio estará terminado para antes del dia de entrega y para eso un jugoso bono –dijo frotando sus manos- lo mejor de todo es que me llego otra petición, el despacho tiene influencias en países de fuera, adivina ahora a donde voy a viajar

-¿Es Europa? –pregunto Roberto

-No

-¿Gringolandia? –pregunto el primo Chuy

-No de nuevo, será en Japón, podremos volver a donde nuestro padre conoció a nuestra madre –dijo la hermana de Roberto, Valeria

Roberto y Valeria tienen ascendencia Asiática, su padre era un hombre de negocios muy habilidoso, lograba negociar en todo lugar sacando provecho, el se atribuye su triunfo a su experiencia en las calles de México y la educación que el mismo se pagó en la UNAM y doctorado en Harvard, ambos hermanos nacieron en México y en vacaciones visitaban Japón, los hermanos tienen el japonés bien aprendido e incluso nacionalidad japonesa, ¿Por qué Roberto es militar entonces? Uno de sus tíos es un General importante del ejército, moviendo pequeños hilos su sobrino ingreso sin problemas pues uno de los requisitos para ser militar es ser mexicano de nacionalidad y no adquirir otra nacionalidad, todo esto gracias a las ´´palancas´´ solo así se triunfa en México.

Valeria le comento a su hermano que ella viajaría a Japón, el despacho le pagaría el viaje a ella y otro invitado pues cuentan con una residencia de sus padres ahí en Japón que por asares del destino queda cerca de la futura obra. Roberto en ese momento pensó en quizás rentar algún cuarto de algún departamento, no es que desprecie a su familia, pero en ese momento se sentía realmente bajo de emoción, una ligera depresión.

Pasaron dos semanas y se arregló todo, sus padres los esperarían en Japón, y el padre de los hermanos, Roberto Casares, hizo lo necesario para acomodar a su hijo en un departamento de Tokio, para ese momento la verdad se supo, los monstruos que existían junto a los humanos desde hace mucho tiempo.

El gran soldado mexicano de inmediato se dio cuenta a quienes salvo, una mujer minotauro, y dos mujeres lagartija, su comandante después le envió un mensaje con que las niñas eran crías de harpías y mujeres gato que en Japón denominan nekomata. Él se sintió como algunos sorprendido por tal información, Roberto al ser fanático de la mitología de su país, y después, de la de varias culturas en el mundo siempre creyó que las criaturas en las varias leyendas debían tener alguna relación con lo real, ahora ve que el tenia razón.

Por ahora el joven soldado y su hermana se dirigen a la ciudad Okayado donde su madre los espera en la residencia familiar y donde Valeria pasara los días y noches mientras la obra inicia y termina, Roberto pasara a saludar a su madre y de ahí partirá a Tokio donde está su apartamento.

POV Roberto

Bajamos del avión y un taxi nos dejó en un barrio próximo a la casa de nuestros padres, quería estirar mi pierna y le solicite al conductor que nos dejara, pasaremos primero por unas cuantas manzanas y llegaríamos hasta la casa, mientras caminaba con mi hermana me gane algunas miradas, no los culpo.

Supongo que no es normal ver a alguien tan alto y más aun con mis facciones Mexicanas tan marcadas, ya saben, pelo negro, ojos oscuros, piel bronceada, un bigote y una barba que me crecieron rápidamente y siempre fueron mi pesadilla pues en el ejército no nos permiten dejarnos la barba, jeje, quizás si me rasuro la barba y me arreglo el bigote pueda hacer como si fuese el General Zapata, el si tenía un buen mostacho. A parte de eso que mi musculatura me hace ver aún más grande y que voy en muletas, no conseguiré una pierna ortopédica por el viaje, después comprare alguna.

Mientras caminábamos pude ver uno de esos monstruos, bueno, extra especies, si no mal recuerdo de aquella enciclopedia que acaba de salir para todo el mundo de parte de la ONU es una arachne de piernas largas, parece linda, alta, su cuerpo humano tiene una tez blanca, es esbelto y pelo rubio… si, esas mujeres son atractivas, aunque sigue siendo extraño pensar asi cuando vez el cuerpo arácnido, cola, alas, etc. lleva una especie de gorra con un símbolo dorado. Esa misma mujer se giró y comenzó a caminar hacia nosotros:

-Buenos días –salude cordialmente en el idioma japonés, no estoy tan oxidado, pero aun así se notó mi acento extranjero

-Bueno días –respondió la arachne, tiene una voz bonita

Después de ese pequeño saludo seguimos caminando, pude verla de reojo, me siguió con la mirada y después continuo con su caminata, si que llamo la atención.

Seguimos caminando hasta llegar a la casa de nuestros padres, no se diferencia de ninguna otra casa moderna japonesa, mas que algunas decoraciones y en especial la bandera mexicana a un lado de la puerta, tocamos el timbre y pude escuchar a nuestra madre gritar como ya venia, ella abrio la puerta y ahí la saludamos con una gran sonrisa:

-Hola mama –dijo Valeria abrazándola

-Hijos, me alegra ver que llegaron con bien

Ahora me tocaba abrazarla, tuve que agacharme para lograr que mi brazo izquierdo la rodease, mi brazo derecho sostenía la muleta:

-¿Te sientes bien hijo? ¿No te mareaste en el vuelo? Que cosas digo, eres un soldado, no te marearías con esas cosas, pasen

Una sonrisa se me dibujo, siempre mi mama hace esas preguntas que responde ella misma, es gracioso:

-¿Dónde esta papa?

-Me llamo hace poco, el departamento está listo, con muebles y surtió la despensa para ti hijo, ya viene para acá, él te llevara, pero antes coman algo

Caminamos hasta la sala donde el comedor y cocina están incluidos, según mi hermana que es arquitecta hacen esto para ahorrar todo el espacio posible, esto me parece algo muy práctico y cómodo.

En la mesa estaban tres platos servidos y listos, arroz, típico, pescado frito, algunas verduras para acompañar y un vaso con agua, mi hermana me ayudo a sentarme y dejo la muleta cerca de mi:

-¿Qué tal el vuelo? ¿No tuvieron problemas?

-No mama, llegamos temprano a la estación y entramos sin problemas, incluso cuando salimos del aeropuerto un taxi estaba disponible

-Valla suerte ¿Supieron sobre lo de las extra especies?

-Por supuesto, está en todas las noticias –conteste separando los palitos de madera- nunca me espere esa noticia y mucho menos que tantas especies salieran tan rápido a la luz, veo que en Japón todo está muy normalizado

-El gobierno japonés se tomó muy enserio el trato a las extra especies, hay un acta especial que deriva del acta que impuso la ONU, hicieron algunas modificaciones que beneficia aún más a las extra especies aquí en Japón que en los demás países del mundo, incluso hay una institución de defensa, creo que se llama MON

-Me alegra que todas esas especies puedan vivir junto a nosotros –dijo Valeria- hay algunas muy agradables y amables

-Lo dices porque justo cuando llegamos te le quedaste viendo a un nekomata alto, musculoso y rubio, no está a tu alcance pequeñita –dije mientras tomaba algo de arroz con los palillos

Valeria me lanzo una mirada enojada y frunció el señor:

-Olvidando el comentario del señor ´´Me golpee en la frente con el marco de la puerta´´ me parece que este es un momento especial

Ignore ese comentario tan directo que hizo hacia mí, aun no puede dejar atrás esa vez del putazo más fuerte de mi vida, todo por su culpa, le especifique y se lo repetí varias veces que el marco de mi habitación debía ser de dos metros, pero no, hace lo que quiere porque es arquitecta, después me las pagara esa enana:

-Hijo –la voz de mi madre sonaba algo más apagada, su mirada solo mostraba tristeza- ¿Cómo vas con lo de tu pierna? ¿Te sientes mejor?

-He estado tomando los medicamentos, por ahora no duele, solo un picor y ardor de repente… no me gustaría hablar de eso

-Está bien, pero ya lo sabes hijo, lo que necesites solo pídelo, somos tu familia, puedes confiar en nosotros

-Lo se mama, y se los agradezco es solo… que no quiero pensar en esto por ahora –dije terminando con el arroz y comenzando con el pescado que huele y luce delicioso

-Bien, hija, ¿Dónde será la obra?

Y así pasaron un par de horas, mi madre y hermana hablaron del trabajo y los días que vendrían, mientras, yo termine con mi comida e inclusive comí doble ración, este gran cuerpo no se sacia con cualquier merienda.

Pasadas las hora llego mi padre, entro a la casa y abrazo a mi hermana, solamente le di un apretón de manos y golpeamos nuestras espaldas como los hombres:

-Bien Roberto, supongo que estas listo

-Por supuesto capitan, -dije levantándome tomando mi muleta y mochila- listo para subir esa nube negra

-Esa es la actitud hijo, bien querida, me iré a dejar a Roberto en el departamento, volveré más tarde

-Antes de que te vallas hijo –dijo mi madre, entro a la cocina y abrio una alacen adherida a la pared, de ahí saco un paquete de tortillas de maíz- no pierdas la tradición de tu país, aquí en Japón es difícil conseguir buenas tortillas de maíz, por eso compro los ingredientes y las preparo, toma hijo

-Gracias mama, cuando llegue y me acomode preparare un par de quesadillas

-No hay de que

Siguiendo a mi papa salimos de la casa, mi hermana y madre solo me acompañaron y despidieron, esto me trae recuerdos de cuando sali de nuestro hogar en México, cuando me aceptaron en el Heroico Colegio Militar y forme parte de la milicia de mi tierra… recuerdo cuando derramaron lágrimas de orgullo y felicidad, asi como tristeza y preocupación, si bien los carteles parecerían, para cualquier otro país, solo un grupo de guerrilleros desorganizados y salvajes son todo lo contrario, con contactos en el gobierno, policía y vigías vestidos de civiles se cobran la vida de militares, marinos y policías, a base de emboscadas cobardes y traiciones pues no nos pueden hacer frente, mi familia sabe que corría de un inmenso riesgo al unirme a las tropas, siempre fui recibido con un abrazo cuando me dejaban salir de las barracas y volver con mi familia:

-Nos veremos luego, solo necesito un tiempo a solas –dije abrazando a mi madre y hermana

Después de esa despedida subí al auto de mi padre, un vehiculo de marca japonesa, pequeño e incómodo para un hombre de mis proporciones, demonios, la manivela para el vidrio me esta picando a mi costado y este cinturón aprieta mi cuerpo:

-Pareces un poco incómodo hijo

-Este vehículo es un poco pequeño

-Ya deberías saberlo hijo, aquí en Japón ahorran todo el espacio posible, no es como en México que gozamos de mucho espacio

-Entiendo, es solo una isla

-Pero una isla muy importante, con tecnología y buena gente

-Lo se papa

Lo siguiente del viaje fue silencioso, nos ahorramos comentarios y demas, asi que solo pude mirar a través de la ventana, pude ver a la gente de Japón tan tranquila caminando por las calles de manera ordenada y sin preocupaciones, ojala así fuese en México, que no sea necesario ver a los policías y militares movilizarse por las calles en granaderas con todo el equipamiento, lamentablemente no es así.

Mientras miraba por la ventana y dejaba de lado mis divagaciones pude ver a esas extra especies, mujeres y hombres diferentes a nosotros caminando tranquilamente entre nosotros, pude ver a un hombre minotauro ayudando a descargar cajas de gran tamaño de un camión frente a una tienda, una mujer nekomata ofreciendo volantes e inclusive una Lamia arrastrando a un joven enroscado en su cola… ¿Eso es legal? Es decir, el pobre parecía un muñeco de trapo cuando la mujer acelero de la nada.

Olvidando eso el tiempo transcurrió y al fin llegamos a Tokio donde se encuentra mi departamento, al llegar baje del vehículo donde ya mi pierna y brazos se habían casi dormido, tome mi muleta y camine hasta la acera transitada por mucha más gente que en la ciudad donde viven mis padres.

Bajando mi padre me ayudo cargando mi gran mochila militar y otra más pequeña donde llevo algunas cosas:

-Es un buen departamento, barato, cómodo y con buena vista de la ciudad, además tienes cerca locales de todo, tu cuarto está en el tercer piso, ya arregle todo con la recepcionista, una mujer amable

Entramos y recibimos el saludo de la recepcionista, con su uniforme impecable y una sonrisa se inclinó dando ese saludo tradicional, me incline al igual que ella saludando junto a mi padre:

-Buenas tardes Aiko-san, él es Roberto-kun el es el nuevo residente

-Buenas tardes Roberto-kun, Roberto-san –ese es el problema de tener el mismo nombre que mi padre, de no ser porque en Japón se usan estos honoríficos nos confundirían, eso y que la r no existe lo que nuestro nombre es difícil de pronunciar para ellos, es gracioso- Roberto-kun nescesito su firma para completar el procedimiento

-Por supuesto –dije firmando con una pluma negra en el papel que me entrego

Ya después de esto subí junto a mi padre al tercer piso, al subir pude ver como alguien salía de uno de los cuartos, un hombre acompañado de una harpía, debo de decirlo, la harpía es linda, cabellera roja, plumas rojas carmesí brillante, preferí no seguir viendo su cuerpo pues parece que le hombre es su pareja y no quiero que mis futuros vecinos piensen mal de mi, al verme ambos se sorprendieron un pcoc en un principio pero siguieron con su camino hacia nosotros dirigiéndose a las escaleras:

-Buenas tardes –salude esta vez sin denotar mi acento extranjero

-Buenas tardes –dijeron ambos casi al unísono, ese hombre es más alto que los demás hombres japoneses pero apenas me llega al hombro, debe ser americano, eso y sus facciones que lo delatan

Mi padre me llevo hasta la puerta de mi cuarto, justo a un lado de donde esa pareja salió, espero que sean buenos vecinos, parecen agradables, incluso podrían ser buenos amigos:

-Aquí es hijo, entra primero yo dejare tus cosas en tu cuarto

Mi padre abrió la puerta y entre, llegue hasta la sala, un cuarto simple, suelo de madera, paredes blancas, otras puertas que comunican a diferentes habitaciones, es pequeño pero no demasiado, suficiente para estirarme:

-Me tengo que ir hijo, descansa y cualquier cosa que necesites solo házmelo saber

-Por supuesto papa, hasta luego

Con esto el solo se despidió y salió de la habitación, me deje caer en el sillón y encendí el televisor en el cual apareció el noticiero, bueno, informarme del mundo está bien, aquí veré cuanta importancia le dan a mi nación y quizás una pequeña siesta…

POV Narrador

Mientras Roberto descansaba y su padre se retiraba fuera Smith estaba en un embrollo, una joven minotauro causo algunos problemas con su familia anfitriona y debía buscar a alguien rápido, en la camioneta la joven minotauro tarareaba una canción mientras leía un libro:

-Demonios, de donde sacare a alguien en este momento, tengo varias juntas y otra inspección de familias anfitrionas, quizás toque suerte en este departamento, es decir, aquí vive Edward y por lo que se estos pocos días con Pachylene los pasa muy… ¡AHÍ ESTAS! –grito Smith cuando vio al canadiense salir del departamento

La agente corrió deteniéndose a pocos centímetros de la pareja que sorprendida retrocedió:

-¡Edward necesito tu ayuda! ¿De casualidad no conoces a alguien que este interesado en el programa de intercambio?

-Esto… no ¿Por qué la pregunta?

-Asuntos de gobierno –dijo tajantemente Smith evitando decir el embrollo en el que estaba- ¿Seguro que nadie? –dijo encorvándose un poco y juntando sus dedos penosamente

-Bueno –ahora contesto la joven harpía- un hombre acaba de llegar al departamento de a lado, es muy alto y venia vestido de camuflaje, además de que llevaba una muleta y…

-¡EXCELENTE! ¡Te lo agradezco Pachy, como siempre eres una útil aliada de MON y del gobierno Japonés! Ahora sigan con sus asuntos yo tengo que revisar a ese buen hombre

Y con esto la mujer del gobierno entro disparada a interrogar a la joven recepcionista dejando a la pareja confundidos.

Notas del autor: Hola, jeje, lo se, debería estar de seguir con la marabitupenda aventura de nuestro pequeño Bullock y Erika, pero esta idea ya la tenia en mente, solo quiero ver si les agrada que un gran soldado mexicano se reponga con una gran mujer de Japón.

Otra cosa, espero que a mis compañeros Tarmo, Endelstadt y Paradoja Inquisidor no se molesten por estas y futuras referencias a sus Fics y personajes de los mismo, es solo que en el otro fic no los puedo hacer tan directamente, solo espero que el joven Roberto se lleve bien con sus personajes.

Bueno, espero les haya gustado este largo prologo, es muy largo lo se, pero no puedo dividirlo a la mitad ya que no quedaría como algo referente a Monster Musume, espero sus reviews para saber si continuar esta historia junto a la de Bullock o dejarla en pausa.

¡Hasta luego!

P.D. no tengo ningun fetiche ni gusto personal por hacer que mis personajes pierdan extremidades, es solo que no pude encontrar la excusa para que un soldado en servicio pueda tomarse unas vacaciones con mayor libertad, espero no les moleste.